miércoles, 15 de febrero de 2012

LA MELANCOLÍA Y EL SENTIMIENTO 2








Aristóteles
Los melancólicos tienen sueños verídicos.
(Ética Eudemia)


Menandro
Ataque de bilis negra, o melancolía, cuyo exceso se valoraba que llevaba a la locura.
Aristóteles
Los melancólicos tienen sueños verídicos.
(Ética Eudemia)


Lucrecio
A la manera que el dolor siente el ojo o la cabeza sin ser atormentado todo el cuerpo, el ánimo algunas ocasiones abatido es de melancolía y animado es por el regocijo sin que el alma ninguna novedad sienta a través de los miembros.
De sopor tus párpados sumidos con la muerte los siglos venideros no te molestarán dolores melancólicos.
(De rerum natura)


Horacio
También siento remordimiento de los banquetes con los que la melancolía, el silencio y los suspiros arrancados de lo hondo del pecho me delataban como enamorado.
El vino y el canto, dulces consuelos de la melancolía que deforma el rostro.
(Epodos)

Desiste de tus quejas melancólicas.
(Odas)


Ovidio
Gran melancolía me arrebata un furor muy semejante al que de la turba Eleida Baco envía.
(Las Heroidas)


Herodiano
El rey persa Ardashir o Artajerjes cayó con sus fuerzas sobre el ejército desprevenido y los rodeó como en una red. Cuando fue informado del desastre, Alejandro Severo estaba muy enfermo, ya de melancolía, ya de falta de aclimatación a la atmósfera, y le afectó terriblemente.


Maimónides
Enfermedades graves, las varias cualidades de melancolía y la epilepsia.


Villani
Abrumado con la melancolía cayó gravemente enfermo con fiebre y flujo.


Boccaccio
Si en las mujeres, alguna melancolía hija de fogosos deseos sobreviene, en sus mentes es forzoso que se guarde si nuevos razonamientos no la expulsan.
Coger gran melancolía y dolor.
Explicar el deseo y quitar de encima la melancolía y pensamiento de que procede la enfermedad.
La melancolía y luego el dolor me han transfigurado.
Sufrió gran dolor y desagrado, pero como su amor estaba en cubierto, todos ignoraban la razón de su melancolía.
Apareció triste y alicaído. Besándole y abrazándole, le preguntó la causa de su melancolía.
Dolida y melancólica.
Creciendo su amor y uniéndose una melancolía a otra, la bella joven enfermó y ostensiblemente se consumía de un día a otro como la nieve al sol.
Aleja la melancolía, recobra la perdida salud y alegría y reflexiona en ver recompensado tu amor.
Cesar en las melancolías, dolores y angustias.
Narraciones escritas para alejar la melancolía de las mujeres.


Chaucer
Según la medicina medieval, a los cuatro temperamentos: sanguíneo, colérico, flemático y melancólico, correspondían los cuatro líquidos o humores: frío, caliente, húmedo y seco, de un modo variable.
Andaba como si sufriera no una simple nostalgia de amor, sino una verdadera manía engendrada por algún humor melancólico dentro de su frente, donde la imaginación tiene su asiento  -  El cerebro se dividía en tres compartimentos. En el frontal residía la imaginación; en el central, la razón, y en el posterior, la memoria. La melancolía se ubicaba en la parte central.
Llegó el día de la partida: un día fatal y melancólcio.
Estoy cansado de escribir secuencias melancólicas.
Se ocupaban en darle todo el consuelo que podían en aquellas circunstancias, para que abandonase su melancolía.
El humor negro de la melancolía hace que muchos griten en sus pesadillas mientras duermen, al sentir el temor de osos o toros negros, o de ser arrastrados por diablos negros también.
De la mundana aflicción que se denomina melancolía, proviene el que uno se asquee de la propia existencia. Semejante pesar abrevia la vida humana antes de que llegue su hora por vía natural.
Sueños. El hombre es demasiado melancólico o demasiado miedoso.


Bandello
Enflaquecer de melancolía.
Echó de mi alma la melancolía que padecía.
Víctima de la melancolía, que minaba su vida.


Rabelais
Tras las tinieblas se pierden los cantores de las glorias de la corte y los trastocadores de nombres, pues cuando quieren con sus divisas significar ilusión hacen pintar una esfera -flores para la melancolía-, un banco quebrado para la bancarrota.
La noche es funesta, triste y melancólica. Pues es negra y oscura por privación.
Bebamos, abandonemos la melancolía.
El claustro de medicina era fastidioso y melancólico.
El ratón melancólico.
El apetito abre el orificio del estómago con un poco de melancolía agria que le transmite el bazo amonestando a desenfardar las viandas. El bazo lleva la melancolía.
Mi pronóstico es que por el camino no engendraremos melancolía.
La transfusión de los ánimos serenos o tenebrosos, aéreos o terrestres, alegres o melancólicos del médico a la persona del enfermo como opinaba Platón.
Triste, enfadado, enfurecido y melancólico Heráclito el llorón.
Reflexivo y melancólico, tristeza no acostumbrada.
Alejandro el Grande se inclinaba a levantar el sitio de Tiro con gran melancolía, porque veía una gran pérdida para su reputación.
Oír la causa de su melancolía.
(Gargantúa y Pantagruel)


Lavater
Algunos hombres han soportado una gran miseria y se han vuelto pesados y llenos de melancolía perturbado el ingenio.
Alguna provisión de melancolía.
Melancólicos, locos, temerosos y débiles de los sentidos.


Spenser
Muchos ministrales hacen melodía / Para ahuyentar la aburrida melancolía.
Las notas gorjeantes para ahuyentar la aburrida melancolía / Mientras se cantaba una canción.
Una severa melancolía hizo pasar su coraje.
Ni una sola vez se movió ni miró arriba; / Con el vil desdén y el rencor que roían / Su corazón en dos con triste melancolía / Como alguien que odiaba la vida y, sin embargo, despreciaba perecer.
Lleno de melancolía se mostró, / Cejas huecas y dobladas, ojos fijos y penetrantes / Semejaba loco o tonto / Llevado con cielos mal dispuestos / Cuando el oblicuo Saturno se sentó en la casa de las agonías.
Imaginé que no era amor sino melancolía.


Nash
Los dados ultimamente se han vuelto melancólicos como un perro.
Casta y melancólica.
La imaginaba con humor melancólico y la cortejaba llorando como corresponsal.
Luto y melancolía.
Los franceses caminan melancólicos con los brazos cruzados.


Shakespeare
Funestas melancolías.
El planeta Saturno influía sobre la melancolía. 
Nebulosa melancolía.
(Tito Andrónico)

Ah, melancolía ¿quién ha podido nunca sondear tu fondo, encontrar tu fango, mostrar en qué costa podía hallar puerto más sencillamente tu perezoso cuidado?
(Cimbelino)

Cruzar los brazos como los descontentos. Personajes de humor melancólico y sarcástico del gusto de los dramaturgos isabelinos.
Melancólicas lamentaciones.
Aire melancólico.
Prohibidas las sanas distracciones. Consecuencia, una triste, abrumadora, oscura melancolía, hermana de la siniestra e insondable desesperación precursora a su vez de la pesada y alucinante nube de pálidos delirios que empujan al suicidio.
Sitiado de negra melancolía había presado este humor sombrío y opresor a la saludable medicina del aire libre.
Distinguir la tristeza de la melancolía con una demostración familiar de sus efectos.
Oh tristísima melancolía ante la cual hasta el valor cede su puesto.
La melancolía es madre del frenesí.
Dada a la melancolía y a la devoción.
La melancolía de una ciénaga.

Áyax es melancólico sin causa y alegre frente todo buen sentido. Áyax tiene las réplicas de las cosas, pero las cosas están en él sin retorno.
(Troilo y Crésida)

A bordo de un barco para curar la melancolía y orearse.


Campanella
Aristóteles, "Problemata", cita a Hércules, Empédocles, Sócrates y Platón como tipos melancólicos.


Donne
Otorgo a los bufones mi melancolía.
(Sonetos y Canciones)


Jonson
Galeno (460 a. n. e.), partiendo de los postulados de Hipócrates, desarrolló la teoría de los humores, de cuyo equilibrio dependía la salud de la persona. Los cuatro humores -sangre, flema, cólera y melancolía- correspondían a los cuatro elementos, aire, agua, fuego, tierra. 
Los órganos situados debajo del tórax y próximos al estómago, el hígado o la vejiga, eran denominados hipocondrio y estimados la sede de la melancolía. Melancholia hypocondriaca. 
Burton, en su "Anatomy of Melancholy" (1632), señalaba que el coral, colgado del cuello, podía ahuyentar la melancolía y los temores.
Mirobálano. Burton señala sus propiedades, para combatir la melancolía y las fiebres.

Ha llegado la señora muy melancólica a casa
Y para recuperarse, desea hacerse a la mar.
(Volpone)


Burton

Saturno patrono de la melancolía.
Con melancólica soledad flotar.
La borraja y el eléboro / Plantas soberanas para purgar las venas / De la melancolía y alegrar el corazón.
La melancolía dulce o feroz.
Demócrito cansado, muy melancólico.
Demócrito con un libro de la melancolía y la locura con animales anatomizados para averiguar el origen de esta atra bilis o melancolía y prevenirla.
Mi señora Melancolía, mi Aegeria o mi malus genio.
Fui arrastrado fatalmente sobre esta roca de melancolía con esta corriente secundaria que se deduce del canal principal de mis estudios con el que me he complacido y ocupado en el ocio.
Aplicando lo que lee, agravando, apropiándose de las cosas generalmente dichas (como hacen los hombres melancólicos).
Locura, melancolía, delirio.
Los hombres son desafectos, melancólicos, locos, atolondrados.
Los reinos, las provincias, las familias son melancólicos como los hombres privados.
La melancolía se extiende a los vegetales y sensibles. La antipatía de la vid y el repollo, de la vid y el aceite.
Los codiciosos son los más locos, tienen todos los síntomas de la melancolía, miedo, tristeza, sospecha.
Las enfermedades que pertenecen a la sustancia del cerebro como frenesí, letargo, melancolía, memoria débil o Coma Vigilia, fantasía, imaginación, razón lesionada.
La melancolía es en su mayor parte silenciosa.
La melancolía de la disposición, impropiamente llamada equivocaciones.
La melancolía está con la disposición o el hábito. De la disposición es transitoria.
La melancolía fría y seca, espesa, negra y agria engendrada de la parte más feculenta del alimento y purgada del bazo es un freno para los otros dos humores calientes, la sangre y la cólera.
Fracastorius llama melancólicos a aquellos a quienes la abundancia del humor depravado de la cólera negra ha afectado y se vuelven locos y deleitan con las cosas pertenecientes a la voluntad u otras operaciones manifiestas del entendimiento.
Me aventuraré a través de las perplejidades y guiado con la pista o el hábito de los mejores escritores saldré de un laberinto de dudas y errores y procederé a las causas de la melancolía.
Un laberinto de ansiosas y solícitas meditaciones melancólicas.
Un hígado caliente y un estómago frío se colocan como causas usuales de melancolía hipocondríaca.
El mesenterio o diafragma es una causa que los griegos llaman phrénas porque con su inflamación la mente está muy turbada con convulsiones y vejez. Ofenden con la inflamación corrompiendo los humores y los ánimos con esta melancolía antinatural porque engendran ánimos fuliginosos y negros. La melancolía no natural produce locura, pero la natural siendo más fría e inmoderada produce una dulce vejez.
Con ese calzador de la ociosidad y la soledad voluntaria la melancolía de este demonio salvaje es atraída.
Los conceptos melancólicos producen diversidad de síntomas para varias personas. Son irregulares, oscuros, variados, infinitos, se puede hacer de la luna un abrigo nuevo como un verdadero personaje de un melancólico.
La risa afecta a los melancólicos, melancolía sanguínea.
La melancolía puede ser mitigada y mejorada.
Llevado con una agradable melancolía y vanas presunciones.
Alienar la mente del paciente melancólico con alguna invención artificial o alguna persuasión opuesta, quitar los objetos, causas, compañías, ocasiones y cualquier forma de molestarlo, complacerlo o divertirlo pasándole garantía y satisfacción.
La música es un remedio soberano para la desesperación y la melancolía.
Descontentos amargos y melancólicos.
Una cámara oscura y melancólica.
(La anatomía de la melancolía)


Butler
Sus lamentos dolorosos resonaron / Más melancólica y repetidamente / Que las rimas de pies abiertos de los pequeños poetas / Con sus tristes historias.
(Hudibras)


Racine
Esa melancolía, que he visto cómo sepultaba vuestro corazón, durante mucho tiempo.
(Andrómaca)

Sucumbir a la melancolía.
(Berenice)


Molière
Negra melancolía.
(El Amor Médico)


Otway
Evitad el ser humano singular, raro. Su ánimo es malo y su melancolía más fuerte que su razón.
(La Huérfana)


Fenelon
Ave melancólica de Atenas, el búho, cuyo vuelo miraban los de Atenas como presagio de la victoria, porque estaba consagrada a Minerva.


Swift
Las auténticas semillas del spleen sólo arraigan en los holgazanes, los que se dan a los excesos y los ricos. Dolencia en boga en el siglo XVIII, mezcla de depresión y melancolía.


Locke
Adán se da cuenta de que Lamech está más melancólico de lo habitual y se imagina que es por una sospecha que tiene de que su mujer Adah (a la que ama ardientemente) siente demasiada simpatía por otro hombre. Al cabo del tiempo, se descubre que la preocupación de Lamech procede de que ha matado a un hombre.
Aquellos que, aunque tienen en su memoria la mayor parte de los términos comunes de su lenguaje, nunca se han preocupado, sin embargo, en considerar qué ideas precisas son las que significan la mayor parte de las palabras, han tenido suficiente con algunas nociones confusas y oscuras; y a muchos que hablan con gran elocuencia de la melancolía, les quedaría muy poco, si uno les sugiriera que reflexionaran sólo en las cosas, y que dieran de lado a esas palabras con las que confunden.
En todos los tiempos podemos comprobar que existen algunos hombres en los que la melancolía se ha mezclado con la devoción.


Spinoza
Ruah. Odio y melancolía.


Beckford
El sonido del arroyuelo le llenaba de melancolía.
Con melancólico y tierno talante.
Voz dulce y, sin embargo, teñida de negra melancolía.
Aspecto melancólico y abatido.
Su mirada seguía fija, melancólicamente.
Nada significaban para mí aquellas maravillas naturales pues, en lugar de alegrar mi corazón, sólo prestaban ayuda para llenar mi alma de oscura melancolía.


Diderot
El ecléctico Plotino era un hombre melancólico y supersticioso. La extrema sobriedad, largas vigilias y disputas hicieron hervir la sangre de Porfirio y dirigieron su espíritu al entusiasmo y a la melancolía.
La virtud de Antístenes era pesarosa y melancólica, ya que acontece a aquel que se obstina en formar un carácter artificial y unas costumbres ficticias.
Heráclito, de naturaleza melancólica, inclinado a la soledad del retiro, derivó desde las cuestiones publicas, al estudio de la filosofía.
La virtud de Antístenes era pesarosa y melancólica, ya que acontece a aquel que se obstina en formar un carácter artificial y unas costumbres ficticias.
Cábala. Había ciertos sonidos de la música antigua, que impactaban profundamente los sentidos y animaban a un hombre agonizante, disipaban su melancolía, expulsaban el mal que lo había atacado y lo hacían caer en el furor.


Mme. La Fayette
Sin perjuicio de su melancolía, no dejó de mostrar a los ojos de todos, una belleza incomparable.


Thomasius
Los hombres melancólicos son avaros.


Shaftesbury
Existe una melancolía que acompaña a todo entusiasmo. Sea en amor o en teología (pues en los dos hay entusiasmo), nada puede suspender el pernicioso crecimiento de los dos, a no ser que se aleje la melancolía y que la mente disponga de libertad para escuchar las diatribas que cabe hacer a la ridiculez de todo exceso.
La aplicación de un remedio severo y el empleo de la espada o la autoridad pueden ocasionar más melancolía e incrementar la verdadera causa del mal.
Quienes no tienen aptitud para moderarse, sino que se entregan a sus variables disposiciones de ánimo, desconocen las dudas y escrúpulos teológicos y están rescatados de cualquier influencia instantánea de la melancolía devota o del entusiasmo, cosas que requieren reflexión y práctica mental, para fijarse en una disposición de ánimo y volverse habituales.
Caer en la melancolía o el entusiasmo.
Si nuestro intelecto está libre de la pasión que lo confunde, si las oscuras brumas de la melancolía no lo ofuscan o aturden.
(Carta sobre el entusiasmo)

Dosificar el humor como una suerte de fármaco ante la superstición y los espejismos de la melancolía.
Nuestro temperamento no nos inclina a reflexiones melancólicas.
(Sensus Communis)


Swift
Humilde tono melancólico.
Lancé sobre el mar una mirada afligida y melancólica.
Las auténticas semillas del spleen sólo arraigan en los holgazanes, los que se dan a los excesos y los ricos. Dolencia en boga en el siglo XVIII, mezcla de depresión y melancolía.
Lugares comunes, nuevos y elocuentes, que nos proporciona la splendida bilis. Horacio, Melancolía.
Spleen. Bilis, resentimiento, melancolía, hipocondría.
Volverse loco de melancolía, despecho y contradicción.

Melancólicas circunstancias.
Es un asunto melancólico para quienes pasean por esta gran ciudad o viajan por el campo ver las calles atestadas de mendigos.
(Escritos subversivos)


Winckelmann
La melancolía característica del país egipcio produjo los primeros eremitas. Al final del siglo IV, el bajo Egipto contenía setenta mil anacoretas.
(Historia del Arte en la Antigüedad)


Mandeville
El ostracismo de los griegos fue un sacrificio que los hombres valiosos hacían a la envidia epidémica y que se utilizaba como remedio infalible para evitar los males de la melancolía y el rencor populares. Una víctima del poder político suele acallar las murmuraciones de un país y la posteridad se asombra de las barbaridades de este tipo, que habrían cometido de encontrarse con iguales circunstancias.
El temperamento o la constitución significan la mezcla de los cuatro humores o principales fluidos del cuerpo, sangre, flema, cólera y melancolía, o de las cuatro cualidades, calor, frío, sequedad y humedad, las proporciones de las cuales, según la fisiología del día calificaban la disposición física y mental de un ser humano.
Temperamento avieso y melancólico.
La falta de formación del doctor Radcliffe era algo generalmente sabido, pero el éxito de su práctica y el peso de la opinión contemporánea indican el dominio de una aptitud médica poco corriente. Cuando asistía a la princesa Ana le dijo que no tenía más que melancolía.


Richardson
El papel melancólico de amante desgraciado.
Impelido con melancólicas ideas.
En este lugar melancólico mi alma está melancólica y la naturaleza que me rodea está melancólica y llena de tinieblas como mi alma.
Me siento melancólica y mis gallinazas y faisanes o la cascada me recrean.
Contener el alma las melancólicas reflexiones.
Los temores y las melancólicas reflexiones que me atormentan.
Un padre melancólico y cruel.
Melancólica beldad.
La dignidad melancólica de su andar y de su aspecto.
Un melancólico pícaro.
Un melancólico asunto.
Un melancólico aspecto.
Un genio melancólico y tiránico.
Alegre o melancólico el cuello de un licencioso está en peligro si no por parte de la justicia por la de su propio caballo.
Me exhortas a seguir escribiéndote para desvanecer la melancolía que te acompaña en esa forzada soledad.
Nunca había sabido César lo que era estar melancólico hasta que llegó a la altura adonde había llegado Pompeyo, al ultimo término de su ambición.
El ofensor ha pretendido inútilmente la noche entera distraerse de su melancolía y huir de él.
Una profunda y melancólica distracción.
La parte más melancólica de mi triste historia.
Respirar una profunda melancolía.
Encontrarás pocas gentes que quieran tener parte de tu género de felicidad melancólica.
Los accesos de melancolía y pesar.
Fatales excesos de melancolía y abatimiento.
Un humor triste y melancólico.
Cantar para divertir la melancolía.
Oh autoconciencia, melancólica traidora espiándome tras tus tinieblas.
Melancólico tirano.
El humor melancólico.
Caprichosa y de genio melancólico.
Pretender inútilmente distraer la melancolía.
Una profunda y melancólica distracción.
Una melancólica carta.
La fatal melancolía que me atormentaba.
Pasar ratos melancólicos.
La tristeza y la melancolía.
El empleo de enfermera es melancólico a proporción de la sensibilidad del sujeto que lo desempeña y exige muchos cuidados y tristes vigilias llegando a ser casi insoportable cuando el enfermo se aproxima a su fin.
(Clara Harlowe)

Escritos llenos de melancolía.
Apartar del ánimo la melancolía.
Distraer la melancolía, escribir y leer.
Y si ves que la melancolía está apareciendo o ha aparecido en tu rostro destiérrala instantáneamente y recupera tu alegría anterior.
Melancólica aunque instructiva historia.
Una aventura melancólica.
(Pamela)


Hutcheson
La belleza de los árboles, su fresca sombra y su aptitud para sustraer de la indagación han hecho de las arboledas y los bosques el retiro habitual de quienes aman la soledad, especialmente los melancólicos, los enamorados.


Smith
La pasión feliz nos interesa menos que el temor y la melancolía.


Hume
Superstición y entusiasmo. Debilidad, miedo, melancolía e ignorancia, fuentes de la superstición.
(Ensayos Políticos)


Burke
Reflexiones melancólicas, que nos llevan más allá de la mera superficie de las cosas.


Crébillon
Notar en los ojos una melancolía diferente de la que en ellos solía haber.
Melancólica condición en que la ha dejado la indiscreción.
El rigor causa mi melancolía.


Fielding
Perdió su viveza natural y su alegría, tornándose melancólico.
Presa de un humor melancólico.
La escasa luz que la luna arroja sobre las cosas no es la más adecuada para sugerir ideas de belleza, sobre todo para una imaginación que se sienta propensa a alimentarse de ideas melancólicas.
La cima de la colina es la más apropiada para procurar pensamientos melancólicos.
Me entregué a los efectos de la melancolía y de la desesperación.
La escena resultó triste y llena de melancolía, mi ánimo se abatió.
Disipar la melancolía de la soledad.
Temperamento melancólico, anhelar que resplandezca la justicia.
Triste y melancólica.
Actitud melancólica.
Se esfuerza en librarse de su melancolía.
Aspecto melancólico.
Se vio libre de la melancolía.


Austen
Melancólico recital.
Melancólico Dolor.
Menesterosa y melancólica Situación.
Melancólica soledad.
Melancólicas reflexiones.
Melancólica y venerable tristeza del castillo.
Melancólico menester de saber la verdad.
(Amor y amistad)


Sterne
Viajeros ociosos, embusteros, vanidosos, melancólicos.
Dulce mirto y ciprés melancólico. Aprendería el dolor en la tragedia de sus hojas caídas y me alegraría con las caricias de sus capullos.
Salir en busca de aventuras llenas de melancolía, como el propio Caballero de la Triste Figura.
(Viaje sentimental por Francia e Italia)


Smollett
Al delirio siguió una profunda melancolía y retraimiento.
Apoderarse una intensa melancolía.
Melancólico silencio.
Hundirse en la más profunda melancolía.
Calmarse y caer en una disposición de profunda melancolía.
Una tristeza silenciosa plagada de melancólicas reflexiones.
Disposición de meditación melancólica.
Expresión melancólica.
Tono melancólico.
Caí en una profunda melancolía y me eché a llorar desconsolado.
La melancolía y el abatimiento se apoderaron de mí.
Serie de reflexiones melancólicas.
Me sobreviene una profunda melancolía, que hace que me abandone por completo.
Una sucesión de reflexiones melancólicas se apoderaban de mi alma.
Disfrutar del melancólico deleite de un tierno abrazo en el momento de la despedida.
Cierto aire de melancolía en la expresión.
Poseído por una meditabunda melancolía.
(Roderick Random)

Melancólico y temeroso.
La alegría agradable al estar entreverada de una vena de melancolía.
Acosada de algunas dudas melancólicas que, no obstante, sería egoísta albergar antes de hacer más averiguaciones.
El ánimo teñido de una nota de melancolía.
Sujetos ridículos y motivos para la melancolía.
Triste y melancólica.
Dominado con la tristeza y la melancolía que le había causado la muerte de su mujer a quien había amado con un afecto fuera de lo común.
Era de esperar que al ver frustrados sus planes cayera bajo la indolencia y la melancolía, que han pasado factura a su salud y a su ánimo hasta el punto que semeja consumido.
El abismo de melancolía bajo es que estaba sumido desde hace mucho.
El repentino paso de la ciudad a la melancólica vida del campo.
Transportes de violento arrebato, melancólico objeto.
Ataques de melancolía.
(Humphry Clinker)


McPherson
Pretender la melancolía del alma con los cuentos de los que murieron.
(Fragmentos de la antigua Poesía recogidos de las Highlands de Escocia)

Los recuerdos melancólicos de Fingal vuelven al pasado.
(Fingal)

De las nubes desgarradas la luna muestra a ratos su visión melancólica.
(Los cantos de Selma)


La Mettrie
La melancolía, la bilis, la flema, la sangre, según su carácter, la abundancia y la diversa combinación de estos humores.


Malte-Brun
Carácter melancólico, torpe y brutal.


Burney
El idioma de la adulación y el incienso de la lisonja incluso siendo una herencia natural y un recurso del dedicador a mí solo me ofrecen el melancólico arrepentimiento de no haber osado invocar su ayuda.
Melancólicas circunstancias.
Hay algo vagamente melancólico dentro de mí al referirle nuestras ultimas aventuras.
Los melancólicos fantasmas de la imaginación.
Los ojos fijos con profunda y melancólica meditación.
Melancólicos ojos.
La insuperable melancolía.
La melancólica tarea de mudar la ropa de color con un traje de luto.
Me miraba con tal melancolía que realmente me daba lástima.
No imputes a una causa equivocada mi melancolía.
Arrancar de mi mente la melancolía.
La ternura melancólica.
Las circunstancias que provocan melancólicas reflexiones.
Un aire melancólico que me impresionó.
Un ensueño melancólico.
La posición melancólica.
(Evelina)


Edgeworth
Indiferente, irritable y melancólica.
Inspirar más melancolía que diversión.
Pálido, delgado, serio, melancólico.
Tierna melancolía.
El súbito paso de la alegría y la locuacidad a la melancolía y el mutismo.
La melancolía se prolongó hasta que comenzó a sanar.
La melancolía del genio.
Loco de melancolía por culpa de un predicador metodista.
Silenciosa y melancólica.
Arrebatos melancólicos y de ansiedad.
Un temperamento melancólico.
(Belinda)

Regalarme un paseo solitario y melancólico.
Un mal nervioso acompañado de una melancolía extrema.
Recaer bajo el silencio y la más negra melancolía.
Un ramalazo melancólico.
Llenó mi alma la melancolía que acompaña la solitaria grandeza.
El silencio y la soledad intolerablemente melancólicos.
Con una expresión melancólica.
Una calma muerta, exánime y melancólica.
Un ataque de melancolía lunática.
Ofrecer un melancólico relato.
Melancolía y despilfarro.
(Ennui)


Novalis
Hasta el valle a la sacra, indecible misteriosa Noche;
sorbe la brisa suave de la Melancolía.


Scott
Hábitos de abstracción y amor a la soledad, melancólica propensión.
Melancólica gravedad.
Melancólica pero pintoresca fábrica arquitectónica.
Tono melancólico.
Con la edad se había sumido en una desesperanza y una tristeza y melancolía inconsolables.
Tono de melancólica reconvención.
Manifestar una grave melancolía.
Melancólica sonrisa.
Una vaga melancolía, para justificar la cual no había hallado ninguna causa, amenazaba su salud y su razón.
Combatió los accesos de melancolía que le atormentaban de tiempo en tiempo.
Los melancólicos silbidos del viento a través de los pantanos.
¿Me reprochará mi aire melancólico?
Hastiado de lo que el mundo llama gloria y renombre, la esperanza se cifraba en encontrar una soledad donde pudiera alimentar la melancolía que debía acompañarle hasta la tumba.
Aire de dulce melancolía.
El melancólico efecto de la luna rielando sobre el lago.
Esta región agradaba por su aspecto melancólico y apacible.
El tinte de melancolía que había procurado dar a sus facciones.
Aconsejaron que fuera a pasar algún tiempo a Gisland, para disipar una melancolía que la atormentaba.
Predisposición a la melancolía.
Carácter melancólico.
Melancólicas imaginaciones.
Melancólicas reflexiones.


Itard
Una expresión tranquila de arrepentimiento y melancolía.
Una ensoñación melancólica.


Stendhal
Cualquiera que fuese la causa de su gran melancolía, se asemejaba a un misántropo prematuro.
Se veía mejor recibido, a causa de la esperanza de la riqueza. Pero terminó por sacar una profunda impresión de melancolía de esta triste verdad.
Veía con un placer igual a la melancolía.
Melancólico como Alcestes.
La profunda desgracia que la amenazaba, no hizo más que llevarla a una melancolía profunda.
Evitar los excesos de melancolía.
Magnificencia melancólica.
La melancolía comenzaba a influir en su salud.
La pasión más profunda, la pasión más melancólica.
Temperamento bilioso característico del genio y que pone en todos los actos un barniz de pasión.
Melancólico gesto.
Sonreír con melancolía.
Dio a la conversación un giro de filosofía melancólica. Hablaba del porvenir.
Le acometían accesos de melancolía, que llegaban al desvarío.
Una sonrisa tímida y melancólica.
El tremendo dolor, envenenado por la pusilanimidad, se había transformado en melancolía.

Tengo fama de hombre muy alegre y muy frío. En este sentido he experimentado todos los síntomas del temperamento melancólico descrito por Cabanis.
Por pudor de temperamento melancólico (Cabanis), he sido siempre en este sentido, de una discreción increíble, demencial.
Discreción perfecta en el temperamento melancólico de Cabanis.

Casi loco de melancolía.


Lord Byron
Y, melancólico, se lanzó a las umbrías recoletas.

La Ambición era un ídolo caído
Ante las aras del Placer y la Melancolía
Que me han imprimido señales diversas
Sobre las que operar libremente la reflexión.

La digestión, el momento más melancólico.

Yo paso mis veladas solo en unas grandes galerías
Y por eso me siento melancólico.

Caminaba sumida en suprema y femenina melancolía.
Estaba más triste que la melancolía.

Diversa como es nuestra suerte humana, cunde
Entre lo bueno, lo malo y lo peor, prolífico,
Un goce melancólico.

Rastrear cualquier acción hasta sus fuentes secretas
Ha de proporcionar cierto goce melancólico.

(Don Juan)

Meditación melancólica.
(Las Peregrinaciones de Childe Harold)


Shelley
La melancolía del amor saciado.

Una noche de otoño, que de Oriente surge
y que llega salvaje y melancólica.

(Adonais)

Alas de la melancolía.


Chateaubriand
Me sentaba a la margen de un río, cuya corriente vislumbraba con honda melancolía.
Sus ojos respiraban una exquisita sensibilidad y una profunda melancolía.
Dirigir la visión de amor al cielo con profunda melancolía.
Una voz llena de emoción y melancolía.
Encantada por el ángel de la melancolía.
La luna vino a prestar su pálida antorcha. Se levantó a media noche como una blanca vestal y derramó por los bosques ese gran secreto de melancolía, que se complace en comunicar a las decrépitas encinas y a las viejas costas de los mares.
Melancólica alegría.
(Atala)

Una oculta propensión a la melancolía lo arrastraba a la soledad.
La deleitosa melancolía de los recuerdos de la primera infancia.
Melancolía que nace del exceso de felicidad, pasajera tristeza.
Cantos melancólicos del pastor.
Carácter bondadoso y melancólico.
Había concebido una pasión, que se atrevía a declarar. Esta sospecha explicaba su melancolía.
Mi melancolía, extraordinaria, hallaba propiamente algún remedio.
(René)

Ligera expresión melancólica, que imprime la adversidad dignamente sufrida.
Imaginación melancólica.
Nunca turbar la habitual melancolía.
(El ultimo abencerraje)

Arrebatos de melancólica demencia.
(De París a Jerusalén)


Hegel
En las poesías de los Minnesingers alemanes, el amor se muestra sentimental y tierno, sin riqueza imaginativa, ingenuo, melancólico y monótono.
(Estética)


Schopenhauer
Indiferencia a la muerte, alguien a quien no puede asustar un pasado o un futuro infinitos, en donde él no existiera, falsa apariencia. Este punto de vista es en el que Krisna, en el "Bhagavat Gita", coloca a su discípulo Arjuna, cuando le invade la melancolía presenciando al ejército y quiere desistir del combate, para evitar que sucumban miles.
Cuando finalmente la melancolía deja de tener un objeto determinado y se extiende sobre el conjunto de la vida, es una especie de ensimismamiento, una progresiva desaparición de la voluntad, con lo que el hombre percibe un suave presentimiento de la muerte, la disolución del cuerpo y de la voluntad. A esta melancolía le acompaña un secreto regocijo, que los ingleses, el más melancólico de los pueblos, han llamado The joy of grief, El júbilo de la pena.


Musset
¿Mostraremos el cielo a la Melancolía? Virgen humilde.
Poseído de melancolía profunda.
Característica melancolía.
Duda y melancolía.


Humboldt
La limitación o una verosímil melancolía sentimental.
Como sucede con la alegría humana un toque de melancolía se mezcla con el juego eterno de la transformación del mar.
Las vibraciones solares de luz tienen una referencia misteriosa con el ser humano interno, con su excitabilidad del ánimo, con la disposición de ánimo melancólico o alegre.
(Cosmos)


De Maistre
Una cara melancólica.
La fuerza de las crisis melancólicas.
Dulce y melancólico goce.
Pasar alternativamente de la melancolía a la alegría y de una tranquilidad sentimental a la exaltación.
En momentos de melancolía, la idea de abandonar esta vida por propia voluntad me había asaltado.
Había caído hacía tiempo en una honda melancolía y se encerraba en un profundo mutismo.


Merimée
Canto, aire melancólico y extraño.


Lyell
Umbriel, un fantasma oscuro y melancólico. Personaje de "El rizo robado".
Una impresión de los sentimientos de melancolía y de tristeza.
(Principios de Geología)


Hugo
Melancólica resignación.
Cantar con tono melancólico el polo español.
(Bug-Jargal)

Melancolía del fracaso.
La alegría de Geronte repugna y exaspera la melancolía de Werther.


Balzac
Guardaban la huella de una melancolía profunda.
El sol había disipado las nubes grises del otoño y sus rayos animaban la melancolía de los campos con un aire de fiesta y juventud. Muchos enamorados toman por presagios estas fortuitas mudanzas del cielo.
La melancolía del amor naciente.
La luz de la Luna envolvía en una bruma luminosa el valle; una mujer que llevaba en su corazón un amor desconocido debía paladear la melancolía que el dulce fulgor despierta con las fantásticas apariencias que presta a las masas y los colores con que tiñe las aguas.
Una expresión de melancólica ternura.
Enfermizo, seco y melancólico hombre de genio sin salud.
Las dulces emociones de la melancolía y los amores duraderos.
Ignoro si su melancolía proviene de una jaqueca próxima a atacar la parte derecha o la parte izquierda de su cerebro.
Las afecciones románticas son eminentemente elegíacas, encierran la melancolía del norte.

Como se enamoran los espíritus melancólicos y meditativos.
La ardiente melancolía de un espíritu capaz de abarcar los dos extremos del horizonte, calando en todos sus recovecos, aplicando a los goces ideales las claridades del análisis.
Tenía un genio melancólico y enfermizo, dudaba.
Melancólico, hastiado.
Melancolías tiernas como el avellutado de los musgos.
Empezó a consumirle una melancolía, que no siempre acertaba a disimular.
Una melancolía profunda, impresa en sus facciones, proyectaba sus sombras sobre su frente de poeta.
En Occidente, la libertad femenina, la soberanía de las rubias cabelleras, la galantería, hadas, magas, profundos éxtasis del alma, dulces emociones de la melancolía y los amores duraderos.

Suicidio, muerte voluntaria, sublime poema de melancolía.
Inglesa, especie de alba y casta sombra, descendida de las nubes de Osian, semejaba un ángel de melancolía, un remordimiento huyendo del crimen.

Melancolía de la opulencia.
La melancolía está compuesta de una serie de oscilaciones morales, de las cuales la primera linda con la desesperación y la ultima con el placer.
Llegado gradualmente a una de esas inexplicables crisis, en las que la calma comunica a los sentidos una percepción muy fina, que el más débil choque hace verter lágrimas y desbordarse la tristeza si el corazón está perdido en tales melancolías, o le proporciona inefables placeres si se encuentra sumido en los vértigos del amor.
(La mujer de treinta años)

Melancolía de la opulencia.
Una hora de religión y melancolía.
Melancolías incomprendidas, incluso por quienes las provocan.
Actitud melancólica, con el aire de quien piensa profundamente.
Alzó la cabeza con un gesto de horrible melancolía.
Eterna melancolía.
Me entregaba a ligeras orgías de melancolía, que me encantaban.
Un saludo que revelaba más melancolía que decepción.
Apretar las manos con inefable efusión de melancólica ternura.
Melancólico al par que jovial.
Melancolía de la opulencia.
La melancolía está compuesta de una serie de oscilaciones morales, de las cuales la primera linda con la desesperación y la ultima con el placer.
Llegado gradualmente a una de esas inexplicables crisis, en que la calma comunica a los sentidos una percepción asaz fina, que el más débil choque hace verter lágrimas y desbordarse la tristeza si el corazón está perdido en tales melancolías, o le proporciona inefables placeres si se encuentra sumido en los vértigos del amor.
Soñador, melancólico y acusando precoces disposiciones para la poesía.
Devorada por profunda melancolía.
Asustado de la melancolía de su ídolo.
Aquella noticia disipó su melancolía.

La melancolía de Molière.
La melancolía conduce al ensueño.
Uno de esos guasones, cuyos libros son melancólicos y su vida un carnaval permanente.
Hay no poca melancolía en mi felicidad.
La expresión del semblante enteramente melancólica.
Acrecer la melancolía con la tristeza física.
La regia e inconcebible figura de Luis XIII, con su melancólica modestia sin causa sabida.
Encantador y cándido, casi melancólico.
Ofreció el espectáculo de una melancolía morbosa, no se dignó cantar, no había manera de hacerla sonreir, alarmaba a padres y amigos.
Melancolías sin causa aparente.
Relámpagos de dicha, entreverados de meditaciones melancólicas.
(Modesta Mignon)

Experimentaba esa horrible melancolía del supremo poder, al que Satán y la divinidad no ponen remedio, sino por una actividad cuyo secreto les pertenece.
(Melmoth reconciliado)

Melancolía material de la gastronomía.
Rumor melancólico de las olas.
(La posada roja)

Especie de alegría melancólica.
(Historia de los Trece)


Whewell
La historia melancólica e inútil que registra las guerras de los estados y las artimañas de los estadistas.
(Historia de las ciencias inductivas)


Dickens
Admiración respetuosa y melancólica.
Una brisa melancólica susurraba en los desiertos campos, como si un lejano gigante silbara.
La verde hiedra guarnecía melancólicamente los bordes de las negras y ruinosas almenas.
Sonrisa melancólica.
Las sombras oscuras y melancólicas de la noche estival cerraban el horizonte.
Absorberse en melancólicas reflexiones.
La melancolía aumentó de modo manifiesto.
Los brillantes ojos denotaban melancolía extraordinaria.
Suspirar con melancolía.
Presentaba un semblante de expresión hechicera, con un dejo de melancolía.
Un velo de horror y melancolía envuelve e impregna todo con su tinte lívido y siniestro.
Afección de la melancolía.
Disipar la melancolía.
Una especie de sombría y melancólica alegría, que era conmovedora.
Una criatura de condición lúgubre y melancólica.
No les abandonó en todo el camino la melancolía.
Reina una tranquilidad que derrama una dulce melancolía.
Adquirió su voz una modulación melancólica.
Decaído y melancólico.
Una expresión humilde y melancólica.
Voz suave y melancólica.
Sacudiendo el poético y melancólico matiz, que traicioneramente había tomado su pensamiento.
Una expresión en la que se combinaban la profunda y enérgica resolución con la quintaesencia de la melancolía.
Manifestó, por un fruncimiento melancólico, acordarse de la aludida circunstancia.
Un coche particular, pintado de verde melancólico.
Melancólicas añoranzas.
Ruido de las gotas de lluvia, sordo y melancólico.
Ligeras nubes de melancolía acumuladas por la solemnidad de la ceremonia.
Un gallo de pelea, privado de su habitual vivacidad, se balanceaba melancólicamente sobre una pata.
Tono dulce y melancólico.
Se desvanecieron las ligeras nubes de melancolía acumuladas por la solemnidad de la ceremonia.
Distraído y melancólico.

Una expresión de melancolía, que resulta interesante.
De natural melancólico, rara vez se entregaba a transportes de júbilo cuando había negocios.
Meneó la cabeza con melancolía, cual si deplorase la ceguera mental de aquellos pobres que lo desconocen.
Aire altivo y melancólico.
La melancolía que velaba los objetos.
Una melancólica sonrisa.
Una agradable melancolía.
Como un cadáver dotado del simple mecanismo de la vida, transportado sobre un lento y melancólico viento, que no crecía ni se aplacaba jamás.
Despertaban viejos recuerdos en su pecho, melancólicos, pero dulces y consoladores.

Melancolía, placer dócil y poco costoso.

Melancólica meditación.
Silencio de meditación o melancolía.
(Nicholas Nickleby)

El fuerte herrero y sus hombres propinaban tales golpes, que incluso la noche melancólica se alegró.
Ver con una profunda melancolía.
Lo atisbó melancólico a la cara, como si fuese incapaz de decidir qué quería expresar con su gesto y deseara obtener en la oscuridad la clave de su verdadero significado.
Mover melancólico la cabeza.
Una visión melancólica.
Ponerse reflexivo, por no decir melancólico.
Hay una melancólica dulzura en las ilusiones de la juventud. Es agradable saber que nunca se materializarán. 
Proclive a permitirse arrastrar por la melancolía.
Desdichado y melancólico.
Una plácida sensación de melancolía.
Qué melancólico está usted.
El líquido, por melancólico que fuese, que quedaba en el fondo de ese barril.
Soplaba su melancolía en una flauta.
Ver melancólico alrededor.
Ver con gesto melancólico.
Tomar asiento con aire melancólico.
Un extraño esfuerzo por expresar melancolía se debatía con una sonrisa de satisfacción.
Moviendo la cabeza con expresión melancólica.
Un sitio aburrido, suficiente para volver loco de melancolía a cualquiera.
Una sonrisa melancólica de forma nada expresiva.
Avanzaron el fatigoso día y la noche melancólica.
El barco del viejo Caronte, llevando unas sombras melancólicas.
Apretar la mano con melancolía.
Después de peinarle el pelo cómodamente sobre los ojos le anudaron el pañuelo y le ajustaron el cuello de la camisa con mucha delicadeza a fin de que las puntas almidonadas invadieran también esos órganos y los afligiesen con una oftalmia provocada. Luego le pusieron el chaleco y la chaqueta y, como metieron todos los botones en el ojal que no tocaba y llevaba las botas en el pie traspuesto, en conjunto su aspecto era melancólico.
Viendo melancólico el reloj, como si el que nunca acudía a la cita llevara un poco de retraso.
Conmovido, su torpe pretensión por dominarse no pudo ser más melancólica. Su rabia se transformó en humildad.
Tocar un acorde largo y melancólico.
Prelado, cuyo deber con la sociedad es lamentar con frases melancólicas la triste degeneración de estos tiempos, en los que muchos honores has recibido.
Ver con un aire muy melancólico, que más que un ser humano semejaba un pozo de lágrimas.
Un melancólico, un verdadero colono en todos los sentidos.
Hablar con una melancólica tranquilidad, como si la ilusión estuviese muerta.
Voz melancólica.
Un momento melancólico.
La melancolía que traslucían su cabeza lánguidamente ladeada y el desánimo de su actitud eran extremas.
Carácter melancólico.
(Martin Chuzzlewit)

Mohína melancolía.
Dejarse arrastrar por la melancolía.
De nada vale ir al grano con un hombre melancólico.


Collins
Lago, sitio solitario siempre melancólico, lúgubre a los ojos y opresivo para el corazón.
Melancólica pregunta.
Había en su melancolía simple, muda, sin lágrimas -en ese exquisito respeto de la fuerza triunfante por la debilidad doliente- algo casi sublime.
La sublime y melancólica inmovilidad de la muerte.
Calles silenciosas y melancólicas de Rávena.
Roma, recorrer las maravillas de la ciudad oscura y melancólica.
Cansado de unas cavilaciones que no hacían más que ahondar su melancolía y aumentar sus dudas, y deseoso de sumergirse en un olvido temporal e ilusorio de las ominosas reflexiones.
La tenue cantinela de los vientos melancólicos.
Melancólicas arboledas.
La quietud melancólica del paisaje nocturno.
Melancólico, opuesto a tranquilizador y atractivo.
La melancólica música de los elementos.
Meditativo y melancólico control.
Una leve expresión de dolor,de sutil melancolía.
El semblante y las maneras, una melancólica prueba.

El talante irradiaba tranquilidad, dominio, un punto de melancolía y cierto deje de suspicacia.
Moderna melancolía.

Quienes disfrutan el melancólico espectáculo de la degradación de la naturaleza humana, no sabrán qué exhibición preferir; el de una fea solterona furiosa o el de una fea solterona que llora.

Hilo de reflexiones secretas y melancólicas.
Fórmula melancólica.


Gautier
Calma dulce y triste que produce la melancolía.
Vida aislada, austera y melancólica.

El hermoso y famoso sol de Nápoles se le había antojado negro como el del grabado de Alberto Durero. El murciélago que lleva escrita sobre su ala esta palabra, melancolía, azotaba aquel resplandeciente cielo azul con sus polvorientas membranas y revoloteaba entre la luz y él.
Inconscientemente afectado de la melancolía del lugar había terminado de perder su locuacidad.
Volvía melancólico de las mascaradas, fiestas o cenas a las que los amigos le arrastraban.
Tendencia melancólica al suicidio.
Recordar con melancolía el pobre adorador.
No se puede permitir que muera de melancolía un compañero de colegio bajo las profundidades de este apartamento lúgubre como la celda de Carlos V del monasterio de Yuste.
Un poeta francés expone sobre la melancolía "Después del ocio es el mejor de los males".
(Avatar)

Una vaga melancolía, una tendencia languideciente.
La duda le llenaba el corazón de amargura y aumentaba su melancolía.
Cara dulce y melancólica.
Un sorbete de limón se derritió melancólicamente sobre la mesa.
Estoy terriblemente melancólico y fúnebre esta mañana.
Una nube de melancolía flotaba sobre su bella frente e indefinibles presentimientos la rozaban con sus negras alas.
Se apoyó con la chimenea frente a un espejo donde se reflejaba la claridad de un candelabro de varias velas; vislumbró aquella especie de espectro que era él, aquella envoltura de la mente que no debía seguir viviendo con melancólica curiosidad.
(Jettatore)


Stuart Mill
¿Es que la economía política no puede hacer nada sino objetar todo lo que se propone y demostrar que nada puede hacerse? Si fuera de esta manera la tarea asignada a la economía política sería tal vez precisa, pero melancólica e ingrata.


Ainsworth
El rostro de un joven cetrino de expresión taciturna y melancólica, casi una fiera incluso reposado, aunque suficientemente vivaz cuando entablaba conversación.
La grandeza melancólica, el carácter de romance.
Un matiz melancólico atristaba y ensombrecía aquel rostro con la aptitud de derretir el alma del espectador con su irradiación.
Ojos melancólicos, visión casi agónica.
Melancólica atracción.
Una efusión sanguínea envió a la cabeza la sangre ocasionada con los humores melancólicos que acumuló antes del ataque; un caso típico de hipocondría o lo que Burton, "Anatomía de la Melancolía", llama demonios azules.
Tono melancólico.
Sonrisa melancólica.
Una hilera de melancólicos sauces se alzaban como quebradizos mozuelos a la ribera.
Melancólico doblar de una campana distante.
Pretendió distraer sus melancólicas reflexiones con la visión a través de sus húmedas pupilas de la Naturaleza consoladora cuyo aspecto guarda alivio para un alma estragada con la pétrea frialdad del mundo de los hombres.
Hubo un profundo silencio hasta que la ultima y melancólica cadencia se apagó.
Una sombra de inefable melancolía se dibujaba sobre sus elegantes facciones.
Afectada por la profunda melancolía de la pintura.
Melancólicas reflexiones.
Permaneció mudo con una actitud de profunda melancolía.
El carácter de los rasgos marcado con la melancolía.
La melancolía marcada sobre el amplio ceño del novio solo añadía atractivo a sus facciones.
Un verde y tupido cementerio, pero también muy melancólico.
(Rookwood)


Macaulay
Carácter de Grenville severo, melancólico y pertinaz. Cuervo de la cámara de los Comunes graznando bancarrotas desde el centro de la abundancia de la Hacienda.


Poe
Las melancólicas visiones que la mayoría no posee aptitud de ver.
Melancólico, irritable e indiferente hacia los sentimientos ajenos.
La melancolía habitual de mi humor creció hasta transformarse como aborrecimiento de todo lo que me rodeaba y de la entera humanidad.
Tenía una profunda melancolía, una tristeza uniforme.
El melancólico frotar de las vestiduras de los enterrados.
Una melancolía morbosa.
Melancolía espiritual, que induce a un hombre a mostrarse anormalmente indagador sobre meras nimiedades.
Habituales accesos de melancólica misantropía.
Estaba melancólico más allá de lo acostumbrado en él, lúgubre.
Su melancolía seguía invariable.
Ricas colgaduras, en todos los ángulos del aposento, vibraban bajo los acentos de una suave y melancólica música cuyo origen era imposible adivinar.
Incierta mácula de melancolía, que siempre será inseparable de la perfección de la hermosura.
Brillo de los ojos melancólicos.
No hay en mi país torres más venerables que mi melancólica y gris heredad.
Crecí enfermizo, envuelto en melancolía.
Rizos de un rubio reluciente, por su matiz fantástico discordaban por completo con la melancolía dominante de su rostro.
Melancólico periodo intermedio.
Los numerosos recuerdos melancólicos y venerables vinculados, tenían mucho en común con los sentimientos que me habían conducido.
Melancólica bóveda.
Mansión de melancolía.
Un aire de dura, profunda e irremediable melancolía lo envolvía y penetraba todo.
Buscar un origen natural y palpable de la peculiar melancolía que lo afectaba.
Me entregué a vehementes esfuerzos para aliviar la melancolía de mi amigo.
Me sentí poseído por un vago malestar, una ansiedad como la que experimenta el durmiente cuando llegan a sus oídos tristes sones, lejanas y profundas campanadas solemnes, a intervalos prolongados, pero iguales, y entremezclándose con sueños melancólicos.
El melancólico río Zaïre.
Los melancólicos libros de los Magos, encuadernados en hierro.
Lo dominaba la misantropía y estaba sujeto a lamentables alternativas de entusiasmo y melancolía.
Alquilar y amueblar -en un estilo que armonizaba con la melancolía fantástica de nuestro carácter- una decrépita y grotesca mansión.
Recayó en sus viejos hábitos de melancólica ensoñación.
Los largos musgos como plumas colgando espesos desde los entrelazados matorrales, daban a todo el abismo un aire de melancolía fúnebre.
La barca mágica avanza con una velocidad suave, pero gradualmente acelerada, mientras los leves rizos del agua, que rompen en los costados de marfil con divinas melodías, semejan ofrecer la unica explicación posible de la música suave pero melancólica, cuyo origen invisible en vano busca a su alrededor el perplejo viajero.
Melancólicos lagos sinuosos o dormidos.
Una oscura y, sin embargo, hermosa y apacible melancolía penetraba allí las cosas.
La actitud reveladora de una curiosidad profunda y melancólica.
Sus pretensiones por sacarme de la anormal melancolía en que me hallaba sumido fueron frustradas por ciertos volúmenes, que yo había encontrado en su biblioteca. Por su índole, tenían fuerza suficiente para hacer germinar cualquier simiente de superstición hereditaria, que se hallara latente en mi pecho. Había leído estos libros sin que él lo supiese y, por tanto, le resultaba difícil explicarse las violentas impresiones que habían hecho en mi fantasía.
Descripción del género Sphinx, de la familia Crepuscularia, del orden Lepidóptera, de la especie Insecta o insectos. La Esfinge Calavera ha ocasionado gran terror en el vulgo, en otros tiempos, por una especie de grito melancólico que profiere y por la insignia de la muerte que lleva en el corselete.
El circuito estaba entregado por completo a la más lúgubre melancolía, al silencio, a la pestilencia y a la muerte.
Siento una especie de melancólica satisfacción en ser minucioso.
El recuerdo ocasional del prematuro y melancólico destino que aguardaba.
Apostó en seguida su cabeza al diablo a que yo estaba melancólico.
Qué legión de melancólicos recuerdos despertará siempre en la mente del genio y en la apreciación imaginativa, especialmente la del genio condenado a la incesante, eterna, amarga, angustiosa y perturbadora influencia del sereno, divino, celestial, exaltador y purificador efecto de lo que cabe denominar la más verdaderamente envidiable, deliciosamente etérea y más bonita de las cosas de este mundo.
Melancólica gracia.

Y resignadamente bajo el cielo
yacen las aguas melancólicas.

Lecho melancólico.

El viento nocturno
es muy frío, y esas melancólicas ramas
impulsan su penumbra sobre las cosas.

Rincón melancólico.
Melancólico estribillo.
La melancólica amenaza del tono de las campanas de hierro.


Mulholland
La melancolía que me había embargado había desaparecido.


Spicer
Intervalos de profunda melancolía.


Ch. Brontë
Soñador, lunático, romántico, embelesado.
El Vapor, la Industria y la Maquinaria, habían desterrado todo romanticismo y aislamiento.
Voluble melancolía.
(Shirley)

Ojos. Velo melancólico.
Melancolía del fracaso.
Negro enemigo de la humanidad. La melancolía constitucional.
Por sus reflexiones y emociones se extendía una neblina de melancolía.
Peor que la melancolía, la desesperación.
(Villette)

Había en su alma más voluntad y ambición que fibra y músculos en su cuerpo, incompatibilidades entre physique y morale, voluble melancolía, el ánimo atlético veía con desprecio a su frágil compañero.
(El Profesor)


A. Brontë
Tus cartas se han distinguido por una rigidez y reserva y a un tiempo semimelancólicas, que me habrían afectado seriamente, si mi autoconciencia me hubiera acusado de merecerlas.
Manifestar disgusto con reproches mordaces, sarcasmos amargos, silencio hosco, prestaciones; darlo a entender con una especie de gentil melancolía, tristeza reprobadora, dulce.
Hoscos arranques de humor y abatimiento melancólico.
Disposición de ánimo melancólica.
Melancólicas meditaciones.
(La inquilina de Wildfell Hall)


E. Brontë
Temporadas de melancolía y silencio, abatimiento.
Paseaba su melancolía por el parque, silenciosa y llorando.
La llama de sus ojos había dado paso a una suavidad soñadora y melancólica. Ya no producían la impresión de ver los objetos que la rodeaban; semejaban ver más allá, muy lejos, se diría que allende este mundo.
Se levantó con melancolía suicida.
Casi no me atrevía a levantar los ojos de la página que tenía delante, porque instantáneamente aquel melancólico acto usurpaba su sitio.
El tiempo trajo resignación y una melancolía más suave que el ordinario contento.
Melancólico aspecto.
Melancólica campanilla azul.
(Cumbres borrascosas)


Eliot
Personas siempre iguales propiamente, indiferentes al buen o mal tiempo, que no conocen ni melancolía ni exaltación.
(El velo alzado)


Keats
Caprichos de la melancolía.
(Endymion)


Baudelaire
Libro saturniano, orgiástico y melancólico.
(Las flores del mal)

Esa infatigable melancolía, urdida para inspirar al espectador un sentimiento muy alejado de la piedad.
En el océano de tus largos cabellos vislumbro un puerto, hervidero de cantos melancólicos.
Y por las noches, arrullando mis ensueños, el canto plañidero de los árboles musicales, de los melancólicos filaos (árbol de origen australiano).
Sufría extraños accesos de melancolía precoz.
Después de un melancólico paseo, durante el cual sus ojos reflejaban la dulzura del cielo y mi corazón, al revés, estaba crispado como el infierno.
Touched with pensiveness. Alcanzado por la melancolía.
Destino melancólico.


Flaubert
Monólogos llenos de risas melancólicas y de parloteos melosos.
Cantaba suspirando adagios melancólicos.
Las melancolías de la pasión.
Melancolía seca, desesperación sorda.
Sereno, serio, melancólico.
Melancólicos suspiros.
Las sombras desmesuradas y melancólicas de los sauces inmóviles, que se estiraban sobre la hierba.
Cartas tiernas y joviales, chanceras, melancólicas.
Por ingenua imitación de aquella melancolía que provocaba la suya.
La luna, el astro melancólico y lleno de poesía.
Dulzuras de voz melancólica.


Melville
Viajar por el mar, una manera de combatir la melancolía y de regular la circulación de la sangre.
Alimentándose de las lúgubres patas de su melancolía.
Actualmente las pesquerías de ballenas constituyen un asilo para mucha gente romántica y distraída asqueada de las penosas inquietudes del mundo, que busca el sentimiento entre la brea y la grasa de la ballena.
Sombría melancolía.
El ánimo languidecido de la ballena, fuera de su especie, melancólica.
Gorgoteos melancólicos y ahogados de una fuente.
La sombría tragedia del buque melancólico.
Caer bajo la melancolía más profunda.
(Moby Dick)

Diablos azules, hipocondría, melancolía lastimera.


El Manifiesto comunista
Un ropaje tejido con hebras especulativas empapado de nieblas melancólicas y románticas.


Heine
Sonrisa melancólica.
La curiosidad sin atractivo, la pesadez aderezada, la descarada estupidez, el egoísmo esquinado y la afición vana a todos los objetos melancólicos de los ingleses.
Negra melancolía.
Algunas señoras de edad exhibían melancólicamente desnudas las ruinas de su antigua magnificencia.
Tono piadoso, casi melancólico.
Movía su cabeza melancólicamente, me infundía una piedad dulce.
De su rostro había desaparecido la expresión melancólica.
(Noches florentinas)

El atardecer se aproximó y el cielo y la tierra palidecieron melancólicos y se entristecieron fuera de cualquier cálculo.
La reflexión de la muerte arroja su sombra melancólica sobre las horas más felices y consuela de la desdicha.
Las flores que permanecen a la sombra pierden color y brío, se estropean, palidecen y se amustian melancólicas y desgraciadas.
(Memorias del señor de Schnabelewopski)


Proudhon
El sentimiento retrospectivo que anima las poblaciones italianas. 
Sentimiento cívico.
Según la opinión del pueblo, preferir el derecho y la ciencia al sentimiento equivale a separarse de él.


Kierkegaard
Extravíos del yo. Deseo y nostalgia y melancolía imaginativa. Ilusión y angustia.
(La Enfermedad Mortal)


Keller
Sentí que uno no puede hacer nada y que lo efímero, la eterna transformación de lo terrenal, se cuida ya suficientemente de producir una melancólica atracción poética.
(Enrique el Verde)


Erckmann-Chatrian
Lejanías azuladas, abismos sombríos y melancólicos, bosques de abetos hasta el horizonte.


Kubin
En la personalidad abiertamente melancólica, el deseo y la apatía marchan codo con codo. Víctima de violentas fluctuaciones en el plano sentimental, esta particular disposición anímica es capaz de despertar el más ardiente de los deseos, como la más amarga de las decepciones.


Fromentin
Lobregueces de resolución melancólica.
(Domingo)

He hecho lo imposible por no convertirme en un ser melancólico, pues nada hay más ridículo a cualquier edad; pero hay en el ánimo de algunos hombres una especial bruma elegíaca, siempre dispuesta a derramarse en forma de lluvia sobre sus ideas.
Un lugar melancólico, apacible y entrañable.
(Dominique)


Liermontov
Sublime espectáculo, obligaba al alma a sumirse en su interior y meditar sobre la eternidad y la grandeza terrena y celestial. En tales momentos brotan reflexiones melancólicas y maravillosas, como un monasterio solitario, monumento inmóvil de las flaquezas humanas de algunos seres, los cuales no entienden que donde se oculta una virtud también puede encubrirse un crimen.
Ojos de melancólica y secreta poesía, que confusa y abundantemente derraman las miradas de los dementes.
Melancolía contagiosa.
(Vadim el Jorobado)


Dostoyevski
Acometer una melancolía tremenda y fantástica.

Vida melancólica o distraída.

Disposición melancólica.
(Humillados y ofendidos)


Daudet
Recogió melancólicamente su gaita.
Invadido por un nuevo acceso de melancolía.
(Safo)


Ostrovski
El melancólico musgo.


Dante Gabriel Rossetti

Proserpina, erguida, con melancólica mirada,
sonriendo la granada, símbolo de su obligación
de permanecer unida a Plutón en un mundo de sombras,
del que sólo puede escapar por cortos periodos de tiempo.


Carlyle
Una mueca melancólica.
El corazón lleno de profunda melancolía.
(Pasado y Presente)


Ruskin
La gama melancólica de las especulaciones de los economistas políticos sobre la cuestión de la población.
("Hasta el ultimo" y otros ensayos de Economía Política)

Los agudos de salvaje melodía opuestos a los breves tonos melancólicos.


Trollope
Expresión seria y melancólica.
Un lugar miserablemente melancólico.
Un desayuno muy melancólico.
Una melancólica salita de espera.
Melancólica soledad.
(El Custodio)

Podía oír el melancólico gemido de las olas que le había impresionado como muy musical y que había jurado que adoraba. Ese instante aquel lugar con todos sus atributos le era odioso, desagradable y abominable.
Un aspecto de solemne melancolía, casi de congoja.
Se comportaba de una manera muy melancólica que no era habitual de él.
Una disposición a la melancolía podría terminar por abatirla por completo.
(Ojo por ojo)


Mayne Reid
Carácter dulce y melancólico, opuesto a un ser humano de genio decidido y reflexivo.
(El Halcón Pirata)


Tylor
La quiromancia se halla mezclada con la astrología. Traza en las rayas de la palma de la mano una línea de la fortuna y una línea de la vida, encuentra signos de melancolía en los cruces sobre el monte de Saturno, presagia aflicciones y muerte por las manchas negras en las uñas.
"Reynard el Zorro". Sus animales constituyen la encarnación de unas cualidades. El Asno, la melancólica satisfacción.
El reino de las sombras, si es una caverna subterránea, ha dado la impresión de un lugar tenebroso y melancólico a los moradores de este mundo blanco, como los Rusos llaman al mundo de los vivos.


Boucicault
Una mirada melancólica y vengativa.
Profunda melancolía y apatía.
Melancólica desesperación.
Lanzando una visión melancólica más.
(Juego sucio)


Nietzsche
Sonreímos para nosotros de las gentes de gustos melancólicos, en las cuales adivinamos una falta de profundidad; les envidiamos mientras nos burlamos de ellos, pues no somos lo suficientemente felices para poder permitirnos su delicada tristeza.
Según los relatos, Homero y Esquilo terminaron por vivir y fallecer en la melancolía.

Melancolía purpúrea de la vida.
(La Gaya Ciencia)

En el lago de mi melancolía se van formando las pequeñas olas blancas y espumosas de mis días.
(Aurora)

Quien en el contacto con los hombres no aparezca revestido, según las ocasiones, con los transformables colores de la posibilidad, quien no se ponga verde y gris de náusea, fastidio, piedad, melancolía, aislamiento, no es un ser humano de gusto superior, predestinado para la experiencia.
(Más allá del bien y del mal)


D´Aurevilly
El pájaro burlón que hace de ruiseñor que menciona Byron en sus "Memorias" con melancolía.


Ponson du Terrail
Triste, inquieto, sombrío. Una misteriosa melancolía se apoderó de su alma.
Había vuelto a su melancolía.
Acento de melancolía.
La voz triste y la melancólica actitud le confundían.
Melancólico, con una triste sonrisa escuchaba a aquellos locos con aquella atención soñadora e indulgente de un ser humano que tiene su parte de las decepciones de la vida.
Reflexiono desertar; es muy grande la melancolía que se ha apoderado de mí.
(El Misterio del Pasaje del Sol)

Sonrisa de tinte melancólico.
Ingleses, especie de golondrinas melancólicas.
(Historia del niño perdido)


Gray
Profundo bajo el querido polvo soñamos, / nuestra melancolía es una cosa / por fin nuestra; y nadie aprecia / cómo ennegrecen nuestros labios negros.
Un niño melancólico con jirones asquerosos e insalubres / recuerda alguna leyenda de un engranaje de margaritas / que hace un hermoso collar.
(Silverpoints)


Wilde
Anduvo errante a lo largo de ese terrible valle de la melancolía de donde los grandes ánimos no han podido evadirse.
A semejanza de un río melancólico.
Los melancólicos bosques de olivos.


Zola
Mar de melancolía.
Ese tedio romántico de los Werther y los René, llorando la añoranza de antiguas creencias.
El silencioso vuelo de la melancólica verdad.
Aire melancólico.
Terribles sacudidas, que implicaron la batalla y la capitulación de Sedan, bajo el melancólico aplastamiento de la ocupación prusiana.
Una inquietud reemplazaba al melancólico abatimiento.
¡Qué melancólica usura de la costumbre!
Melancólica paz de la noche.
A lo lejos, una máquina silbaba, lanzando en la noche su melancólico desamparo.

Melancólico ensueño.
(Una página de amor)

Melancólico vacío y falso lujo.
Estruendoso grito melancólico.
Mar de melancolía.
(Vida en común)


Bergson
La consulta entre los dos médicos de Pourceaugnac. <<Vuestro razonamiento sobre el caso es docto y perfecto; es imposible que el enfermo no sea un melancólico hipocondriaco; y si no lo fuera, no tendría más remedio que llegar a serlo, por lo bien que habéis hablado y por la precisión del razonamiento que habéis hecho.>>


Twain
Una flor. Su vista acrecentó muy alto grado su melancólica felicidad.
(Las aventuras de Tom Sawyer)


Rimbaud
Demos con la puerta en las narices a la Melancolía.
No poder evitar la Melancolía.
La melancólica colada dorada del poniente.


Stevenson
Bosques melancólicos y grises.

Enjuto, largo, seco y melancólico.
La luz de la melancólica llama de  una vela.
Replicar melancólicamente.

No os espantéis de una risa franca; cura la melancolía.


MacDonald
Gesto de melancolía.
Atmósfera de pegajosa melancolía.


Butler
Una gran melancolía me sobrevino al percatarme de la situación de la soledad.
Es difícil evitar sentirse melancólico en ocasiones, examinar si se tornaba en algo más grave.
Me senté a meditar con gran melancolía.
Las cadencias melancólicas del lamento del viento.
Organizar un banquete en el que todos se muestran muy melancólicos sinceramente.
Me alojé en la ciudad y pude darme a la melancolía cuanto mi corazón me lo pedía.
(Erewhon)


Meredith
Jadear melancólico.
Señales melancólicas de acritud y de vejez.
Suspirar con una inmensa melancolía.
(El general Ople y lady Camper)


Proust
Una condición de melancólica indiferencia.

El retorno de los novelistas o de sus protagonistas a sus amores muertos, conmovedor para el lector es, desgraciadamente, muy artificial. Este dislate entre la inmensidad de nuestro amor pasado y el total de nuestra indiferencia presente, del que mil detalles materiales -un nombre recordado en una conversación, una carta encontrada en un cajón, el encuentro con la persona o su diferida posesión- nos hacen tomar autoconciencia. Esta oposición que aflige, llena de lágrimas reprimidas, en una creación artística, lo encontramos fríamente en la vida, justo porque nuestra condición presente es la indiferencia y el olvido, porque nuestra amada y nuestro amor sólo nos gustan, a lo sumo, estéticamente y porque con el amor, la confusión y la facultad de sufrir han desaparecido. Por tanto, la melancolía acongojante de esta diferencia es sólo una verdad moral. Podría transformarse en realidad psicológica si un escritor la situase al inicio de la pasión que describe y no a su término. Al destrozar los pequeños goces, que nos ocultaban nuestra gran miseria, al transformar nuestro corazón en un desnudo cobertizo melancólico, nos han permitido meditarlo por fin y juzgarlo.
(Ensoñaciones)

Especie de sueño brillante, indistinto, irrevocable y melancólico.
Igual que en el gozoso o melancólico ensueño amoroso recibimos de una persona nuestra poesía, en la dolorosa curiosidad de los celos, la verdad consiste en hechos, actos, sentimientos personales.
(Jean Santeuil)

La melancolía acongojante de la inmensidad de nuestro amor pasado y el total de nuestra indiferencia presente es solo una verdad moral. Podría transformarse como realidad psicológica si un escritor la situase al comienzo de la pasión que describe y no a su término. 
Al destrozar los pequeños goces que nos ocultaban nuestra gran miseria, al transformar nuestro corazón como un desnudo cobertizo melancólico nos han permitido verlo por fin y valorarlo.
La disposición melancólica (la felicidad de los corazones) se ve singularmente incrementada y justificada con el amor.
El loco que siempre se queja, el viejo rey melancólico; el mar.
(Ensoñaciones)


Joyce
La corriente de melancólica ternura.
Ojos melancólicos de un mono.
(Ulises)

Con melancolía sobre todo generalmente.
Soplando a través del sombrero de Mr. Melancholy Show.
Muerte igualmente melancólica.
Esta melancolía me está ganando la panza.
Contrito con melancolía.
Dale una buena visión melancólica a cualquier vidriera vecina.
Se han desvanecido las sombrías opacidades de la melancolía.
Sangriento lúgubre espantoso pavoroso furioso alarmante terrible melancólico lamentable atroz apabullante.
Posos de melancolía.
Un ansioso melancólico.
(Finnegans Wake)

Melancolía atemperada por recidivas, resignación e ingenua alegría.
(Dubliners)


H. James
Fuerza de las evocaciones románticas del Barrio Latino, beneficios de la cultura moderna.
Románticas privaciones.
Burlona melancolía.
Una sonrisa melancólica.
Emitió un suspiro lleno de melancolía, como si lo considerara muy limitado de imaginación.
Aquella cañada abrupta y melancólica, abandonada por la luz del verano, la hacía sentir con mayor intensidad su soledad.
Trazas decentemente melancólicas.
La reserva pintoresca y la misteriosa melancolía.
Un lugar de residencia muy melancólico.
Los resortes de la melancolía.
Un gemido melancólico.
Podía estar melancólico si se le antojaba.
En su melancolía, que se estaba instalando en una segunda fase, como una herida que cicatriza, había cierta dulzura acre y sabrosa.
Una melancolía gratuita.
Un aire melancólico y de aburrimiento.
Algún recuerdo melancólico o el temor de alguna futura desgracia.
Deseos de disipar cualquier visible melancolía.
Inquieto y melancólico.
Una especie de voluptuosa melancolía.
Melancólica fantasía.


Wharton
Sorda melancolía.
(Etham Frome)


Stoker
Una presa elemental de su habitual melancolía.
Desde los menesteres del niño por nacer a los que son propios del <<ser querido que se nos fue>>, a quienes unos caballeros de negro, desastrados y melancólicos, habían venido a graduar.


Hardy
Permaneciendo reconcentrada y melancólica.
La melancolía del espectáculo débilmente alumbrado con una vela.
Melancolía crónica.
Forjar melancólicos ensueños.
Un melancólico jamelgo.
El gris melancólico del cielo y el horizonte.
No era a propósito para predisponer a la melancolía aquella mañana clara y seca de invierno.
(Tess D´Urberville)


Rider Haggard
Columbrar con expresión melancólica.


Lee
El brillo rojizo del hilo de oro y el brillo azulado del hilo de seda plateado se mezclan, produciendo una extraña tonalidad melancólica sin un hombre definido.
Mar maligno en su belleza, del que debió emerger en tiempos remotos (cuando los fenicios o los griegos construyeron los templos en Lerici y Porto Venere) una melancólica diosa de la belleza, una Venus Verticordia, pero en el mal sentido de la palabra, que sumergió la vida de los hombres en una repentina oscuridad.
Melancólica belleza.
Con una expresión melancólica y la mirada puesta en la lejanía.
Tenía que pagar por lo que denominaba ese pasarlo bien con una mayor debilidad y melancolía.
Una vaga profundidad melancólica en la mirada.
Ojos profundos, suaves y melancólicos.
El insistente balido de los corderos separados de sus madres; un melancólico, tembloroso y misterioso lamento.
La melancolía y la preocupación.
Llevaba una vida muy extraña: estaba siempre melancólico y amenazaba frecuentemente de muerte.
Ataques de melancolía.
Débil, melancólico y pensativo viejo.
Melancolía, obstinado silencio, accesos de violencia.
Seria, melancólica.
Líricos melancólicos. Su melancolía del suicidio impregnada de luz de luna, no dejaba de tener algo agradable y poético. 


France
Gozaba de un placer melancólico en la contemplación del mar.
Sonreír melancólicamente.
Galas de una poesía original y melancólica.
Es posible que nuestra raza persista en la melancolía, el delirio, la manía, la demencia y el estupor, hasta su lamentable fin entre los hielos y las tinieblas.


Ibsen
Flauta. Folklórica danza bohemia, acento melancólico y patético.


Chopin
Una melodía menor, corta y melancólica.
Los días lluviosamente melancólicos.
(El despertar)

Las incansables y melancólicas notas del acordeón.
(De "Una noche en Acadia")

Melancólica vehemencia.
(Cuentos)


Grahame
Otro ataque de melancolía.
Melancólico y reflexivo.
(El viento en los sauces)


Chejov
Me sentía melancólico, sin el deseo de abandonar la ciudad.
Un repique melancólico.
(Mi vida)

Una nadería había llenado su alma de ternura y de melancolía.
(El duelo)

Sosegado, melancólico
(La sala numero seis)

Las grullas pasaban de un vuelo lanzando melancólicos chasquidos como si os llamasen.
(Los campesinos)

Sonrisa melancólica, tímida.
Un alcaraván lanzaba un grito melancólico y sordo.
(En el barranco)

Melancólica y lánguida canción.
La estepa monótona propicia a la llamada de los recuerdos y de la melancolía.
Gritos llenos de melancolía.
El melancólico grito de un pájaro. "¡Duermo, duermo, duermo!"
(La estepa)

Melancólicamente exhalando un suspiro.
(El reino de las mujeres)

Teñido de melancolía.
Cuando un ser humano de humor melancólico se enfrenta con el mar o generalmente con un paisaje que le da una impresión grandiosa con alguna razón ignorada viene a mezclarse a su melancolía la persuasión de que vivirá y morirá tras la oscuridad y con un reflejo se apresura a escribir o grabar su nombre.
Estaba melancólico y me aburría.
Mi melancolía se transformó como el sentimiento que se experimenta con el entierro de un buen ser humano.
Sonrisa dulce, melancólica.
Las manchas de luz de una bujía danzaban sobre su rostro y su cuello como si persiguieran su melancólica sonrisa.
(Luces)

Ver con ternura y melancolía.
Los sauces melancólicamente inclinados de la orilla baja.
(La fiesta onomástica)

Se limitaba a entregarse a la más negra melancolía y a sentir silenciosamente envidia y celos.
Sonreir melancólicamente.
Reflexiva, melancólica, encantadora.
La bella expresión nueva de su mujer se reflejaba con el rostro también melancólico pero extasiado de su amigo.
(Tres años)

Suspirar reflexionando melancólicamente.
Terminando marzo el clima predisponía a la melancolía, a las disputas, al odio.
(Un homicidio)

Se volvió melancólica; sin ver ni oír nada; sin ver a su alrededor arrastraba la triste existencia a la que se acomodan muchas jóvenes y viejas señoritas.
Contar las melancolías.
(Flores tardías)

Inclinado a la melancolía.
Los compases melancólicos de un vals.
(La gaviota)

Entregarse a la melancolía.
Cara melancólica.
(Cuentos cortos)


Deeping
Arrebatos de melancolía.


Lagerlöf
La sombría melancolía.
Había estampado un sello de tierna melancolía.
Adquiría un extraño y melancólico aspecto por el ancho collar de pardusca piel que cubría su largo cuello.
Melancólica belleza de la virgen.
¿Por qué había de mostrarse inasequible y melancólica?
El croar melancólico de las ranas.
Pero si es fácil decir que se perdona, es muy difícil perdonar de veras, sobre todo cuando se es de espíritu obstinado y melancólico, que no olvida ni estalla.
Sonata pasional, melancólica canción.
La vieja canción de la tórtola, el ave de la añoranza que nunca bebe el agua límpida sin enturbiarla antes con sus patitas porque de otra manera no la encuentra gustosa su melancólico ánimo.


Dujardin
Respiro ampliamente la noche; vagamente veo la belleza exterior, lo bello, lo sombrío, lo melancólico, la graciosa lejanía del aire, las estrellas acuáticas.
La frente inclinada con graciosa melancolía.
(Han cortado los laureles)


Ribot
La inclinación a la melancolía es una regla de las neurosis.
La melancolía de los periodos menstruales.
Para muchas formas de locura (melancolía) la analgesia espontánea es frecuente.
La melancolía segun el sentido médico presenta las marcas distintivas: larga duración, desproporción de causa y efecto experimentado y reducción excesiva e insuficiente. Esta afección asume formas clínicas que van desde la melancolia attonita que simula una apatía estupida hasta la forma agitada acompañada de gemidos incesantes, desde las formas leves hasta las profundas e incurables.
Generalmente las personas de carácter sombrío tienden a la melancolía. 
El origen orgánico de la melancolía.
El temperamento melancólico es profundo, vacilante.
(La psicología de las emociones)


T. Mann
Sonrió extrañamente, con una melancolía un poco dulzona.
Mirando a lo alto con un aire melancólico.
Siempre alegre, aunque forzadamente, empuja la melancolía.
El tabaco le pone melancólico.
Sonreir con un aire melancólico, encogiéndose de hombros.
Poseído de melancolía, hizo extravagancias.
Rechazar con una severidad mezclada de melancolía.
Melancolía y depravación, un alma confusa.
Cuyos ojos dulces y negros se cubrían de un velo de melancolía cada vez que se hablaba de la partida.
Fumar pone melancólico.
Melancólico destino.
Una melancolía tiernamente sentimental, con el espíritu de cierta pequeña canción.
Aspecto melancólico y sumiso.
Melancólico, puso la mano delante de los ojos.
El punto solsticial, la medianoche del verano, la cúspide melancólica en su presuntuoso exceso de fuerza.
Es un orgullo melancólico una melancolía orgullosa lo que pone alegres a los hombres y les hace danzar en torno de la hoguera; lo hacen positivamente por desesperación, en honor del movimiento circular y de repetición eterna, sobre la dirección en la que todo se repite.
Manifestó de diversos modos un humor bastante deprimido, melancolía y una resignación total.
Tono de melancolía y resignación.
Frotó los ojos con su mano izquierda, como tenía por costumbre hacer cuando se sentía melancólico.
Una atmósfera de melancolía envolvía aquella pareja, porque perdían sustancias, cuya asimilación es esencial; azúcar y albúmina.
Un carácter interesante, a la vez enérgico y melancólico.
Sonrisa melancólica.
Con una expresión ensombrecida por una especie de melancolía, por la fatiga y por una pena muda.
Es un fenómeno melancólico y fatal el de esa ilusión olvidadiza y crédula, en la que caen incluso las almas viriles, durante el periodo o el proceso destructor que se aproxima a su fin; fenómeno impersonal, habitual y más fuerte que la autoconciencia personal.
La piedad melancólica que se concede a las palabras de los difuntos.
Cierto hablador melancólico había apreciado que el exceso de celo había acarreado un exitus letalis.
Acento melancólico.
Encogerse de hombros con aire melancólico.
La melancolía presuntuosa de la eternidad, sin duración de dirección, sigue propiamente.
Un fonógrafo, un cuerno de la abundancia, que dispensaba placeres artísticos alegres o melancólicos.
Melancolía razonadora.
Dar un nombre melancólico y familiar.
Leyenda melancólica.
Tenía bellos bucles y una expresión melancólica inolvidable.
Arañazo desprovisto de melancolía.
La alegría sarcástica, una combatividad sin ejemplo, un menester de negación y de perturbación, irritaban peligrosamente la melancolía y aguzaban sus querellas intelectuales.
(La montaña mágica)


Norris
Arlequines melancólicos.
(Relatos)


Chambers
Un abogado del City Hall de rostro demacrado y melancólico.
El melancólico y viejo bisonte.
Desesperación melancólica.
(El rey de amarillo)


Woolf
El buque se estremecía y emitía un quejido melancólico.
El espejo le mostraba una expresión de profunda melancolía.
Aire melancólico de la raza Skye.
Cayó sobre el buque una vaga melancolía, como si se hubiese efectuado el vacío.
Mover la cabeza melancólicamente.
Era un muchacho alto, de aspecto melancólico, el cual recibió la flor con agradecimiento.
Aquel joven melancólico estará poniendo la flor dentro del agua y preguntándose si lo que siente es amor.
Los males que padece una persona soltera, inquietud, falta de salud, melancolía, excentricidad.
Mamá era muy buena y estuvo siempre triste y melancólica.
Alejando o acercando el rostro al espejo con un gesto de melancolía y orgullo a un tiempo.
Y con visión melancólica siguió esparciendo mermelada por encima del pan.
No la encontraban bastante atildada, era melancólica y por sentimiento recíproco adivinaban que tampoco le eran agradables.
Expresión vacía y melancólica.
Canto melancólico y tristón de las mujeres.
Al recordar el pasado entornó los ojos y su vista se perdió con una suave melancolía.
(Fin de viaje)

Una ligera melancolía envolvía la mesa.
Un árbol ha caído, una especie de muerte dentro del bosque. Tras lo cual el viento de los árboles lleva melancolía.
Serios semanarios de a seis peniques escritos por hombres pálidos con zapatos embarrados; el crujido y el chirrido semanal de cerebros enjuagados con agua fría y retorcidos hasta secarlos; revistas melancólicas.
La correcta descripción de la melancolía.
La melancolía era el sonido de una noche de invierno.
Esta melancolía, esta rendición a las negras aguas que chapalean a nuestro alrededor es una invención moderna. Tal vez no creemos lo suficiente.
Se sentía muy melancólico y la melancolía tenía que haberse alojado dentro de él para obnubilarlo a cada momento, lo cual era raro para alguien que disfrutaba mucho de las cosas y que no era propenso a analizarlas, pero que desde luego era terriblemente romántico.
Su falta de preferencia por él no era la causa de su melancolía, sino alguna persuasión más profunda; no era que él fuera solitario, sino que la totalidad de la gente lo era.
Aunque seguía melancólico nunca habría reflexionado cuán placentero era estar solo.
Sereno, imponente, desdeñoso, melancólico y sumido con una especie de tedio augusto.
El brillante, indagador, acorazado día de verano ha secado las melancólicas nieblas de verano.
Dentro de su corazón nacía una curiosa melancolía, como si el tiempo y la eternidad se mostrase a través de faldas y de chalecos y viera la gente que se dirigía trágicamente hacia la destrucción.
(La habitación de Jacob)

Bruscamente caía bajo una de sus melancolías.
Tiene razón el filósofo cuando explica que sólo el grosor del filo de una navaja separa la felicidad de la melancolía; la una es hermana gemela de la otra; de lo que saca que todos los sentimientos extremos son aliados de la locura.
Melancólico recorrido por las galerías.
Extrañamente formado por muchos humores, melancolía, indolencia, pasión, amor a la soledad, absurdos y sutilezas de temperamento.
Deprimido y melancólico.
La melancolía se adueñó.
Un muchacho melancólico enamorado de la muerte.
Caballeresco y romántico, apasionado, melancólico y decidido.
(Orlando)

Melancólico sonido de la gaita.
El hervidor seguía emitiendo su débil y melancólica canción.
La melancólica música del vals.
El momento más intenso, más melancólico del vals.
Voz tranquila y melancólica.
Negar con la cabeza con melancólica tolerancia.
La alargada nota de una sirena flotó sobre el aire con su melancólico quejido.
(Las horas)


Somerset Maugham
Periodo melancólico de la embriaguez.
Días de comienzos de otoño, en los que la lluvia no cesa de caer y el aire está impregnado de la melancolía de la naturaleza, consciente de su próxima declinación.
Tierna melancolía de Verlaine.

El romanticismo se sumerge con placer y melancolía en el horror, el misterio, la pasión y la violencia.
(Diez novelas y sus autores)


Conan Doyle
Con esa cariñosa melancolía de la mirada y el porte que suele con frecuencia ser una premonición de la muerte.


W. J. Locke
La melancólica tarea de ahondar en el desgraciado misterio.
Melancólica compañía.
Disipar la melancolía.


Pavlov
Los tipos melancólicos hipocráticos corresponden al tipo débil. Un rasgo común es su facilidad de inhibición, producto de la debilidad constante de la inhibición interna, que irradia sin dificultad y resultado, sobre todo, de la influencia de la inhibición externa producida por cualquier clase de estímulo externo.
El talento griego, personificado en Hipócrates. Diferenciar los melancólicos de entre todos los hombres era como dividir la humanidad en dos grupos: los fuertes y los débiles; las personas que tienen los procesos nerviosos débiles se entristecen con mayor facilidad, debido a que les cuesta mucho más resolver sus pequeños problemas.
Los esquizoides de Kretschmer, nuestro tipo débil, los melancólicos de Hipócrates.
En casos particularmente intensos y duraderos, puede incluso presentarse una melancolía mórbida.
Los psiquiatras dicen que la melancolía es un dolor psíquico; dolor cortical diferente, por su carácter, del dolor que nos ha causado una herida o una enfermedad en otras partes del organismo.


Bennett
Viviendas que esperan con aire melancólico a que llegue el día del Juicio Final.
Las melancólicas fantasías de los solteros de mediana edad apenas resultan previsibles.
Producir una verdadera melancolía.
Inefable melancolía.
Mirar con aire melancólico desde las ventanas.
Su melancolía se disipó.
Vislumbrar con melancolía el perfil de la extraordinaria isla que dejaban atrás.


Barr McCutcheon
Hasta el dinero heredado le inspiraba, a ratos, una vaga melancolía.
Melancolía juvenil.
Sumido en la melancolía pero, a un tiempo, intrigado.
Gesto melancólico.
La villa italiana acrecentó la felicidad de los que ya eran felices y a los que no lo eran les permitió sumirse en una dulce melancolía.
(Los millones de Brewster)


Yeats
Especie de melancolía visionaria de las complexiones puramente instintivas y de los animales.
(Cuentos fantásticos irlandeses)

Plegar las alas y quedar melancólicamente quietas.
(Una visión)


London
Especie de melancolía.
Aislamiento y melancolía particular de la raza escandinava.
Vieja y ancestral melancolía, sombrío pesimismo. 


Moore
La enorme, gris y melancólica Gare du Nord a las seis y media de la mañana.
La caída del atardecer / más allá del desesperanzado horóscopo de las horas bajas / da a la atmósfera una melancólica calma / de apacible colorido cantado como un salmo.
(Confesiones de un joven)

La tristeza que le producía su melancolía.
La mujer alta y melancólica.
Abandonó su melancolía y replicó compulsivamente.
Un gran apuro, un aspecto melancólico.
La melancólica campana del tranvía.
Ojos melancólicos.
(Esther Waters)


Conrad
Forma intangible de un ánimo melancólico y perverso.
(Lord Jim)

Un ser humano inteligente, de carácter melancólico.
(Reminiscencia)


Walser
Melancólica languidez.
Impresión melancólica, de que algún día las cosas habrán de ir muy mal.
El melancólico frío invernal se avendría perfectamente con mis monedas de oro.
Amables por melancolía y simpáticos por desasosiego.
Su mano, con indecible melancolía, pendía a lo largo del vestido
La cruda realidad se divierte difundiendo melancolía. La melancolía forma.
(Jakob von Gunten)

A punto de sucumbir a una hermosa enfermedad; la melancolía.
(El bandido)

No sin melancolía, empezó a vaciar su equipaje.
Espectáculo melancólico.
¿Era posible en un día soleado estar melancólico?
Melancólica comida.
De las reflexiones subía un canto amable y melancólico, adecuado al arroyo, los arbustos y el silencio del bosque.
Gente pobre y melancólica.
Tardes decoradas por melancólicas puestas de sol.
De vez en cuando, el cielo arrugaba su hermosa y pura frente, o la reducía, formando surcos y velos de melancolía.
Una tierna melancolía se apoderaba del alma, al ver el mundo amarillento de esos árboles.
La visitaba el sueño, haciéndola creer que era una gran dama, una de las mejores y más liberadas, bella quimera de agradables colores, a la cual había que conceder un breve y eventual cuartito de hora, no sin sentir una honda melancolía a un tiempo.
No se permitió vencer por la melancolía que lo asediaba y enrumbó sus reflexiones en una dirección cotidianamente práctica.
El salón se volvió de pronto familiar y melancólico. La humedad y el frío de afuera hacían más acogedoras las habitaciones.
Un paisaje fabuloso y crepuscular iba ascendiendo melancólicamente al conjuro de la canción.
Un temperamento frívolo y a un tiempo melancólico.
Qué hermoso era pertenecer a alguien en el amor o en la melancolía.
Un vínculo de gris melancolía.
(El ayudante)


Kafka
Una sonrisa casi melancólica.
(El proceso)


Hardy
Grado de melancolía.
(Lejos del mundanal ruido)


Weber
La melancholy moroseness de los puritanos, hondamente sentida por sus contemporáneos, era consecuencia de la ruptura con la despreocupación del status naturalis y también la condenación de la conversación vacía.


Andreiev
Lanzar un leve y melancólico suspiro.


Rolland
Inundar el ánimo una calma melancólica.
(Jean-Christophe. El alba)

Con la música su mente quedaba como perezosamente adormecida de agradable melancolía.
Un sentimiento melancólico y dulce de la fragilidad de las cosas y de la embriaguez del vivir.
(La mañana)

Saboreando largamente la amarga melancolía.
Hallaba un placer melancólico con aquellas charlas y recuerdos insignificantes.
Reflexiones melancólicas familiares.
Si se resignaba melancólicamente a que no la amase no se había fijado en la posibilidad de que amase a otra.
Sumirse con una especie de ensueño con el que flotaba una música de pastoral melancólica.
Se encerraba melancólicamente en su habitación.
(La adolescencia)


Kubin
Ningún ser humano puede hacer caso omiso de sus impulsos temperamentales, que terminan marcando las manifestaciones de su personalidad. Con la abiertamente melancólica el deseo y la apatía marchan codo con codo. Víctima de violentas fluctuaciones según el plano sentimental esta particular disposición anímica es apta para despertar el más ardiente de los deseos como la más amarga de las depresiones.
(La Otra Parte)


Bernstein
Hablar con cariño y melancolía.
(La sed)


Mansfield
Me senté al pie de un arbusto de lilas purpúreas, encontrando un significado melancólico por aquella su delicada sugestión de medio luto.
Una melancólica cabeza de ciervo colocada en el comedor.


Kolontai
Melancólico pesar.
Percibimos cómo un ser humano ha roto el hechizo de las pasiones que engendran melancolía y ha vuelto a encontrarse.


Sienkiewicz
Amor melancólico, opuesto a amor alegre.
El ángel melancólico y dulce, el ángel del llanto silencioso y pasivo.
(Hania)


Fontane
Ojos serios y melancólicos como si presagiaran el futuro.
Burlarse de sus accesos de melancolía, como gustaba hacer.
Volverse melancólico en el mirador del patio.
En la expresión de sus ojos había algo infinitamente dulce y melancólico.
Había recaído bajo su antigua melancolía.


Gissing
Sus vidas tenían el tono melancólico y la dolorosa reserva que caracteriza una verosímil capa social.
Admitido que no soy muy animoso y que tiendo a hablar con melancolía.
Conversaciones melancólicas.
La farsa suele ponerme melancólico.
Reflexionar con aire melancólico.
La melancolía de un septiembre frío y tormentoso.
Había perdido su vehemencia. Estaba ausente y melancólica.
Meditación melancólica.
Ojos grandes y melancólicos.
(La nueva Grub Street)


Benjamin
Los ensayos medievales sobre los humores saben de la apetencia de viajes largos, del tipo de gente melancólica que tienen que rehuir el contacto con la madre tierra.


Reed
La "Marcha fúnebre", ese canto majestuoso, melancólico y triunfal a la vez, ruso, emocionante.
Melancólicas emociones campesinas.


Karlfeldt
Melancólicos pinos.


Rohmer
Al compás de la música melancólica e incitante del caramillo.


Richardson
La boca y la nariz melancólicas y frugales.
La voz de melancolía complaciente.
Una cara alargada melancólica.
(Techos puntiagudos)


Heidenstam
Un recuerdo melancólico.
A la manera que se entiende una melancólica y extraña canción que con su simplicidad reclama directamente al sentimiento y seduce al oyente.
Se cernía sobre los lugares más animados una vaga melancolía.
Adoptar una expresión melancólica.
La luz de la luna era más brillante que melancólica.
Me sobrecoge una melancolía que no acierto a describir.
El del campo ve afectuoso y melancólico su caserío agradecido de la suerte de haberle sacado de las rompientes de la vida.
(Endimión)


Pessoa
Voz melancólica y trémula de los niños que nada esperan.


Dreyer
Sombra de melancolía.


Lawrence
Entristecido y melancólico.
Profunda sonrisa de duda y melancolía.
Silenciosos y propensos a la melancolía.


Ball
Una secreta melancolía.
Una seriedad melancólica.
(La huida del tiempo)


Zamiátin
Alegría melancólica.


U. Sinclair
Delgado y de aspecto melancólico.
Ojos oscuros y melancólicos.
¿Había melancolía en su voz o era humor negro?
Un sentimiento de infinita melancolía se cernió sobre su ánimo.
Atrapar en un lienzo el sentimiento de melancolía, que desciende en ocasiones sobre los hombres.
Expresión amable y melancólica de Isadora Duncan.
Un arrebato de melancolía.
Nube de melancolía y anhelo.
La luna, súbitamente, se había vuelto melancólica.
Melancólico y acostumbrado al hedor de los osarios del mundo.
Las cosas hermosas siempre estaban tocadas por la melancolía.
Expresión cargada de melancolía.
(El fin del mundo)

Abandonarse a la debilidad y a la melancolía.
Sufría accesos de melancolía, malestares, trastornos misteriosos.
Se entregaba a los demonios de la melancolía y de la desesperación.
Mirar con cara melancólica.  
Abismos de angustia y melancolía.


S. Lewis
Un himno distinguido y melancólico.
Reflexionar melancólicamente.

Tantear en el agua con melancólica dignidad, para recuperar la escurridiza y activa pastilla de jabón.
Melancólico extranjero.

Miró atrás melancólicamente en los ultimos arrabales.
Atmósfera de melancolía.
Insinuar con melancólica sonrisa.
En un momento nebuloso e impreciso de la noche el teléfono le despertó. Bajó melancólicamente hasta el piso de abajo.

(Babbitt)

Cierva melancólica.
Le había impresionado la traición, se había vuelto loco de melancolía.
Escapar de la persona melancólica.
(Eso no puede pasar aquí)


Kraus
El agua que, incesante y melancólica, gotea en las trincheras... tuc, tuc, tuc.
Me pongo melancólica si reflexiono que, lamentablemente, no podemos aplicar el moderno culto a los muertos en nuestra habitación.
(Los ultimos días de la humanidad)


Hasek
El melancólico San Francisco de Salas.
Acometer un ataque de melancolía y saltar las lágrimas.
Voz melancólica.
(Las aventuras del buen soldado Svejk)


Savinio
Melancólica figura.
Abatida por la melancolía, cantaba al piano.
Un viejo sentado melancólicamente frente una cuba vacía.
Los dos Heracles y Pélope, melancólicos, obtusos y revestidos de pelo.
(La infancia de Nivasio Dolcemare)

Volver lentamente la cabeza, para seguir a las mujeres con mirada bovina y melancólica.
(Maupassant y "el otro")

Carabinieri serios y melancólicos.
Esos aspectos demasiado bulliciosos, animados, orientales de nuestras ciudades del sur suscitan impresiones más de melancolía que de deleite.
Pasar melancólicamente las preciosas horas libres.
El claustro rodeado de melancólicas y desiertas arcadas.
Los melancólicos corredores rebosantes de altos tapices herbosos.
(Capri)


Hesse
Las fantasías patológicas de un pobre melancólico aislado.
(El lobo estepario)

Llevaba la melancolía, ese gigante, hincada de rodillas en su corazón estremecido.


Giraudoux
Alternando para el poeta jovial y el poeta melancólico.
Por seguir a este amigo melancólico, que veía por vez primera, se olvidó del otro.
Tierna y melancólica.
Me hallaba solo con el cielo, sin compartir la Melancolía con ningún ser humano. Melancolía, eras para mí como una pasión secreta y me pertenecías a mí solo. Estar melancólico se me antojaba particularmente como enamorarse, o ser amado.


Desnos
Cielo demasiado pálido de la melancólica divinidad.
(Las tinieblas)


Scott Fitzgerald
Una corneta melancólica ante un numero de fenómenos de feria.
(El Gominola)

Invadir una ola de melancolía.
(May Day)


Faulkner
Un muñeco vestido de papel con cara melancólica.
Una especie de melancolía desesperanzada.
Aves de aspecto melancólico.

Sentido inolvidable, cualidad profunda, sensitiva, gigantesca y melancólica.
(Desciende, Moisés)

Reir con aire melancólico, aunque sin conmoverse.
(Pylon)


Dos Passos
Melancolía, neurastenia.
Afirmar melancólicamente.
(Manhattan Transfer)


Wolfe
Citaba unos versos de la "Elegía", de Gray, empleando esta enciclopedia de melancolía de cajón, con aplicación bastante indefinida.

Esperad todos la hora inevitable,
La senda de la gloria sólo lleva a la tumba.

Economía, melancólica satisfacción.
Voz melancólica y turbada.
Odiaba las luces melancólicas, las luces humeantes, las luces pálidas o sombrías.
La hipócrita melancolía de los viejos.
Cabizbajo y deprimido por un peso inexplicable de cansancio y melancolía.
Melancólica lamentación.
El bronco y triste ruido del país semejaba suavizado, melancólico, lejano e irreal.
Sumir en la melancolía y la locura.
(El ángel que nos mira)

El patrón mortuorio de la apariencia melancólica y despoblada de las calles muertas de su infancia, había quemado la memoria con su ácida impronta.
(Especulación)


Toynbee
Los apalaches presentan el melancólico espectáculo de un pueblo que adquirió la civilización y que la ha perdido después.


Burroughs
Luz melancólica y vívida de la luna llena.


Wells
Esfuerzo para sacudir la melancolía.
(La esposa de Sir Isaac Harman)


Wassermann
Sobre su persona había un indefinible halo de melancolía, un oscuro descontento, propio de las personas que no pueden vivir de la vocación en que creyeron un día.
Odiada voz, ronca, melancólica.
Melancólicas facciones, primer estadio de la tuberculosis.
Específica melancolía de los judíos.
Un tono extraño y melancólico.
Melancólico y dulce halago.
Melancólica autoescenificación. 
Melancólica laxitud.
Los toques de campana de una capilla lo tornaban melancólico.
De un humor sensible y melancólico.
Judíos, su espíritu comercial, específica melancolía, arrogancia, autoparodia.


K. Mann
Con una melancólica propensión a los narcóticos.


Croce
Los románticos de entonación erótica buscaban la redención en el amor y la divinidad en la mujer amada, no tanto como reminiscencias de motivos del stil nuovo, en el siglo XIII y del platonismo, en el Renacimiento, cuanto con refinación y sublimación sensual, propio de la religión romántica del amor.
Las desolaciones y desesperaciones por las felicidades soñadas, imposibles de conseguir, los paseos bajo la luna amiga, las hamletianas visitas a los cementerios, la palidez romántica, las barbas y las cabelleras románticas, el estilo romántico.


Shaw
Melancólica persuasión.
Recaer en la melancolía.
(El Enamorador)


J. Huxley
St. Kilda tiene el atractivo melancólico de ser el lugar donde se percibió por ultima vez en suelo británico la presencia del gran auk, el ave marina extinguida el año 1844.


A. Huxley
Abrumado con ideas melancólicas; lleva sobre sus espaldas la carga del Universo entero.
Melancólica estupidez.
Los ánimos penetrados de idénticas dulces y melancólicas reflexiones. Lo permanente, lo transitorio.
Una manifestación que pone a uno melancólico.
Se sentía poseído de aquella fastidiosa y desesperada melancolía postprandial que los cenobitas temían con el nombre de acidia. Una melancólica disposición de repleción.
Su melancolía deprimente de manera agradable se disipó al soplo de la emoción violenta.
Tono melancólico e indiferente.
La cosmología es una fuerte sensación, un hecho melancólico.
(Los escándalos de Crome)

Sensaciones confusas y melancólicas.
Tono melancólico.
El vino no había hecho sino realzar su falta de brillo y su melancolía.
Voz melancólica.
Sus labios eran graves y firmes, sonreían o estaban melancólicos siguiendo una gama casi infinitesimal cromática de expresión emotiva.
Labios plenos y melancólicos.
Cuando había amenazado rebelarse él se había vuelto melancólico y desvalido, de repente, apelando a sus mejores sentimientos.
Los casos de mujeres neurasténicas, la preñez podía curar su melancolía y sus obsesiones.
Repicó otro reloj melodioso, dulce y con  una nota de melancolía; la propia voz de aquella tarde luminosa y de la felicidad.
(Contrapunto)

Un producto morboso, una cerrada y tenebrosa melancolía mezclada con un toque de furor uterinus.
Víctimas de la melancolía.
La melancolía, un desarreglo del equilibrio humoral del cuerpo que trae como consecuencia el trastorno de la mente.
Los hombres que padecen melancolía tienen miedo a la oscuridad.
Cayó bajo la más profunda melancolía, demencia, decaimiento.
El látigo era eficaz para la melancolía natural como para la posesión sobrenatural.
Las personas afectadas de la enfermedad de la melancolía.
Las extravagancias de la melancolía y de la hipocondría son de especie muy diferente.
Que tuviese que aceptar la posición de los rigoristas, cual era la de despreciar las cosas creadas, significa un melancólico tributo al obsesivo poder de las meras palabras y nociones.
(Los demonios de Loudun)


Heard
Estar melancólico al no haber dormido.
(Predilección por la miel)

Serio, de ninguna manera melancólico.
Una disposición de resentimiento melancólico.
Había permanecido melancólicamente dentro de su habitación.
(Muerte por reflexión)

Un rayo de mejoría iluminaba la melancólica oscuridad de mi mente.
(Réplica pagada)


De la Mare
Sumergirse bajo las aguas de la melancolía.
El "Diccionario" de Jonson, ese libro extraordinario sobre la Melancolía, con la borraja y el eléboro y el joven enamorado con sombrero.
Extraño lamento melancólico.
Ojos melancólicos y vacíos.
Disposición melancólica.


Musil
Cuando se encendía su sensualidad, se mostraba melancólica y buena.
La ausencia de perspectivas le hacía víctima de una amarga melancolía.
Debía haberse vuelto melancólica y más anímica.
La melancolía, una quemazón frente a todo.
Un pesimismo melancólico oprimía cruelmente el corazón.
La precisión, fuerza y garantía del desarrollo discursivo, al que nada iguala en la vida, casi le llenaba de melancolía.
El estilo de su discurso era elegante, ágil, apacible, casi melancólico, como un arroyo ribeteado de sotos oscuros, lo cual hacía su locuacidad ineludible.
La melancolía de su vista de mono.
Amable, melancólica y hermosa.
Contagiada por la melancolía, llegó a ser un placer halagüeño, bello, triste y casi sensual.
Amagos de grave melancolía.
Melancolía encantadora.
Melancólicos opuestos a optimistas.
Las perspectivas se cubrían de conversaciones otoñales, con un melancólico fondo de lejanos montes azules.
Magnánimo y melancólico en sus rivalidades.
Melancolías, saltos de alegría, explosiones de cólera.
Vencida por el melancólico menester de izar la ondeante bandera de su deseo en lo más alto del desnudo mástil.
Oscura melancolía.
Sorprender las palabras melancólicas.
Una sonrisa en la que se mezclaban superioridad y melancolía.
Hay un numero de melancólicos felices como marchas fúnebres suspendidas en su propio elemento, con no mayor gravedad que una danza en el suyo.
Lánguida melancolía.
La melancolía que arrastra la vida activa.
Melancolía juvenil.
Florituras extraoficiales, muy amables, melancólicas y casi un poco tiernas.
Satisfacción melancólica.
Sonreir melancólicamente.
Un distanciamiento suavemente melancólico de la voluntad.
Dedicar una melancólica sonrisa.
El amor, donde lo seductores de carácter melancólico son mucho más destructores y más difíciles de perdonar que los frívolos.
Le había decepcionado el hecho de que la hora del amor, iniciada con ligereza, hubiese terminado en la melancolía.
Excitación melancólica.
Sonreir con melancolía.
Con su tono melancólico se había excitado.
Un regusto de placer fallido y de impaciente melancolía.
Una persona hondamente melancólica o de una euforia desafinada podrían objetar, ante las figuraciones de otra neutral y equilibrada, que no son más que sombrías o eufóricas a causa de su sangre, cuanto más por sus experiencias en un mundo lleno de pesada tenebrosidad o celestial ligereza.
El enmarañamiento del mundo se ha visto como una imperfección de las representaciones humanas y se lo ha asumido de forma familiar-infantil, melancólica o altanera-indiferente.
La tozudez melancólica con la que se ve en pos de una ola que se aleja.
Una magnánima y melancólica sensación.
Un melancólico profundo suspiro.
Una gota que se volatiliza de melancolía y que hace tiritar la disposición a disolverse, que tiene el alma.
Se puso melancólico y reflexionó que debía dar una justificación de aquel extraño espectáculo.
(El hombre sin atributos)


Green
Había algo melancólico en aquellas habitaciones oscurecidas por cortinas de paño.
Algo de la melancolía de la casa natal se había insertado en él y formaba parte de su carácter.
Los inconvenientes de la casa; si seguía allí, perecería de melancolía, a no ser que se volviera loca o imbécil.
Una seria fisonomía, que llegaba a semejar apesadumbrada y melancólica.
Se sentía indefensa ante la melancolía que la iba invadiendo.
Su imaginación, inclinada a la melancolía, le hacía prever un porvenir de miseria y vivía en el temor a los tiempos venideros.
Se sentía súbitamente melancólica y llena de desánimo.


Adler
Temperamentos de Hipócrates. Melancólicos, hombre vacilante, cautela, la duda prepondera.


Jaeger
Respira Sileno el melancólico humor de la naturaleza encadenada por la tierra y estupefacta.
(Aristóteles)


Faure
La abeja, un monstruo sorprendente, pero cuyo automatismo melancólico inspira una especie de horror.
(El arte moderno)


Lu Shin
Aire ligeramente melancólico.
Aire triste y melancólico.
(Diario de un loco y otros cuentos)


Shólojov
Con melancólica insistencia.
Cantos nacidos de la guerra, impregnados de una sombría melancolía.
Su vida se había vuelto melancólica, y a la inmensa alegría de antaño se había añadido un tedio mortal e implacable, una profunda nostalgia.
La estepa, como copa colmada hasta los bordes de silencio y de humedad, escondía en los pliegues de los barrancos los melancólicos reflejos del día.
El cochero agitó melancólicamente la fusta y los caballos, fatigados, dieron un tirón a las riendas.
En las eras lejanas resonaba una canción melancólica.
Un sentido de melancolía infinita se infundió en el alma.
Presa de melancolía.
El viento arrastraba sus cantos, melancólicos como el perfume del cheboreth (hierba aromática).
Las llamadas melancólicas de las becadas.
Los sonidos gangosos y melancólicos del fagot se elevaban solitarios sobre el vasto patio.
Incluso en los momentos de alegría su expresión era melancólica.
Las campanillas de posta sonaban melancólicamente.
Los chillidos melancólicos de las gaviotas.


Marshall
Delgado, melancólico, reposado.
Balance sentimental, resultado melancólico.


Brecht
Humor negro y melancólico y sueños inútiles.


Adorno
La ciencia melancólica (en oposición a la gaya ciencia nietzscheana) se refiere a un ámbito que, desde tiempos inmemoriales, se apreció el propio de la filosofía, pero que desde la transformación de esta en método cayó en la irreverencia intelectual, la extralimitación sentenciosa y el olvido. La doctrina de la vida recta.
(Minima moralia)

Melancolía saturniana.


Deval
Silencio melancólico.
Sombría melancolía.
Suspiro melancólico y romántico.
Desde el fondo de su melancolía.
(Tovarich)


Cary
Aire melancólico y preocupado.
Ponerse muy serio, casi melancólico.
(La boca del caballo)


Erskine
La bestia se mostró floja y melancólica.
La melancolía lo puso pálido.


E. Bloch
El Romanticismo cae bajo la seducción del pasado, de acuerdo con la tendencia reaccionaria. Lo histórico se une crecientemente con lo arcaico y este con lo ctónico. La productividad, incluso la actitud de expectativa en que tan rico es el romanticismo, se concentra en imágenes antiguas, en el pasado, en lo inverosímil, en el mito, haciendo un asidero frente al futuro, que sólo es concebido como paja, vacío, viento.
Sólo el Romanticismo refirió la expresión antigua a acontecimientos comprimidos, en los que se presenta una sustancia categorial de carácter plástico-objetivo. Romeo y Julieta se convierten en arquetipo del amor juvenil, Marco Antonio y Cleopatra en arquetipo del amor maduro y más interesado; Filemón y Baucis, junto con su cabaña, se ven como la imagen de conjunto del matrimonio primario, apartado del mundo.


Gorki
Se oía una canción melancólica a través de la noche, como si se extinguiera tenuemente el alma de un ser humano y el duelo cubría el corazón como si espolvorearan sobre él ceniza.
Ojos muy abiertos, estáticos, melancólicos.
Escuchar reflexivamente la melancólica letra y el grave son de las cuerdas.
Serenidad melancólica.
No me gusta la luna, que tiene algo de agorera y como si fuera un perro despierta para mí la melancolía y el deseo de aullar.
Hermosas y melancólicas canciones.
Voz llena y melancólica.
Me acometa la indiferencia y una melancolía glacial.
Escojo algo bello y conmovedor y pretendo al entonar mis canciones expresar la belleza del léxico y el sentido que esconden. Y también yo me rindo al poder de su inagotable melancolía que tengo muy cerca del corazón, aunque mi razón la rechace hostilmente.
Melancólicos y tímidos versos.
Cuando silbaban las locomotoras los discos replicaban con un suave rechinar melancólico.
Sencillez y melancolía ridícula de la canción.
Hombres que han perecido víctimas de esta ridícula melancolía.
La belleza melancólica de sus ojos femeninos no podía conciliarse con su sonrisa aviesa.
Relatos melancólicos de revistas mensuales.
"El pobre se casa y la noche es corta". Un proverbio entre melancólico y burlón.
Exclamación melancólica.
(Mis universidades)

Los ritmos melancólicos de los aires populares.
Las copas de los árboles se balanceaban melancólicamente.
El organillo callejero tocaba en la taberna aires melancólicos.
Replicó moviendo la cabeza melancólicamente.
Dices tonterías. Me aburro contigo. Me llenas de melancolía.
En su cara huesuda se perfilaba melancólicamente una nariz corcovada.
En la calle, la lluvia menuda cantaba suavemente su melancólica canción.
En voz baja y melancólica.
Una canción melancólica y vulgar.
La ciudad estaba cubierta de niebla, y el canto broncíneo, retenido en su vuelo hacia el cielo, se arrastraba melancólicamente por los tejados.
La reverberación bonancible de la luna solitaria y melancólica.
Ojos pardos y melancólicos.
Llegó el otoño, melancólico y suave.
Otoño, melancólico poema.
Campanillazos raros y melancólicos. Sonido cobrizo, huyendo del campanario. Melancólico sonido del metal.


Chesterton
Humor melancólico.
Weltschmerz. Pesimismo melancólico.


Remarque
Uno siente melancolía cuando reflexiona sobre la vida; y se hace cínico cuando ve como la mayoría soluciona esa cuestión.
Padecer melancolía wertheriana.
Melancólica ironía.
Ambiente melancólico del club nocturno, uno de esos establecimientos típicos dirigido por rusos blancos emigrantes, a partir de 1917.
Sonrió melancólico.
Imaginamos alguna vez en la vida -comentó melancólico- una miríada de luces y calles, que conducen a la eternidad.
El pesar se había tornado transparente y resultaba difícil distinguirlo de una jovialidad irónica y melancólica.


Dinesen
Carácter melancólico.
Límites de la alegría y el buen humor y de la desesperación y la melancolía.

Los hombres muy varoniles desprecian a los enamorados melancólicos.
Luchar con la mórbida disposición a la melancolía, una absurda tendencia a verlo todo negro.
Se puso melancólico; decía que hasta entonces la vida no le había dado suficiente.
(Memorias de África)

La melancolía de sus ultimas semanas no había sido, sino un presagio de su total perdición.
La hilera larga y desparramada de farolas alzaba sus cabezas melancólicas al aire gris.
Un chico enfermizo y melancólico.
Era un honrado comerciante a quien asustaba perder dinero y perder clientes. Este doble riesgo le había sumido en la melancolía.
La melancolía se disipó en seguida con las nuevas llegadas.
Vivir sumido en la melancolía.
La mística melancolía de la adolescencia, que quiere abarcar, en la cumbre de su vitalidad y con una grave sabiduría que se disipa muy pronto, el pasado y el futuro; el tiempo en abstracto.
(Cuentos de invierno)


Steinbeck
Envejecer melancólicamente.
Tono melancólico.
(La Taza de Oro)


Priestley
Especie de orgullo melancólico.
Tono melancólico.
(Tres hombres vuelven del frente)

Los parroquianos de la melancolía.
Melancólico revés de la vida francesa.
Rostro que semejaba una melancólica ruina.
(Recuerdos y experiencias de un escritor)


Fallada
Seriedad, tristeza y melancolía, amar la muerte y odiar la vida. 
Durante aquellas primeras horas de la tarde, largas y melancólicas, cada vez más desoladoras, el deseo y la consecución le habían parecido insoportables.


Saroyan
Convenir melancólicamente.


Silliphant
Sonreir con melancolía y condescendencia.
Una caja de música, una melodía sencilla, pegadiza, un sonido extraño, melancólico, que semejaba provenir del pasado y que tenía una cualidad tranquilizadora, música del tiempo de los incas, "El corazón de paz".


Sartre
Encarnizamiento melancólico.
Especie de deslumbramiento melancólico.

Carácter melancólico.
(La suerte está echada)

Ver fotografías con gesto melancólico.
(El engranaje)


De Beauvoir
Sus explicaciones debieron de ser desagradables; tenía una expresión melancólica.
Gente melancólica mal vestida, olor a mugre.


Leduc
El extremo melancólico de la ciudad.
Una melancolía en segundo plano.
Ojos teñidos de melancolía. Hoy son unos nomeolvides de herbario.
Están desolados, es su melancolía, tienen ojos de iris mustio.
Atento, mundano no escapaba a sus melancolías, a sus nostalgias, se ausentaba para abandonarnos.
La sombra y la melancolía después de haberlo dicho.
Melancolía sobre el banco pintado de nuevo.
La desesperación y la melancolía no me pertenecían a lo largo de un mapa diseñado con chorros de tinta.


Genet
Una especie de levísima melancolía, que no puede expresarse, sino mediante la imagen de un montón de arena o de cascotes.
Ocio melancólico, recuerdos de ensoñación vagabunda.


Camus
Preguntar con melancolía.
Absorto en una melancólica visión de la lluvia.
En el rostro adormecido se reflejaba una melancolía monótona e inocente.
(El exilio y el reino)

La convención melancólica no puede ser persuasiva.
La razón, al igual que supo aplacar la melancolía plotiniana, da a la angustia moderna los materiales con los que calmarse en los decorados familiares de lo eterno.
Imagen melancólica y radiante.
La melancolía evangélica.
(El mito de Sísifo)


Yourcenar
La locura y la melancolía.
(Alexis)

Baco melancólico.
(Memorias de Adriano)


Houghton
Agudeza de un melancólico.
(Christina)


Knittel
Ojos melancólicos y escrutadores de Ifigenia.
(El Hakim)


Greene
Sus ojos lo traicionaban; ojos castaños, de perro; ojos de perdiguero que apuntaban melancólicamente.
La llamaba por su nombre, como Canuto cuando clamaba frente a la marea; la marea de la melancolía, del descontento y del desencanto.
Veía melancólicamente su faja desenrollada y fruncida como una serpiente enojada.
Con melancolía vio su imagen a través de lo que había sido un espejo.
Agregar melancólicamente.
Desviar melancólicamente los ojos.
La siguió hasta que se perdió de vista, con melancólico deseo.
Un lejano episodio de juventud recordado con una pizca de melancolía.
Un paisaje de tierra árida y melancólicas casillas de hierro.
A través del melancólico y despoblado centro del día.
Ojos suaves y melancólicos.
Envidia y melancolía.
(El revés de la trama)


Graves
Talante melancólico.
Melancólica condición.
Dolor melancólico.
Menear la cabeza con melancolía.


Bataille
Mi melancolía, las amenazas de muerte y este miedo, que destruye pero designa una cumbre, las agito en mí, todo esto me acosa, me ahoga; pero yo voy -nosotros vamos- más lejos.


Frisch
¿Fue acaso para el hombre una simple aventura, que la melancolía convierte de nuevo en otra pequeña aventura, en un aditamento del deleite, en una visita de paso en una velada sentimental?
El escarnio de Don Juan es una forma recatada de melancolía que a nadie concierne, excepto al Cielo.
El enorme aburrimiento de la melancolía.
Mis ojos están anegados de melancolía.
El actor, aun cuando haya logrado un gran éxito y nos reunamos después de una representación, verdaderamente contentos, siempre percibo una cierta melancolía; la embriaguez pasa, y su actuación sólo queda escrita en nuestro recuerdo.
Derecho de melancolía.


Zweig
Música bailable, rítmica y suave a la vez, un vals ejecutado por dos violines y acentuado melancólicamente por un violoncelo oscuro, marcando el compás insistentemente el staccato pronunciado de un piano.
Penumbra melancólica.
Ojos almendrados, melancólicos, velados de la raza judía, con su vista aguzada por milenios de lucha trágica y a la vez cansados.


Bromfield
Libre de la melancolía, que a menudo la asaltaba.


Russell
Cuando el gran doctor Arnold paseaba por las orillas del lago Como, no era la belleza del paisaje lo que ocupaba sus reflexiones. Meditaba sobre el mal moral de los estudiantes, lo que producía sus melancólicas reflexiones.
Los defensores de los sistemas antiguos tienen que olvidar la melancólica angustia con que el temor ha oprimido al espíritu humano durante siglos.


Cesbron
El chófer solitario escudriñaba melancólicamente la calle.
Sembrar con hierbas melancólicamente las aguas.
(Los inocentes de París)

La visión melancólica del amante.
Recobrar el sueño melancólico.
Melancólico y dócil.


E. H. Carr
El invierno transcurrió con monótona melancolía.
Una nota de melancólico otoño.
La enfermedad romántica, le spleen.
Graciosa melancolía.
Dudar melancólicamente.
Melancolía, duda, vacilación.


Peské
Veía melancólicamente cómo volvían a mi memoria aquellas imágenes, sin querer sacar conclusiones.
Un sufrimiento cruel, que me envolvía de melancolía.
(La caja de hueso)


Williams
Una melancólica gira.
Aquejada por crisis temporales de profunda melancolía.


P. Bowles
Sonreir melancólico.
(El cielo protector)


J. Bowles
Ver con melancolía.
Replicar con melancolía.
Disposición de ánimo hosca y melancólica.


I. Shaw
El acordeonista tocaba melancólicas y otoñales canciones de amor y de despedida.
Un quinteto de clarinetes, de Mozart, melancólico y persuasivo como el lamento espectacular de una joven abandonada por su amante, en una tarde llena de sol, cerca de un murmurador arroyo.
Sintió una ligera melancolía.
Se sintió súbitamante melancólico ante la idea de ver a los demás.
Con melancólica hostilidad.
Sonaba el piano. Música de jazz, triste, vacilante y melancólica, un aire de blues, acordes incoherentes y tristes.
Se dedicaba a triturar con los dientes el cristal de su copa de Martini, lo que hacía invariablemente cuando estaba ebrio y se sentía melancólico.
Columbró con melancolía los restos de una copa.
Una melancolía irremediable.


Waugh
Vi con melancolía cada una de las islas cuando las pasábamos detrás.
Todos y por cualquier parte tienen motivos para entregarse a la melancolía durante las navidades.
Gesto melancólico.
Voz cansina y melancólica.
Esa mezcla de reproche y melancolía que solo los rostros redondos y vulgares pueden expresar plenamente.
(Noventa y dos días)

Su ira aminoró hasta transformarse en tristeza y después en melancolía.
Sumido en un estupor melancólico.
El recuerdo de sus pasados errores semejó sumirle una vez más en la melancolía.
(¡Noticia bomba!)

Carácter melancólico y severo.
Frac, chaleco negro, un cuello muy alto y una corbata blanca muy estrecha. Llevaba esta indumentaria con aire melancólico, como si fuera un traje de luto riguroso.
Evadido de la realidad, al verse cada vez más limitado, donde antaño se sentía libre, se volvía apático y melancólico.
Reflexivo y melancólico oficial.
Un melancólico y leve ademán de simpatía.
Los barones de la prensa y sus secuaces, de visión melancólica y amplia sonrisa.
(Retorno a Brideshead)


Du Maurier
Semilla de soledad, frustración y melancolía.
(¡Adelante, Julio!)


Vian
El follaje verdigris de los sauces ponía una nota melancólica al paisaje.
(A tiro limpio)

Un mackintosh domesticado paseaba con aire melancólico añorando sus colinas natales donde brotan los bagpiper.
(Vercoquin y el plancton)


Eliade
Proseguía su paseo perezoso y melancólico.
Añadió melancólico.
(Relatos fantásticos)


Yevtushenko
Una melodía melancólica.
Preguntó melancólicamente.
Hacer un gesto melancólico con la mano.

De melancolía enfermos
aúllan los circenses osos rusos.


Moravia
Grabado de Durero. "Melancolía".
Melancolía, un sentimiento involuntario.
Melancólica quinta estilo liberty.


Morante
Frases melancólicas y amorosas.
Pálida, melancólica y triste.
Arrastraba las notas, vulgares, estridentes, llenas de melancolía, como si las canciones hubieran tenido un argumento triste.
Cercada por un halo de melancolía.
Envidia y melancolía.
Actitudes de enferma, llenas de melancolía.
Horrenda melancolía del presidio.
Refugiarse en una horrenda melancolía.
(La Isla de Arturo)


Baum
Melancólico y con el menester de algún consuelo.
Sonrió melancólicamente con una sonrisa algo chocante de su fresca cara de rosa.
Las ninfas fantásticas y melancólicas.
Una melancolía colmada de embriaguez y entusiasmo.
Un ademán triste y abatido, cansino y melancólico.
(Grand Hotel)


Irish
Una melancólica sonrisa.
(La mujer fantasma)


Highsmith
Melancolía, aspecto de su carácter, hambre de encontrar un sentido a la vida.
(Extraños en el tren)

Sonrisa melancólica, casi trágica, opuesta a sonrisa de tranquilidad.


Runciman
Pese a la brillantez de sus sabios Constantinopla, al terminar el siglo XIV, no era más que una ciudad melancólica y declinante.
Con la atmósfera nebulosa y melancólica del Bósforo se apagaba la alegría natural de los griegos.
La amarga y melancólica ciudad de Constantinopla.
(La caída de Constantinopla)


Lampedusa
Melancolía metafísica.
Madonna de Dolci. La del Granduca expresaba mejor la melancolía.
(El Gatopardo)


Calvino
Una caricia tímida, melancólica, casi suplicante.
(Los amores difíciles)


Koestler
Semejaba un lémur malicioso y melancólico que pretendiera estar entretenido, cuando realmente languideciese por su clima natal.
Bajo las boscosas cejas su mirada centelleaba con melancolía.
Párrafos de melancólica sabiduría.


Grass
Pereza rayana a la melancolía.
Apreciaciones melancólicas.


Daninos
Tácito, Gallouédec, Diderot. Los ingleses son personas melancólicas, desagradables, tristes, terreno propicio para el cultivo del humor, planta alegre regada de tristezas.


Guardini
El melancólico ansía encontrarse con lo absoluto, pero bajo las formas del amor y la belleza. Es el anhelo de lo que Platón llama el verdadero objeto de Eros, el anhelo del bien supremo, que es lo verdaderamente real, inaccesible y sin fronteras. Este anhelo lo unen los melancólicos a lo inalcanzable.


Kerouac
Karl Marx de mente aguda, de ojos penetrantes, el tipo melancólico y poético de mente sombría.
Una vaca melancólica de cabeza blanca dentro de la salvia.
El melancólico chico rubio.
Charlando melancólicamente.
Un joven y melancólico armenio.
Melancólica y monótona voz.
Un melancólico y rojizo atardecer.
Pasear melancólicamente.
Melancólicos ojos azules.
Un melancólico grupo de vacas con la cara blanca.
Melancólicos ojos oscuros.
Ver melancólicamente el ombligo.
(En el camino)


O´Flaherty
Profunda melancolía.
Los manteles blancos, los cubiertos y los bronces pulidos daban una ilusión de paz y bienestar, semejante a los recuerdos de la juventud perdida, que acuden con su belleza melancólica a torturar la mente de un ser humano viejo y enfermo.
(Insurrección)


Deutscher
Leer con una melancólica sonrisa.
Las cartas entre Danielson, traductor ruso de "El Capital" y Engels, producen un efecto melancólico.
(Herejes y renegados)


Burgess
Fumar melancólicamente.
Melancolía viene del griego.
El impacto del otoño. Las hojas se agitaban sobre el pavimento, arañado con las conteras de los bastones... con melancolía.
Una monótona tarde con melancólica amenaza de lluvia.
Un bloque de pisos construidos en los días que precedieron a la guerra, cuando los pisos representaban una forma de vigor teutónico; hoy, en la oscuridad, tenían aspecto melancólico, como un gran taller.
Desayunar melancólicamente.


Abbagnano
Melancolía. Mélas cholé. Según su etimología, humor negro. En el habla común, tristeza sin motivo.
Temperamento. Krasis. La disposición del ser humano, para actuar de una u otra manera, según la mezcla de los humores que componen el cuerpo. El fundador de la doctrina del temperamento es Hipócrates. Admitía cuatro humores; la sangre, la flema (linfa, sueros, moco nasal e intestinal, saliva), la bilis amarilla y la atrabilis o bilis negra (estimada la secreción del páncreas), que corresponden a los cuatro elementos del macrocosmos. Según la preponderancia de uno de estos humores sobre el ser humano, se tienen los cuatro temperamentos. El sanguíneo, el flemático, el bilioso y el melancólico o atrabiliario.


Nooteboom
Este sitio me pone melancólica.
Arrogancia y melancolía.
Ligerezas de aria.
Entre los hombres puede haber distancias que expresen una facultad terrible de ser otro, que el que la ve casi perece de melancolía.
La noción de felicidad mezclada con melancolía era un clisé.
La luz ya sin transparencias teñía de melancolía las veraniegas estampas.
(Rituales)

Sentir rabia y placer y melancolía.
La melancolía y el triunfo.
Inspirar la melancolía.
(Perdido el paraíso)


Bernhard
Estúpidas terquedades, absurdidades, barbaridades, asuntos brutales y melancolías.
Esa música de violín tocada sólo para mi satisfacción no era más que una música que ayudaba de fondo diletantemente a mis melancolías y que me impedía adelantar mi estudio de violín.
El violín fue mi instrumento de melancolía más precioso.
(El origen)

La melancolía y el hastío son las características más acusadas del ser humano.
Llevar directamente a la melancolía.
(El sótano)

Una disposición de ánimo afectiva e intelectual triste y melancólica.
(El aliento)

Mis abismos, melancolía, desesperación, musicalidad, perversidad, rudeza, rupturas sentimentales.
Dar vueltas dentro de la cama con melancolía.
(El frío)

Una visión mucho más seria y melancólica de lo que correspondería a la ocasión.
(Un niño)

Una vida tendente a un gris que la hacía melancólica.
(Corrección)


Heller
Mover la cabeza melancólico.
Un prolongado lamento melancólico.
Acusar de melancolía.
Una melancolía insondable.
Absorbiendo el desolador estallido del miedo silencioso con una neutralidad triste posado como un buitre melancólico.
Desencantado y melancólico.
Una melancolía embrutecedora, pesada.
Un tono de voz bajo, cortés, melancólico.
Su ira se tornaba melancólica.
Ver melancólicamente las olas sin fin.
(Catch 22)


Blumenberg
Arrebatos de juventud: melancolía, nostalgia, amor, desengaño.


Kirk-Raven
Atribución a Heráclito de melancolía, por Teofrasto; significa impulsividad. 


Noack
R. Burton, "Anatomy of melancholy", 1621.


Morrison
Todos somos sensibles y ocasionalmente melancólicos.


Sankowski
Rousseau tiende a desdeñar las realidades y a caer en una especie de utopismo melancólico.
(Enciclopedia Oxford de Filosofía)


Raucher
Las gaviotas osaron mostrar su esperanza de que el sol conseguiría rasgar la melancólica techumbre.


Baudrillard
La melancolía de las sociedades sin poder.
(Cultura y Simulacro)


Vidal
Entregarse al melodrama y la melancolía.
Hombre tenso, melancólico, del tipo de Ricardo II, frágil criatura, que semejaba alimentarse de alguna fuente interior de energía desconocida, que a un tiempo lo consumía.


Capote
Melancolía general, lúgubre silencio de la nieve.
(Ataúdes de artesanía)


Orton
¿Melancolía? Hasta la saciedad.
Sentados, melancólicamente.


Bieler
Inclinado a la melancolía, Lucrecio tuvo que garantizarse la liberación que había ganado de Epicuro; y de allí el menester de comunicarla con el entusiasmo de un misionero.
(Historia de la Literatura romana)


Arpino
Súbita melancolía.
Un restaurante melancólico y desierto.
Suspirar abandonándose a una verosímil melancolía.
Su voz sonaba ligeramente melancólica.
Abandonado a una irremediable melancolía.
Melancólica secreta sonrisa.
Los ojos melancólicos al final de una fiesta.
(Esencia de mujer)


Broadie
Backgammon. Juego de tablero entre dos jugadores, famoso entre los filósofos por ser uno de los métodos usados por Hume, para luchar con la melancolía filosófica y el escepticismo.
(Enciclopedia Oxford de Filosofía)


Chevalier
Búho. Tristeza, oscuridad, retirada solitaria y melancólica.
Cronos, divinidad del tiempo, cojo, triste y taciturno, compás símbolo de la melancolía.
La golondrina, Fand de los celtas, esposa de la divinidad del mar Manannan. Enamorada de Cuchulain, lo invita al otro mundo y él pasa un mes a su lado. Después la abandona y es cogido de nuevo por su mujer, Emer. Con mucha melancolía, Fand vuelve con su marido, que ha vuelto a buscarla.
El gris, símbolo de la melancolía.


Nias
La naturaleza de la melancolía envolvente no es distinta de la naturaleza de la depresión psicótica.


Moorcock
Un soberano melancólico.
Melancólicos gemidos.
El inframundo silencioso donde moraban las almas melancólicas de aquellos que se hubiesen suicidado a lo largo de un proceso orgánico de lenta automutilación.
(Elric de Melniboné)

Melancólico nombre.
Melancolía contenida.
Gente muy melancólica.
Perecer de dulce melancolía.
Mientras hablaba se puso melancólico.
Una repentina melancolía.
(La Fortaleza de la Perla)


Davis
Aspecto melancólico.
El aire nocturno me trajo una cacofonía urbana de borrachos melancólicos.
Presa de un ataque de la melancolía del viajero.
El momento de la tarde melancólica, con la noche acercándose.
Unos pendientes de azabache bastante melancólicos.
Dar cuenta de un bollo melancólicamente.
Un sentimiento de romántica melancolía.
Tierras melancólicas, lóbregas y monótonas.
Desear sentirse melancólico.
(La mano de hiero de Marte)


Ludlum
Los ojos brillaban de odio con un leve destello de melancolía.
(Trece en Zurich)


Puzo
Una leve sonrisa de su melancólico rostro.
Dominado de una abrumadora melancolía.
(El Siciliano)


King
Inconsciente de su melancólica expresión.
Sonrisa melancólica.
(Maleficio)

Silencio melancólico.
Desprecio melancólico, negro.
La melancolía de la propia mente.
(Misery)


Sanders
Su rostro melancólico se animó.
Melancólicas cavilaciones.
(El sexto mandamiento)


Hamburger
La ocasión del ser humano es gozar de la variedad. Puede sentirse risueño y melancólico.
(La miel y la cicuta)


Jennings
Las exequias fueron más melancólicas y misteriosas envueltas con la niebla.
Sonrisa melancólica.
El aire melancólico de un esclavo.
Invariable aspecto melancólico.
Mostrarse sociable, pero volver a hundirse en la melancolía.
Voz melancólica.
Meditar un poeta con una disposición de melancolía.
Hundido y envuelto por la melancolía.
Había impuesto mi venganza, pero a costa de un viejo compañero y me sentía muy melancólico.
Agregar con melancolía.
El melancólico festejo de Krishna.
Comentar melancólicamente.
No con un tono polémico, sino melancólico.
El melancólico y dulce tono del trigo en la gavilla, un suave y somnoliento color, ribeteado por las primeras escarchas del otoño.
Melancólicas distancias.
La melancólica sospecha de haber visto lo mejor y lo peor, una comparación decepcionante.
La niebla azul sube desde el canal melancólica y azul como los recuerdos.
(El viajero)


Brodsky
Bizancio redujo la búsqueda del ánimo occidental a una cuestión de melancólica y, sin embargo, desganada arqueología mental.


Stern
De cuatro signos es el temperamento humano; sanguíneo, colérico, melancólico o flemático, y cada uno corresponde a un líquido humano; la sangre con el temperamento sanguíneo, la bilis blanca con el colérico, la bilis negra con el melancólico y la flema con el flemático. Los líquidos tienen cuatro cualidades; húmeda y caliente la sangre, seca y caliente la bilis blanca, seca y fría la bilis negra y fría la flema.


Potter
La imaginación de la melancolía.
Melancólica pasividad.
Melancólicas creaciones de circunstancias.
Un vals empalagoso con el lento y vigoroso gotear de la melancolía.
La invadió la sensación de que se precipitaba bajo un pozo de melancolía.
Incongruencias urbanas dulcemente tranquilizadoras, como una punzada de inofensiva melancolía.
Los monos dan muestras de melancolía y nerviosismo cuando se pone el sol.
Melancólicos corredores de mármol.
La melancólica lejanía de la luna cuando recorría archipiélagos de nubes.
Una orquesta tocaba "I´ll See You In My Dreams" con un melancólico ritmo.
Desprenderse de la amenazadora melancolía.
El sonido plañidero de la música produjo una doble melancolía de la mente debido a la sensación de haber desaprovechado una ocasión.
Un sentimiento de melancolía cada vez más hondo.
Frases melancólicas que no encajaban con un día rebosante de jovialidad.
El nerviosismo le abandonó como el reflejo de una playa de melancolía.
La aprobación melancólica, adormecedora y aplastante.
(Ojosnegros)


Themerson
Una lejana y secreta melancolía de los ojos.
(El misterio de la sardina)


James
Todo juego tiene un primer movimiento Algunos primeros movimientos no son verbales. Semejar melancólico o abatido.


Briley
La melancolía del lugar era consonante con la tristeza de él.
Melancólicos paseos.
Tono melancólico.


Robin
Melancolía de la risa de las mujeres.
(El Bajísimo)


Haefs
Melodía ligera compuesta con el sistema musical jónico. El lidio le daba una profunda melancolía extraña.
(Alejandro)


Preston
Burton, "Anatomía de la melancolía".


Franceschini
Cuando la sangre ha sido perturbada por la bilis y la flema los melancólicos enferman de distimia.


Sardou
Su melancolía daba pábulo a la morbosa inspiración de los descifradores de secretos.


Rubenstein
Un ánimo de melancolía.
Tener motivos para sentirse melancólico.
(Los ejércitos del cielo)


Tyerman
Ricardo rebatió la melancolía y las decepciones acudiendo a la acción.
Hoy está de moda hablar melancólicamente de las glorias perdidas de Occitania.
(God´s War)


Tomalin
Una sensación melancólica de enviar una parte propia al mundo de las sombras.
(Charles Dickens)




 Ana Kontroversy







1 comentario:

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