Matthew Arnold
El punto de vista distinto que el paso del tiempo inevitablemente trae consigo.
Reserva de nociones y hábitos.
El deseo de ver las cosas como son implica un equilibrio y regulación mentales, que no suele lograrse sin un esfuerzo fructífero y es lo opuesto del impulso ciego y morboso.
La experiencia humana reputada comoun fruto de la pasión científica.
Algo impracticable o como algunos críticos dicen familiarmente un claro de luna.
Zephamah Diggs, un personaje creado por Arnold de "A Friendship´s Garland".
La energía es nuestro punto fuerte y característica favorable antes que la inteligencia. Podemos valorar esta energía que conduce a la práctica, este sentido de la obligación del deber, el autocontrol y la actividad profesional, una fuerza. Podemos apreciar la inteligencia, que conduce a esas ideas, que son el fondo de la práctica recta, el sentido ardiente para las nuevas y transformadoras combinaciones, que el desarrollo del ser humano conlleva, el indomable impulso a experimentarlas y ajustarlas, otra fuerza. Podemos estudiar estas fuerzas rivales, como se muestran en el ser humano y su historia por dividir el mundo.
Nos preocupa la cosa, no el nombre, y la cosa consiste en hacernos aptos por la lectura, la experiencia o la reflexión, de aproximarnos cuanto podamos a la firme ley inteligible de las cosas y conseguir un cimiento, para una acción menos confusa y una perfección más completa, que la que tenemos.
Decisión y celo.
EÇA DE QUEIROZ
La novela demasiado extensa no está en la índole de la revista comprometida.
Víscera esencial atacada.
Intimidad peculiar, que a las capas superiores conviene.
Pasar del camino de la Invención al más respetable de la Erudición.
Libros de Caballerías. "Leandro el Bello", "Tristán y Blancaflor", "Crónicas de Clarimond".
Autoridad donjuanesca, que oprime y destierra a un admirable empleado publico.
Sueltos de fluida prosa, que brotan en la pasión.
Novela de desolación y sangre.
Horizonte fértil.
Gesto decidido, terminante y barredor.
Invadir fértiles ideas.
Agitado por ideas vastas y confusas.
Delicioso mensaje.
Realidad épica.
Siempre mensajero con ramo ha de escucharse.
Carnet-mondain y high life de los periódicos.
La novela demasiado extensa no está en la índole de la revista comprometida.
Víscera esencial atacada.
Intimidad peculiar, que a las capas superiores conviene.
Pasar del camino de la Invención al más respetable de la Erudición.
Libros de Caballerías. "Leandro el Bello", "Tristán y Blancaflor", "Crónicas de Clarimond".
Autoridad donjuanesca, que oprime y destierra a un admirable empleado publico.
Sueltos de fluida prosa, que brotan en la pasión.
Novela de desolación y sangre.
Horizonte fértil.
Gesto decidido, terminante y barredor.
Invadir fértiles ideas.
Agitado por ideas vastas y confusas.
Delicioso mensaje.
Realidad épica.
Siempre mensajero con ramo ha de escucharse.
Carnet-mondain y high life de los periódicos.
EUGÈNE LE ROY
El Aversier, ese ser misterioso más poderoso y más terrible que el diablo.
La nieve, que caía como flotando, hacía que las viejas dijeran, "Ya está papá Noel desplumando sus ocas".
Zuecos amarillos de madera de aliso.
Una gran hogaza lisa de pan de camuña, de centeno y cebada.
Dicho. Trigo de un año, harina de un mes, pan de un día.
La costumbre quiere que el que pide prestado el pan no lo devuelva por su propia iniciativa; es el que presta quien debe ir a buscarlo simulando precisarlo.
Un perro de caza desjarretado.
Croquant, término despectivo equivalente a destripaterrones o paleto, para nombrar un campesino; la denominación hace referencia también a los grandes levantamientos que, de 1590 a 1650, protagonizaron periódicamente los campesinos franceses del centro y sudoeste, tomando las armas ante el poder central, exasperados por los abusos de que eran víctimas, levantamientos llamados de los croquants.
Acta de expulsión de la aparcería.
Proverbio. El bosque Barade no se libró nunca de haber lobos ni ladrones.
Fino como una comadreja, astuto como un zorro y malicioso como un mono.
Buscar mangos de látigo en los acebales.
Cerillas químicas.
Las posaderas de las aldeas negaban dar una brasa los días de fiesta o durante las ferias, porque traía mala suerte.
Cerrar la puerta por dentro a la vieja usanza, con una barra que al penetrar en los agujeros a cada lado de la pared aguantaba el batiente.
Imágenes. El famoso Crédito muerto, tumbado en el suelo, muerto por morosos que huyen; a su lado una oca aguanta con su pico una bolsa con la inscripción, "Mi oca lo hace todo"; triste y desoladora sentencia para la gente pobre.
Gorra de piel de garduña.
Proverbio. La lluvia de primavera da la impresión de que no moja.
Una casa vieja y grande en piedra tallada, soberbia con sus matacanes refinados.
Casas señoriales o calamitosas.
Barcas de tintoreros.
Tiendas con entradas en arco carpanel.
El viejo molino, bajo sus sombríos arcos circulaba lentamente el agua de la esclusa, dividida por tajamares de piedra.
Calamidades que les había infligido.
Refrán. Bueno como un verdugo que comulga por pascua florida.
Látigo del cómitre.
Cosas difusas que pasan por la cabeza de los niños.
Cantaba el cuclillo en la espesura de los árboles y, más allá, otro le replicaba similar a un eco debilitado.
Un arrendajo maullador que había aprendido a imitar a los gatos, acercándose a las casas en la época de las cerezas.
Atrapó las terribles fiebres del presidio.
Una innumerable tropa de estorninos arrastrados por la borrasca.
Y siguiendo el rito de los juramentos solemnes usado por los campesinos del Périgord desde hace miles de años, escupió en su mano derecha, hizo una cruz en el escupitajo con el pulgar de la mano izquierda y tendió la mano abierta hacia el castillo.
Un odio feroz comparable a los nidos de víboras.
Comienzo de venganza.
El día de san Juan, cuando el fuego está a punto de extinguirse, los que no han podido atrapar el ramo llevan tizones para preservar su casa del trueno, tras haber saltado sobre las brasas para protegerse de los clavos.
Guerra sin piedad.
Dicho. El que sabe pedir no pasa hambre.
Una ventana de gran vano.
Zuecos de Montignac.
Cosas hermosas sobre el olvido de las injurias.
Binar las patatas.
Brotar un recuerdo.
La represión causaba un descontento general, que favorecía el desarrollo de las sociedades secretas.
Una pierna atacada por el mal de San Antonio.
El mal de santa María, también llamado sarna.
Cogidos del dedo meñique como es costumbre entre los enamorados.
Polvos de los charlatanes.
Sombrero del Périgord redondo, de alas anchas.
Discutir ásperamente esgrimiendo las dos partes los argumentos usuales entre la gente que hace un convenio.
Bueyes lemosinos.
Las gallinas venían a comer los gusanos en la gleba levantada.
Amolar la hoz en la piedra de afilar.
Las cosas no se emparejan con la fantasía de los hombres.
Un gusano hacía rechinar su taladro en una viga; gre, gre, gre.
El testamento no es válido si no está fechado.
el carbón de madera de arraclán para fabricar pólvora.
El ¡clu, clu! de una lechuza.
El invierno tocaba a su fin y en los bosques comenzaban a salir las violetas de la Candelaria, que otros llaman narciso de las nieves.
Al hilo de la rememoración.
Desarrollar las primeras arengas.
Vestido smiserablemente con chaquetas de droguete.
El ser humano justo que se eleva por encima de los hombres y de las coas, que sopesa las circunstancias, escruta los motivos, cuenta con los acontecimientos y solicita el castigo que aprecia equitativo, opuesto al oficio del fiscal.
Un pueblo sobre el que pesa la dura esclavitud de la gleba, que desde hace siglos se afana y padece, vive miserablemente y, a pesar de todo, saca fuerzas de nuestro suelo pedregoso y sano para bastarse.
La naturaleza todo lo cubre con su manto verde.
La hierba de los pordioseros o clemátide.
(Jacquou el rebelde)
El Aversier, ese ser misterioso más poderoso y más terrible que el diablo.
La nieve, que caía como flotando, hacía que las viejas dijeran, "Ya está papá Noel desplumando sus ocas".
Zuecos amarillos de madera de aliso.
Una gran hogaza lisa de pan de camuña, de centeno y cebada.
Dicho. Trigo de un año, harina de un mes, pan de un día.
La costumbre quiere que el que pide prestado el pan no lo devuelva por su propia iniciativa; es el que presta quien debe ir a buscarlo simulando precisarlo.
Un perro de caza desjarretado.
Croquant, término despectivo equivalente a destripaterrones o paleto, para nombrar un campesino; la denominación hace referencia también a los grandes levantamientos que, de 1590 a 1650, protagonizaron periódicamente los campesinos franceses del centro y sudoeste, tomando las armas ante el poder central, exasperados por los abusos de que eran víctimas, levantamientos llamados de los croquants.
Acta de expulsión de la aparcería.
Proverbio. El bosque Barade no se libró nunca de haber lobos ni ladrones.
Fino como una comadreja, astuto como un zorro y malicioso como un mono.
Buscar mangos de látigo en los acebales.
Cerillas químicas.
Las posaderas de las aldeas negaban dar una brasa los días de fiesta o durante las ferias, porque traía mala suerte.
Cerrar la puerta por dentro a la vieja usanza, con una barra que al penetrar en los agujeros a cada lado de la pared aguantaba el batiente.
Imágenes. El famoso Crédito muerto, tumbado en el suelo, muerto por morosos que huyen; a su lado una oca aguanta con su pico una bolsa con la inscripción, "Mi oca lo hace todo"; triste y desoladora sentencia para la gente pobre.
Gorra de piel de garduña.
Proverbio. La lluvia de primavera da la impresión de que no moja.
Una casa vieja y grande en piedra tallada, soberbia con sus matacanes refinados.
Casas señoriales o calamitosas.
Barcas de tintoreros.
Tiendas con entradas en arco carpanel.
El viejo molino, bajo sus sombríos arcos circulaba lentamente el agua de la esclusa, dividida por tajamares de piedra.
Calamidades que les había infligido.
Refrán. Bueno como un verdugo que comulga por pascua florida.
Látigo del cómitre.
Cosas difusas que pasan por la cabeza de los niños.
Cantaba el cuclillo en la espesura de los árboles y, más allá, otro le replicaba similar a un eco debilitado.
Un arrendajo maullador que había aprendido a imitar a los gatos, acercándose a las casas en la época de las cerezas.
Atrapó las terribles fiebres del presidio.
Una innumerable tropa de estorninos arrastrados por la borrasca.
Y siguiendo el rito de los juramentos solemnes usado por los campesinos del Périgord desde hace miles de años, escupió en su mano derecha, hizo una cruz en el escupitajo con el pulgar de la mano izquierda y tendió la mano abierta hacia el castillo.
Un odio feroz comparable a los nidos de víboras.
Comienzo de venganza.
El día de san Juan, cuando el fuego está a punto de extinguirse, los que no han podido atrapar el ramo llevan tizones para preservar su casa del trueno, tras haber saltado sobre las brasas para protegerse de los clavos.
Guerra sin piedad.
Dicho. El que sabe pedir no pasa hambre.
Una ventana de gran vano.
Zuecos de Montignac.
Cosas hermosas sobre el olvido de las injurias.
Binar las patatas.
Brotar un recuerdo.
La represión causaba un descontento general, que favorecía el desarrollo de las sociedades secretas.
Una pierna atacada por el mal de San Antonio.
El mal de santa María, también llamado sarna.
Cogidos del dedo meñique como es costumbre entre los enamorados.
Polvos de los charlatanes.
Sombrero del Périgord redondo, de alas anchas.
Discutir ásperamente esgrimiendo las dos partes los argumentos usuales entre la gente que hace un convenio.
Bueyes lemosinos.
Las gallinas venían a comer los gusanos en la gleba levantada.
Amolar la hoz en la piedra de afilar.
Las cosas no se emparejan con la fantasía de los hombres.
Un gusano hacía rechinar su taladro en una viga; gre, gre, gre.
El testamento no es válido si no está fechado.
el carbón de madera de arraclán para fabricar pólvora.
El ¡clu, clu! de una lechuza.
El invierno tocaba a su fin y en los bosques comenzaban a salir las violetas de la Candelaria, que otros llaman narciso de las nieves.
Al hilo de la rememoración.
Desarrollar las primeras arengas.
Vestido smiserablemente con chaquetas de droguete.
El ser humano justo que se eleva por encima de los hombres y de las coas, que sopesa las circunstancias, escruta los motivos, cuenta con los acontecimientos y solicita el castigo que aprecia equitativo, opuesto al oficio del fiscal.
Un pueblo sobre el que pesa la dura esclavitud de la gleba, que desde hace siglos se afana y padece, vive miserablemente y, a pesar de todo, saca fuerzas de nuestro suelo pedregoso y sano para bastarse.
La naturaleza todo lo cubre con su manto verde.
La hierba de los pordioseros o clemátide.
(Jacquou el rebelde)
George MacDonald
Mundo, condición de cosas, economía de condiciones, idea de la existencia.
Gravedad crepuscular.
El reflexivo cerebro del edificio estaba lleno de misteriosos moradores.
Lechoso zafiro estrellado anublado.
Esencia de la singularidad.
Dos objetos no pueden encontrarse en un solo lugar y a un tiempo.
Bosque de pinos. Sagrada gravedad.
El sueño es algo valioso en demasía, como para que sea posible ganarlo; debe ser dado y aceptado, porque es un menester.
Blanca luz. Piedra lunar.
El que no quiera dormir nunca despertará.
La luna no revolotearía sobre mí, sólo me ofrecería ciegas opciones.
Autoconciencia de valor o miedo.
La luz sigue siendo luz, aunque sea el ultimo de una incontable serie de reflejos.
Pueblo fungoide, dotado sólo de mente suficiente, para darles movimiento y una expresión de disgusto y codicia.
Existencia. Peculiaridades.
Ondas del sueño.
Amanecer de ondas doradas.
Traslación de un triunfo común.
Encantadora ventaja, opuesta al espantoso deber.
Señales de progreso.
Brazos en torno al cuello, rígidos como los de la doncella de las torturas.
Esfuerzo agónico.
Torres y murallas de una ciudad, aparentemente remota como el propio tiempo.
Estúpida ansiedad.
Pantera encadenada, bozal y garras enguantadas.
Me estremecí con conflictuada autoconciencia, cuyo análisis me era imposible.
Caverna secreta del sueño.
Un bajo gruñido, un grito de dolor, un rugido de odio.
Elipsoide negro. Cerebro.
Desarrollar la idea del crecimiento.
Grado de experiencia, opuesto a monto de ignorancia.
Burla de un fantasma enemigo.
Inmóviles jueces.
Metamorfosis. Arrepentimiento.
Las verdaderas lágrimas del arrepentimiento se agolpan en los ojos; son amargas y no benéficas; el autoaborrecimiento no es dolor; sin embargo, tiene algo de bueno, porque constituye un indicio de que se ha dado un paso adelante en el viaje al hogar.
Horrible Nada, Negación total.
Sólo la luz se percibe propiamente, y también a la oscuridad.
Centro del horror esencial. Su propio mal indestructible.
Ensueños llegaron en multitudes.
Fantasma de la luz, que mora en las cavernas de los ojos.
El sueño mejor soñado es el que más se asemeja a la verdad de la vigilia.
Incluso en un sueño, el soñador ha de hacer algo; no puede quedarse sentado y rehusar hacer nada, hasta que el sueño se canse de él y lo abandone.
Espacio, Tiempo y Manera de Ser.
Oír al sol.
Ángeles de la resurrección.
Mensaje de postergados deseos.
Viento lleno de mensajes.
Trono del Viejo de los Días.
(Lilith)
Arco iris anchuroso y rutilante.
El arco iris depende del sol.
(La Llave de Oro)
Sabor del miedo y tentación de la noche.
No es posible representar nada, sin que atienda a un esquema general.
Sombra de realidad de las cosas.
Como la luz es una, cualquiera puede prestar ayuda de guía, para encontrar más luz.
Laberinto de perplejas conjeturas, fascinación y delicia.
Impresión terriblemente defectuosa, pero falsa no.
Los ojos se hicieron para ver.
La noche siente alivio tras los relámpagos y la lluvia.
El sol irrumpió en el aire en su plenitud, como un pájaro escapado de la mano del Padre de las Luces.
Se sentía también superior, porque habiendo sufrido más, no tenía miedo a nada.
El día vale más que la noche y el sol es más soberano que la luna.
(Niño de Sol y Niña de Luna)
NIKOLÁI S. LESKOV
Tedio ruso.
Las variaciones en el uso de tu a usted son frecuentes en el idioma original.
Fiódor, con la forma familiar Fedia, el equivalente ruso de Teodoro.
Desarrollar el enredo.
Arrojarse como un lucio sobre un gobio.
Referencias amplias y variadas.
Temperamento comunicativo.
Alegre, bondadoso, nada susceptible e ingenuamente supersticioso.
Carácter suave, fundamentalmente honrado y recto, aunque había astucia rusa.
Desarrollo de los negocios privados.
Capital mágica.
Horizonte político y patriotismo.
Refrán. Moscú no cree en lágrimas. No dan dinero.
En la capital nadie regala nada, nadie va a dar un paso por ti.
Mejor las cosas vistas que alabadas.
Son las piernas las que dan de comer al lobo.
Ímpetus de cabra.
Relato, ayudar a entender el proceso orgánico de desarrollo intelectual de esta protagonista de la vida de Petersburgo.
Ocasión de reflexionar respecto de la fuerza oscura, pero terrible, que posee el ambiente de Petersburgo.
Kolomna. Barrio de San Petersburgo.
Adjetivo dereviannyi (de madera), en sentido figurado y aplicado a las personas o a sus rasgos, rígido, inexpresivo.
Calambur intraducible.
Jalam-balam. Imitación burlesca del habla de los tártaros.
El alguacil debía imponer y hacer cumplir en el mercado las reglas pertinentes. Vigilar que el peso fuera exacto, completo y colmado.
Concepción propia del ocioso, que todo lo ve con ojos extranjeros y calcula con un rasero occidental.
Actividad en los nidos centrales del poder provincial.
Yar, famoso restaurante a las afueras de Moscú. Preparar etíopes, gitanos.
Grado de perfección. Según el uso palaciego, se debe hablar de forma lisonjera o artificiosa.
El sonido /f/ no existía originariamente en ruso y sólo se registra en préstamos de otros idiomas. En el habla hubo una larga resistencia a su asimilación.
(Relatos)
Tedio ruso.
Las variaciones en el uso de tu a usted son frecuentes en el idioma original.
Fiódor, con la forma familiar Fedia, el equivalente ruso de Teodoro.
Desarrollar el enredo.
Arrojarse como un lucio sobre un gobio.
Referencias amplias y variadas.
Temperamento comunicativo.
Alegre, bondadoso, nada susceptible e ingenuamente supersticioso.
Carácter suave, fundamentalmente honrado y recto, aunque había astucia rusa.
Desarrollo de los negocios privados.
Capital mágica.
Horizonte político y patriotismo.
Refrán. Moscú no cree en lágrimas. No dan dinero.
En la capital nadie regala nada, nadie va a dar un paso por ti.
Mejor las cosas vistas que alabadas.
Son las piernas las que dan de comer al lobo.
Ímpetus de cabra.
Relato, ayudar a entender el proceso orgánico de desarrollo intelectual de esta protagonista de la vida de Petersburgo.
Ocasión de reflexionar respecto de la fuerza oscura, pero terrible, que posee el ambiente de Petersburgo.
Kolomna. Barrio de San Petersburgo.
Adjetivo dereviannyi (de madera), en sentido figurado y aplicado a las personas o a sus rasgos, rígido, inexpresivo.
Calambur intraducible.
Jalam-balam. Imitación burlesca del habla de los tártaros.
El alguacil debía imponer y hacer cumplir en el mercado las reglas pertinentes. Vigilar que el peso fuera exacto, completo y colmado.
Concepción propia del ocioso, que todo lo ve con ojos extranjeros y calcula con un rasero occidental.
Actividad en los nidos centrales del poder provincial.
Yar, famoso restaurante a las afueras de Moscú. Preparar etíopes, gitanos.
Grado de perfección. Según el uso palaciego, se debe hablar de forma lisonjera o artificiosa.
El sonido /f/ no existía originariamente en ruso y sólo se registra en préstamos de otros idiomas. En el habla hubo una larga resistencia a su asimilación.
(Relatos)
Chejov
Leskov ha subido al escenario un Daniel escrupuloso que al encontrar en los suburbios un leproso lo alimenta y lo calienta con el amor religioso.
JOEL CHANDLER HARRIS
Aportar pruebas con un alto grado de persuasiva elocuencia.
La anécdota del irlandés y el conejo. En los cuentos irlandeses pecan de ingenuos.
El camino ancho opuesto de los caminos vecinales y los senderos que con su jerga vernácula los irlandeses llaman ahitos.
El irlandés llegó a un campo de calabazas y como no había visto nunca una fruta como esta decidió que había encontrado un nido de yeguas.
Kuorp potrito es lo que los irlandeses gritan para frenar al potro.
Los prejuicios de casta y orgullo de la familia.
Una expresión de la más intensa atracción.
Contentar el estómago.
El conejo saltando plim-plum, plum-plim pícaro como una urraca.
Los humores de las tripas.
Un tono impresionante.
Yendo por lana salió trasquilado.
Dando saltos vivamente como un grillo saltando fuera de las brasas.
Una expresión de incredulidad.
Muerden el bocado los caballos.
No conviene dar todo de comer de una vez.
Armar mucho jaleo como si estuviera furioso.
Tono confidencial.
Un pájaro carpintero gozando de picar un tronco.
Contentita una urraca con un nido de gorriones.
Muchos amigos estropean la cena.
Las malas noticias se dicen pronto.
Una combinación tipográfica o una descripción de los sonidos guturales y la particular entonación rara y peculiar.
Desaparecer rápido como se apaga una vela.
El espliego que se guarda con la ropa.
La entonación y la pronunciación del adorno de las palabras.
Un aire de cautelosa reserva.
Cazando con una suerte tremenda.
Muecas secas.
Gruñendo el estómago.
El abogado argumenta el caso.
Un tono que implicaba conciliación como información.
Fallar la memoria.
Salta y brinca alegre un grillo el mes de junio.
Adelantar con garbo.
Se fueron extendiendo las trampas porque son muy contagiosas.
Un aire muy serio que no le era nada natural.
Los suspiros terminaban con un largo gemido de una indescriptible agonía mental.
Sonrojándose culpable.
Acusicas y chismosos no salen bien parados.
Espantarse de un fantasma que hasta entonces nadie hubiese temido.
Decidir reunir suertes y cosechar unidos. Fue un año bonísimo y tuvieron un éxito monstruoso.
Temblar las piernas de miedo.
Un verdadero ataque de rabia.
Disimular bonitamente las huellas.
Partió corriendo rápido como una mula enloquecida.
Un tono a la vez confidencial y antagónico.
Botarates mamarrachos de la creación.
El código familiar.
Un silencio digno pero testarudo.
Un monstruoso disimulo.
Un galimatías calculado para intrigar.
Expresión de desconcierto.
Correr tras las sombras y saber quién es y qué.
Los caprichos y humores.
La gracia de un nombre.
Una vocecita que demostraba lo corrido que había quedado.
Satisfecho del efecto de sus poderes de descripción.
La luna llena en todo su esplendor reflejaba sombras largas, vagas e inciertas.
Un argumento irrebatible.
Demostraciones de gratitud.
La familiar curiosidad de los niños.
Suficientemente sensacional como para ganar un aplauso.
Una infecciosa carcajada.
Cortar el aliento de la emoción.
Un tono confidencialmente grave.
Un tono mejorado.
Justificar los recuerdos con una referencia a los archivos y proceder a enumerar con gran deliberación.
Los chiquillos quedaron abandonados a su suerte.
Curándose en salud para rescatarse de alguna circunstancia del futuro.
Tocaba el violín a la manera de entonces. Uno de esos violinistas que no pueden encontrar una tonadilla si no marcan el paso con el pie.
Hablar con una monstruosa cortesía.
Un tributo a los maravillosos recursos como contador de historias.
Replicar con la forma de un comentario.
Perder las pestañas del asombro.
De una manera misteriosa las tinieblas del crepusculo se prendían de las oscuras nubes; y los grandes árboles y la borrosa perspectiva detrás se iban fundiendo con la negrura de la noche.
Una economía instintiva para una emergencia.
Simulando una inocente ignorancia.
Manifestando con gestos su creciente excitación.
Convulsiva admiración.
Inclinarse al lado práctico de las cosas.
Andar mareado y vacilando como una señorita de la ciudad en una barca y dueño de sus movimientos como un trapo mojado.
Rebuscar con la memoria.
Simulando un gran asombro.
Curándose en salud ante cualquier crítica.
Un tono de auténtico fervor histórico.
Esas novelas que el cortejo dura más que el noviazgo.
Lo divertido para unos puede ser triste para otros.
Una expresión de intensa desilusión.
Frotando las manos como muestra de gran satisfacción.
Transportar a ese país que los mitos y las fábulas abandonan ser maravillosos... el país de los plácidos sueños.
La enfermedad era severa pero no fatal.
Una gran afectación de formalidad.
Argumentando cuál de sus trucos podía serle de provecho.
Brincando muy contento ni que fuera un potro retozando en un prado de trébol.
Avispas rojas.
Chillidos de emoción.
Altamente satisfecho.
Comenzó sin más tentadores prolegómenos.
Un auténtico y verdadero horror. Ver al viejo Lucifer, a Satanás, al diablo.
Seguir la corriente a ver si tenía suerte.
Un tono de indignada mortificación.
Organizar un auténtico aquelarre.
Sacar tonadillas del trípode, la parrilla y la sartén.
Cantando un grillo en las cenizas del hogar.
El camino que lo lleva a uno al mundo de los ensueños.
Un tono de indignado asombro.
Meditar las ideas.
Poner la atención en marcha.
Caña, anzuelo, redaya y cebo.
Pescar pezgatos, barbos, percas, gupis.
Garantizar con mucha prosodia.
La luna rielando muy bonita al fondo del estanque.
Pausas características.
Tendremos mejor suerte otra ocasión.
Refrescar la memoria para contar más aventuras.
Un tono de triunfo.
Algo cayó sobre el techo de la casa que sonó como si hubieran disparado una pistola. El invierno está avisando. Cuando el nogal oye que se aproxima comienza a soltar lo que tiene colgando.
Hervir de indignada argumentación.
El campante rey del flirteo.
Una cataplasma de árnica.
Había aprendido que no convenía manifestar ni la más mínima impaciencia.
Gruñir de manera sabia.
Las perplejidades de casi cien años.
Las lágrimas caían de sus mejillas como una lluvia.
Exclamar con característica pero ridícula irrelevancia.
Sentenciar con el aire de uno que está sentando cuidadosa y deliberadamente una opinión judicial.
Los detalles del flirteo.
El más amable y persuasivo tono.
Fruncir los labios del disgusto.
Evidente simpatía.
Llorando diluvios.
Unir las manos con un éxtasis de admiración.
Digna hospitalidad.
Los viejos tiempos es casi todo lo que nos queda.
Si das la vuelta a tu chaqueta y la pones los ánimos desaparecen.
Llamar piez bizcos.
Una pata trasera de conejo para espantar los malos ánimos.
Para el reuma no hay como una tira de franela atada al brazo; y para la dispepsia nada mejor que el agua del hueco de un tronco.
La pata de conejo traerá buena suerte. Vendrá de perillas para cualquier camorra.
Tener más suerte que seso.
La suerte de su lado.
Reanudando una conversación.
Un tono ofendido.
Un tono de asombro como de deseo.
Tenía más suerte de la que puedas suponer que tenga un espantapájaros.
Envolviéndose con su total dignidad.
Abandonado a su suerte sin ceremonia ninguna.
Grave afabilidad.
Un tono conciliatorio.
Comenzar a cobrar valor.
Instintiva deferencia a las reglas de la hospitalidad.
Un tono amoroso.
Fue a dar un garbeo solito para soltar una gran carcajada.
Un tono bajo, impresionante y confidencial.
Con el miedo las ideas de su mente comienzan a revolotear como si fueran polillas.
Pasando por la mente.
Lanzar rapsodias disparatadas y fascinantes.
Es que va hilando los años / Dando tiempo al tiempo.
Un nombre no tiene más ventaja que cualquier otro nombre.
Apreciar la gravedad de la situación.
Una expresión de auténtica desilusión.
Sentada muy tiesa inmersa en su orgullo.
Una promesa es una promesa aunque la hagas una noche oscura sin luna.
Contener con un gesto lleno de dignidad.
El agua de alquitrán era una medicina antigua que consistía en mezclar agua con alquitrán. Se bebía como un tónico.
Poner ligeramente la mano sobre el hombro era un gesto familiar amable pero rudo, una muestra de afecto pero también una llamada de atención.
Reblandecer la memoria.
Un éxtasis de admiración.
Engañoso juego.
Aclarar con característica prontitud.
Manifestando una auténtica timidez.
Manifestar una desilusión genuina.
La modestia de una oveja.
Condescendiendo dar a la historia su patrocinio.
El conejo esperando una ocasión para bromear.
Tirando de la madeja de la moraleja.
Una expresión solemne.
Una réplica rápida, enfática y persuasiva.
Un tono asustado.
Transformando el tono y la actitud como si estuviera hablando con una tercera persona escondida en algun lugar del cuarto.
Las nubes están apareciendo y vendrán a lancear la hierba para ir viéndola crecer.
Rajar con una hoz.
Bondadosos comentarios.
Gráfica descripción.
Armándose de una divertida asunción de dignidad.
Un gesto de triunfo.
Dando vueltas a la cuestión.
Los menudillos, la casquería.
Relamiendo los labios de manera sugestiva.
Acusar de avieso.
La rabia de ver lo que tramaba.
Asombro no desprovisto de admiración.
Hizo un amplio gesto con su mano izquierda que podía significar todo o nada.
Una demostración práctica.
Perder la atención con las propias reminiscencias.
Próximo de la fatal verdad.
Si se echaba atrás de una apuesta como esa nunca cesaría de oír las burlas.
Su buen humor era infeccioso.
Lo que dijo la urraca al mochuelo: <<no por enfermo me falta la gracia>>.
Descomponiendo de la rabia que le daba.
Una viva satisfacción.
Celos sustanciales.
Aceptar el aspecto del programa.
Una particular satisfacción.
Un oscuro instinto.
El castaño regoldano. Silvestre.
Roncar fuerte como un aserradero.
Descargar la memoria.
Transformarse como el más negro de los gatos con un rabo todo arbolado, el lomo arqueado, ojos feroces y unos colmillos asomando de las fauces.
Énfasis poco usual.
Soñando sueños que nunca nos contaron.
Manifestar síntomas de dormir.
Frotar las manos con un perfecto éxtasis de buen humor.
Un aire de despreciativo humor.
Manifestar el deseo de atender.
Las Navidades están a punto de comenzar y todos nos sentimos de mejor humor que de costumbre.
Un aire grave y judicial.
No destacar con las nociones.
El candor de un experto.
Una rara astucia no exenta de ferocidad.
Despierta el seso y suelta todo eso que te está bullendo en la mente.
Pescar un hato de peces.
Jugar un truco fino.
Inclinar la cabeza con una actitud de atención.
El tono y las maneras.
El menester de argumentar.
Un gruñido de satisfacción.
Tono amable y consolador.
Una actitud de desafío suficientemente significativa.
La saca del zorro se sabe lo que mete dentro pero no se sabe lo que tiene dentro.
Un predicador de campaña.
(El Tío Remus)
EDWARD BELLAMY
El dinero dominaba todo lo agradable y refinado de la vida.
Las paredes revestidas de cemento hidráulico eran de gran espesor.
Mesmerismo. Despertar una inversión del fascinante proceso. El proceso para despertar al durmiente era mucho más simple que el de ponerlo a dormir.
Había un ligero riesgo del sueño mesmérico. Era que pudiera volverse demasiado profundo y acceder a un trance más allá del poder del hipnotizador para romperlo terminando con la muerte.
Adopté una actitud cómoda y me entregué a las manipulaciones del hipnotizador.
Invadir una deliciosa somnolencia.
Las causas de todos los fenómenos son igualmente adecuadas y las consecuencias idénticamente importantes.
El carácter colosal del fraude.
Con la retención total de las actividades vitales sobrevivir a un gran periodo de tiempo.
Una extraordinaria mezcla de emociones.
La prosperidad material de la gente implica su magnificencia.
La sensibilidad intelectual.
El grado intelectual.
Proverbio. Es mejor mirar atrás que predecir.
Las capas profesionales, los hombres que rinden al país con el cerebro en lugar de con las manos.
La indefensa y ciega busqueda personal en un vacío sin límites.
La sensación de total cese intelectual con la pérdida de un punto de apoyo mental, un punto de partida de la mente que se produce durante un oscurecimiento momentáneo del sentido de la identidad.
Una nada intolerable del cerebro.
El comercio existía y el dinero era preciso porque el negocio de la producción se abandonaba en manos privadas.
Inducir recompensando segun la cantidad del producto.
Los pedidos de muestra y la declaración impresa de la textura, la marca y las calidades.
El fabricante vendía al mayorista, el mayorista al minorista y el minorista al consumidor y los materiales tenían que ser manipulados cada vez. El minorista con sus grandes ganancias y el ejército de empleados que va a mantener.
La brujería de una noche de verano.
La combinación del máximo de comodidad y el mínimo de problemas de los arreglos domésticos.
La ayuda médica depende de las tendencias constitucionales y de la condición.
La actitud respecto de los éxitos y fracasos de los demás.
El sueño es un tónico para los nervios que no tiene sustituto.
Un tono de caballero desprovisto de altanería y al tiempo no despreciativo.
La actitud de una persona decidida desempeñando correctamente la tarea a la que se dedicaba.
Una era de esplendor intelectual sin precedentes.
Las críticas de los periódicos han sido crueles y frívolas además de profundamente teñidas de prejuicios y amargura.
La remisión por indemnización y la remisión por abnegación.
La construcción de una novela de la que deberían excluirse los efectos derivados de los antagonismos de riqueza y pobreza, educación e ignorancia, tosquedad y refinamiento, altos y bajos, todos motivos derivados del orgullo y la ambición social, el deseo de ser más rico o el miedo a ser más pobre con sórdidas ansiedades de cualquier tipo para uno o los demás; un romance con el que debería haber amor abundante pero libre de barreras artificiales creadas con diferencia de posición o posesiones que no posean otra ley que la del corazón.
Un molino en cuya tolva se vierten mercancías.
Hombres de disposición enérgica.
Una existencia cómoda.
El ejercicio superior de nuestras facultades, los goces y actividades intelectuales y anímicos se logra con la distribución justa de las cargas y las y atracciones e incentivos especiales para mejorar nuestra acción de lo que perturba excepto con un sentido comparativo con lo inspirador.
Atavismo. Aplicado a los casos de personas que algun rastro de un ancestro remoto se repite de manera notable. Entender el crimen como la recurrencia de un rasgo ancestral.
Una actitud de piedad y moderación firme pero suave.
Colorear los abogados el proceso.
El temperamento judicial.
El lapso de tiempo al hacer que el pasado semeje remoto.
El dinero era un signo de las mercancías, pero el préstamo no era más que el signo de un signo.
La ley que derriba una estructura que sobresale de su centro de gravedad.
Los cien procesos distintos de la bala de algodón a la bala de percal brillante.
Von Moltke (1800-1891) mariscal alemán bajo cuya dirección Prusia derrotó a Dinamarca, Austria y Francia.
Un sueño u otro misterio más desconcertante.
El oro no dora la frente estrecha del tonto.
Alimentar con pan arrebatado a otros.
El profundo pesimismo de la literatura del ultimo cuarto del siglo XIX, la nota de melancolía de su poesía y el cinismo de su humor.
Al borde de un avatar de desarrollo limitado.
La perversidad habitual de los amantes.
Permanecer con la actitud con la que había invadido la persuasión.
La producción es una tarea más vital que la distribución.
Niñas con cejas de bronce.
(Mirando atrás, 2000 a 1887)
NICOLÁS GARIN
El perfume de los álamos en flor.
Un globo de cobre rojo.
Tono de cariñosa demanda.
Escalar la inaccesible torre de la vida, que no tenía escalera.
Reconocer la culpa es casi corregirla.
Tienes que tener alguna garantía de que no estás extraviado y esa garantía sólo se adquiere a fuerza de leer, de saber las ideas de los demás, de elevar la inteligencia. Y las experiencias humanas son numerosas; sin guía te perderás y nunca saldrás al camino.
Tono protector y bonachón.
La filosofía es una ciencia abrumadora.
Tono misterioso y con malicia.
Balyk. Lomo de esturión ahumado.
Los ojos azules no traen mala suerte.
Luminoso arco iris.
Sombra de pesar.
Enojosa actividad la de imprimir las proclamas agitadoras.
Lodo inevitable de la vida.
Terquedad infantil.
Tono apagado.
No engañarás al gorrión viejo con echarle paja hacheada.
Fango de la vida.
Carbón. Briquetas de Cardiff y Newcastle.
Ganso y cerdo no pueden ser compañeros.
Tono de reproche cariñoso.
Oscuro pan de trigo aromático.
Tono cariñoso y de respetuosa familiaridad.
En la explanación, todo ángulo o curva constituye una pérdida y, por tanto, cuanto menor sea el ángulo y mayor el radio, mejor.
Saco de piedras. Nombre con el que se designa entre el pueblo un calabozo estrecho y sin luz.
Inevitable y pesado curso de la vida.
Módulo de cálculo.
Puds de carbón.
Baños de caucho ingleses.
Miedo inexplicable ante una desgracia misteriosa, fatal e irreparable.
El empleo del diminutivo y la supresión del segundo nombre son, en ruso, señal de gran intimidad.
Bandurristas, gente inquieta, que no está tranquila en ningún sitio, escandalosos a los que terminan por echar de las Compañías.
Golosinas de Odesa. Semitaki y aloachik.
Somos unos hongos de nuestra época y esta determina la calidad de los hongos; por eso somos unas fuerzas elementales y tenemos que guiarnos por el instinto. Este instinto es el que al fin crea la Historia.
Una división revela actividad mental y no hay que temerla.
Ruda actividad material y actividad superior (participación en la agitación).
Guiñar los ojos los gitanos.
Tono desdeñoso.
En la vida todo depende del dinero y la casualidad.
Adquirir fama de trabajador bueno e inteligente.
Sufrir el horror de la humillación.
Sensación de infinita vergüenza y humillación.
La locomotora acercándose con en tender delante.
Haber escogido el modelo económico de ferrocarril más caro que había existido hasta entonces y, por consiguiente, el menos habitual, porque al zar Nokolay Pavlovich, temiendo una invasión extranjera, se le ocurrió, en vez de hacer la línea más estrecha que la europea, hacerla un pie más ancha. Los sabios de aquellos tiempos estaban poseídos por el miedo a volcar. La línea de Tsarskoie Sielo tiene sis pies de ancho. El peso del vagón es de setecientos puds y el peso útil de trescientos, mientras en el extranjero este ultimo es de setecientos puds y el otro de doscientos veinte. Eso, encima de costar el doble.
Tono entre burlón y amenazador.
Un revolcón de hambre en el estomago, el más terrible.
Poseer grandes experiencias teóricas y prácticas y una gran aptitud para analizar y generalizar.
Los ingenieros tienen su campo visual mayor que otros especialistas y en el plano intelectual representan una fuerza más potente.
Intensidad de la actividad.
Sin la garantía de ser preciso e indispensable a alguien no hay energía.
El reverso de la vida. Si nos regala alguna alegría, se venga más tarde.
Un rubí muy puro. El buen rubí debe semejar una gota de sangre.
Tout passe, tout casse, tout lasse.
Permitir que el estómago haga su actividad, no estorbarle, que la sangre fluya a él.
Tono cordial y malicioso.
Las violetas con sus hojas redondas ocultaban el suelo.
Tono de reproche cariñoso.
Tono sencillo, pero solemne.
La violencia es una sustitución del cerebro por las manos.
Se vive sólo una vez, la vida es corta y nadie te necesita ni a nadie perteneces, más que a tus creaciones, que estarán siempre en ti y por las cuales vivirás.
(Los ingenieros)
FRANK HARRIS
Una salud vigorosa.
Una extraordinaria fuerza de carácter y voluntad.
Amargura sarcástica.
Bocas de franela.
Un tono despreocupado.
Un tono uniforme e impersonal como afirmando hechos.
El encanto de lo inesperado era una distinción.
Un temperamento dominante.
Alguna razón inescrutable.
La Electra de Sófocles no es más que un estudio o copia débil de Antígona. Matthew Arnold un poeta inglés vivo escribe que Sófocles veía la vida con firmeza y en su totalidad. Lo que no es cierto para ningun ser humano.
La crudeza suele acompañar a la originalidad.
La audacia y el encanto.
Cegada con el temperamento.
Una actitud delicada.
Acusar de deshonestidad.
La estrechez intelectual.
Los trucos de los gestos de un intelectual.
Un sistema venal y degradante.
La condescendencia de una amabilidad exquisita y encantadora.
El sueño comenzó a perder su brillo.
El amor la invadía haciendo que su humildad fuera dulce como su admiración.
El idealismo erudito.
La visión práctica.
Una conversación confidencial.
Un ataque periodístico de virulencia de inventiva.
Las cualidades de carácter.
El borde humorístico de las calumnias.
Se dio cuenta del valor de las palabras clave pero sus epigramas al no estar endurecidos con el fuego de la vida se negaban a pegar.
Un notorio fraude.
"Lo has hecho maravillosamente bien" era el meollo de sus conversaciones.
Un tono terminante.
Muchas ocasiones de satisfacción personal tranquila pero intensa.
Un ataque periodístico.
Una sombra de prueba.
Tono insultante.
El uso de expresivas imprecaciones.
La reflexión mitigó su ira.
Como el aceite solo suaviza la superficie de las olas la razón tiene solo un efecto superficial sobre el carácter.
Viejo proverbio francés. El ofensor rara vez perdona.
Un tono vacilante.
Inmoralidad manifiesta.
(Gulmore, el jefe)
LEONID ANDREIEV
(Un sueño)
Dachta. Residencia campestre.
Especial y pálida tristeza que suele inspirar a la gente el espectáculo de la alegría ajena.
(Ladrón)
Una enojosa y ofensiva sospecha.
Los barbudos occidentales.
Un miedo rayano al espanto.
Expectación henchida de miedo.
Raza ilustre y rancia que por una rama llega hasta Rurik.
De la canción no entiendes la letra.
Extrema sensación de olvido.
Penosamente se afanaba por dilucidar el enigma.
Un miedo rayano al espanto.
Expectación henchida de miedo.
Raza ilustre y rancia que por una rama llega hasta Rurik.
De la canción no entiendes la letra.
Extrema sensación de olvido.
Penosamente se afanaba por dilucidar el enigma.
Límite del inhumano horror.
Se extinguían las reflexiones precisas, firmes y generales con su concha literaria.
Barba de mujik cuadrada, ancha, rubia, peinada.
Esclavitud de la casta.
Átomo de dolor.
Ojos de sueño geométricos.
Tono terminante.
Velocidad del vuelo de la corneja.
La luna reflejando brillantez.
Por vía de explicación.
Barba de mujik cuadrada, ancha, rubia, peinada.
Esclavitud de la casta.
Átomo de dolor.
Ojos de sueño geométricos.
Velo del porvenir.
El proceder ilegal de los que mandan.
Ya se acusaba la noche.
Arrecido y apenas vivo vagabundo de Mamón.
Un vagabundo es un animal inútil, por el estilo de la marmota.
Volost. División administrativa que contiene varias aldeas.Tono terminante.
Velocidad del vuelo de la corneja.
La luna reflejando brillantez.
Por vía de explicación.
Acuñar monedas falsas de dos guineas.
Con tono despectivo lo tachó de idiota.
Algo plenamente terrible, que traspasaba los límites de lo habitual.
Reinaba una organización no enteramente inteligible, pero rígida.
Con tono despectivo lo tachó de idiota.
Algo plenamente terrible, que traspasaba los límites de lo habitual.
Reinaba una organización no enteramente inteligible, pero rígida.
Facciones rotundas y demasiado plásticas.
Con mucho tiento, como si fuere de cristal.
Pesados y enrevesados con el diálogo como tartamudos.
Se dispersaron a impulsos de la curiosidad.
Pesados y enrevesados con el diálogo como tartamudos.
Se dispersaron a impulsos de la curiosidad.
Adoptar su anterior actitud.
Quedaron como paredes, sin ojos.
Severa orientación del fuego.
Severa orientación del fuego.
Purpúreo, humeante, melenudo, iracundo fuego.
Poseído de esa ira que, no desahogándose con gritos ni palabras, semeja la serenidad de los muertos.
rostro inflado y encarnado de un apoplético.
rostro inflado y encarnado de un apoplético.
Preparándose para dominar el río, siguiendo la vieja y buena costumbre de los bandoleros.
La tierra eternamente falaz.
El bandolero Andron Votinskií.
Estuche de piel de gamuza del reloj.
Estuche de piel de gamuza del reloj.
Íntima piedad.
El fuego, esa divinidad terrible y sumisa.
El fuego, esa divinidad terrible y sumisa.
El deseo de andar es el propio camino.
Acusar el rostro sombras terrosas.
Con un negro nimbo de espanto llegaba la muerte.
La crueldad de quien es eterno, la divina justicia de lo impersonal.
Grande, sumisa y tremenda serenidad de la desesperanza.
La timorata escrupulosidad de un asceta.
Sueño fugaz y tétrico de la fiera.
Superfluos decaían la zafia rudeza y el afán de referencias vitales.
Forman bandos los grajos que vuelven a sus nidos.
Lo acosaban esas ideas insoportablemente terribles y esas aprensiones que al caminante que viene de lejos le envenenan la aproximación a su casa.
La crueldad de quien es eterno, la divina justicia de lo impersonal.
Grande, sumisa y tremenda serenidad de la desesperanza.
La timorata escrupulosidad de un asceta.
Sueño fugaz y tétrico de la fiera.
Superfluos decaían la zafia rudeza y el afán de referencias vitales.
Forman bandos los grajos que vuelven a sus nidos.
Lo acosaban esas ideas insoportablemente terribles y esas aprensiones que al caminante que viene de lejos le envenenan la aproximación a su casa.
Las señales de las fronteras del tiempo.
El odioso parpadear del presente.
(Sascha Yegulev)
Negrura hipócrita.El odioso parpadear del presente.
(Sascha Yegulev)
(Un sueño)
Dachta. Residencia campestre.
Especial y pálida tristeza que suele inspirar a la gente el espectáculo de la alegría ajena.
(Ladrón)
VLADIMIR KOROLENKO
Negra taigá. Selva siberiana.
Versta = 1.067 metros.
Facciones con expresión de estupor que suele imprimir la muerte.
(Los cuervos)
Frances Hoddgson Burnett
Carácter iracundo y feroz.
Marcha de las antorchas.
Posesiones, honores y riquezas.
Disposición de emoción y de inquietud.
Simple inocencia afectuosa, que ignoraba todo motivo para estar azorado o asustado.
Grande y general sorpresa.
Harrison Ainsworth, "La Torre de Londres". El argumento se desarrolla durante el reinado de la reina de Inglaterra María la Sanguinaria. Costumbre de quemar viva a la gente, torturar y cortar cabezas.
Magnitud de la ganancia.
(El pequeño Lord)
Carácter iracundo y feroz.
Marcha de las antorchas.
Posesiones, honores y riquezas.
Disposición de emoción y de inquietud.
Simple inocencia afectuosa, que ignoraba todo motivo para estar azorado o asustado.
Grande y general sorpresa.
Harrison Ainsworth, "La Torre de Londres". El argumento se desarrolla durante el reinado de la reina de Inglaterra María la Sanguinaria. Costumbre de quemar viva a la gente, torturar y cortar cabezas.
Magnitud de la ganancia.
(El pequeño Lord)
GEORGE MOORE
Epístola dedicada a Rolleston.
Epístola dedicada a Rolleston.
Un arrebato de amistad.
Fracasar las consecuencias prácticas (la mente oficial repele la razón).
Los astilleros de Shoreham.
Recuerdos vergonzosos.
Imaginar el futuro.
Escuchar una monótona paloma.
Las ventajas, información fresca de primera mano.
Las historias que ha publicado el "Bow Bells".
Como si la viera más allá de la eternidad.
Estaba demasiado absorta con sus reflexiones para notar la brusquedad de la réplica.
El City and Suburban Handicap, carrera de caballos que se celebra en Epsom.
La Chester Cup. Carrera de caballos que se celebra desde el año 1824 el mes de mayo y en la que corren caballos pura sangre. Actualmente se corre a lo largo de una distancia de 3.728 metros.
Una derrota inesperada.
Deseando encontrar una excusa para echar la culpa a alguien.
Un comentario casual.
Murmurando, mostrando con su actitud que su mentalidad era opuesta a que las mujeres sintieran atracción de las carreras de caballos.
Entendió que no sería inteligente dar rienda suelta a lo que sentía. Tenía que aprender a controlar su temperamento.
Leopold Rothschild fue un famoso empresario de carreras de caballos miembro de una poderosa familia de banqueros.
Pastillas Beecham. Laxante patentado el año 1842 por Thomas Beecham.
No podía escapar al anzuelo de su sarcasmo.
Hambrienta alegría.
La fuerza con la que deseaba golpear a los espías de los caballos.
Sospechando la verdad.
Sofocada con la vergüenza.
El Anuario de Peter Parley, Regina Maria Roche, "Los niños de la abadía", "La misión de amor de Rhoda". Los libros de su madre.
Y pasó la página mientras se preguntaba qué misterios escondían aquellas letras.
Plymouth Brethren. Secta religiosa protestante fundada el año 1820 que repudia los usos eclesiásticos tradicionales.
Los escrúpulos que concernían a la rectitud de su negocio.
La estaba defendiendo, desviando las cuchilladas o permitiendo que cayeran con suavidad.
Intensa serenidad, acopio de fuerza mental.
Hunt Steeplechase. Carrera de larga distancia y obstáculos difíciles que proviene de antiguas competiciones inglesas.
Downs. Colinas al sur de Inglaterra.
Un discurso anecdótico.
Invadida con la languidez que los buenos recuerdos le producían.
El verano dormitaba dorando el césped sobre las colinas.
Pretextó falta de dinero.
La garantía de la victoria se fijaba a todos los rostros.
Era el tema de la conversación como si guardara dentro de la despensa los hilos del destino.
Cuando escuchaba pasos fuera salía como una pequeña avispa molesto de la intromisión.
¿No son las mentiras nuestro destino natural?
Oyes hablar de las victorias, pero se menciona muy poco las derrotas.
El ruiseñor canta para su compañera que está dentro del nido.
Calcular la ventaja.
La fiebre del juego llegó a su ebullición y explotó en lugares inesperados.
El puente de patas de araña.
El hombrecillo preciso, tranquilo, metódico en cuya vida no había tenido cabida la más pequeña emoción.
Calculó cuánto quedaba de la historia.
Acusar de querer favorecer.
La discusión se enredó, hizo un poco de ruido y se estancó.
Registrar la apuesta.
Su conversación evidenciaba gran atractivo.
Acudir al rescate del pudor.
Relajación y ociosidad.
Los hombros adelante como el bauprés de un yate.
Repetir una acusación.
Una verosímil vaga asociación de colores del paisaje matinal y el nocturno.
Las alusiones irónicas no hostigaban su temperamento.
Aspecto sepulcral.
Murmurar alguna excusa.
Un gesto de enfado.
La sensación se desarrollaba y definía como una reflexión.
Rayos de pasión.
El temperamento y el orgullo.
Odio apasionado.
Una expresión mezcla de miedo y enfado.
Gesto furioso.
La habitual expresión grave.
Un bicho viejo, desagradable y mentiroso.
Había tenido una diferencia y estaba deseando vengarse.
El motivo de rivalidad y celos.
La invadió un desvanecimiento enfermizo. La carne había acudido a mejorar el ánimo.
Extender el rumor.
Un gesto de admiración.
Veracidad inglesa.
Algunas ocasiones lo barato sale caro.
Perros de cartón.
La explicación dada con impasible seriedad infantil.
Asombro cruel.
Un gesto de desdén.
Expresión temerosa.
Un gesto de lástima.
Seria resolución.
Un gesto de asombro.
Fuerte y fiero temperamento.
No puedo permitirme hábitos perezosos.
Los que trabajan hasta el ultimo día al final lo tienen más sencillo.
Algunas ocasiones las cosas terminan mejor de lo que imaginas.
Debemos aguantar lo mejor que podamos.
Había soportado años de sumas dificultades.
Inquietud y temor del futuro y dolor del pasado.
La muchedumbre desaprensiva.
Deslizar algún comentario ocasional.
Una alusión casual o una frase cortada indicaba lo que les estaba pasando por la mente.
Darse cuenta de la inminencia del problema.
Los deberes que le depararía la vida eran superiores a sus fuerzas.
Un inútil enfado.
Una perspectiva desalentadora.
Los hospitales no admiten sin una carta de uno de los benefactores. Los hospitales se mantenían gracias a las contribuciones de gente rica.
Los niños comenzaron a parlotear como pajaritos.
Los méritos de una novela barata.
Bajo el velo del sueño la realidad se distorsionaba.
Recuperando gradualmente el sentido de la realidad.
La alegría socarrona de la calle llegaba con el viento de la noche.
Un gesto triunfal.
Silencio y serenidad científica.
Administrar cloroformo. El olor empalagoso del algodón hidrofílico que respiró le llenó el cerebro hasta la náusea; la vida se apagaba ligeramente.
Su entidad singular semejaba haber desaparecido completamente; existía como una atmósfera sobre el bebé y estaba absorta con esta vida de su vida, inconsciente como una esponja bajo el agua templada con el mar.
Exhortaciones remotas.
Una expresión de sagrada ternura.
El gesto irritado y confuso que produce el exceso de actividad con muchos altibajos.
Su sensibilidad se había puesto en marcha.
El asilo de pobres. Institución mantenida con el erario publico donde los pobres trabajaban por dinero.
Siguiendo otra línea mental.
El vago lamento de un niño.
Suponer vagamente sin pararse a reflexionar.
Víctima de una conspiración de gran alcance.
Expresión sombría.
Hablaba a su manera tranquila e impasible encontrando las palabras de forma inconsciente.
Un gesto extraño.
Actuaba de forma legal. Pero le pudo el temperamento.
Comentarios furiosos.
Sospechar vagamente.
Escapar de una realidad demasiado asfixiante.
Aguantar la presión real.
Cuyo temperamento al momento iba más deprisa que su discreción.
Incluso encontraba extraño que una pálida luna despejada flotara arriba en el cielo y tuviera que sufrir.
El delirio de su miseria.
La ciudad no era más que una débil sombra de la cristalina tranquilidad de la noche.
La luna daba vueltas tristemente.
Se había librado del carácter de la familia.
Propensa a un tipo de ataques de histeria.
Invadir una vergüenza odiosa.
Su mente giraba como un delirio.
Un gesto de repulsión instintiva.
Encendida y ahogada de vergüenza.
Indignación contenida.
La oficina de registro. La oficina de empleo donde los criados de más rango iban a buscar empleo.
Una atmósfera de pobreza.
El Café Monico, el moderno Criterion.
La muchedumbre semejaba un sueño turbio y ruidoso.
Mantener las existencias de sellos de la oficina del registro.
Una letra muy bella clara y redonda.
Desarrollar un instinto de sabueso.
Sermon-paper, folios grandes que se utilizaban para escribir sermones.
Retomando la conversación en el punto exacto.
El transcurso de la conversación.
Los miembros de Plymouth Brethren se dividían como Open Brethren, que admitían referencias de gente externa mientras estos no se opongan a sus doctrinas y los Exclusive Brethren que no admitían unión ninguna con cualquier tipo de personas más que lo estrictamente preciso.
Margaritas de otoño.
Alargó los brazos con un hermoso gesto de bienvenida.
El sonido de las manzanas que caen tras la oscuridad, una brisa que temblaba en las copas de los manzanos.
La actitud preñada de significado.
Tono enérgico y jovial.
El tren traqueteó.
El ataque pasó y su rabia asumió la forma de un porfiado silencio.
La satisfacción serena.
La miseria, la pasión, la desesperación comparadas con una tranquila existencia.
La persuasión de que la desgracia era parte sustancial de su vida.
Manera amable, íntima y musical.
Haber sufrido brutalmente.
Las novelas sensacionalistas francesas.
Me pudo el carácter.
Tono obstinado.
El pasado no puede remediarse.
El rostro tranquilo y contenido.
Asfixiar la emoción.
En Boulogne todos hablan inglés.
Beber cerveza Burton.
La sensación del amor.
Un gesto extraño de abatimiento.
El momento estaba cargado de trascendencia aunque las palabras que salían de sus labios semejaban casuales.
Un barco de juguete, un patrullero de aparejo con tres velas y un solo mástil.
El silencio se hacía más paralizante cada momento.
Había una vaga sensación de tristeza con la despedida que nadie entendió.
Examinando absorta el problema de su vida.
Una vida de apuestas y alcohol.
Tono de bienvenida.
Un matrimonio sin hijos es un paisaje desolador, las preocupaciones y la ansiedad ¿para qué?
Una visión instintiva de deseo.
Su voluntad había sido vencida con una fuerza que no podía controlar ni entender.
El suspense la irritaba.
La novela semejaba pálida y convencional comparada con la dura página arrancada de la vida.
Ánimo adorable y benévolo.
Enfrascado con una conversación.
En algunos pubs ingleses se podían llenar las propias jarras y botellas a la entrada. Se decía entonces que el pub tenía jug-and-bottle entrance.
Un pub libre, free house, un pub que no estaba asociado a ninguna cervecería ni fábrica de cerveza y que podía vender lo que el propietario decidiera.
Supo por su tono que cualquier argumento sería inútil.
La indiferencia de uno cuya vida entera está dedicada a una pasión y que no puede atraerle nada más.
Bebía licor de botella. La bebida de botella es más cara que la de grifo que beben la mayoría de clientes.
Las carreras eran cuestión de cálculo.
La premonición no estuvo a la altura de las circunstancias.
¿Por qué han de preocuparse de los accidentes aquellos que se guían de los presagios?
Las señales y los presagios están encima de cualquier cálculo de pesaje.
Expresión tranquila y divertida.
Los cálculos sobre el pesaje.
Recordar la conversación con la claridad con la que rompe el alba.
Unirse a la conversación.
Apostar según los cálculos, los sueños y los caprichos. El tipo que sigue los favoritos, el que apuesta según la monta del jinete, el que hace una apuesta aislada cuando se entera de algo bueno, el que apuesta de forma regular siguiendo un sistema, el que dobla la apuesta o el que apuesta según el humor que tenga. La empresa de siempre. Solo hay un tipo al que no puedo soportar. Mr. George Buff. El que apuesta en el hipódromo.
Cansar la conversación.
La raza y la estirpe fuerte de los caballos.
¿Qué importaba la opinión de un jinete de carreras de obstáculos en una carrera de velocidad?
Algún comentario casual.
Las reminiscencias de los tiempos dorados.
Los caballeros podían apostar a préstamo en clubs u oficinas, pero la capa trabajadora solo disponiendo de dinero efectivo estaban obligados a apostar en los hipódromos. Las apuestas de los clubs eran ilegales.
Preferencias, prejuicios, presagios, soplos o el talento y la suerte de un jinete favorito.
El sueño al aire libre frágil y superficial.
Un insulto cruel.
Repetir con solicitud.
Una montaña rusa disparada a ficticios peligros; este falso viaje era amenizado con la música de una orquesta de títeres.
El instinto de retirada se había apoderado de un enorme rebaño.
Un buen Stilton fue muy apreciado.
Estudiar científicamente las estadísticas de rendimiento.
Un momento de estéril reflexión.
Liderazgo colateral.
Una frivolidad, una inmerecida severidad o una excesiva indulgencia.
La percepción se nubló de repente.
Acusar de estafar.
Solo había una cosa que hacer, endurecer el gesto y esperar la suerte.
Las apuestas matinales.
Abandonando una reflexión involuntaria.
Experimentar una sensación de peligro.
Cháchara balbuceante.
El laberinto del Soho.
Mañana se encontrará fantásticamente mal.
El diminutivo cariñoso la emocionó.
Un pequeño fondo de reserva.
Expresión asustada.
La ilusión de que la acusación no fuese capaz de probar su parte.
Se presentaron nuevas pruebas y se recomendó retirar la petición de inocencia. Los esfuerzos de los abogados se dirigieron a paliar la sentencia.
Fines infames.
Impreso el sello de la verdad.
La descripción proporcionada por la acusación.
Estaba muy asustada como le pasa al rebaño del campo cuando el cielo oscurece y la tormenta se aproxima.
La vida ha pasado como un corto sueño; la vida no es nada. Debemos reflexionar lo que viene después.
Preocupándose de cosas que no se podían solucionar.
Son los caprichos lo que termina con los que apuestan. La ventaja de los corredores de apuestas es que apuestan según reglas, no por capricho.
Iba cediendo gradualmente a la cólera.
Las diferencias domésticas de la opinión.
Las circunstancias del caso.
La planta de las apuestas.
Extender las conexiones.
La reflexión de asuntos graves e importantes.
Un gesto de miedo y aflicción.
Un gesto de lástima.
Gesto alegre.
Acusar de descuidar.
La historia de amor eterna mezclada con la muerte.
Una expresión de empatía auténtica.
Gesto de miedo.
Agotado con la expectativa.
Dentro estaba hueco como una concha.
El umbral de la muerte.
Aguardando la tarde fatídica.
Las esbeltas criaturas con forma de galgo.
Sentía que le partía la cabeza en dos como un trozo de calicó.
Calcular el dinero suficiente.
Resonar la tos fuerte y sepulcral.
Poder cubrir la apuesta.
El instinto de la vida.
Superada con el dolor.
Los jardines bajos estaban llenos de vapor venenoso y los delicados árboles semejaban los fantasmas de los tuberculosos.
Años de tarea, sufrimiento y decepción.
La perspectiva del asilo de pobres.
La invadió una extraña debilidad.
Una extraña preocupación.
El rostro puntiagudo de raposa.
Habían pasado los años, un sueño cuyos engranajes de enlace habían desaparecido.
Una auténtica novela de amor.
Le dolía su indiferencia.
Consternada con la furia de sus ojos.
Un templo de disidentes.
Una vida de tribulaciones y conflictos.
Cuando la edad y la soledad se apoderan, las realidades de la vida se alejan y percibimos el misterio que nos rodea.
Casi libre de inquietud.
Sobre un gran puente con largas patas de araña un tren se meneaba como una serpiente.
La tristeza del destino.
(Esther Waters)
Pater no podía más que escribir cautivadoramente.
Las vistas y los sonidos del mundo exterior podrían haber hecho menos atractiva la propia finalidad de Pater con el fin de elevar su literatura a la condición de música.
La máscara, la cautela de Pater era el tema de muchos debates cuando acudíamos al Earl Terrace de High Street.
Dudo si nunca abandonó tomar notas excepto cuando dormía.
"Confesiones de un joven" es una suerte de génesis; la semilla de todo lo que he escrito desde entonces se encuentra aquí. También es un libro que puede ser descrito como una declaración de ideas y de gustos, de mi amor de la mejor literatura moderna y de la pintura moderna y de mi antigua debilidad de las mujeres delicadas y apasionadas.
A finales de los años setenta pasábamos las noches en el Nouvelle Athènes.
Richepin, "Les chansons des gueux".
Maupassant, "Maison Tellier.
He sentido el estímulo de muchos impulsos y he seguido el rastro de muchas huellas y cuando perdía una pista seguía otra con la tenacidad del instinto más que con el fervor de una persuasión razonada. Se producían momentos de fatiga y desaliento, pero no eran imperecederos; una palabra pronunciada, un libro leído o rendido a la atracción del entorno me hacían mudar pronto de dirección olvidadizo de fracasos pasados.
La primera llamada o eco-augurio.
Leer una novela con avidez, pasión, vehemencia.
Un libro llamado "The Doctor´s Wife", una mujer que amaba a Shelley y a Byron.
Un lago irlandés de color verde claro.
La carrera de caballos de la Liverpool Steeplechase.
El valor y la importancia de una carrera de caballos.
No es sencillo desplazar un ideal erigido sobre un pedestal.
Deposité todo lo que pude mi familiaridad con el futuro ya que se extendía ante mí todo un horizonte de vagancia.
James Browne, primo de George Moore, fue el modelo del personaje de Barton de "A Drama in Muslin" (1886).
El fenómeno del eco-augurio, las palabras que se oyen un inesperado momento que sin ningún llamamiento a la razón animan a creer.
Los materiales y el ingenio innato que poseo.
El yo incompleto que era todo lo que me habían permitido las ataduras del hogar. Yo fantasmagórico.
El yo cuya creación me había empeñado sacar adelante con entusiasmo.
Exploro este doloroso momento psicológico.
Quería sentir el pulso de la vida.
Un entretenimiento, un material para desprenderse con eficacia de cualquier compostura.
Inclinándome al ateísmo era habitual oponerme a la rutina de la reflexión diaria.
La escuela y Oscott.
Una fiesta de tarts y mashers del Derby.
Dotado de un instinto muy agudo de supervivencia ni apostaba ni me emborrachaba ni contraía deudas ni me casé secretamente.
Unos ojos grandes llenos de inteligencia y satisfacción.
Se produjeron las reflexiones habituales respecto de las ocasiones que depara la vida.
Impresiones febriles.
Seleccionar alguna frase representativa de las horas de conversaciones vacías.
¿Por qué no podría yo vivir sin una aguda y presente consciencia de la vida? ¿Por qué no podría yo amar sin preocuparme del tictac del reloj del silencio perfumado de la habitación?
La actitud habitual de su ánimo y de sus diversas transformaciones, las aparentes refutaciones y de cómo se podrían explicar, catalogar y reducir a una regla eran para mí una fuente de reflexión.
Mutuas confidencias; la emoción pasajera que despierta un arrebato de color y de perspectiva, los matices azulados que las puestas de sol veraniegas reflejan sobre un vestido blanco o las eternas verdades que son la muerte y el amor.
Sincero con mi amistad y leal con mi admiración.
La energía y el brío de sus disipaciones me arrastraba.
Los instintos del cerebro.
Encauzar la marea fuerte y alta de la mente humana.
Dos minúsculos ojos semejantes a endrinas.
La cocina literaria.
Manifestar amistad.
Manifestar una energía prodigiosa.
Una animosa especulación.
Yo era como alguien que cayendo estira los brazos a la busca de ayuda y que se agarra a la suave brisa. Qué terribles son las flaquezas y los deseos de la impotencia. Cómo agotan. La carga del deseo inalcanzable se volvió insufrible.
Los libros son como las personas; pronto sabes si te van a provocar una sensación dentro de la propia sensación hasta enfermar, hasta enloquecer la sangre y el cerebro o simplemente poner indiferente, irritado molestando desagradablemente las dulces e íntimas meditaciones. Muchos son los motivos para amar, pero solo quiero a una mujer o a un libro como la voz de la autoconciencia, una voz que no se había oído antes. Lo que da a saber las depravaciones femeninas de mis sentimientos. Soy femenino, morboso y perverso.
La intrincada animalidad de "Les Contes Immoraux" con personajes sin vida farragosamente creados de articulaciones que chirrían, maniquíes deplorables que se transforman como polvo cuando se cierra el libro y de los que solo permanecen los personajes del pérfido barquero y la desafortunada Dora.
Como un lucio tras un pececillo yo perseguía los libros de "Les Jeunes-France" a lo largo de los muelles y los soportales de París. Era un libro vacuo.
Durante meses me alimenté de la irreflexiva y morbosa literatura que el entusiasmo de 1830 hizo nacer. Los sombríos y sin sustancia pequeños retratos de "Gaspard de la Nuit" o la intrincada criminalidad de "Les Contes Immoraux" con personajes sin vida farragosamente creados de articulaciones que chirrían, maniquíes deplorables que se transforman como polvo cuando se cierra el libro y de los que solo permanecen los personajes del pérfido banquero y la desafortunada Dora.
Una de las condiciones imprescindibles de una creación artística es que debe ser singular; otra es que debe ser breve.
Los recuerdos deben ser vagos e inciertos aunque duraderos.
Una persona robusta, vulgar con la gran arrogancia del caserne (cuartel).
Las complejas y diversas casualidades de la existencia, las innumerables inflexiones de la vida.
Un paisaje inhóspito, calcinado, con escasa fragancia a mar.
Los prosaicos solteros.
La creación de una existencia mental.
Actitud agresiva.
Ningún ser humano es más grande que la época que vive.
Respecto del epigrama y el aforismo la actividad del novelista es más enriquecedora que la del dramaturgo.
La estupidez oficial que se lee en los periódicos.
En el occidente de colores intensos se mantenían los ultimos matices y encantos del romanticismo; surgido de la claridad de oriente apareció el realismo con un impresionante resplandor de color y una luz mágica; se mostraba a lo alto de la apagada placidez del cenit como si fiera una bandera blanca oscilando débilmente y aparecieron los simbolistas y los decadentes. Nunca hubo un flujo y una confluencia repentina de pasión artística, de ambiciones dentro del alma humana, de furia apasionada, de fiebre desvanecedora, de eretismo (actividad intensa) cerebral. El fragor y el polvo de la batalla que los realistas libraban cada día seguía bajo el arrebol del atardecer, las armas de los románticos destellaban y la palidez anímica de los simbolistas percibía y esperaba sin que nadie se percatase de su presencia.
Proverbio alemán. <<Cuando el caballo está ensillado hay que montarlo>>.
Proverbio francés. <<Cuando se ha vertido el vino hay que beberlo>>.
El propósito del traductor nunca debería ser el de disipar la ilusión de lo exótico.
Impenetrable Buda.
Discretas sensaciones.
Buda sentado con triste meditación tranquilo como un hermoso atardecer.
Cualquier cosa no más real que una meditación estival.
Me acompañaría un bonito recuerdo, pero nunca más un placer factible.
Cenar en un gargote.
El Morley´s Hotel.
Los ingenuos pretextos de cualquier amante.
Palidecer como una violeta.
Dispuesto a aceptar las privaciones de una vida literaria.
Una casa extraña como todo cuando se examina minuciosamente.
Los numerosos motivos de separaciones y rupturas.
Honesta visión esencialmente inglesa.
Las palabras no transmiten todo el significado de los auténticos horrores de la realidad.
La extensa masa incoherente de Londres.
El "Nineteenth Century" con el artículo "La rehabilitación del proxeneta de la sociedad moderna" de W. E. Gladstone.
Sara presenta su hijo a una duquesa inglesa y abandona un país por el amor de Richepin.
La Respetabilidad, la Educación sigue ejercitando una rimbombante y debilitante influencia sobre la literatura. La audacia de la mente y de la expresión ha quedado aplastada y los convencionalismos son rigurosamente respetados. La presión que se ejerce desde el exterior es como la del agua sobre el buzo; tarde o temprano se cansará y sale a la superficie a respirar.
No la cosa propia, sino la idea de la cosa que evoca la idea. Schopenhauer tenía razón, no deseamos la cosa, sino la idea de la cosa.
Accionado con los motivos más loables Mudie cortó de cuajo nuestras cuotas de historias y durante cuarenta años fuimos aparentemente el pueblo más ético sobre la faz de la Tierra.
El rapsoda dio origen a Sófocles.
Mi enemigo era yo, las consecuencias de mi vida y de la educación que recibí y que me causaba un gran y verdadero inconveniente.
Poca gente es consciente de lo poco que sabe de los pormenores de la vida y son incapaces de apreciar la influencia de su pasado sobre su presente. El mundo visible no lo es más que para unos pocos y el mundo moral es un libro cerrado para casi todos.
Los personajes de una novela son la voz y los acontecimientos la orquesta.
"Joseph Coat" de David Christie Murray; "In Luck´s Way" de Byron Webber.
El arte como una secuencia rítmica de acontecimientos descritos con una secuencia rítmica de frases.
"Story of Elizabeth" de Anne Thackeray me llegó con la frescura y simple naturalidad de un jardín plagado de lilas y de un cielo azul. Una acuarela preciosa "con sus exquisitas y pequeñas descripciones llenas de aire, color, luminosidad, gracia, vida francesa vista a través de una dulce visión inglesa con las queridas pequeñas descripciones dulcemente evocadoras".
Margaret Veley, su preciosa novela "Damocles".
Walter Pater, "Marius the Epicurean".
Otra simple verdad desnuda.
La esencia específica, el oamazomo.
Humphrey Ward, "Robert Elsmere".
"Les Palais Nomades" está libre de esas plagas y parásitos de la actividad artística, las ideas.
He bajado el exagerado ego de las nubes de la semiinconsciencia y lo he desarrollado.
La sensibilidad para asimilar las diferentes potencialidades de la época, el menester de energía.
Schopenhauer. La carne no es efímera, sino la eterna creación del deseo de vivir.
La admiración con su sentido original de asombro (mîrâtio).
El placer animal del estómago.
Mi estómago y mi cerebro están dentro de la más perfecta armonía posible que se pueda concebir, iban de arriba abajo y siguen yendo con calculados movimientos absorbiendo y asimilando todo sin fricción ni obstrucción.
Digestiones mentales.
Los cerebros más peculiares de mi generación.
No pronunciar la letra h se veía como una particularidad de las capas bajas y de la que hacían mofa las categorías altas.
El publicista Tinsley.
Humor ruidoso y bronco.
Una casa con un carácter inconfundible, diferente.
La fama brutal y deslumbrante.
Todos buscamos notoriedad, nuestro deseo se hace desagradable, pero es menos atroz cuando se proclama con una trompeta de bronce que cuando se cecea el canto del humanitarismo.
Varias fases de júbilo.
Dichas puras y delicadas o complejas y violentas.
El "Imaginary Portraits" de Pater, el "Telegraph", el "Standard", el "Chronicle".
Los cómicos del salón de madame Récamier. El amor extendía sus alas con locuciones judiciales e intrigas políticas.
Wyndham debió haber reflexionado cuando planeó su gira europea.
Las Islas de los Navegantes, nombre que antiguamente recibía el archipiélago volcánico de Samoa.
El momento psicológico.
La hipocresía, el subterfugio y la sofistería de los titulares.
El hogar con sus restricciones familiares, asociaciones e influencias.
La fuerza que un monopolio otorga a Mudie and Smith.
La conversación se volvió cordial y agradable.
Un carácter persuasivo, leal a sus opiniones.
El río brillaba como la seda mojada con las orillas verdosas recubiertas con la exuberancia de junio.
La mejor defensa para esgrimir.
La expresión de las opiniones de algunas ratés (omisiones) que se recogen.
Tuve que replegarme a la defensa original, a la de que un ser humano se transforma; la reflexión opuesta no debería ser confundida con las opiniones que se mantienen y que se atacan.
Gravedad y tristeza.
Sentí acusadamente la sensación de inferioridad.
Tolstoi tardó seis años para escribir "Ana Karenina" y diez para "Guerra y paz".
El papel que juega la casualidad o la suerte con la composición de las creaciones artísticas.
Dos elementos son precisos para el éxito de una empresa literaria; la casualidad y la persona. Un artículo breve de un periódico, una palabra oída de una conversación, la vista de un paisaje especial bajo una luz especial, un momento de ennui o de alegría forman el tipo de cosas que deciden la primera idea de un libro. Filosóficamente el azar no existe; pero aceptando la palabra con su significado cotidiano ¿quién puede decir que el azar no tiene una gran culpa para la creación artística?
De una novela uno quiere que haya proporción, quiere un crescendo.
La escarpada arista de un abismo sin retorno.
Edward Martyn.
Mis compañeros de viaje a Dublín fueron Lady Gregory y Yeats.
Sir Thomas Lipton ha gastado su dinero con yates.
Proverbio francés. <<C´est l´occasion qui fait le rang>>.
Andrew Lang traductor de "Theocritus".
Pater dijo que uno debe escribir en inglés como si fuera un idioma muerto.
(Confesiones de un joven)
Pater
Un libro atractivo y original por sus encantadoras críticas, su aristofánica dicha o como mínimo placer de la vida, su inagotable vivacidad.
A pesar de su alegre, bondadoso y genuino sentido de la belleza de muchas cosas es una manera cínica de ver la vida y, por tanto, exclusiva.
Muy amena pluma.
Yeats
Lamark, Bernard Shaw, Wells, George Moore, grandes hombres publicos, carecen de significado fuera del tiempo y de la circunstancia.
Wilson
George Moore escribía según la costumbre francesa, no según la inglesa.
W. B. YEATS
Envío para Ezra Pound, 1928.
Ezra Pound vivió varios años en Rapallo.
La generación de Ezra Pound ha sobrevivido al movimiento romántico.
Aunque Ezra Pound no es viejo hablamos de Guido Cacalcanti.
Las ciudades repletas de gente y de excitación.
Un argumento, una crónica de acontecimientos, un discurso.
La calculada violencia de los opresores.
Mi generación ha visto perecer una gota de histeria al fondo de la copa.
La parte laboriosa o maquinal de mi libro está terminada; lo que me queda añadir es como un descanso momentáneo de escribir verso. La sensación de haberme descargado de un peso.
El camino de montaña de Rapallo a Zoagli es semejante a algo dentro de mi mente.
El otro día me dijo Lady Gregory <<Está usted mucho más formado que hace diez años y tiene razonamientos mucho más sólidos>>. Con lo que presento como prueba "La torre" y "La escalera de caracol" para mostrar que mi poesía ha ganado fuerza y serenidad.
El ensayo de Yeats "Per Amica Silentia Lunae" establece una distinción de la perfección que proviene del combate del ser humano consigo y la de un combate con las circunstancias.
Preguntas vagas o confusas.
Mi atracción llegaba al grado máximo.
Alguna aplicación atropellada.
El ataque de John Stuart Mill a William Hamilton.
Con Blake, Swedenborg y Boehme mi iniciación de los <<discípulos herméticos>> me había llenado la cabeza de imágenes cabalísticas.
Un olor astringente como a madera.
El imponente horror medieval a la brujería.
El olor natural viene y se va gradualmente mientras que el sobrenatural se presenta de repente y desaparece de igual manera.
Expresiones exageradas e intempestivas.
"Una visión" publicada por Werner Laurie, 1925.
Los ojos redondos como de pájaro de la escultura bizantina mirando el milagro.
Las distinciones de las que depende la coherencia del todo.
Leer algún relato detectivesco para despejar la cabeza por la noche.
El remolino de Empédocles.
Las disputas que preceden las comunicaciones más claras y que semejan derivar de una independencia llevada hasta la injusticia a causa de la dificultad de mantenerla.
Conceptos filosóficos vagos y triviales.
Árido y difícil simbolismo. Sin embargo, este ha acompañado la expresión que une la mente dormida con la vigilia.
El animismo en vez de preguntar si no es casi increíble como enteramente nuevo u olvidado se adhiere a lo vago y evidente.
Los viejos juristas, banqueros y hombres de negocios que todo hábito y memoria se han puesto a mandar el mundo mantienen su ascendiente moral.
Recitar <<Eugene Aram>>, novela de Bulwer Lytton, 1832.
Están fuera de lugar los viejos compositores de salomas (cantos de marineros) los tiempos del vapor.
Los escritores somos hijos de la opinión publica aunque desafiamos a nuestra madre.
Las generalidades que pertenecen al pasado, al cielo abstracto.
Amar el rostro cruel de la ramera Sabiduría.
El universo es un gran huevo volviéndose perpetuamente del revés sin romper la cáscara.
Los caprichos o las formas de expresión intensas.
El auténtico valor es el dominio propio en una situación imprevista.
Enamorarse volcánicamente.
El discernimiento es una Judith que hunde su acero en lo que ha excitado su carne; aquellos que aprueba mi mente se me antojan debido a una inflexión de mi luna insípidos.
"Speculum Anglorum et Hominum" de Giraldus impreso en Cracovia, 1594.
Una disposición de excitación contenida.
Los preciosos objetos de malaquita que se venden en Florencia.
Un conversador atento.
La actitud turbada, misteriosa como si guardase algo dentro.
El ser humano que planta árboles a sabiendas que el descendiente más próximo al que darán sombra será el nieto es generoso.
Probar con demostraciones prácticas.
Con la palabra memoria Platón simbolizaba una referencia con lo intemporal.
Sustituir el sentido con el sonido y la reflexión con el ornamento.
Destacar con claridad preternatural.
Ese estilo extravagante que ha aprendido de Pater.
El látigo de nueve colas de la mente.
El Jorobado y el Santo y el Loco son los ultimos crecientes.
<<Cuando la Discordia -refiere Empédocles- ha llegado al abismo más profundo del remolino (el límite, no el centro, señala Burnet) y la Concordia ha alcanzado su centro se reúnen las cosas para ser solamente uno llegando gradualmente, acudiendo cada una de un lugar diferente; y mientras se mezclan la Discordia se retira al límite; con idéntica proporción que va precipitándose fuera va entrando una dulce, eterna corriente de Concordia ilimitada.>> Y en otra parte <<Nunca se vaciará el tiempo ilimitado de ese par; y predominan alternativamente mientras ese círculo se completa y retroceden la una ante la otra y aumentan con su momento asignado>>. A esta Discordia o Guerra la llamó Heráclito <<Padre de todos y rey de todos; a unos los ha hecho dioses, a otros hombres; a algunos esclavos y a otros libres>>.
Según Simplicio (citado por Pierre Duhem, "Le Système du monde") comentador tardío de Aristóteles, la Concordia de Empédocles fabrica con las cosas <<una esfera homogénea>>; luego la Discordia separa los elementos y de esta manera hace el mundo que habitamos; pero la esfera formada con la Concordia no es una eternidad inmutable, ya que la Concordia o el Amor no nos ofrece sino la imagen de lo inmutable.
La identificación del tiempo con lo interno es antigua como la filosofía; todo lo que podemos tocar o manejar tiene forma o magnitud mientras que nuestras reflexiones y emociones tienen duración y cualidad; una reflexión se repite o es habitual. A la vez el tiempo puro y el espacio puro, la pura interioridad y la pura imparcialidad -el plano que forma el cono y el punto de su vértice- son abstracciones o ficciones de la mente.
Lo que yo llamo Cono de las Cuatro Facultades, que son lo que el ser humano ha hecho a lo largo de una vida pasada o presente, el cono interno se llama cono de la tintura antitética porque se efectúa y mantiene con el conflicto con su opuesto; el cono imparcial recibe el nombre de tintura primaria porque como la interioridad -para Empédocles la Discordia- tiende a separar al ser humano, la imparcialidad nos devuelve a la masa de la que comenzamos.
Dentro de los conos primario y antitético se mueven las Cuatro Facultades. La Voluntad y la Máscara, la Mente creadora y el Cuerpo del Sino.
Describo la Voluntad y la Máscara como la voluntad y su objeto o el es y el debe (o lo que debería ser); la Mente creadora y el Cuerpo del Sino como la mente y su objeto o el sujeto cognoscente y lo sabido; las dos primeras son lunares o antitéticas o naturales, las dos segundas solares o primarias o razonables. Un ser humano particular es catalogado en el diafragma según el lugar de su Voluntad o selección.
La plasticidad de acero del agua.
Para un avaro su propio dinero sería sensual; el dinero de otro concreto; el dinero que él no tiene una idealización, el dinero abstracto del que hablan los economistas.
Predominar el instinto o la especie precediendo a la reflexión.
William Morris, "El agua de de las Islas Maravillosas".
Lo que reflexiona, lo que adquiere experiencia.
Una actitud insincera.
George Borrow tuvo momentos que estaba suficientemente fuera de fase como para darse cuenta de que era ingenuo y para alardear de una imaginaria interioridad intelectual como cuando hacía ostentación de increíbles accesos de horror o de su dominio de numerosos idiomas.
Carlyle al igual que Macpherson ni podía ni quería preferir otra cosa que los personajes de la historia, pero los utilizó como las metáforas de una vasta retórica para expresar sentimientos que aunque semejaban suyos eran de predicadores o de congregaciones irritantemente ignorantes. Fue atronadora, agresiva su retórica y grande su energía y pasaron dos generaciones antes que los hombres se dieran cuenta que no había escrito ni una frase de tosco humor que perdurase con la memoria. Aunque es dudoso que una mera plasta de huevos de hormiga pudiera contribuir algo cuando había tal grande falta de sinceridad.
La divinidad de la mitología escandinava que se colgaba al borde del precipicio tres días como sacrificio.
John Morley comenta de Charles Stewart Parnell que tenía la mente menos dinámica que había visto, la característica de una fase con la que se pierde la curiosidad práctica desde el instante que no media ninguna meta personal y siguen sin encontrarse la curiosidad filosófica y artística. Parnell dio a sus contemporáneos una impresión de impasibilidad.
Sustituir la furia intelectual con alguna forma de orgullo personal.
Haber alcanzado el grado ultimo de engaño y venir un frenético deseo de verdad del yo.
Hombres y mujeres para quienes los hechos son un peligroso narcótico o sustancia embriagadora.
La fase que el instinto antes de las complicaciones de la reflexión alcanzó el máximo de su fuerza persuasiva.
Defender las ambiciones temporales opuestas con algún tipo de superficial acción intelectual; el panfleto, la soflama, la espada del bravucón.
El máximo grado de sensibilidad.
La energía sin finalidad del niño.
Un país mágico, alguna mitología culta o burlesca.
Odio histérico.
El ser selecciona con el intelecto algún objeto de deseo para una representación como Imagen y arrebata el objeto. Entonces el intelecto debe reemplazar el objeto arrebatado con alguna nueva imagen de deseo.
La percepción del peso y la masa de las cosas.
Casi no puede recrear el ser humano, si se le priva de la acción y el intelecto que concierne a la acción, su vida onírica.
El curso del río tras un salto abrupto prosigue a un nivel inferior.
Cometer indiscreciones calculadas simulando impulsos.
Profesional, temperamental o técnico.
Un líquido derramado va perdiendo densidad por cuanto se extiende hasta transformarse como una mera película.
En el mundo de la acción los hombres morirán o matarán por una síntesis abstracta y les alejará de los escrúpulos y del compromiso.
La búsqueda de la Unidad de lo Real con una unica facultad y no de la Unidad del Ser con el uso de la totalidad de las facultades ha separado al ser humano de su genio.
La acción es una forma de abstracción que ahoga todo lo que no puede expresar.
Herbert Spencer en una casa de huéspedes embadurnando las uvas con un corcho manchado de tinta para teñirlas de su color favorito, el rojo impuro.
Eliminar del estilo lo personal buscando el frío metal y el agua pura, pero deleitarse con el color y la idiosincrasia.
Pasividad, plasticidad.
Utilidad abstracta, economía, un mecanismo para prolongar la existencia.
Cada mes o fase es un doble remolino o dos periodos, uno solar y otro lunar que según Heráclito <<viven cada uno la muerte del otro, nunca cada uno la vida del otro>>.
El este como símbolo de la cabeza de la astrología.
Según Flinders Petrie, "The Revolutions of Civilization", la fase oriental va quinientos años delante de Europa y llama la atención sobre la caída de Europa.
Las encarnaciones atribuidas por Platón a su hombre de Ur, un ser humano ideal cuyo año singular de 36.000 años a 360 encarnaciones se identificó generaciones después con el año platónico.
Ninguna decadencia puede gastar lo que no ha ganado.
<<La eternidad también -explica Hermes en el diálogo de Asclepio- aunque inmóvil semeja estar en movimiento>>.
Hallamos el específico instante de la vida a la muerte lo que las antiguas leyendas llamaban Transformadores de Formas.
Según Porfirio las imágenes se generan dentro de la mente a partir del agua.
Un peligroso súcubo o un íncubo viviendo merced a los sentidos y los nervios de otros.
El gran egoísmo animal.
Las apariciones de los ánimos que rondan los lugares donde han vivido.
Un Robinson Crusoe que muriese en su isla sin tener siquiera un Viernes como testigo podría obtener de su propia cáscara la información precisa; pero su retorno de los sueños sería imperfecto. Carecería de enterramiento físico y anímico. Al ser el contenido de su cáscara demasiado él seguiría viendo a través del cristal de la ventana sobre el que exhala su aliento.
Una creencia de los campesinos irlandeses según la cual la mente del padre o de la madre puede traer buena suerte a los hijos o a la familia.
Es del retorno de los sueños de los difuntos y no de las personas asociadas a nuestro pasado de donde obtenemos las imágenes que nos vienen cuando dormimos habitualmente. Gran parte de la confusión de un sueño proviene del hecho de que la imagen pertenece a una persona desconocida mientras que la emoción, los nombres, el idioma nos pertenece solo a nosotros. Desechamos la memoria concreta (perdemos contacto con el registro tal como este nos afecta) pero no la memoria abstracta cuando dormimos.
El "Himno del alma" de Bardesan.
César fue muerto el 15 de marzo, el mes de las víctimas y de los rescatadores.
Empédocles y Heráclito reflexionaban que el universo tenía primero una forma y luego la opuesta con perpetua alternancia, lo que significa que las cosas eran consumidas con el fuego cuando los planetas se situaban en el signo de Cáncer de manera que se podía trazar una línea uniendo sus centros con el de la Tierra y que eran destruidas con el agua cuando estaban en Capricornio, un fuego del cielo con el que el universo vuelve a su semilla y un agua lunar, la Naturaleza. El Amor y la Discordia, el Fuego y el Agua dominan alternativamente; el Amor volviendo las cosas al Uno y la Discordia separándolas; pero el Amor y la Discordia son la eternidad inmutable.
La doctrina platónica de la imitación; las condiciones opuestas copian la eternidad.
A Platón y a Sócrates solo les importaba la belleza y la verdad, pero Plotino creía que cada ser tenía su Idea, su propia réplica eterna; el Año Máximo y los Grandes Años que eran sus meses se transformaron como un río de almas. Para la generación siguiente el Eterno Retorno aunque perduraba para el río de almas general había cesado para el sabio porque podía sustraerse a dicho ciclo.
Anaxágoras declaró que era la mente y no el conflicto de los opuestos la que había creado el mundo. El ser humano apasionado y fragmentario, lo que habían imaginado los grandes poetas y escultores comenzó a quedar atrás; la imagen se dirigió al ser humano divino y al diablo ridículo.
Ver el cielo vago e inmóvil.
Amamos solo lo que pertenece a la visión porque no queremos transformar lo que amamos.
Las convencionales metáforas de un editorial.
De Bizancio Satanás era la Serpiente semidivina, nunca el espantapájaros cornudo de la didáctica Edad Media.
¿Qué ensueño olvidado, qué iniciación tal vez sacó del monasterio la sabiduría y creando a Merlín la unió a la pasión? Cuando el Merlín de Chrétien de Troyes se enamora de Ninian muestra a esta una caverna adornada con mosaicos de oro y construida por un príncipe para su amada y le cuenta que dichos amantes murieron un día unidos y que fueron depositados <<en la cámara donde habían encontrado el placer>>. Seguidamente levanta una losa de mármol rojo que solo sus artes poseen la aptitud de mover y se los enseña envueltos con sendos sudarios de jamete blanco. La tumba permaneció abierta como deseo de Ninian para poder volver a la caverna con Merlín a pasar su noche próximos de estos amantes muertos; pero antes que llegase la noche Merlín se sumió en la tristeza y se durmió; entonces Ninian y sus acompañantes le cogieron de la cabeza y los pies, lo depositaron en la tumba y volvieron a poner la losa; porque Merlín le había enseñado las palabras mágicas y desde esa hora nadie ha visto a Merlín vivo ni muerto.
No hay en todo el "Parsifal" alemán una ceremonia de la iglesia; ni boda ni misa ni bautismo; encontramos esa extraña creación del romance o de la vida, el trance amoroso. Parsifal al no ver nada ante sus ojos sino la imagen de su amada ausente vence caballero tras caballero; finalmente al despertar ve perplejo abollados su espada y su escudo; y es a su dama a quien reza Parsifal el día de la batalla, es el alma de su dama separada de su cuerpo dormido o extraviado la que acude a él y le da la victoria.
El periodo de 1005 a 1180 es una creación de los relatos artúricos y de la arquitectura románica.
El cuaderno de dibujos de Villiard de Honecourt. Siglo XIII.
Las memorias del capitán White.
(Una Visión)
Joyce
Tenían mucho en común psíquicamente; como una cosa entendida dormían su sueño en la unica dulce madre oscilante como los patanes de Yeats.
Y sherrigoldies yeats ymgnays.
Heard
Me encontré, de pronto, como diría <<el pobrecito y bueno Mr. Yeats>> en <<un claro rumoroso de abejas>>.
Wilson
La prosa como el verso del primer Joyce mostraban la influencia de Yeats. Este poeta está presente en "Ulysses". Pero las convenciones del lírico romántico, de la prosa estética fin de siècle no pueden para Joyce acomodarse a la realidad de la experiencia.
ARTHUR SYMONS
¿Qué son las palabras sino símbolos casi inicuos como las letras que las componen, meros sonidos de la voz a los que hemos pactado dar verosímiles significados como hemos accedido traducir estos sonidos con esas combinaciones de letras? El simbolismo comenzó con las primeras palabras pronunciadas por el primer ser humano cuando nombró a todo ser viviente o antes en el cielo cuando la divinidad creó el mundo. Vemos estos comienzos realmente del Simbolismo en la literatura, una forma de expresión el mejor de los casos aproximada, esencial pero caprichosa hasta que ha obtenido la fuerza de una convención para una realidad invisible percibida con la autoconciencia. Algunas ocasiones se nos permite esperar que nuestra convención sea de hecho el reflejo y no simplemente el signo de esa realidad invisible. Mucho hemos hecho si hemos encontrado una señal distinguible.
Originalmente usado por los griegos para denotar las dos mitades de la tableta que dividieron como prenda de hospitalidad llegó a usarse para cada signo, fórmula o rito con el cual los iniciados de cualquier misterio se identificaron secretamente unos a otros. Gradualmente la palabra amplió su significado hasta que llegó a denotar cualquier representación convencional de la idea con la forma de lo invisible con lo visible.
Con este sentido la palabra simbolismo se ha utilizado para describir un movimiento que la ultima generación ha influido profundamente el curso de la literatura francesa. Esas palabras usadas de algo muy vivo, variable e irresponsable como la literatura son como deben ser a menudo los símbolos meros compromisos, meras indicaciones. El sentido inconsciente de Gérard de Nerval a quien remito el origen particular de la liteatura que llamo simbolista. Una literatura para la que el mundo visible no es una realidad y el mundo invisible no es un sueño.
Los Goncourt atraparon al impresionismo para representar los aspectos fugitivos de un mundo que existía solo como una cosa de espacios planos, ángulos y movimiento coloreado en el que el sol y la sombra eran los artistas como las disposiciones de ánimo no menos fugaces eran los artistas de las autoconciencias meramente receptivas de hombres y mujeres.
Leconte de Lisle transformó el mundo como piedra; pero vio más allá del mundo solo una pausa de la miseria con un Nirvana nunca sutilizado al éxtasis oriental.
Y para estos escritores la forma apuntaba sobre la totalidad de las cosas a ser precisos, a decir más que a sugerir, a decir lo que tenían que decir de manera completa y que no quedara nada que pudiera ser tarea del lector adivinar.
Mientras, había surgido lo que vagamente se llama Decadencia. Ese nombre que rara vez se usaba con un significado específico generalmente se lanzaba como una reprobación o un desafío. A algunos jóvenes les complacía llamarse decadentes con la emoción insatisfecha disfrazada de vicio no entendido. De hecho el término está en su lugar solo cuando se aplica al estilo. La Decadencia desvió la atención mientras se preparaba lo que ha cristalizado bajo la forma del Simbolismo más serio con el que el arte vuelve al camino que conduce a través de las cosas bellas a la belleza eterna.
Todo es una pretensión de animar la literatura, de evadir la vieja atadura de la retórica, la vieja atadura de la exterioridad. La descripción está desterrada para que las cosas bellas puedan ser evocadas mágicamente; el ritmo regular del verso se rompe para que las palabras puedan volar con alas más sutiles. No se teme al misterio. Y cuando hacemos a un lado los accidentes de la vida diaria con la que los hombres y las mujeres imaginan que están solos tocando la realidad nos aproximamos a la humanidad.
Laclos, "Les Liaisons Dangereuses", su desnuda verdad humana no daba lugar a excusas sentimentales, se aproxima a la prefiguración de la novela (como Stendhal la concebirá después) pero mantiene la incómoda forma acostumbrada de las letras.
Marivaux semejaba sugerir la novela de análisis pero con un estilo que ha bautizado una manera de escribir, precisamente la que menos conviene a la escritura de ficción.
Rousseau tiene un propósito humanizador y con "La Nouvelle Héloise" nace la novela de pasión y la novela descriptiva. Sin embargo, esta consecuencia es un accidente de genio y lo encontramos abandonando la forma con otra íntimamente personal que le conviene más.
Restif de la Bretonne desarrolló la forma de una autobiografía imaginaria con "Monsieur Nicolas", un libro cuya parte más significativa puede compararse con el "Liber Amoris" de William Hazlett.
Las opiniones precisas conducen a los prejuicios.
La indiferencia es una actitud que influye sobre el temperamento como el gesto influye sobre la emoción.
Es uno de los errores de la existencia humana que seamos llevados a la vez a buscar y eludir la soledad; incapaz de soportar la presión mortal de su abrazo, la nostalgia de su ausencia.
Haber bebido de la copa de los sueños es haber bebido de la copa de la memoria eterna.
Los soñadores de sueños ilimitados.
La insignificancia del vínculo que mantiene unidas nuestras facultades con esa sobria salud del cerebro que llamamos razón.
Las confusiones de la locura con las que lo que puede ser el símbolo es tomado como la cosa propia.
Materializar la visión, lo más volátil e inasible de la visión y sin perder el sentido del misterio o esa cualidad que da su encanto a lo intangible.
Las atractivas debilidades de los adjetivos.
La antigua noción de la novela era que debía ser un registro entretenido de incidentes o aventuras contadas propiamente, un relato sencillo y directo de los hechos cuya finalidad es producir cuanto es posible un efecto de seguimiento, de que nada se ha omitido.
Los Goncourt anotan las sensaciones, las percepciones de los sentidos.
Los Goncourt ven las cosas como un artista ultrasutil del tipo impresionista. Argot, neologismo, construcción forzada, arcaísmo, epíteto bárbaro si tiende a causar sensación.
El orgullo de ser, el orgullo de llegar, estas son las dos oposiciones ultimas que se le presentan a todo idealista.
Se han dado cuenta los grandes novelistas de que la estupidez puede ser patética y que no hay ni siquiera un burgués satisfecho para quien el alma no tenga su parte, para cuya existencia no sea posible estar atraído.
Baudelaire ayudó a enseñar a Léon Cladel el oficio de las letras.
La Foire au pain d´épice de Vincennes, la Feria del pan de jengibre.
Las biografías edificantes de Samuel Smiles.
El aire de sonámbulo de los hombres de genio.
Cada novela de Joris-Karl Huysmans desprende la atmósfera de un noviembre londinense cuando la mera existencia es una carga suficiente y las pequeñas miserias de la vida asoman a través de la niebla con una vaguedad y un grotesco formidable. Para Huysmans el mundo semeja ser un lugar profundamente incómodo, desagradable y ridículo con un verosímil consuelo de diversas formas de arte y posibilidades de escape al menos temporal.
La delicadeza de las cloróticas bellas damas del Fauburg Saint-Germain.
La irrealidad fantástica, la artificialidad exquisita de "Á Rebours", el breviario de la decadencia. "En Ruta", novela psicológica.
El simbolismo es el establecimiento de los lazos que mantienen unido al mundo, la afirmación de una vida eterna, diminuta, intrincada, casi invisible que recorre el universo. Cada época tiene sus propios símbolos; pero un símbolo una vez perfectamente expresado permanece.
(El movimiento simbolista en la literatura)
ERNEST DOWSON
Después de todo pocos lugares atraían mi imaginación con ímpetu como esta vieja ciudad otoñal -la más medieval de Europa-. Siempre es otoño en Brujas.
Cuando salí a la calle y recobré la autoconciencia de mis viejos tormentos la ilusicón se desvaneció.
Las catedrales son lugares con bóvedas plagadas de reumatismo -el mejor de los casos se encuentran repletas de fantasmas-.
El Béguinage (comunidades de religiosas laicas) de Brujas.
La monotonía de esta terrible, persistente y antigua ciudad semeja magnificar nuestras transformaciones.
Aunque después de todo los años han sido generosos conmigo: me han brindado la mayoría de las cosas que mi corazón esperaba. Reflexiono que sacrificamos demasiadas cosas por el éxito. E incluso es mortal de aburrimiento vivir solo para hacer dinero.
Debo admitir que soy repugnantemente próspero. Ah, es un error llevar un diario, un verdadero error.
Las historias muertas y olvidadas aparecen como fantasmas para causarme tormento. Me asalta una fantástica sensación.
Albergar rencor.
Un próspero matrimonio.
Un impulso tonto y lleno de fantasía, pero al que obedecí.
Un tipo triste y grosero viendo silencioso con el sombrero a la mano.
Materializar un instante ante mis ojos.
Retomar el hilo de la conversación.
Recalcar con legítimo orgullo.
Pasar momentos encantadores.
Callar abruptamente.
Su tono se volvió menos cordial.
El total desprecio de las convenciones.
Entendimos que aquellas gratas veladas ligeras como llenas de gracia habían llegado a su fin.
Me pregunto si ha sido un logro verosímil. No deberíamos pagar antes o después al haber sido duros y fuertes al negarnos a sufrir.
Semejaba realmente un fantasma demacrado.
La extraordinaria inquietud de su visión.
Un agudo trastorno nervioso.
Comencé a llevar la conversación a asuntos más íntimos.
Al fin con rotundidad le pregunté.
Extrañado, con una curiosa expresión de sorpresa.
Con mucho esfuerzo pude superar la conmoción que me produjo su visita nocturna. Escuché con asombro y leí de forma sobreentendida su extraña declaración. La claridad de su razón era, me temo, desesperadamente oscura si puede decirse. ¿Cuánto de su historia era solo una alucinación? Su noción del tiempo y el espacio semejaba alterada y nada sonaba real o garantizado.
Una pusilánime traición.
Un infortunio trivial que una palabra podría haber enmendado se había prolongado más allá de cualquier ilusión de reparación.
Víctima de los nervios.
El diablo se apoderó de él.
No olvidar aquella conversación.
Decidió que sería mejor al fin guardar silencio.
Una extraña petición.
No era desprecio lo que sentía, pero nunca podría perdonar aquella muerte en vida de la mujer que un día amamos los dos.
No me importaba haber vivido sin una vida verdadera todo aquel tiempo.
Los ojos arrebatados con la pasión y el remordimiento.
Sin esperanzas ni promesas.
(Diario de un hombre de éxito)
Una insistencia adorable.
Las fantasías morbosas.
Extender la mano a la manera inglesa.
Comentar abruptamente.
Hablaba con una deliberación exagerada que sugería nerviosismo.
Como si esperara que la sutileza de su amigo acudiera en su ayuda con admisiones o recriminaciones.
Una expresión de indiferencia irritada.
La más mínima casualidad los había retenido allí.
Un ataque de emulación en aras de una perspectiva más amplia.
Una perspectiva cruda.
Un pequeño gesto de desánimo, de lasitud.
Educada con el sistema inglés de crecer como quisiera.
Un mundo donde todo está arreglado o uno sin definiciones donde todo es una pegunta abierta.
Un toque de resentimiento de lo que encontró su falta de sutileza.
Pudo adivinar el sentido de su visita pero no su objeto.
Invocando dolorosamente la casuística.
Una casa con un solo manzano incongruente.
Se encogió de hombros con una pura impotencia como de abandono.
(Un caso de autoconciencia)
Mi asiento acusado del restaurante. Con el mero seguimiento de la yuxtaposición un verosímil sentido de intimidad.
Tono de disculpa.
Una defensa tímida y delicada se refugiaba de la grosera curiosidad del mundo.
Atribuir un valor ceremonial a las cartas.
Desperdiciar muchas conjeturas.
Talento natural, paciencia, la delicadeza nerviosa y el refinamiento de su ejecución.
Sin saber cómo podía golpearlo mi propósito.
Una urbanidad vacilante.
Una experiencia solemne o hierática había comenzado a manifestarse tediosamente abandonándolo al final desconcertado y hastiado cansado de él y de la ocasión demasiado extenuante.
El fuego reflejaba sombras burlonas.
Mi silencio estaba repleto de conjeturas sorprendidas.
El destino amante de las sorpresas, de los opuestos patéticos o cínicos.
La coyuntura me intrigaba y fascinaba.
Extendió las manos con un gesto de ola expansiva.
El bazo y el temperamento negros.
Un tono monótono forzado.
Había agotado la vida y la odiaba.
Un repentino arrebato de lástima.
Un gesto solemne y suplicante.
Suplir las omisiones, completar los escasos contornos.
La resurrección de las curiosidades dormidas e insatisfechas.
Una confusa oleada de recuerdos.
Recordé historias de su singularidad íntima.
El pequeño provenzal fluido.
El lugar común de la conversación me falló.
Recelo, un repentino destello de resentimiento.
Estremeciéndose con un toque de sospecha visible.
El carácter mixto de la atracción.
Un vulgar trazo del azar.
Un repentino destello de diversión o fantasía.
Profesé que su favor me dominaba.
No tenía temperamento para las aventuras.
La vulgar ayuda de un comisionista.
Pusilánime o simplemente cauteloso.
Pusilánime, prudente o simplemente cruel.
(Un violín orquestal)
La aguda sospecha.
Los viejos tiempos, la vieja emoción.
Un rico cómodamente domiciliado.
De Italia he heredado mi genio y entusiasmo por el arte, de Inglaterra mi sentido común y la aptitud de reservar el dinero que gano; también una verosímil frialdad natural de disposición con la que no sueñan quienes solo tienen una referencia de mí como personaje publico.
Los primeros recuerdos vagos e indistintos.
Qué habría pasado si algunos accidentes de la vida de uno no hubieran ocurrido.
El enorme laberinto de París.
El transeúnte casual.
El lado inglés práctico.
Brioche. Bollo suizo.
Un avaro con su renuencia a gastar parte de su dinero con reparaciones se había extralimitado y permitido que su propiedad quedara sin valor.
Me presentó su dominio con un aire orgulloso de propiedad.
El socio durmiente del bufete.
Aumentaba sus ingresos las noches cuando la molienda de órganos estaba más barata que nunca vendiendo violetas y otras flores como ojales.
Una palabra cruzada.
No se nos había ocurrido que quedara otro camino que aprovechar el error.
Tono engatusador.
Me quedan pocas ilusiones de la infancia y el tiempo y el éxito no me han hecho menos cínico. Aunque nunca he permitido que mi escepticismo toque esa presencia infantil.
Un fajo de cartas viejas y descoloridas atadas con una cinta negra en algún cajón oculto escritas con letra negrita.
Un miserable y viejo libertino.
Cuyos principios se adaptan a su autoconciencia y cuya autoconciencia está limitada con la ley.
El príncipe de los burladores que nada cree y nada le importa sino él.
Sobrevenir el punto de inflexión de la vida.
Todos tus gansos son cisnes, tía.
Frivolidad y afectación.
La naturaleza humana es más o menos idéntica para los genios y los tontos.
Nos separamos como habíamos vivido, sin afecto.
Pero su orgullo es de la idéntica calidad que la hizo valorar mi presencia.
Soy sensible como cualquiera a la mancha más pequeña de mi ropa y las duquesas se entusiasman con mis encantadores modales.
Los dos elementos principales que componen la vida, la vanidad y el egoísmo.
Demasiada frialdad de carácter como para sufrir la vida.
La literatura polémica.
Escribiendo una novela un poeta.
La mezquindad de un amor meramente humano.
Fiebre romana.
El caballero literario cuyos principios son muy estrictos.
(Memorias de un egoísta)
Casi no compartíamos los atractivos, tuvimos que soportarnos el uno al otro, llegué a tener con él si no una amistad íntima, al menos una verosímil familiaridad que me permitió aproximarme a su carácter. Un carácter muy singular y una historia rica de enseñanzas.
Un difícil problema psicológico.
Puedo transcribir el desenlace de mis impresiones; las encuentro edificantes aunque solo sea por su extraña ironía.
Lo que presagiaba una confidencia inaudita.
Unos ojos enormes que se adivinaban del color de las violetas.
Mientras esperaban su suerte.
La vida se limitaba a hacer acopio de dólares.
Contaba con decisión los días y el dinero (aunque era esencialmente generoso, su obsesión de conseguir aquel propósito le había transformado como un ser humano de una avaricia malsana).
Logré explicarme e incluso justificar su profunda amargura y su avaricia muy similares cuando supe que había sufrido la mayor de las pobrezas y que además estaba profundamente enamorado comme on ne l´est plus.
Su <<suerte>> semejaba incluir todos los males.
Remachar con fuerza el engranaje de su afecto.
El recuerdo de su antigua pobreza y las humillaciones que conllevaba se había transformado como una furia que le perseguía sin cesar fustigándole con su látigo.
Al final ganaba dinero a espuertas; sus operaciones tenían éxito; y las especulaciones más osadas daban un vuelco y obtenían una sustanciosa cosecha.
Había adquirido una dignidad teñida de tristeza.
Volvió a lanzarse con furia a su batalla económica.
El demonio malsano que lo poseía.
Sentía más próximo el terror que la alegría.
Un honroso matrimonio.
Enfermo de tristeza; angustiado y temeroso.
La fuerza de su amor siguió siendo absorbente e inmutable.
Una sombra se cernía sobre los dos; al comienzo semejó imaginaria, demasiado grotesca como para discutirla, pero con esa insustancialidad residía todo su poder.
La vieja y amarga persuasión de la crueldad de su suerte que había permanecido dormida con la euforia de la prosperidad material volvió a latir internamente. Y creyó ver con aquella transformación aparente la ultima ironía de los poderes hostiles que lo habían acosado.
Nuestro matrimonio será una horrible parodia.
Era imposible discutir algo perverso e irracional.
Había justificado su extraña actitud.
Un silencio impenetrable.
Habría sido una crueldad aumentar su dolor levantando el velo de oscuridad que pende sobre esa noche serena y sin luna señalando una verosímil pretensión de su final. Pues según la experiencia con la vida real no ocurren accidentes garantizados y para él la muerte era una solución. Con el handicap de su suerte es posible que hubiera eludido algo peor que el fin que encontró. La suerte de un ser humano tal es fruto de su temperamento, de su carácter. ¿Quién puede escapar a eso?
Un ideal incólume.
Un recuerdo que la experiencia nunca podría empañar ni la costumbre erosionar.
(El estatuto de las limitaciones)
Una intrincada y oscura localidad.
Una quietud digna tristemente próspera.
Un aspecto regular de pintoresca ruina.
Impregnado con el ánimo de lo pintoresco.
La búsqueda de originalidad.
Una conducta demasiado flagrantemente excéntrica.
El mejor tipo de cortesía inglesa: de color rojizo, recto y saludable, musculoso pero sin una sugerencia de brutalidad.
Una ocurrencia tardía.
Un repentino lapso de seriedad.
No había sombra de constricción.
Un anillo de patrono pintoresco en el dedo índice.
Un rostro nervioso y suficiente con un verosímil encanto indefinible.
Estaminet. Taberna.
Controversias con propietarios de hoteles y comerciantes volubles generalmente seguidas de una ruptura de amistades cimentadas apresuradamente y una partida aparentemente abrupta sin premeditación.
Sus procedimientos estuvieron envueltos con un velo de misterio que nunca desechó del todo.
La atractiva personalidad y el mérito intrínseco.
Sus bolsillos vacíos sugerían el menester de trabajar de una manera más enfática que agradable.
Sacudir la fidelidad de la enseñanza de las parábolas.
Los impresores ocasionalmente leen y retienen sus contribuciones.
Un grado de intimidad muy apreciable.
Precisó su total reserva de nervios, de manera ninguna deficiente, para permitirle presentar un semblante impasible ante este inesperado ataque de genialidad.
Las regatas bajo el Puente de Londres son bonitas a su manera como las de Henley o Marlow.
Rendir cuentas.
Una puesta de sol desgarradora.
La mancha en la sangre.
La reciente novela sintomática.
El deleite de una experiencia humana visible y organizada era real y, sin embargo, lo abandonaba un poco triste, frío.
Una sombra de desprecio.
Un fanático virulento.
Realmente no distingue un poste de timón de un botalón de foque.
Llevar la conversación a canales impersonales y presumiblemente más garantizados.
La cualidad rescatadora del genio.
La concepción del arte por el arte exaltado, el instinto que impulsa a buscar el material directamente de la vida sin rehusar nada como común o impuro, discutible pero verosímil.
El hábito del respeto del indolente y enfermo.
Una actitud llena de cómoda indolencia.
La gravedad y la reserva que llegan con los años.
Un encanto distintivo y delicado propio. Era un amuleto similar a una margarita que difería del de una violeta o de un niño perpetuamente perfumando el aire.
Un gesto de elisión (desvanecido).
Pequeñas y dignas incongruencias.
Una actitud devota, buenos modales.
La indiferencia filosófica del encogimiento de hombros.
Alimentar al avestruz del zoo con centavos.
La afectó con una lástima inconsciente.
Libros en estuches toscos y desiguales pintados de negro.
El hábito era eminentemente simbólico de su destino.
El río era camaleónico con sus numerosas gradaciones de carácter y color; su curiosa grisura fría al comienzo de un amanecer otoñal; la ilusión de calidez y profundidad que sustentaba a las doce del día; su brillo las noches sin luna cuando solo pequeños pinchazos y el verde, el rojo y el naranja y su quietud audible le recordaron que allá abajo la corriente contaminada seguía cansada, monótona eternamente hasta el mar. Tenía nuevos efectos reservados para sorprenderlo y deleitarlo. Era como un diamante los días soleados; al final de la tarde sin sol la luz yacía profundamente en su interior y semejaba celoso de devolver la mínima partícula. Lo comparó con un ópalo o un zafiro que brillan con un esplendor parsimonioso.
Alegar ignorancia invencible.
Un humor inquieto.
Eludir cualquier apariencia de atracción de la conversación a la busca de corroboración.
Una sensibilidad inconvenientemente asertiva.
La descripción ordinaria de Saffron Hill.
Saludar con un halagador grado de calidez.
Los rudimentos de la jurisdicción sumaria.
Petit four. Un pastel dulce de pequeño tamaño con una decoración en miniatura.
Comentarios ociosos.
Una vaga aversión poco demostrativa e inmaterial.
Una preocupación mental.
Inclinado extravagantemente.
In loco parentis. En lugar de alguno de los progenitores.
Una sugerencia plausible y práctica.
El sutil encanto de la hora posterior a la puesta de sol.
Un epíteto para describir.
Espiègle. Traviesa, chic.
El influjo de la velada comenzaba a manifestarse con la forma de la genialidad.
La fase ligeramente belicosa de su temperamento.
Arqueando las cejas con esfuerzo para encontrar la gravedad.
Jugando al engañador alegre.
La verdadera angustia y la curiosa aprensión de un golpe moral.
Se encogió de hombros con impaciencia.
Una razón para la alteración del propósito.
Un mohín expresivo de desaprobación.
Mandando con una arrogancia infantil.
Descansar en la memoria.
Se devanó con delicados circunloquios.
Se encontraron con una sola sensación que era como una puñalada.
Una inexplicable sensación de fracaso porque no podía señalar ninguna causa tangible de su desconcierto.
Los límites del decoro.
Graciosamente abrumado.
Londres es bastante grande para mí. Odio el país domesticado, los rostros, la quietud agresiva, el ruido silencioso, el sentimiento y el rebaño. Dame las calles y el gas amarillo, el rugido de la City, el humo, los rostros demacrados, los ómnibus en llamas, el Londres reseco y el río rodando aceitoso por el terraplén como el Styx la noche cuando brillan las lámparas.
Respiró sedientamente.
Comenzó a esperar las visitas con un placer recurrente.
Doss-house. Hotel barato, albergue para indigentes.
Los marginados de la decadencia.
Generosidad temeraria.
Los vientos de las vanas conjeturas.
Su actitud se había transformado, carecía de honradez.
Una dignidad grosera.
Se limitó a encogerse de hombros con creciente lasitud.
Contagiado con su propia monotonía.
Una sensación de demasiado patetismo de las cosas lo inundaba.
Genial petulancia.
Vol-au-vent. Hojaldre con preparados salados o dulces con la parte superior previamente recortada.
Miró vagamente la habitación como si la palabra apropiada pudiera estar al acecho en algún rincón.
No creas que me sacó mucho. Estaba profundo como un pozo.
Tendrá éxito. Sus limitaciones encajan convenientemente con sus aptitudes.
Siguiendo un hilo de la mente que no conducía a ninguna parte.
Las manitas marchitas como de pájaros portaban los estigmas de la edad.
Nada es sencillo como la confusión.
Levantando las manos con un pequeño gesto fingido de desesperación.
Esquivando y devolviendo el coro de estocadas amistosas.
El rasgo de afabilidad característico de su actitud.
La sombra del ceño fruncido.
No había nada más que placer con la leve manifestación de sorpresa que precedió a su saludo completamente inglés con su falta de demostración y la evitación de cualquier cosa que pudiera atraer la atención de los demás.
Una expresión perpleja.
Extender las alas protectoras sobre lo que no existe.
Una sugerencia de disculpa de su tono.
Retrocedió con un gesto de abnegación.
El soliloquio se extinguió con un suspiro y un patético encogimiento de hombros.
Había una delicadeza encantadora casi virginal y una frescura de aire y de tono de la imagen.
Indolencias indebidas.
Adelantándose con burlesca obediencia.
Insisto ganar, debo tener un sistema.
La fuente perezosa.
Una afectación de horror con las langostas.
Indiferencia filosófica.
Monopolizar la conversación.
Con serena indiferencia ante la impropiedad de la ocasión.
Se encogió de hombros con petulancia.
Lorgnon. Impertinentes.
El amplio encogimiento de hombros con el que solía descartar sus preocupaciones comerciales.
Un leve humor consciente.
París es triste como un pozo, está lleno de fantasmas.
Una sugerencia de restricción.
Los hombres amenazados viven mucho tiempo.
Reuniendo el engranaje de viejas asociaciones.
Levantándose con un gesto forzado.
Hablando rápido y alto con el curioso temblor muscular que presagia un control difícil.
Acusar de plagio, de robar ideas.
Un encogimiento de hombros imparcial.
Lo mejor de ser joven es ese don de las lágrimas.
Se inclinó adelante con insulsa satisfacción.
La Cuestión Irlandesa, un Unionista Liberal radical.
Una disposición de vacío aburrimiento.
La indefinible aversión de los temperamentos incompatibles y la aversión temporal.
El temperamento plácido daba a sus mayores hostilidades el carácter de lánguido desprecio; ni odiar ni amar.
Una reputación de perspicacia.
El abogado aunque tenía motivos profesionales para disfrazarse con la sabiduría de la serpiente se caracterizaba mucho más con la inocencia impasible de esa criatura proverbialmente moral pero menos atractiva, la paloma.
El caso de un libro lo que se lee no siempre es inteligible, la página contiene un criptograma.
Sus celos eran más que la fiebre errante de los amantes cuanto tenían un objeto definido y tangible.
Una idea con colores halagadores.
Una hipótesis inestable.
Una epístola diplomática.
Pronunció una negativa apresurada.
El nombre abrió una puerta a muchos incidentes triviales olvidados.
La perspectiva mental.
Suficientemente inteligente como para encontrar la verdad.
Retomar los hilos de la encantadora intimidad.
Una actitud garantizada propia, casi fría.
Una indolencia complaciente.
Un proverbio execrable. Primero el deber y después el placer.
Es imposible hacer las cosas a fondo sin ser un egoísta, un ermitaño de hecho.
Las animadversiones resignadas.
Las cosas sagradas, las leyes del juego, la agricultura y la Iglesia oficial.
Con acritud y el tono del reportero humorístico demasiado indiferente para permitirse llevar de una sensación herida.
Un toque de piedad.
Un gesto admonitorio.
Un tono de auténtica consternación.
Encontrando su oscuridad tensa.
Preocupaciones graves.
La forma de su vuelta era bastante fantasmal e inmaterial.
Encogiéndose de hombros con desprecio propio.
El viejo encanto de su despreocupación juvenil había sido reemplazado con una garantía dura, un aire de astucia mundana si no casi comercial que le daba menos la nota de un artista que la de un exitoso negociante.
Un silencio negro con el aire de un ser transformado como piedra.
El castillo de naipes pintados se derrumbó.
La imagen de la culpabilidad consciente.
El empañamiento repentino de un ideal casi no admitido.
El letargo que sucede a la acción vigorosa victoriosa.
El malhumorado rugido de Londres.
La inutilidad de todo argumento, la futilidad de cualquier recriminación ante lo que había logrado.
El crepúsculo mental de su ánimo.
Otro gesto de lasitud.
Un cálculo, una pieza de aritmética simple.
La rara simpatía que no hace preguntas y encuentra su principal expresión con el silencio.
Llevar el destino dondequiera sin aprensión, sin expectativas.
La nostálgica desconfianza, un deseo momentáneamente visible de ver detrás de un velo evidente.
Un esfuerzo del humor.
El engranaje de la intimidad.
Amistosos como el sapo y la rastra. Suena como Euclides. Cosas iguales a una cosa y bastante diferentes unas a otras.
Una expresión de la opinión.
Y no vuelvas a la locura del ridículo como el perro proverbial.
La superficie intransigente para el mundo exterior.
Qué mundo de amarga ironía había con la palabra.
Inventar pretextos poco persuasivos.
El pequeño resplandor de orgullo se mezclaba armoniosamente con su arrepentimiento.
Una actitud complaciente.
La indefinible falta de un horizonte mutuo.
La amargura que hace que un atributo tenga el sabor de la insolencia y el otro de la opresión.
Una manifestación sintomática.
Los límites de la sociedad no regenerada de la soltería.
Un verosímil peso de aprensión.
Sin una mancha del carácter.
Un ideal dañado.
Remodelar la situación con una mayor apariencia de adhesión a los hechos.
Una autoconciencia más tranquila, menos violentamente ultrajada.
Su actitud solemne traicionaba una corriente subterránea de excitación reprimida.
La crema de la noticia.
La actitud, la situación.
Una disposición de ánimo alegre, un grado excepcional de autoestima.
Los látigos del partido.
La organizada facultad de desapego que permite separar y desconectar los diversos atractivos de la vida.
La propiedad, un elefante blanco que no le traería ni provecho ni honor, pero que la modesta competencia que antes había disfrutado no le permitía desdeñar. Había alterado el tenor de su existencia, destruido su juventud y sus ambiciones.
El disgusto con el que un ser humano presencia la eliminación de un agravio inveterado y acariciado.
El lugar despojado de sus atributos comerciales.
La aguda puñalada de una verdad íntima.
Su recuerdo mórbido reunió una variedad de hilos dispersos, de signos y señales dispersos.
Un cargo de simulación o cobardía intelectual al aceptar indolentemente la derrota.
Recayendo bajo una disposición de ánimo más vago de reminiscencia.
Un nido de yeguas, un encuentro del bendito publico.
Una vaga ironía.
Saber, preocuparse, hacer finas distinciones.
Un tono más claro.
Se encogió de hombros con aire ausente.
Una emoción feroz.
Si pudieras vagamente imaginar los horrores locos y furiosos que he visto y sufrido.
La crueldad casi diabólica de las cosas.
Una actitud bromista.
Reflexionar con una intensidad redoblada.
No nos permitamos pelear con la verdad.
La lúgubre parafernalia de la habitación de un enfermo.
La indefinible mejora que siente un ser humano cuando un accidente le permite expresar algún hecho internamente garantizado.
La actitud generalmente sencilla de lo fantástico, no se había molestado de investigar.
Un destello del viejo humor.
Las emociones mezcladas sobre las cuales predominaba el asombro.
Un error, una bêtise (disparate).
Simplemente hay consecuencias inevitables de causas irrevocables y no hay lugar para el arrepentimiento o la restitución.
Gravemente afectado con la tensión íntima de la conversación.
Su máscara de buen humor cínico estaba constantemente levantada.
El pretexto de su mala salud.
Vanas conjeturas.
La corriente de personas inteligentes, cultas y encantadoras.
Era una compañía miscelánea, las condiciones para los no iniciados, para los excluidos semejaban bastante fantásticas.
Originales y diferentes, cultos, sutiles, cínicos.
La charla era como los pases rápidos de esgrimidores exquisitos con floretes.
No creer nada menos las propias paradojas.
Al son de la música política.
Una actitud de resignación ante lo inevitable.
No eres directo, te entregas a las generalizaciones.
Un tono monótono y forzado irrazonablemente lleno de recriminaciones.
Su dignidad sufría con el desconcierto faltándole todo y volviéndose intrascendente y absurdo.
Una opinión estrecha, poco piadosa y falsa.
Actitud de insólita gravedad.
Un arrebato de aprensión.
Una punzada de horror.
Londres era el lugar donde podía enfrentarse a la vida con una indiferencia que era al menos una tolerable imitación de la ecuanimidad.
La mancha de la cobardía.
Una vena de alerta nerviosa.
Asambleas colosales.
La separación se volvió inexorablemente completa y eterna.
Había calculado espadas con éxito de una conversación con un ingenio notorio.
Asumir una máscara desesperada de buen humor.
La concesión de legalización del testamento del difunto había sido debidamente extraída y el albacea decidiría si los documentos debían ser preservados o destruidos.
Mirándole a los ojos como el fuego que sale disparado de las ventanas de un edificio en llamas.
Un encantador oasis de hierba y árboles.
Era un cobarde y una criatura casi indigna de su odio.
Lúgubre fatalismo.
¿Lo abandonaría su suerte? ¿O ingeniaría algún dispositivo legal para desviar su ataque?
Un volumen de Hansard. Las transcripciones de los debates de Gran Bretaña y los países de la Commonwealth.
Los límites de la decencia.
La pomposa actitud de irrealidad.
Leer con una lentitud judicial.
Una terrible herida de su orgullo.
El tono intrascendente de quien discute consigo.
Un gesto de súbita impaciencia.
La inusitada humildad del entusiasmo del abogado.
Su mentalidad concisa y legal le prohibía albergar falsas ilusiones.
Se había encogido, postergado, prometido, había sido abyecto, hipócrita, explícito.
El primer arrebato de su honorable repugnancia.
El silencio irónico y la efusión, un silencio sellado irrevocablemente.
Desanimado, íntimamente asociado con alguna desgracia.
El final abortado de su pasión.
Cualquier pretexto u ocasión para justificar su aversión.
Reservar la verdad.
Entreteniendo a una escala de grandeza excepcional.
Persifla. Burlarse, aguijonear.
Impenetrable indiferencia.
El tráfico de la muchedumbre caleidoscópica que había invadido el salón.
Comparar la figura del coronel a una langosta recién hervida o a un tomate maduro.
El fracaso, el colapso moral.
Las delicadas fritilarias sin color.
De puntillas como una criatura perseguida que escucha ciegamente la proximidad del perseguidor.
Un tono de júbilo, un desafío.
Estaba investida de una gloria sombría como quien había inspirado una rara y perfecta devoción.
Un aire juguetón de misterio.
Ennegrecer la memoria.
Se encogió de hombros desafiante irónicamente.
La prontitud de recursos que le ayudaba con las cosas pequeñas lo abandonaba invariablemente ante una emergencia real.
La lluvia color miel reflejando su extraño y sedoso glamour.
Uno recuerda detalles triviales las ocasiones de gran importancia.
Las ociosas preguntas, un vano golpe de manos a la puerta cerrada de la muerte.
Una actitud de desaprobación sorprendida.
Una gran ola devastadora había roto sobre su vida.
La naturalidad de lo inesperado.
Una ola de reminiscencias.
Un ideal que la vida con sus crueldades, su grosería nunca podrá tocar.
(Una comedia de máscaras: Una novela)
FRANCIS JAMMES
Los desheredados de este mundo tienen una manera especial de callar.
Atrae la brisa la cima de una vela sobre el mar.
Flores que el tropel seráfico ofrece a la Estrella del alba.
Una duquesa cuyo atavío semeja una datura sube a su barco, una patria encantada.
Sudor de la agonía.
Violento instinto que impulsa a las niñas a rodearse de muñecas.
Carácter lleno de sol.
Bajo el impulso de una tempestad primaveral.
Relámpago de las facultades imaginativas.
Piadosa resolución.
Palmas académicas.
Trigo inefable.
Mar de piedras preciosas de fusión.
No existe una incompatibilidad total entre la verdadera ciencia y la verdadera literatura.
(Rosario al sol)
Los desheredados de este mundo tienen una manera especial de callar.
Atrae la brisa la cima de una vela sobre el mar.
Flores que el tropel seráfico ofrece a la Estrella del alba.
Una duquesa cuyo atavío semeja una datura sube a su barco, una patria encantada.
Sudor de la agonía.
Violento instinto que impulsa a las niñas a rodearse de muñecas.
Carácter lleno de sol.
Bajo el impulso de una tempestad primaveral.
Relámpago de las facultades imaginativas.
Piadosa resolución.
Palmas académicas.
Trigo inefable.
Mar de piedras preciosas de fusión.
No existe una incompatibilidad total entre la verdadera ciencia y la verdadera literatura.
(Rosario al sol)
GRANT ALLEN
No me llegó nada más que su pasivo consolidado.
Su horizonte estaba delimitado con el círculo escolástico.
La enseñanza como la malva es el refugio de los incompetentes.
Una cara de horror rojo.
Abrazaré la primera empresa perdida que se me presente. Voy donde me espera la gloria o una modesta competencia.
Londres repleta de empresas y de sorpresas.
La diversión está con la busqueda, la incertidumbre, con tirar.
Una tímida aventura.
Era amable y reflexiva pero le faltaba iniciativa.
Sus consejos al igual que sus folletos se repartían con demasiada profusión como para permitir que alguien les atribuyera un valor muy alto.
La corriente de la conversación.
Los grandes ignoran la intrusión de sus inferiores.
El comercio de la inocencia rustica ha sido expulsado del país.
La punta delgada de la cuña, el primer peldaño de la escalera.
El tono no estaba diseñado para la más estricta privacidad.
Comentó con tono alentador como si estuviera hablando de alguna persona ausente.
Alegre prontitud.
Los que se llaman personajes suelen ser ensayos de cómo no decirlo.
Un destello de intuición.
Inusualmente inteligente.
La atrocidad de la conducta.
Arreglar los protocolos.
Un temperamento terrible y espantoso.
La frente esponjosa.
El pan duramente ganado.
Me encogí de hombros. Es un truco extranjero que aprendí en Suiza.
Genio, rango, encanto innombrable, algun ligero toque de excentricidad.
La aptitud humana para tragar los halagos.
Conversar con incesante animación.
Las alardeadas mejoras.
Tono despreocupado.
Todos odiamos aplastar un impulso benevolente.
Usar las aguas termales con forma de bañó para la complexión y la irritabilidad nerviosa.
La indignación del ocio.
Viendo con desprecio ese tonto revoltijo que era el universo.
Una entonación ácida.
La inferencia instintiva.
Un gesto benigno de la mano.
Un ingenio epigramático breve, agudo y mordaz.
Vivaces ocurrencias.
Inteligente y divertida.
El rostro era un estudio de emociones mezcladas. Complacida o celosa.
Una actitud altanera con los demás.
Elegante deferencia.
Inducir a creer, amar y aceptar.
Cruzar las manos con actitud impotente.
El principio de proporciones matemáticas.
Brillante perspectiva financiera.
Una conducta imprudente.
Los habituales tópicos económicos de la previsión prudencial y la horrible impresión de las capas bajas.
Tomar la vida con un ánimo de pura investigación.
La brisa es mi ideal.
Un caballero andante protector de la inocencia herida.
Un negociante no se esfuerza a menos que espere ganar un dólar honrado; y no cuenta con que otras personas abandonen el suyo a menos que sepa que puede ayudarles a ganar un dólar honrado con él.
Tentaciones de depósito adiposo.
Edward Whymper (1840-1911) alpinista inglés exploró el Cervino y el Chimborazo.
Las profundidades de la ignorancia.
Una armonía predeterminada.
Tono enérgico.
La exactitud del tono impertinente.
Algun cliente potencial.
Su admiración era manifiesta.
La prudencia británica.
Motivos de negocios, el orgullo consciente del comisionista.
La estrategia comercial.
Un curandero esotérico.
Un ataque de vapores malignos.
El yo subconsciente es el asiento interno de las enfermedades.
Las setenta y cinco emanaciones.
Las esferas, los elementos, las fuerzas cósmicas.
Audaz como el bronce.
Un tono de sorpresa simulado.
Expresión vacilante.
Indiferente y honesto.
Consecuencias de diversa magnitud.
Aniquilado de un solo golpe.
Cara de horror inexpresivo.
Un gesto demostrativo de la mano.
Atacar por sorpresa.
Acaparar trigo, manipular el mercado de acciones.
La salsa para la oca no puede serlo para el ganso.
Pot-au-fue al estilo suizo. Carne de buey con hortalizas.
Permitir un descuento liberal al comercio.
Un humor travieso.
La estrella polar de nuestra existencia.
Con picardía como quien sabe que no quiere nada de eso.
Una conversación deliciosa sobre nada.
Bajo el cielo de zafiro.
Uno puede ser ahorcado por una oveja como por un carnero.
La señora Grundy amable y menos censuradora.
El momento sugirió su propia solución.
Las jaulas que usan en los molinos para bajar los sacos.
Poner a disposición reservas de fuerza nerviosa.
Decidir no de casualidades pasajeras de la situación sino de apreciaciones permanentes.
Un sistema racional e inductivo.
Lanzar un grito duro, cruel, obstinado.
Una tos perfecta de Campo Santo.
El vértice o cuspide del pulmón derecho.
Una tisis ocasional.
El dinero es un asunto secundario. Las filosofías y las religiones coinciden en que el dinero es mera escoria, un lucro deshonesto.
Tomar un actitud.
Reacio al sectarismo por temperamento.
Preguntar con el tono más inteligente de los negocios.
Un tono marcadamente deferente.
Billetes de la India, transferencias telegráficas, ventas de algodón. Los mercados estaban saturados.
Las semejanzas familiares existen con total divergencia de gustos y carácter.
Ventilando los tópicos habituales.
Algunas diferencias superficiales solo enmascaran una identidad subyacente.
Una expresión aguda y mundana o tranquila, insulsa y financiera.
Los simples financieros no ven más allá de los porcentajes.
Un grito ahogado de anticipación.
Los hilos del arco periodístico.
Una comisión itinerante.
Poner el asunto en forma de propuesta de negocio.
Me había traído la salsa de manzana sin siquiera molestarse en cocinarla.
Los irlandeses Sheridan, Burke y Grattan.
Los Lays de Macaulay.
Amonestar con elocuencia irlandesa.
Wurrum. Sierpe.
Una verdadera temeridad irlandesa.
Una fiebre de suspenso.
Un fogoso irlandés.
Un temperamento voluble.
Iniciativa y empresa.
La deferencia que el lacayo británico solo paga a la sangre azul porque tiene grados de sumisión. Es respetuoso con la riqueza, cortés hasta el rango adquirido pero sumiso solo a la nobleza hereditaria.
La inefable insolencia, la otra cara de la insoportable humillación del lacayo.
No mantener la puerta abierta a ningun engaño.
El barro y la miel de Piccadilly.
Tono señorial.
Una astucia práctica e insidiosa.
El rumbo de la conversación.
Si no confías en nadie te pones en una grave desventaja práctica además de perder la alegría de vivir.
El comportamiento y la actitud mental.
El silencio no cuesta nada.
Astuto como un hurón.
Abrir las manos con un gesto de despreocupación.
La verdad es muy rara.
Tono neutral.
Pisaba el césped de Tattersall. El principal subastador de caballos de carreras del Reino Unido e Irlanda.
Los handicaps de primavera.
Un imperturbable imbécil paquidermatoso.
Un tono impresionante.
Tono coloquial.
Los prejuicios inexplicables de los europeos.
Admitió el impeachment con un sonrojo acusador.
No es valiente el que no siente miedo a dominar.
Demostrativamente valientes.
La actitud alerta.
El elefante bramando, temblando, rugiendo de rabia y dolor.
El horizonte oscuro.
Llamativa rotundidad.
No se puede justificar la originalidad ante un jurado británico.
Las conjeturas jugaron con varios destinos finales.
Un escalofrío de horror.
Algunas decentes pretensiones de no prejuzgar.
Las paredes tienen ojos y oídos.
Escuchas clandestinas exitosas.
Cruzaba las manos y semejaba resignarse a un Nirvana temporal.
Alcanzar notoriedad.
Un impulso convulsivo.
Una expresión subyacente de escrutinio avergonzado.
Derribar las esperanzas.
Acusar de falsificación.
La ley Brougham se aprobó para impedir los matrimonios de Gretna Green (Escocia).
La voluntad demostrada.
Adiciones pintorescas.
La imaginación poco desarrollada de la raza inglesa se concentra en el estrato inferior de los periodistas.
Una fraseología efusiva.
El testamento incriminado había sido incautado.
El tipo de máquina de escribir Spread Eagle.
La singularidad está presente en todo lo que hacemos por muy mecánico que semeje.
Inducir a un jurado a aceptar las pruebas con fundamento.
Una conspiración diabólica.
Reservado, aficionado a los misterios y las mistificaciones.
La astuta trama se desenmarañaba mentalmente paso a paso ante mí.
Un destello del instinto.
Los cajones secretos, las cifras, los criptogramas y el tráfico de misterios.
Un destello de inspiración o de intuición.
Una conspiración superficial.
Un golpe de picardía.
Inventar una picardía inteligente.
Sagaz y despiadado.
Llegar involuntariamente a la verdad.
El típico rostro estrecho y astuto de un criado deshonesto.
Incluir en la acusación.
Acusar de un delito grave.
Tono insinuante.
Encogiéndose y pretendiendo como los de su especie ganar el favor de los ganadores el ultimo momento.
El instigador de la trama.
Retorciéndose para ganar tiempo.
Tranquila ironía.
Inconsciente de la profundidad de su iniquidad.
(Las aventuras de Miss Cayley)
Henryk Sienkiewicz
Panna. Señorita.
Vaivoda. Duque o soberano.
Panni. Señora.
Ánimos inquietos.
Forma de 7, guadaña.
Vaivoda. Duque o soberano.
Panni. Señora.
Ánimos inquietos.
Forma de 7, guadaña.
Cepos suecos.
Birrete de piel de leopardo adornado con una pluma, señal de que pertenecía al ejército.
El mariscal de la Dieta, el Presidente, el Capítulo supremo votaba al soberano.
Haiduk. Sumiso o soldado de infantería.
Manifestar poca afición a las armas.
Reloj de Danzig.
Birrete de piel de leopardo adornado con una pluma, señal de que pertenecía al ejército.
El mariscal de la Dieta, el Presidente, el Capítulo supremo votaba al soberano.
Haiduk. Sumiso o soldado de infantería.
Manifestar poca afición a las armas.
Reloj de Danzig.
Manifestar una promesa.
Dardos de la sátira.
Disimular la confusión.
Alegría. Sano, autoconciencia tranquila.
Curlandia, residente inglés de Varsovia.
Curlandia, residente inglés de Varsovia.
Dotado de disposición de ánimo.
Mientras maya la gata no comerá el queso.
Invadir un miedo infinito.
Material para defenderse.
La audacia de un cosaco.
La audacia de un cosaco.
Los escoceses aman por todos los siglos de los siglos.
Recobrar por grados la autoconciencia del sitio y las personas.
Stancya. Cuartel.
Stancya. Cuartel.
Realidad aplastante como la desgracia.
La admiración, un homenaje debido a los valientes.
La voluntad, remedio frente la tristeza.
Proverbio. <<Los que riñen terminan por quererse.>>
Una pretensión no es un voto.
Máscara del asombro.
Bandadas desordenadas de cosacos, destacamentos de hordas, ladrones de las estepas, criminales de los caminos de Besarabia, correrías de los tártaros.
Bahun. Famoso y terrible cabecilla entre los cosacos.
Bandadas desordenadas de cosacos, destacamentos de hordas, ladrones de las estepas, criminales de los caminos de Besarabia, correrías de los tártaros.
Bahun. Famoso y terrible cabecilla entre los cosacos.
El fin corona la realización.
El sangriento teatro de batalla.
Murzas. Capitán de los tártaros o cabecilla.
Crimea. Corte de Bagsechari.
Murzas. Capitán de los tártaros o cabecilla.
Crimea. Corte de Bagsechari.
Astucia de los orientales.
Manifiesta emoción.
Vía de la convalecencia.
La milla ucraniana equivale a 9 km.
Krupnik. Bebida hecha con aguardiente y ron.
Los materiales empleados.
La milla ucraniana equivale a 9 km.
Krupnik. Bebida hecha con aguardiente y ron.
Los materiales empleados.
El instante solemne que debe seguir inevitablemente a la muerte.
Ante el peligro más vale obedecer a uno solo.
Durante los asaltos los que atacan sufren más que los atacados y todo asalto repelido quebranta el ánimo de los sitiadores aumentando el valor de los sitiados.
Con manifiesto disgusto.
(Un valiente polaco)
Bienestar de los gentiles hombres.
Sabios Moleschott y Buchner.
Las angustias no se calculan por lo que representan, sino por la fuerza con la que se sienten.
Racionalidad fatal de la realidad.
Manifiesta rapidez.
Cabeza triangular del lobo.
Tono suplicante.
Tono brusco y frío.
Insignificantes excusas.
Alas de la armonía.
Tono desafiante.
Acusar de desagradecimiento.
Tono de fresca emoción.
(Hania)
Uniformidad y precisión de un mecanismo de relojería.
La locomotora jadeaba como un dragón.
Tono afligido.
Macki. Guerreros.
Tono de resignación.
El asombro, al igual que el miedo, en las personas ignorantes suele transformarse en ira.
La acusación desató las iras de la opinión.
El tiempo lluvioso adormece a la gente.
Aquel pavo real que sucumbió de mucho reflexionar.
Éxtasis de cordial respeto.
Serio como la noche.
(Bartek el Campeón)
Gorki
Sienkiewicz, "Sin dogmas".
Bienestar de los gentiles hombres.
Sabios Moleschott y Buchner.
Las angustias no se calculan por lo que representan, sino por la fuerza con la que se sienten.
Racionalidad fatal de la realidad.
Manifiesta rapidez.
Cabeza triangular del lobo.
Tono suplicante.
Tono brusco y frío.
Insignificantes excusas.
Alas de la armonía.
Tono desafiante.
Acusar de desagradecimiento.
Tono de fresca emoción.
(Hania)
Uniformidad y precisión de un mecanismo de relojería.
La locomotora jadeaba como un dragón.
Tono afligido.
Macki. Guerreros.
Tono de resignación.
El asombro, al igual que el miedo, en las personas ignorantes suele transformarse en ira.
La acusación desató las iras de la opinión.
El tiempo lluvioso adormece a la gente.
Aquel pavo real que sucumbió de mucho reflexionar.
Éxtasis de cordial respeto.
Serio como la noche.
(Bartek el Campeón)
Gorki
Sienkiewicz, "Sin dogmas".
KENNETH GRAHAME
A través del aire arriba y abajo se movía la primavera penetrando con todo su divino ánimo de descontento y ansia.
La delicia de estar envuelto por la primavera.
El impaciente y desdeñoso topo.
Todo semejaba demasiado hermoso para ser real.
Lo mejor de las vacaciones tal vez sea no el que uno descanse, sino el ver cómo los demás trajinan.
Vagando a la ventura.
La etiqueta animal prohíbe cualquier tipo de comentario respecto de la repentina desaparición de un amigo, cualquier momento, por cualquier razón o sin razón ninguna.
La cosa quedó finalmente terminada sin mucha pérdida de humor.
Negra desesperación.
Una húmeda, pulposa, informe masa de miseria.
Conducta tonta y desagradecida.
Conmovido por la oferta generosa.
Preparar un brillante fuego.
El lugar tenía un aire de abandono.
Expresión preocupada.
Un silencio penoso.
Expresión de total desconfianza.
Viajes, transformación, atractivo, emoción.
El mundo entero por delante y siempre un horizonte distinto.
Odiaba desilusionar a la gente.
Voluble y dominado por su imaginación pintó las perspectivas del viaje y los gozos de la vida al aire libre y al borde del camino con unos colores muy brillantes.
Era una tarde dorada.
Una luna amarilla apareció repentina y silenciosamente sin saber de dónde y vino a hacerles compañía y a escuchar su conversación.
Tras mucho aire libre y emoción durmió profundamente.
Las fatigas y preocupaciones y cuidados de la casa.
El desastre veloz e imprevisto saltó encima.
Monótono ensoñamiento.
Visiones del viaje, ese cisne, ese rayo de sol, ese trueno.
Bufar de enojo.
La pantalla de sotos espinosos y el ropaje hinchado de las hayas y los olmos.
Una cara de diablo pequeña con forma de cuña.
Vagar por las orillas verdes del río de los sueños.
Un sueño sobresaltado e inquieto.
Incansable buen humor.
El viento cortante, la nieve.
Tendrías que ir donde supieran apreciar lo que vales.
Los segadores sentados alrededor de la mesa celebraban su Fiesta de la Cosecha con alegría y música.
Todo lo que habían sufrido era un sueño casi olvidado.
Ese lamentable tipo de conversación de hablar con la boca llena.
Pasar un momento de profunda concentración.
No debe esperarse, según las reglas de la etiqueta animal, que ningún animal haga nada extenuante, valiente, ni siquiera moderadamente activo durante los meses de invierno. Todos están soñolientos, algunos realmente dormidos, bloqueados.
Expresión disgustada.
Charlar del río es una charla larga que suena como el murmullo del agua.
La rata semejaba realmente temerosa de que el río escapara si no estaba allí para vigilarlo.
El sol de invierno colgaba rojo y bajo del horizonte.
El río, cualquiera que fuera su humor, nunca los asustó con sorpresas desagradables.
Prudente, debía habitar aquellos lugares agradables donde su vida estaba trazada y que le ofrecían aventuras suficientes para colmar su existencia.
La pequeña cuestión de la orientación que todos los animales llevan dentro.
El fino filamento, la corriente telegráfica.
Frescas y cautivadoras experiencias.
Una ráfaga de viejos recuerdos.
La violencia del paroxismo de pesar.
Un chorro de alegre charla y divertidas anécdotas.
El esfuerzo de la emoción.
Problemas y ansiedades.
El sueño se la llevó seguidamente como los brazos de la segadora llevan una gavilla de cebada.
Expresión de total seriedad.
Actitud muy distinta.
Fijarse a las cosas es una molestia.
Comentarios cáusticos, brutales.
El burlón populacho muy severo con el crimen como piadoso con un solo <<Se busca>>.
Lanzar insultos, zanahorias y cosas vulgares.
Carraspear de una forma horrible y sarcástica.
La línea del horizonte se destacaba clara y dura frente al cielo.
Al fin sobre el borde de la tierra se levantó la luna con lenta majestuosidad hasta que osciló claramente por el horizonte y rodó libre de amarras.
Lo real, inconfundible, simple, apasionado, perfecto.
Ropa vieja, un plato hecho de rehogar carne, repollo y otros restos del cocido.
La sospechosa apariencia de las cosas.
Aparecer como la víctima de circunstancias incontrolables.
Las salidas humorísticas.
Sugerencias de más o menos valor y comentarios de más o menos rigor y ocasión.
Comentarios sarcásticos.
La tristeza se tornó como éxtasis.
Insuperable inteligencia.
Expresión inquieta.
Escapar con gran atrevimiento e inteligencia de una mazmorra repugnante.
La gente, especialmente los magistrados, saca conjeturas de los actos irreflexivos e impulsivos.
El bosque se extendía oscuro y acogedor.
Las chotacabras haciendo sonar su traqueteo mecánico.
Se lanzaron a una apasionada reminiscencia.
El simple horizonte.
Los apretados y coloridos paisajes de la imaginación.
Sus brillantes ojos se prendían al horizonte.
Los mares clásicos donde cada ola palpita con un recuerdo infinito.
Acepta la Aventura, escucha la llamada, no sea que pase el irrevocable momento.
Un ataque histérico de sollozos sin lágrimas.
La magia de los cientos de reminiscencias.
Derivar la conversación.
Un camino de incomunicativa y tímida actitud hacia los extraños.
El genio hirviendo a fuego lento.
Quería vengarse de verdad y no triunfos verbales baratos y pomposos.
Recuperar el humor.
Un vago y sugestivo vaporcillo.
Las ganancias netas.
La pericia unida al valor.
La cinta blanca de la carretera.
Ciego pánico.
Experiencias agotadoras.
Reflexionar profundamente.
Tono impresionante.
El don de la conversación.
El sobrio tono habitual.
Cómodas comadrejas.
Tono seco y contenido.
La categoría de lo que pudiera haber pasado. Esas son las mejores y más picantes aventuras. ¿Y por qué han de ser realmente menos nuestras que los hechos inadecuados que de verdad tienen lugar?
Profunda emoción.
Inesperada actitud.
Una charla llena de banalidades y ansiosas preguntas.
(El viento en los sauces)
P. C. WREN
Cansado sueño de los vencedores.
Crapaudine. Tortura, los pies y las manos atados a la espalda.
Cigarro de la digestión.
Fantasma de un salario.
Zafiro. Alúmina cristalizada.
Robles normandos.
Doctrina del libre albedrío. Somos las víctimas indefensas de las consecuencias de los actos ajenos.
Beau geste. Distinguida acción.
(Beau Geste)
Maurice Leblanc
Carácter receloso.
Lamentos y decepciones.
Clave del enigma.
Radical, escéptico, pardójico.
Destellos geniales, que iluminan a Dupin (Poe), Lecoq (Gaboriau) y Sherlock Holmes (Doyle). Cualidades, aptitudd de investigación, sagacidad, perseverancia, intuición.
Círculo de suposiciones.
Prueba evidente de culpabilidad, que habría justificado su acusación.
Grado de Precaución, voluntad perspicaz, método y organización.
Grado exacto del dolor.
Especie de liquidación con respecto al pasado.
Capricho de las cosas, retorno inesperado de la suerte.
Razonamiento de los hechos y circunstancias generales.
Angustia del peligro.
Acusación formal, directa, irrefutable.
Relámpago de rebeldía o temor.
(Arsenio Lupin contra Sherlock Holmes)
El inspector Ganimard, enemigo de Arsène Lupin.
Avanzar hipótesis.
El caso de la Compañía francesa del Canal de Panamá, que el año 1881 inició las construcciones para abrir el canal entre los océanos Atlántico y Pacífico. La imprevisión de la Compañía unida a las dificultades climatológicas (22.000 trabajadores murieron a causa de las fiebres) llevaron a la Compañía a la bancarrota, estalló un escándalo político atizado por los partidos de derechas, que estuvo a punto de terminar con la III Republica.
Bajo el dominio de la voluntad.
Con el canje de un documento obtener la evasión simulada.
Propenso a la ilusión.
La acusación adquiría una inicio de prueba.
Friable. Sencillo de romper o desmenuzar.
Condición de duermevela cuando la fiebre le mantiene a uno.
Progresos de la convalecencia.
Pneumatique. Sistema postal, un tubo con una misiva que impulsado con aire comprimido se expide con canalización subterránea.
Cap-d´Ail, La Turbie, Cap-Martin. Ciudades fronterizas de Mónaco.
Pintura alegórica. El arcángel de la Virtud aplastando la hidra del Vicio.
Lágrimas de ternura, piedad, desolación.
Luis. Moneda de oro francesa del siglo XIX que equivalía a veinte francos.
(El tapón de cristal)
Arthur
La técnica para capturar a los ladrones expuesta con las novelas policíacas de Arsenio Lupin y Raffles. Los ladrones aborrecen la violencia. Todos los delincuentes se atienen rigurosamente a su especialidad y los ladrones roban exclusivamente.
Avanzar hipótesis.
El caso de la Compañía francesa del Canal de Panamá, que el año 1881 inició las construcciones para abrir el canal entre los océanos Atlántico y Pacífico. La imprevisión de la Compañía unida a las dificultades climatológicas (22.000 trabajadores murieron a causa de las fiebres) llevaron a la Compañía a la bancarrota, estalló un escándalo político atizado por los partidos de derechas, que estuvo a punto de terminar con la III Republica.
Bajo el dominio de la voluntad.
Con el canje de un documento obtener la evasión simulada.
Propenso a la ilusión.
La acusación adquiría una inicio de prueba.
Friable. Sencillo de romper o desmenuzar.
Condición de duermevela cuando la fiebre le mantiene a uno.
Progresos de la convalecencia.
Pneumatique. Sistema postal, un tubo con una misiva que impulsado con aire comprimido se expide con canalización subterránea.
Cap-d´Ail, La Turbie, Cap-Martin. Ciudades fronterizas de Mónaco.
Pintura alegórica. El arcángel de la Virtud aplastando la hidra del Vicio.
Lágrimas de ternura, piedad, desolación.
Luis. Moneda de oro francesa del siglo XIX que equivalía a veinte francos.
(El tapón de cristal)
Arthur
La técnica para capturar a los ladrones expuesta con las novelas policíacas de Arsenio Lupin y Raffles. Los ladrones aborrecen la violencia. Todos los delincuentes se atienen rigurosamente a su especialidad y los ladrones roban exclusivamente.
El trío de la Dama Negra
Arsène Lupin, el famoso caballero ladrón internacional.
Lupin con una familia muy turbulenta a la espalda.
Los músculos bruñidos de Lupin.
El padre de Lupin es acróbata, funámbulo.
Lupin, el mayor ladrón de todos los tiempos, su padre también lo era.
La sonrisa sincera y magnética de Lupin.
Théophraste, el padre de Lupin.
W. Somerset Maugham
Generación prudente.
Gracia versallesca.
Efectos expansivos del estómago repleto.
Los novios partieron entre un estruendo de trompetas y el bombardeo de un zapato viejo.
Rara pesadez de Muerte.
(Liza of Lambeth)
Capa media intolerante, estúpida y estrecha de valoración.
Elogiosas expresiones que la habilidad de los escritores saben entresacar de las peroratas desfavorables.
Tibieza material.
Lento desfile de las horas.
Fuente de diversión.
Las grandezas del pasado le hacían presentir las futuras delicias que encontraría en el mundo.
Cumplidos y demostraciones de inteligencia.
Fino y viejo sentido inglés sobre la ocasión de las cosas.
Hacendado de la vieja escuela, antes de que los malos tiempos y el desarrollo de la cultura hubieran convertido al granjero en una mezcla de empleado de la ciudad y entrenador de Newmarket.
Nuevo rico afligido por la falta general de distinción.
Análisis, sutilezas, atributos de la civilización decadente.
Bella energía anglosajona.
Almanaque Whitaker.
Existencia de los disidentes.
Desaprobaba las familiaridades con los seres de capa inferior, porque la evidencia los hacía independientes y corteses.
Febrero lánguido, abril inquietud, mayo vida vigorosa.
Hecho escueto, desnudo.
Proverbio. Vísteme despacio, que tengo prisa.
Fuerte y falto de imaginación.
Proceso orgánico de la digestión.
Hacer oídos de mercader.
Conversación y especulación teórica.
Ironía, don de los dioses, sutil forma de hablar.
Auxiliar del inteligente.
Fuego místico.
Terrible ennui. Monotonía.
El tiempo agosta las más exquisitas emociones y suaviza las penas más abrumadoras.
Consejo del distrito urbano.
Tranquilizar gradualmente.
(Cautiva de amor. Mrs. Craddock)
Écriture artiste.
Acero de la ironía, garrote de la insolencia.
Noche sedante, que apacigua las mentes de los mortales.
(El mago)
Écriture artiste.
Acero de la ironía, garrote de la insolencia.
Noche sedante, que apacigua las mentes de los mortales.
(El mago)
El deseo del aplauso ajeno es el instinto más poderoso.
Júbilo inhumano del sátiro.
Puestos de libros de lance.
Paladín del sarcasmo, opuesto a garrote de la invectiva.
Proverbio falso. Se debe yacer en la cama que uno ha hecho.
Ácido oxálico, del griego oxalis, acedera. Ácido orgánico, de fórmula COOH-COOH.
Tiaré. Flor blanca y perfumada; el que la huele una vez termina por volver a Tahití.
(Soberbia)
El velo pintado, que los que viven llaman Vida.
Calculador y disertador afecto.
Bienestar material.
Tao. Camino y Caminante. Senda eterna por la que todos los seres caminan y que por nadie ha sido hecha, se hizo propiamente. Todo y nada. Del tao surgen todos los seres, las cosas se ajustan y vuelven. Es cuadrada, pero no tiene ángulos; sonido que el oído no puede percibir e imagen que no tiene forma. Vasta red, nada pasa a su través. Santuario donde las cosas buscan refugio. No está en parte alguna, pero sin ver a través de la ventana puede columbrarse. Enseña a no ambicionar ni un deseo y permite que las cosas que sigan su curso. El que se humilla lo alcanzará todo; el que se inclina será elevado. El fracaso es el fundamento del triunfo y este la trampa donde se esconde el fracaso. La dulzura aporta la victoria al que ataca y da garantía al que se defiende. Sólo es fuerte aquel que sabe explorarse.
"Elegía", de Goldsmith.
Esfuerzos, intrigas y humillaciones.
(El velo pintado)
Pastor, conductor de la grey.
Piel de Rusia de un viejo tomo.
Exquisito hábito humano de leer. Creaba un refugio frente todos los dolores; sin embargo, creaba para su uso un mundo ficticio, que alguna vez chocaría con el mundo real, produciéndole una amarga desilusión.
Tendero, hidalgo del campo, opuesto a propietario.
Entusiasmo, transformación.
Prueba del tiempo.
El signo de la grandeza de un escritor reside en el hecho de que diversas mentalidades puedan dar distintas explicaciones de sus libros.
Walter Pater, "Mario el Epicúreo".
Venecia y Florencia descritas con mágico estilo por John Ruskin.
Posición discursiva de Emerson.
Desconfianza propia de los provincianos.
El valor de un objeto es muy distinto del importe que puede obtenerse por él.
Oscuro abismo del tiempo.
Horror hacia el sentimentalismo que sienten los ingleses; les impide una manifestación patética.
Escepticismo de Hume, estilo lúcido.
Copa de la humillación.
En Londres hay distribución telegráfica para el interior de la ciudad.
El delicado iris del aire de Londres daba una dulzura de pastel a la piedra de los edificios.
El mimetismo protege a algunas mariposas.
Su razón exploraba los hechos sin poder injerirse.
Sentencia provisional de divorcio. Definitiva.
Nombre en la crónica judicial y del proceso legal.
Límites de lo soportable.
Místicos españoles. Pasión de lo invisible.
Adornar la frase con una flor retórica.
Mentalidad del jugador.
Manifestarse irritado.
Novelas de Maria Corelli.
Medicina, ciencia empírica, campo a la fantasía.
Temblor de anunciación.
(Cautiverio humano)
Acusar de robo manifiesto.
Somos más dados a transigir con los vanidosos, que con los infatuados; el vano es sensible respecto a nuestra opinión sobre él y eso halaga nuestra estima, el fatuo no y a causa de eso nos la hiere.
Burn the candle at both ends. Consumir la vela por los dos cabos, aquellos que derrochan energías en la actividad y los placeres, esposos que, por disipación y ocupaciones no cumplen sus deberes matrimoniales.
Acusar la competencia de un extraño.
El tiempo separa lo baladí de aquello que tiene peso; y la posteridad escoge entre el cúmulo de materiales llegados, lo que conviene mejor a sus menesteres inminentes.
Facultad que permite al novelista alojarse dentro de la piel de los personajes que crea, para reflexionar las ideas y sentir con sus sentimientos.
Kant pretendía que lo sublime no existe en la Naturaleza; es importado por la sensibilidad humana.
Shocker. Espécimen malo, novela sensacionalista de mala calidad.
Teoría de la ficción policíaca. El propósito del autor es impedir que uno adivine quién es el criminal. Han de existir una serie de motivos para el crimen. Motivos monetarios, el miedo y la venganza. Los detectives son de tres tipos. Oficial, private eye, detective particular o shamus y aficionado.
Whodunit. Who done it. Quién lo hizo. Novelas de misterio y de intriga.
La moda del análisis psicológico, si se abusa tiene una consecuencia muy perjudicial para la ficción seria de la actualidad, como las descripciones del lugar de la acción en las novelas del siglo XIX. Ha de describirse con brevedad y usarse con el exclusivo objeto de seguir el hilo del relato.
Hard-boiled. Duro de piel, de pelar, novelas de duros, estilo realista.
Viejas novelas de intriga y deducción.
Diálogo. Tono coloquial.
Acción. Ser más rápido en describir las emociones. Contenido o apasionado.
Acusar de malversación.
Antítesis. Variante del equilibrio.
<<The Tatler>>, revista de Steele y Addison, órgano whig en tiempos de la reina Ana.
Metéfora entretejida con el asunto de la prosa, a la manera que los tejedores de Lyon entretejen los hilos de un color con los de otro a fin de dar a sus telas la brillantez tornasolada de la seda.
Carnet de un escritor.
Humorismo cockney.
Amistad del atractivo animal y del intelectual.
En momentos de gran excitación, los frenos comunes pierden su fuerza y el ser humano vuelve a la vieja ley del ojo por ojo y diente por diente.
Azul empírico del ánimo.
Nietzsche con su glorificación del sufrimiento es como la zorra de la fábula, que ha perdido su cola. Su argumento de que el dolor refuerza el carácter se resuelve en el hecho de que el ser humano que ha sufrido clama venganza.
Acusar de suicidio frustrado.
Terrible inhumanidad de la Justicia.
Humorismo despreciativo.
El suntuoso oro de la tarde de verano.
Brezo. Amatista.
Extraña idea de reflexionar que la transformación tiene que ser un progreso.
Humorística resignación.
Caza del empleo, intrigas, tráfico de influencias y celos personales, que han desolado el país checo.
El humorismo distingue la infinita diversidad de los seres humanos.
Ingenio y agudeza de la réplica, dardo ágil del sarcasmo, intelectualidad del epigrama, frase de humor.
Vieja escuela de Octave Feuillet o Cherbuliez.
La forma de una historia es una especie de memoria técnica, que la mantiene en nuestro recuerdo. En una novela hay que fijar bien cuál es el punto esencial y aferrarse a él de manera inquebrantable. Tiene que tener forma.
Legión de referencias.
La estimación de los valores depende de las circunstancias. Pueden transformarse de una generación a otra. Los valores apreciados por los griegos de la edad homérica no son idénticos que los admitidos en la guerra del Peloponeso.
El idioma se ha desarrollado según los menesteres biológicos.
El escritor de novelas sólo puede crear personajes adecuados, que sean un aspecto de él. Los otros los describe, no los crea y raras ocasiones tiene persuasión.
El viejo Tiempo, con su guadaña, tiene la cabeza vuelta hacia el otro lado.
Marca de la estima.
(Burla burlando)
Conchie. El que se niega a luchar en la guerra porque repugna a sus reglas morales.
Nobby. En el habla familiar, elegante, presumido o perteneciente a una categoría social elevada.
Serpentine. Arroyo de los jardines de Kensington, en Londres.
Según las leyes inglesas, un marido no puede declarar oponiéndose a su propia mujer.
(Una hora antes del amanecer)
Dos maneras de escribir una novela. En primera persona y desde el punto de vista de la omnisciencia. En la segunda, el autor puede decir lo que reflexiona si cree menester que nos guíe, para seguir su argumento y entender sus personajes. Puede describir sus emociones y motivos desde el interior. Riesgo de ser inmanejable, prolija y difusa.
Contar una historia en primera persona ofrece verosimilitud al relato y obliga al autor a ceñirse a su personaje central; sólo puede decir lo que este ha visto, oído o hecho. Provoca la simpatía del lector hacia el escritor. Desventaja del protagonista-escritor. El personaje central aparece pálido, en comparación con las personas que le rodean. El diálogo debe prestarse a caracterizar a los que hablan y hacer avanzar la trama de la novela. Los pasajes tienen que ser vivos, ir directamente al grano. La manera de escribir sencilla y el estilo adaptarse al asunto. Finalmente, una novela tiene que ser distraída (inteligente, con atractivo o diversión).
Seres humanos vanos, variables y vacilantes.
Vivimos en un mundo atormentado y la cuestión del novelista es entendérselas con él. El futuro es incierto. Nuestra libertad está amenazada. Vivimos atenazados por las ansiedades, terrores y fracasos.
Novelas del relato del incidente.
Genio. Algo innato, ligado con graves defectos. Poder intelectual ingénito de tipo exaltado, como el que se atribuye a los que han destacado en el arte, la especulación o la realización. Instintiva aptitud para la creación imaginativa, la reflexión original, la invención.
El realista es un determinista y da a sus relatos una racionalidad verosímil.
Los libros que un autor escribe dependen del ser humano que sea. Saber su historia personal.
Don de la creación.
Una novela es un conjunto de acontecimientos imaginados, para presentar un numero conjunto de personajes en acción y atraer al lector. No es una copia de la vida. No se pueden reproducir las conversaciones de la vida real, han de ser extractadas, para presentar los puntos esenciales con claridad y concisión. Los hechos han de sufrir deformación, para que concuerden con el plan del autor y mantengan la atención del lector.
Prosa racional, precisa, ágil y variada, rítmica, sonora y musical como la poesía.
Las novelas están en consonancia con la época que fueron escritas, en la forma de escribir común al tiempo, por su coincidencia con el clima de opiniones, con el punto de vista moral de sus autores y con los prejuicios que aceptan o rechazan.
Litératise. Estilo hinchado y pedante.
Para construir una novela se precisa esprit de suite, sentido racional, por el cual uno coloca el material en una disposición coherente, de manera que las diversas partes sigan con verosimilitud y el todo queda redondo, sin hilos sueltos.
El año 1854, estalló la guerra de Crimea y en el sitio de Sebastopol Tolstoi estuvo al frente de una batería.
Beau ténebreux de las novelas románticas.
Las viejas creencias no eran aceptadas de manera incuestionable y en el aire y la vida flotaba un fermento de nuevas y excitantes aventuras. Novelas realistas y sensacionalistas.
(Diez novelas y sus autores)
Williams
El ingenioso y brillante Garson Kanin, escribió una biografía sobre Somerset Maugham con una superior falta de sumisión al plano cronológico y me gustó la elaboración.
Acusar de robo manifiesto.
Somos más dados a transigir con los vanidosos, que con los infatuados; el vano es sensible respecto a nuestra opinión sobre él y eso halaga nuestra estima, el fatuo no y a causa de eso nos la hiere.
Burn the candle at both ends. Consumir la vela por los dos cabos, aquellos que derrochan energías en la actividad y los placeres, esposos que, por disipación y ocupaciones no cumplen sus deberes matrimoniales.
Acusar la competencia de un extraño.
El tiempo separa lo baladí de aquello que tiene peso; y la posteridad escoge entre el cúmulo de materiales llegados, lo que conviene mejor a sus menesteres inminentes.
Facultad que permite al novelista alojarse dentro de la piel de los personajes que crea, para reflexionar las ideas y sentir con sus sentimientos.
Kant pretendía que lo sublime no existe en la Naturaleza; es importado por la sensibilidad humana.
Shocker. Espécimen malo, novela sensacionalista de mala calidad.
Teoría de la ficción policíaca. El propósito del autor es impedir que uno adivine quién es el criminal. Han de existir una serie de motivos para el crimen. Motivos monetarios, el miedo y la venganza. Los detectives son de tres tipos. Oficial, private eye, detective particular o shamus y aficionado.
Whodunit. Who done it. Quién lo hizo. Novelas de misterio y de intriga.
La moda del análisis psicológico, si se abusa tiene una consecuencia muy perjudicial para la ficción seria de la actualidad, como las descripciones del lugar de la acción en las novelas del siglo XIX. Ha de describirse con brevedad y usarse con el exclusivo objeto de seguir el hilo del relato.
Hard-boiled. Duro de piel, de pelar, novelas de duros, estilo realista.
Viejas novelas de intriga y deducción.
Diálogo. Tono coloquial.
Acción. Ser más rápido en describir las emociones. Contenido o apasionado.
Acusar de malversación.
Antítesis. Variante del equilibrio.
<<The Tatler>>, revista de Steele y Addison, órgano whig en tiempos de la reina Ana.
Metéfora entretejida con el asunto de la prosa, a la manera que los tejedores de Lyon entretejen los hilos de un color con los de otro a fin de dar a sus telas la brillantez tornasolada de la seda.
Carnet de un escritor.
Humorismo cockney.
Amistad del atractivo animal y del intelectual.
En momentos de gran excitación, los frenos comunes pierden su fuerza y el ser humano vuelve a la vieja ley del ojo por ojo y diente por diente.
Azul empírico del ánimo.
Nietzsche con su glorificación del sufrimiento es como la zorra de la fábula, que ha perdido su cola. Su argumento de que el dolor refuerza el carácter se resuelve en el hecho de que el ser humano que ha sufrido clama venganza.
Acusar de suicidio frustrado.
Terrible inhumanidad de la Justicia.
Humorismo despreciativo.
El suntuoso oro de la tarde de verano.
Brezo. Amatista.
Extraña idea de reflexionar que la transformación tiene que ser un progreso.
Humorística resignación.
Caza del empleo, intrigas, tráfico de influencias y celos personales, que han desolado el país checo.
El humorismo distingue la infinita diversidad de los seres humanos.
Ingenio y agudeza de la réplica, dardo ágil del sarcasmo, intelectualidad del epigrama, frase de humor.
Vieja escuela de Octave Feuillet o Cherbuliez.
La forma de una historia es una especie de memoria técnica, que la mantiene en nuestro recuerdo. En una novela hay que fijar bien cuál es el punto esencial y aferrarse a él de manera inquebrantable. Tiene que tener forma.
Legión de referencias.
La estimación de los valores depende de las circunstancias. Pueden transformarse de una generación a otra. Los valores apreciados por los griegos de la edad homérica no son idénticos que los admitidos en la guerra del Peloponeso.
El idioma se ha desarrollado según los menesteres biológicos.
El escritor de novelas sólo puede crear personajes adecuados, que sean un aspecto de él. Los otros los describe, no los crea y raras ocasiones tiene persuasión.
El viejo Tiempo, con su guadaña, tiene la cabeza vuelta hacia el otro lado.
Marca de la estima.
(Burla burlando)
Conchie. El que se niega a luchar en la guerra porque repugna a sus reglas morales.
Nobby. En el habla familiar, elegante, presumido o perteneciente a una categoría social elevada.
Serpentine. Arroyo de los jardines de Kensington, en Londres.
Según las leyes inglesas, un marido no puede declarar oponiéndose a su propia mujer.
(Una hora antes del amanecer)
Dos maneras de escribir una novela. En primera persona y desde el punto de vista de la omnisciencia. En la segunda, el autor puede decir lo que reflexiona si cree menester que nos guíe, para seguir su argumento y entender sus personajes. Puede describir sus emociones y motivos desde el interior. Riesgo de ser inmanejable, prolija y difusa.
Contar una historia en primera persona ofrece verosimilitud al relato y obliga al autor a ceñirse a su personaje central; sólo puede decir lo que este ha visto, oído o hecho. Provoca la simpatía del lector hacia el escritor. Desventaja del protagonista-escritor. El personaje central aparece pálido, en comparación con las personas que le rodean. El diálogo debe prestarse a caracterizar a los que hablan y hacer avanzar la trama de la novela. Los pasajes tienen que ser vivos, ir directamente al grano. La manera de escribir sencilla y el estilo adaptarse al asunto. Finalmente, una novela tiene que ser distraída (inteligente, con atractivo o diversión).
Seres humanos vanos, variables y vacilantes.
Vivimos en un mundo atormentado y la cuestión del novelista es entendérselas con él. El futuro es incierto. Nuestra libertad está amenazada. Vivimos atenazados por las ansiedades, terrores y fracasos.
Novelas del relato del incidente.
Genio. Algo innato, ligado con graves defectos. Poder intelectual ingénito de tipo exaltado, como el que se atribuye a los que han destacado en el arte, la especulación o la realización. Instintiva aptitud para la creación imaginativa, la reflexión original, la invención.
El realista es un determinista y da a sus relatos una racionalidad verosímil.
Los libros que un autor escribe dependen del ser humano que sea. Saber su historia personal.
Don de la creación.
Una novela es un conjunto de acontecimientos imaginados, para presentar un numero conjunto de personajes en acción y atraer al lector. No es una copia de la vida. No se pueden reproducir las conversaciones de la vida real, han de ser extractadas, para presentar los puntos esenciales con claridad y concisión. Los hechos han de sufrir deformación, para que concuerden con el plan del autor y mantengan la atención del lector.
Prosa racional, precisa, ágil y variada, rítmica, sonora y musical como la poesía.
Las novelas están en consonancia con la época que fueron escritas, en la forma de escribir común al tiempo, por su coincidencia con el clima de opiniones, con el punto de vista moral de sus autores y con los prejuicios que aceptan o rechazan.
Litératise. Estilo hinchado y pedante.
Para construir una novela se precisa esprit de suite, sentido racional, por el cual uno coloca el material en una disposición coherente, de manera que las diversas partes sigan con verosimilitud y el todo queda redondo, sin hilos sueltos.
El año 1854, estalló la guerra de Crimea y en el sitio de Sebastopol Tolstoi estuvo al frente de una batería.
Beau ténebreux de las novelas románticas.
Las viejas creencias no eran aceptadas de manera incuestionable y en el aire y la vida flotaba un fermento de nuevas y excitantes aventuras. Novelas realistas y sensacionalistas.
(Diez novelas y sus autores)
Williams
El ingenioso y brillante Garson Kanin, escribió una biografía sobre Somerset Maugham con una superior falta de sumisión al plano cronológico y me gustó la elaboración.
King
La astucia con la que Somerset Maugham percibía los valores del relato. Primero le sedujo y luego le devolvió a la infancia y eso era maravilloso.
D´Ormesson
Cocktails del hotel Raffles de Singapur cantado por Somerset Maugham.
D´Ormesson
Cocktails del hotel Raffles de Singapur cantado por Somerset Maugham.
Jack London
Causa original, secundaria, pero innegable.
El beneficio de la sabia distribución de la actividad profesional.
En la dirección de una nave hay verosimilitud matemática. La brújula.
Sombra de una broma.
El pánico, sufrido en común con la muchedumbre, es menos horroroso que el que se siente en plena soledad.
Lenta, metódicamente, con un esfuerzo manifiesto para hablar.
En ocasiones, manifestar la terrible cólera del león o el desencadenamiento de la tempestad.
Educado en el respeto a la muerte, rodeada de un piadoso y emocionante ceremonial.
Torrente de abrasadoras injurias.
Dulzura aparente, que tenía el agrado cortante del acero.
Flexibilidad del ánimo.
Desde el punto de vista de la racionalidad pura, el razonamiento era irrefutable y justo.
Fatídico capitán.
La vida es una porquería. Es una levadura que actúa, una fermentación que dura, según los casos, una hora, un día, un año, un siglo algunas ocasiones. Después termina como había comenzado. Durante este tiempo, los grandes, para alimentarse, comen a los pequeños; los fuertes, para nutrir su fuerza, devoran a los débiles. El ser humano se agita sin tregua. Es una ley. Se agita para ganar el pan, que le permitirá poder seguirse agitando. Es un círculo vicioso. Un buen día se paraliza. Es el fin; la muerte. No existen sueños anímicos, radiantes y distinguidos. Todo se reduce a sueños del vientre.
Soñamos con explotar perfectamente a nuestros semejantes, con pasar noches voluptuosas, mientras los demás se ocupan por nosotros de nuestros apremiantes menesteres.
Sonoras injurias.
Está en el instinto de los lobos odiar la fuerza que se manifiesta en los demás.
Elevarse a las altas esferas del ideal, caer en el materialismo más espeso.
Solitario que seguía la máxima de <<todo propiamente y para uno>>.
Balance de beneficios.
A fin de elevarme por encima de la condición social en la que he nacido, he sumergido el ánimo en los libros.
Cuestión de gramática, de ética o de hecho, por encima está la cuestión de la ley, creer en el bien y el mal. No hay más que una regla, la de la fuerza. El débil no tiene razón sólo porque es débil. Por eso es bueno y provechoso ser fuerte. Opuestamente, el ser humano digno de tal nombre debe tener en cuenta su propio placer y compartirlo con la atracción y el placer de su semejante. En filosofía se denomina altruismo. Un acto de altruismo es un acto realizado por el bien de otro. El altruista es opuesto al egoísta, que no reflexiona más que en él. Para Spencer, el altruismo está íntimamente ligado al ideal de vida superior.
Hedonista es un ser humano que practica la filosofía del placer, como Epicuro.
Especulaciones filosóficas.
Cálida discusión de tono especulativo, opuesto a pasar a estimaciones imparciales.
Los ojos, un signo de inteligencia y razón.
Exaltación terrible de un loco.
Materiales defensivos.
Relámpago de lucidez.
Gesto de reconciliación.
Injuriar sin tregua.
Coraje del cobarde.
Argot de Billinsgate. Mercado de pescado de Londres.
Actitud compuesta de dominación, insulto y desprecio.
Referencias entre el capitán y el marinero, el soberano y el bufón.
Arena de los tiempos.
Alegría creadora de los vivos sobre los muertos, el orgullo del fermento que ha bullido congruentemente. Obstinada perversidad mental.
La suerte, según la historia nos enseña, ha elevado en ocasiones hasta la púrpura a esclavos natos. Pero nadie crea la suerte, la ocasión favorable. Todo lo que puede hacerse es reconocerlo cuando viene a nosotros.
Frío cinismo.
Uñas llenas de padrastros.
Tiempo relámpago.
Recorrer la gama de las acusaciones.
Paciencia angelical.
Engaño con un fin premeditado.
Dolor en el vacío, al ver alguna violencia.
Ultimo grado del abatimiento y la desesperación.
Fin utilitario.
Labios crispados con un rictus satánico.
Burla satánica.
La angustia general me envolvía entre sus pliegues.
Materialismo disolvente.
Visión, relámpago de triunfo.
Enderezar las orejas los animales aletargados.
Manifiesta inquietud.
Gravemente, como un juez en el pretorio.
Aticismo recíproco de la conversación.
Ritmo del esfuerzo.
Flexibilidad especial propia de las fieras de la selva.
Producto completo y refinado de la decadencia.
La realidad es cruda y sin velos, unica moneda que vale.
Ojos. Brillar el relámpago de la vida.
Dorada y larga barba plutónica.
Murmuración publica.
Lucifer fue el primer anarquista.
Mi consciencia se sumergió en esa semimuerte, que significa el sueño.
Rabia ilimitada.
Dulce e inconsciente ensueño.
La mar representa la gran infiel.
Viento con soplidos titánicos.
Relámpago de alegría.
Mundo de la decadencia de la civilización, libros, estudio.
Ilusión imprevista.
Esclavo de un código impuesto, prestigioso en el ambiente donde ha vivido.
Espectáculo de la desesperación del fuerte aniquilado.
Voluptuosidad sin par.
Condición de perjudicar.
Un mensaje que viniera de las tinieblas de la tumba.
(El lobo de mar)
Cinta de árboles.
El beneficio de la sabia distribución de la actividad profesional.
En la dirección de una nave hay verosimilitud matemática. La brújula.
Sombra de una broma.
El pánico, sufrido en común con la muchedumbre, es menos horroroso que el que se siente en plena soledad.
Lenta, metódicamente, con un esfuerzo manifiesto para hablar.
En ocasiones, manifestar la terrible cólera del león o el desencadenamiento de la tempestad.
Educado en el respeto a la muerte, rodeada de un piadoso y emocionante ceremonial.
Torrente de abrasadoras injurias.
Dulzura aparente, que tenía el agrado cortante del acero.
Flexibilidad del ánimo.
Desde el punto de vista de la racionalidad pura, el razonamiento era irrefutable y justo.
Fatídico capitán.
La vida es una porquería. Es una levadura que actúa, una fermentación que dura, según los casos, una hora, un día, un año, un siglo algunas ocasiones. Después termina como había comenzado. Durante este tiempo, los grandes, para alimentarse, comen a los pequeños; los fuertes, para nutrir su fuerza, devoran a los débiles. El ser humano se agita sin tregua. Es una ley. Se agita para ganar el pan, que le permitirá poder seguirse agitando. Es un círculo vicioso. Un buen día se paraliza. Es el fin; la muerte. No existen sueños anímicos, radiantes y distinguidos. Todo se reduce a sueños del vientre.
Soñamos con explotar perfectamente a nuestros semejantes, con pasar noches voluptuosas, mientras los demás se ocupan por nosotros de nuestros apremiantes menesteres.
Sonoras injurias.
Está en el instinto de los lobos odiar la fuerza que se manifiesta en los demás.
Elevarse a las altas esferas del ideal, caer en el materialismo más espeso.
Solitario que seguía la máxima de <<todo propiamente y para uno>>.
Balance de beneficios.
A fin de elevarme por encima de la condición social en la que he nacido, he sumergido el ánimo en los libros.
Cuestión de gramática, de ética o de hecho, por encima está la cuestión de la ley, creer en el bien y el mal. No hay más que una regla, la de la fuerza. El débil no tiene razón sólo porque es débil. Por eso es bueno y provechoso ser fuerte. Opuestamente, el ser humano digno de tal nombre debe tener en cuenta su propio placer y compartirlo con la atracción y el placer de su semejante. En filosofía se denomina altruismo. Un acto de altruismo es un acto realizado por el bien de otro. El altruista es opuesto al egoísta, que no reflexiona más que en él. Para Spencer, el altruismo está íntimamente ligado al ideal de vida superior.
Hedonista es un ser humano que practica la filosofía del placer, como Epicuro.
Especulaciones filosóficas.
Cálida discusión de tono especulativo, opuesto a pasar a estimaciones imparciales.
Los ojos, un signo de inteligencia y razón.
Exaltación terrible de un loco.
Materiales defensivos.
Relámpago de lucidez.
Gesto de reconciliación.
Injuriar sin tregua.
Coraje del cobarde.
Argot de Billinsgate. Mercado de pescado de Londres.
Actitud compuesta de dominación, insulto y desprecio.
Referencias entre el capitán y el marinero, el soberano y el bufón.
Arena de los tiempos.
Alegría creadora de los vivos sobre los muertos, el orgullo del fermento que ha bullido congruentemente. Obstinada perversidad mental.
La suerte, según la historia nos enseña, ha elevado en ocasiones hasta la púrpura a esclavos natos. Pero nadie crea la suerte, la ocasión favorable. Todo lo que puede hacerse es reconocerlo cuando viene a nosotros.
Frío cinismo.
Uñas llenas de padrastros.
Tiempo relámpago.
Recorrer la gama de las acusaciones.
Paciencia angelical.
Engaño con un fin premeditado.
Dolor en el vacío, al ver alguna violencia.
Ultimo grado del abatimiento y la desesperación.
Fin utilitario.
Labios crispados con un rictus satánico.
Burla satánica.
La angustia general me envolvía entre sus pliegues.
Materialismo disolvente.
Visión, relámpago de triunfo.
Enderezar las orejas los animales aletargados.
Manifiesta inquietud.
Gravemente, como un juez en el pretorio.
Aticismo recíproco de la conversación.
Ritmo del esfuerzo.
Flexibilidad especial propia de las fieras de la selva.
Producto completo y refinado de la decadencia.
La realidad es cruda y sin velos, unica moneda que vale.
Ojos. Brillar el relámpago de la vida.
Dorada y larga barba plutónica.
Murmuración publica.
Lucifer fue el primer anarquista.
Mi consciencia se sumergió en esa semimuerte, que significa el sueño.
Rabia ilimitada.
Dulce e inconsciente ensueño.
La mar representa la gran infiel.
Viento con soplidos titánicos.
Relámpago de alegría.
Mundo de la decadencia de la civilización, libros, estudio.
Ilusión imprevista.
Esclavo de un código impuesto, prestigioso en el ambiente donde ha vivido.
Espectáculo de la desesperación del fuerte aniquilado.
Voluptuosidad sin par.
Condición de perjudicar.
Un mensaje que viniera de las tinieblas de la tumba.
(El lobo de mar)
Cinta de árboles.
Hondamente anegado en los bajos fondos del abismo social.
Engendro de la degradación humana.
El hervor de la dignidad.
Ampollas de carne fofa.
Saltos que llaman de gamo.
Apotegmas de moralistas y filósofos.
La noche tiene velo de joven casta.
Cuando yo extendía el brazo para asirla, se desvanecía entre mis manos como una sombra.
Nido de pecados y cubil de tentaciones.
Césped celestial.
Autoconciencia alquitranada y fina.
Patrullas de segadores.
Hondo abismo humano.
Cerdo largo, hombre blanco.
Dos cruceros peinaban el mar.
Botellas de ginebra y cajas de dinamita.
Concibo el infierno a la manera de un bosque infinito de palmeras, hechido de cajas de ginebra y poblado por marineros náufragos.
Suficientes para un funeral.
Majal de salmonetes.
El círculo de luz indecisa que, como un nimbo de radiación abierta a las tinieblas de la noche, circundaba la hoguera.
(Los Vagabundos)
Fantasía de los enfermos.
Sonido. Sonoro como el trueno, blanco como el tintineo de campanillas de oro, afilado y dulce como la cuerda argentina de un laúd. No hay palabras ni semblanzas en el vocabulario humano, ni memoria en el recuerdo de la experiencia, con las que describirlos adecuadamente.
El mar de las horas.
Impulso vocal.
Clarín de guerra.
Transmitir tal vez algún secreto cósmico de incalculable valor e importancia.
Helechos y orquídeas.
Fuego contaminador.
Entregándose a la voluntad de los mosquitos.
De la concepción al acto.
Selva silenciosa y húmeda.
Monstruosas formas vivientes, parásitas, decadentes, arraigadas en la muerte.
Un toro herido cercado por coyotes.
La selva terminó bruscamente.
Columna vertebral de la isla.
Lluvia de plata desleída.
La luz del recuerdo.
El tesoro de la lluvia.
Sonido mágico.
Los cinceles de la decadencia de la civilización.
El enigma del todo.
Las alas de la inteligencia.
Mundos invisibles, soles inefablemente remotos.
Una estrella de las criptas tenebrosas de la materia ciega.
El tiempo limita el espacio.
Fermento cósmico.
El sol que preside nuestro sistema.
En alas de su razón.
Lejanos y excelsos camaradas.
Confusión y tinieblas.
Al margen del favor.
Ingénito optimismo propio de la naturaleza.
Alternando los periodos de letargo con los semiinconscientes.
Reflexionar en cosas grandes, de la luz y las tinieblas.
Oleada de tinieblas.
(El Ídolo Rojo)
La playa era una casa de orates o una olla de grillos.
Ensueños de oro.
El fantasma del fracaso.
La corriente agarraba el bote como una garra invisible.
Pesadillas pobladas por los monstruos de torcidos deseos e instintos desviados.
El torrente radiante del alba fecunda.
Mala estrella.
(Como Argos en los tiempos épicos)
En ningún puerto del mundo se ojean salidas de vapores semejantes a las que el viajero presencia en el muelle de Honolulu.
La gran orquesta de los adioses.
Flores abominables.
Áridas páginas de los libros.
Añoranza misteriosa por entender el significado de la vida.
Próxima y lozana plenitud.
El fuego de la energía, del color, de la luz.
Divinidad de oro de los mares.
Éxtasis de agradables remembranzas.
Clima sazonador.
Hapa-haole. Mestizo.
Lluvia de flores entre el rocío de las blancas perlas.
(Hawaiana)
El lejano país de esta verdadera historia.
En sus ojos vislumbré un fulgor extraño, indagador, como si revelaran un vano esfuerzo por recordar algo extremadamente importante.
Un buscador de oro muy ruboroso, que desee permanecer anónimo.
La mole fastidiosa de nuestras respectivas personalidades.
Visión suplicante de gacela, que no quiere sucumbir.
Millonarios. Vanderbilt, J.P. Morgan.
El mal de las alturas.
La luna desleída en un mar de plata, sobre los pinos de nieve.
(La Pillastrona)
Símbolo de lo desconocido.
La roca firme de su inconmovible contentamiento.
Los hombres se hacen ricos con la actividad de manos ajenas. El más opulento de los hombres es el que consigue tener un mayor numero de semejantes suyos, trabajando para su particular provecho. Ningún ser humano se hace rico con la actividad de sus propias manos.
Extravagante sencillez.
Fausto oriental.
Como filósofo que era, entendía que los gustos de sus hijos se avenían mejor con las reglas occidentales.
Táctica ocasional.
Modelo de honradez como ser humano de negocios. Su palabra valía igual que su firma.
Laberínticos procesos orgánicos mentales.
El enjambre de la vida y del movimiento.
Ámbar desleído.
Trópicos y agudezas.
Sumergida en profunda concentración, buceaba en las cavernas ocultas de su ser, donde hasta entonces nunca había penetrado.
Como quien oye llover.
(El chinito de Honolulu)
Moore
London, "Recuerdos soleados de tierras foráneas". Los libros de su madre.
Lowry
Jack London, "El valle de la luna".
Lowry
Jack London, "El valle de la luna".
Kerouac
Era un barco muy viejo y había sido construido con cariño, tenía hermosas tallas de madera y arquetas empotradas. Era el fantasma del San Francisco de Jack London.
Yevtushenko
Jack London cantó el amor de la vida. Pero olvidó que el amor a la vida podía llegar a transformarse en cobardía y traición.
Jack London, "Martin Eden".
Zinn
London era un miembro del Partido Socialista. Hijo de madre soltera procedía de una barriada de San Francisco. Había sido repartidor de periódicos, trabajador en una fábrica de enlatado, marinero, pescador, había trabajado en una fábrica de yute y en una lavandería. Viajaba sin pagar en trenes que iban a la costa este, le arrestaron por vagabundo en las cataratas del Niágara; en la cárcel vio cómo golpeaban y torturaban a los presos, cogía ostras furtivamente en la bahía de San Francisco. Leyó a Flaubert, Tolstoy, Melville y el Manifiesto Comunista, predicó el socialismo en los campos de buscadores de oro de Alaska el invierno de 1896, volvió navegando 2.000 millas por el mar de Bering y se transformó como un escritor de novelas de aventuras. El 1906 escribió la novela "The Iron Hell" (El talón de hierro) con su ideal sobre una hermandad socialista.
Hinton
Los pasajes de Jack London que la manada de lobos espera que uno o dos caigan bajo la pelea.
Suicidio, autodestrucción, terminar una existencia intolerable.
Un escalofrío de placer.
Cabezas achatadas y puntiagudas, de muchos a quienes encierran en los centros para enfermos mentales.
Expresión amigable.
Gesto indefinible.
Conducir la conversación.
Tono conciliador.
Rellenar las heridas con colodión.
Estirar los brazos con un gesto magnífico de orgullo y poder.
Arrastrar los pies como un desterrado de los suburbios.
Expresión estúpida y vacilante.
Levantando las cejas con una expresión sorprendida y enigmática, que me hizo temblar con una ira reprimida.
Tono condescendiente.
Tono apaciguador.
Tono triunfal.
Los reflejos adormecidos de un ópalo.
La perfecta cordialidad de la conversación.
Manantiales minerales muy saturados de sílice, que las hojas y ramitas que caían se volvían de piedra tras un tiempo. El proceso orgánico por el cual el sílice sustituye la materia vegetal, átomo a átomo, con la consecuencia de un duplicado del objeto en piedra.
Siniestro y codicioso.
Devorar el deseo por el oro.
Expresión de alivio.
Un peso adormecedor me invadió las extremidades y el cerebro.
Expresión de cansancio y ansiedad.
Agonía de vergüenza y tristeza.
Máscara de autoengaño, desnudando la verdad latente.
Las nubes volvieron a embotar sus sentidos.
Replicar efusivamente.
La sensación de obligación que persistió durante el delirio.
Tomar el Orient Express hacia Constantinopla.
Una fatigosa expectativa.
Un idiota histérico.
Horrores sobrenaturales.
Noción de truculento misterio.
Una carretilla llena de junquillos amarillos, pálidas violetas de la Riviera, oscuras violetas rusas y blancos jacintos romanos, entre una dorada nube de flores de mimosa.
Hedonistas de domingo.
Misión conectada con la destrucción.
Un pasaje, un impasse, que sólo puede ser atravesado por peatones.
Ojos infernales.
Expresión de reproche.
La luna goteando rocío.
Ver con desinterés.
Negro e inhóspito.
Ha sido un sueño tras una cena de cangrejos.
Repugnancia abrumadora.
Temblar como una hoja.
Un instinto brutal de vanidad gratificada.
Sombrío puritano.
Otros habitualmente cumplen con su deber y encuentran una hosca satisfacción en hacerse propiamente y a todos los demás infelices.
Columbré el futuro de frente y vi los distintos finales del affaire.
Una repentina ira furibunda.
Palabras diáfanas como el cristal, transparentes y musicales como manantiales burbujeantes.
Sus periódicos prosperarán con sangre y lágrimas.
Éxtasis de miedo.
Gaviotas que planeaban y se agitaban como trozos de papel blanco.
El sol se hundió en la llanura y el cenit relampagueó en el arrebol del crepúsculo.
Expresión apenada.
Grácil gesto.
Expresión seria.
El eslabón que conecta el erizo de mar, la araña y el demonio.
Reflexivo silencio.
Una mina de oro de corte transversal.
El inglés, enredado en sus consonantes aspiradas.
Soportar el hastío existencial.
Los molinos de los dioses han comenzado a moler.
Reportero con ojos de comadreja.
Expresión grave.
Decorosamente perplejo.
Brisa perdida procedente de acres nenúfares.
Los Kuen-Yin, los brujos de China, secta mortífera y diabólica.
Yue-Laou, el Creador de Lunas, Dzil-Nbu de los Kuen-Yuin.
La conversación está adquiriendo un tufillo a plumas de pavo real y avispas.
Decorosa tos.
Tono severo.
El hilo de las reflexiones.
Césped de terciopelo.
Gesto levemente tímido.
Tono agradable.
Una expresión semejante al terror.
Usar las alegorías de otra tierra.
Expresión sobrenatural.
Un nogal ceniciento.
Silencioso afecto.
Un lince con los ojos brillantes como carbones.
El plácido resplandor de las estrellas estáticas me reconfortó y seguí avanzando a través del estrecho cinturón de abetos.
Una luna enorme, sedosa.
Ladino viejo zorro.
Indolente existencia.
Radiante de esplendorosa indignación.
Un mensajero con un fajo de pruebas.
Pulcro y sarcástico discurso.
El césped pulcramente podado.
Alimaña humana.
Expresión ausente.
Expresión de sospecha.
Una marabunta de gente ajetreada iba de un lado a otro de la ciudad, oficinistas flacos de sobrios rostros, estilizados corredores de bolsa de gélida expresión, aquí y allá un político paleto abrazándose a algún miembro del partido favorito.
La expresión de alguien que se apresura hacia un propósito imposible.
Expresión abatida de estar en el paro.
Súbitamente, me asaltó esa extraña inquietud, que todos hemos experimentado... esa sensación ensoñadora de haberlo visto todo antes, de haberlo vivido antes.
Algo vago y, sin embargo, familiar, me afligía.
Me dio la sensación de oír un eco de mi suspiro.
Un matiz de sarcasmo bienintencionado.
Gesto cordial.
La política del periódico.
¡Sapo de sangre fría!
Tomar una terrible decisión.
Fría apatía de reptil.
Desapasionado, vil e inhumano.
Reptiles humanos.
Involuntario retroceso.
Acusado de traición.
La conmoción y la ira popular.
Remover la indolente y fría sangre.
Tono bajo y vibrante.
Reflexionar lúgubremente.
Sopesar la venganza.
Especular con la muerte.
Macabro suicidio.
El moribundo crepúsculo.
Expresión obstinada.
Magnífica mariposa púrpura, la Apatura Iris.
Libélula común, Anax Junius (Drury).
Explosiones de erudición.
Tornarse amarillo de humillación y envidia.
Dulce y de alta alcurnia, dama del distinguido barrio de Fauburg, bailando con sus primos en una fête champêtre de Luis XV.
Expresión estúpida.
Era obvio como una nariz en la cara.
Reflexionar amargamente sobre la diferencia de las pistas de la vida real y las pistas de una novela de detectives.
Orgullosa humildad conmovedora
La mandíbula laxa por el terror.
El soleado mar oscilaba como un cuenco de oro molido, desde los acantilados hasta el horizonte.
Gesto impaciente.
Ojos distraídos de miope.
Tono lastimero.
Expresión lúgubre.
Creer en hombres lobo y fantasmas.
Lívido por el terror.
Jadeando exasperado y aterrorizado.
Llamativas mariposas de ortiga, pertenecientes a la gran familia de las Vanessa.
Le Loup Garou. Licántropo.
Polilla que vuela de noche, la Esfinge Calavera, el Mensajero de la Muerte. Froissart habla de esa polilla en sus comentarios sobre las crónicas de Jacques Sorgue. Si una se colara por la ventana, trae mala suerte a la casa y a las personas que la habitan.
Finas madejas de relámpagos.
Un relámpago en zigzag.
Gesto impaciente.
La débil luz de la superstición.
Con ojos brillantes en torno a los ojos vacíos del miedo. Y derrotó al temor.
Expresión de asombro.
Blanco pecho de la Luna.
Las noches, azules y espolvoreadas de estrellas, venían, se esfumaban y volvían, sólo para expirar al amanecer como el aroma de una violeta.
(El rey de Amarillo)
GEORGE BARR McCUTCHEON
Compensar los largos años de intransigencia.
Expansión afectuosa.
Expresar preocupación.
Gesto vacilante.
El dinero era suyo sin restricciones ni compromisos.
Señales de lacónicas indicaciones.
El albacea había de entregar el dinero al día siguiente de la validación del documento.
Atmósfera opulenta y extraña.
Tono nervioso y confidencial.
Con un ánimo ligero y radiante como una mañana de mayo.
Arduos procesos orgánicos mentales.
Tono dulce, pero decidido.
De un lugar muy remoto de su memoria llegaba la imagen.
Poseer un patrimonio valorado en millones.
Bienes libres de cargas, garantizados como un bono.
Un simple proceso orgánico de destrucción.
Exclamar eufórico.
Una realidad extraordinaria.
Testamento vinculante.
Verificar de manera fehaciente el inventario de bienes.
Un ser humano práctico, con las ideas claras.
Extenso telegrama.
Especular como un idiota a través de la Cámara de Comercio.
Con las donaciones, la memoria del beneficiario sería un bien intangible.
Conflicto interior.
Obligado a refrenar su tumultuosa imaginación.
Tener una memoria corta.
La inteligencia estratégica de un general.
Un levísimo aroma de suntuosidad.
Gesto de urbanidad.
Exclamaciones de consternación.
Alegría diabólica.
Superar un gravísimo escollo en los cálculos mentales.
Con la suficiente dosis de buen humor.
Profundas y dolorosas reflexiones.
Dar consejo y ánimos.
Extraña sensación de soledad.
Olfato para detectar cualquier ocasión.
Tono apremiante.
Jugar frívolamente con las emociones.
Llegar el momento de tomar decisiones radicales.
Tono decidido y cariñoso.
Vivir entregado al ocio.
La operación de compra había insuflado vida a las acciones de la compañía.
Un alarde de inteligencia.
Alcanzar el punto límite de la cotización. A partir del que era inevitable el desplome.
Dar por garantizada una huelga masiva, uno de los factores de que las acciones caerían. Desaparecido ese peligro, no había nada que amenazase su valor.
Oscilar entre la euforia y el desánimo.
Aventura bursátil.
Superintendente de negocios.
Desastre de la Bolsa.
Timidez natural.
Garbo y vigor.
El campo de batalla del amor.
Singular misión.
Tono glacial, mucho más alarmante que el apasionamiento.
Frialdad exasperante.
Tono tranquilo.
Tono jovial.
El estupor los llevó a blasfemar entrecortadamente.
Expresión desafiante.
Expresión mezcla de incredulidad y preocupación.
Un golpe de suerte en lo económico.
Reflotar el banco.
Entidad solvente.
Retiradas de depósitos.
Fuga de depósitos.
Desatar el pánico.
Expresión de impotencia.
Actitud desdeñosa.
Reservas de tacto.
Actitud displicente.
Endosar la responsabilidad.
Su enfado era una planta, que había que cultivar con esmero.
Experiencia amarga.
Comportarse con la dosis justa de humildad.
Demasiado simple, para dar la impresión de sufrir.
Especular para sus adentros.
Estratagema detrás del melodrama.
Expresar indiferencia.
Tono ceremonioso.
Dispendios insólitos.
Gestos que denotaban fatiga.
Una novela farragosa.
La actitud obedecía a una motivación secreta.
Con un rictus decidido.
Tono agrio.
Gesto de impotencia.
Algo en la actitud le desarmaba.
Quitar hierro al asunto bromeando.
Conversación íntima.
La Batalla de las Flores, desfile floral, uno de los espectáculos del carnaval de Niza.
A los irlandeses les gustan las manifestaciones.
Tono especialmente cordial.
La solemnidad de un estadista.
Un gesto imponente.
Su actitud indicaba que se disponía a expresar una reflexión de extraordinaria trascendencia.
Simular euforia.
La guía Baedeker semejaba diseñada para economías modestas.
Colmar de atenciones.
Venecia, voluminoso país.
Repulsión indisimulada.
A la diversión sucedió el pánico.
Poco más que un nombre en la conversación.
Botes indolentes, siniestros, como buitres que planearan sin propósito aparente.
Pánico y desesperación.
Las emociones a flor de piel.
Lacónica exhortación inquietante.
Reflexionar sobre los programas económicos.
Gesto serio y decidido.
En su expresión se sucedieron la perplejidad, la incertidumbre y el dolor.
Sensación de soledad total.
Reprimir y descargar las emociones.
Impaciente por influir en la conversación.
Mover la cabeza con gesto escéptico.
Una exclamación de impaciencia.
Máscara de impavidez.
Decir sandeces, como suelen hacer los hombres, para disimular los nervios.
Desbocarse la imaginación.
"Las intromisiones de Peggy", novela de 1902, de Anthony Hope.
Una sombra de decepción.
El borrascoso Atlántico.
Agarrar la mano, un gesto de reconocimiento elocuente.
Colmo de la insensatez.
Callado como las montañas.
La sensación de ser un paria, un apestado, un ser que inspiraba repulsión y que podía contaminar a todo aquel que se acercase.
Una actividad monótona.
Pruebas abrumadoras.
Gesto de preocupación.
Gesto desesperado.
Intereses por fondos depositados en bancos.
Mover la cabeza con gesto incrédulo.
La euforia que acompaña la temeridad.
Reflexionar angustiada un instante.
Tono aterradoramente serio.
Las acciones, los bonos, las cosas de valor.
Canjear los valores convertibles por sumas de dinero enormes.
Sobrecogedor relato.
Fama de excéntrico.
A buen hambre no hay pan duro.
Expresión de impotencia.
Teñir de negro el porvenir.
El valor del esfuerzo diario.
(Los millones de Brewster)
GEORGE GISSING
Con la frente afligida.
El tono fue espontáneo y, por tanto, eso requiere justificación.
La horca, una importancia fatídica.
El ritmo de producción literaria.
Error fatal.
Las ventajas del dinero.
Si doy una verosímil impresión de regocijo es solo porque mi intelecto disfruta con la percepción clara de un hecho específico.
La literatura hoy es un negocio. Aparte de los hombres de genio que triunfan por mera fuerza cósmica, un escritor con éxito no es sino un comerciante. Reflexiona respecto del mercado antes que ninguna otra cosa y cuando empieza a escasear una mercancía está preparado para ofrecer algo nuevo y apetitoso. Sabe perfectamente las fuentes de ingreso. Si tiene algo que vender consigue que le paguen de varios sitios distintos, nada de ventas por una suma ridícula a un intermediario que luego obtiene beneficios de seis sitios diferentes.
Grub Street se llama actualmente Milton Street y está cerca del Barbican Centre de la City londinense. Con el tiempo llegó a asociarse con los escritores a sueldo y como sinónimo de las penurias asociadas a la literatura.
La Grub Street de hoy es un sitio muy diferente; dispone de comunicación telegráfica, sabe las tarifas literarias del mundo; sus habitantes por muy sórdidos que sean son hombres de negocios.
Un débil tono de preocupación.
Expresión de ceñuda resolución.
Tocada por el genio.
¿Qué diantre tendrá la tipografía para que todo lo referido tenga que ser sagrado?
Ni demasiado brillante ni demasiado argumentado.
Recurrir a prácticas radicales para prosperar.
El color de una hoja de arce, la forma de un alto cardo, la consistencia de una seta.
Un rostro grave e impresionante.
Evidentes moradores del valle de sombras de los libros.
La eliminación de su preocupación respecto del futuro había hecho que desarrollara una serie de alegres cualidades.
La Territorial Army, una unidad de soldados británicos voluntarios no profesionales destinada a la defensa de Gran Bretaña.
Durante una expedición otoñal a las Hébridas pasó una noche al raso con la consecuencia de que sufrió un ataque casi fatal de fiebre reumática.
Un baqueteado escritor.
Tono amistoso.
Charlar de trivialidades.
Tono bajo, reflexivo y amable.
Un ligero énfasis.
La inteligencia y la inestabilidad de su temperamento.
Vigor intelectual.
La emoción que sentía no era precisamente desagradable.
Aprovechar la coyuntura.
El tipo especial de color marrón que emplean los tenderos.
El estómago dispéptico.
Carlyle. Vituperar la liberatura, no leer.
Desarrollar la idea de forma humorística.
Gesto de indiferencia.
Cuando abandonaba de lado la cuestión de sus propias dificultades y ambiciones sabía conversar con una alegría espontánea que enseguida le ganaba la buena voluntad de quienes lo escuchaban.
Temperamento rural.
La cuestión aunque formulada con total sencillez era embarazosa.
Tolerablemente intelectuales.
Conseguir un primer apoyo que el dinero podría comprar sin dificultad.
Una novela engullida por la oleada litararia de la temporada siguiente.
Los pobres son gente que trabaja encadenada.
Humor taciturno.
Circunstancias nada propicias.
Su actitud variaba de una tímida cordialidad y una digna reserva que rozaba lo pretencioso.
Soy un ser humano práctico y prefiero apartarme del peligro.
Nadie podía cuestionar la respetabilidad de la vivienda.
Su rostro reflejaba la palidez del sufrimiento intelectual.
Un escrupuloso refinamiento personal.
Cuando se sentaba adoptaba una postura llena de gracia típica de quien no requiere apoyo para la espalda.
Un tono amistoso, no exactamente de afecto y verosímilmente no de tierna solicitud.
La voluntad fatalmente debilitada.
Meticulosidad morbosa.
Tono práctico.
La costumbre de la época victoriana era publicar novelas de tres volúmenes.
La idea es estúpida y artificial y no hay un solo personaje que tenga vida.
El cerebro seco e impotente.
La perspectiva de la penuria.
La fama si es merecida se origina con unas pocas decenas de personas de los muchos millones que nunca habrían sabido percibir el mérito que aplauden hoy. Eso es lo que ocurre con los grandes genios.
Expresión de perplejidad.
Tono avergonzado.
Un gesto de impaciencia.
Hurgaba desesperadamente dentro de su agotado cerebro a la busca de personajes, motivos y situaciones.
El arrebato del primer mes de matrimonio.
Era de temperamento apasionado según los dos sentidos de la palabra.
Para conseguir un carnet de lector del Museo Británico era precisa la firma de algún padre de familia respetable.
Su temperamento intelectual era el del estudiante y del erudito aunque mezclado con un deseo de independencia que había hecho que le disgustara la vida de profesor. Los cuentos que escribía eran fragmentos de psicilogía inmadura, precisamente lo ultimo que una revista habría aceptado de un desconocido.
El impulso de la creación literaria.
Los libros no retrataban ninguna capa social particular (a menos que se aprecie como una capa social particular la gente inteligente) y les faltaba un toque de pintoresquismo. Su atractivo era casi puramente psicológico. La caracterización no se le daba del todo mal y un fervor intelectual con la aptitud de atraer un pequeño grupo de lectores refinados impregnaba sus mejores páginas.
Era vagamente consciente de llegar a ser prolífico.
Temperamento reservado.
Le llovían de pronto los amigos, las adulaciones, incluso el amor. Fue como si lo elevaran al séptimo cielo.
Hablar con osadía, exultación, insolencia.
Un tipo de despertar completo e instantáneo y producido por la presión de una idea preocupante dentro del cerebro agitado.
Su torturada memoria revivía aquella época.
Alguna situación sugerente, algún grupo de personajes atractivos.
Un amigo práctico.
Reflexionar conscientemente.
El estudio desinteresado.
Los rasgos de la novela o los méritos puramente literarios.
El copyright internacional.
Intelecto activo y maduro.
Jovial tono de bienvenida.
Una conversación confidencial.
La plantilla de colaboradores de la revista.
Poseo la especial cualidad de la improvisación. Nunca escribiré nada que tenga auténtico valor literario y despreciaré la gente para la que escribo.
Una larga conversación de carácter práctico.
Tono educado.
Hilvanar anécdotas de estadistas prominentes.
Ejercitar la imaginación con el dilema.
Ajustado a unas circunstancias de dureza, privaciones y penurias.
Esa enorme ampliación de mis horizontes me hizo perder el dominio de mis recursos literarios.
Una dificultad práctica.
Sugerencias y correcciones.
Era erudito, prolijo y algunas ocasiones mordaz, pero carecía de gracia.
El inapreciable Larousse.
Robusto y tonsurado con la mano del tiempo.
Hablaba con nerviosa vacilación como si estuviera pidiendo disculpas de su existencia.
Incómoda sospecha.
Contar con una larga tarde, muy precisa para la mayoría de los literatos.
Una inteligencia limitada.
La expresión de quien se esfuerza para entender algo que se le escapa.
Una expresión reflexiva de piadosa curiosidad.
El defecto inglés de la discreción doméstica.
Ira irracional.
Expresión desdeñosa.
Aprensión patética, un defecto de la inteligencia.
La carne literaria es proclive a la dispepsia y otras enfermedades.
Traducciones rítmicas.
Carácter amable.
La humildad y la dulzura.
Destacar de la turba literaria.
Compartir la existencia intelectual.
Los defectos de expresión y comportamiento.
Verter desdén.
Revuelo, chanzas, enfados, comentarios solemnes, desdeñoso despecho.
Tomaba sus esfuerzos au grand sérieux, especulaba que creaba arte, se esforzaba con decidida meticulosidad.
Tono distraído.
Actuar con un egoísmo premeditado.
Expresión de esfuerzo intelectual.
Sátiras bulliciosas, gritos irónicos y feroces invectivas.
Sufrir con las circunstancias que lo había envuelto la pobreza.
Locura indescriptible.
¿Tal vez escribir no era el gozo de quien tenía algún mensaje urgente que comunicar al mundo?
Un inabarcable desierto de letra impresa.
Insignificante pretensión de dignidad intelectual.
Humor grotesco.
La miseria artificial del clima desagradable.
Una súbita decisión.
La sensación de tranquilidad que da el tener tiempo por delante.
Aquel menester prosaico de suavizar el fuego favorecería la conversación.
Expresión de atracción piadosa.
Emociones enfrentadas.
Una vena aventurara, decidir correr el riesgo.
Permitió vagar la vista por la habitación.
Recibir el expreso permiso.
Descartar cualquier reflexión pusilánime.
Éxito genuino.
Un caos nebuloso, un informe remolino de vacuidad.
Una fracción del conjunto.
Suspiró subrayando su aquiescencia.
Una novela mala y sensacionalista.
La tramoya literaria.
Se permitió arrastrar con la corriente del chismorreo.
El desvalimiento de quien vive apartado del mundo.
Tono decidido.
A un realista psicológico le impacientan las circunstancias vulgares.
Idealistas furibundos por temperamento.
La fuerza fatídica de los incidentes triviales.
Un enfado amistoso.
El valor de seguir adelante.
El pozo de su pobreza.
Discutir aspectos de la novela.
Un novelista convencional.
Actitud deferente.
El valor de mercado.
Corregir las galeradas.
Atravesar desdichadas circunstancias.
Raquítica novela.
Todos los mendigos tienen que esperar.
La evidencia de la superioridad intelectual había compensado los prejuicios sociales.
Mudie´s Lending Library era una de las mayores bibliotecas circulantes de la época.
Actitud cruel.
La fuerza de carácter.
El bendito dinero raíz de todo lo material hasta que el mundo inventase una economía más cabal.
Afrontar con valor un problema difícil y gravísimo.
Una novela de tres volúmenes, muchos autores estaban abandonando aquel procústeo sistema.
La solemnidad impuesta por las circunstancias.
Vena de cinismo.
Tono de satisfacción.
Añadir de forma impulsiva.
El periodismo era la destrucción de la prosa.
La frivolidad, el vicio intelectual de peor pronóstico.
Burla venenosa.
Atacar a un autor sin aumentar el numero de sus lectores es una perfección de la práctica periodística.
El silencio habría sido una táctica recomendable.
Actitud de indiferencia.
Dominado con un odioso ánimo de rencor literario que inclinaba a la gente, que cegaba y que enloquecía.
Tono de súplica.
Repentino como el trueno.
Tenía un evidente toque de distinción que desentonaba con todo lo que la rodeaba.
Dedicarse a la lectura y al estudio para alejar las preocupaciones.
Una reseña insidiosa.
Tono vacilante.
Valor literario.
Cumple con un propósito y no hace daño a nadie.
Saber separar al ser humano de sus obligaciones.
Un ataque honrado, directo y justificado.
Sabia, sobria y reticente.
La familiaridad total que desafía cualquier fragilidad humana.
Una clara autoconciencia de la existencia de la falsedad.
La distancia de la vida soñada y la real.
La vivacidad, el valor y la decisión para triunfar deleitaban sus sentidos.
Las ataduras de la rutina comercial u oficial.
La imaginación construía su palacio de la alegría.
Cumplimentar el carácter.
Hablar con vacilación al escoger las palabras característica de las personas a quienes el fracaso ha hecho perder la confianza.
Expresión vaga y enloquecida.
Un obstáculo imaginario.
Argumentaba de manera extraña con la injusticia que se le pedía.
Mendigar textualmente dinero como un desdichado vagabundo.
Los vientos marceños lo transformaron como un inválido.
El agotamiento intelectual había debilitado su cuerpo.
Prevaleció la piedad sobre el orgullo herido.
Manera severa y acusadora.
Acusaciones vagas.
Impotencia intelectual.
La sensación de estar cada vez más cerca del borde de una catarata.
El mundo no tiene piedad con quien no tiene aptitud de hacer o producir algo que aprecie valioso.
Debe haber algún desarrollo cerebral completo derivado de la angustia mental que produce la pobreza. Una penuria que colorea cada reflexión.
El velo de la pobreza.
Grotescas nebulosas.
Sentir la mordedura del látigo a la espalda.
La manida cuestión del sistema de los tres volúmenes. Es un monstruo de tres cabezas que chupa la sangre de los novelistas ingleses.
Las bondades del experimento.
Acusar recibo.
Tono divertido.
El fuego idóneo del interior, entusiasmo y energía.
Un comentario de la imaginación inconsciente.
Una mejora relativa de las circunstancias.
La debilidad de ser incapaz de decir una verdad desagradable.
Gesto ceñudo.
Expresión consternada.
Lágrimas histéricas.
Era eminentemente práctica con un verosímil entusiasmo añadido con los logros intelectuales.
La amargura de la vergüenza.
Con su vena práctica no quería entretenerse con una cháchara inútil.
La ociosidad y el embotamiento de su dolor.
Afectar las vulgares circunstancias de su vida.
Las ventajas mundanas de los dones del temperamento.
Un negro temor.
Ceder de manera pasiva a la presión de las circunstancias.
El refinamiento de la sensibilidad.
Un extraño tono de mando.
Un sueño inquieto.
Economizar y escatimar.
Circunstancias súbitamente reprimidas.
Su existencia era un eterno esfuerzo para ocultar el sórdido trasfondo de lo que veían sus amigos y vecinos.
Tono ofensivo.
Una actitud injustificable.
Circunstancias añadidas.
Ira insensata.
Una actitud de fatiga indiferente.
Actitud claramente despectiva.
Chat moss, una enorme ciénaga al oeste de Manchester.
Tono confidencial.
Conteniendo su jovialidad innata como requería la ocasión.
El primer impulso fue el de negar aquella acusación, pero prevaleció su sentido de la piedad.
Tono de sufrimiento profundo.
Tono monótono.
Manifestar egoísmo.
La hora sagrada del cotilleo.
La famélica región de la nueva Grub Street.
Su satisfacción no conoció límites.
Sé indicar el camino pero yo no he sabido recorrerlo.
Saber distinguir una ocasión cuando la veía.
¿Qué verosimilitud se puede tener con la cuestión de los cotilleos literarios?
Actitud obcecada.
Un tono que traicionaba su nerviosismo pero también la decisión.
Una acusación general de la manera de comportarse.
Brillar los ojos tempestuosos.
La profesión literaria envenena la imaginación de la gente.
Una reflexiva expresión de disgusto.
Tono duro, trémulo y emotivo.
Expresión de ansiedad.
Una agitación extrañamente repentina.
Fatigada con las muchas emociones.
Tono distante.
James Harrington (1611-1667) fue un teórico político inglés. "Commonwealth of Oceana" retrató una sociedad utópica con la que el poder era de los pequeños propietarios rurales.
Tono desdeñoso.
Tono soñoliento.
Soltó un suspiro de preocupación y reflexionó ansiosa.
Unos prejuicios creados con la animosidad literaria.
Febriles ensoñaciones.
La libertad es imposible por culpa del cacareo de los cotilleos.
Ser amigos solo desde el punto de vista intelectual.
Seguir una argumentación y sacar las consecuencias.
Su rostro manifestaba los signos de una aguda preocupación intelectual y daba la impresión de que el nerviosismo le impidiera hablar.
El arte de la composición sonámbula.
Expresión decidida.
Una diferencia de grado.
Las circunstancias pueden impedir cualquier grado de encaje abstracto.
Efusión amorosa.
Irónico destino.
Una preferencia puede transformarse como una emoción.
Inmerso bajo la agonía de un ansioso debate mental.
Libros que no son libros, biblia abiblia.
Hipocresía calculada.
La fuerza del argumento.
Los rasgos marcados con la emoción.
El demonio del fracaso y la humillación.
La valoración de las facultades.
Aplazar la conversación.
Mudar la actitud.
Tono distante pero no ofensivo.
Opiniones prácticas.
La presión de las circunstancias.
Acusar de ser el causante de sus males.
Tono de la conversación dañino.
Débil de carácter.
El objeto de la actividad literaria, a menos que uno sea un ser humano de genio, es garantizar la fama y el bienestar económico.
Tono de independencia.
Percibir las sutilezas de la situación.
Valorar por el dinero.
La emoción deliciosa que debería haber sido la satisfacción de sus ensoñaciones secretas.
La corriente emocional que había pasado por su piel cuando sus manos estaban unidas.
Y siguió esa antífona de la pasión cuando se expresa por vez primera; una música contenida, a menudo pausada y que vuelve a entonar idénticas notas.
Había pasado de los ditirambos a una conversación más práctica.
Asqueado de las circunstancias que lo habían expulsado a las tinieblas exteriores.
Un exiliado ofendido.
Sus deseos se iban volviendo lúgubres; se obstinó con su resolución de quedar al margen y esperar tenazmente las consecuencias.
Defectos del carácter.
El miedo a los infranqueables escollos y el esfuerzo inconmensurable que supondría escribir un libro entero.
Ocupaba desafiante su lugar con los miserables del mundo subterráneo y alimentaba su odio a los pudientes.
Una expresión insensata que sugería cosas muy desagradables.
Lo contuvo la razón.
Su actitud no era nada prometedora.
Mejores perspectivas por delante.
La librea de la pobreza.
Su atuendo lo degradaba ante sus ojos, pues simbolizaba el triste declive que había sufrido su intelecto.
Hablar con la aspereza de quien se siente despreciado y está dispuesto a demostrar un desprecio equivalente.
Emocionante novela.
Ser elegante con el dinero de los demás.
La valoración de la disposición mental.
Los rasgos peculiares connaturales al carácter.
Abrigaba ilusiones aunque las circunstancias contribuyesen a desdibujarlas.
Autocomplacencia erudita.
El intelecto había madurado de manera muy notable.
Su imaginación se había visto abrumada con las cuestiones materiales.
Désoeuvrement. Ociosidad.
Sigue esforzándose con una novela sin fin que nadie publicará cuando esté terminada.
Mejorar las propias perspectivas.
Reflexionando satisfecho.
Nunca seré un borracho; no tengo esa diátesis.
Las arengas de los domingos de Regent´s Park.
Un escollo de uno de los fragmentos de Eurípides.
Desconfiar de las apariencias según su calidad de realista.
Atormentar con los celos más vulgares.
Libre del sesgo sexual.
Alejado de las tentaciones y de los tormentos de la emoción sexual. Llamamos amor a un mero trastorno.
Actitud cortés.
Tono distante e invariable.
Orgullo sensible.
Coincidencias curiosas.
Reunir valor.
El valor del dinero.
Las circunstancias personales.
Subir al pequeño pedestal de una decorosa independencia económica.
Dar prominencia a las cualidades.
Hay que ser famoso antes de poder contar con la atención que garantiza la fama. Apotegma.
Mis cualidades no son de las que exigen el aplauso de la posteridad. Mis escritos son para hoy y claramente hodiernos. Carecen de valor si no es respecto de la actualidad.
Estaba enamorado. No de forma apasionada ni con ese deseo agotador ante el que cualquier motivo semeja insignificante comparado con la propia satisfacción, pero lo bastante enamorado como para que le fuese difícil seguir con su rutina diaria.
Tono despreocupado.
Una admonitoria visión de superioridad.
La cuestión de las penurias literarias.
Haciendo gala de un valor que hoy me maravilla.
Gesto decidido.
Gesto de preocupación.
Tono benévolo y adulador.
El Club Rota, un club político fundado por Harrington el año 1659.
Las circunstancias me han empujado a dar un paso que suponía imposible.
Ha sufrido mucho y se le ha agriado el carácter.
El perverso frenesí que impele a los hombres a decir y actuar de una manera totalmente reñida con la razón.
Vaga ilusión.
Un silbido de consternación.
Sus ojos vagaban atónitos.
Las imperfecciones del valor intelectual.
Emoción sincera.
Una ensoñación inquieta.
Vagaba abatida sin rumbo por la casa.
Vagamente envidiosos.
El valor de las dotes bajo circunstancias incongruentes.
Cada frase armoniosa para el oído con palabras de precioso significado colocadas con pericia.
Las panaderías pequeñas niegan dar papel para envolver el pan.
Un grupo de granujas ociosos.
Las embestidas del torrente de rufianes que se desborda al oír gritar fuego.
Soltar un epíteto aliterativo.
El carácter del libro refleja lo innoble y lo decente.
Seguir bregando con una existencia como esta.
Tono puramente especulativo.
"Saturday Review", un famoso semanario de la época.
El incontenible temperamento fogoso de los autores.
Tono agraviado.
Rompió a llorar; fue una exhibición de emoción muy repentina.
La marea suave y creciente, remota, clara, confusa y murmuradora.
Le rondaban vagos temores que lo atormentaban.
La música de las olas, la eterna melodía del mar.
De nuevo una pausa de inconsciencia que llegó a su fin con el dolor del costado.
El sombrío amanecer inglés.
Tono engañoso.
Leer con los rasgos el presagio de la destrucción.
Tragar la marea un libro.
La verdad simple y sobria.
Carácter magnánimo.
La actividad de consejero literario.
El nacimiento del sistema de sindicatos había abierto un nuevo campo para las agencias literarias.
Una conversación inane.
Una deliciosa obstinación.
El Aristarco de nuestro mundillo literario.
Escribir a vuela pluma.
Con su tono había aquiescencia, no insatisfacción.
Solemnidad portentosa.
El triunfo debido al mérito y las ocasiones.
Tono reservado.
Gesto de impaciencia y desdén.
Un libro pretencioso del genre ennuyant, género aburrido.
Una rodaja de una biografía.
El strappado era la forma de tortura de atar al reo por las muñecas y lanzarlo al vacío.
La resolución de la voluntad.
El sencillo deseo de la extinción.
La desesperación de las emociones reprimidas.
La noche acudía como una anticipación del sueño eterno.
La luna, un globo perfecto, rojo y enorme.
Emoción ardiente.
Vagando lúgubremente.
Un gesto involuntario.
Tono candoroso.
Energías e inteligencia.
Acusar de cometer una bajeza.
Borné. Limitado.
Tono elocuente.
La distinción intelectual combinada con el éxito económico es lo que significa distinción.
¿Quién discute el valor del dinero? Pero hay cosas que uno no debe sacrificar para ganarlo.
Gente valiosa e inteligente.
Decía las cosas con la dilación precisa como para otorgarles el valor de una opinión.
Un novelista cuya fama crecía de manera exponencial.
(La nueva Grub Street)
FRANK NORRIS
Habían pasado el ímpetu y la exaltación del primer ataque.
La misericordia, el puñal que solían utilizar los caballeros de la Edad Media para asestar un golpe de gracia al enemigo.
Asaltado por un terror repentino huyó corriendo presa del pánico.
La quintaesencia definitiva de la tristeza.
La línea remota del horizonte.
El silencio y la soledad se quebraban ante las furia de la tempestad.
¡Por San Guthlac!
El bosque se agitaba de forma despiadada.
Había sido uno de esos caballeros, muy escasos ya durante el siglo XII, que insatisfecho con su precario beneficio anual o habiendo perdido sus posesiones feudales se veía obligado a vivir de sus artes caballerescas, puesto que su valor y sus proezas eran algo con lo que podía comerciar e incluso regatear. Para él la guerra era un oficio y los torneos una ocasión de adquirir no gloria ni honor, sino ganancias materiales gracias a la venta de armas y caballos ganados a los caballeros vencidos.
Se hizo juglar, como a menudo llamamos erróneamente al trovador. Había sido instruido para dicho menester, pues su educación había tenido lugar dentro de los salones de la gaye science. Mudó la lanza por el laúd y se encaminó hacia esa cuna de la canción y la poesía donde los cantantes eran príncipes y los príncipes cantantes. Provenza.
Livres parisis.
Por la gracia de la munificencia real cada uno de los amantes de la gaye science podía escoger el instrumento con el que deseaba acompañar su canción.
El metódico cálculo de las circunstancias.
La audiencia hablaba la líquida y sonora langue d´oc y era gente de piel oscura y apasionada y sensual.
Horror sobrecogedor.
La caille o patio.
Atenazar el horror.
La balanza del destino.
La corona del triunfo.
Con la volatilidad de una burbuja la gran cúpula se alejaba a cualesquiera direcciones.
El peor sonido de origen humano, el sonido de una muchedumbre airada.
Recurrir a una serie de sustantivos y adjetivos imposibles.
Asaltado por un auténtico terror.
Nunca se puede prever qué va a hacer un ser humano, pero es sencillo adivinar las pretensiones de una muchedumbre.
La acusación de borrachera y desorden.
Había dado con un tipo de ficción que prometía ser inusualmente exitoso. Una serie de relatos -meros esbozos- que había comenzado a escribir bajo el título de "Dramas de calle".
No son las cosas que han ocurrido de verdad las que cooperan a crear una buena ficción, sino aquellas que semejan reales.
Dar con un entorno, con un color local.
Estereotipos demasiado trillados con los que no había ni un ápice de originalidad.
Pretender hacer memoria.
La luna asomó un hombro rojo sobre la línea de casetas de baño, negra como la tinta.
Silencios tensos y prolongados que le fastidiaban.
La precisión discreta y delicada del teléfono.
Todo lo que les rodeaba estaba envuelto del resplandor de la luna, que semejaba proceder de todos los rincones del horizonte a la vez con tonos blancos y azules.
Actitud complaciente.
El animal que llevaba dentro ronroneaba y se desperezaba.
Esa manera brutal y abrupta que distingue las criaturas simples y zafias.
Expresión asustada e inquieta.
Tono alegre.
Actitud reflexiva.
Las técnicas comerciales.
Cariñoso, emotivo, irresistible.
Flaquear la resolución.
Una faceta sensual.
La estampida ciega del pánico.
La histérica rebeldía ante lo inevitable.
Otear el horizonte con el telescopio.
Elocuencia prodigiosa.
Entonar la salmodia.
Con los pantalones fuera de las botas como muestra de respeto.
Un amor tácito y apasionado.
Los robles enanos plantados con macetas de satsuma.
Tono solemne.
La actitud de Cicerón ante una asamblea del Senado.
Mascando hierba.
Hors de concours.
Simple, crudo, tozudo teutón.
Objeción inapelable.
Una suerte -clarísima, inconcebible y sin precedentes- de las que quitan el hipo, de esas que te sumen bajo la perplejidad y que te abandonan sin saber qué hacer. Esa suerte maravillosa supimos aprovecharla.
Trabar conversación.
Mantener una conversación larga y apasionada.
Un comité de insurrectos conspirando ofensivas.
Señalar con un gesto digno de Richelieu.
Actuar súbitamente con la energía de un elefante.
El horizonte a varias leguas de distancia.
Dijo al cabo de unos instantes para romper el hielo.
Dar bruscamente la vuelta con un rápido gesto de infinito desaliento.
De pie acariciando el sombrero.
Una finalidad a perseguir con devoción, empeño y diligencia.
Levantar la barbilla mostrando desaprobación.
Lo extraño de la circunstancia.
Inconsciente y rápido acto reflejo.
Atrapado con los mecanismos de una máquina enorme y terrible.
Una frente arrugada como una naranja.
El beneficio neto.
La hoja de ruta era de una precisión impecable.
Las sales efervescentes del champán.
Pieles de nutria de un valor incalculable.
El pelaje de la nutria marina es extremadamente pequeño comparado con su valor.
La novela no se limitaba a ser meramente ingeniosa.
Atisbar los vislumbres del genio y el dorado grano de la verdad entre la paja de banalidades.
Novelistas cuyos manuscritos eran rechazados debido a celos profesionales por parte de los <<lectores>> o cuyas ideas robadas por amigos traicioneros se habían concretado con dichos que se vendían por cientos de miles.
La idea del amante que soluciona el enigma a través del amor era recibida con alharacas de satisfacción.
Alegorías exquisitamente delicadas.
El prolífico Paul Bourget.
Nuestras limitaciones no están determinadas por nuestras renuncias como por nuestro sentido de la proporción al concebir nuestros valores éticos.
Completaban las citas con unas líneas de Walter Pater y leían fragmentos de Ruskin y de Mattew Arnold.
Persuasión del proceso orgánico.
Sutileza, deliciosos compases de palabras.
Malgastar la existencia.
La muerte iba acercándose a buen ritmo.
Gesto de impaciencia.
La cobardía es dar la vuelta y salir por piernas. El miedo significa la muerte abstracta.
La muerte, ese gran Monstruo, ese Horror recorre las calles de arriba abajo y tarde o temprano nos atrapará. Estamos habituados y no reparamos su existencia.
Un temporal del equinoccio.
El distrito comercial.
Los edificios de oficinas se erguían como bloques de pisos y grupos sombríos.
El murmullo ahogado, prolongado, monótono que brota de los bosques, del mar y de los ejércitos dormidos. Todos los ruidos nocturnos se mezclaban formando una gran nota que procedía a la vez de todos los extremos del horizonte infinitamente vasto, profundo.
La abrupta sensación de la vida persistente e indestructible.
La sensación de soledad, de abandono le pesaba de una manera insoportable.
El Monstruo que nunca se rendía, nunca se cansaba y que nunca olvidaba.
Agolpar los recuerdos dentro de la mente.
Las emociones le habían trastornado.
Peculiar circunstancia.
La callada insondable sima del mar.
Ver con ojos perspicaces.
Una palidez que obedecía a alguna emoción reciente.
Adoptó torpemente una actitud similar y aunque sumamente perplejo se las apañó para transmitirle una verosímil emotividad.
La frente era de las que ciñen coronas y por debajo resplandecía la visión de un soberano.
Extrañas circunstancias.
Una debilidad humana, natural e inteligible
Partir de la reflexión.
Confundido soltó un comentario cualquiera.
Esclavo de las circunstancias, esclavo del tiempo, esclavo de la ley natural nadie es más abyecto que yo.
Muy alterado ultimamente, he vivido bajo una verosímil tensión, bajo la amenaza de determinados riesgos.
Retomar el hilo de la reflexión.
La sinfonía de la energía, la vasta orquestación de la fuerza, la oda a una vida indestructible vieja como los siglos, renaciente, organizada, eterna.
El manuscrito del relato.
La polémica que provocó el incidente descrito sigue, aunque de manera esporádica y alterna.
Poco dado a la introspección ofrece más un retrato de las cosas que ha visto que una transcripción de las cosas que ha reflexionado.
Adquirir una trascendencia que no está al alcance de las palabras.
Con el paso del tiempo se habría transformado como un gran escritor.
Dar mucho valor a la investigación rigurosa y desear practicarla.
Una descripción fiel de su entorno.
Manifestar la particularidad.
Frivolidad espantosamente inadecuada.
Tono siniestro.
Las piernas se le doblaron como arcilla cuando los pies tocaron el suelo.
Contar los detalles con un relato o cualquier otra forma de ficción.
Puede que mi visión mental se haya ajustado a una escala más grande y que por cuanto las cosas empeoran, un ser humano más o menos semeja solo una unidad más o menos de una serie eterna.
Encuentro tiempo para preguntarme.
Registrar impresiones atento al pulso del ánimo.
La suprema exaltación de la muerte que se acerca es el estímulo que uno nunca experimenta con la banalidad de la existencia cotidiana.
Reflexiones potentes.
Lo Sublime se quita el sombrero ante lo Ridículo.
Agáchate ante el silbido de una bala y fúndete con Schopenhauer.
Una visión de una impotencia que causa angustia.
El panorama grande y vago se desvaneció.
El brillo abrasador del álcali.
Designar como albacea literario.
Los altiplanos que ocultan el horizonte.
Sonidos minimizados por la mordaza de la noche.
El carácter efímero e inestable de la existencia humana.
(Relatos)
Habían pasado el ímpetu y la exaltación del primer ataque.
La misericordia, el puñal que solían utilizar los caballeros de la Edad Media para asestar un golpe de gracia al enemigo.
Asaltado por un terror repentino huyó corriendo presa del pánico.
La quintaesencia definitiva de la tristeza.
La línea remota del horizonte.
El silencio y la soledad se quebraban ante las furia de la tempestad.
¡Por San Guthlac!
El bosque se agitaba de forma despiadada.
Había sido uno de esos caballeros, muy escasos ya durante el siglo XII, que insatisfecho con su precario beneficio anual o habiendo perdido sus posesiones feudales se veía obligado a vivir de sus artes caballerescas, puesto que su valor y sus proezas eran algo con lo que podía comerciar e incluso regatear. Para él la guerra era un oficio y los torneos una ocasión de adquirir no gloria ni honor, sino ganancias materiales gracias a la venta de armas y caballos ganados a los caballeros vencidos.
Se hizo juglar, como a menudo llamamos erróneamente al trovador. Había sido instruido para dicho menester, pues su educación había tenido lugar dentro de los salones de la gaye science. Mudó la lanza por el laúd y se encaminó hacia esa cuna de la canción y la poesía donde los cantantes eran príncipes y los príncipes cantantes. Provenza.
Livres parisis.
Por la gracia de la munificencia real cada uno de los amantes de la gaye science podía escoger el instrumento con el que deseaba acompañar su canción.
El metódico cálculo de las circunstancias.
La audiencia hablaba la líquida y sonora langue d´oc y era gente de piel oscura y apasionada y sensual.
Horror sobrecogedor.
La caille o patio.
Atenazar el horror.
La balanza del destino.
La corona del triunfo.
Con la volatilidad de una burbuja la gran cúpula se alejaba a cualesquiera direcciones.
El peor sonido de origen humano, el sonido de una muchedumbre airada.
Recurrir a una serie de sustantivos y adjetivos imposibles.
Asaltado por un auténtico terror.
Nunca se puede prever qué va a hacer un ser humano, pero es sencillo adivinar las pretensiones de una muchedumbre.
La acusación de borrachera y desorden.
Había dado con un tipo de ficción que prometía ser inusualmente exitoso. Una serie de relatos -meros esbozos- que había comenzado a escribir bajo el título de "Dramas de calle".
No son las cosas que han ocurrido de verdad las que cooperan a crear una buena ficción, sino aquellas que semejan reales.
Dar con un entorno, con un color local.
Estereotipos demasiado trillados con los que no había ni un ápice de originalidad.
Pretender hacer memoria.
La luna asomó un hombro rojo sobre la línea de casetas de baño, negra como la tinta.
Silencios tensos y prolongados que le fastidiaban.
La precisión discreta y delicada del teléfono.
Todo lo que les rodeaba estaba envuelto del resplandor de la luna, que semejaba proceder de todos los rincones del horizonte a la vez con tonos blancos y azules.
Actitud complaciente.
El animal que llevaba dentro ronroneaba y se desperezaba.
Esa manera brutal y abrupta que distingue las criaturas simples y zafias.
Expresión asustada e inquieta.
Tono alegre.
Actitud reflexiva.
Las técnicas comerciales.
Cariñoso, emotivo, irresistible.
Flaquear la resolución.
Una faceta sensual.
La estampida ciega del pánico.
La histérica rebeldía ante lo inevitable.
Otear el horizonte con el telescopio.
Elocuencia prodigiosa.
Entonar la salmodia.
Con los pantalones fuera de las botas como muestra de respeto.
Un amor tácito y apasionado.
Los robles enanos plantados con macetas de satsuma.
Tono solemne.
La actitud de Cicerón ante una asamblea del Senado.
Mascando hierba.
Hors de concours.
Simple, crudo, tozudo teutón.
Objeción inapelable.
Una suerte -clarísima, inconcebible y sin precedentes- de las que quitan el hipo, de esas que te sumen bajo la perplejidad y que te abandonan sin saber qué hacer. Esa suerte maravillosa supimos aprovecharla.
Trabar conversación.
Mantener una conversación larga y apasionada.
Un comité de insurrectos conspirando ofensivas.
Señalar con un gesto digno de Richelieu.
Actuar súbitamente con la energía de un elefante.
El horizonte a varias leguas de distancia.
Dijo al cabo de unos instantes para romper el hielo.
Dar bruscamente la vuelta con un rápido gesto de infinito desaliento.
De pie acariciando el sombrero.
Una finalidad a perseguir con devoción, empeño y diligencia.
Levantar la barbilla mostrando desaprobación.
Lo extraño de la circunstancia.
Inconsciente y rápido acto reflejo.
Atrapado con los mecanismos de una máquina enorme y terrible.
Una frente arrugada como una naranja.
El beneficio neto.
La hoja de ruta era de una precisión impecable.
Las sales efervescentes del champán.
Pieles de nutria de un valor incalculable.
El pelaje de la nutria marina es extremadamente pequeño comparado con su valor.
La novela no se limitaba a ser meramente ingeniosa.
Atisbar los vislumbres del genio y el dorado grano de la verdad entre la paja de banalidades.
Novelistas cuyos manuscritos eran rechazados debido a celos profesionales por parte de los <<lectores>> o cuyas ideas robadas por amigos traicioneros se habían concretado con dichos que se vendían por cientos de miles.
La idea del amante que soluciona el enigma a través del amor era recibida con alharacas de satisfacción.
Alegorías exquisitamente delicadas.
El prolífico Paul Bourget.
Nuestras limitaciones no están determinadas por nuestras renuncias como por nuestro sentido de la proporción al concebir nuestros valores éticos.
Completaban las citas con unas líneas de Walter Pater y leían fragmentos de Ruskin y de Mattew Arnold.
Persuasión del proceso orgánico.
Sutileza, deliciosos compases de palabras.
Malgastar la existencia.
La muerte iba acercándose a buen ritmo.
Gesto de impaciencia.
La cobardía es dar la vuelta y salir por piernas. El miedo significa la muerte abstracta.
La muerte, ese gran Monstruo, ese Horror recorre las calles de arriba abajo y tarde o temprano nos atrapará. Estamos habituados y no reparamos su existencia.
Un temporal del equinoccio.
El distrito comercial.
Los edificios de oficinas se erguían como bloques de pisos y grupos sombríos.
El murmullo ahogado, prolongado, monótono que brota de los bosques, del mar y de los ejércitos dormidos. Todos los ruidos nocturnos se mezclaban formando una gran nota que procedía a la vez de todos los extremos del horizonte infinitamente vasto, profundo.
La abrupta sensación de la vida persistente e indestructible.
La sensación de soledad, de abandono le pesaba de una manera insoportable.
El Monstruo que nunca se rendía, nunca se cansaba y que nunca olvidaba.
Agolpar los recuerdos dentro de la mente.
Las emociones le habían trastornado.
Peculiar circunstancia.
La callada insondable sima del mar.
Ver con ojos perspicaces.
Una palidez que obedecía a alguna emoción reciente.
Adoptó torpemente una actitud similar y aunque sumamente perplejo se las apañó para transmitirle una verosímil emotividad.
La frente era de las que ciñen coronas y por debajo resplandecía la visión de un soberano.
Extrañas circunstancias.
Una debilidad humana, natural e inteligible
Partir de la reflexión.
Confundido soltó un comentario cualquiera.
Esclavo de las circunstancias, esclavo del tiempo, esclavo de la ley natural nadie es más abyecto que yo.
Muy alterado ultimamente, he vivido bajo una verosímil tensión, bajo la amenaza de determinados riesgos.
Retomar el hilo de la reflexión.
La sinfonía de la energía, la vasta orquestación de la fuerza, la oda a una vida indestructible vieja como los siglos, renaciente, organizada, eterna.
El manuscrito del relato.
La polémica que provocó el incidente descrito sigue, aunque de manera esporádica y alterna.
Poco dado a la introspección ofrece más un retrato de las cosas que ha visto que una transcripción de las cosas que ha reflexionado.
Adquirir una trascendencia que no está al alcance de las palabras.
Con el paso del tiempo se habría transformado como un gran escritor.
Dar mucho valor a la investigación rigurosa y desear practicarla.
Una descripción fiel de su entorno.
Manifestar la particularidad.
Frivolidad espantosamente inadecuada.
Tono siniestro.
Las piernas se le doblaron como arcilla cuando los pies tocaron el suelo.
Contar los detalles con un relato o cualquier otra forma de ficción.
Puede que mi visión mental se haya ajustado a una escala más grande y que por cuanto las cosas empeoran, un ser humano más o menos semeja solo una unidad más o menos de una serie eterna.
Encuentro tiempo para preguntarme.
Registrar impresiones atento al pulso del ánimo.
La suprema exaltación de la muerte que se acerca es el estímulo que uno nunca experimenta con la banalidad de la existencia cotidiana.
Reflexiones potentes.
Lo Sublime se quita el sombrero ante lo Ridículo.
Agáchate ante el silbido de una bala y fúndete con Schopenhauer.
Una visión de una impotencia que causa angustia.
El panorama grande y vago se desvaneció.
El brillo abrasador del álcali.
Designar como albacea literario.
Los altiplanos que ocultan el horizonte.
Sonidos minimizados por la mordaza de la noche.
El carácter efímero e inestable de la existencia humana.
(Relatos)
Joseph Conrad
Ululato del viento, tumulto del mar, ruido del agua.
El mar era pulido, azul, se extendía como si el globo terráqueo fuera una joya, un zafiro colosal, una unica gema tallada, para formar un planeta.
El paso del tiempo es más cruel, despiadado y amargo, que el mar.
Enigma profundo, fatídico.
Dormían en las actitudes despreocupadas de la muerte.
Rápida evocación, llena de detalles, como un rayo de luz de magnesio en los nichos de un oscuro panteón.
Consejo sensato.
Un vapor fuera de circulación es una cosa muerta y nada más; de alguna manera, un velero siempre semeja listo para navegar con el aliento de un cielo incorruptible.
Y todo el tiempo una sombra marchaba al lado de él, inclinándose hacia su mano izquierda, lo cual, en el Este, es un presagio funesto.
Pequeña semilla de la sospecha instintiva.
Indignación azorada ante la perversidad irresponsable de la avaricia.
Había abandonado la sustancia por la sombra.
Vanidad, eco distorsionado de una arcaica elegancia.
Oposición puntillosamente educada, pero decidida.
Piratas balinini.
Había algo más vil e insultante en la sugerencia, que en una acusación directa de algún crimen; el toque indigno del chantaje.
Interrupción en el comercio.
Humildad de ánimo de un niño.
Fuerza increíble de la fantasía.
(Juventud)
Un corredor de proveedores de barcos.
La jovialidad de un alegre camarada.
Contar con buenos salarios.
La vida marinera propia de la literatura de evasión.
Valentía espuria.
Disposición generosa.
Valor variado.
Regiones yermas de aventura.
La seriedad prosaica de la tarea cotidiana que nos da el pan, pero cuya recompensa se encuentra hacia el amor total de la actividad.
El límite de su temple y la sustancia de la que está hecho un ser humano.
El peligro cuando no lo vemos presenta la imperfecta vaguedad propia de la mente humana. El miedo se hace borroso y la imaginación, la enemiga del ser humano, la madre de todos los terrores, huérfana de estímulos, se diluye para descansar con la monotonía de una emotividad exhausta.
El don de los sueños sin fin.
El genio de los bucaneros.
Verosimilitud razonable.
Núcleo de la decadencia.
Cuota escasa de peligros y de esfuerzo.
El sueño, el hermano de la muerte.
Eslabones de los guardines.
Horizonte inalcanzable.
El encanto de lo ambiguo, las hazañas y los sueños.
Vil y despreciable, al acecho del mundo que amamos.
La gravedad de un idiota propia de un intelectual que desarrollase un sistema filosófico a partir del confuso atisbo de una verdad.
Cualidad humana.
Languidez placentera.
Inmovilidad. Filo de una destrucción incipiente.
Afilado y silencioso cuestionamiento terrible de la autoconciencia.
Como si los hechos pudieran explicar algo.
Un acto de voluntad racional.
Ángel guardián y demonio familiar.
Peregrino material.
Paso irremediable.
Hecho desnudo y feo.
Nociones del deber.
Los ingleses hacen un condenado escándalo por cualquier cosilla.
La existencia fundada con una ilusión sincera por el instinto y el valor, la aptitud innata de ver de frente las tentaciones.
Una disposición nada elaborada racionalmente, pero libre de fingimientos, una fuerza para aguantar frente al poder de la naturaleza y la seductora corrupción de los hombres, apoyada por la invulnerabilidad, la fuerza de los hechos y la aptitud contagiosa de la emulación y las exigencias de las ideas.
Ideas, zánganos vagabundos que llaman a la puerta trasera de la mente, para irte quitando la esencia, la creencia de unas cuantas nociones a las que uno se debe agarrar si quiere vivir decentemente y perecer tranquilo.
Capa turbada por los caprichos de la inteligencia y las perversiones de los nervios.
El arte de navegar.
Honor del oficio.
Contorsión sardónica.
La lentitud del idioma, el efecto instantáneo de las impresiones visuales.
Algo. Una causa profunda y redentora, una explicación misericordiosa, la mera sombra de una excusa persuasiva.
Las sacudidas rápidas de la corriente galvánica.
Horror fantasmal.
La corrupción de una astucia furtiva, abominable cautela y terror desesperado.
Un barco de peregrinos.
Amable atractivo.
Una investigación de atractivo humano.
Preferencia de carácter psicológico.
Una manifestación esencial respecto de la fuerza, el poder, el horror de las emociones humanas.
Un vapor de diecisiete nudos.
El aguijón de la vida.
Energía expresiva completamente oriental.
Condición mental.
Excesiva humillación.
La fuerza de las expresiones no tiene nada que ver ni con su sentido ni con lo racional de su construcción.
Billetes de cien libras.
Pomposos espantapájaros.
Una pregunta retórica, opuesta a la hecha ingenuamente.
Impenetrable armadura de la resolución.
La cabeza de la roda.
La convención que se oculta tras la verdad y lo esencialmente sincero de la falsedad.
Con sólo la aptitud de ver al ser humano, maldita cualidad pluralista de mi visión que no me ha reportado ventaja ninguna.
Máscara de impasibilidad.
Mortal dificultad.
Humilde testimonio de la Tierra.
Duro hierro viejo.
Sacar valor de la idea de una suerte de discreción valiente.
La firmeza del valor o el esfuerzo hijo del miedo.
No es difícil reconocer una mentira manifiesta.
Algo brutalmente injusto.
El patrón del velero, magistrado.
Diabólicamente astuto.
Anna. Moneda india de bajo valor.
Sombras poseídas de una tétrica autoconciencia.
La sabiduría de la vida es alejar de la vista todos los recuerdos de nuestra necedad, debilidad, condición de mortales, lo que conspira con nuestra utilidad; el recuerdo de nuestros fracasos, insinuaciones de infinitos temores, cuerpos de amigos muertos.
La palabra hablada tiene un poder extraño. Una palabra puede empujar lejos; puede repartir la destrucción a través del tiempo, como hacen las balas a través del espacio.
Una leyenda de fortaleza y valor. Materia de los valientes.
Dio demasiada importancia a la desgracia, cuando lo que importa es sólo la culpa.
Rostro ciego de la noche.
Aspecto material de la situación.
Diabólicamente sumiso y familiar.
Es imposible derribar el fantasma de un hecho. Sólo cabe enfrentarse a él cara a cara o huir de su presencia.
Complejidad de nuestras acciones.
Modalidad de combate.
Dominar las técnicas profesionales.
Del calificativo al hecho no hay más que un paso.
Carácter recto e indulgente.
Buena digestión, ignorante de su propia existencia.
La Naturaleza, equilibrio de fuerzas colosales, gran artista.
Lo que a través del dolor interno hace existir.
Generosos entusiasmos.
Los elementos exaltados de la aventura.
Añadir crípticamente.
Dotado de aguante y empuje.
La ultima palabra de nuestro amor, deseo, remordimiento, sumisión o revuelta.
El logro del amor, del honor, el orgullo y el poder que provocan son materiales adecuados para un relato; pero lo que hace repeler las mentes son los elementos externos de un éxito de este cariz.
Las ocasiones terminan siendo lo que los hombres hagan.
Jungla inmóvil, profundamente enraizada, remontándose hacia el sol eterna con el sombrío poder de su costumbre, como la vida.
Cañones de bronce que se funden para hacer monedas.
Llegar a la verdad de las cosas.
Mar acerado.
La población reposaba sus suaves curvas sobre las orillas de un río cuya corriente semejaba dormir.
Uno de esos hombres excepcionales a los que sólo cabe calibrar por las dimensiones de su gloria. Reinaba el eco de su fama.
Concepción de la justicia.
Alerta dignidad de las insinuaciones.
Haber proporcionado materia para las reflexiones.
Sombra hija de mi imaginación.
La muerte algunas ocasiones puede ser misericordiosa.
Constituir un misterio.
Vivir de las ganancias de un éxito.
Macilentas y utilitarias mentiras de nuestra decadencia, sustituidas por el puro ejercicio de la imaginación.
Materia del espacio.
Libertad del poder adquirido.
La fortaleza de ánimo puesta a prueba por las muchas sugestiones, rodeado por insinuaciones de peligro, precisaba el alivio que le supondría su materialización, la existencia de algo tangible a lo que pudiera enfrentarse.
A la altura de las exigencias.
La raíz de la cuestión.
Cielo opalino. Grandeza tranquila y meditativa.
Pozo. Reflejo perdido del universo.
Dosis de imaginación.
Impulsar la generosidad.
Se habían reunido bajo la sombra de una vida catastrófica, igual que un caballero y una doncella que se encuentran y transfieren votos entre unas ruinas encantadas.
Puntos de referencia emocionales.
Comentario especulativo.
Qué demostrativa se hacía su ignorancia a través de sus expresiones.
Palabras aladas de la verdad.
Lejanía extrema propia del sueño.
La casualidad, cuyo aliado es el Tiempo, al que no se puede meter prisa y cuyo enemigo lo representa la Muerte, que no conoce la espera.
Razones de carácter genérico.
Cuestión de conveniencia.
Traza de humildad.
La búsqueda del País-Nunca-Hallado.
Organización y moralidad de un proceso ético.
El idioma de los hechos es más enigmático que la más perita combinación de palabras.
Pequeña divinidad pagana, de piel amarillenta, desnudo y con el vientre redondo e hinchado, absorto.
Discutir cuestiones del poder político.
Cruel tensión de la vida.
Expresión pétrea.
Aquella indiferencia más espantosa que las lágrimas, los gritos y los reproches semejaba desafiar al tiempo y al consuelo.
Callado y entumecido dolor.
La humanidad avanza a ciegas impulsada por el sueño de su grandeza y poder, sobre los senderos oscuros de una crueldad y devoción excesiva. Búsqueda de la verdad.
Piadosa y caballerosa deferencia.
Rufián de muestra.
Animales vulgares y codiciosos.
Impulsado por pretensiones complejas.
El teatro de operaciones.
Cómplice inconsciente de los Poderes Infernales.
Una bahía muy oscura, como el estómago de una vaca.
Hombres fiera de las leyendas.
La esfera giratoria de la noche, innumerables mundos sobre la Tierra.
Ira indignada y rencorosa de un autócrata aborrecido.
Puertas de la fama, el amor y el éxito.
Ensoñaciones infantiles.
(Lord Jim)
No hacer caso. Castigo que lleva consigo todo lo cotidiano.
Manera de vivir.
La enfermedad de tener ilusión.
Racional aversión al mar.
Amor al más fijo de los elementos.
Manso delirar.
Legítima preferencia.
Locura. Pormenores racionales.
El sistema que adoptaba.
Casi turbia lucidez de los desarreglos mentales.
Desconfiar de la maldad de la gente.
Transformación y finalidad.
Padre Christmas. Bonhomme Noël.
Cualquier disposición mental, hasta la locura, tiene su equilibrio fundado sobre el amor propio. La destrucción de este equilibrio es causa de infelicidad.
Hablar con son de fisga.
Menester, imposibilidad y temor de una explicación.
Hablar con aire dominador.
Aire de secreto y caricia.
Con aire inteligente, reflexionando.
Uniones ilegales.
Por vía de explicación.
El demonio del chasco.
Un corredor de géneros por las tierras fronterizas.
El demonio de compromiso donde se había metido.
Quietecito como un sapo dentro de su hoyo.
Más suave que un guante.
Aguijón del hambre.
Gimoteaba la loca noche y regañaba.
Miedo de horrible silencio.
Negros aires.
Vencida y subyugada por el destino
(Mañana)
El curso del Támesis, según se baja hacia Lower Hope Reach.
El mar no se transforma nunca. Actividades envueltas por el misterio.
La idea de un cuerpo organizado, de una vida corporativa. Aprendiz, oficial y caporal del viejo y honroso arte de la navegación.
Azacán, aventurero.
El estilo del letrero de una tienda.
Mandato especial de carácter permanente.
Perfección de la forma con el tamaño.
Amable en grado sumo.
Los materiales aplicados.
La impresión de permanencia producida.
Vacua candidez de las esculturas.
Fantásticos desvaríos de la inspiración pagana.
Un barco al son del mar.
Le tocó presidir el duelo durante el entierro.
Aptitud legal para el mando.
Dificultades invencibles.
Imprudente ánimo de ostentación que tiene el ser humano.
Mar trágico y cómico con sus horrores y típicos escándalos, poblado por hombres y regido por la férrea ley del menester, es una parte del mundo
Venerable inocencia, decencia.
La fuerza de los elementos es inhumanamente franca.
Comedia infantil de enfermedades y tristezas.
Moderada animación.
Cordialidad de sus esfuerzos.
Moderados beneficios.
Aire de estolidez.
Riqueza de la experiencia.
Producir impresión los episodios.
Curiosear escudriñador de las estrellas.
Actitud descuidada y misantrópica.
De un país escandinavo y un monopolista consumado.
No conocía la palabra, pero de la cosa tenía una percepción clarísima.
La tarifa que aplicaba a los barcos por los derechos de sirga.
Referencias obligadas, puramente de negocios.
Votos y maldiciones.
Marcadamente impertinente.
Se le hacía una montaña. Dificultad.
Verdad desnuda.
Color de mostaza inglesa.
Acto de sin par violencia.
Manifiesta perfección de líneas de su figura, aire acuciante.
Regularidad de una actividad mecánica.
Disgustos. Sello de crueldad.
Clave para la conducta sobre asuntos de negocios. Freno moral y decencia.
Golpe astuto y malintencionado.
Molestias, perjuicios, gastos causados.
El ánimo que informaba mi consejo.
Holandés llama el pueblo bajo de Inglaterra a cualquier extranjero que no sabe cómo etiquetar, gabacho.
Reservar la apariencia de frialdad.
Color uniforme y permanente, de barro cocido de la vasija de alfarero.
Invento mecánico del tipo de bocinas.
Amplia esfera de los negocios. Argumentos contundentes, sin requerir esfuerzo mental.
Aire de prejuicio.
Hecho extraño.
Bajeza, sofocación, envilecimiento, absurda insensatez, fastidio, ridiculez, humillación.
Paralizada por un inmenso terror.
Mayores y deliberadas blasfemias soldadescas.
Autor de la situación.
Minuciosas atenciones que se guardan con un amigo bajo el peso de una gran pena.
Abstracta enemistad.
Hay límites que no se traspasan.
Esencial y silenciosamente concentrado.
Irrefrenable locuacidad.
Afán de respetabilidad, una concesión como agradecimiento de la organización humana.
El egoísmo presupone experiencia interior, selección, presencia de otros hombres, lo opuesto del instinto de reserva de los cinco sentidos de su cuerpo.
Tono de mutua inteligencia.
Rumor publico.
Las fuerzas naturales no son pendencieras. No cabe luchar con el viento que humilla al arrebatar el sombrero.
Interpretación lata.
Grado de amistad.
Corporal magnificencia.
Menester de usar mayor diplomacia.
Sencillo y astuto teutón.
Manera de proceder rectilínea.
Esfuerzos diplomáticos.
Regla razonable.
A fuerza de empeñarnos con fingir una cosa terminamos por creerla, con tal que redunde para beneficio nuestro.
La racionalidad de nuestra conducta está a merced de oscuros e imprevistos impulsos.
Mover un escándalo.
Ojos de mi imaginación.
Súbita recrudescencia de ansiedad.
Un templo de Buda, donde unos sacerdotes completamente rasurados mantienen vivas las ideas de aquella aniquilación total, el valioso premio reservado.
Aspecto de negra miseria.
Comisión de un abuso de confianza.
Disparatada farsa.
Indignada diatriba.
El menester debía transformarse en molestia.
Los efectos de una gran pasión son algunas ocasiones inexplicables. Vuelven a un ser humano tímido.
Pasión del miedo.
Fuerte rocío del claro parpadear de las estrellas.
El instinto bajo la prestación de una compleja concepción.
Menester inconsciente.
Infinita gradación de matices y sabores de nuestro complejo y vario amor.
Menester, dolor, tortura.
El fondo de las emociones, ese placer de vivir, la raíz de tormentos innumerables.
Inalterable, hambriento sello.
Cosas por el estilo que uno ve.
La actualidad realísima a nuestro lado.
Viaje. Buen éxito y buena armonía a bordo.
Asomos de organización, lazos de la disciplina.
Sombría negligencia, descuido característico del desaliento.
Haber desplegado una despiadada resolución, perseverancia, sagacidad y valor, cualidades clásicas.
La fábula del Flying Dutchman, el buque fantasma, con su criminal convicto y su sentimental castigo.
(Reminiscencia)
Woolf
El humor de Conrad es ocioso. Irónico, sardónico, nunca franco, nunca libre.
Faulkner
Abrir la página correspondiente de un libro de Conrad; el piso de mosaico rojo y negro encerado, el bronce dorado, la porcelana, el buhl; el largo espejo que semejaba encerrar como una fuente de plata la condensación de la luz de la tarde y bajo cuyas profundidades semejaba flotar como un lirio sobre su propia imagen aquella frente inocente y virgen de reflexiones, marchita solo con el pesar y la fidelidad.
Moravia
Pintoresquismo a la manera de Conrad.
Wiener
Uno de los marineros que condujo a San Pablo a Malta se habría encontrado como en su casa en una de las barcas de Joseph Conrad.
Hitchens
<<La línea de sombra>>.
Ford
Libros que se me antojan secretamente sobre mi vida de joven. "El corazón de las tinieblas".
Pinker
Una historia de pesadilla, un auténtico corazón de las tinieblas que ni Joseph Conrad podría imaginar.
MARY SINCLAIR
Un montón de naranjas del plato azul oscuro.
Haciendo flores azules con cáscaras de naranja flotando en los cuencos para los dedos.
Azucarado... mantecoso... bippery (pitido).
Viste la primera vez el sol, una bola roja que colgaba sobre el cielo blanco amarillento.
La tarjeta de San Valentín gruesa con el borde de papel de encaje y letras negras impresas con satén blanco de olor dulce.
La muñeca de porcelana blanca con cabello negro y ojos azules.
Egoísta y obstinado.
El camino de grava y el lecho de capuchinas formaban un amplio resplandor anaranjado.
Cuando sujetabas con fuerza las flores del jardín sus cabezas caían, sus espaldas se rompían, se arrugaban en tus manos.
La pequeña amapola arrugada al borde del campo y las espigas de centeno silvestre que te subían por la manga y te hacían cosquillas y la verónica rayados los ojos azules como la muñeca de cera.
El olor a heno seco, chicle y pintura de los animales de juguete y el olor opaco y lanudo del cordero.
Tímida y avergonzada.
Un loro berlinés azul y rojo de lana.
La piscina oscura de color vino.
Saltar de emoción.
Una conversación notable.
El Ornythrincus o Plat-ispus con pico de pato.
Susurrar emocionado.
El terror nocturno.
El Diccionario John Boag (1775-1863) pastor evangelista y lexicógrafo.
Los olmos alzaban sus faldas.
Los pasteles de Yorkshire del día de Navidad y los cumpleaños.
Mrs. Markham, "Historia de Inglaterra desde la primera invasión de los romanos hasta el final del reinado de Jorge II" 1823.
"Las baladas de la antigua Roma" de Macaulay.
El "Catecismo de mitología" de William Pinnock (1782-1843) escritor educativo.
El "Diario" de Pepys encuadernado con piel de becerro rosa.
Lo problemáticos e independientes que eran los comerciantes.
Las tazas de té blancas, grises y doradas se disponían rodeando la abultada tetera de plata que levantaba el pico con expresión tonta y pomposa.
En la carretera principal el polvo blanco despedía un olor, claro, penetrante y excitante. En los bordes humedos del vado se espesaba.
Tembló bajo su angustia cargada.
Una fría exaltación.
Como llora un niño con espasmos de sollozo.
Los ojos redondos y sorprendidos.
La emoción de la velada.
Produciendo a sus nervios un estremecimiento que recordaba el disgusto.
Los ojos cargados de una resolución seria y sombría.
El fantasma del pasillo.
Mañana nada de demoras ni palabras.
La emoción del recuerdo se transformó como la emoción de la premonición.
Aprender griego, una afectación aburrida.
El destello de rareza fue acompañado de una sensación de desastre irreparable.
La muerte de este yo desconocido tenía una lucidez implacable que le semejaba más impactante que cualquier cosa que pudiera imaginar.
Una existencia separada y significativa.
La "Historia de Europa" de Alison en diecisiete volumenes. Libros que no leerías si estuvieras en una isla desierta.
Barking Creek desemboca en el Támesis y Roding desemboca en Barking Creek.
Una actitud grandilocuente excesivamente educada.
El viento fluyó corriendo frío como agua sobre la fina sábana.
Una cara romana blanca como la miel.
Visión de sabiduría y emoción.
Las campanillas de Canterbury blancas y violetas.
Agachada, picada y golpeada.
Los álamos del jardín jugaban a la lluvia.
Agapornis. Periquitos de amor de África.
La prudencia y el decoro.
Una suave mueca de inocente alegría.
Los ojos brillantes y tímidos de una liebre.
Caminar con una sacudida extraña, desafiante, cohibida.
Ojos inocentes y vagos que no veían.
Una actitud rígida y cohibida.
La tonta vanidad frente la verdad.
Hipocresía funebre.
Un grito emocional convulsivo.
Era horrible que cosas que te preocupaban pudieran seguir y resolverse sobre tu cabeza sin que supieras nada al respecto.
Complacido y emocionado.
Una vibración vaga y exquisita.
Estupida como un buho.
A lo alto la carretera blanca semejaba una hoz que se adentraba en el páramo. Al cuerno de la hoz un alto fresno.
Ojos de liebre negra.
Largas y fascinantes conversaciones del espacio y el tiempo, la cosa propia y el ego trascendental.
La sustancia y la cosa.
Desbrozando el parterre de violetas.
Comenzó el ensueño sin fin.
Los yoes son sagrados. El yo de cualquiera.
La Sustancia, la Realidad detrás de las apariencias.
Afuera la noche se agazapaba respirando como un animal inmenso y silencioso.
El rostro blanco de emoción.
Ser y No-Ser son igual: desafío irónico y soberbio. Y luego conmoción; como si la quietud infinita, la Sustancia inamovible se hubiera levantado y comenzado a moverse. El ritmo de la eternidad.
La primera emoción incomparable.
Bajo el fondo oscuro el río se extendía como una carretera ancha, blanca y reluciente.
Horrible actitud.
Una expresión extraña y tensa.
El deseo infantil de posesión, la infantil sensación de inseguridad, de derrota.
Se rindió. Un gesto y reticente.
La mente fijada en un centro de ardiente y lucida agonía.
Noches de miedo loco.
Un delicado y secreto estremecimiento de satisfacción.
El éxtasis extraño, repentino e incierto.
Los débiles éxtasis de los sueños.
Los elogios o reprobaciones.
El tirón de las generaciones anteriores.
La mente como un cristal luminoso y ardiente resplandeciente.
Halma (del griego salto) es un juego de tablero cuadriculado.
Un niño atrapado con un acto del que se avergüenza.
El shock y la miseria que vino después.
Las cosas perfectas, las cosas que nunca pasarían.
La tetera de metal Britannia.
Un aire de tímida desaparición.
Sentado con una actitud puramente temporal.
Los finos y sedosos tejidos de las flores.
Estar solo trabajando como un fuego.
El claro patrón negro que el sicomoro dibuja en el cielo.
(Mary Olivier: una vida)
L. M. MONTGOMERY
Sentido del humor. Sentido de la ocasión.
Arrebato, rapto reformista.
Aspecto de disolución y paganismo.
El síndico lleva a los demás de la nariz.
De César el ostentoso ataque al busto de Bruto / El amor de Roma por él solo consiguió aumentar.
Aguijón de la derrota.
Estudiar las asginaturas. Latín, geometría, francés y álgebra.
Todos los hechos de magnitud están referidos con los de poca importancia.
Garrotillo. Dosis de ipecacuana. Difteria, inflamación de los ganglios del cuello.
Muerte. Sello de la Gran Presencia.
Blanca Majestad de la Muerte.
(Ana la de Tejas Verdes)
ALFRED KUBIN
Realización de un programa que supone la existencia de recursos materiales prácticamente inagotables. Fundar un Reino de los sueños. Aversión a lo que guarde referencia con cualquier forma de progreso.
La vida habitual y el mundo onírico son conceptos antitéticos.
Búsqueda de profundidad. Lograr la máxima animación de la vida. Las penas y alegrías de sus contemporáneos son totalmente ajenas al mundo del soñador, ya que actúa según una escala de valores diferente.
Nuestra gente solo experimenta disposiciones de ánimo o solo vive con disposiciones de ánimo. La apariencia exterior que configuran a su antojo y que gracias a un sutilísimo esfuerzo mancomunado no constituye más que la materia prima. El soñador no cree nada más que el sueño, su sueño fomentado y desarrollado entre nosotros. Perturbarlo sería un delito de alta traición inimaginable.
Lo mejor que uno puede hacer cuando está con un enfermo mental es no desechar nunca sus ideas fijas. Actuar con una dosis equivalente de buen humor.
Leve y vaporoso ensueño.
Escritura desesperada.
Ojos de encanto felino.
Maraña de elucubraciones respecto del futuro.
Todos somos peregrinos. Ansia de desplazarse.
Los hay también que por haber corrido mucho mundo no desean seguir peregrinando, o que están dentro de la cama enfermos. Estos son los que viajan al interior de su mente, a su imaginación; y también suelen llegar lejos... pero permanecer inmóvil... imposible. Es algo que no existe.
Nueva oleada de energía.
El pueblo escogido contando con un tipo de anormalidades o imperfecciones de su desarrollo. Extraños casos de alcoholismo, gente descontenta consigo y con el mundo, hipocondríacos, espiritistas, temerarios rufianes, insatisfechos que andaban a la busca de emociones, prestidigitadores, acróbatas, refugiados políticos y criminales buscados por el extranjero, falsificadores de moneda y ladrones.
Una característica física que saliera de lo común. Bocios descomunales, narices arracimadas, gigantescas jorobas.
Personas que debido a su oscuro sino habían adquirido rasgos psíquicos extraños.
Llega el ejecutor del auto de confiscación, se procede a subastar el inmueble.
El mundo es un problema ético. El espacio anda galanteando con el tiempo. Su punto de unión, el presente, significa la muerte o la divinidad. Situado al mero centro se halla el gran milagro de la Encarnación. El Objeto. Este representa la parte exterior del Sujeto.
Grado de intimidad.
Nuestras sensaciones no nos permiten tiempo para trapacerías de alto vuelo.
Huellas de un enigma.
Haber desarrollado una serie de usos y costumbres misteriosas.
Categorías anímicas. Comportamiento, expresiones favoritas.
Al perecer, el Sujeto se transforma como una diagonal que une el Espacio y el Tiempo.
Presión volitiva firme y unitaria.
Calculador como una serpiente.
Lodazal del suicidio.
Ideas lascivas como pompas de jabón.
Campo de la creatividad, descarga anímica.
Cabeza de búho, murciélago crucificado, pata de reno, amuletos de la buena suerte.
Pretendí ver durante horas todo tipo de piedras, flores, animales y seres humanos. Al hacerlo mi vista fue adquiriendo una agudeza excepcional similar a la que tenían mi oído y mi olfato. El perfeccionamiento gradual de los sentidos iba influyendo a su vez sobre el conjunto de las facultades mentales dándole una nueva conformación. Fui apto para acceder a un tipo de admiración insólita y sorprendente. El hecho de que un cuerpo pudiera llegar a mí desde la eternidad me hacía estremecer de espanto. Me maravillaba el simple hecho del Ser, de que las cosas fueran de esta manera y no de otra. Al comienzo las sensaciones más intensas me venían poco antes de quedarme dormido o instantáneamente después de despertar cuando el cuerpo estaba cansado y la vida se hallaba sumida de una disposición crepuscular. Cada vez iba percibiendo con mayor claridad la secreta alianza que existía entre todos los seres. Los colores, perfumes, sonidos y sabores se transformaron como realidades transferibles. Y me di cuenta de que el mundo no es sino el poder de la imaginación. Imaginación-poder. Me esforzaba por intensificar mis penas y alegrías y secretamente me burlaba de las dos. Vi con horror que mi Yo estaba compuesto por una serie infinita de Yoes que se mantenían al acecho uno detrás de otro. Dentro de esta vasta cadena el que venía luego semejaba más grande y hermético que el anterior y los ultimos escapaban a mi entendimiento diluyéndose a través de un plano crepuscular.
Pero la Nada era rígida y no quería ceder. Entonces la fuerza imaginativa empezaba a zumbar y a vibrar intensamente, a todos los niveles iban surgiendo formas, sonidos, olores y colores. ¡Y ya estaba allí el mundo!
La causa final debía residir con la imaginación y con la nada y tal vez estas no eran sino una cosa.
La agitación del mundo exterior había excitado y sensibilizado mis nervios durante mucho tiempo y ya se hallaban maduros para las experiencias del Mundo de los sueños.
Genio de la adaptación.
Impotencia del sueño, destroza las voluntades.
Gente que de alguna manera había sido desgraciada ante el sistema sociocultural y que tenía, por tanto, razones para ocultarse.
Animales bisulcos de colosales dimensiones.
Argumento de que el tiempo es divisible entre pequeñas eternidades.
Inconcebible tejido de la muerte.
Serie de paradojas que no podía entender ni solucionar.
El amor carnal no es sino la voluntad de la Cosa por acceder a la temporalidad.
(La Otra Parte)
ARTHUR MACHEN
Fórmulas literarias. Derechos de la imaginación pura o literatura asentada sobre un fondo científico.
Despreocupadas alegrías de una bohemia a la que faltaba la sal de la adversidad.
Lo maravilloso, increíble, improbable, la coincidencia extraordinaria.
Angustias entre la concepción y la ejecución.
Tabernas de Fleet Street. Ambiente literario.
Gruñido inarticulado, tumulto y agitación de la multitud, de la que se elevaban notas discordantes, no hallé una sola visión de piedad de las cosas deformadas por un furor insano e inexplicable, palabras o frases de execración.
Opresión intolerable del terror.
Londres no es una ciudad abierta y sin defensas, sino una plaza fuerte rodeada de un doble foso intrincado. Como ocurre con las grandes ciudades, las condiciones de vida se han vuelto extremadamente artificiales. El ser humano que pretenda la plaza se encontrará no con una simple estacada, sino con varias líneas apretadas de trampas, minas y otros mecanismos que sólo pueden superar los atacantes de rara pericia. Ya ha pasado la época de las victorias sorprendentes.
Aprender el secreto del éxito.
El secreto inefable de la doctrina central de la masonería.
Entrar dentro de la corteza del misterio.
Educarse propiamente, la manera de educarse que no es infinitamente perniciosa.
Rigor intelectual.
Miedo de lo desconocido que carece de forma y es peor que la propia muerte.
La imaginación de los niños les hace sentir miedo de las cosas más sencillas y familiares.
De inclinación escéptica.
Dogmas científicos. La vida es sólo un fenómeno material y dentro del sistema del universo no quedan tierras por explorar, ni siquiera las más remotas estrellas, donde lo sobrenatural tiene su asiento.
Realmente la materia es terrible y desconocida como el ánimo y la ciencia sólo llega hasta el umbral y apenas logra atisbar los prodigios del interior.
La cara hinchada y amoratada, una máscara horrenda de humanidad.
Proponer hipótesis ingeniosas o vagas suposiciones, opuesto a los hechos indiscutibles, garantizados como una demostración matemática.
La pronunciación de la ll galesa, sonidos semejantes al murmullo de sus arroyos nativos.
Miedos que a nadie le gusta declarar, como quien derrama la sal ante una dueña de casa escocesa.
Mano helada del desaliento.
Callejuelas protoplásmicas.
Sentir el encanto del infinito.
Incoherencias manifiestas de la conversación.
Concepción caprichosa que llamamos el tiempo.
Me abrumaron las ondas oscuras del terror y me precipité al abismo.
La profesión del científico. Un abismo sin ilusión que se abre a los pies de quienes sueñan llegar a la verdad por cualquier vía ajena al camino real de la experimentación científica y la investigación de los hechos materiales.
El desprecio de los hombres de ciencia, los cuales tras ocuparse de lo invisible han sugerido tímidamente que los sentidos no sean las fronteras infranqueables de la experiencia, los muros eternos que el ser humano no ha superado nunca.
Locuras del ocultismo de nuestra época, que se disfraza con los nombres más diversos -mesmerismo, espiritualismo, materialismo, teosofías- y de los vulgares desvaríos de la impostura, la maquinaria de engaños groseros y la prestidigitación lamentable, la magia de salón practicada por algunas sórdidas calles de Londres.
Escéptico. La vieja e inflexible teoría materialista es falsa.
Hipótesis trascendentales propuestas por hombres de ciencia intachables.
Las murallas impenetrables de los sentidos, que se elevaban hasta el cielo y hundían sus cimientos bajo las más hondas profundidades, aislándonos para siempre, no son las barreras perpetuas e imparables que imaginábamos, sino velos transparentes y finísimos que se apartan ante el ser humano que busca y que se disuelven de pronto como la bruma mañanera de las márgenes de un arroyo.
Posición materialista extrema. Pretenden probar una negativa general, un absurdo.
Una verdad científica comprobada por la experiencia. El universo es más espléndido y terrible de lo que soñábamos. El universo es un sacramento tremendo; una fuerza y una energía místicas e inefables veladas por la forma exterior de la materia; y el ser ser humano, el sol y las demás estrellas y la flor entre la hierba y el cristal de la probeta del laboratorio son anímicos y materiales y están sujetos a una acción interior. Con esta perspectiva transforma la visión de las cosas y lo que semejaba increíble y absurdo puede derivar posible.
La ciencia moderna no hace menos concesiones, aunque de manera hipócrita. Se puede admitir el hipnotismo, justificar la telepatía, creer la superstición.
Los secretos del aquelarre vienen de tiempos remotos y sobrevivieron hasta la Edad Media. Son los secretos de una ciencia primitiva que existió mucho antes que los arios llegasen a Europa. Se atraía con engaños a hombres y mujeres para que abandonaran sus casas y luego venían a su encuentro seres con la aptitud de asumir el papel de demonios. Estos seres los conducían hasta un lugar desolado y solitario que los iniciados sabían, según una larga costumbre, aunque fuese desconocido para los demás. Era una cueva de un monte árido y agostado por los vientos, un claro de lo más profundo de un gran bosque y allí se celebraba el aquelarre. Al sonar la hora más negra de la noche se preparaba el Vinun Sabbati, se vertía el licor maldito dentro del cáliz ofrecido a los neófitos que recibían el sacramento infernal. Y de pronto, cada uno de los que habían bebido veía a su lado una pareja, una figura seductora de encanto más que terrenal, que lo invitaba con una seña a compartir placeres más intensos y exquisitos que el estremecimiento de los sueños y a consumar la boda del aquelarre. La figura de incitante belleza no era una alucinación, sino el propio ser humano. Merced al poder del vino embrujado, a unos cuantos granos de polvo blanco dentro de un vaso de agua, la casa de la vida se partía y el gusano que no muere, sino que aguarda dormido dentro de cada uno, se transformaba como algo tangible y exterior, recubierto de una vestidura de carne. A la medianoche se repetía y representaba la caída original y volvía a manifestarse el misterio velado con el mito del árbol del paraíso. De esta manera se llevaban a cabo las nuptiae Sabbati. Ni siquiera las leyes más triviales de la vida pueden transgredirse impunemente. Un acto nefando como este con el que se profanaba la parte más recóndita del templo, exigía una venganza implacable. Lo que empezó con la corrupción terminaba también con la corrupción.
Métodos milesios de entretenimiento.
La mayor de las ciencias, la llave de la experiencia, la ciencia y el arte del placer.
(Los tres impostores)
Manifiesto desagrado.
Torre de esplendor.
Orgía de la primavera.
Hablar con humildad, con tono insinuante.
Orgullo de la vida, locura de emulación, que transforma a los hombres en campeones.
Aliento de lo desconocido.
Lenta tortura de la peste.
Manifestar codicia.
Transformación de tono maravilloso.
Ocultar la verdad con un sofión.
Aspecto sombrío de un mono.
Miserable capitán de bandoleros, libres compañeros.
Los hombres no son semidioses y las fibras de su ser están hechas de arcilla.
El verdadero valor es aquel que se enfrenta con el destino en las sombras, con los dientes apretados y la voluntad inquebrantable.
Es sencillo ser valiente cuando suenan las trompetas, cuando el fuego de la fama arde sobre las nubes.
Acusación mezquina.
Bienestar interior, sensación cálida, claridad de ideas.
Espléndidas alas del jerifalte.
Llamas rojizas y proféticas
Arrebato de genio.
Valor de sufrir, tener paciencia y ser fiel a uno.
Gesto de celos y odio.
Encogerse de hombros con cuerda y mundana resignación ante las complicaciones de la vida.
Cumplir los deberes con la boca cerrada y significativa reserva.
Violentos métodos del mundo.
La luna llena brillaba redonda y leonada encima del bosque.
Mesonero, exteriormente obsequioso, como buen hijo de Mamón.
El habla del pueblo es poco caritativa y falsa.
Alegría ciega y egoísta.
Sombría reserva.
Murmurar para romper la reserva del ser ceñudo y silencioso.
Transformación de tono maravilloso.
Ocultar la verdad con un sofión.
Aspecto sombrío de un mono.
Miserable capitán de bandoleros, libres compañeros.
Los hombres no son semidioses y las fibras de su ser están hechas de arcilla.
El verdadero valor es aquel que se enfrenta con el destino en las sombras, con los dientes apretados y la voluntad inquebrantable.
Es sencillo ser valiente cuando suenan las trompetas, cuando el fuego de la fama arde sobre las nubes.
Acusación mezquina.
Bienestar interior, sensación cálida, claridad de ideas.
Espléndidas alas del jerifalte.
Llamas rojizas y proféticas
Arrebato de genio.
Valor de sufrir, tener paciencia y ser fiel a uno.
Gesto de celos y odio.
Encogerse de hombros con cuerda y mundana resignación ante las complicaciones de la vida.
Cumplir los deberes con la boca cerrada y significativa reserva.
Violentos métodos del mundo.
La luna llena brillaba redonda y leonada encima del bosque.
Mesonero, exteriormente obsequioso, como buen hijo de Mamón.
El habla del pueblo es poco caritativa y falsa.
Alegría ciega y egoísta.
Sombría reserva.
Murmurar para romper la reserva del ser ceñudo y silencioso.
Nube de fatalismo.
Las llamas del fuego se alzaban como pétalos de una gran flor.
Una nerviosa y febril alegría le daba el ánimo del tísico, que se niega a creer que la muerte le tiene cogido.
Un soberano podía coger la liga de una dama en un baile y obtener gran fama y vivir la celebridad del mundo. Sin embargo, tras el fugaz resplandor de la espléndida fruslería, numerosos cadáveres alzaban sus blancas manos en la noche de lo desconocido.
La sangre del pueblo empapa la tierra que trabaja.
Tengo que deshacer una madeja muy complicada, preciso la ayuda de sus consejos.
Las llamas del fuego se alzaban como pétalos de una gran flor.
Una nerviosa y febril alegría le daba el ánimo del tísico, que se niega a creer que la muerte le tiene cogido.
Un soberano podía coger la liga de una dama en un baile y obtener gran fama y vivir la celebridad del mundo. Sin embargo, tras el fugaz resplandor de la espléndida fruslería, numerosos cadáveres alzaban sus blancas manos en la noche de lo desconocido.
La sangre del pueblo empapa la tierra que trabaja.
Tengo que deshacer una madeja muy complicada, preciso la ayuda de sus consejos.
Manifiesta fanfarronería.
Jovial arrogancia de la fuerza física.
El pisaverdes es famoso por sus alegres colores.
Jovial arrogancia de la fuerza física.
El pisaverdes es famoso por sus alegres colores.
Actitud de reflexión.
Característico poder para sembrar sus ideales en las mentes ajenas, como dioses extranjeros en un santuario extranjero.
Los celos son un obstáculo para la justicia.
El gran abogado cuya ironía reduce a nada los argumentos del ánimo mezquino, el ánimo caballeresco, ese gran depurador de hombres.
Las luchas morales son terribles en los caracteres poderosos, en su clímax, pero garantizadas en sus decisiones.
Diablo de los celos.
El hambre es nivelador de orgullos y prejuicios.
Lazos de la astucia.
Circunstancias pasadas.
Peso de una mentira.
Acerolo, espino.
Según sea la vida de un ser humano, son sus deseos.
Característico poder para sembrar sus ideales en las mentes ajenas, como dioses extranjeros en un santuario extranjero.
Los celos son un obstáculo para la justicia.
El gran abogado cuya ironía reduce a nada los argumentos del ánimo mezquino, el ánimo caballeresco, ese gran depurador de hombres.
Las luchas morales son terribles en los caracteres poderosos, en su clímax, pero garantizadas en sus decisiones.
Diablo de los celos.
El hambre es nivelador de orgullos y prejuicios.
Lazos de la astucia.
Circunstancias pasadas.
Peso de una mentira.
Acerolo, espino.
Según sea la vida de un ser humano, son sus deseos.
Comerciantes de gorro de terciopelo.
(Bertrand de Bretaña)
Tiene que haber una materia y unas condiciones. La materia es imprescindible, es a través de lo cual se manifiesta la energía vital, el punto de apoyo sin el cual la vida no podría manifestarse ni producirse bajo una forma o una manera visible. La finalidad de la materia respecto de la producción de la vida es poderosa y la energía vital ansía manifestarse. La energía vital es muy frenética y apremiante e indiscriminada, como el fuego que todo lo destruye. La vida es un ente, una condición, un fenómeno, un origen que requiere una materia para poder manifestarse. La vida es el producto de la evolución de la materia y ha variado según unas condiciones concretas. Es una cuestión de química, de condiciones y de un ambiente adecuado.
Davy Jones. Nombre humorístico con el que los marineros se referían al ánimo del mar.
Consistente piel.
Algo de valor que ha disparado la imaginación.
Valor inquebrantable.
La ola que se aleja hacia la costa de un mar en calma.
Punto de vista psicológico.
Hechos perturbadores e incomprensibles.
Oscuridad del subconsciente.
Las conjeturas que mi razón y mi formación científica habían aventurado eran verosímiles.
Indescriptible horror y perplejidad ante lo inconcebible.
Un pesado remo de fresno.
Olor casi animal, deletéreo.
Mendigos ingratos.
Escarcha de la eternidad.
Encargado de marcar el ritmo de la actividad.
Puertas del Cielo. Enorme bóveda de nubes rojas y resplandecientes.
Apremiado por una condición de menester.
Vegetación fungosa.
Un periodo de reflexión.
La efigie del horror que nos habla de las tragedias del pasado y del porvenir.
Mar Piramidal. La entraña viva del océano es propulsada hacia el cielo con monstruosas montañas de agua.
Un banco de algas.
Un movimiento palpitante.
Experiencia de los menesteres.
Silencio demoníaco.
Encarar el problema con valor.
Embrear las velas con alquitrán de Estocolmo para que se mantuvieran rígidas y aguantaran el mal tiempo.
Soledad y deseo humanos.
La Navidad, una época de festividad y encuentro de los seres separados.
Una tragedia cercana y garantizada.
El latido de las cosas ocultas que perciben y esperan la ocasión de extender un garfio mortal y repentino.
La imaginación afectada por la impotente soledad y la meditación.
Actuar con total cautela.
Una disposición de agitación mental, influía menos la razón que la imaginación.
Recuerdos sobrenaturales y terribles. Vampiros, muertos vivientes.
Mis ojos percibieron, alertando a la vez al subconsciente, la extraña y sutil ondulación que sucede a la aproximación de un pulpo gigante.
El amor que manifestaban sus acciones.
Reunir valor.
Carácter formidable del monstruo o monstruosidad.
El fruto de la imaginación vívida.
Razones de confusión.
Idea casual del traslado.
Sistema de protección.
Monstruos despiadados.
El terror incómodo que provocaría el recuerdo de un suceso espantoso en un lugar solitario.
Palabras de esa manera absurda que uno utiliza cuando está confundido.
Razón aparente.
El mar es morada de todos los misterios porque es el lugar que el ser humano no puede explorar totalmente.
Total incapacidad de la imaginación para descifrar con sensatez aquel enigma.
Racha irrepetible de buena suerte.
Fenómenos inconcebibles y demenciales. Una explicación natural, aunque fueran increíbles y prodigiosos.
Kraken. Pulpo gigante.
Un sueño de imágenes nítidas.
Petrificado por el hielo del miedo.
(La nave abandonada)
DOROTHY RICHARDSON
Leyendo a Lecky, Darwin y las revistas Contemporary Reviews encuadernadas con rosas.
Cansada con todo el empaque y la emoción.
Decir un término sin distribuir. Ignoratio elenchi o argumentum ad hominem.
Las bufonadas delicadas, la incongruencia involuntaria.
"Ungava: Un cuento del Norte" de Ballantyne; "John Halifax" de Dina Clark.
Extrañas emociones crueles.
Un gran bucle de tiempo.
Emociones y recelos.
Una persona de ocio y cultivo.
Las reglas de la gramática inglesa. Análisis, prefijos y sufijos anglosajones, infinitivo gerundio.
El Wesleyan Methodist Recorder.
Bajar y subir decorosamente la escalera.
La conversación se estaba volviendo bulliciosa.
Los ojos claros fríos de un pez.
Olvidada su fatiga se deslizó hasta una libertad sin rasgos distintivos.
El inglés de Oxford más puro.
Ráfagas de conversación.
Reflexionó que la náusea que se había apoderado mientras se rendía, al instante impondría la huida.
Con actitudes relajadas y el efecto de celebrar un consejo.
El agua hirviendo roncaba sobre el café.
Grave de ira.
La carta llena de primeras impresiones y añadiendo una notita coloquial casi afectuosa.
Se sintió distante de las cosas que sugerían.
Un pato moribundo en una tormenta.
Dominando una convulsión simpática.
Un pequeño aguijón de culpa en la mente.
Hablar de una manera vulgar, familiar.
Perplejas cavilaciones.
Un resplandor de gratitud.
La clásica prosa francesa.
La conexión de Ruskin, Browning y Holman Hunt.
Una sospecha provisional.
Un susurro sonoro y emocionado.
La emoción había terminado y el aterrizaje era una verosimilitud.
Saltaban las anticipaciones. Unas vacaciones y una expedición.
Una aprensiva incertidumbre.
Aurista. Médico de las enfermedades de los oídos.
Una nariz desconcertante espléndida para charadas.
Las generalizaciones alegres.
Sentados con actitudes sencillas.
El gozoso sentido recurrente de emerger y su deseo de andar tranquilamente sola.
Era concentrada, fría y muerta.
Una seria conversación general.
De pie frente una vaga muchedumbre sin ver nada.
El parloteo de un zorzal diciendo "¿Sabes quién eres?"
Tonos consoladores.
Sus labios habitualmente inmóviles como un túnel suplicante.
Hesba Stretton, "La primera oración de Jessica".
Mary Elizabeth Braddon, "El secreto de Lady Audley".
Las jóvenes hojas del castaño caían con apretados pliegues de las ramitas negras.
Grandes bocanadas redondeadas de nubes blancas se alzaban nítidas y quietas en el horizonte.
Schwarzbrot. Pan alemán de centeno.
Pequeños sonidos de burla afectuosa.
Saludos guturales.
La ciudad estaba construida de forma compacta, puntiaguda y a dos aguas, tallada y adoquinada.
Replicar con excitadas preguntas.
Capear la tormenta del mal humor.
La caminata del cangrejo o el chapuzón de 1/2 penique hipperty-hop.
Enojada con una razón extraordinaria.
La conversación se soltó a lo largo de la mesa. Los matices enfáticos la alcanzaron desde el lado inglés.
Un encogimiento de hombros de desesperación.
Una sombra fría se cernió sobre la mente.
Largos momentos de profundo orgullo.
"Mr. Barnes of New York" novela de 1887 de Archivald Clavering Gunter.
Vendrá el sueño apacible.
El terrible desafío de la conversación con sus alumnos.
La lluvia siseó en el jardín.
Semejar vaga y triste.
Su rostro se volvió nostálgico.
La charla soluble.
Asumiendo un aire de apreciación perpleja y preferente.
Una lista para seguir los movimientos generales.
La peculiaridad francesa tonta y remilgada.
Emocionados con las vacaciones.
Sofocando sus reflexiones.
El rumbo de la conversación podía recaer en cualquiera.
Una vaga desaprobación.
Tirando por la borda la ultima pizca de su dignidad.
Pretendiendo escapar de su confusión.
El bulevar con su efecto habitual de un gran océano extraño.
Las peculiaridades del temperamento francés.
Culpable desde el comienzo de las cosas.
"El ascenso de la Republica Holandesa" de John Motley.
"Las crónicas de la familia Schönberg-Cotta" de Elizabeth Charles.
Caterwaul. Chillar, aullido de una persona o animal, un ruido desagradable como un gato.
El infierno concebible es el remordimiento.
Las personas mayores temían el cáncer todo el tiempo.
Olvidar era como aplazar el arrepentimiento. Los que no lo postergaron vieron cuando vinieron las grandes aguas una figura resplandeciente que venía a través del diluvio. Si no lo hicieran serían como el ser humano con un gorro de dormir, con la boca abierta, sin dientes y las manos flacas jugando a las cartas en su lecho de muerte.
Un alboroto tonto.
Cesará esta vil charla de hombres.
Perturbados con las tonterías despóticas.
Assembly Rooms. Las Salas de Asambleas del centro de Edimburgo.
Una hermosa raqueta de tenis Slazenger.
Epítetos tiernos y enfáticos.
El resplandor amarillo de un café.
(Techos puntiagudos)
VALERY LARBAUD
El profeta tonante y bramante.
Se cultiva el preciado silencio. Todo está solitario y discreto; hasta los propios colores callan y requieren que se les vea con más atención.
En el horizonte repleto de fábricas un grupo de altas torres, una familia de Babeles negras marca los límites de la ciudad -si es que tiene límites-.
Una ventana voladiza.
La calle donde se hallaban la casa de Carlyle y la de Leigh Hunt.
Se dibujan transparentándose los acontecimientos de un sueño bajo las primeras sensaciones del despertar.
La tranquila pantomima de las calles que simulan estar despiertas.
De la persona se desprendía una impresión de vida sana, delicada y limpia. Era todo lo dulce, tersa y pura que puede llegar a ser una criatura humana.
Evocó visiones cuyo recuerdo le había perseguido días enteros, visiones de cruel ternura concebidas como una limosna o una promesa que sabemos que no se cumplirá.
Una vaga y dulce ensoñación.
Devolvió el beso valientemente cerrando los ojos con arrebato y torpeza.
Las reflexiones brotaban del seno de una gran alegría tranquila.
Profundizando la reflexión.
Una ensoñación confusa y casta de alcoba.
Las ideas generales son demasiado internas, puro hedonismo.
Limitarse a leer libros que distraigan.
Se preguntaba si sabía el sentido exacto de la horrenda palabra hedonismo y si no era que creía la existencia de un filósofo de nombre Hedon. Le permitió divagar y citar con una frase a Swedenborg, Kant y Bergson. Llegaba a ser conmovedor; ante la idea intelectual era como una niña delante de un piano que no sabe tocar pero que se maravilla al conseguir un acorde dando a las teclas al azar.
Una pequeña dosis de pedantería nórdica.
Poseía un ánimo rápido, claro y vigoroso.
El pueblo que ha dado al mundo los más grandes humoristas. La finura, la vis cómica y la gracia de la expresión. Sabía percibir la faceta ridícula de un objeto o de una situación y expresarla de forma sorprendente.
La bruma tibia y dorada de la tarde.
Una reflexión tranquila, reconfortante y púdica.
La calle vacía presentaba el aspecto despavorido y resignado de los domingos de verano.
Una aventura banal.
Un saber estar correcto en Pall-Mall o Piccadilly.
El gran país tierno y claro de sus ojos azules.
En el fondo es como una gran pérdida de dinero, a los ojos del mundo vale menos, pero moralmente puede incluso valer más si ha aprendido la lección.
La noche había caído.
Expresión extraviada.
La fijeza extraña y la expresión de angustia y de insolencia de los ojos.
Trémula de cólera.
Una indignación jadeante sin encontrar más palabras.
Su disposición de ánimo no permitió pasar ni una ocasión de mostrar la aversión que le inspiraba. Solo actuaba con la conversación para decir algo que directa o indirectamente iba a herirlo.
Contando historias divertidas, describiendo actos, paisajes y relatando anécdotas costumbristas.
Persisto seguir siendo candidato con lo que deseo saber el programa de mi adversario.
Una promesa formal escrita de matrimonio.
Liberar de las preocupaciones materiales que atormentan.
Una liaison tras la pantalla de una situación cualquiera o proponer una liaison de lo mejorcito de este género.
Garantías en caso de desacuerdo o ruptura.
Coger de las crines esa yegua asustada.
Solo existen Londres y París; todo lo demás es paisaje. Pero para disfrutar plenamente de estas dos ciudades hay que aprender a verlas también como paisaje; para lo que no hay nada como la ausencia de cualquier ambición y la ociosidad más total. No hay que hacer nada ni ser nada. Una línea de conducta que me tracé a los veinticinco.
Emplear con la conversación palabras francesas de esas que son de la serie de palabras lo que son las boquillas doradas de la serie de los cigarrillos.
Una villa de Kenston en una altura con una terraza plantada con hayas bajas cuyo espeso follaje había peinado el aire del mar echándolo del lado de la tierra.
Una pequeña cala arenosa con sus casetas preparadas.
El aire un poco áspero de la mañana.
Aspirando triunfalmente la brisa fuerte y salada.
Las dulces flores del Oeste que crecen con el viento del Atlántico.
Erguida con la brisa cuya vehemencia y frescura sentía al través del lino blanco entendió la áspera bondad del Oeste.
El valle bienaventurado
(Belleza, mi bella inquietud)
JD BERESFORD
La impresión de una inteligencia tranquila.
Las evidencias del fracaso del proceso de llegar a ser.
Un rigor de suspenso sin aliento.
Mantuvo al niño como si fuera una pieza de barro de valor incalculable.
Una expresión de sublime piedad y desprecio.
Agua en el cerebro. Loco, imbécil.
Se estremeció histriónicamente.
Una conversación de interjección.
El niño que iba a transformar la suerte de un condado.
Fue fenomenalmente minucioso con todo lo que emprendió.
Un silencio frío y rígido.
Gestos desconcertantes.
Una práctica larga y asidua.
Los dientes de un vendaval.
Golpes de suerte.
Un ingeniero esencialmente inteligente, decidido y reservado.
Una descripción periodística.
Dar la puntuación a la factura de contenidos. Esa era una proclama que se vendería.
La gran avalancha de éxitos.
Los métodos ingeniosos de cálculo de puntos.
Sacar las inferencias del rostro.
Un ardor de pura rabia.
Dominar mi impaciencia y mi temperamento.
El don de la razón.
La reserva de las facultades.
Lectores diletantes.
El deseo, la voluntad urgente controladora y omnipotente.
El standard intelectual.
Los poderes de razonamientos flexibles.
Alguna concepción, la semilla de un ideal.
La total extensión de la recompensa.
Su ira se estremeció con un débil torrente de blasfemias trilladas.
Al amanecer tras una noche de insomnio el ser humano es una criatura de emociones no realizadas.
Las suaves costillas de plástico.
Una inquietante inteligencia.
La sustancia de su información libre de materia extraña.
La solemne verdad.
Op set. Configuración.
Enfrentado a los intransigentes detalles del abandono doméstico.
Inhumano, grotesco, sobrenaturalmente sabio y amenazador, horriblemente antinatural.
Descansar los nervios con la idea de la compañía humana.
El idiota hidrocefálico corriente.
Recurriendo abundantemente a los paréntesis.
Profunda reserva de sabiduría.
La esencia del argumento.
La presión de las tareas domésticas.
La actitud generó sospechas.
El escéptico más acérrimo de la taberna.
Agnóstico, decadente.
Rari nautes in gurgite vasto. Raros nadadores en el vasto remolino. Verso de la Eneida.
La autocrática llamada de rat-rat-rat. Una rápida sucesión de golpes o crujidos.
Tono de reprimenda.
Clichés y jerga profesional.
Una analogía de la actitud.
El más fuerte de todos los hábitos es el de la aquiescencia. Es este hábito de sumisión el que explica la admirada paciencia y la longanimidad de los abyectamente pobres.
Su deliberada retención de hablar era una reserva frente alguna manifestación extraña. La manifestación cuando se produjo fue notable como inesperada.
La vista abstraída de las preocupaciones terrenales.
Pronunciar la primera expresión registrada.
Las palabras eran una mera fórmula.
La mente preparada para la disensión.
Alguna oscura razón no entendida.
Una luna joven se hundía bajo un banco de nubes.
El disgusto del tono y la actitud.
Revivir el recuerdo del fenómeno.
Una biblioteca muy practicable.
Visitas no recompensadas.
Una expresión anormalmente inteligente y una cabeza de hidrocefálico.
Una ayuda inteligente.
Un gesto de aliento.
Una inteligencia adecuada.
Una consumación que no es deseable.
Tenía un curioso sentido del humor que fue un obstáculo en el camino de la especialización.
Azul de ira.
No tenían lugar en el mundo de su abstracción.
Un poder inusual de la inteligencia.
Una conversación curiosa por su impersonalidad.
Silencio deliberado.
Una inteligencia poderosa pero no dirigida que trabaja a partir de las simples premisas de la experiencia; una mente enclaustrada que había actuado profundamente; una mente liberada de la costumbre de las especulaciones y los hallazgos humanos.
Encontrar motivos para especular. Material, materia a partir de la cual uno puede formular sus propias teorías.
La concisión de los métodos.
Los métodos y los modales.
La evidencia imparcial y personal.
La actitud correcta científica.
Un toque de desafío del tono.
El deseo de creer que algo es verdadero constituye la verdad de eso para nosotros. Es una actitud equivocada para el científico como para el filósofo.
Proporcionar un material valioso.
Aparente irrelevancia.
Una división estereotipada, una disposición que depende de la experiencia del escritor.
Las teorías de la existencia y el progreso y la especulación sobre el destino final.
La larga serie de experimentos cotejados e hipótesis parcialmente verificadas que llamamos ciencia; el sistema imperfectamente desarrollado de la inducción y la deducción que define las matemáticas y la filosofía; la larga, inexacta e inverificable explicación de la ceguera y el error humanos llamada historia; y el reino del idealismo, el símbolo y el orgullo lamentable que encontramos en la historia de la poesía, las letras y la religión.
Me había permitido llevar de mi prosa con la vanidad natural del autor.
La prisión del conocimiento.
Petulante y amotinado colgado en la retaguardia.
La memoria de un Macaulay.
Teorizando sobre una evidencia insuficiente.
La especialidad de la psicología de una cuidadosa investigación de las asociaciones con referencia a la memoria. Si uno puede reproducir fielmente cualquier sensación compleja que haya experimentado estimulará un recuerdo anormal de las emociones referidas con esa experiencia.
Una espantosa oleografía de Disraeli. Una técnica litográfica que reproduce la pintura al óleo.
Un impaciente desprecio de la actitud.
La aberración óptica.
Manifestar la autoconciencia del factor humano de la existencia.
Un escéptico proclive a la agresión.
Una actitud antagónica.
Un acto de condescendencia intelectual.
Una actitud judicial.
Suspiró con una nota de protesta.
Una inflexión ascendente con un aire conciliador.
La actitud alerta y el humor ágil y caprichoso.
Mostrar una atracción inteligente.
El tendero representa una poderosa influencia inconformista.
Un ataque sutil a la posición inconformista.
Material sublimado. Perspicacia intelectual y ceguera de ánimo total.
La característica de su actitud.
Una injusticia manifiesta no menos tiránica que ridícula.
Un niño deliberado e intimidante.
In loco parentis. Locución latina utilizada en el Derecho anglosajón. En lugar de alguno de los progenitores.
Un examen viva voce.
Tomar un lado de la controversia.
Van Vloten (1818-1883) erudito traductor de Spinoza.
El teorema del binomio es una fórmula para escribir el coeficiente de cualquier término establecido de la expansión de cualquier potencia declarada de un binomio.
Un tono audible.
La reforma arancelaria es una cuestión empírica que no puede decidirse teóricamente.
El vicio alemán de la minuciosidad.
Los límites de la variación respecto del tipo habitual.
Buscar un punto vital para el golpe de gracia.
Una sorpresa carnosa.
Una devoción introspectiva.
La naturaleza on dit (habladurías) de su información.
Un conejo es imagen de una curiosidad precoz.
Los tiernos báculos de helechos comenzaban a romper camino a través del suelo.
Un gesto de repulsión con las manos.
Un dilema estupido de mi actitud mental.
Soy propenso a fijarme tareas e igualmente a eludirlas con un proceso de procrastinación (postergación).
Un poder extraordinario para hacer cumplir su voluntad sin palabras ni gestos. Una rara y maravillosa personalidad.
Restemos el esfuerzo de demostrar una hipótesis preconcebida de cualquier filosofía y el resto, el material valioso es distorsionado.
La obstinación de vanidad que crea una imagen de autoprotección.
El sistema de prueba y error.
Se volvió reservado. No quiso dar detalles.
La pequeñez, la estrechez de los libros.
La concepción de la conversación ligera.
Imaginar el espacio como un vacío en tres dimensiones y el tiempo como una línea que lo atraviesa. Una maquinaria engorrosa que no podía definir nada.
Los ataques de rebelión con las limitaciones de la mente humana.
Impulsar la inducción iniciada.
El profundo problema de la existencia.
Nuestra dependencia de la materia es íntima y no concebimos que seamos impulsados con algun impulso que no surja de un complejo material.
En el fondo de mi mente había una reflexión que no podía concentrar; temblaba al borde de alguna gran manifestación que nunca llegó.
Las formas indefinidas y desconcertantes del delirio.
El persistente golpe de la lluvia sobre las hojas de haya.
Atento a los detalles del entorno.
La dificultad original de que para algunas concepciones no existe una figura verbal.
Las terminologías, simbologías y altos discursos de esoterismo del místico.
(La maravilla de Hampdenshire)
Desear un ingreso independiente y mucho tiempo libre.
La vida de un médico de panel.
Walla. Sufijo índico implica la actividad de una persona, de dónde viene o qué viste.
Una represión o shock.
Un gesto de renuncia.
Decepcionar la actitud.
Había caído bajo una perfecta embriaguez de gasto.
Tener suerte en algunos aspectos.
Tuvo visiones de una deliciosa improbable mejora de su condición.
La variante más prometedora del sueño.
La arterioesclerosis, una discapacidad de la vejez.
Una ocurrencia tardía.
Ataques de distracción.
Las futilidades habituales de una conversación inicial.
Adoptar una línea sensata.
Una simulación de pacto.
Una expresión consciente suprema incuestionable.
Una expresión de lasitud.
Notar el efecto de algun contingente no declarado.
El uso efectivo de ventanas miradores con parteluces en voladizo desde el primer piso.
Una débil afectación de vivacidad.
Un toque de impaciencia.
Acusar de mendigar influencias.
Transmitir un efecto de ligero estancamiento.
Cuando una persona abandona un grupo los otros dos sienten un impulso de hablar de él.
Evaluar el carácter como un tipo débil y podrido.
Cometer un error de tiempo.
La bañera y el lavabo eran de porcelana blanca con grifos de alpaca.
Un trasfondo emocional de sus descripciones las hacía particularmente vívidas.
Una divinidad soñadora.
Un tono silencioso e inevitable.
La anticipación tiene un sabor exquisito que falta a la realidad presente.
Un toque de resentimiento.
Un análisis reflexivo de la experiencia del día.
Trascender las limitaciones de la cortesía.
La impresión de que había una importante reserva detrás de lo que le había dado.
Formular una pregunta capciosa.
La expresión de vigilancia se relajó.
Una estimulante sensación de verosimilitud.
Una desafección permanente.
La patología del shock de guerra.
La teoría general es que los casos graves de psiconeurosis había una predisposición antes que el ser saliera de los problemas nerviosos.
Completar las disposiciones testamentarias.
Una inclinación excéntrica, un toque de superstición.
Una expresión de humorística desesperación.
Una masa desordenada de codicilos.
Una visión del futuro vagamente repulsiva de días ociosos y satisfechos pasados perfeccionándose con varios juegos esperando.
Ventajas pecuniarias.
Los extraños trances sintomáticos de algun problema profundamente arraigado.
Un tono con una leve nota de propiciación.
Un ataque más directo.
Un toque de aspereza.
Un toque de resignación.
Una bolsa de cuentas.
Tentado a cometer una indiscreción quería disimularla sin demora.
Los ricos mezquinos y codiciosos.
El diseño era un bosquejo del ideal humano para la tierra perfeccionada.
Un tono evasivo.
Incomprensible actitud.
La actividad profesional y el sacrificio personal.
Las trampas de la riqueza.
Una actitud minadora.
Un discurso críptico.
Envenenada con el degradante amor a la riqueza.
Enderezó la espalda y levantó la barbilla con un gesto de disgusto.
El amor al dinero engendra todo tipo de farsa, falta de sinceridad y pretensión.
Los ricos estaban amenazados con los impuestos desde arriba y el creciente clamor y el poder de los trabajadores desde abajo. Habían perdido prestigio e influencia.
El trasfondo indeterminado de la humanidad general.
Las preocupaciones y atractivos comunes humanos.
Un ocasional escrupulo de inquietud.
Los menesteres naturales en materia de dinero disponible.
Una expresión que era a la vez expectante y aprensiva.
Expresión de impaciencia y revuelta.
Pasear con un toque histriónico pero genuinamente angustiado.
En el lado equivocado de la puerta grande.
Es un juego podrido esperar los zapatos de los muertos.
No tener ni un solo frijol.
Podría derrumbarse si se enfadara gravemente.
La vaga sospecha de que el dinero disponible era escaso.
Mimado con la tranquilidad de una vida lujosa.
Querer efectos amplios.
La mezquindad de la actitud a la herencia esperada.
Vaciló al borde de una mentira explícita.
Proseguir con reminiscencia.
Duro como los clavos.
Una expresión de simpatía.
Su habitual fría reserva.
Endurecido con alguna muestra de oposición activa.
La expresión de buscar una señal privada.
Un ataque de profunda abstracción.
Explotar a la defensiva.
La estéril victoria del intelecto.
Una expresión de lástima casi divertida.
Sentándose con un efecto de reinflación.
Escuchando la lluvia e inhalando los agradables aromas de la tierra agradecida.
La magnitud de los gastos.
Su actitud había sido presagiada en el curso de su conversación.
Aguantando en vano.
Una expresión de desafío o afable.
Una estupida y petulante acusación.
Un mal humor casi infantil.
Una vaga idea de lealtad en la mente.
Una acusación de cobardía.
El glamour del logro.
Un efecto de triunfo vengativo.
El cónclave familiar.
La actitud de la familia.
Actitud despectiva.
Una conversación razonablemente inteligente.
Una expresión de sorpresa o decepción.
Su tono no era el correcto, tenía un aire jocoso.
Una expresión divertida y desdeñosa.
Defender la posición con argumentos.
No había ningun indicio de vergüenza o moderación con su actitud.
Omitir los argumentos.
Olvidar no es ser honesto ni siquiera con uno.
Aire de desprecio y reserva.
Tono ofendido.
Había visto un rayo de ilusión y le molestaba su instantánea extensión.
Levantó la cabeza con un toque de arrogancia y cuadró los hombros.
Una actitud autocrática y contenida.
Demasiado ebrio con los vapores de su resolución para percibir el fino significado.
La deducción o inferencia.
Un ataque de excentricidad.
Manifiestamente agitado.
Tono de advertencia.
Extendió las manos con un gesto de refutación.
El tono de quien sopesa tranquilamente una propuesta.
Un ligero tono conversacional.
Las fases de su admiración se habían ido fundiendo secretamente con el amor.
Disfrutar las sagradas reservas de su precioso secreto.
La indiferencia emocional de quien decide sus inversiones.
Recurrir a alguna reserva de poder hasta entonces intacta.
Inmensas reservas ocultas.
Un coro de protestas y disuasión.
Eran criaturas tímidas y aprensivas debilitadas con su vida de comodidad y reclusión.
Descender al actual nivel de aceptación fatalista.
Un repentino retorno de la agitación.
La fría e intensa vigilancia de un gran pájaro.
Las inmensas reservas de personalidad ocultas.
Una expresión de feroz indignación.
Temblando de rabia.
Un viejo de temperamento furioso y senil.
Se había roto una arteria cerebral y el área de tejido dañado se extendía lentamente.
Ser casuales y decorosos.
Estaban extraordinariamente despiertos y febrilmente inactivos.
La indiferencia de la profesión de especialista.
Una expresión de buen carácter preocupado.
Habían despertado de su larga pesadilla de resistencias impalpables e insuperables a la agradecida cordura de la vida cotidiana.
La visión cruel y depredadora de un halcón.
(Los prisioneros de Hartling)
Develar el secreto.
Tono profundamente preocupado.
El cielo era una sábana de oscuro azul.
La mano caída al costado con actitud de respeto.
Expresar indignación
La conversación se tornó general.
Hacía mucho que la brisa se había aquietado y las hojas de hierba estaban tensas y erguidas como alambres de cobre.
Semejaba que estuviese ejerciendo gradualmente una presión sobre mí que amenazaba abrumar mi pequeña personalidad.
Percibir la gravedad de la situación.
Usar balanzas privadas que pesan muy liviano.
Donde el trueno había fulminado un ánimo centrípeto, o donde una virgen había dado a luz un demonio.
El "Romance de los Tres Reinos" anotado por Chin Sheng-t´an.
Una situación extremadamente seria, irrevocable.
Agobiada de ansiedad.
El calendario lunar chino consta de 360 días al año y cada mes tiene 29 o 30 días, nunca 31. Por eso cada varios años se intercala un décimo tercer mes llamado el mes intercalar.
Los elementos esenciales de China eran el metal, la madera, el agua, el fuego y la tierra.
Su rostro reflejaba el placer y la emoción.
Actitud respetuosa.
Al comienzo la tierra no tiene caminos, pero cuando muchos hombres marchan hacia una dirección surge el camino.
Eludir leer el "Libro de las Odas".
La mala suerte suele ensañarse con uno.
Cuando nuestra suerte estaba sobre la balanza ir al fondo de la cuestión.
El rumor confuso de canciones entonadas a coro.
Los copos de nieve más grandes semejaban pétalos de cerezos.
Libros del confucianismo. El "Diccionario de Kang Hsi", los ensayos filosóficos de Chiang Yung y los "Comentarios sobre los Cuatro Libros".
Susurros con un tono confidencial.
Solemne expresión.
Flaquear la memoria.
Expresión inmóvil.
Tono misterioso.
Sentada con una actitud estúpida, como una escultura de madera.
Una combinación de indolencia y de nostalgia.
La nostalgia del viajero.
Uno escribe simplemente cuando tiene ganas de hacerlo; y es una actividad como la luz del sol irradiando de una fuente de infinito brillo y no como el fuego que sale al frotar un pedernal con el hierro o la piedra.
Al tomar autoconciencia de una sensación de vacío dentro del estómago posó la pluma y aguantó la cabeza entre sus manos como un globo suspendido sobre dos ejes.
Lo inesperado fenomenal.
Atmósfera de sorpresa e insatisfacción.
Silenciosa sombra.
Tono sarcástico.
Físicos de hierro templados por las vicisitudes.
El blanco es el color de luto de China. Una tira de papel blanco a la puerta de una casa indica que allí se ha producido un fallecimiento.
Los que mueren tuberculosos pierden el habla.
El viejo silencio y la vieja vaciedad.
Reflexionar cuidadosamente respecto de la actitud a adoptar.
Una idea muy vaga de la actitud.
Largas e íntimas conversaciones.
Una hoja de papel mimeografiado.
Su expresión tenía un aire helado.
No tuve el valor de llevar la pesada carga de la hipocresía, por eso arrojé sobre sus débiles hombros la de la verdad.
El gran vacío sereno de la muerte.
Solo tengo un llanto que suena como una canción.
(Diario de un loco y otros cuentos)
VERNER VON HEIDENSTAM
Un juglar del palacio.
No ser molestados con la conversación.
El amor es como un jardín de muros muy altos que solo permiten ver el cielo sobre él y que oculta todo lo demás.
El amor es solo la semilla escondida bajo el humus impuro de la tierra que pronto enmohece y pudre.
La salud y la hermosura rivalizan para perpetuar la existencia y la perfección del género humano.
El tejado de chapa de cobre del castillo de la ciudad.
Gildas. Corporaciones de comerciantes artesanos de la Edad Media, gremios.
De las muestras de las tiendas colgaban coronas de hojas de abedul.
(San Jorge y el dragón)
Las ventajas y los defectos del carácter.
Las brumas de nuestra fantasía.
El Oriente es un hogar y un escenario del viejo concepto optimista de la vida humana y de la libertad personal y también de las diferentes bondades que nuestros antepasados nórdicos simbolizaban con Balder (el segundo hijo de Odín), el heleno de los Asas, la divinidad del Sol y de la dulce primavera y de la eterna juventud.
El viejo y solemne templo de Balder que se llama Solna.
Escuchar ingenuamente tocados de gozosa emoción.
Magníficos modelos para las novelas humorísticas.
Las anémonas se crían a lo largo de las colinas del Tiveden de Suecia.
Pronunciar con tono conciliador.
Gesto de resignación.
Expresión burlona.
Expresión de profunda seriedad.
El suave susurro de los álamos y el murmullo de los arroyos.
La mente ágil e inquieta de los franceses, la cálida sensibilidad que lleva al apasionamiento.
El imán de la ilusión.
Las horas transcurrían largas y enojosas.
Pintoresca peroración.
Fanático vehemente.
Renacer con la divertida charla del buen humor.
Lo esperado, lo maravilloso, lo mucho tiempo deseado.
Chistosas novelas.
Afectada indiferencia y maneras incisivas.
La pisada de los días y los años.
Para colmo de la ofensa era casado.
Analizar minuciosamente las emociones.
No cautiva lo pintoresco como lo plástico.
Incomparable desnudez plástica.
Gesto de sabihondo.
Fuego de rebelión.
Gesto complaciente.
Manifestó muy campanudo, como si fuera una eminencia médica y con soberano desprecio de los circunstantes.
Violentos gestos indicadores de la más terrible desesperación.
Someterse de buen grado a las prescripciones.
La resolución de la embrollada cuestión.
El sueño era una cosa absurda, sin sentido; pero entretuvo su imaginación la noche entera.
El terrible aspecto del llamado pupulacho de una revuelta callejera europea.
Barba descuidada de bandido.
La exaltada legión vestida con los trapos sucios del Occidente.
Un vaho somnífero se extendía sobre la muchedumbre.
Sin autoconciencia de la gravedad del peligro.
Gestos execrables.
El colmo del insulto.
Expresión de indiferencia mezclada con asombro complaciente.
Pereza fatalista.
Los occidentales prosperamos paso a paso con garantía de todo lo que la prosperidad aprovecha y marchamos firmemente adelante.
La tremenda responsabilidad que la fama implicaba.
La responsabilidad que la fama imponía.
Un gato a la vez dócil y cariñoso, pero nunca devoto y fiel.
El mango, la hoja y el corte de la hoz.
Tono de desdén.
Un acurrucado pájaro enfermo.
Un traidor manifiesto.
Una serie de circunstancias favorables podrían contribuir al éxito.
Las circunstancias de los días de excitación le habían colocado sobre un lugar excepcional rodeándole de curiosidad, temor y admiración.
El curso de las graves circunstancias.
Tono excitado.
Un tácito convenio para silenciar.
El horizonte limitado con la áspera cordillera.
La tierra ve como suyo aquello que muere y por eso lo toma.
Tono pedantesco.
Invadida con sombrías inquietudes percibió conveniente, según la manera oriental, el aprovechar la ocasión.
Gesto afligido.
Las duras condiciones de la existencia.
Las gentes de Occidente que esperaban un gran futuro eran refunfuñonas y estaban cansadas de la vida como los viejos enfermos.
La fantasía hizo de Palmira una ciudad construida por los genios que poblaba de fantasmas los pozos y los oasis.
Los dilatados preludios de la conversación.
Condenado y degradado como un simple criminal.
Tono amargo.
La inaudita responsabilidad que su fama le imponía.
Destilar los sueños odio inextinguible.
La materia había sido idéntica todo el tiempo, pero las circunstancias le habían afectado de diferentes formas.
Gesto complaciente.
Expresar vaga y furtivamente.
Crear un círculo de actividad.
Un ser humano despierto y emprendedor, un smartman singularmente simpático con las gentes.
El tallo de mirto cuyos brotes figurarán sobre la corona de la desposada.
Con un gesto más de glacial altanería que de amargura.
La achaparrada botella de cerveza fea y abombada del disforme bufón de las comidas nórdicas había sido reemplazada con el frasco de vino de Chipre revestido castamente con su cubierta de paja trenzada como si fuera un traje femenino.
Una fuente de porcelana de las Indias Orientales casi llena de verde y fresca ensalada sustituía las plebeyas zanahorias con legumbres cocidas características de una mesa nórdica.
Tono humorístico.
Los ingeniosos ataques de ajedrez.
La novela con la que había sido envuelta.
Orgullo occidental.
El mar presume de su grandiosidad.
El silencio del desierto era hondo y estático como un mundo donde la materia no recibiera el soplo de la vida.
El borde del horizonte rojo del desierto.
Sutilidades mitológicas.
Tampoco su ambición irrumpía los inciertos campos de caza del porvenir.
La estría larga y roja del horizonte.
Sin suponer que la afectara a tal grado.
Inseguro tono.
La intriga de la tragedia estaba destapada, la acción había culminado y faltaba el quinto acto.
Iba con paso vacilante cruzando las tortuosas calles como si fuera una Corina a lo largo de las tierras de Oriente. Heroína de una novela de madame de Staël.
Quería no impurificar su dolor con el fin de hacerlo valer para comprar la piedad y la atracción de otros.
Tono descortés.
El pesimista mal humor del Occidente.
Escéptico bonachón pesimismo.
(Endimión)
GASTON LEROUX
Enzarzado con una intriga.
El estruendo inexplicable que producen las cosas bajo las tinieblas.
Entorpecimiento morboso.
Olor a bazar.
Manifestarse tranquilo.
Nunca la naturaleza sufre una cargazón temible como el momento que se dispone a arrollarlo todo.
Buen acomodo y buenos títulos de beneficios.
El instinto adoctrinado con una racionalidad habitual, la buena contera de la razón.
Vino alegre como la gaita.
Lastre de cautivas reflexiones.
Romaníchels (feriantes), curiosa asociación de ladrones a la cita.
Jornalero que solía trabajar a ratos perdidos.
Juego de las fisonomías.
La sangre de los grandes crímenes no se seca.
Salvaje rudeza, el tipo de mayoral enamorado de su caballo con la pica al ristre a galope tras los rebaños o los días de fiesta, campeón del herradero.
Hidalgos, arruinados.
Titánico empuje.
Ojos glaucos como el mar.
El soplo que transforma un ser y que le manifiesta un mundo más allá de las cosas visibles.
Villanas injurias.
Un romance de Valaquia.
Caballos héticos, nunca fatigados.
Sobre el muro opaco que había levantado con obstinada voluntad entre el pasado y el porvenir empezaron a correr rasgos azufrados que pergeñaron imágenes de desgracia, ruina y devastación.
La ira de aquel pueblo que bajo su desgracia acusa a los extranjeros.
Tosquedad ya audaz ya medrosa.
Talante del patrono que desprecia la indigna acusación.
Alas de la racionalidad.
Manifestarse resignado.
Manifestarse sumiso.
Material y ocasión.
Sin decir oxte ni moxte.
Los sabios no toleran que se les atropelle.
Los administrativos detestan a los periodistas.
El primer pasante liquidador del notario.
Consecuencia o forma.
Burla feroz más que las injurias.
Manos urentes de fiebre.
Maleficios que adormecen la voluntad.
Alturas del sueño.
Antojos de suicidio.
Cazo. Escondite.
Tiempos difíciles cuando una gran importancia mundial tiene la moneda fiduciaria.
Buenas divisas no impresas ni de Viena ni de Moscú.
El recurso de apoyarse con la contera del buen sentido.
Selva de abetos.
Manto de Corte.
Acusación excesiva.
Los duelos están prohibidos cuando se tiene enfrente al enemigo.
La vida, un gran error divino.
Desmayarse de rabia o de dicha.
La paloma incapaz de oponer resistencia al ojo circular y fijo del gavilán.
Villadiego, país hipotético.
Muecas de esclavo.
Manifestarse osado.
Humea el incienso de los turíbulos.
Todo vuelve a lo largo de los tiempos, lo que casi equivale a decir que nada se transforma y que hasta el tiempo no es más que una ilusión.
(Rouletabille y los gitanos)
THOMAS BURKE
Los vicios de un decadente francés.
Los sórdidos callejones de los muelles, esa región de vida desperdiciada, faena y decadencia.
El barrio chino de Cardiff.
Las Parcas movieron rápidamente varias piezas de su tablero siniestro y todo lo que siguió sucedió con una velocidad y precisión que mostraba la dirección de caminos superiores.
Modales audaces e infantiles.
Una niña cockney de alabastro.
La noche maligna.
La delicada estructura de los sueños.
Suaves caricias y largos y devotos besos eran su demostración.
Nacherel. Amarillo.
Las agonías de la totalidad de las épocas.
El orgullo del destino aceptado.
La sensación de finalidad lo había aturdido amablemente; no podía sufrir nada más.
Las tiendas "generales" con sus trapos variados, su hierro roto y sus cuencos de desperdicios de cocina.
Criaturas con las ansias de vivir corriendo a lo largo de sus venas; hijos de delicadas gracias.
Aventuras fantásticas.
Mentes inexpertas.
Encender la imaginación entrenada.
El eterno dolor de las cosas.
Una flor de luna.
Los reclusos cuidados de una escuela secundaria de Ealing.
Para ser inmoral primero debes suscribirte a alguna moralidad convencional.
Despierta, vacila, crece y por fin de la triste crisálida emerge la mariposa.
Las miradas como aterciopeladas cuchillas.
Un gesto feroz.
Un negocio podrido.
Exudaba positivamente prosperidad, la veneración del éxito material.
El saldo bancario creció y se nutrió.
Una rugiente acusación de ladrón.
Llegó a la ruidosa consecuencia que hay que vivir de alguna manera.
Lo esperado sucedió como suele suceder.
Insistir con el argumento.
Saltó atrás con la rapidez de un fauno asustado.
Marcar la pompa de la procesión del año.
Cuánto más dulces son las cosas de las manos, la querida amistad de las calles.
No tenía valor para el mal ni ternura para el bien.
Un estúpido, una mera cosa fofa con un traje de algodón.
Su mente lenta e inculta desarrollaba una docena de esquemas serpenteantes pero eran impracticables para él.
Quemar las emociones.
Se precipitó con una nube de palabras a la calle.
Una enunciación labial.
Tono de cumplido casual.
Un extraño bosque de ideas.
Secretismo y semitonos.
Sus reflexiones se alejaron nadando como un pez errante.
Genio para adivinar los misterios de la vida.
La tímida dignidad del niño.
Tomar una actitud clara de la situación.
No se puede matar una institución inglesa con el ridículo porque el ridículo presupone un sentido de proporción de la cosa ridiculizada.
La ironía de las cosas.
Despertó a una sensación de la grandeza de las cosas.
Oscuros consejos.
El miedo de su paso y el desafío de sus ojos.
Khybosh. Poner fin.
Narc de cobre, soplón.
Caer las manos con un gesto de rendición.
Ellen Wood, "East Lynne", 1861, novela sensacional victoriana.
"For Get Me Not", anuario británico ilustrado publicado por Rudolph Ackerman, 1822.
La brutalidad de las cosas.
La suya era una suerte difícil; vagamente había tropezado con la verdad de seguir pasara lo que pasara.
La desdichada historia había corrido al galope.
La glamurosa noche de enero de Chinatown.
La seductora cualidad del sueño.
Un cansancio histérico.
Un cansancio seductor.
Lo reprendió juguetonamente con una suposición de virtud sorprendida.
Diabólico mimetismo.
El demonio de la matanza y el demonio inmundo de la crueldad.
Los torrentes de la venganza.
Maldiciones como sapos.
El sueño de los cerdos lo atrapó.
Un hierro candente de agonía corrió su espalda.
La memoria es un instrumento delicado.
Como una vieja caja de música permanecerá silenciosa largos años; entonces una nada, un tirón, un temblor arrancará la primavera y bajo un decente manto de polvo nos hablará de olvidadas pasiones y deseos. Algunos recuerdos se conmueven a la vista de una cinta, una violeta descolorida, una cuenta de hotel; otros al sonido de una voz o de un compás o al mordisco de un sabor del paladar o una disposición de los cielos sobre un fondo familiar.
Una pulcritud epigramática.
Creía poder tomar lo que podamos mientras podamos.
School board. Consejo escolar.
Contuvo el aliento como si hubiera recibido un fuerte golpe.
No creas esperar que llegue tu barco. Lo que puedes es conseguir un bote y remar para encontrarlo.
Una tristeza mixta.
Pelo de mopa (fregona).
Mostrar la cualidad ginebrina.
El gerente apeló, exhortó y condenó.
El tifón del idioma lo hizo retroceder.
Un susurro inquieto cuando una muchedumbre de personas comienza a recuperarse.
El tonto inevitable hizo el comentario.
Los acantilados del dolor.
No era un ser humano sino un organismo torturado.
La furia del golpe, el gemido de la víctima, el aullido del agresor.
La gracia y valentía animal.
Backchat. Comentarios groseros.
Su vocación residía en el estrés y el sacrificio del mundo vulgar.
Esa desconcertante variedad de rostros que hace que la portada del diario sea distintiva en el puesto y profundamente atractiva para el estudiante de fisonomía y humanidad.
Clara y firme como el rocío de la aurora.
Un grado más exacto.
Ikey. Clave.
La energía frenética autoconsumidora de los precoces.
Un vacío de consternación.
Violetas para la tumba.
El simple, el desprevenido que no conoce los caminos del engaño o el discurso de los injustos.
El abandono total de los principios con la emoción.
Un ánimo aventurero para aventurar preguntas, la explicación completa con el adjetivo vívido.
Huir de la notoriedad con una timidez aguda como la que distingue a la dama novelista.
Nipper. Pinza, tenaza.
Es ocioso eludir la verdad. Que se admita el sórdido hecho.
La estupidez del avestruz que distingue los descendientes de familias nobles que se han casado con los de su especie.
Abrazar la sarga azul, la fiebre de la autoría propagandista.
La extraña mezcla de presunción y desprecio del carácter chino.
La fugaz fantasía.
El apacible perfume de violeta.
La fuerza dura y huesuda peculiar de aquellos que viven vidas de abstinencia forzada.
Un estanque de misterio.
Las garras vandálicas.
Reflexionó sobre la completa desesperanza del esfuerzo humano mientras existiera la suerte.
Mirar con ira lentamente.
La evidencia definitiva.
Obtener recompensas de un tipo más sustancial.
Encogió los hombros como para protegerse de un golpe inminente.
Un tono meloso terriblemente amenazante.
Un acceso repentino de fuerza desesperada.
Una manada de camaleones suplicantes de cara chata.
Una ira impotente.
La actitud distraída.
Un sano buscador de la verdad.
Repudiar la suave acusación.
Apartes casuales.
Aventura, fuego y sal y las cosas de rápido sabor.
Es mucho mejor permitir que el golpe descienda del vacío.
Agitó un dedo amenazador que llevaba una gruesa banda de luto en la uña.
Comportarse con una vena varicosa.
Expresaba la esencia amarga del desprecio que los débiles tienen con lo despiadado y fuerte.
Una luna de cara gorda estaba saliendo lentamente.
Al margen de los que llevan una vida impetuosa.
La oscuridad cadavérica.
Poner calidez y jocosidad al tono.
Su boca escupió sapos con la forma de maldiciones.
Semejaba autocontrolado como un conejo a punto de ser sacrificado.
Un comentario lascivo.
(Noches de Limehouse)
Hechos. Símbolos de la vida.
Humor fijo, alejado de las transformaciones del placer o la desgracia.
Momentos de inquietud sabidos de los niños, momentos de misterio percibido fugazmente.
Alegría aguda tras la cortina del tiempo.
A la vez alegría y experiencia, entendimiento y serenidad.
Belleza y dolor de las cosas.
Farthing. Moneda equivalente a un cuarto de penique.
Bank Holiday. Festividad inglesa, se celebra el primer lunes de agosto.
Los apostadores son la aristocracia del ocio que nunca traicionan ni la victoria ni la derrota.
Modelos de carácter. Humores distintos.
Pose y calada del halcón.
Celo de la disciplina.
Grandeza de los hoteles de Kensington.
El genio es algo natural.
Cockneys. Londinenses de baja categoría.
Gravedad del negociante.
Farsas de Worple.
Remolino de la conversación.
El día de los días del que habla la leyenda oriental.
Querer hacer la realización, tener el poder de crearla.
Labor de escribir.
Genio extraordinario y solitario.
Revistas. "The Tatler", "The Sphere", "Vanity Fair", "The English Review".
Rumpelmayer´s. Salón de té de St. James Street.
Abominables náuseas físicas.
Presa de inescapable dolor.
Humor según el tiempo.
(El viento y la lluvia)
Humor fijo, alejado de las transformaciones del placer o la desgracia.
Momentos de inquietud sabidos de los niños, momentos de misterio percibido fugazmente.
Alegría aguda tras la cortina del tiempo.
A la vez alegría y experiencia, entendimiento y serenidad.
Belleza y dolor de las cosas.
Farthing. Moneda equivalente a un cuarto de penique.
Bank Holiday. Festividad inglesa, se celebra el primer lunes de agosto.
Los apostadores son la aristocracia del ocio que nunca traicionan ni la victoria ni la derrota.
Modelos de carácter. Humores distintos.
Pose y calada del halcón.
Celo de la disciplina.
Grandeza de los hoteles de Kensington.
El genio es algo natural.
Cockneys. Londinenses de baja categoría.
Gravedad del negociante.
Farsas de Worple.
Remolino de la conversación.
El día de los días del que habla la leyenda oriental.
Querer hacer la realización, tener el poder de crearla.
Labor de escribir.
Genio extraordinario y solitario.
Revistas. "The Tatler", "The Sphere", "Vanity Fair", "The English Review".
Rumpelmayer´s. Salón de té de St. James Street.
Abominables náuseas físicas.
Presa de inescapable dolor.
Humor según el tiempo.
(El viento y la lluvia)
FRANK SWINNERTON
Las aceras estaban llenas de gente que caminaba inclinada de un lado a otro para recibir y desconcertar la brisa.
Estaba por encima del esnobismo como por debajo de la piedad.
Una ligera vanidad le otorgaba un porte y una dirección infalibles.
Un calculador rápido y astuto.
Como se habla de todo ser con personalidad en el mundo de la charla.
Imperturbablemente en armonía con el silencioso tictac de su hermoso reloj.
Un reloj de cazador.
Trazar y descartar un inconveniente o una línea de conducta.
Tontos impulsivos que se precipitaban emocionalmente a la histeria.
El desprecio de los demás que caracteriza al esprit fort de nuestro débil ideal.
Una fiesta mixta donde la conversación era una forma suficiente de entretenimiento.
Una impresión definitiva.
Todos estamos alerta para ver las limitaciones de los demás.
Anotando reservas complementarias.
Una quietud peculiar de su actitud.
La práctica del arte de entender a sus semejantes lo condujo al éxito empresarial.
Un impulso incalculable.
Los experimentos sin rumbo del arte de ganarse la vida sin esfuerzo.
Los gestos de los excesivamente famosos o el aire amenazador de aquellos que son intelectualmente mejores que su compañía.
Las vehemencias de color.
Para él los sentidos eran causa de seriedad, causa del olvido total de todo lo cómico o caprichoso.
Una aventura irresistible.
Luz, color y sonido magníficos. Vivacidad y riqueza, musica y poesía, un estimulante inigualable para la alegría y los sentidos. Había un toque de audacia de ese contacto con lo desconocido y lo excitante y la audacia era su ideal.
Queda desconcertada la gente sofisticada ante un comentario hecho con humor sin sentido y sin ser consciente de sus implicaciones.
Había cámara pero no amor con la actitud.
Su vigor era manifiesto.
Una inteligencia vivaz y un ánimo impaciente.
La burbuja intacta de sus exageradas historias de amistad con los grandes.
Corpulencia firme y manifiesta.
Un jubilo que casi contenía lágrimas.
Gravemente alarmada.
Nombres, cualidades y acciones publicos.
Una expresión sospechosa y desdeñosa.
Poder llegar con la verdad.
Un comportamiento libre de artificios y lleno de emociones ingenuas.
Cayeron bajo una monotonía de muñecos familiares.
La actitud de alguien olvidado por el mundo.
Grave y sin coquetería.
Una expresión de impaciencia mal disimulada.
En guerra con su suerte como otras debutantes.
Estaba libre lo que significaba que no se encontraba en ninguna situación; y su ambición excedía sus aptitudes de actuación.
Una vida de vago esplendor derivada de su talento.
Un golpe fingido y perentorio.
Se encogió de hombros con un aire engreído de aburrimiento.
Inteligente como el diablo.
La satisfacción ingenua de llamar a las personas por su nombre.
Estaba instintivamente en guardia.
Se encogió de hombros ya que no tenía ningun hecho que comunicar.
Las reflexiones saltaron delante de las razones y matices de interpretación.
La actitud fue protestonamente hosca como si le hubieran detectado una falta.
Es el temperamento que va con esa tez. Es oscuro y de mal humor.
Su actitud era fríamente desdeñosa.
Un generoso impulso de emoción.
La actitud de sabiduría superior en los caminos del mundo.
Irritada con la solicitud personal.
Una expresión de egoísmo descontento.
La rápida percepción de los demás que poseen los niños. Su autoconocimiento era bastante menor.
Había preservado su libertad de una serie de episodios comunes.
Una rápida inteligencia la había rescatado y la experiencia le había garantizado para enfrentar cualquier situación.
Patéticamente desconcertada.
Las viejas ideas de la atracción y la amistad han desaparecido.
Una sombría insatisfacción nublando el rostro.
Aburrida casi hasta el letargo.
Asociar con la fingida protesta.
Carecía de misterio y abandono.
Crear una situación emocional artificial.
Gracia y personalidad.
Podría delatar debilidad, inestabilidad o bravuconería imprudente pero nunca asociarse con el tedio.
Decidió dar un golpe rápido.
Nunca tendrá ningun éxito. Es imposible con su temperamento.
Un tono bajo de obstinación.
Manifiesta intimidad.
Si un tipo es honesto y decente su inteligencia no importa.
Rectitud e inteligencia.
No sabía que para cada apreciación su mente registraba las declaraciones adversas que le habían hecho las partes perjudicadas.
El atractivo de lo autoconvencional.
Horrores imaginarios.
La letra era pequeña y fluida, firme y rizada. Las letras mayusculas eran grandes y bellamente formadas y , sin embargo, había un descuido y una gracia del estilo general que le encantaban.
Sobre el Puente Albert viendo el rápido movimiento del Támesis.
Muchos hombres ganan dinero sin proponérselo deliberadamente.
Una riqueza y una posición apreciable de su perspicacia comercial.
Una existencia agradable aunque sin rumbo.
Con un corazón cálido, una gran simpatía y una actitud muy reservada y tímida que daba la apariencia de frialdad estaba en peligro no como reflexionaba de agotarse sino de hacer alguna ridícula zambullida bajo un emocionalismo que podría arruinar su vida.
La expresión del lento y confortable disfrute malicioso que cruzó el rostro.
La sacó del círculo general y exigió su atracción personal.
La coquetería del retraso.
Solo era semiconsciente de sus sensaciones de vuelo.
Siendo la sorpresa más que el placer la emoción de las dos partes.
Lidiando con emociones y ocasiones familiares sumamente contento.
El toque añadido que cualquier apetito complacido exige actualmente a su ejercicio.
Un grupo de intrusos bailaban con gran libertad de gestos.
Gran debilidad intelectual.
De ojos azules como de oveja.
Transformar una expresión de impotencia y vacío como una de impotente admiración.
Una casi deliberada paciente actitud.
Era a la vez impetuosa e inocente, una combinación de caracteres que causa problemas al dueño.
Su vanidad quedó sensatamente fortalecida.
La variedad una extraña noche desocupada se transformó como un horror inquietante.
La limitación que subyacía bajo la intimidad.
El inteligente brillo de expresión vivaz.
Una actitud inmadura y superficial.
Escuchando el tormento sin fin de las hojas angustiadas.
La coerción de sus impulsos traería inhibiciones.
El pánico tenía un nucleo de deleite.
Una lacónica protesta del abandono.
Sacudida como el fuego.
Levantó los brazos al aire con un gesto de ofensivo asombro.
La actitud se suavizó.
La espesa corriente de emoción provocaba saciedad.
Solo la contenía alguna tímida delicadeza, algun miedo, alguna parálisis de la voluntad.
Twiter. Gorjeo.
La pequeña mojigata suburbana.
Analizar la sensación de shock. Era estupida, aprensiva, anticuada, infantil. La verdad era más amarga que cualquier simple y cobarde estremecimiento.
Las sugerencias alarmistas de su imaginación.
Un ataque abrumador de arrogancia.
Kümmel es un licor dulce y transparente condimentado con comino, hinojo y semillas de alcaravea (kümmel). Se inventó en Holanda donde se destiló primero.
Una visión de astucia infantil.
La confusión del futuro.
Whitaker´s Almanak es un libro de referencia que se publica anualmente en el Reino Unido. Fue publicado originalmente por J. Whitaker & Sons de 1868 a 1997. Consta de artículos, listas y tablas de educación, alta sociedad, departamentos gubernamentales, cuestiones sociales, de salud y del ambiente.
El penetrante sentido del humor que sustituye a la imaginación de las personas de poca vitalidad y amplia experiencia.
Un préstamo sustancial.
Una lista de los valores poseídos.
De riqueza y posición cuya perspectiva se había vuelto grotesca como consecuencia de una larga vida en un círculo restringido.
No tenía consuelo ni variedad.
Una situación económica avergonzada.
Riqueza impenetrable.
La insensibilidad trastorna los standards al no ser consciente de su existencia.
Es extraño cuán instintivamente desprecia la flexibilidad un inglés.
La vivacidad de expresión.
Una gravedad ligeramente ansiosa.
Un tono de desánimo.
El grado de intimidad.
Un cheque abierto pagadero al portador.
Un tono sorprendido.
La vanidad es una fase de algunas personas.
Las limitaciones y disciplinas de la vida oficial.
Consejos, lujo sugerido e invulnerabilidad.
La sombra de la desesperación.
Una atracción manifiesta.
Un toque de picardía.
Ávido de emoción.
Había permanecido secreto con el sentido de la diplomacia.
Conmovedoras emociones.
Énfasis cruel.
Tono de disculpa.
Superficial irrelevancia.
Tono sobrio.
Una punzada de miseria.
Acusar de injusticia.
Burla de la imprudencia emocional.
Un tono triste y desesperado.
Énfasis infantil.
El temperamento alterado.
Justificar la propia conducta.
Desear ferozmente a alguien.
Una desesperación casi viciosa.
Una paciencia lenta y fatalista recompensada.
El juego de sus ligeras emociones lleno de singular atractivo.
Tímida como una cierva.
Calcular la delicadeza.
Un grado inesperado de deseo.
Una política trivial.
La verdad y la honestidad.
La actitud ligeramente agitada.
Su moderación manifiestamente ejercida fue traicionada con todos los tonos.
Significados secundarios e implícitos.
El valor intrínseco de la personalidad.
Como consecuencia de su peregrinaje intelectual estaba muy seria.
La traducción de Eurípides de Gilbert Murray.
Tono gentil.
Un signo de emoción o cesión.
Un ilegible aire de reserva.
El que calla en una riña sale ganando.
Un motivo urgente.
Buscar en la memoria ocasiones, detalles, espías.
Una actitud despreocupada que provenía de no tomarse en serio.
Había un veneno benigno con su tono alentador.
Era esencial la seriedad de un conflicto directo y no la emocional negativa encaprichada a afrontar las posibilidades.
Un color optimista.
Despertó de alguna preocupación evidentemente agradable.
Con mucho descuido disimilaba una momentánea falta de garantía.
Dicho francés. Todo pasa.
Los cuidados que exige el diablo.
Desarrollar argumentos extraordinariamente defensivos.
La actitud adoptada deliberadamente.
Un golpe de exasperación.
(Los tres amantes)
PAUL MORAND
La memoria de los excesos.
Inquietante onicofagia. Hábito de comer las uñas.
Noches duras, metálicas sin fundidos ni claroscuros.
Las diversas flores de las huellas digitales.
El embotamiento que nos atenaza después de grandes aflicciones y que la naturaleza aprovecha para recobrar fuerzas.
Tono solemne.
Un galimatías frenético.
"Les samedis de Chiffonette".
Un gesto hastiado y arisco.
Reservar el afecto.
En París no hay manera de recurrir a las ideas generales; todo se gasta con anécdotas.
Acusar de poseer un carácter literario.
Librar de la pobreza, del yugo industrialista y patronal.
La diferencia de sensualidad y temperamento.
Inventario moral.
Hablar de amor restituía ese equilibrio que nos vale las simpatías de los provenzales y la amistad del destino.
Asediar con pueriles emociones.
La liberal existencia de los grandes almacenes.
Aventuras salpicadas de letargias.
Cepillitos de bañar pasteles.
Las palmeras de piel de paquidermo.
Tono apremiante.
Estallará la huelga general. Van a sospechar de todos los extranjeros.
Por qué he de invocar la suerte si estamos reunidos.
Navegar por el país de los sueños convencionales.
Una exaltación crónica.
El Simplón ofreció la audición de una gran sinfonía metálica.
Una brisa de zinc cortaba las espigas de la llanura croata.
Usados, sórdidos y fastuosos notarios.
Los franceses solícitos, sensuales y serios.
Los efectos agitadores semejan los del rayo, son caprichosos.
Un vaso de corladura. Barniz dorado.
Armándome de valor.
Un cabujón de esmeralda. Piedra preciosa pulimentada y no tallada de forma convexa.
No hubo sitio que no fuera inaccesible ni encuentro privado de hostilidad.
Tono quejumbroso aunque convencional.
Rodeado de un encanto que apresaba.
Las turbias manchas de las esmeraldas.
Un gesto de marcharse.
Alienado sonsonete.
Una roja, amarilla y negra fruta lombarda.
Le Boeuf sur le toit. El restaurante.
Fragmentar las conversaciones.
Gricarelle. Albóndigas de carne picada.
El cansancio cayó del techo como una bomba aniquilando a varias personas.
Las plantas marítimas: la diligente cerraja, el salsifí, la enredadera tricolor y la cupidona azul.
Había llegado el momento que la noche pronta a perder su belleza se paraliza y despliega un concierto de silencio.
Estaba horriblemente descompuesto como un muerto por culpa del sueño.
Se había estremecido como un fantasma cuya ronda se viera asaltada con la aurora.
El olor de la noche, olor a polvo, a cansancio, a papel arrugado.
El fin del mundo ilocalizable.
Un chalet normando de financiero.
Un gran edificio de mortal estilo Carlos X nos petrificó con su color de furgón de artillería y su aspecto que sugería 1830 y Luis Felipe.
Una valija vacía de esas que alquilan esas tascas de Saint-Lazare para las parejas adulteras ansiosas de terminar la noche.
Un pueblecito dormido bajo un sueño de asfalto, casas de ladrillos color plumpudding.
Un publico de trade-unions.
Lord Ruthwen <<a caballo con las fuerzas del carss>> y sus fieles Hay, Lindsay, Ogilvies con casacas de bufalo. La coraza, los plaids y las hachas. Personaje de "El vampiro" de Polidori.
El domingo mejor que la peste había asolado las afueras.
Silencio nocturno mohoso.
Stop that nonsense at once. Reprime tu insensatez.
De temperamento impulsivo y de carácter errado.
El placer que antaño se usaba para coronar o terminar los afectos.
Inteligencia y sensibilidad.
La intimidad rara vez constituye el privilegio de personas sin prejuicios.
Fragmentos del diario desprovistos de valor.
Cultivaba el embuste hasta límites de valor físico.
Greco-irlandés.
La vida es un tejido de antagonismos.
Se aficionó a tomar vulneraria (remedio que cura llagas y heridas), se rodeó de cristales prismáticos, desayunó jengibre, recibió cada día una magnolia de mano desconocida y dio extrañas consignas a los criados, no podía tocar la piel de ante sin desvanecerse. Se apartó de la vida por razones aparentes; me recibió sobre panteras y sus palabras se volvieron elípticas.
Al amparo de mi desenvoltura y de mi insolencia desplegaba mis tristezas perdidas o recobradas.
Amar de una manera imperfecta cuando estamos lejos.
La presteza y la baja calidad de sus deleites.
Sus ideas titubeaban como un murciélago a pleno día.
Un Jupiter de dos caras frígido y dominador.
Utilizar con tino el idioma secreto y dulce que brota con el placer, los vocablos vergonzosos cuya aplicación puede ser igualmente grosera desde esa perspectiva precisa.
Cesan de gustarnos los misterios cuando nuestros amigos se aficionan a los enigmas.
Ir a cenar sin avisar. Una surprise-party.
Un ser audaz, despreciable y falto de albedrío.
Un stayer, un sixdayman. Ciclistas.
Urbaines. Agencia de Seguros.
El lanudo italiano, el gigante suizo, los corsos con cara de reenganchados.
Reinaba un silencio de diez toneladas.
Saludar con el gesto de su especialidad.
Una actitud hermosa y arisca.
Manifestar simpatía y estimular.
Muy instruida con la conversación para animar una velada.
En lo privado una piel con venas como ríos de los que marcan las geografías.
Un gesto muy delicado.
Una tozudez de botella.
La superioridad sencilla de los sueños y el gozo pueril.
Un cráneo abombado de mercader tangerino.
Sin ceder la argumentación.
Extranjeros con pasaporte blanco.
El Danubio se alargó semejando todos los Níger existentes.
Se sumergió el sol bajo sus nubes a manera de cola de pavo real.
Budapest con sus mansiones Regencia, sus jardines de arriates, el palacio real pueril, teatral y salvaje.
Los grandes hoteles con la claridad frambuesa de los roof-gardens.
Oficiales chusqueros.
Repleto de expresiones verbales aunque también de un egoísmo cenobítico y de una prudencia de notario.
Los mil anejos de burlescos organismos internacionales.
Sumiéndose con ese sueño magnético que viene dado con la ausencia de tormentos y con la representación de una gran firma comercial libre de amenazas de quiebra.
Una mañana bonísima con un cielo albaricoque.
Tintes de reflexión y retiro.
Manifestar la pretensión de aproximarse.
Una tristeza honda, una postración silenciosa y secreta.
A ratos manifestaba una infinita actividad ambulante ferozmente independiente; pero también dicha actitud suponía una ficticia transformación de sus costumbres.
El carácter se había vuelto flotante, tornadizo.
Una existencia sacrílega.
La indiferencia de las estrellas.
En francés el pretil se denomina garde-fou, guardalocos.
Lo sobrehumano no genera sufrimiento ninguno, la medicina no conmueve.
Criptoquidia, una cripta oscura.
Una reserva afectuosa.
Antes disfrutaba con lo permanente, hoy la invade la afición al riesgo.
Una existencia obscena, su tranquilidad se disiparía víctima de la expropiación moral.
Loables esfuerzos de adaptación.
Pretextar una de las causas más comunes de nulidad matrimonial: el error sobre la persona.
La candidez limitadora del Código.
Una afición a esclarecer misterios.
Hermafroditas célebres. Angélique Courtois, Giuseppe Marzo, el hijo de Woods, Adélaide Préville, Alexina B, Bullings, Marie-Madeleine Lefort.
Fantasías de hiedra.
Sus ideas saltaban al abordaje de mis ideas.
Una curiosidad de índole inmoral.
El prestigio de las actitudes solemnes, de los silencios, de los gestos sin afectación se impone de repente.
El valor nutritivo de los vegetales.
La rapsodia de los fracasados.
La madeja de la primavera.
Comer sin hablar igual que una pareja inglesa.
Las focas engrasadas como piezas de artillería.
Constelaciones notorias.
Alzó unos ojos transparentes de Virginia.
El sol desapareció; remolacha cortada.
(La noche es larga)
Rectos gritos.
Un tupido césped del Kent.
Solo las efigies se transforman, pero la materia permanece.
Un marcador donde se transcriben con cifras blancas y rojas el flujo y reflujo de los valores de la Bolsa.
Una tempestad de mensajeros.
El choque de floretes durante el asalto.
A shooting affair. Un ajuste de cuentas con el revólver.
El barrendero irlandés barre.
Una ciudad es un organismo que vive cuyas células se transforman.
La vida de bohemia es encantadora en Fulham, en Charlotemburgo o Schwabig: alcanza su intensidad máxima en Montparnasse.
El ambiente de antaño del Cheshire Cheese de Fleet Street de Londres o la Jungle o el Jokey de Montparnasse.
El cielo nacarado de una variedad admirable.
Reniega una generación de otra en vano.
El tortuoso cerebro de un europeo.
Comer carne equivale casi a beber alcohol.
No hay más que una verdad, la de la noche propia.
No hay más que una latitud: la de los placeres.
El agente grandullón que asusta a los niños en sueños.
Let´s go to. ¿Qué hacemos? ¿A dónde vamos?
Dados emplomados.
La energía gastada de esta cosa ficticia con la que incurrimos en la equivocación de no cansarnos nunca: las noticias.
Sindicar, revender.
Permanecer de pie a la inglesa mientras no se ha sentado la anfitriona.
El tono auténtico de un viejo dorado.
Cenas suntuosas con caviar gris y tortuga verde.
Reservar los espacios vacíos armónicos y las masas de verdor que existen en las capitales europeas.
Sin cuenta en un banco y sin baño.
Coqueteando con frases complicadas.
Tono de complicidad.
Veo que vienes aquí a la busca de material. I see, looking for some material.
Los afroamericanos cuentan con los novelistas Charles W. Chesnutt, Claude McKay, Nella Larsen y la pintura de Aaron Douglas, Woodruff y Albert Smith.
Las focas de traje aceitoso.
El cariño de los anglosajones a los animales.
En la acera perdido en el espacio y el tiempo.
Quién no adora la victoria.
Lo superfluo es padre de las artes.
El producto de lujo de la mente.
La anarquía de los irlandeses.
Un sueño, un experimento prodigioso, un avatar, un renacimiento efímero.
(Nueva York)
ANITA LOOS
Escribir es diferente de la musica porque no hay que aprender ni practicar y es más temperamental.
Almorzar en el Ritz.
Trabajar como perros proverbiales para limpiar.
Los carruseles de París tienen cerdos en lugar de caballos.
Pasar mucho y salir dulce y amargada.
Contar historias arriesgadas.
Arrastrado al escándalo de un tribunal de divorcios y manchar el nombre.
Tuve un caso grave de histeria y mi mente estaba en blanco.
Hay un límite para casi todo.
La forma más elevada de educación es viajar.
El endurecimiento de las arterias.
Flores con conchas marinas.
Gastar dinero es solo un hábito.
50 060 orquídeas realmente hacen que una joven visione un funeral.
Santeem. Unidad monetaria etíope.
Educación y reverencia.
Un cazador de gangas.
Una influencia indebida.
Un golpe fuerte a la puerta.
Un abogado puede chillar como un taxista.
Si sigues más tiempo, mojado o seco te irás.
Mi cerebro le recordaba una radio porque la escuchas días y días y justo cuando estás a punto de destrozarla sale una creación artística.
Un restaurante pintoresco.
Las habituales peleas de chillidos y encogimiento de hombros de padre e hijo.
Una amistad platónica con caballeros.
Un centavo ganado es un centavo economizado.
Freud. Con las inhibiciones quieres hacer una cosa y no la haces. En su lugar sueñas con eso. Cultivar algunas inhibiciones y dormir un poco.
Lleno de abandono.
La consecuencia del destino.
Viejo dicho. Dígalo por escrito.
Objeciones del ánimo de reciprocidad.
Vigilado como un halcón.
Todo lo que tiene que hacer para arruinar una fiesta es llegar a la fiesta.
Superar la reserva del debutante y ocupar un lugar.
Un punto de inflexión.
El dinero no lo es todo porque al fin y al cabo solo el cerebro cuenta.
La masacre de los armenios.
(Los caballeros las prefieren rubias)
Ni despierto ni dormido me deslizo con una suerte de sueño con el que se mezcla lo vivido con lo leído y oído, como se mezclan las corrientes de colores o brillos diferentes.
Semejantes a la corneja los seguidores abandonamos al asceta Gautama cuando hemos perdido el placer que hallábamos con él.
Un mensaje deliberadamente muy oscuro y precipitado.
Condición de desequilibrio mental.
Dividendo usurero.
Galucoma. Afección del globo ocular que lleva a la ceguera. Solo hay una manera de frenar el avance del mal; practicar la irisectomía, extirpar un minúsculo fragmento circular del iris. Las secuelas son terribles deslumbramientos.
Como las potencias invisibles terminan con un ser humano, como restalla el rayo surgido de un cielo azul.
Suicidio con una ampolla de nitrito de amilo. Inhalado causa una muerte similar a una congestión cerebral.
Ánimo del crimen, invisible.
Silencio tenso, inquietante que traiciona su propia causa y que da a cada minuto proporciones monstruosas.
Una explicación razonable.
Disposición crepuscular próxima al sueño.
Reina la previsión material con su sabiduría y circunspección con la economía de la naturaleza.
Billete de cien gulden.
La pureza del motivo no constituía una excusa.
Fineza de percepciones del subconsciente.
Aportar una prueba para mantener las acusaciones con la aptitud garantizada de rebatir cualquier testimonio y defender el momento de menester.
Materia sin vida -la tierra- animada con el ánimo.
Sin más valor que el polvo.
Calle de los Hacedores de Oro, donde durante el Medievo los adeptos a la alquimia calentaron la piedra filosofal y aprisionaron los rayos de la luna.
Babinski, célebre bandido de Praga.
Lo más fascinante es aquello que trasciende los sentidos.
Extensión del turismo.
Insidioso veneno de la sugestión.
Sistema de intimidación.
No se podían colocar dentro de una celda dos acusados de igual crimen.
Para hacer hablar a un durmiente hay que dirigir las preguntas hacia el plexo del centro del estómago.
Disposición crepuscular.
Expresión de estupor sin límite.
(El Golem)
Ganar un lugar en el Atrio de la Fama.
Welshrabbit. Conejo a la galesa.
Tournure. Elegancia, aire.
Ocioso instinto de la limpieza personal.
Comer, restauración de los tejidos.
Discusión académica.
A primera hora de la mañana el cerebro actúa irregularmente.
Pan de la lamentación.
La autoconciencia prevalece sobre la indolencia.
(El hombre con dos pies izquierdos)
Flammarion. En los barcos predestinados a las catástrofes suele haber menos pasajeros de lo habitual. Lo atribuye a presentimientos del subconsciente. En casos de naufragio, la ley humana se transforma en brutal disciplina y el que pierde su turno se sitúa al margen del rescate general.
Leyes de rigurosa etiqueta.
grado de obediencia de los subordinados.
(Tabú)
Campos amarillos de gao-lian. Gramínea de China, Corea y Manchuria.
Masas graníticas de las sopki. Montañas cubiertas de hierba.
Esterillas de gao-lian trenzado.
"Shi-Dzin". Libro de versos que leen las personas cultas.
Peter. San Petersburgo.
Hablar con inercia de moribundo.
Arrastrando las palabras como lombrices.
Eruslam. Valiente legendario.
Opresión del silencio.
(El tren blindado N1. 14-69)
Nombrarse mariscal de la ciudad.
Cobardes. Amarillos.
La luna apareció para derrotar a la noche.
Unas largas teorías de caballos se movían de un lado para otro a mucha distancia, que apenas eran visibles.
Instrumentos de visión humana perfectos, unos ojos claros de un color gris, como los de un águila. Los ojos oscuros no pueden ver a mucha distancia de las llanuras o del desierto como los azules o los grises.
(El valle de los caballos salvajes)
Hermann Hesse
Un lobo estepario, un ser extraño, salvaje y sombrío, muy sombrío, de otro mundo que mi mundo.
Forma y hábito.
Educado en el "quebranto de la voluntad".
Acuario, un signo oscuro y húmedo.
La mohosa lira de la gratitud.
Fosilizados sueños de armonías.
El sentido que se había llevado el viento.
Es peculiar del suicidio sentir su yo, igual da con o sin razón, como un germen especialmente peligroso, incierto y comprometido, que se estima siempre muy expuesto y en peligro.
Suicidas. La conmoción, el dolor, la mala situación en la vida, despertaba al punto el deseo de sustraerse a través de la muerte.
El humorismo, el producto más genial de la humanidad.
El velo del arcano.
La turbia campana de cristal de mi aislamiento.
Eternidad. Reino más allá del tiempo.
Brillo dolorosamente hermoso del pasado.
Pesada ola de angustia y de tinieblas.
Humor patibulario.
Han ensuciado nuestro bonito mundo alegórico con manchas de realidad.
(El lobo estepario)
Grito de una lechuza, profundo y hueco como el sueño, como el olvido.
Amor, ardor, emoción.
La espléndida sombrilla verde veronés de Ersilia resplandecía como la joya de un anillo mágico.
Mares del tiempo y la soledad.
Como un ídolo, reposaba en las nubes de la aceptación.
Para que haya caída o ascenso debería haber arriba y abajo. Pero no hay arriba y abajo, eso sólo existe en la mente del ser humano, en el país de las ilusiones. Todos los antagonismos son ilusiones; blanco y negro, muerte y vida, bueno y malo. Es cuestión de pasar una hora al rojo vivo con los dientes apretados, de esa manera se abandona atrás el reino de las ilusiones.
Corazón estremecido.
Existe la libre voluntad. Se llama magia. La magia deshace, puede con la peor de las ilusiones, esa a la que llamamos tiempo.
Esfuerzo, sudor, impulsivo y ebrio afán.
Locura homicida.
Mariposas con rostros en las alas.
(El ultimo verano de Klingsor)
Conversación de tono profundo.
La astrología es una tentativa para importar un sistema de la diversidad de tipos de hombres, destinos y vocaciones.
Saber de alguien es encontrar aquellas notas que lo distinguen de los demás.
La ciencia tiene paciencia, no se atiene exclusivamente a las señales externas y groseras.
Según el ensayo de dogmática un ser humano es igual a otro, pero respecto de la vida no.
Los hombres de intelecto no viven plenamente, sino de manera seca y descarnada.
Representa la patria de los artistas la tierra y la de los hombres de intelecto la idea. El peligro que acecha a aquellos es ahogarse bajo el mundo sensual; a los segundos los amenaza el de asfixiarse dentro de un recinto sin aire. Uno duerme sobre el regazo de la madre, otro vela a través del desierto. Para este brilla el sol y para aquel la luna y las estrellas.
El desvanecimiento podía provenir de un cólico; le prescribiría vino caliente de enfermo, aromatizado con canela y clavo y endulzado con azúcar, o ruibarbo.
La astrología es una tentativa para importar un sistema de la diversidad de tipos de hombres, destinos y vocaciones.
Saber de alguien es encontrar aquellas notas que lo distinguen de los demás.
La ciencia tiene paciencia, no se atiene exclusivamente a las señales externas y groseras.
Según el ensayo de dogmática un ser humano es igual a otro, pero respecto de la vida no.
Los hombres de intelecto no viven plenamente, sino de manera seca y descarnada.
Representa la patria de los artistas la tierra y la de los hombres de intelecto la idea. El peligro que acecha a aquellos es ahogarse bajo el mundo sensual; a los segundos los amenaza el de asfixiarse dentro de un recinto sin aire. Uno duerme sobre el regazo de la madre, otro vela a través del desierto. Para este brilla el sol y para aquel la luna y las estrellas.
El desvanecimiento podía provenir de un cólico; le prescribiría vino caliente de enfermo, aromatizado con canela y clavo y endulzado con azúcar, o ruibarbo.
Montañas de escombros, océanos de olvido.
Ojos zarcos, divinos.
Graznido de la lechuza.
Los ojos de los zorros y las martas ven a través de la noche.
Graznido de la lechuza.
Los ojos de los zorros y las martas ven a través de la noche.
Se cubrió con la vida nemorosa.
Hilo del sueño.
Ojos zarcos como de agua.
Ojos zarcos como de agua.
Grado de bienestar.
Por aquellos días iba a transformarse la luna y mejoraría el tiempo.
Sobre la superficie le retozaba la vida con todo su colorido.
Sobre la superficie le retozaba la vida con todo su colorido.
Hondo saber de la sangre.
Luna suspendida.
El oro que brillaba del ojo de una carpa.
El oro que brillaba del ojo de una carpa.
Sabido, mecánico y sin misterio.
El cielo envía bienestar y penurias.
Obedecer los mandatos del estómago.
La vida se enriquece y florece con la división y la oposición.
Tintineantes medallas de cobre, recuerdos de renombrados santuarios.
Tintineantes medallas de cobre, recuerdos de renombrados santuarios.
Violín de la muerte.
Horribles sayones de los hospitales.
Ojos présbitas, casi apagados.
Horribles sayones de los hospitales.
Ojos présbitas, casi apagados.
Dualidad, oposiciones, razonable o emotivo, gozar de libertad o de organización, guiarse por el instinto o el ánimo.
Tono de arrogancia infantil y levemente irónico.
Tono de arrogancia infantil y levemente irónico.
Haber metido de hoz y de coz con la filosofía.
Referencia de libertad y reciprocidad.
El reflexionar nada tiene que ver con las representaciones. No se reflexiona a través de imágenes, sino con conceptos y fórmulas. Y allí donde terminan las imágenes empieza la filosofía. El intelectual pretende saber y representar la esencia del mundo a través de lo racional. Sabe que nuestra razón y su instrumento son materiales imperfectos de igual manera que un artista de talento.
Los numeros, los signos más y menos no encierran ninguna representación, una igualdad no contiene ninguna imagen. Cuando te pones a resolver un problema de aritmética o de álgebra no te vales de ninguna representación, sino que resuelves un problema formal dentro de formas mentales aprendidas. Si me pones una serie de signos puedo actuar sin menester de representación, puedo guiarme por los más y los menos, los cuadrados, los paréntesis y demás signos y resolver el problema.
El aplicado estudiante de matemáticas resuelve los problemas escolares que el profesor le proponga. Pero también puede plantearse esas cuestiones, pueden surgir con su ánimo como fuerzas poderosas.
Es menester haber calculado muchos espacios reales y ficticios antes de acometer como ser humano reflexivo el problema del espacio.
Respiraba a través del bosque el aroma evocador de la libertad.
Puesto que el ser humano es una mezcla incierta de materia y ánimo, puesto que el ánimo le abre la experiencia de lo eterno, mientras que la materia tira de él hacia abajo y lo encadena a lo perecedero, debe esforzarse por huir de los sentidos hacia lo anímico a fin de elevar su vida y darle un sentido. Por el camino opuesto, por el de los sentidos, llegas a percibir con igual hondura el misterio del ser y a expresarlo de una manera más viva.
El reflexionar es un abstraer, un apartar la vista de lo sensorial, una pretensión de edificar un mundo puramente anímico.
Referencia de libertad y reciprocidad.
El reflexionar nada tiene que ver con las representaciones. No se reflexiona a través de imágenes, sino con conceptos y fórmulas. Y allí donde terminan las imágenes empieza la filosofía. El intelectual pretende saber y representar la esencia del mundo a través de lo racional. Sabe que nuestra razón y su instrumento son materiales imperfectos de igual manera que un artista de talento.
Los numeros, los signos más y menos no encierran ninguna representación, una igualdad no contiene ninguna imagen. Cuando te pones a resolver un problema de aritmética o de álgebra no te vales de ninguna representación, sino que resuelves un problema formal dentro de formas mentales aprendidas. Si me pones una serie de signos puedo actuar sin menester de representación, puedo guiarme por los más y los menos, los cuadrados, los paréntesis y demás signos y resolver el problema.
El aplicado estudiante de matemáticas resuelve los problemas escolares que el profesor le proponga. Pero también puede plantearse esas cuestiones, pueden surgir con su ánimo como fuerzas poderosas.
Es menester haber calculado muchos espacios reales y ficticios antes de acometer como ser humano reflexivo el problema del espacio.
Respiraba a través del bosque el aroma evocador de la libertad.
Puesto que el ser humano es una mezcla incierta de materia y ánimo, puesto que el ánimo le abre la experiencia de lo eterno, mientras que la materia tira de él hacia abajo y lo encadena a lo perecedero, debe esforzarse por huir de los sentidos hacia lo anímico a fin de elevar su vida y darle un sentido. Por el camino opuesto, por el de los sentidos, llegas a percibir con igual hondura el misterio del ser y a expresarlo de una manera más viva.
El reflexionar es un abstraer, un apartar la vista de lo sensorial, una pretensión de edificar un mundo puramente anímico.
(Narciso y Goldmundo)
FRIEDRICH GLAUSER
Un dicho profundo. "Cuando envejeces siempre tienes tiempo".
Desear la mejor de las suertes.
Cuando eres abuelo eres viejo, chatarra.
Era una enciclopedia ambulante de la ciencia criminal.
Clarividencia, cartomancia, visión de cristal, telepatía, criptomnesia.
Un monólogo, un soliloquio.
Una caja de naranjas.
Mitigar la vergonzosa improbabilidad de la historia.
La vida nos obliga a asociarnos con fantasmas.
Gritar más fuerte como replicando la recriminación de un ser invisible.
Encogió sus poderosos hombros.
Llamar por el nombre de pila al viejo estilo bernés.
¿No tenía derecho a una verosímil familiaridad?
Tío es lo que dicen los suevos.
Tenía una forma especial de mirar a la gente; sin escuchar realmente, tranquilamente asombrada; una extraña mirada examinadora.
Un torrente de preguntas valientemente sazonadas.
No tenía ganas de enumerar las peculiaridades del caso a su colega médico; la palanca torcida del contador de gas, la bota de vestir de la anciana con bata.
Con sus anteojos de carey semejaba un búho, no podía ser ahuyentado.
El suicidio con gas es contagioso.
No tenía alucinaciones auditivas, protestaba ante tales imposiciones sacudiendo violentamente la cabeza.
¿Era este tal vez el "gran caso" con el que sueña todo criminalista aunque sea un simple investigador?
Si hubiera sido simple no habrían afirmado que estaba loco.
Delegado de congresos criminólogos. Querían decir que tenía demasiada imaginación. Tal vez solo vio un poco más allá de su nariz que era larga.
Los anteojos con cristales ovalados hacían que la visión semejara extrañamente lánguida y desinteresada, impersonal. Y como consecuencia la cara se volvió inexpresiva.
Un científico indiferente.
Añadió con un alemán suizo que sonaba extranjero.
Me atraen la botánica y la geología, por eso llevo una lupa en el bolsillo.
Conectar un cordón al grifo de la tubería de gas y pasarlo a través del ojo de la cerradura.
Escondiendo la sorpresa y sobre todo la curiosidad.
El café valientemente diluido con kirsch (licor de cerezas).
Ojos tortuosos, penetrantes.
Era uno de esos rostros que nunca envejecen o que nunca son jóvenes.
No pudo evitar que un escalofrío le recorriera los ojos y la espalda.
Los ojos estaban cargados de desprecio, de experiencia desdeñosa.
Azotaba una epidemia de viruela.
Añadir un apéndice al párrafo.
Un movimiento aparentemente estúpido realizado por un oponente inteligente. Descartas el movimiento encogiéndote de hombros pero he aquí que te das cuenta de que has caído en una trampa.
Ninguna teoría podría construirse desvaídamente. En primer lugar tendrías que acostumbarte a las divertidas referencias de la familia para instalarse. Entonces podrías ver más lejos.
Preguntó con urgencia y su respiración era pesada.
Turbios crímenes.
Su figura semejaba maciza, pesada y dura como una de las rocas de los prados alpinos.
Una larga diatriba.
Un ataque de tos.
En Suiza no decimos solo adelante, entra, decimos me encanta.
Los libros de geometría las palabras venían después de los teoremas.
Las palabras se precipitaron como un torrente que cae en cascada a un estanque de rocas.
Sus ojos estaban fijos en el pecho como si quisieran hacer una llamada silenciosa a ese órgano que generalmente se aprecia como el asiento de las emociones.
La expresión de su rostro era de paciente sufrimiento.
Con expresión de disgusto ahuyentó el gallardete de humo azul.
El silencio se hizo pesado pero ninguno se inclinaba a romperlo.
Engañado con una réplica burlona.
El cono de ceniza creció en su Brissago.
El silencio pesaba opresivamente sobre la habitación.
Se echó a llorar como un niño cuando lo acusaron del crimen y le pidieron sus papeles.
El carácter infantil, extraterrestre.
Recogía huellas dactilares en lugar de sellos. Las paredes de su estudio con marcos que semejaban reproducciones de pinturas surrealistas. Agrandamientos de pulgares, dedos índices, palmas de las manos. Diminutas islas nadaban sobre líneas oscilantes, espirales y muescas; los poros del sudor.
KCN, cianuro de potasio.
El aparato fotográfico, carbonato de plomo y grafito en polvo.
El alemán suizo federal de una persona culta de hoy.
Guantes quirúrgicos.
Vapores de yodo para desarrollar una huella dactilar.
Un matasellos se puede rastrear años después.
Unas gafas de acero dobladas sobre la nariz.
Los ojos lejanos vacíos como los de un buey rumiando.
¿Cuál era el valor de hacer preguntas?
Sus ojos se llenaron de una agonía impotente que podría disolverse con lágrimas.
Los chismosos útiles.
Habló con energía como quien sabe lo que quiere.
Los ojos ansiosos.
Un caso ilegalmente embrujado.
Un silencioso soliloquio.
El inspector consistía en una cabeza calva que semejaba haber sido lijada con papel de vidrio todos los días.
Algunos tienen problemas con el estómago, otros con la digestión, otros con la circulación sanguínea.
Unos ojos inocentes de color azul claro.
Un investigador ingenioso.
Escribir con la pluma más venenosa.
El nervus rerum, el nervio de las cosas.
Una ráfaga de aire urbano saturado de polvo limpió la atmósfera de la habitación.
Un ruido extraño que encajaba con la palabra bernesa grochsen, grande, una mezcla de sonidos de suspiros, carraspeo y maldiciones ahogadas.
Eran berneses y sabían ocultar su tensión bajo expresiones indiferentes.
Existen dos métodos para encontrar alguna huella digital sobre el papel; vapores de yodo o rayos ultravioleta.
Los cálculos humanos.
Dado que el cantón está destinado a ser el albacea del testamento se incrementará con la comisión que el cantón pueda exigir.
Un testamento olográfico escrito, fechado y firmado por el testador.
Reflexionar vagamente muchas cosas.
Un proverbio sobre un burro que fue a bailar sobre el hielo.
Tienes imaginación y la imaginación se te escapa.
Ralentizó el flujo del discurso dándose la vuelta y pidiendo el libro de visitas.
Las personas de buen carácter lo pasan mal en el mundo. Siempre están siendo engañados. Mientras los otros con la boca estrecha, con los ojos desdeñosos usan su experiencia.
La experiencia no es solo poder como cree la perogrullada popular, también engendra dinero. La experiencia funda el chantaje astutamente diseñado.
Cualquier acción puede justificarse y si la razón no se encuentra con la mente consciente hay que buscarla con la inconsciente.
Una letra idiosincrásica y egoísta con una floritura claramente curvada.
Telefonear sin garabatear no es telefonear de verdad.
El Puente de Kornhaus de Berna.
El teléfono chilló.
El puente Kirchenfeld y el río Aare de Berna.
Su cabeza estaba inclinada y el ala ancha de su sombrero bloqueaba su vista.
Un reflejo, un movimiento repentino.
El pequeño ladrón habitual.
El profundo tono de pecho de la inocencia ofendida.
No esperaba dar sentido a todo el caso, no tenía palabras clave.
La organización se transformó en caos.
La autoconciencia agobiada.
El cerebro actuó sin esfuerzo.
Llegar lejos con las sospechas.
No soy extraordinariamente sensible, como dicen los franceses.
La minúscula letra griega.
Armados frente la burla.
Descifrar el criptograma.
Siguió implacablemente como si recitara algo que había aprendido de memoria.
Una razón válida.
Bratwurst, salchichas y embutidos con härdopfelsalat, ensalada de manzana madura.
Se envolvió con el silencio.
Un ser humano tranquilo que no semejaba un sedentario.
De cualquier empresa del poder político hay al menos uno como la sal de la totalidad de la empresa. Visto como un extraño no se le exige ninguna tarea regular; lo cotidiano con su monotonía se le aleja o mejor dicho lo mantiene a raya. Solo se usa y aquí radica su valor cuando hay menester de hacer algo extraordinario. Entonces es insustituible. Encontrará formas para desentrañar una situación confusa, entenderá cómo encajar otra compañía que se ha vuelto recargada y atrevida.
Hacer la actividad preliminar.
Podía leer las reflexiones que se deslizaban perezosamente detrás de la frente de su superior.
Completar la exposición.
No puedo obtener ninguna claridad por teléfono.
Los esfuerzos inútiles para encontrar la segunda parte de la oración.
Aclaró la garganta con sequedad.
Contar el caso con una diplomacia sincera.
Su delgado cráneo sacrificado.
La Legión Extranjera solo extradita el caso de un crimen o de una suma que supere los 100.000 francos.
La quiebra fue la consecuencia de la torpeza, no de la deshonestidad.
Las cosas con las que uno tenía que lidiar también eran sombrías.
Un sueño horrible, pesado y cargado de miedo. Estaba en un oasis solitario, pero sabía que no estaba vacío. Habitaba una criatura, ni ser humano ni bestia, que saltaba al cuello de los que se extraviaban y los montaba hasta la muerte. Caminaba encorvado y ansioso bajo las venenosas palmeras de plumas verdes. A la criatura no le importó un comino el encantamiento.
Podía ver el futuro, los muertos le obedecían.
Noticias reconfortantes.
El sueño de la noche anterior tuvo un efecto oscuro.
Era un juego cruel porque no conocía las reglas.
Una recepción conmovedora.
Reflexionó vagamente que había perturbado un nido de avispas. Incómodo.
Los tubos Mannesmann, los recipientes con los que se pueden almacenar gases a alta presión.
La historia que ha permanecido latente vuelve a ser relevante.
El pájaro de la sabiduría.
Con paso rígido de lechuza.
Arrestado con algún pretexto y expulsado como extranjero no deseado.
Podrás deshacerte de tu sombra ¿verdad?
Danos hoy nuestro problema de cada día.
Infantilmente simple. Actividad torpe. Escritura masónica.
Las casas leprosas de los suburbios pasaban cojeando a la marcha del tren.
Era aconsejable seguir a algunos de los jugadores de esta trampa de mosaicos y desaparecer.
Una misión política.
Las maletas no lloran. Se contentan con semejar tristes y llenas de desdén.
Hablaba francés sin tintes alemanes.
Labios artificiales.
Un acuse de recibo.
El viento venía del mar. Traía humedad y un olor muy tenue a algas y pescado.
La boina le dio un algo de aventurero.
Semejaba la autoconciencia culpable encarnada.
Una apuesta definitiva por el crimen; ojos tímidos, manos temblorosas, estremecerse cuando le hablan.
Una inveterada sospecha.
La mula sacudió la cabeza como si pretendiera ahuyentar las ideas ventosas.
Los cometas son vagabundos del mundo estrellado.
Un juego de salón en el que cada jugador tiene que decir una palabra por turno.
Un chocolate de aniversario cuidadosamente preparado de origen suizo.
Ninguna desconfianza al visitante extranjero. Una alegría tranquila y contenida.
El diablo es eterno, nunca sabemos cuándo despertará.
La actitud europea occidental.
Llevó el dedo a los labios. La réplica más conveniente.
Una auténtica ducha escocesa.
Dijo unas pocas palabras que el viento que soplaba alejó instantáneamente.
Sin siquiera darse cuenta de que estaba paseando con entusiasmo dentro de la extraña habitación.
Una consecuencia muy evidente, uno podría encogerse de hombros.
Sugestivas entonaciones.
Los ojos desbordaron y se durmió.
Revistió su silenciosa protesta con fuertes palabras. Y las palabras estaban hechas de material bernés.
La expresión francesa "faire le Jacques", hacer la jaca, hacer el oso, jugar al bromista o al tramposo.
No le gustaban las preguntas estúpidas. Se quejó de que si caminaba sobre sus dos pies se entendía que se había levantado. Quería seguir pisoteando sus silenciosos zapatos.
Se vio atrapada con un fuego cruzado de preguntas tranquilas pero muy persuasivas y se sintió mareada.
Sacudió la cabeza larga y fuertemente como un caballo que sufre los frenos.
Acusar de espionaje.
Susurrar ansiosamente y emocionado al oído.
La cara de los niños lisiados, tristes y viejos.
Extrañamente delgados y como deshilachados los sonidos del centinela llegaban a través de la rendija.
Conversaciones profundas.
Era mucho más difícil fallar inicuamente un objeto que golpear a una persona.
Su alemán suizo sonaba extrañamente anticuado y extranjero, era infantil.
No quiero que mi futura mujer hable como la heroína de una novela pulp.
¿Por qué te preocupas de lo que está por venir? Si quisieras apreciar lo que te deparase el futuro tendrías que desesperarte; pero al eterno juerguista ¿qué le importa el pasado, el presente y el futuro? ¿Él que posee la eternidad?
La insignia de la Legión Extranjera, la granada roja escupiendo llamas.
(La curva de la fiebre)
Ball
Frédéric Clauser (Friedrich Glauser, 1896-1938), escritor vienés, uno de los primeros escritores de novela negra.
LOUIS BROMFIELD
La memoria se aguza.
Una actividad de intensa expectación.
Una memoria infalible, que no olvidaba nada.
Mantener una conversación, opuesto a una serie de arrancadas en falso.
Distribuir la conversación en la mesa.
Aire de Venus frustrada.
Conversación general.
Un rojo fieramente apoplético.
Por un esfuerzo de voluntad se aisló de la conversación.
Rincones de la memoria.
Una espesa nube de tedio.
Sagaces bolsistas.
Permanecer cargado de silencio.
Circunstancias financieras, negocios.
Pleno vórtice de calamidades.
Sobrevivir a las calamidades.
Los gérmenes de la ambición.
Tener una memoria excelente.
Una curiosa dignidad de parodia.
El refugio impenetrable donde semejaba existir.
Reservada como una tortuga, sensitiva como una gacela.
Finos modales.
Usó un lorgnon -quevedos, lentes- para animar sus débiles ojos.
Le torturaría la volubilidad de su inteligencia.
Expresión perfectamente incolora.
La gente miope tiene una expresión incolora, que proviene del esfuerzo por enfocar los objetos, que a su vista se presentan turbios y distantes.
Un esfuerzo de voluntad.
Inmoralidad cínica, a lo gangster.
Cuán pequeñas son las cosas que se fijan en la memoria al recordar el remoto pasado.
Un símbolo de verdadera elegancia.
Tomar las riendas de la conversación.
Vencida, rota por las emociones.
Tenía la aptitud prodigiosa de hacer varias cosas a un tiempo, como si su mente estuviese dividida en compartimentos impenetrables.
Restaurante Delmonico.
Su cuerpo era un bloque de nervios a flor de piel.
Saludar afectuosamente, con empresement.
Conversación deliciosa.
Ola de cariño.
Ola de placer y excitación.
Un fuego de celos la ahogaba.
Una sombra de incomodidad.
Una punzada de desilusión.
Mimosas, belleza de su color de polvo dorado.
Afecto reservado para quienes sentía simpatía.
Peso del hogar.
El colmo de lo ventajoso.
Prisionera de las circunstancias.
Una esfera inadecuada, sensación de insignificancia y fatalidad.
Una sofocante sensación de garantía monótona.
Vitalidad animal.
Desear ardorosamente actuar por un mundo mejor.
El mundo mantenido por la riqueza y paralizado por la oscuridad.
Tragedias y calamidades.
Una imaginación viva y movediza.
Un delincuente de estafa.
Una sombra de tristeza.
Una conversación enojosa.
Conversar volublemente.
Perverso y desquiciado hasta la locura.
Desesperación cósmica.
Irresponsabilidad que conduce a la locura.
Métodos racionales de agricultura.
Agricultura concentrada, barbechos, abonos y fertilizantes.
Ola de desprecio.
Triunfante egoísmo de los ancianos.
Semilla de futilidad.
La pretensión de los pelmas para reprochar la pesadez ajena.
Su poder se componía de muchos factores.
Recuerdos henchidos de excitación novelesca.
Recopilar en la memoria.
Silencio amenazador.
En una repentina ola de intuición llegó a cavilar.
Epidemia de quiebras.
La vieja ola amorosa la alcanzó de lleno.
El pasado retornaba a su memoria en oleadas repentinas e inesperadas, claro y conciso, como encerrado en una cápsula que contuviese sólo la esencia y el significado de lo ocurrido.
La pasajera ilusión del alcohol.
Un fanático, ideas agitadoras.
Grado de gravedad del asunto.
Cuando los argumentos crecieron en violencia.
Había sido puntual, como suele serlo la gente ocupada.
La línea del hado marcada.
En Inglaterra se procesaba a la gente que atentaba a su vida, el colmo del absurdo.
El millonario aventurero que todo lo había ganado a pulso.
Una cualidad de eficacia humana.
El formulismo de los franceses, visten la desnudez de las referencias humanas con los ropajes de la decadencia.
Lo que se exige al ser humano. Ser creador, violento, saludable e irreflexivo.
El marco de aquella existencia cotidiana, que hace soportable la vida en las épocas calamitosas.
Era el dolor de una persona destinada a sufrir para siempre, porque permanecía encerrada en una concha cerrada a la simpatía, sin dar nada por su parte, desinteresada por lo que estuviese más allá de los límites de su prisión voluntaria y sombría.
La piedad es también una emoción dolorosa para quien la experimenta.
No compareció en el pleito y mandó a sus abogados que se nivelasen a la demanda.
Asirse a los ultimos hilos de respetabilidad.
Pesado silencio.
Todo estriba en la manera de usar el dinero, en lo que puedes adquirir con él. Vale por lo que se puede lograr.
Se aglomeraban como ganado, para sentir menos la soledad.
Ver y escuchar con intensidad felina.
Una iglesia rosada, azul y oro.
Una actitud extraña y desleal.
El dedo de la evidencia señalaba siempre el dinero.
Glándulas equilibradas.
La mano del azur.
Un asunto montado sobre el sofisma y el fraude.
Una loca, una Mesalina de vía estrecha con tendencias inquietantes para la vida y para reunir amistades.
La edad no se calcula por los años y hay gentes separadas por los años, que tienen igual edad.
El valor de la conversación.
La sabiduría que sólo crea la existencia.
Oscuras y olvidadas novelas francesas e inglesas, escogidas no por sus primores literarios, sino porque le recordaban alguna época o algún incidente.
Era una vieja novela francesa firmada por <<Gyp>> y esperaba que los recuerdos que su lectura despertase disiparían la sensación de opresión y de dolor, que se había venido adueñando de la joven.
Los libros viejos, los aromas familiares, las olvidadas piezas de música la conducían con frecuencia al pasado remoto.
Pero la vieja novela de <<Gyp>> fracasó como elemento de evasión. Se dio cuenta de que ni siquiera podía enterarse de lo que leía. Leía una página sin entender su sentido, porque lo que le habían contado la hacía volver, bolineando como un navío, hacia su autoconciencia.
Una especie de grandeza novelesca.
La novela permanecía en el lecho, sin abrir, tal vez porque su intriga, caracteres y situaciones eran mucho menos atrayentes que los acontecimientos que había vivido, las gentes con las que había contactado y la curiosa sensación melodramática que la había rodeado.
Habría pasado las páginas sin entender lo que decían, porque sus recuerdos eran más fuertes que el contenido de la mayoría de los libros.
Tal vez no tuviera resentimiento, porque su vida había rebosado de experiencia humana y que, al igual de un libro con el que se ha gozado, había llegado al final a la ultima página.
(La señora Parkington)
La memoria se aguza.
Una actividad de intensa expectación.
Una memoria infalible, que no olvidaba nada.
Mantener una conversación, opuesto a una serie de arrancadas en falso.
Distribuir la conversación en la mesa.
Aire de Venus frustrada.
Conversación general.
Un rojo fieramente apoplético.
Por un esfuerzo de voluntad se aisló de la conversación.
Rincones de la memoria.
Una espesa nube de tedio.
Sagaces bolsistas.
Permanecer cargado de silencio.
Circunstancias financieras, negocios.
Pleno vórtice de calamidades.
Sobrevivir a las calamidades.
Los gérmenes de la ambición.
Tener una memoria excelente.
Una curiosa dignidad de parodia.
El refugio impenetrable donde semejaba existir.
Reservada como una tortuga, sensitiva como una gacela.
Finos modales.
Usó un lorgnon -quevedos, lentes- para animar sus débiles ojos.
Le torturaría la volubilidad de su inteligencia.
Expresión perfectamente incolora.
La gente miope tiene una expresión incolora, que proviene del esfuerzo por enfocar los objetos, que a su vista se presentan turbios y distantes.
Un esfuerzo de voluntad.
Inmoralidad cínica, a lo gangster.
Cuán pequeñas son las cosas que se fijan en la memoria al recordar el remoto pasado.
Un símbolo de verdadera elegancia.
Tomar las riendas de la conversación.
Vencida, rota por las emociones.
Tenía la aptitud prodigiosa de hacer varias cosas a un tiempo, como si su mente estuviese dividida en compartimentos impenetrables.
Restaurante Delmonico.
Su cuerpo era un bloque de nervios a flor de piel.
Saludar afectuosamente, con empresement.
Conversación deliciosa.
Ola de cariño.
Ola de placer y excitación.
Un fuego de celos la ahogaba.
Una sombra de incomodidad.
Una punzada de desilusión.
Mimosas, belleza de su color de polvo dorado.
Afecto reservado para quienes sentía simpatía.
Peso del hogar.
El colmo de lo ventajoso.
Prisionera de las circunstancias.
Una esfera inadecuada, sensación de insignificancia y fatalidad.
Una sofocante sensación de garantía monótona.
Vitalidad animal.
Desear ardorosamente actuar por un mundo mejor.
El mundo mantenido por la riqueza y paralizado por la oscuridad.
Tragedias y calamidades.
Una imaginación viva y movediza.
Un delincuente de estafa.
Una sombra de tristeza.
Una conversación enojosa.
Conversar volublemente.
Perverso y desquiciado hasta la locura.
Desesperación cósmica.
Irresponsabilidad que conduce a la locura.
Métodos racionales de agricultura.
Agricultura concentrada, barbechos, abonos y fertilizantes.
Ola de desprecio.
Triunfante egoísmo de los ancianos.
Semilla de futilidad.
La pretensión de los pelmas para reprochar la pesadez ajena.
Su poder se componía de muchos factores.
Recuerdos henchidos de excitación novelesca.
Recopilar en la memoria.
Silencio amenazador.
En una repentina ola de intuición llegó a cavilar.
Epidemia de quiebras.
La vieja ola amorosa la alcanzó de lleno.
El pasado retornaba a su memoria en oleadas repentinas e inesperadas, claro y conciso, como encerrado en una cápsula que contuviese sólo la esencia y el significado de lo ocurrido.
La pasajera ilusión del alcohol.
Un fanático, ideas agitadoras.
Grado de gravedad del asunto.
Cuando los argumentos crecieron en violencia.
Había sido puntual, como suele serlo la gente ocupada.
La línea del hado marcada.
En Inglaterra se procesaba a la gente que atentaba a su vida, el colmo del absurdo.
El millonario aventurero que todo lo había ganado a pulso.
Una cualidad de eficacia humana.
El formulismo de los franceses, visten la desnudez de las referencias humanas con los ropajes de la decadencia.
Lo que se exige al ser humano. Ser creador, violento, saludable e irreflexivo.
El marco de aquella existencia cotidiana, que hace soportable la vida en las épocas calamitosas.
Era el dolor de una persona destinada a sufrir para siempre, porque permanecía encerrada en una concha cerrada a la simpatía, sin dar nada por su parte, desinteresada por lo que estuviese más allá de los límites de su prisión voluntaria y sombría.
La piedad es también una emoción dolorosa para quien la experimenta.
No compareció en el pleito y mandó a sus abogados que se nivelasen a la demanda.
Asirse a los ultimos hilos de respetabilidad.
Pesado silencio.
Todo estriba en la manera de usar el dinero, en lo que puedes adquirir con él. Vale por lo que se puede lograr.
Se aglomeraban como ganado, para sentir menos la soledad.
Ver y escuchar con intensidad felina.
Una iglesia rosada, azul y oro.
Una actitud extraña y desleal.
El dedo de la evidencia señalaba siempre el dinero.
Glándulas equilibradas.
La mano del azur.
Un asunto montado sobre el sofisma y el fraude.
Una loca, una Mesalina de vía estrecha con tendencias inquietantes para la vida y para reunir amistades.
La edad no se calcula por los años y hay gentes separadas por los años, que tienen igual edad.
El valor de la conversación.
La sabiduría que sólo crea la existencia.
Oscuras y olvidadas novelas francesas e inglesas, escogidas no por sus primores literarios, sino porque le recordaban alguna época o algún incidente.
Era una vieja novela francesa firmada por <<Gyp>> y esperaba que los recuerdos que su lectura despertase disiparían la sensación de opresión y de dolor, que se había venido adueñando de la joven.
Los libros viejos, los aromas familiares, las olvidadas piezas de música la conducían con frecuencia al pasado remoto.
Pero la vieja novela de <<Gyp>> fracasó como elemento de evasión. Se dio cuenta de que ni siquiera podía enterarse de lo que leía. Leía una página sin entender su sentido, porque lo que le habían contado la hacía volver, bolineando como un navío, hacia su autoconciencia.
Una especie de grandeza novelesca.
La novela permanecía en el lecho, sin abrir, tal vez porque su intriga, caracteres y situaciones eran mucho menos atrayentes que los acontecimientos que había vivido, las gentes con las que había contactado y la curiosa sensación melodramática que la había rodeado.
Habría pasado las páginas sin entender lo que decían, porque sus recuerdos eran más fuertes que el contenido de la mayoría de los libros.
Tal vez no tuviera resentimiento, porque su vida había rebosado de experiencia humana y que, al igual de un libro con el que se ha gozado, había llegado al final a la ultima página.
(La señora Parkington)
WILLA CATHER
Depositó un delicado beso en su frente.
Grados de suciedad.
Almanaque de St. Elmo.
Mantener una conversación erudita.
Carecer de conversación.
Los cócteles fueron la señal de que las conversaciones debían unirse.
Labrar una leyenda escandalosa.
La vida precaria, el futuro críptico e insondable.
Contaba la historia con reserva, escogiendo lentamente las palabras.
Merecer un capítulo un lugar, un momento de callado reconocimiento.
Si una expresión tenía una consecuencia eficaz, no encontraba motivo alguno para alterarla.
La luna naranja se elevó sobre las cumbres.
Cosas a la vez demasiado directas y demasiado esquivas, para ser expresadas con palabras.
Una expresión de satisfacción.
En ocasiones imaginaba la vida que podía haber vivido desde que la había distinguido y la que había escogido vivir. De esta disparidad procedía la emoción más sutil de su fascinación.
La librería estaba llena de filas de volúmenes de aspecto solemne con cubierta de tela oscura; los clásicos Bohn.
Una inquietud ominosa.
El sol ardía con el suave rosa y plata de un despejado amanecer estival.
Alcanzar retazos de la conversación.
Una cálida ola de emoción recorría su rostro.
(Una dama extraviada)
Depositó un delicado beso en su frente.
Grados de suciedad.
Almanaque de St. Elmo.
Mantener una conversación erudita.
Carecer de conversación.
Los cócteles fueron la señal de que las conversaciones debían unirse.
Labrar una leyenda escandalosa.
La vida precaria, el futuro críptico e insondable.
Contaba la historia con reserva, escogiendo lentamente las palabras.
Merecer un capítulo un lugar, un momento de callado reconocimiento.
Si una expresión tenía una consecuencia eficaz, no encontraba motivo alguno para alterarla.
La luna naranja se elevó sobre las cumbres.
Cosas a la vez demasiado directas y demasiado esquivas, para ser expresadas con palabras.
Una expresión de satisfacción.
En ocasiones imaginaba la vida que podía haber vivido desde que la había distinguido y la que había escogido vivir. De esta disparidad procedía la emoción más sutil de su fascinación.
La librería estaba llena de filas de volúmenes de aspecto solemne con cubierta de tela oscura; los clásicos Bohn.
Una inquietud ominosa.
El sol ardía con el suave rosa y plata de un despejado amanecer estival.
Alcanzar retazos de la conversación.
Una cálida ola de emoción recorría su rostro.
(Una dama extraviada)
DOROTHY SAYERS
Autodefensa de la mente de primera categoría ante la persona superior.
La guerra había ejercido mucha presión sobre los hombres con imaginación sobre puestos de responsabilidad.
Acerado destello jurídico de sus ojos.
Carácter testarudo y vitalista.
Dotes de deducción y análisis.
Porque el ser humano camina bajo vanas sombras... amasa riquezas sin saber a quien irán a parar.
Al fin la oscilante balanza de su mente alcanzó el equilibrio.
Regla de que nada es demasiado pequeño para no prestarle atención.
Pletina para huellas dactilares.
Previsión rara de la gente de dinero.
No hay que mezclar la uva con el grano.
Dignas alegrías de la escasez.
Aire contrito que se ve obligado a adoptar cualquiera acusado de ser demasiado rico.
Señalar los hechos.
Roldán rápido, impulsivo, descuidado y un manitas con dotes artísticas.
Oliveros cauto, firme, meticuloso, una mente virgen de arte y literatura que se ejercitaba los momentos de ocio con la teología evangélica.
Acusar de acoso.
Facha imponente y amenazante de Júpiter.
Los complejos explican muchas cosas, como la palabra hipopótamo.
Le atrae la ciencia, mejorar la parte sumergida.
La vida es un total erial.
La ley se pirra por la devolución organizada de la propiedad.
Los abogados son males de menester.
Triunfo del instinto sobre la razón.
Sombra de la indecisión.
Hacían gala del sobrio júbilo de quienes han demostrado la corrección de sus cálculos.
Ilusiones de demostrar.
No se puede demostrar lo negativo.
Nuestros amigos siempre se nos adelantaban.
Acusar de acoso.
Facha imponente y amenazante de Júpiter.
Los complejos explican muchas cosas, como la palabra hipopótamo.
Le atrae la ciencia, mejorar la parte sumergida.
La vida es un total erial.
La ley se pirra por la devolución organizada de la propiedad.
Los abogados son males de menester.
Triunfo del instinto sobre la razón.
Sombra de la indecisión.
Hacían gala del sobrio júbilo de quienes han demostrado la corrección de sus cálculos.
Ilusiones de demostrar.
No se puede demostrar lo negativo.
Nuestros amigos siempre se nos adelantaban.
Como el Santo Grial. <<Tenue de día, mas siempre de noche rojo de sangre deslizándose a lo largo del pantano ennegrecido>>.
Pièces de conviction.
El rostro pasó por diversas etapas, desde la furia a la perplejidad.
Dosis de digitalina. Reducción de la actividad cardíaca y colapso.
Las cualidades implican sus propios defectos.
Neurosis de guerra.
Defenderse del reproche tácito.
Leve velo de hostilidad.
Los libros son como los caparazones de las langostas. Nos protegemos con los libros y cuando nos quedan pequeños y los desechamos son la prueba de nuestras anteriores etapas de desarrollo.
Escritoras modernas. Dorothy Richardson, E. B. C. Jones, Mary Sinclair, J. D. Beresford, Compton MacKenzie.
Escritora Storm Jameson.
El rostro pasó por diversas etapas, desde la furia a la perplejidad.
Dosis de digitalina. Reducción de la actividad cardíaca y colapso.
Las cualidades implican sus propios defectos.
Neurosis de guerra.
Defenderse del reproche tácito.
Leve velo de hostilidad.
Los libros son como los caparazones de las langostas. Nos protegemos con los libros y cuando nos quedan pequeños y los desechamos son la prueba de nuestras anteriores etapas de desarrollo.
Escritoras modernas. Dorothy Richardson, E. B. C. Jones, Mary Sinclair, J. D. Beresford, Compton MacKenzie.
Escritora Storm Jameson.
Louis Berman, ensayos de Julian Huxley, Austin Freeman, Isabel Ostrander.
Molesta incertidumbre del núcleo del problema.
Una verosimilitud moral no es idéntica que una prueba.
Delicada reserva de los periodistas de Fleet Street hacia quien tiene una exclusiva.
Peso de las pruebas.
Qué haría la gente los viejos tiempos con los problemas, las peleas conyugales, los devaneos amorosos, los hijos y criados pródigos, las preocupaciones y sin poder recurrir a los libros.
Entre lo habitual y lo anormal existe un profundo abismo, pero muy estrecho, la distorsión deviene sencilla.
Posibles materiales y recursos.
Molesta incertidumbre del núcleo del problema.
Una verosimilitud moral no es idéntica que una prueba.
Delicada reserva de los periodistas de Fleet Street hacia quien tiene una exclusiva.
Peso de las pruebas.
Qué haría la gente los viejos tiempos con los problemas, las peleas conyugales, los devaneos amorosos, los hijos y criados pródigos, las preocupaciones y sin poder recurrir a los libros.
Entre lo habitual y lo anormal existe un profundo abismo, pero muy estrecho, la distorsión deviene sencilla.
Posibles materiales y recursos.
Sir Eglamore vence a su primer dragón.
(El misterio del Bellona Club)
(El misterio del Bellona Club)
King
Había leído otra vez una novela de misterio de Dorothy Sayers -habían sido y serían siempre sus favoritas-.
JOSEPHINE TEY
El Canal muy quieto y brillante como un ópalo lechoso.
Probablemente tenía una mentalidad de esclavo pero nunca había leído lo suficiente como para preocuparlo.
Chasqueó los dientes frontales y echó la cabeza atrás. Un gesto que expresaba con elocuencia y economía el cansancio de las circunstancias, la irracionalidad del ser humano.
Una actitud de intenso entusiasmo.
Tono sumamente profesional.
Una educación convencional.
No hay emoción real con nada. Solo histeria.
Su actitud se transformó abruptamente.
Un bulto de inutilidades.
Hizo una pausa impresionante para entender la importancia del nombre.
Silbar era señal de una mente vacía.
Tararear con fingida solemnidad.
Al borde de la desesperación.
Cara de disgusto.
Estudiando las investigaciones como una institución.
Aplazar la investigación.
Casi sarcástico casi serio.
Dos chelines eran mejor que una visión parcial de un proceso aburrido.
Las pruebas eran de lo más formal: el hallazgo y la identificación del cadáver y el forense puso fin al procedimiento.
El poder de seducir la mente humana.
Su rostro era como un pergamino seco viejo e inexpresivo. Solo el pulso que latía con fuerza en su sien sugería un ser vivo.
Que permaneciera inmóvil más de tres minutos consecutivos argumentaba que le estaba dando mucho que reflexionar.
Alimento para el ingenio.
La mente se centró con la peculiaridad de la frase: Yo era fanático de la mayoría de las cosas.
Aguante y lastre.
La completa Advertencia Horrible.
Asfixiantemente rico.
El encanto. El arma más insidiosa de todo el arsenal humano.
Un registro completo de las acciones.
Abriendo y cerrando la boca con impotencia.
Una investigación de rutina.
Una de esas cosas irracionales que ocasionalmente preocupaban su mente.
Un gran bocado del mejor Wiltshire.
No codiciaba los zapatos de nadie.
Sensible a una inflexión.
Un buzo que viene desde muy abajo está ajustando constantemente la presión.
¿Alguna vez has oído hablar de un abogado que sufra un shock?
Su cohete se había disparado a las estrellas con sus propios méritos.
Los incómodos países mal gobernados e inaccesibles.
El solsticio de la escritura.
Se rebeló ante la idea de proporcionar un manto a la prensa.
La suerte le rescató de cualquier menester de coerción.
CID. Criminal Investigation Department.
Uno no espera que un Piscis tenga ni la visión ni la fe.
Una conversación despiadada y reprensible.
Permaneció inmóvil con un aura de silencio desconcertado.
énfasis enojado.
Después de tres días el shock desaparece.
Descontento con la perversidad de las cosas.
El caldero alegre, el tipo humeante.
Uno de los especímenes bastante comunes de humanidad de algun rincón pobre de Europa que cree que está siendo explotado y perseguido por sus semejantes mal educados emocionales y despiadados.
El genio omnipresente.
Un ídolo mundial.
El genio para la evocación.
Un encogimiento de hombros con el suspiro de la naturaleza humana.
El tono conversacional.
Semejaba muy cansado pero no mostraba ninguna emoción.
Estaba ansiosa de que su patrimonio fuera administrado desde Inglaterra de cuya estabilidad tenía una gran admiración.
Los ámbitos de la existencia.
La masa infrahumana de histeria.
Un apuesto emocionalista.
Abrumadora emoción.
La ocasión, el motivo, la pista.
La muerte tremendamente injusta pero inevitable.
Del tipo "todos se arrepienten cuando estoy muerto".
Una conversación informal.
Preparado para una emergencia instantánea.
Redactar un codicilo del testamento.
El encanto, la inocencia y la iniquidad de los criminales.
La desesperación subió desde sus pies como una ola que lo golpea e inunda todo su ser.
Un abandono de odio.
La nuez, la persona que debe hacer una declaración.
El tono tenía una sombra de culpa.
Malhumorada deliberación.
El valor de huir.
El tono que se utiliza en lugar de escupir.
Había complacencia con el tono.
Sacando como apoyo lo que debería haber usado para el ataque.
Escribir al reverso de un folleto de gincana local.
La furia de la posesión, la ira por alguien amado.
Una decisión crecía con su falta de éxito.
La cobertura del cielo.
El hambre dio alas a la imaginación.
El ayuno era bueno para la imaginación pero malo para la razón.
El sarcasmo era vano para una mente literal.
Simplemente una cuestión de hecho.
Decidir qué sería político y productivo decir.
Si la suerte seguía como había comenzado.
Bajo el resplandor del cielo los horizontes comenzaban a nadar.
Cuando hayas cortado un silbato del fresno estará listo.
Una etiqueta de Cash (dinero efectivo).
Es un gran error ser demasiado escéptico.
Sus mentes estaban demasiado llenas de especulaciones para preocuparse de las emociones.
La indignación venció su autoconciencia del estanque negro, el silencio y su aversión de los bosques.
Era pequeño y ligero y podía ser rápido.
Perdiendo el sentido de la proporción si no te alejas un poco.
Como detective soy un gran granjero.
Un rival pintoresco.
La ligera extravagancia y la condescendencia comunes de Wimpole Street. Calle de Londres asociada a la práctica médica privada.
Para quien el fracaso humano debía ser un asunto comun y corriente.
Había prohibido mencionar el asunto pero también podría haber mandado que cesara la marea.
Se apegó a la verdad cuando le ayudó.
Verificar la declaración.
Valorar con su justo valor.
Estaba en una condición altamente emocional debido a su autodesprecio y autocuestionamiento.
La verdad es a menudo terriblemente débil.
La primera impresión se vio empañada con pruebas circunstanciales.
La evidencia puede ser circunstancial pero es muy satisfactoria y clara.
Un silencio de asombro.
Los capitanes de puerto y los empleados de aduanas son una raza constitucionalmente indagadora.
Líneas de investigación más obvias.
No tuvo el suficiente sentido comun para salir de la lluvia.
Un verdadero toque de compañerismo.
Una profesión que se ocupara de cosas y no de personas.
Las opiniones o las consecuencias.
Cualquier actitud furtiva.
El amor mutuo sería un asunto igualitario, pero su orgullo sería muy real, frágil y apasionado.
Cerró su mente rápidamente ante la reflexión que pretendía aparecer.
El expediente se ha completado a buen ritmo.
En el país las transformaciones fueron lentas, los atractivos circunscritos y los recuerdos largos. Pero para la vida fluctuante de la ciudad la atracción era superficial cuando existía.
Ideas engreídas.
Un pedazo de basura humana viscoso, furtivo, mentiroso y satisfecho.
Arengas políticas.
El odio es rebajador y debilitante. Quema por dentro hasta que no queda nada.
Éxito emocional como financiero.
Todos los estigmas: avaricia, enorme vanidad y falta de autoconciencia.
Forjar un testamento.
Un testamento falsificado.
Las velas no eran de esas con las que vas a la cama; eran de las que se ponen en los altares.
El abogado tarareaba y farfullaba no porque tuviera verdaderas objeciones sino porque es tarea de un abogado sopesar contingencias remotas y un acuerdo directo sobre cualquier cosa sería tremendamente poco profesional.
Por qué la mente jurídica se deleitaba con crear problemas cuando había muchas cosas listas para usar en el mundo.
No estaba de humor para mantequilla.
El sonido del corte fue elocuente. Fue acción y comentario comprimidos con un pequeño monosílabo.
Vagamente reconfortado.
Condenar a la perdición.
Proporcionar emociones a los asalariados moribundos.
No siempre era posible emocionarse y sollozar y si había una emoción con la que al publico británico le encantaba regodearse era la de estar justamente indignado.
Perseguir inocentes hasta la muerte era solo una frase. Era prácticamente un cliché.
Mantenerse alejados del césped cuando los tiempos eran buenos.
Se rumoreaba que la munificencia era más una expresión de agradecimiento que de devoción.
Las ropas de los chiflados semejaban un sótano de gangas después de una huelga de permanencia.
Diversos grados de indignación.
Crank. Manivela, cascarrabias, maniático, dar vuelta, arrancar.
Vagar los ojos.
Una cara familiar como la cabeza de una moneda.
Un golpe de suerte.
La conversación había fluido con inquebrantable superficialidad.
La ambición era uno de los incentivos para matar debajo de la pasión y la codicia.
Si no encontrara el crimen carente de humor lo hallaría plebeyo.
Una atracción fría y sincera.
Expresión somnolienta.
Un exterior comercial y lejos de ser emocionante.
La mente emitió el equivalente a un silbido largo y grave.
Escuchar con una atracción embelesada e infantil.
Una atención concentrada.
La mente llena de especulaciones.
La elegante costra de superficialidad e indiferencia.
La cima del árbol profesional.
Su asombroso y demasiado sencillo logro.
Meras palabras para afuera.
Chillona como un gorrión y casi igual de impresionante.
Las puertas de la memoria.
Preguntas ociosas.
Su yo soigné (aseado) gracioso y sereno.
Un golpeteo como de lluvia cayó sobre sus reflexiones, la cortés percusión de una mano enguantada.
Envalentonado con la creciente intimidad del ambiente.
El deseo de escapar de una situación tensa las personas que odian la torpeza.
Histeria violenta.
Empujones científicos.
Una exposición totalmente repugnante.
Un silencio de buen humor.
Holy Roller. Término del siglo XIX referente a los feligreses protestantes del movimiento wesleyano de santidad. El término describe bailes, sacudidas y movimientos bulliciosos.
Un discurso emocionado.
Una charla despreocupada.
Se había criado en una escuela dura y ese hecho la ayudó a discriminar.
El ingenio mortal.
Un depósito para desempleados.
Decir con veneno concentrado.
Dos expresiones: miedo o cautela.
El tono conversacional.
Dar un consejo amistoso es un mal hábito para los subordinados.
Las maravillosas criaturas de superinstinto y percepción infalible que adornaban las páginas de las historias de detectives.
Una colección de villas plutócratas ubicadas sobre el acantilado.
Su inglés pegajoso. El alemán para relleno y trozos de aderezo francés aquí y allá para que quede bonito.
Silencioso como una sombra.
Bajó las oscuras escaleras a gran velocidad tramo tras tramo como un murciélago.
Llover como barras de escaleras.
Había una congestión que con la debilidad del sujeto podría transformarse cualquier momento como neumonía.
El empuje abajo de un miedo sin nombre.
Las imágenes se unieron en la mente para formar una secuencia que tuviera sentido.
La verdad real.
Su rostro transformó su habitual expresión de satisfacción a la furia convulsa.
Tono ansioso.
(Un chelín por las velas)
G. K. CHESTERTON
Reglada cortesía y elegante decoro.
Paradoja, suceso no estrictamente verosímil, estilo. Agudo, desatino.
Política práctica.
Idealista y realista, tienen en común el amor por la acción.
Objeciones prácticas.
Remoción de una máscara de hierro.
Hecho irrefutable.
Inhumano escarabajo.
Alas e inmaculada armadura áurea del querubín.
Misterioso menester de justificarse.
Hablar en largas parrafadas, gusto literario de ribetes clasicistas, estilo de Gibbon, Butler, Burke.
Vertiente del problema. Resolución.
Hechos lentamente esclarecidos.
Particulares circunstancias.
Laberinto de las constituciones.
Utilitarismos del menester.
Indispensables cosas prácticas.
Motivo mortal y desesperado.
Ley de perjurios. Alterar los términos de una declaración
Sosegantes escritores del siglo XVIII. Estilo dieciochesco, equilibrios y antítesis.
Declaraciones iguales, comunican parejo contenido, formulan idéntico propósito, enuncian motivaciones de actos.
Pura imaginación. No demostrar lo dicho. Intuición.
Recursos de estilo.
Desconcertante laconismo de un jeroglífico.
Paradoja. La verdad puesta cabeza a bajo, para llamar la atención.
Literatos, mendicantes y saltimbanquis.
Silencio ante la manifestación del ingenio.
Conversación sagrada, porque es muy leve.
Formular una teoría.
Cuestión catalana.
Lo sagrado de la conversación realmente superflua.
De Quincey. Interés por un crimen, en el que habría podido reflexionar muy poco.
Comentario que requiere desarrollo.
Fiebre detectivesca.
Todos los escoceses adoran discutir.
Relato errático y superfluo, mientras no se llega a la clave del asunto. Fastidiosos periódicos. Noticias políticas, relatar cosas sin relatar la cosa.
Cirugía política.
Refrán. <<¿Quién decidirá, si los médicos están en desacuerdo?>>
Sueños del humilde, débiles ilusiones del afligido.
Busilis de las frases.
Esférica perfección pura de lunática indolencia.
Aventura dentro de una existencia.
Centro neurálgico de la operación.
Estoica jovialidad.
Las figuras del fuego y de las nubes son bastante incompletas, como para exigir que las complete nuestra imaginación.
Carácter fantasmagórico de las instalaciones.
Mera perplejidad práctica de un enigma.
He was very much of a dark horse. Asemejaba demasiado un caballo imprevisible. Expresión afamada, no era un ser humano honesto.
Completar la caracterización.
Cupulina frente.
Inalterable estilo o imagen.
Sañuda claridad.
Ruedas del progreso.
Disposición de profunda meditación.
Renovadas complicaciones del enigma.
Vieja regla. Un contrato leonino no es un contrato libre.
Contrato entre un ser humano hambriento y un ser humano dueño de la comida.
Útil ley. Los hombres pueden disputar por ideas que no sean realmente suyas; por obligación del deber profesional, como un abogado, para exagerar algo desatendido y que precisa ser subrayado, por hipocresía o lucro. Pero las ideas esenciales que asume seguirán siendo sus personales e intransferibles comienzos rectores.
La más arcaica de las argumentaciones, más vieja que el Derecho Romano, la idea del contrato leonino es vieja como el león y más que León XIII (1878-1903). Promulgó encíclicas sobre el socialismo, Rerum Novarum (1891).
Mentiras calculadas y prudentes.
Composición, parábola o alegoría, asaz desmesurada, manifiestamente falsa. Y cuando algo es manifiestamente falso, manifiestamente no es una mentira.
Perspicacia genuina.
Decimos que determinada situación real es como una novela; pero nunca termina como una novela.
Polaco alopécico y hablador.
Literatura de revista.
Desarrollo de registro.
Forma engañosa, en la que las situaciones reales nos recuerdan situaciones ficticias, aunque sin nunca evolucionar como en la ficción. Siempre damos por supuesto la ficción.
Peroró en estilo racional, pero enrevesado.
Opresión física y psíquica.
Examen de la encuesta judicial, que salió al paso de la tragedia.
Manifiestamente un caso de suicidio.
Compatible camaraderie.
Pérfido seductor y rijoso canalla.
Indistinto fragor del trueno lejano.
Sucia vanidad.
Acusación de virtud.
Partido independiente de cualquier culto a la personalidad, incluso la más distinguida.
Trama central.
Understatement. Desdramatización; griego, euphemism, eufemismo.
Historia veleidosa.
Lujo de detalles.
Astuto bribón irlandés.
Asumir la acusación.
Proceso legal poco convencional.
Noche de vegetación.
Struwwelpeter, Pedro el desgreñado, personaje de Heinrich Hoffmann (1809-1894).
Ceñirse estrictamente a los hechos.
Duro día de científica actividad.
Engañosa sombra fidedigna.
Estilo perfeccionado a fuerza de cuestionarios.
Clausurar el proceso legal.
Posición falsa.
Convulsiones políticas en Alemania.
Improvisar fantasiosos relatos orales.
Historia de espionaje. Rama más tediosa del género policíaco.
Teoría de peso.
Inglaterra. Atracciones de feria en los paseos marítimos.
(Las paradojas de Mr. Pond)
Leys
G. K. Chesterton, "Herejes", 1905.
Haldane
Distributismo. Filosofía social propuesta en Inglaterra por Hilaire Belloc y G. K. Chesterton. El elemento central era una concepción de las personas como agentes afectivos orientados por valores, cuya felicidad sólo podía ser delimitada propiamente. Esta antropología personalista condujo a un énfasis en la libertad social y la propiedad personal.
Tomalin
Chesterton elogia "El misterio de Edwin Drood", lo aprecia como la creación de un mago agonizante haciendo <<su ultima aparición, asombrosa y espléndida>>. Gissing y Shaw lo rechazaban por trivial y de poca importancia.
H. P LOVECRAFT
Los leves residuos y huellas, que Widmänstätten creyó encontrar en el hierro meteórico o siderolítico.
La expresión de alguna oscura manifestación de origen muscular.
El ocultismo y las ciencias proscritas y misteriosas.
Folklore extraño.
Fabulosas maravillas irreales e intangibles de las novelas y los lienzos.
Aura de desolación.
Había empezado su largamente planeada novela.
El enmarañado y nebuloso mundo de los sueños.
La noche de San Walburgo, víspera del primero de mayo.
Una secta nefanda, prohibida.
Furiosos y tenebrosos rumores.
Clark Ashton Smith, el siniestro "Liber Ivonis".
El infame "Culte des Goules", del conde d´Erlette.
"Cultos innombrables", grimorio ficticio creado por Robert E. Howard.
"De Vermis Mysteriis", grimorio ficticio creado por Robert Bloch.
"Libro de Dzyan", de Blavatsky.
Los símbolos corrientes utilizados en la astronomía y la alquimia, la astrología y otras artes equívocas; los símbolos del sol y de la luna, de los planetas y los puntos cardinales y los signos zodiacales, cada símbolo correspondía a una letra alfabética.
Un calendario de celuloide.
Ahondar en el pozo de su singular erudición.
El valor de las noticias sensacionales.
Horror insidioso y nerviosa aprensión.
Los horrorosos relámpagos abisales.
Se expresaba de una manera lánguida y afectada, que sugería alguna presunción y que le alienaba la simpatía.
Alternativas de inconsciencia y delirio.
El furor animal y la orgía lujuriosa alcanzaban unas alturas demoníacas con los rugidos y los roncos clamores del éxtasis.
Las pesadillas y fantasías, que Arthur Machen evoca en su prosa y que Clark Ashton Smith nos hace ver en sus versos y su pintura.
Un ser humano sobrio y valioso.
Recombinar nebulosamente.
Su perplejidad fue pasando por todos los grados de la inquietud, hasta alcanzar un agudo temor del ánimo.
Un cuerpo teratológicamente fabuloso.
Un vago instinto defensivo les decía que sus vidas dependían de su silencio.
Una nota de intensa y demoníaca espera.
La imaginación posee la aptitud de sugerir una fuente de conjeturas en el mundo de los seres invisibles.
Una ola de una potencia inaudita y un hedor indescriptible.
El estrato final de las leyendas, que precedía directamente el ascenso de las supersticiones y el abandono del estrecho contacto con los lugares temidos.
Encerrado en una estrecha sofisticación mundana.
El fenómeno concreto, visible y tangible.
Un abismo de horror indecible.
Caer la controversia en el olvido
Absorbentes conjeturas de tipo zoológico.
El meollo del fenómeno en cuestión.
Saber las circunstancias en todos los detalles.
Un eco mórbido abriéndose paso a través de los abismos inimaginables de un infierno inaudito.
Mi postura se deslizaba de una actitud puramente científica a una más inquietante.
La actitud anterior.
La luna llena era lo que mantenía alejados a los monstruos.
Un escrito frenético.
Carta incoherente.
Asustada actitud.
Un fenómeno imponente de sabiduría
Una aventura intelectual.
Hongos cormofíticos.
Máquina de escribir Corona.
Los horizontes psicológicos.
Cataclismo emocional, mutación radical.
Transformaciones de perspectiva en la azarosa investigación.
Nuevas y vertiginosas perspectivas respecto de los acontecimientos cósmicos y sobrehumanos.
Sacudir las exasperantes y fastidiosas limitaciones del tiempo y el espacio, verse vinculado con el vasto más allá.
La expectación aventurera.
Sus modales desenfrenados me hicieron catalogarlo como un relativo profano.
Tensión peculiar en el ambiente.
Una impresión de molestia y de siniestro presagio.
Nos desprendimos de las cosas instantáneas, tangibles y selladas por el tiempo, para penetrar en el mundo fantástico de una irrealidad misteriosa.
Mundo prosaico.
Atmósfera de tensión y amenaza.
Inquieta actitud.
Buzón de hierro galvanizado.
Un asunto importante que ventilar.
Un error misericordioso.
Refrenar la emoción.
Rechazados de mi mente los negros presentimientos que estaban a punto de adueñarse de mí, recordé las instrucciones.
Expresión cansada, rígida e inmóvil.
Los abismos del tiempo y del espacio.
Manifestar con un susurro.
La entidad fundamental, las formas, fuerzas y simetrías trascendentales. Las Nubes Magallánicas, la nebulosa globular y la inmemorial alegoría de Tao.
Estaba cerrando la noche.
Un sueño fantásticamente vivo.
Las infernales criaturas de los espacios abisales.
Una típica emoción.
Mi subconsciente había percibido algo que mi autoconciencia no había reconocido.
Tensando todo mi ánimo al salir de mi atolondramiento, decidí actuar sin más dilación.
Brujería, magia, enigma.
(Necronomicon)
Sardou
Calendarios del Calabrés, fórmulas extraídas del "Necronomicón".
Reglada cortesía y elegante decoro.
Paradoja, suceso no estrictamente verosímil, estilo. Agudo, desatino.
Política práctica.
Idealista y realista, tienen en común el amor por la acción.
Objeciones prácticas.
Remoción de una máscara de hierro.
Hecho irrefutable.
Inhumano escarabajo.
Alas e inmaculada armadura áurea del querubín.
Misterioso menester de justificarse.
Hablar en largas parrafadas, gusto literario de ribetes clasicistas, estilo de Gibbon, Butler, Burke.
Vertiente del problema. Resolución.
Hechos lentamente esclarecidos.
Particulares circunstancias.
Laberinto de las constituciones.
Utilitarismos del menester.
Indispensables cosas prácticas.
Motivo mortal y desesperado.
Ley de perjurios. Alterar los términos de una declaración
Sosegantes escritores del siglo XVIII. Estilo dieciochesco, equilibrios y antítesis.
Declaraciones iguales, comunican parejo contenido, formulan idéntico propósito, enuncian motivaciones de actos.
Pura imaginación. No demostrar lo dicho. Intuición.
Recursos de estilo.
Desconcertante laconismo de un jeroglífico.
Paradoja. La verdad puesta cabeza a bajo, para llamar la atención.
Literatos, mendicantes y saltimbanquis.
Silencio ante la manifestación del ingenio.
Conversación sagrada, porque es muy leve.
Formular una teoría.
Cuestión catalana.
Lo sagrado de la conversación realmente superflua.
De Quincey. Interés por un crimen, en el que habría podido reflexionar muy poco.
Comentario que requiere desarrollo.
Fiebre detectivesca.
Todos los escoceses adoran discutir.
Relato errático y superfluo, mientras no se llega a la clave del asunto. Fastidiosos periódicos. Noticias políticas, relatar cosas sin relatar la cosa.
Cirugía política.
Refrán. <<¿Quién decidirá, si los médicos están en desacuerdo?>>
Sueños del humilde, débiles ilusiones del afligido.
Busilis de las frases.
Esférica perfección pura de lunática indolencia.
Aventura dentro de una existencia.
Centro neurálgico de la operación.
Estoica jovialidad.
Las figuras del fuego y de las nubes son bastante incompletas, como para exigir que las complete nuestra imaginación.
Carácter fantasmagórico de las instalaciones.
Mera perplejidad práctica de un enigma.
He was very much of a dark horse. Asemejaba demasiado un caballo imprevisible. Expresión afamada, no era un ser humano honesto.
Completar la caracterización.
Cupulina frente.
Inalterable estilo o imagen.
Sañuda claridad.
Ruedas del progreso.
Disposición de profunda meditación.
Renovadas complicaciones del enigma.
Vieja regla. Un contrato leonino no es un contrato libre.
Contrato entre un ser humano hambriento y un ser humano dueño de la comida.
Útil ley. Los hombres pueden disputar por ideas que no sean realmente suyas; por obligación del deber profesional, como un abogado, para exagerar algo desatendido y que precisa ser subrayado, por hipocresía o lucro. Pero las ideas esenciales que asume seguirán siendo sus personales e intransferibles comienzos rectores.
La más arcaica de las argumentaciones, más vieja que el Derecho Romano, la idea del contrato leonino es vieja como el león y más que León XIII (1878-1903). Promulgó encíclicas sobre el socialismo, Rerum Novarum (1891).
Mentiras calculadas y prudentes.
Composición, parábola o alegoría, asaz desmesurada, manifiestamente falsa. Y cuando algo es manifiestamente falso, manifiestamente no es una mentira.
Perspicacia genuina.
Decimos que determinada situación real es como una novela; pero nunca termina como una novela.
Polaco alopécico y hablador.
Literatura de revista.
Desarrollo de registro.
Forma engañosa, en la que las situaciones reales nos recuerdan situaciones ficticias, aunque sin nunca evolucionar como en la ficción. Siempre damos por supuesto la ficción.
Peroró en estilo racional, pero enrevesado.
Opresión física y psíquica.
Examen de la encuesta judicial, que salió al paso de la tragedia.
Manifiestamente un caso de suicidio.
Compatible camaraderie.
Pérfido seductor y rijoso canalla.
Indistinto fragor del trueno lejano.
Sucia vanidad.
Acusación de virtud.
Partido independiente de cualquier culto a la personalidad, incluso la más distinguida.
Trama central.
Understatement. Desdramatización; griego, euphemism, eufemismo.
Historia veleidosa.
Lujo de detalles.
Astuto bribón irlandés.
Asumir la acusación.
Proceso legal poco convencional.
Noche de vegetación.
Struwwelpeter, Pedro el desgreñado, personaje de Heinrich Hoffmann (1809-1894).
Ceñirse estrictamente a los hechos.
Duro día de científica actividad.
Engañosa sombra fidedigna.
Estilo perfeccionado a fuerza de cuestionarios.
Clausurar el proceso legal.
Posición falsa.
Convulsiones políticas en Alemania.
Improvisar fantasiosos relatos orales.
Historia de espionaje. Rama más tediosa del género policíaco.
Teoría de peso.
Inglaterra. Atracciones de feria en los paseos marítimos.
(Las paradojas de Mr. Pond)
Leys
G. K. Chesterton, "Herejes", 1905.
Haldane
Distributismo. Filosofía social propuesta en Inglaterra por Hilaire Belloc y G. K. Chesterton. El elemento central era una concepción de las personas como agentes afectivos orientados por valores, cuya felicidad sólo podía ser delimitada propiamente. Esta antropología personalista condujo a un énfasis en la libertad social y la propiedad personal.
Tomalin
Chesterton elogia "El misterio de Edwin Drood", lo aprecia como la creación de un mago agonizante haciendo <<su ultima aparición, asombrosa y espléndida>>. Gissing y Shaw lo rechazaban por trivial y de poca importancia.
H. P LOVECRAFT
Los leves residuos y huellas, que Widmänstätten creyó encontrar en el hierro meteórico o siderolítico.
La expresión de alguna oscura manifestación de origen muscular.
El ocultismo y las ciencias proscritas y misteriosas.
Folklore extraño.
Fabulosas maravillas irreales e intangibles de las novelas y los lienzos.
Aura de desolación.
Había empezado su largamente planeada novela.
El enmarañado y nebuloso mundo de los sueños.
La noche de San Walburgo, víspera del primero de mayo.
Una secta nefanda, prohibida.
Furiosos y tenebrosos rumores.
Clark Ashton Smith, el siniestro "Liber Ivonis".
El infame "Culte des Goules", del conde d´Erlette.
"Cultos innombrables", grimorio ficticio creado por Robert E. Howard.
"De Vermis Mysteriis", grimorio ficticio creado por Robert Bloch.
"Libro de Dzyan", de Blavatsky.
Los símbolos corrientes utilizados en la astronomía y la alquimia, la astrología y otras artes equívocas; los símbolos del sol y de la luna, de los planetas y los puntos cardinales y los signos zodiacales, cada símbolo correspondía a una letra alfabética.
Un calendario de celuloide.
Ahondar en el pozo de su singular erudición.
El valor de las noticias sensacionales.
Horror insidioso y nerviosa aprensión.
Los horrorosos relámpagos abisales.
Se expresaba de una manera lánguida y afectada, que sugería alguna presunción y que le alienaba la simpatía.
Alternativas de inconsciencia y delirio.
El furor animal y la orgía lujuriosa alcanzaban unas alturas demoníacas con los rugidos y los roncos clamores del éxtasis.
Las pesadillas y fantasías, que Arthur Machen evoca en su prosa y que Clark Ashton Smith nos hace ver en sus versos y su pintura.
Un ser humano sobrio y valioso.
Recombinar nebulosamente.
Su perplejidad fue pasando por todos los grados de la inquietud, hasta alcanzar un agudo temor del ánimo.
Un cuerpo teratológicamente fabuloso.
Un vago instinto defensivo les decía que sus vidas dependían de su silencio.
Una nota de intensa y demoníaca espera.
La imaginación posee la aptitud de sugerir una fuente de conjeturas en el mundo de los seres invisibles.
Una ola de una potencia inaudita y un hedor indescriptible.
El estrato final de las leyendas, que precedía directamente el ascenso de las supersticiones y el abandono del estrecho contacto con los lugares temidos.
Encerrado en una estrecha sofisticación mundana.
El fenómeno concreto, visible y tangible.
Un abismo de horror indecible.
Caer la controversia en el olvido
Absorbentes conjeturas de tipo zoológico.
El meollo del fenómeno en cuestión.
Saber las circunstancias en todos los detalles.
Un eco mórbido abriéndose paso a través de los abismos inimaginables de un infierno inaudito.
Mi postura se deslizaba de una actitud puramente científica a una más inquietante.
La actitud anterior.
La luna llena era lo que mantenía alejados a los monstruos.
Un escrito frenético.
Carta incoherente.
Asustada actitud.
Un fenómeno imponente de sabiduría
Una aventura intelectual.
Hongos cormofíticos.
Máquina de escribir Corona.
Los horizontes psicológicos.
Cataclismo emocional, mutación radical.
Transformaciones de perspectiva en la azarosa investigación.
Nuevas y vertiginosas perspectivas respecto de los acontecimientos cósmicos y sobrehumanos.
Sacudir las exasperantes y fastidiosas limitaciones del tiempo y el espacio, verse vinculado con el vasto más allá.
La expectación aventurera.
Sus modales desenfrenados me hicieron catalogarlo como un relativo profano.
Tensión peculiar en el ambiente.
Una impresión de molestia y de siniestro presagio.
Nos desprendimos de las cosas instantáneas, tangibles y selladas por el tiempo, para penetrar en el mundo fantástico de una irrealidad misteriosa.
Mundo prosaico.
Atmósfera de tensión y amenaza.
Inquieta actitud.
Buzón de hierro galvanizado.
Un asunto importante que ventilar.
Un error misericordioso.
Refrenar la emoción.
Rechazados de mi mente los negros presentimientos que estaban a punto de adueñarse de mí, recordé las instrucciones.
Expresión cansada, rígida e inmóvil.
Los abismos del tiempo y del espacio.
Manifestar con un susurro.
La entidad fundamental, las formas, fuerzas y simetrías trascendentales. Las Nubes Magallánicas, la nebulosa globular y la inmemorial alegoría de Tao.
Estaba cerrando la noche.
Un sueño fantásticamente vivo.
Las infernales criaturas de los espacios abisales.
Una típica emoción.
Mi subconsciente había percibido algo que mi autoconciencia no había reconocido.
Tensando todo mi ánimo al salir de mi atolondramiento, decidí actuar sin más dilación.
Brujería, magia, enigma.
(Necronomicon)
Sardou
Calendarios del Calabrés, fórmulas extraídas del "Necronomicón".
AGATHA CHRISTIE
Rasgo peculiar del carácter.
"El prisionero de Zenda" fue el preámbulo a la novela romántica.
Acercamiento a los demás, desplegar tacto.
Leucemia. Alteración que causa una transformación de color en la sangre. Se presenta en las criaturas de poca edad.
Círculo de Marlborough House. Especie de alta sociedad, vida pura, austera, aunque con la guía de la nobleza a la vista.
Faceta comercial de la oficina de correos.
Encuesta judicial.
Pasteles de Estrasburgo.
Helechos cabellos de Venus.
Lechugas Tom Thumb. Pequeña, de hojas tiernas, jugosas, sabrosas.
Expresión de culpabilidad.
Realizar una investigación desde el punto adecuado. Obtener lo auténtico, verdadero.
Personas catalogadas auténticos pilares de la rectitud.
Trastornos políticos. Intrigas.
Estragos del tiempo.
Complicaciones de carácter alcohólico.
Sector del espionaje.
Preparado mentalmente para enfrentarse.
Cuando se tienen algunos años vale mucho tener los pies descansados.
Mi futuro más inminente es un féretro, en su momento.
Una vez superada una edad, uno puede vivir indefinidamente.
Al cabo de la calle en todo.
Dar al jardín una disposición atractiva.
Dosis de liquidación.
Los soberanos eran llevados en portamonedas.
Hechos desnudos, escuetos.
Violencia, timo, materialismo.
Cuando algo no marcha hay que saber localizarlo como fundamental premisa.
Reflexionamos en la existencia de algo a causa de las pruebas que hemos tenido que superar.
Guerra de gérmenes.
Cuando las ideas caen en manos de alguien que posee materiales y el cerebro adecuado.
Prever algún secreto perfeccionamiento conceptuado no importante, pero que en realidad ha de serlo. El receptor del secreto puede haber realizado una adaptación con la aptitud de conducir a consecuencias catastróficas.
Hay cosas que pueden alterar un carácter, transformar a un amigo en enemigo, habitualmente por una razón constante. Por dinero y por lo que este proporciona. Por el poder que puede derivarse de él.
Palanca del dinero. A dónde va, por qué va, cuándo se pone en marcha, cuándo vuelve y qué lo ha causado. De dónde sale el dinero, quién lo utiliza, para qué, por qué.
Métodos de destrucción.
Idea real, persuasiva.
Ánimo vengativo.
Gran atractivo histórico.
Experiencia positiva.
Idea, fondo sólido para actuar como punto de arranque.
Fijar una idea para ir a utilizarla.
Poner de manifiesto momentos de brillantez.
Dicen los médicos que el yodo es lo menos indicado para las heridas.
El historial delictivo de un criminal le sigue a cualquier parte. Lo cual es válido para el valiente también, quien vive arropado en sus acciones más sobresalientes.
Se vislumbra algo que no sabemos cómo se materializará.
Extraña calamidad.
Todos los perros muerden alguna vez al cartero.
Se reflexiona en las altas esferas, que aunque la reserva más rigurosa es precisa en algunas circunstancias, no debe prolongarse indefinidamente.
La comedia de la vida.
Truco clásico de la familiaridad incondicional.
Con gran carácter, con personalidad.
(La puerta del destino)
Suaves emociones de la lástima y la percepción.
Es preciso defender el honor de las herramientas de nuestra profesión.
Ambicioso, arriesgué la materia por la sombra. Especular.
Proceder con método.
Error de juicio.
Verdad, motivo, ocasión.
Visión cargada de acusación y reto.
El ser humano cuerdo no hace confidencias.
Débil como el agua.
Acusación de extorsión por dinero.
Colmo del asombro.
Doblada bajo el peso de la ansiedad.
Un error, un canard del diario.
(El asesinato de Rogelio Ackroyd)
Disposiciones del testamento.
Añadir sabor a las especulaciones sobre el caso.
Tomar cuerpo escandalosas suposiciones.
Hacer publico el contenido del testamento.
Gran sentido de las obligaciones familiares.
La clave del carácter. Un producto típico de su generación, tenía sus virtudes y sus vicios.
Enfrascarse con la rutina de las faenas domésticas.
Representantes de la dignidad, solidaridad y orgullo de sus familias.
Monopolizar la conversación.
Los viejos no saben lo que significa vivir.
Buena educación inglesa, un lujo.
Temas de la conversación, táctica.
Su ánimo tomó nuevo aliento.
Relatar teorías. Actividad y experimentos.
Divertidas y extrañas locuras.
Una pandilla de alegres y cínicos.
Aventuras amorosas.
Sesiones de velador. Séance.
Es muy estrecho de autoconciencia quien condena una cosa antes de haberla visto.
Amable, minucioso, sumiso, sin sentido común.
Los soporíferos eran para los debiluchos.
Preocupaciones no convenientes.
Cerebro claro y lúcido.
Memoria perfectamente clara.
Desfilar por la imaginación.
Extrañas fantasías tras un accidente.
Nervios excitados.
Suposiciones ridículas.
Sensible y agudo cerebro.
Entre los supervivientes de su época no solía usarse el optimismo sin fondo. Podían creer lo peor con la mayor tranquilidad.
Alarmantemente reflexiva.
El sentido inglés de la justicia. En este país todos son apreciados inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad.
Caminar de puntillas, irritante.
Haber tomado disposiciones precisas para enfrentarse a la situación.
Ajetreo cotidiano del inmenso Londres.
Aventurar una deducción.
Adoptar una actitud adecuada.
Un asunto estrictamente privado.
Dialogar de la cuestión fundamental.
Atribuir demasiada significación a unos hechos que pueden explicarse naturalmente.
Punto de gran importancia.
Instinto opuesto a razonamiento.
Vieux jeu.
Seguir la la gente, a las capas inferiores, profesión de detective.
Aspecto linfático.
C´est dommage. Es una lástima.
Gabbler. Hablador.
La competencia es un acicate.
Una construcción, valor del terreno y derechos municipales.
Significativa circunstancia.
Cuando una pregunta directa puede frustrar la réplica, una presunción falsa aporta información instantánea bajo la forma de incoherencia.
Un hecho precisa ser aclarado, una explicación.
Las discusiones sobre la muerte y cosas por el estilo desatan la verborrea de los hombres más que cualquier otro tema.
Recobrar las facultades mentales.
Estar a oscuras respecto al asunto.
Simple explicación.
Pequeño dilema.
Un encargo de carácter privado.
Un almanaque de bolsillo.
Encargar una comisión.
Haber conseguido aclarar la explicación de su misterio.
Retirarse con dignidad.
Pasar la idea de un cerebro a otro.
Misterios explicados.
Mitos hechos pedazos.
Un incidente. Verdaderos colores.
Cada cosa satisfactoriamente explicada, según los hechos.
Curiosidad satisfecha, mejor que cuestión satisfactoria.
Razón de tipo doméstico.
Oír una teoría.
Matar impunemente, inventar una coartada, un procedimiento difícil y peligroso.
Tipo de criminal cauteloso y de sangre fría.
La más sencilla manera de quitar de delante a alguien que estorbe es aprovecharse de un <<accidente>>. Ocurren todos los días y uno puede ayudar a que sucedan.
Un criminal cuidadoso no abandona nada al azar.
Aguzado ingenio.
Ajar, entreabierta. A jar, un jarro.
Dirección de las reflexiones.
Circunstancias concretas sobre las que influyó la mala suerte.
Un hecho anotado cuidadosamente.
Dar vueltas al asunto con la imaginación.
Un ejercicio mental.
Reconstrucción de los hechos.
Recuerdos y detalles.
La palabra <<ascendiente>> semejó ejecutar el efecto de un capote rojo frente a un toro.
Los médicos se curan solos.
Vana acusación.
Nunca se sabe lo que hará un ser humano, siempre están dispuestos a cometer una tontería.
Un tipo exótico.
Verdadero olfato para el dinero.
Colocadas las acciones preferentes, partes de las ganancias reunidas.
Influencias impronunciables.
Enredo sospechoso.
Impugnar el testamento. Un asesor jurídico.
¿Qué representa la opinión de un abogado nueve ocasiones de cada diez? Nada entre dos platos.
Repetir con tolerancia.
Carácter humano. Preocupaciones y líos tras una muerte.
Imaginación despierta.
No puede decirse <<tarde>> después de las seis. Es un solecismo.
Ingresos brutos y netos.
Solteronas. Zanahorias crudas.
Plenos derechos sobre una herencia.
Rencor, desavenencias, fraude.
Sucesión de los hechos clara.
Enseñar la oreja. Desvelar el embuste.
Energía latente que encierra un látigo.
Testamento completamente legal, no impugnable.
La ley tiene mucha amplitud.
Reputación de cuidadoso.
Sabida la verdad es sencillo delimitar qué mentiras se han de decir.
Lujo, distinción, diversiones.
Enfado sugestivo.
Una pequeña e inocente superchería de tal tipo que se suprima la pretensión del testador.
Más agudo que un alfiler.
Un testamento otorgado desde el lecho de muerte sería admitido con reservas.
Hay muchos caminos tortuosos para escoger dentro de la Ley.
Una visita impremeditada, lo inevitable de las circunstancias.
Durham Hotel de Bloomsbury.
Celo profesional.
Dos líneas distintas para investigar.
Estilo de conversación espasmódico.
Un dilema muy difícil.
Expresiones de alarma, excitación, sorpresa, confusión.
Excelente sentido de los negocios.
Extranjeros falsos.
Rehacer el testamento, modificarlo, declararlo nulo.
A los viejos no les gusta reflexionar que pueden perecer.
Abogados, gente muy precavida, su consejo es que se eviten los pleitos y tienen razón, pero algunas ocasiones vale la pena correr el riesgo.
Una idea indecorosa.
Recurrir a la ley, algo caro.
Actuar por libre voluntad, opuesto a sometido a influencias impronunciables.
Haber otorgado otro testamento.
Un compuesto digestivo especial.
Indignación vehemente.
Haber puesto de manifiesto algunas circunstancias referidas con su muerte.
Mariposa mundana.
Corrompidos hasta la médula.
Términos del testamento.
Investigaciones, revolver el fango, varias atractivas acusaciones formuladas casualmente durante el curso de las conversaciones.
Reflexiones. Sopesar la cuestión del motivo. La ganancia.
Atractiva y sugestiva discrepancia.
Volver al curso de los hechos.
La salsa curry puede ocultar con sencillez el gusto de una droga.
Cerebro sumamente completo.
Proverbio. Permitir que repose el perro dormido.
La oveja negra desheredada.
punto de vista provechoso.
Que le diable cargue con el más tonto.
Opinión desde el punto de vista legal.
Extender un testamento.
Otorgar un testamento.
Un testamento listo para la firma.
Competencia para ocuparse de los asuntos.
Los beneficiarios del testamento.
Suficientes experiencias legales.
Circunstancias sospechosas.
Contestar untuosamente.
Un caso de envenenamiento por arsénico diagnosticado como gastroenteritis aguda.
Falleció a causa de una atrofia amarilla del hígado.
Lema de <<Todos son sospechosos>>.
La psicología es importante. Las características del crimen, que implican un temperamento del criminal, son una clave esencial para resolver todo crimen.
Como si el carnero quisiera vestirse de cordero.
C´est épatant. Poder ayudar.
Derrumbamiento nervioso.
Lunes de Pascua, día lleno de preocupaciones.
Sospechosa apariencia de determinación.
Reflexionar antes de contestar.
Investigar una pieza anatómica.
Muerte a causa de una enfermedad real, pero producida artificialmente.
Un médico es altamente científico y precisa una experiencia especializada.
Un cerebro entrenado por las complejidades científicas.
Infantil accidente simulado.
Un hecho verosímil y probado.
Al lado de la verdad.
Pruebas reales.
Discutir un árido negocio.
Hemos desempeñado nuestro papel. El asunto está en manos de los dioses.
Detective, utilidad.
Prueba final.
El mañana sigue al hoy con monótona regularidad.
Un chaparrón de crítica destructiva.
Una careta de buena educación sobre sus rostros.
Extender el certificado de defunción.
Tender la ropa sucia a la vista de la gente. Adagio.
Aliento fosforescente. Envenenamiento por fósforo. Dosis medicinal de 1-100 a 1-30 de gramo. Afecta al hígado. Olor a ajo del aliento.
Para matar se precisa el tipo de mentalidad que pueda obsesionarse con una idea.
Dinero maravilloso y omnipotente.
Materiales limitados.
(El Testigo Mudo)
Disposiciones del testamento.
Añadir sabor a las especulaciones sobre el caso.
Tomar cuerpo escandalosas suposiciones.
Hacer publico el contenido del testamento.
Gran sentido de las obligaciones familiares.
La clave del carácter. Un producto típico de su generación, tenía sus virtudes y sus vicios.
Enfrascarse con la rutina de las faenas domésticas.
Representantes de la dignidad, solidaridad y orgullo de sus familias.
Monopolizar la conversación.
Los viejos no saben lo que significa vivir.
Buena educación inglesa, un lujo.
Temas de la conversación, táctica.
Su ánimo tomó nuevo aliento.
Relatar teorías. Actividad y experimentos.
Divertidas y extrañas locuras.
Una pandilla de alegres y cínicos.
Aventuras amorosas.
Sesiones de velador. Séance.
Es muy estrecho de autoconciencia quien condena una cosa antes de haberla visto.
Amable, minucioso, sumiso, sin sentido común.
Los soporíferos eran para los debiluchos.
Preocupaciones no convenientes.
Cerebro claro y lúcido.
Memoria perfectamente clara.
Desfilar por la imaginación.
Extrañas fantasías tras un accidente.
Nervios excitados.
Suposiciones ridículas.
Sensible y agudo cerebro.
Entre los supervivientes de su época no solía usarse el optimismo sin fondo. Podían creer lo peor con la mayor tranquilidad.
Alarmantemente reflexiva.
El sentido inglés de la justicia. En este país todos son apreciados inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad.
Caminar de puntillas, irritante.
Haber tomado disposiciones precisas para enfrentarse a la situación.
Ajetreo cotidiano del inmenso Londres.
Aventurar una deducción.
Adoptar una actitud adecuada.
Un asunto estrictamente privado.
Dialogar de la cuestión fundamental.
Atribuir demasiada significación a unos hechos que pueden explicarse naturalmente.
Punto de gran importancia.
Instinto opuesto a razonamiento.
Vieux jeu.
Seguir la la gente, a las capas inferiores, profesión de detective.
Aspecto linfático.
C´est dommage. Es una lástima.
Gabbler. Hablador.
La competencia es un acicate.
Una construcción, valor del terreno y derechos municipales.
Significativa circunstancia.
Cuando una pregunta directa puede frustrar la réplica, una presunción falsa aporta información instantánea bajo la forma de incoherencia.
Un hecho precisa ser aclarado, una explicación.
Las discusiones sobre la muerte y cosas por el estilo desatan la verborrea de los hombres más que cualquier otro tema.
Recobrar las facultades mentales.
Estar a oscuras respecto al asunto.
Simple explicación.
Pequeño dilema.
Un encargo de carácter privado.
Un almanaque de bolsillo.
Encargar una comisión.
Haber conseguido aclarar la explicación de su misterio.
Retirarse con dignidad.
Pasar la idea de un cerebro a otro.
Misterios explicados.
Mitos hechos pedazos.
Un incidente. Verdaderos colores.
Cada cosa satisfactoriamente explicada, según los hechos.
Curiosidad satisfecha, mejor que cuestión satisfactoria.
Razón de tipo doméstico.
Oír una teoría.
Matar impunemente, inventar una coartada, un procedimiento difícil y peligroso.
Tipo de criminal cauteloso y de sangre fría.
La más sencilla manera de quitar de delante a alguien que estorbe es aprovecharse de un <<accidente>>. Ocurren todos los días y uno puede ayudar a que sucedan.
Un criminal cuidadoso no abandona nada al azar.
Aguzado ingenio.
Ajar, entreabierta. A jar, un jarro.
Dirección de las reflexiones.
Circunstancias concretas sobre las que influyó la mala suerte.
Un hecho anotado cuidadosamente.
Dar vueltas al asunto con la imaginación.
Un ejercicio mental.
Reconstrucción de los hechos.
Recuerdos y detalles.
La palabra <<ascendiente>> semejó ejecutar el efecto de un capote rojo frente a un toro.
Los médicos se curan solos.
Vana acusación.
Nunca se sabe lo que hará un ser humano, siempre están dispuestos a cometer una tontería.
Un tipo exótico.
Verdadero olfato para el dinero.
Colocadas las acciones preferentes, partes de las ganancias reunidas.
Influencias impronunciables.
Enredo sospechoso.
Impugnar el testamento. Un asesor jurídico.
¿Qué representa la opinión de un abogado nueve ocasiones de cada diez? Nada entre dos platos.
Repetir con tolerancia.
Carácter humano. Preocupaciones y líos tras una muerte.
Imaginación despierta.
No puede decirse <<tarde>> después de las seis. Es un solecismo.
Ingresos brutos y netos.
Solteronas. Zanahorias crudas.
Plenos derechos sobre una herencia.
Rencor, desavenencias, fraude.
Sucesión de los hechos clara.
Enseñar la oreja. Desvelar el embuste.
Energía latente que encierra un látigo.
Testamento completamente legal, no impugnable.
La ley tiene mucha amplitud.
Reputación de cuidadoso.
Sabida la verdad es sencillo delimitar qué mentiras se han de decir.
Lujo, distinción, diversiones.
Enfado sugestivo.
Una pequeña e inocente superchería de tal tipo que se suprima la pretensión del testador.
Más agudo que un alfiler.
Un testamento otorgado desde el lecho de muerte sería admitido con reservas.
Hay muchos caminos tortuosos para escoger dentro de la Ley.
Una visita impremeditada, lo inevitable de las circunstancias.
Durham Hotel de Bloomsbury.
Celo profesional.
Dos líneas distintas para investigar.
Estilo de conversación espasmódico.
Un dilema muy difícil.
Expresiones de alarma, excitación, sorpresa, confusión.
Excelente sentido de los negocios.
Extranjeros falsos.
Rehacer el testamento, modificarlo, declararlo nulo.
A los viejos no les gusta reflexionar que pueden perecer.
Abogados, gente muy precavida, su consejo es que se eviten los pleitos y tienen razón, pero algunas ocasiones vale la pena correr el riesgo.
Una idea indecorosa.
Recurrir a la ley, algo caro.
Actuar por libre voluntad, opuesto a sometido a influencias impronunciables.
Haber otorgado otro testamento.
Un compuesto digestivo especial.
Indignación vehemente.
Haber puesto de manifiesto algunas circunstancias referidas con su muerte.
Mariposa mundana.
Corrompidos hasta la médula.
Términos del testamento.
Investigaciones, revolver el fango, varias atractivas acusaciones formuladas casualmente durante el curso de las conversaciones.
Reflexiones. Sopesar la cuestión del motivo. La ganancia.
Atractiva y sugestiva discrepancia.
Volver al curso de los hechos.
La salsa curry puede ocultar con sencillez el gusto de una droga.
Cerebro sumamente completo.
Proverbio. Permitir que repose el perro dormido.
La oveja negra desheredada.
punto de vista provechoso.
Que le diable cargue con el más tonto.
Opinión desde el punto de vista legal.
Extender un testamento.
Otorgar un testamento.
Un testamento listo para la firma.
Competencia para ocuparse de los asuntos.
Los beneficiarios del testamento.
Suficientes experiencias legales.
Circunstancias sospechosas.
Contestar untuosamente.
Un caso de envenenamiento por arsénico diagnosticado como gastroenteritis aguda.
Falleció a causa de una atrofia amarilla del hígado.
Lema de <<Todos son sospechosos>>.
La psicología es importante. Las características del crimen, que implican un temperamento del criminal, son una clave esencial para resolver todo crimen.
Como si el carnero quisiera vestirse de cordero.
C´est épatant. Poder ayudar.
Derrumbamiento nervioso.
Lunes de Pascua, día lleno de preocupaciones.
Sospechosa apariencia de determinación.
Reflexionar antes de contestar.
Investigar una pieza anatómica.
Muerte a causa de una enfermedad real, pero producida artificialmente.
Un médico es altamente científico y precisa una experiencia especializada.
Un cerebro entrenado por las complejidades científicas.
Infantil accidente simulado.
Un hecho verosímil y probado.
Al lado de la verdad.
Pruebas reales.
Discutir un árido negocio.
Hemos desempeñado nuestro papel. El asunto está en manos de los dioses.
Detective, utilidad.
Prueba final.
El mañana sigue al hoy con monótona regularidad.
Un chaparrón de crítica destructiva.
Una careta de buena educación sobre sus rostros.
Extender el certificado de defunción.
Tender la ropa sucia a la vista de la gente. Adagio.
Aliento fosforescente. Envenenamiento por fósforo. Dosis medicinal de 1-100 a 1-30 de gramo. Afecta al hígado. Olor a ajo del aliento.
Para matar se precisa el tipo de mentalidad que pueda obsesionarse con una idea.
Dinero maravilloso y omnipotente.
Materiales limitados.
(El Testigo Mudo)
PAUL ERNST
Exploración científica.
Velo del misterio.
Si el invento obedece.
Aplastados como obleas.
Las palabras se han hecho para designar los objetos, las ideas, las sensaciones corrientes y familiares, los acontecimientos y los objetos.
Idioma sonoro y musical.
La ciudad de Zyobor, una comunidad admirablemente organizada. Artesanos, intelectuales y artistas, la costumbre y la organización, la inteligencia humana, se entendían por telepatía mental, la facultad que utilizaban para comunicarse a distancia.
Asuntos abstractos.
Cuabos. Raza de monstruos, seres horribles con cabezas ovaladas, pero más inteligentes que los peces criados.
Distancia calculada por rixas. Cuatro rixas, dieciséis días.
Monstruos superinteligentes, pulpos humanos.
Extraordinaria facultad de disponer de la telepatía mental para ver y enterarse de lo que ocurría a distancia. Precioso don y terrible martirio, llevaban dentro de su cerebro una exacta reproducción.
Amenaza tétrica.
Miedo retrospectivo.
Cuabos, feroces e inteligentes monstruos de sangre fría.
Metódicamente. Laboratorio de disección.
General alegría que había producido el triunfo.
Infantilmente optimistas.
A golpes de hacha y mandarria.
Casco vítreo.
Acudir a la imaginación un recuerdo irónico.
Aguzar la inteligencia, buscar un material de defensa.
Una batalla, una serie no interrumpida de duelos.
Mortíferos mecheros.
Puestos de la corte cyoborita, consejero supremo del reino.
Ciudad de apacible, tranquila y dulce vida.
La vida se desliza mansamente.
El miedo desapareció; la alegría volvió.
Satisfechos con la suerte.
(En las entrañas de la Tierra)
S. S. VAN DINE
Reservado, cínico y cáustico.
La pesadez del proceso legal.
Atraer los detalles inconscientemente.
Una antítesis complementaria de la personalidad.
Una amistad inseparable.
El noviciado jurídico.
Suficientemente rico para pagar un factotum personalmente legal.
Un proceso analítico e interpretativo empleado en las investigaciones criminales.
Este madrugón plebeyo me fatiga.
La diferencia de valor de una propiedad y la cantidad con la que está hipotecada.
Hay un largo paso del souci poco más que decorativo de Hokusai al arte de un Ririomin profundamente meditado y consciente.
Las copias modernas de arte chino de lo que se llama estilo bunjinga de significado profundo.
Un ánfora de Amasis con figuras negras.
Un vaso precorintio de estilo egeo; platos de Kombatcha y Rhodas.
Una idea general de las inclinaciones e inspiraciones profundas.
La memoria retentiva.
Estando singularmente libre de sentimentalismos convencionales y supersticiones corrientes podía ver bajo la superficie de los actos humanos los motivos e impulsos en actividad.
Levantando sus manos con burlona actitud de asombro.
Los modelos convencionales de hermosura.
De temperamento vengativo.
La diversidad de temperamentos semejaba la piedra angular de su amistad.
El ánimo cauteloso, exótico y pícaro de la aventura intelectual.
Deseo un ambiente sereno. Le ruego que imite a la humilde violeta.
Encogiéndose resignadamente de hombros como si el hecho fuera presagio de algo malo.
El <<Libro de Negocios>> de O. Henry.
Una lupa de relojero.
Dar salida a su contenida nerviosidad.
Alegre desdén.
La insensible indiferencia demostrativa de un largo proceso de endurecimiento.
Las actitudes y modales.
Un corpulento y rubicundo irlandés.
Un bostezo contenido.
Un tono de áspera crueldad.
Indiferente condescendencia.
Una llave Yale.
Siguiendo con áspera ironía.
Un volumen bellamente encuadernado por Humphrey Milford.
Una actitud pasiva y resignada.
Su alabanza implicaba una antítesis inconsciente.
Con grave sarcasmo.
Era astuto y tenía la maña del mundano para leer la mente de los demás.
Poner en el punto de partida.
Hay cosas que deben ser hechas rutinariamente ex abundanti cautelae como dicen los abogados. Quantum est in rebus inane como dicen los profanos.
Los crímenes premeditados no se aclaran sencillamente.
Lo misterioso es el fondo de lo novelesco, una aureola impenetrable de misterio.
Una existencia serena y convencional.
El clamor del mundo de las finanzas.
Levantar pro formula un acta de las declaraciones.
La agitación como dicen los cronistas es intrigante.
La zarabanda periodística.
Una estatuilla. Simplificaciones griegas.
Respiró rápida y profundamente como para contener alguna señal involuntaria de emoción.
Pruebas para obtener un acta de acusación del jurado.
El eterno Ecce signum.
El hechizo inmenso de las novelas policíacas espeluznantes.
Los crímenes no pueden ser esclarecidos con deducciones de simples hechos ni evidencias circunstanciales.
Con aire de indulgente ironía.
Las pruebas demostrativas, las circunstancias persuasivas y las ilaciones irrevertibles.
El jurista prefiere evidencias tangibles a hipótesis metafísicas.
Lo que nuestros sabios Solones contemporáneos consideran como indicios convenientes.
La buena ventura y los polvos de la madre Celestina satisfacen la imaginación.
Los métodos de deducción artificiales y casuísticos.
Tono sarcástico.
Susurrar privatissime et gratis.
Las confesiones son las más engañosas y menos garantizadas de las pruebas. La estupida y poco científica ley las repudia los casos de crímenes si no son confirmadas con otras pruebas sustanciales.
El indicio material.
Las pistas verdaderas son las psicológicas... no las materiales.
El creador del opus criminal.
La prueba acusadora.
Un razonamiento cándido.
El Sancta Sanctorum del fiscal.
Usaba un pince-nez. Gafas que se sujetan sin patillas.
El aire triste de un tenedor de libros muy apto y trabajador.
Los detalles suplementarios.
Una expresión de resentimiento.
Los Neves menschen (gente) de Nietzsche.
La obstinación de nuestras grandes morales cotidianas.
La cabeza ligeramente ladeada con una actitud de indagación arrogante.
Se encontraba manifiestamente molesto con la actitud.
El fiscal evitaba instintivamente las malas artes y las amenazas de los acusadores publicos vulgares.
Una actitud agresiva.
Simulando una actitud trágica.
El papel de indiferencia juguetona.
La señal perceptible de la emoción.
Entrar en lo desconocido.
Forjando una fantástica teoría.
Las insustanciales impresiones.
Desechó la idea encogiéndose de hombros.
Cada cual actua segun su temperamento.
Lombroso inventó la idea del criminal nato. Los sabios D. Bois, Karl Pearson y Goring han descrito su teoría.
Un gesto negligente.
Un tono de burlona solicitud.
Rabia impotente.
Un gesto de cansancio.
Admitir para la comodidad de la demostración.
Estaba atraído aunque escéptico.
Una expresión retadora.
Una ansiedad contenida.
Los labios tenazmente cerrados.
Una actitud de expectativa.
Arquear las cejas como señal de protesta.
La humillante verdad.
Un tono juguetón.
La superflua chinoiserie de la compra de unos centavos.
Puso el índice en la mejilla con una actitud de reflexiva indecisión.
Accedió con una expresión de paciente resignación.
Un gesto elegante de resignación.
Las palabras negligentes de inflexión e impremeditadas de quien discute un asunto neutral.
Con la barbilla apoyada en la mano como una amenazadora imagen esculpida.
Las manifestaciones del temor son la consecuencia de las secreciones glandulares nada más. Lo que demuestra es que la fisioides de la persona no está desarrollada o que sus glándulas renales son anormales.
Una amenaza, un motivo, la hora, el lugar, la ocasión, la conducta y el culpable.
La actitud mental.
Una expresión inocua.
La maraña de incertidumbres.
El engranaje de la cadena de acusaciones.
Tenía una reserva y una dignidad que ganaban inmediatamente la simpatía.
Una visión de expectación e inquietud.
Damón suplicó a Pitias y se le contestó que no se podía hacer nada. Filósofos pitagóricos.
Los factores: el motivo, la hora, el lugar, la ocasión, la conducta, el arma.
Administraciones y supresiones.
Radiante de satisfacción.
Demostrar tranquilidad y dulzura.
Permaneció un rato digiriendo la historia.
Las locas operaciones financieras.
La primera indicación valiosa para seguir.
El locus standi.
Contar la historia de forma directa y comercial.
Ofrecer subarrendar el piso.
El sueño estaba tejiendo el ovillo de las preocupaciones.
Los aterciopelados poderes forenses.
Una entonación significativa.
Un énfasis exagerado, una ligera ansiedad.
Una actitud serena y firme.
Ni el desprecio ni el desdén incluso disimulados le impresionarían. Por tanto adoptó una actitud de diversión tolerablemente incrédula.
Su discurso estaba desprovisto de las reticencias ordinarias con extraños.
El tono semejó establecer un rapprochement más íntimo.
Una suave deliberación.
Retener la negativa con un coup d´oeil.
Un extraño amor lleno de sacrificio.
Las encantadoras deducciones metafísicas.
Suspirar desesperanzado.
La literatura imaginativa.
Extender el acta de acusación.
Reflexionar y discutir el punto largamente.
Se refugió bajo generalidades.
Si este asunto no está claro entonces yo soy una tortuga falsificada.
Los políticos influyentes.
Un aire de indiferencia irremediable.
El rostro expresaba agresividad.
Una actitud de tensión nerviosa.
La actitud de leer.
Manifiestamente asombrado.
La trivia de la existencia. Información y datos de poco valor.
No se originan misterios con los seres humanos pero sí problemas. Y resolverlo requiere sencillamente un conocimiento de los actos humanos.
Una actitud superior.
El elenchus socrático. Debate o diálogo argumentativo.
Un villano o un chevalier sans peur et sans reproche.
Decir con las propias palabras como dicen los abogados para luego echarle una zancadilla.
Manifestar un completo asombro.
Recibir el conocimiento apócrifo.
Señales de ansiedad prolongada.
El progreso de las pesquisas.
Resignarse a una prueba terrible e inevitable.
El preludio o prótasis.
Un tono inseguro.
Una expresión amarga.
Extender el sus per coll (que lo ahorquen).
Las personae gratae íntimas.
Se veía derrotado para indignarse.
Bosquejar una teoría.
Un peligro inminente.
El tipo germánico resuelto, terco y astuto.
El documento, el précis.
Un documento legal fantástico.
Las pruebas circunstanciales y materiales son idiotas.
Mirar con aire feroz y glacial.
El inventor de la perca rellena.
Encogerse imperceptiblemente de hombros.
Exasperado hasta el límite.
Una charada, un acertijo.
El coup de boutoir. Golpe de ariete.
Una coartada es peligrosa y está abierta a cualquier especie de sospecha. Y la ausencia de una coartada no significa nada.
Un informe vago.
Una suerte asombrosa.
Las circunstancias indicativas y los hechos probatorios.
Acusar de deshonesto.
Un motivo de suerte.
Una riqueza completa de evidencia, un embarras de richesse.
Satisfecho de la acusación llena de marañas y mañas jurídicas.
Los requisitos legales para declarar culpable: la hora, el lugar, la ocasión, los materiales, el motivo y al conducta.
Digresiones aparentemente disparatadas. Pero en su locura había un método.
El tono de quien sabe muchas cosas.
Pro bono publico.
Exponer los inconvenientes con vehemencia.
Construir acusaciones hipotéticas.
La incertidumbre desoladora de los filósofos.
Arrestar por scandalum magnatum y difamación.
El fratricidio ha sido mantenido como inconciliable, un lusus naturae.
Una inteligencia perspicaz no permite perder ninguna ocasión.
Trastornar los cálculos.
Meter en danza.
Un egregio curioso.
Las pistas materiales.
Establecer una coartada y combinar un modus operandi.
Saludó con su reserva y sencillez habituales.
El helixómetro es un aparato que posibilita examinar todo el interior de un cañón con un microscopio.
Hipotecando obligaciones a título subsidiario ha especulado fuertemente; ha perdido mucho.
Resumir la acusación.
La máscara de la amistad.
Su rabia pasaba los límites humanos.
Una persona bajo un ataque epiléptico contorsionado, repulsivo, insensato.
Los brillantes ojos de un loco.
Su actitud era la personificación del mal.
Sus palabras guturales y venenosas eran gruñidos.
Le tendió la mano. Su acción era a la vez una disculpa y un tributo.
Un instinto aventurero altamente desarrollado.
El carácter limpio y comercial del crimen.
El crimen en cuestión era la perfecta expresión psicológica del carácter y la mentalidad del autor.
La creencia sustantiva de la propia infalibilidad y la garantía es el reverso de lo que los freudianos llaman complejo de la joie de grandeur.
El psicólogo sabedor del ánimo humano puede proporcionar el factor que falte a una acción humana.
Una concepción o aspecto vago, indirecto, indefinido.
Fortalecer la acusación.
El método de análisis y deducción de las investigaciones criminales. El talento razonador.
Abordar los problemas humanos con la sensibilidad del clínico y el desdén irónico del médico.
Mirmidones. Agentes pesquisadores.
Las pruebas tangibles no tienen valor y son peligrosas.
Si hay razones para que un detective pueda hallar una pista las hay igualmente para que un criminal pueda haberla adivinado y por tanto ocultarla o disfrazarla si desea que no la encuentren. Actualmente el que sea bastante fuerte para perpetrar un crimen es ipso facto bastante listo para forjar las pistas que quiere. Las apariencias de un crimen pueden ser voluntariamente engañosas y se han podido preparar pistas para desorientar a los detectives.
Los crímenes tienen testigos. El hecho de no ver al criminal puesto a la faena no tiene importancia. Lleva la marca indeleble de su personalidad, de su genio.
El axioma opuesto a la superstición de la idea infantil de una Némesis implacable.
La suerte es un eufemismo consolador que excusa la incapacidad. Un ser humano ingenioso e inteligente no experimenta la mala suerte.
Si los crímenes quedan impunes es porque han sido preparados y ejecutados inteligentemente.
Existe un método infalible para decidir la culpabilidad y la responsabilidad. Se halla la verdad delimitando con cada crimen sus factores psicológicos y buscando seguidamente a qué ser humano pueden aplicarse.
Las indicaciones psicológicas del crimen.
Un relámpago de cólera.
El método psicológico de análisis criminal. La ciencia del carácter, la psicología del carácter humano.
Cada cual actúa según su temperamento. Todo acto humano por importante o fútil que sea es una expresión directa de una personalidad cuyo sello indeleble lleva.
Como no hay dos caras iguales tampoco hay dos caracteres totalmente semejantes.
El ánimo orientado al error se aparta del honroso camino.
El crimen se funda sobre los factores fundamentales de la creación artística. Concepciones, técnica, imaginación, ataque, método y organización. Además los crímenes son muy variados según sus manera, aspecto y carácter como las creaciones artísticas. Realmente un crimen perfectamente preparado manifiesta a un ser humano como una pintura; por eso es posible atribuirlo a alguien.
El psicólogo puede analizar un crimen y decir el autor o describir con precisión casi matemática el carácter del criminal. Este es el material eficaz de delimitar la culpabilidad humana. Los otros no son más que acertijos poco científicos y peligrosos. No se es culpable porque se tenga un motivo para serlo.
Cabe crear una obligación o disimular la que se ha creado con astucias y emboscadas.
Todos los crímenes se reducen a la psicología singular humana, fondo invariable de deducción.
La criminalidad es una debilidad del ánimo.
Seguimos viviendo porque no podemos borrar nada, no podemos olvidar nada.
Una acusación latente.
La declaración, el ultimo eslabón de la cadena de acusaciones.
Extender el acta de acusación.
Dos especies de melones. El melón de Castilla y de agua o sandía. El melón cantaloup se cultivó originariamente en Cantalupo, Italia.
Abordar los problemas humanos con la sensibilidad del clínico y el desdén irónico del médico.
Mirmidones. Agentes pesquisadores.
Las pruebas tangibles no tienen valor y son peligrosas.
Si hay razones para que un detective pueda hallar una pista las hay igualmente para que un criminal pueda haberla adivinado y por tanto ocultarla o disfrazarla si desea que no la encuentren. Actualmente el que sea bastante fuerte para perpetrar un crimen es ipso facto bastante listo para forjar las pistas que quiere. Las apariencias de un crimen pueden ser voluntariamente engañosas y se han podido preparar pistas para desorientar a los detectives.
Los crímenes tienen testigos. El hecho de no ver al criminal puesto a la faena no tiene importancia. Lleva la marca indeleble de su personalidad, de su genio.
El axioma opuesto a la superstición de la idea infantil de una Némesis implacable.
La suerte es un eufemismo consolador que excusa la incapacidad. Un ser humano ingenioso e inteligente no experimenta la mala suerte.
Si los crímenes quedan impunes es porque han sido preparados y ejecutados inteligentemente.
Existe un método infalible para decidir la culpabilidad y la responsabilidad. Se halla la verdad delimitando con cada crimen sus factores psicológicos y buscando seguidamente a qué ser humano pueden aplicarse.
Las indicaciones psicológicas del crimen.
Un relámpago de cólera.
El método psicológico de análisis criminal. La ciencia del carácter, la psicología del carácter humano.
Cada cual actúa según su temperamento. Todo acto humano por importante o fútil que sea es una expresión directa de una personalidad cuyo sello indeleble lleva.
Como no hay dos caras iguales tampoco hay dos caracteres totalmente semejantes.
El ánimo orientado al error se aparta del honroso camino.
El crimen se funda sobre los factores fundamentales de la creación artística. Concepciones, técnica, imaginación, ataque, método y organización. Además los crímenes son muy variados según sus manera, aspecto y carácter como las creaciones artísticas. Realmente un crimen perfectamente preparado manifiesta a un ser humano como una pintura; por eso es posible atribuirlo a alguien.
El psicólogo puede analizar un crimen y decir el autor o describir con precisión casi matemática el carácter del criminal. Este es el material eficaz de delimitar la culpabilidad humana. Los otros no son más que acertijos poco científicos y peligrosos. No se es culpable porque se tenga un motivo para serlo.
Cabe crear una obligación o disimular la que se ha creado con astucias y emboscadas.
Todos los crímenes se reducen a la psicología singular humana, fondo invariable de deducción.
La criminalidad es una debilidad del ánimo.
Seguimos viviendo porque no podemos borrar nada, no podemos olvidar nada.
Una acusación latente.
La declaración, el ultimo eslabón de la cadena de acusaciones.
Extender el acta de acusación.
Dos especies de melones. El melón de Castilla y de agua o sandía. El melón cantaloup se cultivó originariamente en Cantalupo, Italia.
(El caso del crimen de Benson)
Bishop puede traducirse indistintamente como alfil y obispo.
Un investigador aficionado.
El caso criminal más siniestro, extraño y aparentemente incomprensible y terrorífico.
La traducción uniforme de los grandes fragmentos de Menandro encontrados en los papiros egipcios a comienzos de siglo.
El ánimo de investigación en pugna constante con el esfuerzo triste y de menester para la creación escolástica.
Actuar como amicus curae.
El afán periodístico de titular cualquier cause celèbre.
Un simple jefe de sección.
Viajar por Europa encontrando tropeles de turistas en cada esquina es desesperante.
La insaciable imaginación.
Un fascinador enigma.
Un tono de excusa.
Un tipo netamente nórdico de cara larga y agudamente cincelada, ojos grisáceos, nariz aguileña y barbilla ovalada y recta.
Una apariencia de cínica crueldad mediterránea.
Un tono de gran excitación.
Viendo vagamente el espacio.
Hasta la verdad apoyada con la evidencia semejaba increíble y demasiado perversa para ser aceptada por una mente comun.
Bajo los efectos de una angustia tremenda. Tenía una expresión sombría y preocupada.
El profundo conocimiento de las anormales manifestaciones de la mente humana.
Actitudes enigmáticas.
Un tono casi feroz.
Sperling en alemán significa gorrión.
Enfrentarse la primera vez con algo inexplicable y terrorífico es una locura.
Adoptando una ligera actitud de humorismo pretendía ocultar su perplejidad.
Un gesto de repugnancia.
Las investigaciones de carácter legal.
Entender plenamente la situación real.
Admitir accidentes y coincidencias.
Lo que de una forma erudita los austriacos llaman situs criminis.
Extender amistosamente la mano para saludar.
El ateniense Menandro autor dramático rival de Filemon.
La confusa disposición de ánimo.
El Gabinete Antropométrico.
Suspirar maliciosamente.
Permitiendo correr la imaginación.
Un gesto de impaciencia.
Un murmullo de aprobación.
A pesar de su actitud de indolencia su imaginación pretendía coordinar los factores del escenario.
Demostrar premeditación.
La fisonomía del soñador y científico.
Su cara reflejaba una abstracción introspectiva.
Una marcada deferencia.
Esforzarse para contener la emoción.
Dar una impresión errónea y causar perjuicio.
Alguna idea o explicación.
Su pausado tono habitual.
Una impresión de la personalidad de agrado y respeto.
Guiñar un ojo humorísticamente.
Una explicación psicoanalista supperssion-censor.
La anormalidad de las facciones acromegálicas. Un tamaño del aumento de los huesos y tejidos.
Apretar los dientes con rabia.
Un muro psicológico.
Cuando la cronología de los sueños no concuerda es que los restantes puntos de contacto del engranaje han sido eliminados deliberadamente.
Leverrier calculó la masa y las efemérides de Neptuno con las desviaciones percibidas de la órbita de Urano.
Las abstracciones escolásticas.
Demostrando considerable animación.
George Airy criticó a Adams cuando presentó sus cálculos sobre Neptuno antes que Leverrier.
Un soñador decepcionado.
La tierra está cubierta de infinitos corpusculos de impuros carbohidratos a los que dispuestos en masa denominamos humanidad.
El valioso factor para la ecuación.
Descifrar el enigma cuando haya hecho más cálculos.
La hermética epístola.
La g o constante que gobierna las ecuaciones.
Un marcado disgusto.
Un tono de suplica y protección a un tiempo.
El Viener Pater. Parque de atracciones publico.
Su tono demostraba que le agradaba la idea.
Aire displicente.
Hablar con un tono ausente.
Un tono sombrío.
Un jaque mate Zugswang producido por Keres y Smirlow.
El ajedrez no es un juego puramente matemático ni suficientemente especulativo para atraer a una mente netamente científica.
Las magnitudes del espacio sideral.
Un tono de disculpa.
Las sugerencias no eran para desdeñarlas.
Una evidencia material.
Un golpe de pura suerte.
Segun Homero, Teucro fue el campeón de arco de los griegos.
Un aire de deferencia.
Un aire de triunfo.
Son dos cosas muy diferentes probar que existe una coartada y hacer que el sospechoso se traicione y la declare.
Aire de satisfacción.
Un tono suave y tranquilizador.
Lanzó un gruñido de satisfacción y su actitud belicosa desapareció.
Seguir con las pesquisas de rigor, indagaciones en la vecindad y demás requisitos.
Un exagerado suspiro.
Sus ojos parpadearon con suspicacia.
Las alas de la imaginación de los periodistas.
El preámbulo de la tempestad.
Las declaraciones y evidencias.
Se inclinó con expresión seria.
Los supuestos agentes exteriores.
El azar es muy caprichoso.
Una ayuda fortuita.
Para no levantar sospechas la investigación tuvo que realizarse con la mayor reserva.
Una fórmula matemática no podía ser desarrollada hasta contar con todos los factores utilizables para el teorema.
No poder contener la expresión ante la actitud.
Un elemento como un valioso point de départ.
Recibir un sofión de los diarios.
Una diabólica parodia.
Descargar el siniestro humor.
Marcada ironía.
Influir los argumentos.
Un gesto de satisfacción.
Estudiar con gesto adusto.
Emplear la fórmula del tensor Riemann-Christoffel para establecer la curvatura de Gauss del espacio esférico y homaloidal.
Debatirse en un mar de confusiones.
Un tono de abatimiento.
La ayuda rehusada.
Disimular admirablemente.
Afirmando con aire de perversa satisfacción.
Un tono ligeramente alterado.
Una mentalidad morbosamente sensible.
Una expresión de disgusto.
Un tono de viva atracción.
Exclamar con un matiz de petulancia no exento de preocupación.
Un viso de unidad de los crímenes.
Los elementos tiempo y proximidad.
La causa concreta y la causa aparente.
Un tono benévolo y despectivo.
Ninguno de los valores creados por el ser humano tiene importancia. Pero puesto que tenemos que vivir de los valores humanos es un deber apoyarlos.
Un gesto agresivo.
El desarrollo mental.
Un colapso nervioso.
Expresarse con arrogancia.
La Doliometría de Kepler constituyó el fundamento del cálculo infinitesimal.
La curvatura del espacio tiempo.
Un extravagante con un sentido de los valores totalmente trastocado.
Un tono trágicamente suplicante.
Se derrumbó materialmente.
Algunos lóbulos de su cerebro desarrollan una actividad inusitada.
Un viejo juego chino de jade tallado. Un elefante bunjinga decadente.
Contener un gesto de querer replicar airadamente.
Hasta un pobre bufón precisa su auditorio.
Una desdichada víctima de las circunstancias.
Abordar directamente la cuestión.
Un colapso debido a un temor real o imaginario.
Un tono perentorio.
Acusar de negligencia.
Un tono profesional.
Los grados de responsabilidad.
Un tono de amenaza.
Una actitud adusta e inflexible.
Un tono de altanera disculpa.
Un gesto ceñudo.
Un forzoso acto de advertencia.
Un tono zumbón.
No encajar con la teoría que había forjado.
Un tono agrio.
Aire condescendiente.
Un triunfo trascendental.
Las divagaciones conducen a buen puerto.
No permitirse amilanar con la actitud.
Reservar el derecho de investigar el caso de la formación considerada más conveniente.
Robinson abandonado a su suerte.
La expresión sardónica iba desapareciendo gradualmente y haciéndose preocupada.
Aire de resignación.
Un análisis clarividente.
Una partida de ajedrez brillante llena de astucias y sondeos psicológicos.
Establecer vigilancia.
Un escándalo publico ante la incapacidad del fiscal.
La ultima fase de la investigación cargada de siniestra y abrumadora tragedia, de crueldad y monstruosa sátira.
Al borde de la desesperación.
El secretario del fiscal.
Materia para poder actuar.
Una evidencia circunstancial.
Un ser anormal dado a los juegos infantiles.
Perpetrar los crímenes un momento de fugaz locura.
Argumentando con autoconciencia y todo lujo de pormenores la acusación.
La ley no puede rehusar una prueba porque semeje demasiado convincente.
Lo que se imponía era la acción instantánea.
Su rostro acusó resolución.
Una bonita perspectiva.
Una marcada ansiedad.
Se echó atrás con un gesto de abatimiento.
Suspiró con aire de cansancio.
El terror que trascendía de los acontecimientos.
Expresar las atribuladas emociones.
Un tono de inquietud.
Una técnica sencilla y eficaz.
Derivar la conversación a otros derroteros.
Torturar con una explosión de vanidad infame.
Un deliberado designio.
La suerte no nos ha favorecido.
Su actitud cínica se había desvanecido.
Valores y documentos comprometedores.
Una caligrafía nítida como un grabado de cobre.
Una disposición de ansiosa expectación.
Un tono sombrío.
La vía del raciocinio conduce a lo práctico.
Exhaló un suspiro de resignación.
Un tono molesto.
Una expresión de tristeza y desconcierto.
Los repetidos golpes trastornan los cerebros más vigorosos dando origen a un deseo de venganza del mundo entero.
Encontrar un fallo en la coartada viene a complicar una situación de suyo inexplicable.
Velar con vulgaridades las verdaderas reflexiones y temores.
Actos cometidos con macabro humorismo con una tremenda actitud cínica pero eso no quita que sean exactos y racionales.
Considerar el bagaje intelectual del matemático, sus cálculos, cómputos y especulaciones tienden a destacar la relativa insignificancia de nuestro planeta y de la vida humana. Pretende calcular el espacio infinito con términos de parsecs y años luz y calcular el electrón infinitamente pequeño que se ha precisado inventar la unidad Rutherford: la millonésima de un milimicrón. Segun los cálculos de Shapleigh el diámetro de la Vía Láctea es de trescientos mil años luz. El peso del sol es trescientas veinticuatro cantidades el de la tierra y el del universo un trillón respecto del sol. El matemático habita un reino que el tiempo no tiene más sentido que una ficción de nuestro intelecto y se transforma como una cuarta coordenada del espacio tridimensional en el que la distancia no tiene significado más que cuando se refiere con puntos adyacentes. Existen curvas sin tangentes. Pi ha abandonado ser una constante y la razón del diámetro y la circunferencia varía segun se calcule un círculo en reposo o un círculo en rotación. Silberstein mantiene la teoría de cinco o seis dimensiones en el espacio y hasta especula sobre la facultad de poder ver los hechos antes que ocurran. Las problemáticas consecuencias del Lumen de Flammarion (un ser imaginario que se mueve a una velocidad mayor que la luz y por tanto recorre el tiempo con un sentido inverso). Hay otro imaginario Homunculo más fantástico que el Lumen desde el punto de vista racional. Esta hipotética criatura es apta para atravesar todos los mundos a la vez con infinita velocidad y ver de una ojeada la totalidad de la historia humana.
El sentido de los valores terrenales.
Un final satisfactorio.
Una expresión de pesar.
Un hipersensible carece de valor psíquico.
Había una reserva con su forma de proceder.
Los suicidios simulados.
Llegar a un punto muerto en sentido literal como figurado.
Nerviosa reserva.
Los hechos materiales y la invisible autoconciencia humana.
Ceñudo, belicoso y sombrío.
Una visita inesperada.
Un tono indiferente.
La enfermiza aprensión de la opinión publica.
Una expresión de indescriptible horror.
Una actitud de desagrado.
Una expresión de desaliento.
Una vieja máquina de escribir marca Corona.
Contagiar la exaltación.
Contagiar la ansiedad.
Una prueba tangible.
Sacar la verdad con algun subterfugio.
Un gesto de abatimiento.
Sembrar la semilla de la sospecha.
La fuerza legal para arrestar.
Expresar con tranquila gravedad.
Suicidas notables: Bruto, Catón de Utica, Aníbal, Lucrecia, Cleopatra, Séneca. Nerón se suicidó antes de caer en manos de Oto y sus guardianes pretorianos. El famoso suicidio de Demóstenes y el de Empédocles al tirarse al cráter del Etna.
Para los donatistas, circumceliones y patricios el suicidio era considerado grato a los dioses.
Los tecnicismos legales.
Un tono de desaliento.
El ácido cianhídrico para desaparecer sin sufrimiento.
Apoyaron el suicidio Tácito, Marco Aurelio, Catón, Schopenhauer, Nietzsche.
Una expresión ofendida.
Congestionarse de indignación.
El golpe seco producido por una persona al desplomarse.
Un gesto de resignación.
(Los crímenes del obispo)
James M. Cain
Un negocio vale igual que su letrero.
Una variación de agua puede hacer daño.
Pura imaginación.
Acusar de traición.
Concebir y ejecutar un crimen perfecto.
Hacer la indagación cuando ha muerto alguien.
Identificación legal del cadáver.
Historia bien preparada.
Descuido criminal.
A disposición del gran jurado de la acusación.
Conversación franca y sincera.
Las compañías de seguros están dispuestas a gastar cinco cantidades más que la justicia, para ventilar un proceso legal, tienen detectives mejores, el asunto significa dinero.
Firmar la acusación.
Hasta no ser acusado oficialmente, no puede nombrar un abogado.
El fiscal le ha convertido en querellante, al conseguir que firmase la acusación.
Un tribunal sin jurado, no de los comunes.
Haber tomado declaración al secretario del investigador judicial, que identificó las minutas de la investigación y las puso en poder del magistrado.
Sello de notario.
No consiste en que dure una cosa, sino de lo que uno hace mientras dura.
Jugar sus cartas y el pozo le vendría solito a las manos.
El miedo es un factor que se da por descontado en un caso criminal.
Póliza de accidente personal.
Póliza que cubre las obligaciones publicas.
En los casos en los que se produce una testificación de culpabilidad, la corte quiere escuchar algunas declaraciones, para tener una idea más exacta del caso. Lo hace para determinar mejor la sentencia.
Apelación por homicidio.
Acusación de atentado criminal.
Seña disimulada.
Sentencia de homicidio por imprudencia.
La gran presión del agua en los pulmones lleva el oxígeno a la sangre y por unos segundos uno no reflexiona en respirar.
Aborto como consecuencia de un esfuerzo.
(El cartero siempre vuelve)
Pera Bartlett.
Enfant prodige.
Peso de la mentira.
Desarrollo de la acción.
El tiempo trae siempre algo.
Hablar a humo de paja.
Desarrollar una campaña política.
Caer gatos sobre monos.
Quemaduras graves.
Encontrar un motivo de acusación, mantenerlo.
Parodias humorísticas.
El arte de escribir consiste en tener algo que decir y en querer escribirlo.
(La Mariposa)
Pera Bartlett.
Enfant prodige.
Peso de la mentira.
Desarrollo de la acción.
El tiempo trae siempre algo.
Hablar a humo de paja.
Desarrollar una campaña política.
Caer gatos sobre monos.
Quemaduras graves.
Encontrar un motivo de acusación, mantenerlo.
Parodias humorísticas.
El arte de escribir consiste en tener algo que decir y en querer escribirlo.
(La Mariposa)
Raymond Chandler
Pasó una hora lenta y pesada; el tiempo se arrastraba.
La lluvia golpeaba y se escurría por el vidrio en espesas oleadas, como si fuera gelatina derretida.
Ver con ojos de zorro.
Mar adentro, algunos veleros blancos semejaban suspendidos en el cielo.
Fabricar una fabulosa teoría.
Stock trasladado.
Un escándalo sólo tiene sentido si hay una historia detrás.
Visitas casuales.
Ojos lejanos e indiferentes, al ver en torno de una larga llanura.
Razón de peso.
Largo túnel lleno de ecos.
Expresión de incredulidad.
Manos como dos mariposas enfermas.
Con aire ausente.
Teléfono de imitación roble.
Sueldo fijo y viáticos de un detective de la gran ciudad.
Volar trompadas en un casamiento de irlandeses.
Lágrimas de moribunda.
Amargas estrellas.
Gente bonita, que causa problemas.
Delicada exactitud de la suerte.
Plomiza máscara de muerte.
Las orquídeas precisan calor, como los viejos enfermos.
Ojos de basilisco, visión indiferente.
Interesante, pero no como para poner las manos en el fuego.
Un hilo de interés le unía a la vida.
Los truenos retumbaban por las colinas como una manada de elefantes saltando a la pídola.
Timing perfecto.
La lluvia me acariciaba con sus fríos dedos.
Mañana azul y dorada.
Conductas patológicas.
Dinero del Banco, más regular que un beneficio.
Dar vueltas más o menos razonables.
Rostro, expresión suave e interesada.
Silencios de muerte, que siguen a las explosiones.
Ruido de una mariposa.
Herida de contacto, de suicidio.
Test de parafina.
Frágil, de gran valor.
La naturaleza tenía que dar rienda suelta a sus instintos.
La ilusión nos mantiene vivos.
Noticiero del periódico del sindicato.
Momento propicio para vender propiedades.
Mugre de las ciudades.
Erguido como el acero.
Párpados de lagarto.
Habitual expresión de desdén de los japoneses.
(Criminal en la lluvia)
Hizo memoria durante un momento.
Respiración pesada.
No semejaba tener más nervios que una hormigonera.
Océano de dolor.
Odio ver esos vampiros de los diarios cuando salen con sus historias sensacionalistas.
Su tono era el de un ser humano de ciudad.
Amarillentos ojos de lince.
Tono reflexivo.
Hay casos de personas que se suicidan en tal forma que, luego alguien a quien odian es acusado del crimen.
El tiempo pasó con una lentitud de muerte.
El tiempo pasaba como siempre lo hace, pese a todo.
Una expresión preocupada.
Sus ojos reflejaban una profunda tensión.
Lo hizo con un timing maravilloso.
Gesto de desilusión.
Una gallina poniendo un huevo cuadrado.
Cuando se sufre un ataque, no queda más que la lentitud, la resignación y la espera del próximo ataque.
El instinto era más fuerte que la fatiga.
El otro lado del punto en cuestión.
Argumentos débiles.
El punto débil de un argumento.
Enfocar la acusación de manera que autorizaran su libertad provisional.
Existencia apolillada.
La vieja luna extenuada.
Educada indiferencia.
Argumentos persuasivos.
Calcular las razones.
Dignidad victoriana.
Momentos hipersensibles, actos independientes de la voluntad.
Ducha escocesa.
Condición emocional intensa.
Diablo cansado.
Gasto de la conversación.
Consejo legal.
Acusación por incumplimiento.
Desarrollar la argumentación.
Para acusar de complicidad, probar que hubo un propósito deliberado, caucionable.
Nadie puede ser acusado de ser testigo material, antes de que el juez lo declare.
La ley no es la justicia. Es un mecanismo muy imperfecto. La ley no ha pretendido ser nunca otra cosa que un mecanismo.
Iniciar un proceso legal criminal.
Una montaña de dificultades.
Acusación de complicidad después del hecho.
Acusación de homicidio sin premeditación.
Discusión legal.
Frank Merriwell, personaje de las novelas de Gilbert Patten.
Por más inteligente que uno sea, es menester tener un punto de partida; ser humano, dirección, antecedente, atmósfera, punto de referencia.
Aspecto inescrutable.
Acusar de hacer juego doble.
La mayoría de la gente atraviesa por la vida gastando la mitad de las energías que dispone, en pretender proteger una dignidad que nunca ha poseído.
Liquidar, mediante una escritura de venta condicionada.
Brutal calor del desierto; pegajoso y fétido de la ciudad.
Poder del dinero. En grandes cantidades tiende a tener vida propia y autoconciencia. El crecimiento de las poblaciones, el enorme coste de las guerras, la presión incesante de los impuestos fiscales, lo hacen más venal.
Ácido aguijón de la bruma.
Los suicidas se preparan en cualquier tipo de formas; con bebidas, cenas elaboradas, champaña, en ropa de noche, sin ropa; arriba de las paredes, en zanjas, cuartos de baño, encima o debajo del agua, ahorcados en graneros o con gas en los garajes.
Vieja estirpe privada.
Queratosis. Manchas marrones, aparecen después de los cincuenta.
Acusar o especular.
Valor publicitario.
Cerebros de los trusts.
El delito no es una enfermedad, sino un síntoma.
Acusar de mentir.
Calcular los aspectos y las consecuencias de una cosa.
(El largo adiós)
Alto grado de eficacia.
Sobre de papel Manila.
Honorarios por las prestaciones profesionales.
Adelanto para gastos.
Prevalecer la sentencia frente al veredicto del jurado.
Conversación sucia.
Rapidez, sangre fría y gancho.
Me sumergí en un mar de sombras e hice explosión en una cortina de llamas.
Sacrificar el beneficio en aras del estilo.
Personaje corpulento y elegante, de aspecto irlandés.
Reflexionar con semblante imparcial.
Porcentaje de gastos.
En ocasiones, el ser humano mata lo que más ama.
Paralizado por la desesperación, un reo que se dirige hacia la horca.
Dulce vapor de la marihuana.
Sueldos exorbitantes.
La actividad dura es un pobre sustituto del talento.
Secretaria confidencial.
Sombra desvelada. Uno que deliberadamente permite que atrapen y que se deshagan de él, para que otra sombra prosiga la tarea cuando el sujeto se crea sin peligro.
Pago total, gastos incluidos.
Experta organización.
Valor de mantener vivos los sueños.
Momentos sublimes.
La perfección nunca se logra en dos ocasiones.
Cultivar el ego, sensación de poder y triunfo.
El sentido común habla con retraso.
Razón concreta.
Señuelo de un abogado.
Un investigador con licencia no tiene inmunidad. Un abogado la tiene, siempre que sus intereses coincidan con los del cliente que le haya empleado.
Piadoso como un usurero.
Dinero, salud y tiempo.
Aspecto razonablemente atractivo.
Sufrir los efectos de la tensión.
¿Qué extraña divinidad hizo un mundo complicado, pudiendo hacerlo simple?
Explicación razonable.
El ser humano que deliberadamente da la vida por otro sigue una pauta de conducta.
Suma entregada en concepto de depósito.
Ojo redondo y colérico de un loro.
En una cala las olas no rompen, se deslizan suavemente.
No hay dos personas que se muevan igual.
No se pierde nada escuchando.
Verjas de hierro forjado, importadas de Italia.
Persona procesada.
Hay cosas que son un hecho, en un sentido estadístico, gracias a un documento, a una cinta magnetofónica. Y hay cosas que son un hecho porque deben serlo; de otra suerte nada tiene sentido.
Las horas de oscuridad son las horas de peligro.
Arresto por mutilación criminal.
Experiencia, tensión, intuición.
(Playback)
MARGUERITE YOURCENAR
La influencia grave y patética de Rilke.
La consecuencia más cruel de nuestras culpas es que contaminan hasta el recuerdo del tiempo que no las habíamos cometido.
Hay algo patético en los apuros económicos de las viejas familias, que semejan seguir viviendo sólo por fidelidad.
Parte del patrimonio verdaderamente inalienable.
Inoportuna ambición fuera de lugar.
Los fantasmas son invisibles porque los llevamos dentro.
Sólo traducimos nuestras emociones.
Es humillante reflexionar que las aspiraciones confusas, las emociones (sin contar los sufrimientos) tienen una explicación fisiológica.
Una imagen simplificada corre el riesgo de ser grosera.
El candor de la culpa.
Imágenes envueltas en una nube de deseo.
Circunstancias tímidas e infatigables.
No es más absurdo negar el pasado, que comprometer el porvenir.
Las extravagancias del instinto.
Sufrir de una manera oscura, como las cosas.
Promiscuidad de la pobreza.
Los contactos sórdidos que soportamos en las ciudades.
He huido de las ataduras de la costumbre, hechas de ternura ficticia, de engaño sensual y de hábito perezoso.
Prestigio novelesco.
Nuestras acciones sólo tienen un valor de síntomas.
Las cualidades que crecen a la sombra de nuestros defectos más graves; la debilidad, la indecisión, la sutileza.
Nuestras teorías, cuando no son formadas por nuestros instintos, son las defensas que ponemos a estos.
La costumbre de las semiconfidencias, siempre inquietantes, por no ser completas.
(Alexis)
ELLERY QUEEN
Actitud mesiánica.
El abogado retó con su silencio, con su mejor postura de cebo.
Expresiones expectantes.
El valor de la adulación.
Expresión de simpatía.
Expresión helada.
Reflexionar profundamente.
Enzarzado en una animada conversación.
Un archivo de cuentas pagadas.
Maduro en prudencia y experiencias criminales.
Muchas pistas, pero ninguna meta a la vista.
Anticiparse a las argumentaciones.
Formular la iluminadora cuestión.
Argumento irrefutable.
Otra ambición infantil destruida.
Un grupo sometido y aprensivo.
Enfrascarse en una conversación.
Furia homicida.
La expresión de su semblante se descompuso al escuchar la pregunta.
El tiempo de un latido.
Deseando ocultar una emoción indeseable, poco oficial.
Impresión de impaciencia.
Expresar secamente.
Suspiraba con ennui, apuntando su oscura barba acusadoramente hacia el suelo.
Desarrollar un sentido especial, para detectar cualquier falsedad.
Mortificada por la actitud de su marido.
Una voz femenina, preñada de lágrimas, con tono asustado.
Expresión serena.
Estudio. Biblioteca.
La ambulancia del depósito.
Expresión satisfecha.
Expresión de fugaz inteligencia.
Tilde de vanidad.
Obligar a transformar la actitud.
Tomar una decisión mental.
El fenómeno de la amaurosis o ceguera completa, al ser inducida por la hemorragia de una úlcera o un cáncer gástrico.
El aroma menos tangible de una pista sensacional, la discordia.
Frotar briosamente las manos.
Un representante de la fiscalía, atento a las intenciones de la acusación.
Transformación química en el humor prevalentemente índigo.
Uno de esos malditos enigmas.
Con deliberación sardónica.
Un destino duro, determinado, con su acostumbrada falta de propósito definido.
Semillas de gentil pasión.
Expresión solemne.
Una exclamación ahogada.
Reflexionar rápidamente.
Dedo acusador.
Expresión culpable.
Expresión asustada.
Expresar cordialmente.
Cautivos de la explicación.
Delicada estructura del razonamiento.
Un resquicio en la conversación.
Actitud estudiada.
Expresión de emoción reprimida.
Puñales en las pupilas.
Expresión cautelosa.
Intensidad venenosa.
Expresión torva.
Actitud agria, una nota de suspicacia.
Sin demasiada ilusión en la expresión.
Expresión de cansancio.
Doble placer del que habla La Fontaine con elocuencia. El placer de engañar al engañador.
Expresión de intriga.
El meollo del relato.
Un silencio intenso, que llegaba a ofender los tímpanos.
Un remolino del malhumor.
Una referencia convencional.
Una persona, que encontraba en la expresión de su ego una morbosa satisfacción.
Reflexionar, mente calculadora.
Un sentido creciente de futilidad.
Sutiles expresiones de vituperación.
La concha exterior de la existencia.
Oleadas de palabras rompieron con las playas de su pesar.
La casa, un faro a cuyos rayos los representantes de la Prensa dirigían sus embarcaciones.
Una oferta rechazada con desprecio olímpico.
Grandes ojos de gitano.
La actitud de laissez-faire ha actuado en detrimento de muchos.
Cáncer de la verificación.
Dando vueltas, a la manera felina que adoptan los seres humanos cuando dan rienda suelta a sus pasiones.
Se explica que la persona que habla consigo tiene bastante dinero en el Banco.
Una charla conducida con las reglas de un duelo.
Los arrebatos y matices del motivo humano.
Charlar convencionalmente.
Parpadeando con la maldad de una arpía.
Afán de domesticidad.
Nubes de tormenta en las facciones.
Tesis originales.
Calidad de sospechoso.
Situación tensa.
Con el rostro mostrando unas líneas diamantinas.
Con los ojos brillantes de expectación.
El fiscal adoptó otro enfoque.
Una complicación de carácter internacional.
Provocar un conflicto internacional.
Un instante de vacilación.
Asunto confidencial.
Presión internacional.
Expresión grave.
Actitud infantil.
Expresión desamparada.
Un enigma desconcertante.
El elemento interesante.
Levantar las manos en un gesto de rendición.
Ensueño letárgico.
Hacer ostentación de un estallido de energía.
Se balanceaba en un océano de indecisión.
Apenado y presa de emociones conflictivas.
Gozoso de escapar a aquella pulga tenaz, que picaba sobre el pellejo de su deber.
Esbozar la solución.
Un frenesí de gesticulaciones.
Dar las gracias con la debida humildad.
Sed de declaraciones.
Su cerebro estaba forjando el caso para la acusación.
Exponer la argumentación.
Murmullo de aprobación.
Apreciaciones de la urbanidad ciudadana.
Peso del descontento.
Aspecto del león satisfecho en su voracidad.
Por su expresión pasó la sombra de una disculpa.
Blanco como un cirrus.
Una disculpa casi infantil en su torpeza.
Expresión de serenidad.
Una horda de periodistas hambrientos.
Expresión placentera.
(El misterio del ataúd griego)
Cuenta de gastos.
Mostrarse reservado respecto al caso.
Caligrafía picuda.
Cabello leonado.
Murmurar una frase convencional.
Percibió que se estremecía, algo que pocas personas suelen hacer, pese a cuanto digan los autores de novelas.
Los acrósticos, los anagramas y las novelas detectivescas.
Los libros de violencia sexual o los misterios patológicos, en boga después de la Segunda Guerra Mundial.
Participación de bienes. La tercera parte de la legítima concedida por la ley.
Una vieja lechuza con menos personalidad que un martillo.
Un ingreso procedente de un fideicomiso.
Replicar volublemente.
Relatar el argumento de una novela.
Para que una coartada sea indestructible, ha de ser auténtica.
Una sórdida historia.
Preguntar agudamente.
Tono extraño de una cualidad calculadora.
Una exclamación llena de precisiones.
Actitud de intensa apelación y súplica.
Expresión asustada.
Con una expresión grave.
Los inveterados escritores de Diarios íntimos no permiten que una enfermedad les estorbe. Casi siempre redactan las anotaciones de los días anteriores cuando están restablecidos.
En un país extranjero hay que proceder, según el protocolo de los nativos.
Presentar unos argumentos poco persuasivos.
La gracia del lagarto y el cabello aceitado propio del gigoló patentado.
Hablar sopesando las palabras.
Nariz veneciana.
En su rostro se hallaba estampada la autoridad médica.
Secretos intransferibles.
La teoría magnética de que el criminal se siente arrastrado hacia su víctima hasta el ultimo momento.
Ceder el paso con una exagerada deferencia.
El ingrediente misterioso de la pomada.
La actitud de ignorar, debida al desprecio por la familiaridad demostrada, o a la discreción de su amplia experiencia.
Palidecer un cromado demasiado expuesto al sol.
La carnaza del testamento.
Conformarse con la manda ofrecida en el testamento.
Un apartamento, un condominio totalmente pagado.
Una situación extraordinaria, no un asunto de clara determinación.
Presentar una acusación.
Reprimió sus mejores deseos.
Afán de independencia.
El peso de las circunstancias.
Teorizar por puro ejercicio.
Expresión meditabunda.
Su aspecto familiar semejaba forzado.
Sus investigaciones habían tropezado con el proverbial muro infranqueable.
Siempre es arriesgado poner un acusado en el banquillo de los testigos, porque se expone a un ataque furioso por parte del fiscal.
Adoptó su mejor expresión de <<ser humano a ser humano>>.
Un bribón imaginativo.
El fiscal ya había edificado un caso concreto.
El beso de la honradez, exigido por la cualidad de las cosas.
Línea de razonamiento.
El valor de los cobardes.
Había obtenido una velocidad orbital, se hallaba lleno de euforia.
Sentido elemental de la precaución.
Diálogos cansinos.
Réplicas negativas engrasadas con cortesía.
Los escoceses hablan en ocasiones por enigmas.
Expresión de gran júbilo.
Transformar las acostumbradas impresiones nostálgicas.
Parpadear acusando un gran dolor.
Transformación en la estrategia.
Licencia de casamiento, el análisis Wasserman.
Conversación emocional.
Tono claramente acusador.
Colmo del asombro.
Era como si el concepto del tiempo le obsesionase.
(Cara a cara)
Inventor, soñador, imaginativo y entusiasta.
Instrumentos de comprobación del cuerpo. Gastroscopo, otoscopo, especulum; rayos X, fluoroscopo.
Ser humano del cerebro de dirección unica.
Prestigio mágico.
(El hombre que podía doblar el tamaño de los diamantes)
Insulto premeditado.
Azul artificial.
(El gato muerto)
LESLIE CHARTERIS
Profunda, irrefutable y filosófica justificación.
La imperceptible línea de un cabello que separa la locura del genio y que constituye el reino de los aventureros.
Círculo de hierro de lo conveniente.
Regla de la mecánica. La atracción y la repulsión son iguales y opuestas.
Una vedija de algodón.
Visión pesimista de un experto.
Perspicacia de un lince.
Ácido fluorhídrico, líquido mordiente.
Rueda de las conjeturas.
Epítome de los hechos.
Alegre cascada de extravagancias.
Inhumana sequedad de la lógica oficial.
Golpes de ingenio de un juglar.
Círculo de la muerte.
Cólera de la ofendida decadencia.
Círculo de hierro de la ley.
Desvanecer las acusaciones.
(El Santo y la evasión)
Profunda, irrefutable y filosófica justificación.
La imperceptible línea de un cabello que separa la locura del genio y que constituye el reino de los aventureros.
Círculo de hierro de lo conveniente.
Regla de la mecánica. La atracción y la repulsión son iguales y opuestas.
Una vedija de algodón.
Visión pesimista de un experto.
Perspicacia de un lince.
Ácido fluorhídrico, líquido mordiente.
Rueda de las conjeturas.
Epítome de los hechos.
Alegre cascada de extravagancias.
Inhumana sequedad de la lógica oficial.
Golpes de ingenio de un juglar.
Círculo de la muerte.
Cólera de la ofendida decadencia.
Círculo de hierro de la ley.
Desvanecer las acusaciones.
(El Santo y la evasión)
Margaret Mitchell
Rozagante irlandés.
Obstinado cerebro irlandés.
Avaricia escocesa.
Mentira manifiesta.
Simple inteligencia hereditaria.
Educación a prueba para disimular la rabia.
Furia de la humillación.
Claro buen sentido irlandés.
Sorpresa. Innovación.
Imprecaciones, gritos y acusaciones.
Acusación de venalidad y cobardía.
Los irlandeses creen en la intuición.
Insidiosa humildad.
Pistolas de duelo de largo cañón y puño de marfil.
Fría razón.
Calcular el grado de mejoría.
Momento de incalculable duración.
Sentido del tiempo y de la realidad.
Disimular la confusión, relato, noticiario.
Calcular el coste de la semilla.
Garantía colateral, algo en prenda.
Sucio y mate color de esmeril.
Interés apreciado remunerativo. El cincuenta por cien se estima satisfactorio.
Soltura pagana.
Manifestar un simple interés de cortesía.
Manifestar desaprobación.
Irlandés decidido y valeroso.
Banco de liquidación.
Emitir una reflexión.
Tormenta de agrias críticas.
Es desagradable para los buenos ver a los malos florecer como el verde laurel.
Periodo de reconstrucción y expansión.
Con la imaginación en los libros.
Valor animal.
Garantía material.
Acusar, reprochar.
(Lo que el viento se llevó)
Hinton
Una impresión de bolsillo de "Lo que el viento se llevó".
Le impresionaban los modales y el encanto del caballero sureño.
El cerco que Sherman pone a Atlanta.
La parte que los caballeros sureños cabalgan a la muerte solo porque son galantes. Caballeros sureños de grandes ojos negros y vestidos con vaqueros y camisetas, caballeros sureños abatidos bajo las farolas.
ARTHUR MORRISON
Sacar la tajada del león de los beneficios.
Según la jerga de los ladrones, roast significa vigilar una cosa o una persona.
Se puede calificar de shop una guarida de ladrones.
(El caso del desaparecido Laker)
GUY BOOTHBY
La Bolsa de Londres, Stock Exchange.
Oleada de negocios.
Canards o infundios.
(Los diamantes de la Duquesa de Wiltshire)
CLIFFORD ASHDOWN
Presunción de un boulevardier.
(El submarino)
CLAUDE HOUGHTON
Park Lane, lago Serpentine, Arco de Mármol.
Ciudad sumida en la magia de una pausa de reposo.
Ideas reales e irreales a la vez con lo soñado en una pesadilla, cuando el que duerme sospecha que está soñando.
Especial atractivo que caracteriza los momentos de profunda intensidad.
Esquinado, incisivo, rebelde.
Nube de ideas acusadoras.
Poder tiránico del dinero.
Educación, hábitos y energía.
Bienestar y poder.
Jerarquía de los hechos.
Análisis imaginativo, pero penetrante.
Hiperestésico, sensible.
(Christina)
JOHN KNITTEL
Cloruro potásico y filtro de Pasteur, para producir agua limpia.
Desesperación manifiesta.
Alas oscuras de la muerte.
Cólera. Microbio invisible espirilo. Profilaxia.
Ira circasiana.
Avanzar por el camino inmenso de la ciencia.
Acusación inmotivada.
Galli-galli-galli, canta el mago que saca las monedas de las orejas.
Gran locomotora verde de Birmingham.
Coche salón, oriundo de Lincoln, la ciudad de las iglesias.
Los agentes políticos, los peores enemigos del pueblo.
Grado de intimidad.
Un ser humano que no logra dormir padece el suplicio de Tántalo.
Sueño profundo lleno de dulzura, como un mensaje de la muerte.
(El Hakim)
Bartolini
Fatiga dura, opuesto a fatiga vil.
Superladrón de guantes amarillos.
Hombres honrados, raros como un mirlo blanco.
Las reflexiones son rayos, pero las palabras son elefantes.
Anillos de metal, que después de un baño de purpurina de Nápoles, se venden como anillos chapados, si no como de oro macizo.
(Ladrón de bicicletas)
Robert Graves
Paradojas amadas y utilizadas por los doctos.
Ratero napolitano.
Tono apremiante.
En disposición sumamente confusa.
Máxima. Sólo decir bien de los muertos.
Replicar desmayadamente como un eco.
Caer sobre los culpables como un martillo y aplastarlos sobre el yunque de la disciplina.
Las exploraciones son gloriosas; el comercio menester; el oro deseable.
Tono de incredulidad.
El viernes era un día desdichado, para dar vuelta al colchón, como para emprender un viaje por mar.
Temblar como un álamo.
Desenfrenados actos.
En son de protesta.
Ni siquiera en Alemania, donde se fabrican los mejores instrumentos náuticos, ningún matemático ha inventado una manera exacta de calcular la longitud, mediante la investigación de las estrellas y los planetas. La latitud se determina con referencia al sol, mediante una cruz geométrica dotada de reflector o sin él, según sea conveniente; pero en referencia con la longitud, los pilotos deben conformarse con la navegación a estima, que no es sencilla de calcular, especialmente de noche.
Acusar de cometer acciones, que rebatían la voluntad y el mandato reales.
Signos de sospecha y alarma.
Grito de angustia.
Éxtasis de furia.
Irrumpir en un torrente de invectivas.
Al romper la mañana.
Controló el enojo, que cada vez más lo ganaba.
Una gentil aflicción.
Cuando un viaje empieza con desorden, termina en caos.
Cancelar el contrato.
Valorar la moderación y la aptitud de resistencia, por encima de los extravagantes actos de atrevimiento.
Demostrar una transformación radical de actitud.
Un ser humano astuto y de gran sagacidad diplomática.
Ajuste de cuerda.
Autoconciencia del peligro.
Tono de ofensa.
Vista de lobo.
Lágrima plena de piedad.
Una pequeña herida abierta en el pino podía henderlo y propiciar su putrefacción.
La tierra de Australia, llamada imaginativamente, en honor de la Casa de Austria.
Hacer mutuas bromas.
Grasa de la usura.
Grado de pérdida en una cantidad de trigo, después de aventado y depurado.
Acusar de adoptar formas fulleras.
Ferocidad de las conversaciones.
Grito de deleite.
Someter a libertad limitada.
A una lanza de distancia.
Grito unánime de terror.
Tono conciliador.
Actitud plena de respeto.
Tender las manos abiertas con impertinencia.
Lo que era asunto de todos, no lo era de nadie.
La noticia se filtró.
Profundamente empeñado por una profusa emisión de pagarés.
Actitud de acendrada lealtad.
Palabra ruda.
Acusación de incompetencia.
Manifestar respeto.
Agitar el índice con aire de disuasión.
La insatisfacción se puso definitivamente de manifiesto.
Atmósfera de conspiración.
Lanzar vagas acusaciones, opuesto a ver la cuestión razonablemente.
Albergar locos resentimientos.
Acusar de imbecilidad.
Actitud grave y ominosa.
Se retiró con una reverencia y un aspecto de resignación, del que no estaba ausente el reproche.
Horizonte austral.
Agorero presentimiento.
Segar parte de la fuerza.
Miedo incontrolable.
Levantar la mano en demanda de silencio.
Abrir los brazos en señal de amistad.
Embaucar como un gitano.
Guerrero frenesí.
De la adustez de sus expresiones dedujimos un profundo desacuerdo.
Manifestar sincero afecto y buena voluntad.
Dar muestras de miedo.
Manifestar un justo enojo.
Hacer una reverencia a la luna llena.
Frenético de furia.
Glotones prodigiosos.
Peso de la conversación.
Conversación amistosa.
Curso de la conversación.
Manifestar deferencia.
Acusar de desmoralizar con dilaciones.
El más largo rodeo es el más rápido camino de regreso.
Presentarse en la guisa de ladrones.
Memorial en círculo. Memorial firmado en círculo, para que no se sepa la disposición en la que van las firmas.
Manifestarse asombrado.
Obligar a una acusación abierta.
Caterva de malignos calumniadores.
Sin aliento, como quien repite un mensaje.
Esquivar el bulto.
Cara de color de yeso.
Desgastado hasta el agotamiento.
Cada cual tiene un propósito y un deseo, que no son los de su prójimo.
Conversación referida.
Rezongos de unos pocos exaltados.
Graciosas bagatelas.
Peras negras.
El sendero del amor sembrado de inocentes margaritas.
Atormentar las angustias del amor hostil e irredento.
Mezcla de horror y alivio.
El hilo de su propósito.
Experimentar con sequedad.
Vaporosas consecuencias.
Espantar al lobo del menester, que desde hace mucho aúlla a vuestra puerta.
Ver con burla de arriba abajo.
No me importa una castañeta de mis dedos.
Enrojecer como un ladrillo.
Reservar una martingala.
Acusar de sembrar el descontento, de amenazar, de desobedecer.
Ronco susurro.
Adulterio ocular.
La muela de la justicia.
El horror y la incredulidad.
Petrificado de horror.
Leer pretensiones criminales en la cara orgullosa y enrojecida.
Galas de desprecio.
Consagrar un acallado aplauso.
Manifestar indignación.
Temblar de angustia.
Por la magia de la afinidad.
Acusar de tener inclinaciones viciosas.
Nadie que haya conducido un arado dirige la vista atrás.
Visita breve y formal.
Objeto de conjetura.
Cándidos sueños.
Burlas coreadas.
Pertinencia de las proposiciones.
Llorar de asombro.
Discreto como una ostra.
Vender la harina por libra y el aceite por pinta.
El escorbuto empezó a manifestarse en forma de úlceras abiertas en las manos y los pies.
Terrores supersticiosos.
Acusado de un falso delito.
Gritos y ademanes de lamentación.
La amiga del cornudo, la buena señora perejil.
Portugués descamisado y conversador.
Freno a la cólera creciente.
Manifestar un justo enfado.
Mentir respecto del mensaje.
La flor de las cartas en mis manos.
Ahogado de rabia.
Lo ganó un histérico frenesí.
Escala de gato.
Quedar con la parte del león de la alabanza.
Cruel avaricia.
Severos términos de las acusaciones.
Su belleza la acusa de vil avaricia y codicia sin freno.
Conmovida por la inesperada bondad del mensaje.
Crueldades inferidas.
Condición de gran quebrantamiento.
Oponer firmeza a infantiles caprichos.
(Las islas de la imprudencia)
ROSAMOND LEHMAN
Los largos dedos de la hiedra.
La maravilla, el portentoso misterio de los rostros.
El significado exagerado, la inquietante cualidad de curiosidad que transmite un rostro con un sueño.
Fundiéndose con la oscura y brillante materia de sombras encantadas de la infancia recordada se habían transformado como criaturas casi fantásticas.
Las trivialidades extrañas y conmovedoras de hechos reales para recordar.
Un buen humor despreocupado y nada exigente.
Los niños hermosos y misteriosos como la noche.
Un sueño plácido y reparador.
Enfermo agotado con la vigilancia y la ansiedad.
Le imploró que viviera para demostrarle su gratitud.
Desde el fondo de la tumba levantó la vista y lo vio pálido y desconsolado plantando violetas.
La oscuridad del pasillo era como enormes animales agazapados de terciopelo negro.
Un horror demacrado se apoderó de su rostro y se desmayó con un golpe en el suelo.
Un tono solemne.
Una sutil semejanza.
Hacer las cosas con vehemencia.
Variaba odiarlo y casi amarlo.
Una mentalidad didáctica. Le encantaba instruir.
Era demasiado educada para demostrar su aburrimiento.
Buscando las palabras adecuadas, las perfectas para expresarse.
Era menos engreído que autodegradado y sensible, menos superior que tímido.
Los sueños reales ingeniosos y absurdos.
Un toque delator.
Los tres peniques de la suerte.
Vivía con arrebatos de energía seguidos de la más letárgica indiferencia.
Un laberíntico aislamiento.
Permanecer profundamente grabado en la memoria el vínculo, el compartir una emoción, la simpatía secreta.
Aquel tiempo lejano e insustancial.
El cielo comenzaba a florecer con la tarde.
Una tarde serena labrada como la muerte.
Una trémula y deslumbrante sensación de agotamiento.
Se había mostrado comun e indiferente y buscando señales y prodigios quedó helada de decepción.
Como si el horror ese instante hubiera hecho noche y los hubiera borrado.
La gracia fugaz de un sueño.
Al borde de una tremenda intimidad.
Un shock grande, una punzada profunda de alegría y de tristeza.
Alimentando en su imaginación su existencia irreal y onírica.
Emociones fugaces.
Una actitud que sugería que habría valorado su buena opinión.
No tenía la clave: solo podía diseccionarlo y tomar notas.
El peso de su pródiga e indiferente brillantez.
La alegría y la orgullosa indiferencia, el encanto aparentemente inconsciente, la charla evidente podía ser producto de una completa timidez.
Representaban el patrón, el color y la riqueza que alguna vez había cobrado vida.
La excepcional calidad de su apariencia.
Al este y al norte las estrellas heladas apuntaban sus dardos.
El suspiro ciego y lugubre, la prisa inutil y el silbido de la lluvia.
Atraída con una ilusión fantástica y enfermiza.
Era un disfraz terrible: la máscara arrugada y amarillenta de un viejo cretino.
Enferma con la sorpresa.
Pálida, infantil e incomprensiva.
Se encogió de hombros y se dio la vuelta como si alguien debiera contestar.
Los extraños y tristes sueños de cuyas improbabilidades despertaba con el ánimo abatido.
El sol como una campana.
Más allá del borde del mundo encantado.
Las pocas estrellas reflejadas y resplandecientes sobre hebras translucidas en las pálidas profundidades de las nubes.
Con una mano tocando su sombrero con una disculpa mecánica.
Fingir creer, cubrir la indecisión con afirmaciones garantizadas.
Un sueño terrible.
Una oscura y brumosa soledad de noche y agua se extendía.
Despertó una noche lluviosa, ciega con el enorme llanto de la lluvia.
El dibujo de largas sombras de árboles del césped nítidas sobre el nivel de la hierba blanqueado con la luna.
Transformada con la luna poderosa y eufórica.
La casa afligida se sentía agobiada con el peso de su vacío.
Esa parte de ti que percibe sin ojos y sabe sin razón.
La mancha menguante e insensible que era él desapareció de la vista.
La vida lucida y crédula de la vigilia y el sueño de la que uno comienza a preguntarse si el sueño era después de todo la realidad o si la realidad no es más que un sueño.
Una facilidad irreal.
Los ojos gélidos de un ángel o de un demonio no conocen el bien ni el mal.
Una expresión mínimamente perturbada.
Terriblemente aterrador y erudito.
El abismo de cosas que nunca se dirían.
Controlar el temblor y el rubor devorador.
Formar un opresivo y autosuficiente círculo de intimidad sanguínea con un nucleo de indiferencia si no de hostilidad al extraño.
Un encanto espurio.
Escabullirse de la vergüenza y la consunción de su percepción de la histeria reprimida.
Uno de esos sueños de lugares recordados que todo es muy familiar y semeja ominoso.
Un comentario general.
Inconsciencia. Aniquilación celestial.
La expresión reservada con orgullo escuchando inconscientemente.
Una expresión agridulce.
Nublado con un humor terrible.
Moverse con un sueño girando suavemente, cesando y balanceándose.
Los cálidos senderos de la reminiscencia.
Fingir filosofías vaporosas.
Las reglas de conducta.
La mente y las cosas ocultas serían emocionantes si pudieras desenterrarlas.
Una fugaz sensación profética de impotencia, alegría y miedo.
La vida comenzaba a temblar al borde de la manifestación.
Estaba triste hasta el borde de las lágrimas y sin embargo la tristeza era intensa: una alegría sofocante.
Significativas conversaciones.
Una vida familiar, un bagaje de influencias y asociaciones.
La conversación fluía alegremente sobre nada.
Tapó la cara con las manos por temor a que la delatara con un resplandor indecente.
Saboreando el fresco sabor de la ausencia de deseos.
Nunca le había complacido el espectáculo de los éxitos ajenos.
Coincidir con las reglas de conducta adecuadas de los sexos.
Un conflicto emocional solucionado.
La máscara tras la cual guardaba sus placeres personales y los saboreaba secretamente.
Una máscara austera y firme.
Gestos nerviosos, atractivos e ineficaces.
La sacudida del silencio.
Una expresión indescifrable.
Una dulce pasividad vacía.
Una advertencia reiterada.
Algo le latía con nauseabunda angustia.
La flor del cerezo crece de las semillas del encanto.
Los fríos retratos de personas los aferraban a la irrealidad: no podían perecer: no habían vivido.
Habían temblado al borde de compartir las emociones.
Consolar con una ternura inmensa e inarticulada.
El instinto humano.
Sobre los campos de hielo y de nieve se extendían las translucidas praderas de aire.
Una expresión altiva como de superioridad.
Vanidosa o despiadada.
Un murciélago de pesadilla.
Un éxtasis incontrolable.
El intelectualismo conlleva todo tipo de amenazas.
Gold Flake (oro comestible) es un aditivo alimentario de la alta cocina.
Los papeles del tiempo.
El tiempo fluía imperceptible tirando bagatelas aquí y allá a sus orillas.
Meditando la nada.
Una amistad rara y firme.
Cualquiera podía escribir citas pausadamente pero no esperaba que un estudiante de literatura inglesa se ocupara de teorías.
Era demostrado que poseía una cualidad que lo diferenciaba de todos los demás que asombraba la imaginación y lo transformaba como una persona de una importancia abrumadora.
Las profundidades ilimitadas de la noche.
Un tono forzado.
Un tono desafiante.
Fue un gesto impulsivo inusual que semejó de sorprendente importancia.
Mirar con odio puro.
Transformarlo de su ser libre y secreto como algo comun domesticado, resentido.
Una disposición de ánimo de tierna solicitud.
Con las extravagantes e incongruentes brillanteces, las divinas crudezas, las impresionantes magnificencias de su diseño la vida seguía tejiendo sin fin trivialidades incoloras con una tela garantizada.
Su actitud tenía una sencillez muy alejada de la efervescencia y extravagancia habituales: semejaba afirmar un hecho que podía creer sin cuestionarlo.
Viviendo con resentimiento un reflejo de existencia ajena.
Los manzanos cuajados de flores brillaban frente al cielo con un tierno antagonismo infantil de colores sencillos: pálidos rosa sobre azul pálido.
La irrecuperable calidad de aquel día.
Vivir la aventura; ver en cada esquina cómo la maleza se transformaba como zarza ardiente.
Los miedos descoordinados e informes, el símbolo de la transformación de oscuras alarmas y confusiones.
La precisión y economía de movimientos antinaturales.
Las tiránicas compulsiones de los ojos habían oscurecido y distorsionado los verdaderos valores.
Un escalofrío de emoción y angustia.
Un golpe cegador con sus implicaciones instantáneas de deshonestidad e indiferencia.
Una repentina emoción.
Un tono truculento.
Una actitud radical.
Una curiosa tosquedad casi una vulgaridad.
Un cansado desprecio.
Algo emergía de la envoltura pétrea.
Una enérgica indiferencia.
La pesada máscara.
Una piel de invernadero.
Estaba al borde de un colapso nervioso y la ilusión residía en el sueño y la tranquilidad.
Su inconsciencia casi mortal era un dolor insoportable.
Los sellos del sueño.
Un susurro urgente y doloroso.
Una sensación de desolación inminente.
La grotesca irrealidad organizada.
Una expresión abatida y obstinada.
Una ilusión de satisfacción restaurada.
Encerrarse en los límites de un sueño inutil.
Su conversación era aguda e informada en un amplio campo.
Una vaga y sobrecogida identificación con los ángeles y la Virgen.
Comentarios con un toque de ironía.
Un tono lastimero.
Una expresión adulta de reserva y tristeza.
Un temperamento nervioso.
Ataques de gritos.
Una satisfacción y gratuidad trémulas.
Su actitud habitual la envolvió al instante.
Frotar los ojos con un gesto impaciente.
El haya llorona.
Su ánimo alienígena dormía con la inconsciencia.
La desconcertante salida de la luna.
Su rostro como una máscara inconsciente y dormida.
Eres un tigre para la conversación.
Las convenciones gastadas.
Su actitud o expresión semejó conmoverlo.
Ver con ansiedad y desánimo.
Una vaga benevolencia.
Una expresión hambrienta.
Bajo la luna los árboles habían sufrido su transformación lunar y eran masas esculpidas de mármol oscuro bañadas con una fosforescencia verde plateada. Una noche trágica.
El distanciamiento animal.
La visión fugaz y desconfiada, la cabeza oscura suave y brillante, la gracia cautivadora eran atributos que compartía con los animales de la granja.
Un tono de ansiedad.
Un tono divertido y tierno.
Un tono rígido.
Cancelar la participación.
Su ensimismamiento infantil era divertido y atrayente.
Las perplejidades emocionales antinaturales de esa mañana.
No sentía la gran barrera de la diferencia generacional sino la intensidad de su sexo comun.
La muerte frita y cenicienta de las polillas.
Seres humanos objetos de diseño mezquino y absurdo incongruentes con la vasta grandeza de la noche.
La pasión era fealdad y vulgar imbecilidad.
El misterioso encanto de la infancia.
Un golpe silencioso.
El cielo brillaba en su total extensión como el interior de una concha.
Una intensa concentración.
Un gesto de alegría rápido y torpe.
Las horas de cada día eran burbujas ligeramente desaparecidas.
El mercado matrimonial.
El centro de comentarios y conjeturas entusiastas.
Una conversación sencilla, decadente y chismosa.
El desenfreno continental.
La vieja enfermedad del recuerdo iba a reaparecer.
Hace siglos que no tengo suerte.
Débil ante la avalancha del pasado.
Las náuseas y el sudor del desmayo.
Las cosas se transforman como monstruos si las encerramos dentro.
Un tono persuasivo.
Manteniendo una conversación con un sueño.
Agacement. Disgusto, enfado.
Cohibidos, meticulosos, decadentes.
Lo que confundió con su yo viviente era una momia con un corazón de polvo seco.
Unidos arrebatarían el placer a la inutilidad de la vida.
Compartir la intimidad de sangre del círculo.
El ritmo del torpe cuerpo de madera que tenía que empujar.
La colorida procesión de los días.
El río se extendía como una sustancia sedosa con un brillo suave como el aceite sobre su superficie oliva oscura.
El haya cobriza permitía caer sus hojas sobre el césped desierto.
Frustrar una monstruosa artimaña del azar a la hora del triunfo delicioso de la vida.
Soy un sádico mental consumado.
Abandonar de lado las oscuras y cerradas envolturas de la mente y salir a la superficie la llama.
Una armonía inquieta.
Llenar de acusaciones y reprobaciones.
Una letra sensible y errática.
Una soledad emocionante pero insidiosa.
El silencio habitual de la tarde.
Un sueño recurrente, una figura vista con una claridad anormal y una distorsión total.
El sueño la había obsesionado con el problema de su significado.
Si pasaba las páginas del periódico ilustrado sin levantar la vista vendría.
(Réplica polvorienta)
Malcolm Lowry
Rueda de la luz, rueda de Buda, rueda del Tiempo.
Atmósfera de esplendor desolado.
Tenue velo de humo ilícito.
El sol derramaba vidrio fundido en los campos.
Fin y división.
Manifiesto efecto.
Visión frenética de quien está por enfrentarse a la muerte.
Horrible vacío infranqueable, vía indiscernible.
El tiempo es un falso curandero.
Pelícanos de cacería.
Divorcio. Escindir, desunir.
Ausencia. Separación de la reflexión, el cuerpo y el carácter.
Talante, máscara, actitud.
Ultima actitud de fortaleza o de desolada fecundidad general.
Triquiñuelas y procesos legales por salarios atrasados.
Drenajes, olor al Huevo Cósmico.
Estricnina. Sabor dulzón similar al cassis.
Llegar a una suerte de indiferencia a fin de disputar con Lucrecio.
Gesto de discreta impaciencia.
Organismo neurítico por el alcohol.
Trogon ambigus. Pájaro ambiguo. Dos ambigüedades deben constituir una afirmación. Quetzal de cola cobriza.
Manifestación de interés por los volcanes.
Diciendo con tranquilidad, sensatez, valentía, debido a la autoconciencia de algo extraordinario que estaba presentando a su imaginación.
En la acusación había una esquiva sutileza, que se le escapaba.
Pasar del alcohol al alcaesto.
Trance de angustia del regreso.
La humanidad semeja torcerse, mientras se consume con máxima rapidez.
Sensación de la transformación, intenso placer elemental.
Nombres que daban los astrónomos a los lugares de la luna. Marisma de Corrupción, Mar de las Tinieblas, Mar de la Serenidad.
Metamorfosis de las alucinaciones agonizantes y renacientes.
Prometeo de las cloacas.
Fría visión sarcástica del mundo material.
Pasado, silueta acusadora.
Obligación pactada.
Venus es estrella una cornuda.
Pelado. Encuerados, despojados, ladrón y explorador.
Esperar con necias conjeturas los lazos que a Tántalo torturan.
Bhang, semejante al mezcal.
El amor y la sabiduría no tienen sede fija.
Curiosidad publica del ser humano por el tiempo.
(Bajo el Volcán)
King
De la perplejidad a la abierta indignación. Podía escribir un moderno "Bajo el volcán".
HEIMITO VON DOREDER
Los muros inconsútiles de la inocencia.
Cortas y cómodas escaleras hacia el engreimiento.
De josefina memoria.
Su veneno. El aburrimiento.
La masa caótica de la ciudad.
Es de decisiva entonación, para una vida, el que en el acorde presentador de una persona, suene el nombre de una metrópoli mundialmente famosa, la cual resulte, además, ser su cuna.
Quien persevera en una pose y se exhibe demasiado tiempo al exterior, queda tarde o temprano expuesto a que se eche mano de él y se le coja la palabra que, aunque la haya repetido, nunca la ha dicho en serio.
Empleos de diversión, riesgo, honrosos, aburridos.
Infeliz por causa suya.
Un rayo de calor desconocido.
Cuando, de repente, se hace palmaria una cosa oculta largo tiempo en nuestro interior, experimentamos una profunda satisfacción (sucediendo incluso en casos desagradables), al menos por un momento.
Mar de tráfico.
Vibraciones eólicas.
El fondo granítico de la paciencia.
Mansiones sosegadoras.
Respecto del obrar.
Muro divisor del consciente.
Al rechazar la familia -por desgracia, un voto de rigor en personas mejor dotadas-, encontró el punto de partida.
Un ser humano de más intensidad, pero de mucha menos cultura. Cabe decir, que en el fondo, era lo opuesto de un producto.
Mágico respeto.
El centro de gravedad moral de la persona está en referencia directa al punto sobre el que gravita.
Cuyos distanciados ojos reflejaban inteligencia.
Una madurez semejante al fuerte mes de octubre.
En vez de buscar arrimo en alguien, había arremetido a todo, echando al aire los jirones de su propio prestigio.
Detalle y luminosidad.
La presentación, el porte, el besamanos, los cumplimientos y la conversación del empleado, apenas daban nada que desear de un gentil Grande de España.
Campanas azules sobre la ciudad.
Sin salir del ámbito de la vida y sin serle infiel.
Perteneciente a una capa que sabe por herencia el peso específico de la vida, incluso antes de manifestarse.
Modificar el olor de una persona significa entrar en su vida.
Perfecta armonía con su presencia personal y con su ausencia del presente.
Gran serenidad, pesadez casi.
La posterior personalidad.
Aquella casa, cuya riqueza era demasiado reciente para tener alas.
Si cada vez que nos viéramos en compañía tuviéramos que comprobar lo que nos la trajo.
La enflaquecida vida.
Los que en seguida protestan no son capaces, ni se muestran dispuestos a seguir reflexionando.
La vida consiste en comprometerse, en meterse.
Aseándose con el jabón de la palabra.
El color tétrico de la vida.
La tendencia de los sentidos conduce al uso de un habla más escogida y cálida.
Ante él se cernía algo concreto, familiar, incluso intimísimo, como es sólo la verdad.
El brillo del dorado cielo.
Todos los tiempos son falsos.
La manera más ventajosa de mantener una conversación es repetir al oyente lo que nos dijo, bien que con alguna pequeña variación. Esta es también la manera mejor de llegar a un pacto con un gasto mínimo de energías.
Íbamos muy separados uno de otro, sin oposición de frente. La separación era extrema, no nos podía abarcar la más grande oposición.
Cuando las hojas cubren los peldaños.
Una ola densa de calor, gruesa como un edredón.
La soledad sonora de la fuente.
El ánfora y la máscara.
Un Judas Iscariote con una fenomenal nariz de buitre.
Su rostro reflejó repentina aflicción, un directo oscurecimiento.
De nociones tocantes a su persona, de su pertenencia y de su legitimidad.
El experimentar productivo.
Prescindir de preguntas y callar.
Richesse dans la lune.
Carita de insecto.
Tarde de la vida, epílogo o ultimos compases de la existencia.
Inclinada la cabecita, dormía la dríada de las Escaleras de Strudlhof, en la madera de un tronco o donde fuera.
El mejor higo del cesto.
Un intermedio de aullido de corzo y gruñido de cerdo.
Verosímil como es que en el vino no está la verdad, sino un exceso de charloteo.
El amor es como uno. Alto, rígido, pequeño, limpio, encorvado, ruin. Eso es el amor. El suyo, lo más particular que se puede dar. En este asunto no pueden coincidir dos. El amor, la oscilante declinación del polo opuesto.
Inundaciones de impresiones.
Alas rotas e ineficaces de águila vieja.
Vehículo de las más grandes sensaciones.
Por vías más resistentes.
El monólogo de la fuente.
Todo el pasado me entristece.
Cestita de colores.
La floresta de la divinidad fluvial.
El pesado manto de aquel verano.
Un gran membrillo amarillo sobre la hierba.
No se puede decir que una situación crítica pueda ser de larga duración.
Nunca se dio en Europa una situación, en la que no se hubiera podido evitar la guerra.
Olor y memoria.
Los raíles, muertos y postrados en el suelo.
Hombre de foro.
Soledad sin fuego.
Al margen exterior de su propio horizonte.
Objeción divertida y certera.
Costumbre inconsciente, habitual, arraigada y de sencillo mantenimiento y dominio.
Apoyarse en el cómodo e insuperable pretil de la ironía y la tolerancia.
Embriagadores verdes.
El abismo del asombro.
Brillantes las azules corazas.
La infancia, la cual está muy expuesta a las circunstancias, que se reduce a un espejismo de aquellas.
Recuerdo externo.
Pequeño palacio amarillo.
Mentalidad combinadora en el estudio de detalles ajenos.
Vacío calcáreo.
El punto de vista de la mecánica de la vida.
También el ser humano simple reflexiona (si se puede hablar de reflexiones) en conceptos comerciales y supervalora (también eso es comercial) lo que una vez destruido no podrá ya ser reconstruido; la castidad, el honor, la virginidad, cosas que manifiestan la irreversibilidad del tiempo.
Ceremonial español.
Hay personas que andan todo el día con el periódico en las manos y quedan sorprendidas cuando se les da una noticia que aparece en él. Está en estrecha conexión con las ausencias, las evaporaciones y, sobre todo, la somnolencia.
No puede uno lamentarse de un día mientras dura, pues puede terminar mal o peor de lo que uno imagina.
Pequeño muro de organización.
El aspecto helado de una maligna y desagradable serenidad.
Consciente llave idiomática.
Era como una flor exótica ante un fondo prosaico.
Relatividad. Comparación.
Fumées des îles.
Nivel prolongado.
Jensen llama a los fumadores empedernidos, nulidades de carne.
Reconózcase cuánto debe un comerciante a lo que podríamos llamar meditación, en vez de la poética e ingenua palabra fantasía.
El que replica instantáneamente es que ya con anterioridad ha refutado.
El monstruo más poderoso durmiendo a nuestro lado, ¡esa connaturalidad!
El vértice del estupor.
La fuente de la locuacidad.
La persona reflexiona con la cabeza y con todo el cuerpo.
Se sucedió en aquellas ultimas horas una inmensa cantidad de colores diferenciados.
La vida no le arrollará, según su experiencia o a causa de su experiencia, sino que le dará un tiempo para gozar del placer de la experiencia. Debe haber goce en todo, este se precisa para la vida como el aire. Sólo quien encuentra placer domina la situación y viceversa. El placer es la voluptuosidad, que nace del maridaje de la vida con la experiencia. Cuando falta, la sabiduría se encuentra en una habitación vacía, de vigas requemadas.
En realidad, nos hemos aproximado demasiado al sistema.
Absurdo ateísmo.
Límites extremos de la psicología habitual.
Falsa evidencia.
Surgen problemas que no existen, bajo la coacción y el menester. Abandonar, sin embargo, la falsa y preocupada evidencia es incalculablemente difícil. Es de valientes.
Las ciencias técnicas.
Miedo desnudo y aterrador.
Donde se añade algo es que ya allí tenía existencia.
Psicología de urgencia.
Nuestra psicología es una desinfectada demonología. Desnaturalizada, esterilizada, estéril.
Capricho inútil.
El deseo de hacer triunfar la forma sobre el contenido (impulso esencialmente cultural).
Un poco de perfume de un viejo album.
Y su adivinación se hizo relevante.
Tontería imposible. Sin embargo, correcta.
La muralla, en los oídos, habría adquirido quién sabe cuántos metros de espesor. Y una altura inalcanzable.
Establecer una organización no es difícil. Mantenerla lo es mucho. La organización establecida toca tangencialmente los objetos en cuestión. La organización mantenida, sin embargo, permanece oculta.
No puede atribuirse una cualidad al vacío, pues sería absurdo.
Las ramas se hacían filigrana.
La cima del ruido que hacía en su interior la propia sangre alborotada.
Dulcísima, pero prepotente explosión de leche y sangre.
Sueño de la reflexión.
Arroyito de imágenes.
Libertad no empleada.
Sonó el teléfono suavemente, como collar de perlas tintineantes.
Bondadoso lamento.
Unidades de energía, a la espera de un mandato conveniente y liberador.
Estilo sótano.
Razón. Suceso.
Sol oblicuo.
Ese encogimiento nervioso y perplejidad estudiantil, que habitualmente impide estar en silencio a dos hombres que se encuentran.
El vacío organizado, indispensable cuando tiene que suceder en nosotros algo verdadera y eficazmente.
Nada puede aparecer, adquirir plasticidad, ser visto desde el exterior en su plenitud, si no se halla rodeado del vacío, convertido en singular, aislado.
Suicidio. Si no lo había superado todo había, sin embargo, podido abandonarlo atrás.
Épocas o decisiones.
Arrinconando todo lo demás.
No hay que ser un bruto, para despojarse de ser un tonto.
Persuadido de que podía meter el correoso y explosivo puré de la vida adulta con la sencilla cuchara de cartón y de sus días infantiles.
Lo que queda fuera no existe realmente, como no existe lo que está sólo en el interior.
Vio rasgarse el suave velo, que en la penumbra hace creer siempre que lo pasado queda realmente atrás, tachado y, hasta en algunas circunstancias, negado y renegado.
Barquilla como un globo de colores, frente al cielo de octubre teñido de oro maduro, como el del brillo del vino.
(Las escaleras de Strudlhof)
Mazo de la Roche
Guinea. Moneda nominal inglesa equivalente a 21 chelines o una libra esterlina y un chelín.
El teléfono es un estorbo. Proporciona innumerables estorbos y muy poca satisfacción.
Las tiendas del A.B.C. o Acrated Bread Company, Compañía de Pan Esponjoso, están diseminadas a lo largo de Londres y abarcan numerosos restaurantes económicos donde las gentes pueden tomar su lunch de las doce del día por poco dinero.
El Libro Común de Oraciones, Book of Common Prayes viene a constituir para los anglicanos el Breviario Común de todos los ritos. Fue escrito por una comisión de obispos protestantes poco tiempo después de haber tenido lugar la separación oficial del país inglés del credo católico.
Álamos lombardos.
Caléndulas francesas.
Materialismo escéptico.
(El camino de Wakefield)
Álamos lombardos.
Caléndulas francesas.
Materialismo escéptico.
(El camino de Wakefield)
EVELYN WAUGH
Plumillas Relief.
Hoy día el mayor homenaje que se puede tributar al éxito es asumir que un autor paga a alguien para escribir por él. Rara vez he topado con un novelista que disfrute haciendo su actividad y nunca he oído hablar de ninguno que la abandonara y se pusiera a hacer algo más de su agrado. Lo que yo opino es que aunque la mayoría no escribiríamos si no fuese por dinero, tampoco lo haríamos de una manera muy diferente por una cantidad mayor.
Huidas por los pelos, historias de amor, grandes hallazgos.
Un escritor no queda realmente satisfecho si abandona cualquier experiencia a la condición informe, caótica con la que la vida la presenta. Y dar forma a las vivencias significa para un escritor transformarlas como algo que se pueda transmitir.
Alentar fases de pánico de lo increíblemente arduo e idiota de la empresa.
Horizontes ininterrumpidos.
No es que las fiestas navideñas tengan algo intrínsecamente deprimente, sino que significa un aniversario demasiado sencillo de recordar.
Alec Waugh, "Baracuta".
Gesto reprobatorio.
Aunque la gente estaba ansiosa por ser de ayuda, no podían hacer nada por mí hasta que no les dijera lo que quería.
La mayoría de los viajes comienzan y terminan con una sensación de irrealidad.
Los hombres que habitan grandes espacios abiertos son asilvestradamente parlanchines.
Gestos histriónicos.
Experiencias vívidas y relucientes de la memoria.
Bajo circunstancias de descrédito.
Capturar trozos de la conversación.
Susurrar con tono melodramático.
Tono retador.
Una vaga intuición.
Un juego de líquidos ornamentales.
Se contagió de un abatimiento inversamente proporcional.
Cualquier chiste sobre la comida del colegio, del comedor o de cualquier institución benéfica.
Segundo comienzo.
No sufrí un destino cataclísmico.
Gesto hosco.
Un vago, poco de fiar, desleal, hosco y engreído.
Nunca llegué a trenzar del todo la historia de su declive, que estaba unida a litigios, testas y prestamistas.
Sucesos que se aferran a la memoria.
Entretenido con una avalancha de anécdotas.
Una vida dura y desarraigada.
Tono cortante.
Una descripción vaga de la situación.
Obtener un innoble consuelo.
El ánimo espléndido y dulce.
Los masones robaban cadáveres del cementerio y los guardaban bajo el sótano de la logia.
Un hogar donde se derrochaban excepcional orgullo y grandes atenciones.
Un acusado precipicio.
La memoria reciente de las personas.
Desatar los nervios.
Una lujuriosa orgía de percepciones.
Mapas de diferente valor.
Gestos impasibles.
Movidos invisiblemente como las mareas con un inexplicable objeto indeterminado.
Sidra Hereford.
Gesto lánguido.
Información tranquilizadora.
Expectativas extravagantes y muy improbables.
Una investigación detallada.
Un traductor, frágil conexión.
Recibidos con concentraciones hostiles y lluvias de piedras.
Acostumbraba obtener noticias del exterior a través del operador del telégrafo.
Los masones ingleses eran mayormente directores de colegio y generales sin antecedentes criminales.
Sospechar como de un masón secreto.
Declararon que era una intolerable injusticia que no brindara a los demás la novela que ansiaban solo porque era incapaz de apreciar la experiencia.
La ayuda llegó de una dirección insospechada.
Los caballeros europeos no regatean.
Daños infligidos por las fuerzas del caos.
Los días fueron una astracanada alcanzando cotas de delirio.
Tono perentorio.
Atmósfera de frustración.
El placer de viajar es un placer inexpresable, como el placer de estar dentro de casa.
Había leído muchos libros por numerosas razones; para adquirir información, por la curiosidad de saber del tema, por cortesía debido a la amistad del autor. He hojeado muchos best-sellers para comprobar si su éxito era realmente merecido, he leído aceleradamente historias de detectives porque los problemas que plantean generan un ansia por terminarlos, un instinto inexplicable.
Un camino caleidoscópico.
Como ven los palurdos por encima de las cancelas.
Las ventajas morales e higiénicas del nudismo.
Colmar la excitación.
Los labios expresando desenfrenada emoción.
Una histérica explosión de entusiasmo.
El escepticismo generalizado es uno de los más valiosos efectos que produce viajar.
Calcular frívolamente.
Gesto amigable.
Un horizonte inalterable a cinco millas al amanecer y cincuenta al anochecer.
Llover despiadadamente.
Atraídos por el glamour de su educación urbana.
Para el viajero la preocupación está latente durante dos terceras partes del camino y es además el motivo de sus pesadillas.
Si uno privase al lector de sus confidencias -negando las incertidumbres de la ruta, la dificultad de las negociaciones, los programas y las frustraciones, transformándose como uno de esos dragomanes raros que sin un asomo de esfuerzo se presentan ante sus patronos con un plan perfectamente confeccionado, con sus cestas de comida ya empaquetadas, sus materiales de transporte concertados, los criados a la guardia- le estará mostrando espectáculos maravillosos y relatando instructivas anécdotas, pero no le estará contando lo que realmente le ha ocurrido a uno cuando estaba ante esa situación. Tampoco compartirá sus verdaderas experiencias viajeras, ya que son precisamente estos obstáculos y titubeos los que constituyen la verdadera esencia del viaje.
La gente que viaja con aeroplano emprenden el viaje con la preocupación de la gasolina, de que marche el mecanismo y de las condiciones meteorológicas desde el despegue hasta el aterrizaje. Las características del paisaje y los rasgos de la gente están presentes solo casual e indirectamente.
Acusados precipicios.
Un acusado descenso.
El albañil de Buckfast cayendo desde el triforio fue recogido por un ángel, descendido con cuidado y depositado dentro de la nave asustado, perplejo, pero sin daño ninguno.
Las circunstancias exigían abandonar una parte del grupo.
Inconfundible aspecto criminal.
La atmósfera y el talante que nos rodeaban.
Unas cascadas infranqueables.
Cataclismos publicos y privados.
Retornar la impaciencia ante los retrasos que experimenta el ser humano decadente.
Una placentera brisa marina.
Bajo circunstancias poco frecuentes.
Una odisea del ánimo.
Las experiencias conllevan una transformación.
Boy-scouts camino a una jamboree, congreso scout.
La primavera delicada y depurada.
Bath con su decoro y grandiosidad sin parangón, lo más valioso de la vida inglesa.
(Noventa y dos días)
Cara de arcilla.
Un ataque de chifladura.
Su encantador rostro aparecía rebosante de vida y atención.
Penetrantes rayos de encanto seductor.
Perplejo, mesmerizado, embriagado.
Humor escéptico.
El gran drama mundial.
Especialistas en el reportaje con una nota de color.
Sumido en el pesimismo.
Estilo elegante. <<Con aleve paso cruza el estero siempre alerta el campañol>>.
Sidra y salmón en lata, la comida del estamento agrícola.
Transformación y decadencia.
Extrañas mareas agitaban el lago.
Controlar una cascada ornamental.
Dueña del dinero.
Equilibrar las cuentas de la hacienda.
Un recuerdo específico y perennemente aterrador en la memoria.
Telegramas portadores de malas noticias.
La maquinaria casera.
Expresión lúgubre y enloquecida.
Bañada en lágrimas de penitencia.
La gente que envía cartas a los periódicos suele ser desequilibrada.
Sitiado por la atroz ciudad.
Una efigie criselefantina sobre un pedestal poligonal de malaquita.
Una masificada escuela londinense.
Saludar de forma cordial.
Abrir la conversación de manera franca y conciliadora.
Instintivamente horrorizado.
Tono de disculpa.
La conversación distaba de ser sencilla.
El atractivo de la cuestión semejaba empezar a decaer.
La sensación persecutoria que le había abrumado adquirió una forma palpable y grotesca.
Un error trivial y perfectamente justificable.
Pastelitos de Cornualles.
Atizar ingeniosamente el entusiasmo.
Crónicas vívidas y directas.
Tono apremiante.
Imaginó que estaba loco, pues un timbre sonaba con insistencia a pocos centímetros de su oreja.
Ascensoristas caucasianas.
Tono reverente.
Bastante listo a su manera, pero limitado, con pocas experiencias históricas.
Con expresión de simpleza el bromista pidió un fusil de color fucsia, un martillo de herejes y un paño de lágrimas.
Gesto amenazador.
Látigos de cuero de rinoceronte.
Expresión funesta.
El Tren Azul de Marsella.
Fugaces placeres de los viajes.
Preguntar con contenida cortesía.
Una entonación muy especial.
Insensata rapacidad.
Para los periodistas no hay países pobres.
Expresión cariacontecida.
Como conjurado por el inexpresado deseo.
Hablar con acritud.
Actitud arrogante.
Las primicias mundiales y las grandes mistificaciones; las indirectas y complicadas tergiversaciones; los inventos lujosamente detallados que formaban la historia contemporánea.
Actitud poco amistosa.
El tapón de gentes.
Un cerdito de la suerte, un amuleto, hecho de roble de las turberas de Tipperary.
Actitudes sensatas.
El territorio fue tachado de los mapas y su inmunidad quedó garantizada.
Explotar el conflicto y disfrutar de la pasajera buena estrella.
Balancines en donde hacer la digestión.
Con las manos entrelazadas sobre la pequeña cúpula de su estómago.
Reportajes con una nota de color, opuestos a las noticias de verdad.
Era un tipo perentorio que cobraba una dolorosa exacción.
Una extraña actitud de abstraimiento, una excitación contenida a duras penas.
Metafórico, falso, relativo.
Se coló como un gato por los matorrales.
La caspa es por culpa de la acidez.
Sencilla dignidad.
Un banco de empapado cemento, una tienda griega de madera y hojalata.
El tono con el que habló era grave, pues no le gustaba desmentir un rumor bueno.
La prensa actuó al unísono y la sensacional noticia murió poco antes del parto.
La enfermedad profesional del periodista, la consternación.
Volver a hablar de manera terminante.
La expresión de ansioso resentimiento habitual de los blancos.
La factura de las actitudes hospitalarias.
Tono inconfundible.
Los primeros signos de la mudanza.
Una cascada de insultos.
Valor de los especímenes de piedras.
Tono de la resolución.
Tono excesivamente perentorio y descortés.
Actitudes de reposo y vigilancia.
Una expresión gravemente preocupada.
Empapado e hinchado y borracho de amor.
Era poco dado a las bucólicas excursiones al pajar, como a las oscuras y caras expediciones.
Una absenta auténtica de sesenta grados, como un hacha.
Forma de expresión oscura.
Expresión animada.
Un clima momentáneamente sombrío.
Vivir experiencias amargas.
Abrumado por la nostalgia.
La consternación y la tensión.
Adoptar una expresión seria.
El perro de tres patas despertó y en la ciudad, en los patios y basureros, los parias se hicieron eco de sus gritos de protesta.
Los derrotados diablos del invierno.
Expresión alarmada y desesperada.
El tono monótono de un hipnotizador.
Las vacilaciones invernales.
Explicar las circunstancias.
Tono reflexivo.
Sollozos nostálgicos y teutones.
Favores profusos y pago oneroso.
Una brillante y bromista conversación en griego demótico.
Una ciudad de insospechados recursos.
Un pied à terre en la ciudad.
Discernir el embrión de verdad, el pequeño dato real en torno al que han sido depositadas las sucesivas capas de adornos.
Terca y antipática agresividad.
Amenazadora expresión ceñuda.
Ofrecer algo a la altura de las circunstancias.
Novelas obscenas.
Manifestar sorpresa.
Alto pináculo de la gloria.
Batalla del ingenio.
Abrumado por la vergüenza.
Gritos monótonos, monosilábicos, quejumbrosos de las gaviotas.
Niaras de trigo.
La montaña de equipaje tropical.
Los parias habían lanzado sus gritos de protesta.
El más humilde recensionador de libros.
Expresión perpleja y preocupada.
Un no con desacostumbrada determinación.
Las avispas comatosas atrapadas en la miel.
Impaciencia urbana.
Tono pastoso y prosaico.
Volver a verse en circunstancias más adecuadas.
Un gesto como el que habría podido provocar un repentino y doloroso espasmo.
Tono de desafío.
Galletas de Bath y de Tunbridge Wells.
La conversación fue general y variable.
Profunda satisfacción.
Cuanto más difícil es el galanteo, más se disfruta el cortejo.
Seguía instalado en la cama, en posición reclinada, como si fuese un ahíto aristócrata de la época de Heliogábalo.
Tono reverente.
La profunda e incomunicable satisfacción que produce el monólogo.
Se sintió inundado de una dulce emoción; se sintió magnánimo.
La ocasión de recrearse en inagotables reminiscencias.
(¡Noticia bomba!)
Escribir con fruición.
Una novela verosímil.
La luz de la luna formaba parte esencial de mi humor en el momento de escribir.
Este libro consiste en un discurso fúnebre ante un ataúd vacío.
La hiedra aguantaba lo que quedaba de los muros de un huerto de frutales.
La novela "Rupert of Hentzau", de Anthony Hope, sigue el "Prisionero de Zenda".
Depósito provisional.
Desde las profundidades de la mazmorra de mi vida, mis palabras semejaban volver enriquecidas hacia mí.
El efecto que puede producir un consejo razonable, debidamente formulado en el momento preciso.
Tomos de novelas francesas encuadernados en tela tornasolada y cuero de Rusia.
Leer libros serios y tener humor pueril.
Leer a Freud, disponer de un arsenal de términos técnicos, que explicaban cualquier comportamiento.
Explicaciones repetitivas y lacrimógenas.
Dolbear and Goodall, drogado. Tolkien.
Langosta Newburg.
Un megáfono surgido misteriosamente entre el bric-à-brac.
Sazonar el saludo con algún halago.
Sólo fue una visión fugaz, como lo que se vislumbra desde la parte superior de un bus, de un salón de baile iluminado.
Tono petulante.
Avanzábamos de espaldas al sol y semejábamos estar persiguiendo nuestra propia sombra.
Una simple advertencia a los errores podría evitarlos.
Escribir en un estilo de remota fantasía, desasosegado.
Refinadas exhibiciones.
Fachadas leprosas del vieux port de Marsella.
Grado de tedio.
La fatigue du Nord.
La serena señora Ponsonby-de-Tomkyns, en "Punch".
Nube de desprestigio.
Exterior frío, británico y flemático.
Aguas profundas del viejo romance.
Sectas opuestas.
"Lady into Fox".
Apoyar el libro con el épergne.
Tono quejumbroso.
Equívoco tono de amenaza.
Tono de burla y triunfo.
Una broma refinada.
Su expresión amable se tornó maliciosa.
Pretensión de esmerada burla.
Tener mayores reservas, para sacar partido.
Una idea geopolítica de echar fuera del país.
Pesado papel de luto victoriano.
Su sutil matiz de desprecio, inspirado por mi disponibilidad.
Una tertulia fastuosa.
Un tono apenas perceptible de desprecio.
Galletas Bath Oliver.
Expresión sombría.
La discrepancia ponía de manifiesto un profundo e inquebrantable abismo.
Rodeados de numerosos pequeños fardos y con un aire de paciente sumisión a la autoridad, como viajan los pobres de los países del norte.
El piano nobile estaba bañado totalmente por el sol, que iluminaba con magnificencia los frescos de la escuela de Tintoretto.
Expresión atenta.
Un matiz de profundo aburrimiento.
Un volcán de odio.
Amable tono burlón.
Hostilidad defensiva.
Estremecer las raíces de la amistad.
El turista victoriano de visión condescendiente.
Gesto posesivo.
Absorbente conversación.
La personificación o la parodia del poder y la prosperidad.
Adoptó una actitud beligerante e inició una queja confusa.
Disfrutar la propia eficacia.
Leer demasiado a Maritain y muy poco a Hegel.
Los hermosos viejos ojos semejaban buscar un punto en el horizonte lejano y sus labios se cerraban con clásica expresión de pesimismo.
Fragmentos de conversación vuelven a mi mente.
Sabor de "Alicia en el país de las maravillas", propio de la teología.
Jugar al mah-jongg.
Máscara severa de cristal de roca.
Sensación de desaliento.
Marcados por el hierro que los destinaba a la destrucción.
Bajo un cielo estrellado, que nadaba locamente entre las torres.
Espantosamente aburrido.
Expresión de cautela.
"Diario de un don Nadie", de George y Weedon Grossmith, publicado en 1892.
Un paisaje lunar de lava estéril.
Detalles vitales, que atraen la atención cuando están en juego asuntos más graves.
La atmósfera de tensión reinante.
Ironía dulzona.
Expresión furiosa.
Una partida de báciga.
Los fantasmas notan la falta y buscan sin ilusión cuando van a los lugares donde habían enterado los tesoros que precisaban, para pagar su viaje al más allá.
Largo cautiverio en los palacios de coral sin sol y las ondulantes selvas del fondo del océano.
En la vida, las separaciones no suelen ser definitivas, bruscas.
Letra afrancesada de colegiala.
Hasta que la atención hubiera decaído y uno tuviera la aptitud de escuchar con un solo oído.
<<Clínicamente malvado>>, <<insensible y cruel>>.
<<No importa lo que la gente diga de ti, con tal que no te llame pastel de pichón y te devore>>. Un dicho.
Un disgusto económico.
Ser rico a la manera que lo es la gente que no hace nada con su dinero.
Las restricciones del beneficio.
La hora apropiada de las confidencias.
Una boda <<a hurtadillas>>.
Apunte mental.
Acongojado por una vieja pesadumbre.
Exigir horizontes amplios.
El vendedor sacaba gemas guardadas en saquitos de una caja fuerte y las exponía sobre un escritorio. Otro, en otra trastienda, hizo el diseño para la montura del anillo.
Expresión astuta.
Dormir con los pies en dirección al este, porque allí está el cielo.
Expresión vacía.
Expresión feroz.
Hablar desapasionadamente, casi con brutalidad, con esa fruición que manifiestan los hombres de ciencia, por limitarse a lo esencial, por ir reduciendo su actividad hasta la esterilidad.
Incluir organización en la situación económica.
Esas memorias, que son mi vida -porque no poseemos nada con verosimilitud, excepto nuestro pasado-, me acompañaron siempre.
Sentir vibrar con vitalidad.
Creciente experiencia técnica, entusiasmo por el tema, independencia de los conceptos populares.
Un síntoma de la decadencia.
Estilo inglés, reticente y delicado.
Volver a la memoria.
Peculiar encanto.
Mundos separados, pequeños planetas giratorios de referencias personales.
Encuentros, cuando se experimenta que el tiempo ha edificado líneas de defensa, camuflando los puntos vulnerables y dispuesto un campo de minas en los accesos, excepto en algunos muy concurridos, de manera que sólo podemos hacernos señales mutuas desde los dos lados de las alambradas.
Flema británica.
Una alegre sensación de expectativa.
Hablar con medias frases, palabras aisladas y frases hechas, según la jerga contemporánea.
Una discreción a escala británica.
Las ternuras llegarían con las golondrinas y las flores de tilo.
Las incesantes e indiscriminadas alabanzas me habían impactado como una sucesión de vallas publicitarias.
Intenso menester inglés de ser educado.
La inelegante hora de las cinco.
Rebozar encanto inglés, jugando a hacer de tigre.
El encanto es la gran plaga de los ingleses. Corrompe y mata todo lo que toca. Mata el amor; mata el arte.
El pelo color de noche.
El atardecer tranquilo, perfumado de tilo.
Áridas excursiones anuales hacia las convenciones.
Sombrías memorias de infancia.
Aura fría, torpe y distante.
Emanaba ondas magnéticas de incomodidad, creando un charco de malestar a su alrededor, en el que flotaba con la serenidad de un tronco.
Reparar el error.
Viejo zorro presumido.
Atracción ardiente.
Misterioso torrente de pena.
Expresión trillada.
Leyendo plácidamente una novela policíaca.
Calidad de invitado.
Gran cascada de lágrimas.
La mantuve a distancia con el brazo y bajó la cabeza, acariciándome la mano en su hombro como un gato, pero a diferencia de un felino, depositó una lágrima. Gata sobre el tejado.
Cualidades, la cordialidad y la impetuosidad.
Cajas de castaño negras de los abogados.
Tal vez no seamos más que meros paradigmas y que esta tristeza, que en ocasiones nos envuelve, nazca de la ilusión de nuestra búsqueda, cada uno en torno y más allá del otro, vislumbrando de cuando en cuando la sombra que dobla la esquina un paso o dos antes que nosotros.
Tristeza mágica, actitud frustrada.
Las actas de transferencia de los títulos de propiedad, transcritas y listas para ser firmadas.
El aspecto andrajoso que acompaña al agotamiento máximo.
Frases solapadas y maliciosas.
Reproducir la conversación.
Poner el testamento al día, lleno de anomalías y anacronismos.
Un bache de días malos.
La sombra de la traición, el saber hasta qué punto eran precarias las justas ilusiones de los dos, era totalmente unilateral.
Breves fluctuaciones en el rápido curso de su declive.
Un incidente indecoroso.
Feroces humores.
Un rechoncho y jovial irlandés.
Expresión de asombro inocente.
La furia o la venganza.
La oscuridad y la soledad semejan la muerte.
Vivir sin respirar, como sapos en el carbón, en las profundidades de la mina, sin ningún problema.
Expresión imperturbable, inocente, práctica.
Conversación refinada.
Expresión culpable.
(Retorno a Brideshead)
Orton
Waugh, "Black Mischief". Irregular.
Un toque Evelyn Waugh.
Hitchens
Evelyn Waugh se esforzó al máximo para que sus novelas argumentaran la defensa de las actuaciones de la gracia divina. Con su novela "Retorno a Brideshead" los dos protagonistas Sebastian Flyte y Charles Ryder el primero de los cuales es heredero de una añeja aristocracia católica reciben la visita del padre Phipps quien cree que todos los jóvenes deben mostrarse apasionados con el criquet. Se desengaña de esta idea.
El intelectual católico Evelyn Waugh.
DAPHNE DU MAURIER
Sueño, fuerza sobrenatural.
Arteros métodos de la naturaleza, reconquista, extensión.
Hiedra enemiga de lo grácil.
Sensación de miedo, inquietud furtiva, ciego e insensato pánico.
Terror, soledad y angustia intensos.
Conflicto de opinión o reflexión.
Rescatando con la memoria, como si fuera un puente, el abismo de los años.
Monopolizar la conversación.
Fiebre, pejiguera.
Bullicio, definitivo en una partida.
Lluvia de mal agüero, plomizo cielo de Londres.
Hayas copudas.
Perorata disimulada.
Extraño pedazo de tiempo.
Camino que conducía al pasado.
Regatas de Kerrith.
Secreta abundancia.
Tema de disertaciones.
Serie de sueños inconexos.
Fondo del miedo.
Ola de entendimiento.
Acusación reforzada.
Prueba de acusación.
Ignorar la acusación.
Las mariposas tejerían sus locas danzas en las praderas.
Motivo natural para el suicidio.
(Rebeca)
Cuarto, alacena.
Existencia real.
Ciudad secreta.
Apreciar el valor del dinero.
Los días transcurrían sobre el tiempo.
Retazos de conversación.
Sentido del mercado.
Simulado requerimiento.
Recitaciones à deux.
Esencia y responsabilidad del negocio.
Lado financiero del negocio, beneficio garantizado.
Abandonada en la desesperada orilla de su existencia.
Calibrar el valor de la propiedad en el mercado.
West End, centro comercial.
Sensación de angustia y terror.
Punzante sensación en el estómago.
Hemoptisis, tuberculosis.
Utilizar como a un galeoto.
Cinismo y cálculo francés.
Dinero, extensa demostración de poder.
Fuerza de la herencia.
Fresas tempranas.
Grado de inteligencia, que permita seguir avanzando.
Punto crucial de la existencia.
Consejos trimestrales.
(¡Adelante, Julio!)
En otros tiempos, solían colgar a los criminales en Four Turnings. Hoy día los llevan a Bodmin, tras haber sido enjuiciados imparcialmente por el tribunal.
Fuerza penetrante del sol.
Existe una dolencia especial del cerebro, cuando se ha formado un tumor o crecimiento, que provoca alucinaciones en la mente del paciente. Se imagina que le están acechando, que la persona más allegada se ha vuelto hacia él.
Criados y colonos de la hacienda.
Rosa de azafrán.
Acusar de pretender humillar.
Disposición de desaliento.
Manifiesta tranquilidad que estaba lejos de sentir.
Tipo de vergüenza.
Acusación de prodigalidad, derroche.
Réplica para silenciar la apreciación.
Curiosidad de la persona que lleva años dormida.
Creaciones justificadas.
Perspectivas de una transformación política.
(Mi prima Rachel)
Humildad exterior.
Grado de intimidad.
Peregrinos sin meta.
Fenómeno del subconsciente.
Horrores del sueño.
Escasez, un círculo de referencias estrecho y puntilloso, donde sólo importan las distinciones.
Correr como una curiana, cucaracha, insecto.
(Nunca volveré a ser joven)
Grado de eternidad.
Ánimo arraigado en África y los países orientales; sólo ante nuestros ojos desconfiados de occidentales, semeja imposible la desaparición de cosas tangibles, como son las personas de carne y hueso.
Relumbrante mundo de fantasía, carente de ternura y quietud.
Inimitable silencio peculiar de las montañas.
Mallas de la vida doméstica.
Hidalgo local.
Amor sin emoción.
(La Montaña de la Verdad)
Sanders
Barbara Cartland, Frank Yerby, Daphne de Maurier, Elsie Lee,
Tomalin
Los personajes de Du Maurier, personas atractivas con un exterior maravilloso pero por debajo de la superficie no se muestra la compleja criatura interior.
Tomalin
Los personajes de Du Maurier, personas atractivas con un exterior maravilloso pero por debajo de la superficie no se muestra la compleja criatura interior.
MACLAREN-ROOS
Para colmo de la pronunciación.
Una gran pelota de goma pintada de rojo, amarillo y azul con un increíble rebote.
Una locomotora a cuerda o la réplica de un automóvil con una capota que se podía levantar y bajar.
La expresión perspicaz de un juez.
Peonza. Trompo.
(El Lejano Oeste)
PATRICK WHITE
Aura que dan las riquezas heredadas y la buena posición.
Injuria moral.
Panorama sin estropear, aunque empezaba a iniciarse ya el desarrollo.
Aguacates rellenos de gambas.
Cartas de Paul-Louis Courier.
Núcleo de perseverancia. Aura.
Presencia, sensación de posesión.
Amarillo verdoso de los frutos y plantas carnosas.
Hundirse en las aguas del tiempo.
Ungir de favor.
Alegría anatolia.
La edad es una gran quebrantadora de ilusiones. Al final me permito dominar por un conjunto de nimias vanidades.
La actitud supone las nueve décimas partes del todo, según la filosofía india.
Un nombre es el suavizador de la amistad.
Nemo. Nadie.
Prueba genealógica.
Tipo de personas que difunden el desaliento y el dolor.
Tarea con soplete oxiacetilénico, actividad vigorosa.
Escribir con estilo de mano intrépida.
Costumbres espinosas de su categoría, que le ayudaban a soportar la vida diaria.
Rouli, rouli mou! Arrullar.
Naturaleza poco colaboradora, irreal.
(Los calcinados)
JAMES HADLEY CHASE
Novelas policíacas con el pseudónimo de Raymond Marshall.
Instinto innato para el peligro.
Oscuridad del ciego.
Peligro, instintos agudizados.
Movimientos exactos y terminantes.
Seguido burr-burr del sonido de la llamada del teléfono.
Ojos de hurón.
Apreciar la situación y los riesgos.
Barco del canal Calais-Dover.
Un apartamento de dos ambientes en Chelsea.
Empleo lucrativo.
Actividad no honesta, difícil, no ética.
Equipamiento de una expedición al matorral africano.
Mercado especializado.
Una fortaleza tiene su punto débil si se sabe por dónde buscarlo.
Harto de la forma mezquina de vida.
El dinero no era ninguna objeción.
Nada es imposible teniendo una cantidad ilimitada de dinero y cerebro.
Secretario y valet.
Operaciones complicadas y lucrativas.
Operaria ideal.
Se debe comer lo que cada país ofrece.
Comida danesa. Camarones daneses y pechuga de pato al vino, tostadas y mantequilla.
Actividad exigente, peligrosa dentro de las leyes del país.
Ojos reflexivos, astutos, calculadores.
Arte de la defensa personal.
Evaluación sobre la persona.
Convenios de dinero en Londres.
Pacto. Un salario más un porcentaje de las ganancias que involucraran colaboración, para ser pagados por un banco suizo exentos de impuestos.
Demostrar rápidamente valor.
La fusión comercial naval ofrecía al cliente un provecho neto del mercado de acciones.
Transformación de dinero de la información.
Tostada por el sol de Suiza, color marrón dorado.
Administrar una reprimenda.
Omega de oro.
Ojos redondos como grosellas.
Alto título de economía.
Deslizarse un galeón a plena navegación.
Su expresión mostraba un suave atractivo, pero su astuta mente reflexionaba.
Muy difícil como conseguir información de las esfinges.
Su mente actuaba diligentemente.
Útiles contactos.
Acción rápida.
Una cantidad de personalidad como un gato ahogado.
Conducir con experimentada garantía.
Devastadora angustia de deseo.
Se entregó a la lujuria animal.
Absorbió la conmoción, su entrenada mente buscó caminos y materiales.
El espionaje y la delación que tienen lugar con los grandes negocios de hoy día.
Clavel rojo, un símbolo de status.
Mundo de erotismo de colores.
Peso de la culpa de su traición.
Lunes negro, desastre.
Incurable optimista.
Amable y expansiva disposición de ánimo.
Puerta de acero macizo, cerradura con reloj, se coloca a un tiempo concreto y el dial que cuenta el tiempo a otro.
Cofre médico.
Genio financiero.
Transpiración de los ojos.
Volar de buitres circular, pacientemente.
Desgraciados que economizan dinero. Dan la patada inicial y algún otro desgraciado recibe el beneficio.
Ser económicamente libre.
Valorar la libertad.
Menester de una vida grata. Lujo esencial.
Sueños imposibles agradables.
Dinero de valores de una cuenta numerada en Berna.
El agua contiene bacterias mortales.
(El buitre paciente)
Novelas policíacas con el pseudónimo de Raymond Marshall.
Instinto innato para el peligro.
Oscuridad del ciego.
Peligro, instintos agudizados.
Movimientos exactos y terminantes.
Seguido burr-burr del sonido de la llamada del teléfono.
Ojos de hurón.
Apreciar la situación y los riesgos.
Barco del canal Calais-Dover.
Un apartamento de dos ambientes en Chelsea.
Empleo lucrativo.
Actividad no honesta, difícil, no ética.
Equipamiento de una expedición al matorral africano.
Mercado especializado.
Una fortaleza tiene su punto débil si se sabe por dónde buscarlo.
Harto de la forma mezquina de vida.
El dinero no era ninguna objeción.
Nada es imposible teniendo una cantidad ilimitada de dinero y cerebro.
Secretario y valet.
Operaciones complicadas y lucrativas.
Operaria ideal.
Se debe comer lo que cada país ofrece.
Comida danesa. Camarones daneses y pechuga de pato al vino, tostadas y mantequilla.
Actividad exigente, peligrosa dentro de las leyes del país.
Ojos reflexivos, astutos, calculadores.
Arte de la defensa personal.
Evaluación sobre la persona.
Convenios de dinero en Londres.
Pacto. Un salario más un porcentaje de las ganancias que involucraran colaboración, para ser pagados por un banco suizo exentos de impuestos.
Demostrar rápidamente valor.
La fusión comercial naval ofrecía al cliente un provecho neto del mercado de acciones.
Transformación de dinero de la información.
Tostada por el sol de Suiza, color marrón dorado.
Administrar una reprimenda.
Omega de oro.
Ojos redondos como grosellas.
Alto título de economía.
Deslizarse un galeón a plena navegación.
Su expresión mostraba un suave atractivo, pero su astuta mente reflexionaba.
Muy difícil como conseguir información de las esfinges.
Su mente actuaba diligentemente.
Útiles contactos.
Acción rápida.
Una cantidad de personalidad como un gato ahogado.
Conducir con experimentada garantía.
Devastadora angustia de deseo.
Se entregó a la lujuria animal.
Absorbió la conmoción, su entrenada mente buscó caminos y materiales.
El espionaje y la delación que tienen lugar con los grandes negocios de hoy día.
Clavel rojo, un símbolo de status.
Mundo de erotismo de colores.
Peso de la culpa de su traición.
Lunes negro, desastre.
Incurable optimista.
Amable y expansiva disposición de ánimo.
Puerta de acero macizo, cerradura con reloj, se coloca a un tiempo concreto y el dial que cuenta el tiempo a otro.
Cofre médico.
Genio financiero.
Transpiración de los ojos.
Volar de buitres circular, pacientemente.
Desgraciados que economizan dinero. Dan la patada inicial y algún otro desgraciado recibe el beneficio.
Ser económicamente libre.
Valorar la libertad.
Menester de una vida grata. Lujo esencial.
Sueños imposibles agradables.
Dinero de valores de una cuenta numerada en Berna.
El agua contiene bacterias mortales.
(El buitre paciente)
VICKI BAUM
Abandonando a un lado sus preocupaciones particulares volvió a las otras profesionales.
Separar los ojos con inquieta espera.
La flexible prestancia de un felino o de un campeón de tenis.
El rumor de la gente.
Se encogió de hombros como buen experto del mundo.
Perfil de galgo.
El mundo no era más que materia deleznable, impalpable e inconsciente. Se caía de la nada a la nada y al fondo no había más que tinieblas.
Era de una cursilería apabullante y el conjunto tenía un aspecto grotesco, mísero y sumamente extremado.
Se encogió significativamente de hombros.
Sorprender desagradablemente la noticia.
Tono angustioso.
Mezclarse con la conversación.
Abrumado con un cansancio muy particular como el de un corredor que llega a tocar con su pecho la cinta blanca de la meta.
Esperar vagamente otra cosa.
Tonos violentos.
Se obstinó como una mula.
Una agitación y una impaciencia de fiebre.
La escritura cursiva y perfilada de un contador.
Dar a la letra una amplitud de los rasgos que verdaderamente conmovía.
Era un idealista con verosímiles tendencias a la experiencia humana.
La delicada piel de un anémico.
Un espeluznante propósito concebido con fútiles motivos.
Un potentado financiero.
Un no con carácter irrevocable.
La audacia de la desesperación.
Saludaron con la bella armonía de los cuerpos habituados a la actividad de conjunto.
Una entonación desesperada.
Gestos de condenado.
Resplandeciente, hermosa, sorprendente y ágil como una flor.
Una reverencia de otros siglos.
Insistencia infantil.
La cara muy seria del que lleva mucha prisa.
El aspecto de seriedad de un ser humano ocupado.
Esta historia está dando más molestias de lo que vale para terminar con una plancha colosal.
El que no se arriesga no pasa la mar.
Un francés encantador, pero algo afectado como suelen enseñar los colegios jesuitas.
Un movimiento instintivo de protesta.
Un paso discreto y respetuoso.
Los berlineses con el sombrero echado muy atrás hablan a gritos gesticulando mucho.
Una dulce, amarga y triunfante libertad se apodera de aquellos que saben que van a perecer pronto.
Un ligero desdén no exento de complacencia.
El tono cortado de elegante hastío de la vida.
Una inmensa plegaria, la espera, el deslumbramiento, la curiosidad, la sed de vida del que siente cerca la muerte.
Tropezar con una aventura.
Una entonación extraordinariamente animada.
Gentes distinguidas.
Los gestos estudiados, lentos y precisos que le caracterizaban.
Durante el curso de la discusión el dinero contante y sonante podía tener su utilidad.
La actitud ante las circunstancias.
La mentira es muy corriente con los negocios.
Tono consolador.
Tomó algún tiempo para reflexionar, lo cual suponía para él un gran esfuerzo.
Era una buena persona el director general, correcto, íntegro, de moral limpia. Pero no era ningún genio desde el punto de vista de los negocios porque carecía de fantasía, de talento persuasivo, de médula.
La tensión arterial.
Inconsciencia senil.
Un célebre jurista para la materia comercial.
El ánimo lleno de propósitos fantásticos de los que tenía que librarse a todo trance.
Murmurar con cara de circunstancias.
Los dolores torturando y atormentando su pobre estómago de moribundo; su estómago perdido, enfermo, que destilaba secretamente y sin freno los venenos mortales que le conducían lentamente a la muerte.
La <<Gaceta de Berlín de Miry>>.
Escoger el momento psicológico.
La estúpida costumbre de preguntar lo que sabía perfectamente, una amplitud inútil y un carácter pedante y confuso.
Escribir vagamente.
Con un ademán familiar girar sobre su dedo el anillo.
Enseñar a título rigurosamente confidencial.
Tono de súplica.
Accesos de ira.
No soy partidario del bluff (montaje propagandístico).
La suma para cubrir las compras de las acciones hecha estaba sentada a la boca de su estómago.
Afuera brillaba el sol y un hombrecillo mísero y andrajoso vendía violetas.
Estúpidos compromisos.
Una entonación más grosera que sorprendida.
Al abrir la puerta una nube de humo de tabaco escapó semejante a una enorme serpiente azul.
Manifestar pruebas de mal humor.
Razones mal definidas.
Una cara preocupada y chusca.
El color y el brillo, los reflejos de claridad y de sombra del álamo viejo.
Después del sueño anestésico del narcótico vienen el despertar y las náuseas y los dolores incesantes.
Las vaporosas regiones de la morfina.
Una ola de amargura que tiene que tragar.
Los relojes siguen galopando como caballos.
Tragar un sello de veronal. Después empieza a flotar sobre las nubes de Morfeo y queda dormida.
El pesado sueño de veronal.
Amabilidad relativa.
Separando con un pequeño movimiento de jiu-jitsu la amenazadora mano.
Domado a razón de su voluntad.
Tono gruñón.
Burlonamente devorado por la envidia.
Manifiesta simpatía.
Crear una coartada elegante y trivial.
La encendida alegría del cazador, del luchador o del alpinista.
Los <<Tre Cime>> de los Dolomitas.
Reunió sus fuerzas, se encogió y dando un salto de salmón se lanzó al vacío.
Tono deferente.
La fiebre del cazador le invadía el ánimo.
El entarimado crujía con la malicia de una persona.
El olor indefinible que Berlín exhalaba el mes de marzo, la esencia y la humedad del Tiergarten.
Sintió tal terror que las arterias de su cuello empezaron a latir con violencia.
Un acceso de loca temeridad.
Tono aburrido.
Economizar el chocolate del loro porque el deficit era bastante cuantioso.
El empaque de un perfecto ser mundano.
Spassibo. Gracias, ruso.
La cara gesticulante y descompuesta de una alegría rayana con la locura.
La suerte negra con sus complicaciones.
El deseo de fumar un pitillo iba tomando caracteres agudos y enfermizos.
Biedniaia Malenkaia. Pobrecita, pequeñita mía, nombres afectuosos acariciadores de otros tiempos.
El murmullo adormecedor del veronal y la indiferencia que provoca la droga amistosa.
Una cólera rabiosa y loca.
Sentía el peligro como un goce, una embriaguez, una caída bajo el infinito de un sueño.
Los recuerdos brumosos del veronal.
Su vida pasó por su imaginación como un expreso vacío.
El instante que llega el insondable fin de la vida.
Una expresión vaga, de gran asombro y casi dichosa.
El encanto frágil como un cristal.
La jerga soez de las germanías.
La frágil palabra amor.
El valor de los regalos.
Vértigo de gratitud.
Una circunstancia totalmente ajena y opuesta a su programa.
Reflexiones ajustadas y atinadas.
No le gustaba aparecer ridículo ante sus propios ojos y odiaba el sentimentalismo.
Presentir vagamente.
Expresión de cansancio.
Buenos días. Dobroie outro.
Un derrame sinodial de la rodilla.
La fiebre de los viajes.
Compresas de licor de Burrow.
Disputar con un francés turbulento.
Transmitir un telefonema.
Poner un telegrama urgente.
Gracias. Bolchoie passibo.
Vegetaremos con un dolce far niente y nos embruteceremos a fuerza de gozar y sentirnos dichosos.
Revestirse de dignidad mundana.
El olor indefinible de esa perpetua vibración de la vida entre extranjeros.
Ladinos despertadores.
Las alegrías de la existencia.
Actitud discreta y correcta.
Una pluma de malaquita verde con depósito de tinta.
La manera reservada y de verosímil manera incrédula de los viejos astutos.
Arduos cálculos.
La condescendencia del que no pisa terreno firme.
Los valores comparativos de las acciones de las sociedades experimentaban una profunda alteración. El alza sorprendente de las acciones había modificado la transacción.
Ventajistas, gente poco seria y de manga muy ancha.
Preparar una réplica para poder soltarla de memoria.
Reflexionar febrilmente.
Elementos vagos e imponderables.
Una perspectiva prometedora.
Hay muchos rumores que valen más dinero que algunos contratos firmados reglamentados.
Disimular un movimiento de irresolución.
Un cerrado gesto de inteligencia obtusa.
Su fisonomía tenía una expresión profundamente abstraída.
Un ademán reflexivo.
El ánimo le daba alas.
Las nubes de los sueños.
Al vestirse se sintió fresco y ligero como si le nacieran alas.
Estaba ocupado como una guía de extranjeros, como un mentor, como alguien importante y solicitado.
Una fricción con vinagre de alhucema (espliego).
Una impaciencia radiante y dichosa.
Circunstancias dichosas.
El miedo de que le presenten a uno la cuenta del carbonero.
Caviar de Dresde.
Reventar de orgullo como un usurpador.
No calcule, que se hacen cuentas falsas.
Circunstancias imprevistas.
Calambres de estómago.
La ligereza es casi un vértigo inherente a las prodigalidades y atraviesa la muralla detrás de la cual ha vivido.
Impresionado con el fragor de una tormenta.
El pedacito de estómago que le quedaba quería salir por la boca.
El acre y espantable goce del peligro.
El bálsamo de vida de Hundt.
El fresco brumoso de marzo.
La cabeza vacía de un sonámbulo.
Sentir el valor de una ilusión.
Barruntos de cicatería.
Tono desenvuelto.
Abismado con sus reflexiones.
Un gesto burlón y lastimero.
Gesto de disgusto.
Evocar con la memoria.
Se hundió bajo la negra sima de un sueño reparador.
Frenética persecución de la vida.
Un vértigo algo extraño, pero nada desagradable.
Maniobra fraudulenta.
La reminiscencia de un sueño que soñaba con frecuencia.
Un triunfo fortuito, un ser intrépido y audaz ávido de aventuras.
Accesos de cólera rabiosa.
Un gesto de súplica y concesión.
Esa expresión de gato sorprendido y caprichoso que tienen los pensamientos dentro de las macetas.
Abría las fosas nasales, que tomaban una expresión redonda.
Se mantuvo a la altura de las circunstancias.
Tono completamente burocrático.
Una liebre estirada y tiesa que se hiciera la muerta dentro de un surco.
Es peregrino el caso y tiene gracia por arrobas.
Tono gangoso.
¿Es usted de otra sustancia superior a la mía?
Tono adulador.
Emocionado, envuelto de una ola de tierna pasión y agradecimiento.
Recia dentadura de cachorro.
Una tempestad de delirio.
Pánico loco.
La zozobra va pegada al placer como la nuez a su cáscara.
La existencia ha ido cayendo al vacío como a través de un cuentagotas.
Esforzarse con la suerte.
Algún olfato para la suerte (uno de los talentos de su vida aventurera).
El sentido del valor de las cosas.
Perderse a lo largo de un laberinto como una selva encantada sin luz ni senderos.
Las cejas fruncidas y vacilantes al borde de su existencia comprometida.
Una isla colmada de aventuras y misterios.
El frágil abismo de las palabras no pronunciadas.
Una conversación llena de equívocos.
Anotar con la memoria.
Los velos que oscurecían su autoconciencia.
Hacer oídos de mercader a la aflicción.
Una expresión de agradecimiento y de consentimiento tácito.
Tono tranquilizador.
Una escritura de patas de mosca.
Arrastrado lejos de las tranquilas riberas de la vida al torrente impetuoso de los hombres de edad.
Tono desabrido.
Existenciadesesperante.
Gesto de orgullo y arrogancia.
Mezclando las cosas importantes y las pamplinas, las verdades y la fantasía, las realidades y los chismes oficinescos.
Manifestación de brutalidad.
El singular perfume de violetas del primer beso.
La inmensidad sin orillas de su imprevista aventura.
Una vaga impresión.
Fija expresión de infinito asombro.
Una extraordinaria expresión de sorpresa tímida y sin límites.
Viendo claro con la memoria.
Animada a pesar suyo con una gratitud animal.
Una masa inesperada de fuerza y acometividad.
Evocar con la memoria.
Ánimo sano y maleable.
Un calambre de la conmoción.
La maravillosa ocasión de una aventura.
Las improvisaciones habituales de su inquieta vida de mariposa.
Existencias depravadas después de un pasado próspero y brillante.
La congestión liberadora.
Un grado extremo de exaltación.
Una extraña y fraternal simpatía.
Una sombra de respeto.
Tono acre y áspero como la denegación de un permiso.
Tono de confidencia.
El idioma correcto de los revisteros judiciales.
La asfixiante emoción del triunfo.
Un mendigo de misericordia.
Quebrantado de emoción.
Más larga o más corta la vida solo vale lo que se saca y dos días de plenitud pueden ser más largos que cuarenta años de insípida existencia.
(Grand Hotel)
Manos. Ademanes acusadores al aire.
Atractivo manifiesto.
Manchas hepáticas.
Afectada humildad.
Tono ofensivo, perentorio.
Esplendor patricio.
En la parte interior de sus párpados se reflejó una confusión de figuras caleidoscópicas. Venían, se deslizaban y desaparecían como las placas de una linterna mágica.
Ridícula enfermedad de los nervios.
Bromuro para tranquilizar los nervios, benzedrina para aclarar su memoria, adrenalina para elevar su presión arterial, extracto tiroideo para regularizar la defectuosa marcha de su tiroides, hormonas para mantener su empuje y fuerza agresiva.
Rutina y simulación.
Ola de alivio.
Poner de manifiesto la amargura.
El dinero transformó el mundo en un lugar sucio.
La riqueza arruina los instintos refinados.
Distinguido y desinteresado.
Consciente de su culpabilidad.
Sistemas rudos.
Serenidad y agudeza.
Sensaciones. Sed y gratitud.
Enamorado, trastornado, gaga, potty.
Estrellas que brillan con mayor fulgor, a pesar de hacer ya un tiempo inconmensurable que se han extinguido.
Sistema adecuado.
Callejuelas de un mercado de Nápoles.
Condición insospechable.
(Entreacto)
Ana Kontroversy
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