martes, 25 de octubre de 2011

LA NAVEGACIÓN EN GRECIA Y ROMA CLÁSICAS








Odisea
Naves cóncavas de Ulises.
Telémaco mandó que aparejaran la jarcia. Izado el mástil de abeto, le metieron en el travesaño, le ataron con sogas y, al instante, desplegaron la vela blanca, recogida mediante correas bien torcidas.
Complicado nudo que había enseñado la hermosísima Circe a Ulises.
Las naves de los feacios no tienen timones ni piloto. Provistas de inteligencia como los hombres, saben por ellas mismas el camino de las ciudades y de los países.
Fenicios, gentes muy hábiles en cuestiones de navegación, pero no menos falaces.
Piratas tafios.
Los remos son las alas de los buques.

Píndaro
Donde chocan las olas de los dos mares, en mitad del recinto sagrado de Neptuno.
El nauta se ocupa, sobre todo, en la ola que choca con los flancos de su navío.
En todos los actos de su vida, el hombre actúa siempre atraído por la recompensa, el pastor como el labrador, el pajarero como el marinero. Todos se agotan aplicándose, para ganar con qué acallar los ladridos del Mercurio, la divinidad de las arenas.
(Nemeas)

Tucídides
Minos es el más antiguo de los que por oídas sabemos que poseyó una flota y dominó en una gran extensión el mar actualmente helénico, el Egeo. Como era de esperar, eliminó del mar la piratería, para que afluyesen los recursos a él.
Los helenos antiguamente, y entre los bárbaros del continente los de las costas y cuantos ocupaban las islas, se dedicaron a la piratería, en busca del propio lucro y alimentación de los débiles, atacando poblaciones carentes de murallas, sin darles vergüenza esa actividad, obteniendo incluso cierta gloria. Lo ponen de manifiesto algunos del continente y los poetas antiguos al hacer, a los que desembarcaban, la pregunta de si eran piratas porque, a su entender, no desacreditaban la actividad de aquellos. Y gran parte de Grecia vive a la antigua usanza por la zona de los locros ozolas, de los etolios, de los acarnanios y del continente. Se ha mantenido desde la antigua piratería el uso de llevar armas, a causa de que sus viviendas carecían de protección y por la inseguridad de las comunicaciones acostumbraban llevar armas como los bárbaros.
Entre las ciudades, cuantas fueron fundadas recientemente y tenían mayores excedentes de riqueza gracias al progreso de la navegación, esas fueron construidas en las costas y dotadas de murallas. En cambio, las antiguas, por causa de la piratería, muy extendida, fueron edificadas lejos del mar. Y no menos piratas eran los insulares, que eran carios y fenicios.
Agamenón llevó a cabo esa expedición al lograr reunirlos, no más por favor que por miedo, gracias a la herencia que recibió y al hacerse, desde el punto de vista naval, mucho más fuerte que los otros. Está claro que fue quien llevó mayor numero de naves y, además, las proporcionó a los arcadios.
Los corintios fueron los primeros en dedicarse a la construcción de naves de una manera muy próxima a la actual, y fue en Corinto donde se construyeron trirremes por primera vez. Aminocles, un carpintero de ribera corintio, hizo cuatro naves para los samios.
La batalla naval más antigua de la que tenemos noticias fue la de los corintios contra los corcirenses, la expedición de Periandro de Corinto contra Corcira, actual Corfú, para vengar la muerte de su hijo Licofrón.
Los foceos, que fundaron Marsella (600), vencieron a los cartagineses en una batalla naval (535).
Las mayores potencias marítimas contaban con pocos trirremes (tenían tres filas de remeros) y, en cambio, mantenían pentecónteros (navíos con un solo banco de remeros, veinticinco por cada lado) y navíos largos de carga. Fue posteriormente, cuando Temístocles persuadió a los atenienses -enfrentados a los eginetas por el tiempo en que se aguardaba la invasión bárbara- a fin de que construyeran las naves con las que precisamente intervinieron en la lucha. Esas naves no tenían la cubierta completa.
Fue durante la invasión de los medos, cuando los atenienses decidieron abandonar la ciudad y embarcar en las naves con sus enseres y se convirtieron en marinos.
Los atenienses, con el transcurso del tiempo, acabaron adueñándose de las naves de las ciudades aliadas, salvo las de Quíos y Lesbos, imponiendo tributo.
De las gestas anteriores, las más importantes fueron las Guerras Médicas y, con todo, esas tuvieron un rápido desenlace en dos batallas navales y terrestres. El escoliasta dice que fueron la de Artemisio y Salamina (480) y la de las Termópilas (480) y la de Platea (479).
En aquel tiempo, eran los corcirenses equiparables a los más ricos de los griegos en capacidad de recursos, más poderosos que los corintios en equipamiento militar y, en cuanto a la flota, en cierto modo se jactaban de ser muy superiores y del hecho de que, con anterioridad, Corcira hubiese estado ocupada por los feacios, que gozaban del prestigio naval. Por esa razón prestaban una mayor atención a lo naval y no carecían de poder, ya que cuando comenzaron la guerra contaban con ciento veinte trirremes.
Los corcirenses, cuando se enteraron de que iban colonos y tropas a Epidamno y de que la colonia había sido entregada a los corintios, se enojaron. Zarparon con veinticinco naves -posteriormente se sumó otra flota- y exigieron con insolencia que readmitiesen a los desterrados. Acompañaron a los corintios los megarenses, con ocho naves, los palenses de Cefalonia con cuatro, los epidaurios proporcionaron cinco, una los de Hermiona, dos los de Trecén, diez los leucadios y ocho los ampraciotas. Y pidieron a los eleos naves sin tripulaciones, además de dinero. De los corintios se equiparon treinta naves y tres mil hoplitas, soldados de infantería pesada.
Cuando estaban en Actio, a la entrada del golfo de Ampracia, los corcirenses aprestaban las naves poniendo baos a las viejas para que pudiesen navegar, mientras equipaban las demás. Tras salir a su encuentro en alta mar y situarse en línea, entraron en combate. Vencieron sobradamente los corcirenses y averiaron quince naves corintias.
Los atenienses aceptaron como aliados a los corcirenses y no mucho después, cuando marcharon los corintios, les enviaron diez naves de socorro. Iba al frente de ellas Lacedemonio el de Cimón. Cimón, famoso político emparentado con Tucídides y principal dirigente de la facción que se oponía a Pericles.
Los Muros Largos fueron levantados para unir Atenas con el Pireo y con Falero, entre 459 y 456. En 445, se edificó un tercer muro paralelo y que se extendía desde Atenas al Pireo.
Los hilotas estaban obligados como remeros.
Naupacto, en la costa norte del golfo de Corinto, importante base naval ateniense.
Los peloponesios procuran la flota gracias al peculio propio y al dinero depositado en Delfos y Olimpia.
Proporcionaban naves a los atenienses los quiotas, los lesbios y los corcirenses.
Los Muros Largos, hasta el Pireo, tenían cuarenta estadios = 7,1 kilómetros, de los que sólo se vigilaba el lado exterior. Finalmente, todo el recinto del Pireo, incluida Muniquia, sesenta estadios = 10,6 kilómetros, de los que la mitad estaban vigilados.
Con los mil talentos aportaron cada año los cien mejores trirremes y los trierarcas respectivos, los que no debían ser utilizados junto con el dinero para otra cosa que para un peligro similar, si fuera preciso. Los ciudadanos más ricos de Atenas, en numero igual al de trirremes que se necesitase, estaban obligados cada año a responsabilizarse de la manutención y adiestramiento de la tripulación de un trirreme, en parte a costa de la ciudad, y en parte sufragado por su peculio que, de acuerdo con Lisias, podía valorarse en una cantidad que oscila entre 4.000 y 6.000 dracmas.
Frente a muchas naves, aunque carezcan de conocimiento, la estrechez no conviene a pocas naves, aunque tengan experiencia y maniobren mejor, ya que no podría provocar el choque como es debido sin ver a los enemigos a distancia, ni se podría uno retirar oportunamente cuando se encontrara acosada, ni se puede romper la línea enemiga, ni virar -lo que es, precisamente, el privilegio de las naves maniobreras-, sino que sería forzoso convertir la batalla naval en una terrestre y, en esas condiciones, resultan superiores las naves más numerosas.
Los tetes, que ni siquiera tenían la capacidad económica de los zeugitas para equiparse como hoplitas, alcanzaron la plenitud de derechos políticos gracias al desarrollo de la marina de guerra.
La Salaminia y la Páralos, trirremes sagrados atenienses, que destacaban por su rapidez y que eran utilizados para misiones religiosas o de especial solemnidad.
Experiencia marítima de los atenienses. Si se resiste y no se cede, atemorizado por el fragor de los remos o el impresionante arribo de las naves, nunca se forzará un desembarco.
Los remeros inferiores eran los talamitas. En numero de 60 ocupaban la fila inferior de las tres que había en un trirreme, cuya tripulación era entre 170 y 200 hombres.
Céncreas, el puerto más importante de Corinto, en el golfo Sarónico.
Tras los sucesos de los Hermes mutilados, era ya mediados de verano cuando el convoy zarpó para Sicilia. A la mayor parte de los aliados, a los cargueros de aprovisionamiento y al resto de los efectivos que les acompañaban, se les había dado la orden de que se concentraran en Corcira, para desde allí hacer conjuntamente la travesía del mar Jónico hasta la punta Yapigia. Esa expedición fue la primera que partió de una sola ciudad con efectivos griegos exclusivamente, y la más costosa y mejor equipada de cuantas había habido hasta entonces. En lo que respecta al numero de naves, la enviada a Epidauro con Pericles, y luego a Potidea con Hagnón, no fue inferior, ya que en esa expedición participaron cien trirremes de los propios atenienses, mientras que de Lesbos y de Quíos eran cincuenta. Sin embargo, la distancia fue corta y el equipamiento mediocre. En cambio, esa expedición se preveía que sería de larga duración y estaba dotada, en ambos aspectos, según se necesitase, en naves y en tropas de tierra. La flota era el resultado de los enormes gastos realizados por los trierarcos y por la ciudad: a expensas publicas, se daba un dracma por día a cada marinero y se entregaban sesenta naves rápidas sin tripulación, cuarenta de transporte de hoplitas y una excelente oficialidad para ellas. Y por lo que hace a lo demás, empleaban un costoso equipo de enseñas y artilugios, cada cual afanándose porque su nave fuese la que más destacase en elegancia como en rapidez. La magnitud de la travesía era de 110 kilómetros.
Los atenienses zarparon de Corcira rumbo a Sicilia con los siguientes efectivos: el total de naves fue de ciento treinta y cuatro y cuatro trirremes y dos pentecónteros rodios (navíos de un solo banco de remeros, veinticinco por cada lado). De esos, cien eran áticos, de los que sesenta eran rápidos y los demás de transporte de tropas. El resto de la flota lo componían quiotas y demás aliados. Las naves de carga que llevaron su aprovisionamiento fueron treinta transportes de trigo, con panaderos, albañiles, carpinteros, con las herramientas imprescindibles para las fortificaciones, y cien navíos mercantes, que habían sido requisados para la expedición. Muchas otras naves y transportes acompañaban por su gusto y con fines comerciales a la expedición.
En Catana, encontraron a la Salaminia -junto con la Páralos, dos trirremes utilizados para misiones especiales y solemnes-, que había venido de Atenas en busca de Alcibíades, con la orden de que partiese para defenderse de las acusaciones que le hacía la ciudad, de impiedad a propósito de los Misterios y de los Hermes.
Alcibíades, ya un exiliado, no mucho después cruzó en un mercante de Turios al Peloponeso, y los atenienses le condenaron en rebeldía, a él y a sus compañeros, a muerte.
Se encontraba en Lacedemonia Alcibíades. Había pasado en una nave de carga, desde Turios a Cilene, en Élide. Alcibíades había eludido en Turios la vigilancia ateniense.
La táctica ateniense consistía, no en el choque proa contra proa, sino en dar un rodeo para embestir lateralmente.
Los Cuatrocientos temían, como precisamente ocurrió, que la masa de marinos no quisiera seguir prestando su fidelidad al régimen oligárquico y que provocasen su derrocamiento.
La Páralo, nave en la que sólo iban atenienses libres y de siempre enemigos de la oligarquía, incluso cuando no se había establecido.
La Eetionea, un estrecho promontorio que cierra por el oeste el puerto principal del complejo del Pireo.

El nombre de tirano tomó la apelación a partir de los tirrenos, por ser un pueblo temible en la piratería.
Podokhôn, piloto, rector del timón, guía del timón.
Jenofonte, "Helénicas". Mientras el proceso legal de las Arginusas tenía lugar, daba la casualidad de que Critias no estaba presente, sino que se hallaba en Tesalia donde, con Prometeo, armaba a los penestes frente a sus señores. Proceso legal, en el que fueron condenados los estrategos, a pesar de la victoria que habían obtenido sobre Esparta, acusados de negligencia, por no recoger los cadáveres de los muertos en la batalla naval.
Lisias. La batalla naval de Egospótamo, el año 405, supuso la derrota definitiva de Atenas.

Aristóteles
De los instrumentos, unos son inanimados y otros animados. El piloto, el timón inanimado y el animado vigía.
El marino es miembro de una comunidad. Marinos designados en su función, remeros, piloto, vigía. Pero, al mismo tiempo, una cierta definición se adaptaría a todos. La seguridad de la navegación, obra de todos ellos, es el fin al que aspira cada marino.
El piloto es siempre uno de los navegantes. Accidentalmente, participaban del beneficio, cuando personalmente se transforman en uno.
El constructor de barcos atiende a la Simetría.
Frase proverbial de Menandro: Sólo se haría una segunda navegación, llegado el caso, para prtender rectificar el rumbo con tal método de corrección.
En las artes y en las ciencias -tékhne y epistéme-, que no se limitan a una parte, sino que abarcan por completo un género de objetos, es propio de una sola apreciar lo que corresponde a cada género. Ocurre con la construcción de barcos.
Los barcos que están en buenas condiciones para la navegación permiten a sus tripulantes más errores, sin que se destruyan por causa de ellos. Mientras que los barcos mal ensamblados y con malas tripulaciones no pueden soportar los pequeños errores.
En Atenas, los estrategos mandaban en las fuerzas navales. Los que desempeñan las actividades subordinadas se llaman capitanes de trirreme, trierarkhoi, trierarco.
Un ciudadano rico se encargaba del equipamiento de la nave y cumplía, así, con un tipo de impuesto o carga publica.
El constructor de naves necesita tener la materia que sea adecuada a su trabajo. Y en la medida en que se encuentre mejor preparada, forzosamente más hermoso resultará el producto de su arte.
Muelles y puertos deben estar naturalmente bien situados, en relación a la ciudad, con el fin de que el beneficio lo posea la ciudad.
El poder naval, lo mejor es tenerlo hasta cierto límite.
La tropa marinera es libre y perteneciente a la infantería. Los periecos y los trabajadores de la tierra dan abundancia de marinos.
Hipodamo, hijo de Eurifonte de Mileto, famoso arquitecto del tiempo de Pericles, diseñó los planos de El Pireo.
La metáfora es una traslación de un nombre ajeno desde el género a la especie. <<Mi nave está retenida>>. "Odisea" I. Pues estar anclada es una forma de estar retenida.
La magnificencia es propia de los gastos honrosos, de las cosas sagradas y de la preferencia publica. Equipar una trirreme, imposiciones publicas de la ciudad a los ciudadanos ricos. La trierarquía era equipar una trirreme.

De los instrumentos unos son inanimados y otros animados. El piloto es el timón inanimado y el animado vigía. Con las artes el subordinado actúa como un instrumento.
Epidamno, ciudad de gran importancia para el comercio, sobre la costa adriática de Iliria, enfrente de Brindis, más tarde Dirraquio, colonia de Corinto y de Corcira fundada el siglo VII.
La isla de Creta semeja estar naturalmente dispuesta y situada para la dominación de la Hélade. Controla todo el mar Egeo, el Mediterráneo oriental sobre cuyas costas están establecidos casi todos los griegos, dista poco del Peloponeso y de Asia a la altura del cabo Triopio y de Rodas. También Minos logró el dominio del mar y sometió unas islas y colonizó otras y atacando Sicilia terminó su vida allí cerca de Cámico.
El pueblo al llegar a ser causa del poderío naval de las Guerras Médicas adquirió garantía propia y aceptó viles demagogos, a pesar de la oposición política de las gentes razonables. 
El marino es un miembro de una comunidad. Los marinos son desiguales según su actividad (remero, piloto, vigía), pero una verosímil definición común se adaptará a todos. La garantía de la navegación es una actividad de todos, el fin al que aspira cada marino. 
El piloto es uno de los navegantes.
La simetría del constructor de barcos.
Solo se haría una segunda navegación -frase proverbial, Menandro- llegado el caso para pretender rectificar el rumbo con tal método de corrección.
Los tripulantes de trirremes de Atenas, los mercantes de Egina y Quíos y los del transporte de Ténedos. Egina, isla próxima a la costa del Ática y del puerto del Pireo. Quíos, isla próxima a la costa de Asia Menor, los habitantes griegos más ricos, comercio de exportación. Ténedos, isla próxima a la entrada del Helesponto, ruta del trigo, el vino y la cerámica.
El Areópago de Atenas mandó dar ocho dracmas a cada uno e hizo subir a las naves para luchar en Salamina.
Los yápiges, pueblo de origen cretense o ilirio establecido al extremo sureste de Italia y aliado de Atenas, el año 413 envían tropas de socorro a los atenienses con la expedición de Sicilia.
Igual que con las guerras los cruces de canales por muy pequeños que sean cortan la formación de un ejército, cualquier diferencia semeja producir una división.
La buena reputación adquirida por el Consejo del Areópago durante las guerras médicas hizo más severo el sistema. Y a su vez la muchedumbre de las naves al ser causante de la victoria de Salamina (480) consiguió la hegemonía gracias al poder sobre el mar. 
Nápoles, fundada el siglo VII por colonos de Calcis de Eubea. 
El jefe de la armada o general, strategós.
Marsella, sobre el delta del río Ródano, colonia de los focenses de Jonia fundada el año 600. La ciudad marítima mejor administrada, las leyes son jonias y es republicana.
Al norte de África, Cirenaica, uno de los graneros del mundo griego, fundada el año 631 por colonos griegos de la isla de Tera.
Recursos provenientes de tributos de ciudades sometidas. La Confederación ático-délica, derechos del puerto, importación y exportación, explotación de las minas, monopolio de algún producto.
Temístocles persuade al pueblo para construir una flota con los productos de las minas de Laurión.
Los cuerpos que gozan de buena salud y los barcos con buenas condiciones para la navegación permiten a sus tripulantes más errores sin que se destruyan por su causa, mientras que los cuerpos enfermizos y los barcos defectuosamente ensamblados y con malas tripulaciones no pueden soportar los pequeños errores.
Cuatro capas útiles para la guerra, la caballería, la infantería pesada, la infantería ligera y la flota.
Si hay caballería, infantería ligera, arqueros o marina, algunas ocasiones se establecen al frente de cada uno magistraturas cuyos titulares se llaman almirantes. Navarcos de Esparta. Los estrategos de Atenas mandaban las fuerzas navales.
Taxíarkhoi, jefes de tropas ligeras o de arqueros, los diez de Atenas, uno por cada tribu, votados anualmente por la Asamblea y bajo el mando de los estrategos. A su vez los que desempeñan las actividades subordinadas a estas se llaman capitanes de trirreme. Trierarkhoi, trierarcos, el ciudadano rico que se encargaba del equipamiento de la nave y que cumplía con un tipo de impuesto o carga publica.
El constructor de naves precisa que la materia sea adecuada a su actividad y por cuanto se encuentre mejor preparada forzosamente más hermoso será el producto de su arte.
La comunicación con el mar. Si es útil o perjudicial para las ciudades perfectamente administradas. Los muelles y los puertos perfectamente situados con referencia a la ciudad con el fin de que el beneficio lo posea la ciudad. El poder naval lo mejor es tenerlo hasta un límite verosímil. La tropa marinera es libre y perteneciente a la infantería. Los periecos y los que faenan la tierra dan abundancia de marinos.
Escilax de Carianda, geógrafo del año 330, el periplo que efectúa, exploró el río Indo y realizó otros viajes.

Demóstenes
Isla de Lemnos, posesión ateniense ocupada por colonos (klerouchoi) áticos). Acampaba un destacamento de caballería bajo el mando de un hiparco.
Vientos etesios, del NE, de carácter suave, soplan sobre el Egeo coincidiendo con la canícula.
Trirremes sagrados. Bajeles publicos, que transportaban a los embajadores sagrados (theoroí) a Delos.
Trierarcos. Ciudadanos adultos y ricos a quienes, anualmente, los estrategos designaban, para que costeasen el equipo de un trirreme. A partir del 411, cada dos ciudadanos ricos hacían frente a los gastos de dotación de un trirreme, en el cumplimiento de esta liturgia o actividad publica. Trierarquía.
Institución de la antídosis. Si un ciudadano, obligado a hacerse cargo de una liturgía, consideraba que uno de sus ciudadanos exento de esa obligación, era más rico que él, podía pasársela y, en caso de que no aceptase, proponer una transferencia de fortunas, unos procesos de transferencia de bienes, un ingreso de fondos.
Sytophylakes. Vigilantes del trigo, magistrados que ejercían el control del trigo; eran treinta y cinco, veinte para la ciudad y quince para el Pireo.

Licofrón
Cicno perecerá alcanzado por una piedra arrojada por Aquileo, cuando se oponga al desembarco de los Helenes en la Tróade.
El amargo pirata invasor.
Y otros, los Beocios, después de navegar como cangrejos hasta las marítimas peñas Gimnesias, sin vestidos ni calzado, cubiertos de pieles, vivirán armados de tres hondas hechas con doble cuerda. Y cerca de la puerta de Tarteso a las rocas arduas, que a los Iberos nutren, pasarán a Iberia los Beocios.
Y a quienes vagarán por la Sirte -Odiseo y sus compañeros- y libística planicie y el tirsénico canal y su angostura y por las atalayas, para el nauta funestas.
Honrando a la diosa Parténope, un día el jefe de la entera flota mópsope hará que compitan sus nautas en carrera de antorchas, obediente al oráculo, la cual los Neapolitas renovarán, que cerca del asilo del Miseno en los arduos riscos habitarán. Diotimo visitará Neápolis y organizará en honor de la Sirén una carrera de antorchas.
Sepultura a Mopso el titeronio dieron los marineros -los Argonautas- y plantaron después encima de su túmulo mortuorio un remo roto del doble argoo, que es rito para los muertos valioso.
Un grupo de Colcos, enviados por Eetes en busca de los Argonautas, penetraron por el Istro hasta el Adriático.

Menandro
El oleaje feroz del Egeo.

Arato
Con Hélice los aqueos calculan en el mar el lugar donde hay que dirigir las naves. Pero si Hélice está clara, sencilla de distinguir y muy visible desde el comienzo de la noche la otra es pequeña pero mejor para los marinos porque gira en una órbita menor. Hasta los tiempos modernos ha sido comun para los navegantes guiarse con la Estrella Polar la estrella de la Osa menor.
Los gemelos Cástor y Polidemes eran los protectores de los marineros y aparecían en el cordaje de los barcos como el fenómeno que llamamos Fuego de San Telmo.
De ninguna manera es una fase la navegación con remos; son más apropiadas las anchas naves y que los pilotos aguanten los timones segun el sentido del viento.
Las Pléyades eran importantes para los pronósticos de cara a la navegación como lo demuestran los fragmentos de parapegmas.
El mes de diciembre-enero no te metas en el mar al hacer uso del vasto piélago puesto que los días son muy breves. Los funestos vientos del Sur irrumpen ese momento cuando el sol penetra Capricornio; entonces un pernicioso frío desde la morada de Zeus se abate sobre el navegante que queda yerto. No obstante el mar se encrespa todo el año debajo de las quillas; y semejantes a gaviotas estamos mirando a menudo el mar desde nuestros navíos vueltos en dirección a la costa que lejos es bañada de las olas. Un pequeño madero nos separa de la muerte.
Las naves auténticas se deslizan en sentido inverso cuando los marineros vuelven en dirección opuesta la popa al amarrar al puerto; cada uno hace virar en seguida la nave y agitada con el flujo y reflujo toca tierra firme.
La estrella alfa Carinae de la constelación Argo recibe el nombre de Canopo el timonel de Menelao a su vuelta a Troya y es usada como guía de la navegación espacial. La segunda estrella más brillante de formas, una supergigante blanco-amarillenta situada a 1.200 años luz.
La ruta de Arturo es muy elevada mientras que el Altar se sumerge más rápido bajo el mar occidental. Pero también al lado de este Altar la antigua Noche que lloraba las desdichas de los hombres ha colocado un signo preciso de la tempestad en el mar; pues las naves dispersas desagradan su corazón; además hizo brillar en otras partes diversas señales apiadada de los hombres que luchan con las olas. Por eso en el mar no desees ver brillar bajo un cielo envuelto de nubes esta constelación del Altar despejada y esplendente mientras a lo más alto está rodeada de revueltas nubes como muchas ocasiones está abrumada cuando el viento de otoño las empuja. Pues a menudo también la Noche dispone de esta señal para anunciar el Noto haciendo un favor a los atribulados marineros. Si estos hacen caso de sus indicaciones y ponen todo el aparejo organizado su tribulación es en seguida más liviana. Pero si sobre la nave se precipita de pronto un vendaval terrible e imprevisto y desbarajusta todo el velamen unas ocasiones navegan completamente sumergidos, otras si obtienen con sus suplicas que Zeus se aproxime y si relampaguea al lado del viento Bóreas tras sufrir muchas tristezas no obstante se pueden ver de nuevo unos a otros sobre la nave. Con esta señal teme pues al Noto hasta que veas a Bóreas brillar como un relámpago.
El Altar es muy austral y es prácticamente invisible desde Atenas o desde Roma. No obstante como consecuencia de la precesión de los equinoccios era una constelación familiar a los navegantes de la Antigüedad y a los estudiosos de Alejandría.
La Ballena perfectamente visible el marino podría percibir con una mar serena el primer meandro del Río surgiendo del piélago mientras espera a Orión si tal vez esta constelación le pudiera ayudar como referencia para saber la hora de la noche o la duración de la travesía.
Los doce signos del Zodíaco son suficientes para indicar los límites de las noches. Lo que sucede a lo largo del año. Uno encima de su nave podría prever el invierno, la fase de la mar gruesa con solo prestar atención al formidable Arturo (el crepusculo vespertino de Arturo tiene lugar el 30 de octubre. Para Eudoxo la puesta de Arturo al filo de la noche era apta para pronosticar) o cualquiera de las otras estrellas que surgen del Océano a dos luces o a las primeras horas de la noche.
Preocupate con una nave de encontrar aquellos signos que han sido dispuestos por la divinidad para predecir los vientos invernales o la tempestad del mar. El esfuerzo es pequeño y antagónicamente las ventajas que instantáneamente se derivan de la sensatez son innumerables para un ser humano precavido. Ante todo él está más garantizado y al advertir ayuda también a los demás cuando la tormenta se levanta próxima. Pues a menudo uno deberá resguardar su nave bajo una noche calma por temor al mar al día siguiente. Unas ocasiones la tempestad se echa encima al tercer día, otras al quinto y otras llega de improviso. Porque los hombres no conocemos la totalidad de las señales provenientes de Zeus sino que muchas cosas permanecen ocultas algunas de las cuales Zeus si quiere también nos manifestará más adelante.

Eratóstenes
La diosa Atenea elevó al firmamento la constelación de Argo al haber sido la primera nave que se construyó. La nave poseía voz profética y fue la primera que surcó el mar hasta entonces impenetrable.

Cicerón
Paraliena, una de las dos galeras sagradas, que se encargaban de transportar los tesoros de Delos.
Marsella, colonia fundada por los griegos de Focea, hacia el 600, rival de Cartago y aliada de los romanos, estaba regida por un consejo aristocrático de quince miembros.

Virgilio
Cimotoe y Tritón desencallan las naves de los agudos escollos, la propia divinidad las levanta con un tridente y con las ligeras ruedas de su carro se desliza a lo largo de la superficie de las olas.
Las birremes frigias.
Al centro del mar se alza una frondosa isla, tierra sagrada gratísima a la madre de las Nereidas y a Neptuno egeo, errante otro tiempo a lo largo de los mares la divinidad flechadora la fijó a Micon y la alta Giaro.
El puerto de Ortigia, Naxos con sus collados cubiertos de bacantes, la verde Donusa, Clearo y la blanca Paros y las Cícladas esparcidas por el mar.
La selvosa Zacinto, Duliquio, Samos y Nerito erizada de peñascos, los arrecifes de Ítaca, reino de Laertes que produjo al cruel Ulises, las nebulosas cimas del monte Leucates y el promontorio de Apolo temido por los marineros.
Leucaspis y Oronte, capitán de la escuadra licia a quienes el austro anegó con sus galeras viniendo de Troya a lo largo de los borrascosos mares. 
El piloto Palinuro durante su reciente travesía del mar de Libia cayó de la popa a las olas.
Al empuje del Bóreas que sopla del monte Edón retumba el mar Egeo. 

Horacio
La travesía de un mar apacible que tuvo el ejército vencedor de los griegos cuando Palas trasladó su cólera de la abrasada Ilio a la nave impía de Áyax. Áyax, hijo de Oileo, había arrancado a Casandra, la profetisa hija de Príamo, de la efigie de Atenea ante la cual se había refugiado la ultima noche de Troya. Por lo que Atenea lo castigó con la muerte haciéndole naufragar a su retorno de Grecia.
Cuanto sudor amenaza tus marineros una vez que el golfo Jónico resonando haya quebrado la quilla a embates del lluvioso Noto.
Los foceos, cuya ciudadanía cubierta de maldiciones huyó de sus campos y lares patrios. Los habitantes de Focea, Asia Menor, abandonaron su ciudad cuando era asediada por Ciro y huyeron por mar a tierras occidentales fundando la ciudad de Marsella de la Galia.

Con nave chipriota, cual medroso marinero, corte el mar de Mirto. Isla del Sur de Eubea.
El mercader cuando teme al Ábrego, combatiendo con las olas de Icaria alaba el ocio y las campiñas de su ciudad, aunque luego repara las naves rotas incapaz de soportar la pobreza.
Cástor y Pólux catasterizados con la constelación de Gémini y protectores de la navegación
Yápige, viento del Noroeste propicio para los que navegaban a Grecia.
Madera de roble y triple lámina de bronce al pecho tenía aquel que por primera vez entregó una barquilla frágil al salvaje piélago. Tópico de la maldición del inventor de la navegación.
Los hijos de Leda, Cástor y Pólux, uno ilustre con sus victorias hípicas, otro con sus victorias con los puños cuya clara estrella cuando emite sus destellos para los marineros se retiran de los acantilados las agitadas aguas.
Oh nave, oleajes nuevos te arrastrarán al mar. La nave es un símbolo del poder político. Es una imitación de Alceo.
Alceo, acompañándote de plectro de oro proclamas con voz más plena los arriesgados peligros de la navegación, de la huida, de la guerra.
Ya el cortejo de la primavera, las brisas de Tracia que sosiegan el mar empujan las velas. No son aquí los Zéfiros los asociados a la primavera, sino los vientos del Norte a los que llaman tracios con atención a un punto de vista griego. Serían los vientos Ornitios, llamados de esta manera porque coincidían con la llegada de los pájaros (griego ornis).

Dionisio de Halicarnaso
Enotrio salió de Grecia al no estar satisfecho con el lote de tierra que se le había asignado, pues Licaón como tuvo veintidós hijos debía dividir el territorio de Arcadia con igual numero de lotes. Enotrio abandonó el Peloponeso y después de preparar una flota cruzó el golfo Jónico con Peucecio, uno de sus hermanos. Les siguieron muchos de su pueblo y cuantos griegos poseían menos tierra de la precisa. Peucecio hizo desembarcar a su gente sobre el promontorio de Yapigia. Los habitantes fueron llamados peucecios. Pero Enotrio llegó al mar occidental Ausonio llamado según sus habitantes los ausonios. Enotrio edificó pequeñas ciudades contiguas sobre las montañas, que era la manera habitual de residencia de los primitivos.
Cuando los pelasgos entendieron que eran una carga abandonaron la región de Hemonia, la actual Tesalia, obedeciendo un oráculo que les mandaba navegar hasta Italia, que entonces se llamaba Saturnia. Después de equipar muchas naves cruzaron el mar Jónico. Pero se vieron arrastrados hasta que arribaron a una de las bocas del Po llamada espinética, por la ciudad de Espina. Consiguieron prosperidad y dueños del mar llevaban a la divinidad de Delfos la décima parte de sus ganancias marinas, que eran las más espléndidas de las enviadas. Pero cuando los bárbaros vecinos dirigieron una expedición abandonaron la ciudad. Los que pasaron la zona montañosa llegaron al territorio de los umbros, vecinos de los aborígenes.
No mucho tiempo después otra expedición griega desembarcó en la región etrusca de Italia (año 1243) y emigraron de Palancio, una ciudad de Arcadia. Dirigía la colonia Evandro, hijo de Hermes y de una ninfa local de Arcadia a la que los griegos llaman Temis y que estaba inspirada de la divinidad.
Había heredado el trono de los aborígenes Fauno, descendiente de Marte, inteligente y activo a quien los romanos veneran con cantos y sacrificios. Acogió con gran amistad a los arcadios. Y los arcadios según les aconsejó Temis a través de su inspiración escogieron una colina poco distante del Tíber al centro de la ciudad de Roma y edificaron una pequeña aldea que bastaba para la tripulación de los dos barcos con los que emigraron de Grecia. A esta ciudad le pusieron el nombre de Palanteo, Pallanteum por su metrópoli de Arcadia Pallántion; pero los romanos la llaman Palacio, Palatium. 
Harmostai, nombre de los gobernadores que los lacedemonios establecieron en las islas o las ciudades extranjeras durante su hegemonía. Es un término utilizado después de la guerra del Peloponeso.

Ovidio
(Isipile a Jasón) El verdinegro mar se aparta y cuela Argos la insigne con veloz denuedo; tu vislumbras mi alcázar, yo tu vela. / Tengo una torre exenta a cualquier parte do se ve al mar sereno; allá me subo yo por divisarte.
Salir del esquife a tomar puerto.
Vi cumplida mi muerte y tu deseo, vi tu vela mayor al Noto dada llevar la nave a través del gran Nereo.
El mar si un viento leve aspira, tiembla y demuestra un súbito alboroto que con breve espacio transforma como ira.
Viento favorable de tus nautas deseado. Viento para pilotos agradable, mas no para amadoras y amadores a quien cualquier partida es detestable.
Bóreas propicio había las simosas velas impelido. / Pude tus velas ver que iban huyendo. / A mí entretuvieron esas velas bellas, harto más blancas que mi negra suerte.
Mástil, gúmena y entena.
Ves más turbio y negro el cielo que la pez y a Vulturno muy airado, que a la nave más firme da recelo. / Solo un piloto muy osado sale de Abido a Sesto con este día con quien te escribo de dolor cercado.
Tu, Bóreas cruel, bravo, molesto, el menos manso de los vientos leves y el más airado, insano y descompuesto.
Ni la ayuda ni el favor pretendo de vellón ni de nave frente al Noto con tal que nadar pueda el golfo puro.
Ni de mi navegación veré la altura de la Osa Mayor, Elice eterna, ni a la (que divisa el Tirio) Cinosura.
Otros a quien el piélago abandona a Andrómeda la Egipcia noten y a la Gnosida estrella y su corona; / tenga su firme familiaridad, esperen la Osa Parrasia y su septentrional lumbre veneren.
No habrá triste Caribdis que me estorbe ni habrá Cila furiosa que rabiando me trague y sorba. Demás que puedo yo vencer nadando a Melicerta.
El agua es poderosa para dañarme, como el golfo hinchado donde el inmenso océano reposa.
¿Cómo podré nadar el golfo cuando las Pléyades, Bootes y la Cabra Olenia estén al mundo amenazando?
El mar padre de alborotos. Aquí suelen salir despedazados navíos, bergantines y galeras y miserables cuerpos de ahogados.
Neptuno de esta parte le arrojaba, por otra el Aquilón le daba pena y todo unido el mar le confrontaba.
Quien se entrega al mar él se condena.
Grandes señales hay, grande ilusión que el piélago que hoy está inaguantable con Bóreas hará paz y habrá bonanza. / Entonces, cuanto todo esté agradable, hiende esas olas.

Tito Livio
Tras la toma de Troya, Antenor, al frente de un buen golpe de henetos, arrojados de Paflagonia por una sedición, penetró hasta el golfo Adriático y expulsando a los eugeneos, establecidos entre el mar y los Alpes, los henetos se apoderaron de su territorio. Los moradores se llaman venetos. Idéntica catástrofe arrojó a Eneas de su patria. Pasó de Macedonia a Sicilia, desde donde arribó con su flota a los campos Laurentos.
Alejandro, rey de Epiro, abordó Italia con su flota.
Bajo el totalitarismo de C. Junio Bubulco, una flota griega, mandada por el lacedemonio Cleonimo, abordó a las costas de Italia, apoderándose de la ciudad de Thurias, en el territorio de los salentinos. El cónsul Emilio, enviado frente a los enemigos, les dio batalla y les rechazó a sus naves. Se devolvió Thurias a sus viejos poseedores y quedó garantizada la paz en el país salentino. En algunos anales encuentro que fue Junio Bubulco quien marchó a socorrer a los salentinos y que Cleonimo, previendo la llegada de los romanos, abandonó Italia, dobló el cabo de Brindis y le arrastraron los vientos al mar Adriático. Entonces, temiendo por la izquierda la costa sin puertos de Italia y por la derecha los ilirios, los tiburtinos y los istrios, pueblos rudos, famosos sobre todo por sus depredaciones marítimas, penetró hasta el fondo del golfo, hacia la costa de los venetos. Haciendo desembarcar allí algunos de los suyos para reconocer el terreno, supo que la costa era un estrecho de tierra; que cruzándola, se encontraban al otro lado las lagunas bañadas por el agua del mar; que a corta distancia se veía la tierra, que presentaba primeramente una llanura y después colinas; que seguidamente se encontraba la desembocadura de su río más profundo (este era el Meduaco), en el que vieron entrar naves como en segura rada. Mandó Cleonimo dirigir la flota hacia aquel lado y remontar el río, cuyo lecho no era bastante profundo para las naves mayores, por lo que se hizo pasar a las pequeñas multitud de soldados, que llegaron a campiñas muy pobladas, donde los paduanos tenían tres caseríos cercanos a la costa. Desembarcando allí y reservando muy pocos para la custodia de las naves, se apoderaron los griegos de los caseríos, los incendiaron, arrebataron muchos hombres y ganados y arrastrados por el cebo del pillaje se alejan cada vez más de sus naves. Al enterarse los habitantes de Padua, a quienes la vecindad de los galos tenía armados, dividen en dos cuerpos sus jóvenes guerreros; se dirige uno hacia el lado donde habían visto al enemigo disperso por el pillaje; otro, temiendo encontrar en el camino alguna tropa de aquellos bandidos tomó otra ruta y se dirigió al punto donde habían anclado las naves (distaba catorce millas de la ciudad). Mataron a los que las guardaban y se precipitaron sobre las embarcaciones pequeñas; asustados los marineros tienen que navegar hacia la otra orilla del río. Con igual éxito habían combatido en tierra con los merodeadores. Dispersos por los campos, cuando los griegos quisieron volver a sus naves, encuentran a los venetos que se oponen a su paso, siendo envueltos y destrozados. Por los prisioneros supieron que a tres millas de allí se encontraba la flota y el soberano Cleonimo; y poniendo en seguida los prisioneros custodiados en el caserío más próximo, los habitantes de Padua, embarcando unos en naves fluviales, muy a propósito por tener el fondo plano para atravesar las lagunas, y otros en los barcos pequeños de los que se habían apoderado, se dirigen a la flota y rodean las naves, que permanecían inmóviles, temiendo, más que al enemigo, aquellos parajes que no conocían. Más apresurados en ganar el mar que en resistir, aquellas naves son perseguidas hasta la desembocadura del río, regresando los vencedores después de haber tomado e incendiado algunas, que por la precipitación encallaron en los bajos. Cleonimo se retiró llevando apenas la quinta parte de su flota y no habiendo experimentado más que reveses en la parte del litoral del mar Adriático, donde había pretendido desembocar. Los espolones de las naves y los despojos arrebatados al enemigo permanecieron por mucho tiempo en su viejo templo de Juno, donde los han visto muchos que viven. En Padua se celebra anualmente el aniversario de este combate naval con un certamen solemne de barcas en el río que cruza la ciudad.

Petronio
Euripo. Estrecho que separaba Eubea de Grecia, por derivación designa canales y olas.

Josefo
Ante Alejandro de Macedonia y su séquito se retiraron las aguas del mar de Panfilia y les ofrecieron el paso cuando no disponían de otro ninguno para destruir a los persas. Leyenda referida por Arriano y Estrabón, los hechos se sitúan hacia las proximidades de Fáselis, a los confines de Licia y Panfilia.

Arriano
Medio de Larisa, trierarca de la flota de Alejandro, escribió una archaeologia de Armenia.
Onesícrito de Astipalea, timonel del barco que llevó a Alejandro por el Indo.
Monóxylon. Especie de canoa hecha de un solo tronco de árbol.
Es verdad que los desastres sufridos por los atenienses en Sicilia supusieron una desgracia no menor que los tebanos. Alcibíades consiguió imponer su regla de transferir la lucha armada al mar y embarcó la ciudad de Atenas en la expedición siciliana (415-413) en apoyo de dos ciudades sicilianas, Segesta y Selinunte, frente a su rival Siracusa. La expedición ateniense terminó en derrota, precipitando el final de la guerra del Peloponeso.
A su vez, el fracaso ateniense en Egospótamos fue un desastre naval; pero mantuvo su carácter propio. El año 404, Lisandro capturó 160 trirremes atenienses y ejecutó 3.000 ciudadanos que formaban parte de la tripulación; políticamente supuso la pérdida para Atenas de la guerra del Peloponeso.
Toma de Melos y Escíone, fortalezas isleñas. La expedición de la isla de Melos, 415, fue organizada por Alcibíades y ejecutada con crueldad por la pretensión de permanecer no alineados al bando ateniense ni al espartano. Escíone fue tomada por Atenas el año 421 y sus habitantes adultos masacrados y las mujeres y los niños vendidos como esclavos. 
Céletes. Naves ligeras, de pequeñas dimensiones y muy veloces, empleadas para enviar emisarios o mensajes urgentes.
Nave hemiolia. Embarcación ligera con una fila y media de remeros.
Llegó a Tiro procedente de Atenas la nave Páralo. Con la Salamina, una de las naves encargadas de llevar los anuncios y embajadas oficiales, toma su nombre de las costas y playas que solía recorrer. 
Los marineros fenicios se orientaban por la Osa Menor. Los demás hombres a través de la Osa Mayor. En la Osa Menor se encuentra la estrella Polar, la que señala la dirección Norte, y la Osa Mayor ayuda a encontrar la estrella Polar.

Luciano
Escribió Yambulo muchas maravillas acerca de lo que pasó en el gran océano, forjando una mentira notoria para todos, pero componiendo un relato placentero. Viajero y escritor de un relato fantástico, que transmite Diodoro. El relato falso (tò pseudos) puede ser motivo de placer (térpsis).
Los dos grandes viajeros del repertorio mítico. Heracles, yendo a las Hespérides por las manzanas de oro, había avanzado más allá de las murallas. Dioniso era famoso por sus viajes al Oriente.
Isla esférica y luminosa, la luna, desde allí arriba los navegantes avistan la tierra como había hecho el protagonista de la novela de Antonio Diógenes. 
Esciron y Pitiocamptes, famosos bandidos del Istmo de Corinto, a los que dio muerte Teseo, de camino hacia Atenas. 
Cuando los piratas raptaron a Dioniso, hizo que el navío se cubriera de vegetación; pámpanos y hiedra, plantas consagradas al báquico pasajero.
Mar Icario, parte del Egeo, entre las islas de Samos y Míconos.

Artemidoro
Analogía de los pies y los remos.
Posidón, Hipio, divinidad del mar, patrono de los caballos, paternidad de Pegaso y Arión.
En el idioma coloquial llamamos cabras a las grandes olas y el poeta expresa, <<encabritándose con violencia>>, "Ilíada", cuando alude a un fuerte viento, y al mar más temible se llama Egeo, Aigaîon; el vocablo aíx, aigós, significa cabra.
Conexión entre la cornamenta del toro y Poseidón. Bajo la figura de este animal emerge del agua.
Allí donde va el delfín señala que es donde va a soplar el viento.
Díolkos. Sistema de tracción, construido en el Istmo de Corinto, para arrastrar las embarcaciones.
Dioses marinos invisibles. Posidón, Anfitrite, Nereo, Nereidas, Leucótea y Forcis. Visibles, Mar, Olas, Lagos, Ninfas, Aqueloo.
Apolo Delfinio significa viajes y desplazamientos. Advocación protectora de los marineros, templo Delfinio en Atenas.
Cocodrilo, pirata.
Histós, telar y mástil.
Escultura de Poseidón, cerca del Istmo, en el lugar donde se celebraban los Juegos Ístmicos.
Angária. Todo tipo de prestación publica, para el que se podía requerir a una persona en Roma. Transporte de granos, requisa de caballos, de barcos, etc.

Heliodoro
Celebración de las Grandes Panateneas. Los atenienses llevan en procesión por tierra el barco como ofrenda a Atenea. Los efebos cantan el peán ritual en honor de la diosa, al frente de la procesión con la clámide y las coronas.
Ya habrá un segundo barco y se nos ocurrirá otra idea. Proverbio, en Platón, "Fedón".
Atravesado el golfo de Crisa y desembarcado en Cirra, el Parnaso se erige como fortaleza natural y alcázar improvisado.
Tetis, la diosa marina, madre de Aquiles, objeto de culto sólo en Tesalia.
La navegación en la antigüedad era sólo de cabotaje, y para dirigirse desde Tiro a Cartago, era preciso bordear la costa occidental de Grecia y, una vez a la altura de Corfu, pasar a Brindisi y de allí a Sicilia.
Soplaba una brisa ligera procedente de tierra, las olas se deslizaban suaves bajo el barco, como sonriendo a su proa. Esquilo, "Prometeo".
Cirra, puerto de acceso a Delfos, Itea en la actualidad.
Las islas Puntiagudas (Oxeiai) forman parte del archipiélago de las Equínades. Están al Este de Zacinto y Cefalenia y frente a la desembocadura del Aqueloo.
El mar Jónico se ve obligado, al llegar al estrecho de Calidón, a estrecharse después de los anteriores espacios abiertos y fluye al interior del golfo de Crisa (golfo de Corinto), pasando como a través de una embocadura. En su carrera por mezclar sus aguas con las del mar Egeo, se ve impelido en su avance por el istmo del Peloponeso, que forma un dique natural y protege de las inundaciones con su brazo de mar al continente que está enfrente (la península de Ática). A consecuencia de este reflujo natural producido, y como en esta zona del estrecho las aguas se hallan más constreñidas que en el resto del golfo, el choque de la corriente que avanza con la que retrocede, provoca esa ebullición del agua, mar agitado. Las olas se encrespan y se hinchan al golpearse, hasta formar peligrosos temporales coronados de espuma. 
La puesta de las Pléyades marca el fin de la estación apta para la navegación; corresponde a los ultimos días de octubre.
El destino nos descargó desgracia sobre desgracia. Literalmente, ola sobre ola. Proverbio.
Hegemonía de Poseidón. Enálios.
Dos gobernalles y antenas. Dos largas tablas unidas a babor y a estribor, constituían el timón en los barcos antiguos; de ahí que, aun tratándose de un barco, se hable de timones.
Akátion, bergantín, tipo de velero ligero, usado pr los piratas.
Era habitual en los mares, que las naves más livianas siguieran a las de mayor carga, porque estas, por su mayor experiencia, les señalaban mejor el camino.
El galeón tenía mayor velamen y recogía mejor el viento.
La ley pirata asigna la preferencia de una alternativa libre a quien haya abordado el primero una nave enemiga, y a quien haya entrado en combate antes que nadie.
Que Hermes Lucrativo y Poseidón Protector te acompañen en tus negocios, y te guíen con escolta permanente por un mar de buenas corrientes y vientos felices, mostrándote todo puerto abierto, y la ciudad accesible, hospitalaria para los comerciantes  -  El epíteto atribuido a Poseidón tiene carácter apotropaico; la invocación tiende a evitar las tempestades marinas que pueda enviar Poseidón.
Proverbio. Las amarras están rotas. Todo está agotado, el ancla de la ilusión irremediablemente arrancada.
Proverbio. Tiremos nuestra ultima ancla  -  Las naves tenían más de un ancla.
Las ciudades griegas que se encontraban en las proximidades de la costa contaban con defensas similares a los Muros Largos de Atenas, de la mitad de un pletro a lo largo de su extensión.

Filostrato
El Cafereo, promontorio al sur de la isla de Eubea (Cabo de Oro), llamado Xilóphagos, <<devorador de madera>>, frecuentes naufragios.
Los piratas llevan una vida de lujo, sabiendo que están a merced de la justicia.
Malea, promontorio del extremo meridional de Laconia, formaba con la isla Citera un paso peligroso.
Sunion, cabo del sur del Ática, por su altura (380 mentros) prestaba ayuda a los barcos atenienses como guía en su aproximación al continente.
Estrecho de Euripo, entre Eubea y Beocia, corrientes alternativas.
Lequeo, puerto de Corinto, construcciones del Istmo de Corinto en el 67, cuando Nerón viajó a Grecia. En lugar de canal, se usó en tiempos remotos una especie de pista por la que los barcos eran arrastrados por tierra de lado a lado del istmo.
Eritea, isla fabulosa, identificada con Cádiz y Tartessos.
Sacrificios en honor de Menesteo, hijo de Peleo, monarca mítico de Atenas, colaboró en la guerra de Troya, viajero por el occidente del Mediterráneo.
Por haberse excedido los atenienses con los tributos de los aliados, evaluados por Arístides, 478, y haberles impuesto otros más agobiantes a las islas, se les desmembró el poderío naval, por el que eran más temibles, mientras el de los lacedemonios se abría a la mar y no quedó nada de su poderío; la totalidad de sus súbditos se sublevaron y recurrieron a la defección.
Leucótea dio una vez su velo a Ulises cuando, caído de su nave, recorrió el mar con la sola ayuda de sus manos. "Odisea" V.

Amiano Marcelino
Mortales arrecifes de Esciron. Ovidio, "Met." 7. Esciron robaba a los navegantes y arrojaba sus cuerpos al mar en los escollos entre el Ática y Megara, hasta que pereció a manos de Teseo.
La isla de Chipre tiene la suerte de contar con las ciudades de Salamina y Pafos, insigne la primera por su santuario de Júpiter y la segunda por el de Venus; con materiales propios, puede permitirse la construcción de un barco de transporte, aparejado con todo tipo de armamento y lanzarlo al mar.
Descripción de Tracia y del golfo Póntico. El Atos, monte altísimo de Macedonia que, en otro tiempo fue atravesado por las naves persas, y el Cefereo, rocosa elevación de Eubea, donde Nauplio, padre de Palamedes, destruyó la flota argiva, aunque muy distantes, separan el Egeo del mar de Tesalia. El Egeo va extendiéndose paulatinamente y, por la derecha, donde su superficie es mayor, aparece lleno de islas, como las Esporadas y Cícladas, llamadas porque forman un círculo en torno a Delos, célebre por ser cuna de Apolo y Diana. Por la izquierda, el Egeo baña Imbros, Tenedos, Lemnos y Tasos, y cuando sopla un fuerte viento, se lanza con violencia sobre Lesbos.
El promontorio Ceras, gracias a una torre iluminada y construida en lo alto, guía las naves.

Salisbury
Temístocles obligó a los atenienses con saludable determinación a refugiarse en las naves.

Petrarca
Tifis, el piloto de los Argonautas.

Lutero
Symplegadas. Escollos de la mitología semiocultos del Bósforo tracio. No se libraba el navegante de su riesgo a no ser que como el caso de los Argonautas los dioses los inmovilizasen impidiéndoles que se lanzasen.

Rabelais
El dicho de Heraclides Tarentino <<cuando el navío está anclado y el menester apremia es mejor cortar la cuerda que perder tiempo para soltarla.>>
Neptuno con los navegantes.
La torre de madera de Pireo que L. Sila nunca pudo quemar porque Archelaus, gobernador de la villa por nombramiento de la ley Mitrídates, la había embaucado de alumbre.
La réplica de Anacarsis el filósofo es verdadera y fundada con razón cuando preguntado cuál nave era más garantizada dijo <<La que está en el puerto.>>
Platón queriendo describir un ser humano necio, inhábil e ignorante lo compara con las gentes que se crían a bordo de un navío como dentro de un barril y que no ven el mundo más que con un agujero.
Siete días antes y siete después de la bruma nunca hay tempestades sobre el mar. Este es un favor que los elementos conceden a los alciones, aves consagradas a Tetis, que pueden con sus pequeñuelos revolotear la orilla.

Holinshed
La tosca fabricación de barcos para navegar de la época de Neptuno (de fondo plano y anchos) a falta de mejor experiencia para calarlos y trimarlos después de construidos optaron por clavarlos con cueros crudos de toros y bufalos.
Tucídides refiere los trirremes a Ammocles de Corinto; los quinquerremes fueron ideados por Nesichton de Salamina; la galera de seis remeros por Jenágoras de Siracusa.

Bodin
El navío de Teseo duró el tiempo cuyo cuidado se tuvo de repararlo.
Según Plutarco, la republica de Atenas sufrió varias sediciones y transformaciones, debido a que los habitantes del puerto y los marineros vivían lejos de la ciudad alta y andaban en disputa, hasta que Pericles prolongó las murallas para abarcar el puerto.
Los habitantes del puerto del Pireo deseaban un poder aristocrático integrado por  la nobleza y el pueblo, en la época de Solón, cuando los atenienses eran muy puros, que no se podía dudar de su progenie ática.

Sydney
Los piratas laconios.
La ventajosa construcción de sus casas móviles (las naves).
El mar traidor comenzó a hincharse de orgullo con la afligida armada arrastrada a un pozo de oscuridad infernal.
Los crueles golpes en los costados de la nave.
Con aprensión sube y baja la cabeza un barco en una tormenta.
Luchar una galera perfectamente tripulada con un gran navío.

Shakespeare
Que el brutal Bóreas venga a encolerizar a la noble Tetis.

El volumen de la hinchazón del resoplido del aquilón.
Barca presuntuosa, Neptuno ha hecho su bocado.
Los vientos y las olas viejos enemigos en lucha.

Fenelon
Idomeneo, hijo de Deucalión y nieto de Minos, concurrió con los demás soberanos al sitio de Troya y después de la toma de esta ciudad partió de nuevo para Creta. Pero fue muy violenta la borrasca que les envolviera durante la navegación, por lo que el piloto y los más expertos no dudaron de la inminencia del naufragio y la próxima muerte de todos los navegantes. Ante tal situación Idomeneo levantó sus ojos al cielo para invocar a Neptuno y prometió inmolar la primera cabeza que se presentase a su vista. Idomeneo se rescató del peligro y navegaba con alegría hacia el puerto. Pero la cruel Némesis, la diosa inclemente con el castigo de los hombres y particularmente de los soberanos orgullosos impelía a Idomeneo con su mano invisible. De manera que llegando a levantar la vista sus ojos se posaron sobre su propio hijo y retrocedió horrorizado buscando vanamente una cabeza menos querida para inmolarla. Su hijo, ignorante de todo, se echó a sus brazos y quedó sorprendido al ver que su padre no correspondía a su ternura. Y cayó el hijo empapado con su propia sangre como si lo agitasen las Furias infernales después de atravesarle su padre el corazón con su espada. Los amigos de Idomeneo a fin de liberarle del furor del pueblo horrorizado le embarcan con sus navíos. El soplo de los vientos les lleva hasta la Hesperia y fundan allí un nuevo reino a través del país de los Salentinos. 
Chopos para la construcción de navíos.
Tarento fundada por Falante y los lacedemonios. Filoctetes da su nombre a Petilia, la gran ciudad que fundara sobre la costa. Metaponto es una colonia similar.
De creer la costumbre atávica, los tirios fueron los primeros que domaron las olas, mucho antes del tiempo de Tifis y de los Argonautas.
Las mejores naves son construidas en Creta con madera del monte Ida, cuna de Júpiter.
La colonia de Tarento fue fundada por Falanto con un gran numero de jóvenes que reunió de Laconia nacidos de las mujeres que olvidaron a sus maridos ausentes durante el sitio de Troya. Al retorno de sus maridos estas mujeres solo aplacaron a estos, desentendiéndose de sus faltas. Estos jóvenes nacidos fuera del matrimonio de padres desconocidos vivían con el mayor desenfreno y solo pudo contenerlos la severidad de las leyes. Falanto, caudillo lleno de osadía, intrépido, ambicioso de gloria y experto con ganar voluntades los reunió y vino a esta costa y ha hecho de Tarento una segunda Lacedemonia. Filoctetes, el cual ganó  mucha reputación durante el sitio de Troya con la flecha de Hércules, ha levantado también no lejos de aquí los muros de Petilia, menos poderosa pero mejor regida que Tarento. Y a poca distancia también la ciudad de Metaponto, fundada por el sabio Néstor con sus pilios.
Mentor aconseja a Idomeneo. Examina cuántos buques tienen y cuántos marineros. Se informó de los países adonde iba cada nave para el comercio averiguando cuáles géneros llevaba allí y cuáles traía de regreso; cuál era el gasto del buque durante la navegación, los préstamos que se hacían unos a otros, los comerciantes y las asociaciones que formaban a fin de saber si eran equitativas y fielmente respetadas las leyes.

Graves
Anakim, colonos griegos de Micenas, pertenecientes a la confederación de los pueblos del mar, que causaron dificultades a Egipto en el siglo XIV.
Jápeto, Jafet, es venerado en Cilicia, antigua patria de los pueblos del mar, que invadieron Canaan, adoptaron la lengua hebrea y se casaron con hebreos.
Los cadmonitas (orientales en hebreo) descendían de Agenor (Canaan). Se trasladaron, en el siglo XI, de Palestina a Cadmea, en Caria, cruzaron el Egeo y fundaron la Tebas beocia.
La guerra de Troya se libró para dominar el comercio del mar Negro.

Zeus había casado a Poseidón con Anfítrite, anterior diosa del mar.
Como símbolo, Poseidón escogió un caballo. Las grandes olas se llaman <<caballos blancos>>.
Sísifo, rey de Corinto, construyó la primera flota de los corintios. 
La nave Argos tenía espacio para cincuenta remeros. Los argonautas partieron de Yolco, navegando hacia el este y llegaron a la isla de Lemnos. El Argos cruzó el Helesponto y se adentró en el mar de Mármara. El huérfano Hilas hacía de grumete. 


Muelle de piedra, construido para la protección del puerto de Pilos, en Mesenia, al estilo pelasgo.

Puertos corintios de Ceucrae y El Pireo, provistos de arsenales, faros, templos y obras de arte.

Vela. Istión, Istía mégala.

Durante las guerras persa y peloponesa, las flotas constaban de triéreis. Las embarcaciones con más de tres filas de remeros las introdujo Dionisio I, tirano de Siracusa, tras un modelo cartaginés.

Dolon. Vela cuadrada.

Suppara. Velas triangulares.

Hipóblema. Tiras de lona alquitranada.

Variedades de ancla en las monedas de Tuder, Luceria, Cesarea Germanica y Paestum.

En los barcos griegos, a diferencia de las galeras medievales, había un solo remero para cada remo.

El puerto militar de Atenas estaba separado del puerto comercial de El Pireo, y dividido en tres dársenas: Munychia, Cea y Cantaros.

Muelles. Neósoikos.

Arsenales. Skeiothékes, neória.

Onesícrito, almirante de Alejandro, piloto de la nave real que regresó de India, desde la desembocadura del Tigris y del Éufrates.

Arquímedes, en su tratado "Sobre los cuerpos flotantes", muestra que cada líquido en reposo debe tener una superficie esférica, cuyo centro coincide con el centro de la Tierra. Enunció el principio que exige la igualdad de la pérdida de peso con el peso del líquido desalojado. Resuelve la cuestión de hasta qué nivel un barco se sumerge en el agua. Ley hidromecánica.

Tales introdujo la práctica fenicia de orientarse por la Osa Mayor en la navegación. Anaximandro construyó un mapa para uso de los milesios, que navegaban por el mar Negro.

Artemidoro
Analogía entre los pies y los remos.


Díolkos. Sistema de tracción construido del Istmo de Corinto para arrastrar las embarcaciones.

Apolo Delfinio era la advocación protectora de los marineros. Templo Delfinio de Atenas.

Histós. Telar y mástil.


Burton
Corinto (Lumen Greciae la llama Tulio, el Ojo de Grecia) con la razón de Cencreas y Lecheus, esos puertos excelentes, atraía todo el tráfico de los mares Jónico y Egeo y, sin embargo, el país que rodeaba la ciudad era áspero y duro.
Demetrio, Julio César, Nerón, Domiciano, Herodes Ático se comprometieron a hacer navegable el istmo de Corinto para hacer un paso rápido y menos peligroso de los mares Jónico y Egeo; pero debido a que no se pudo realizar perfectamente, los peloponesios construyeron uno nuevo.
Aristóteles debe averiguar el movimiento del Euripo. El angosto estrecho del mar Egeo que separa la isla de Eubea de Beocia configurando un pasaje de la navegación.
El puerto del Pireo fue construido por Musicles.

La Rochefoucauld.
Aquel loco de Atenas, que estaba convencido de que todos los barcos que entraban en el puerto eran suyos.

Racine
Cinegiro, hermano de Esquilo, falleció de forma gloriosa, atacando uno de los bajeles del soberano persa.
(Bayaceto)

Locke
Aquellos hombres que salieron de Esparta con Palanto, o Falanto, fundador de Tarento, fueron hombres libres, independientes, que por propio consentimiento establecieron un gobierno, como menciona Justino.

Voltaire
Torres de la vieja Marsella, hermoso monumento del pueblo jónico. Distinguida ciudad griega y libre de otros tiempos. 

Diderot
El filósofo antiguo Anaxágoras el ateo escapó a un peligro al mostrar a lo lejos, a quienes pensaban calmar a los dioses arrojándolo a las olas, navíos zarandeados por la tempestad y en los que Anaxágoras no estaba.
Onesícrito, hombre poderoso y considerado por Alejandro, discípulo de Diógenes, llegó a ser piloto de la nave real de Alejandro.

Fielding
Las calmas completas del mar son tenidas por el marino experto como anuncios de tempestad. Por esta razón, los antiguos solían sacrificar en tales ocasiones a la diosa Némesis, diosa que estaban convencidos que miraba con ojos de envidia la felicidad humana y sentía un placer especial en destruirla.
Al inicio del "Critón", Sócrates no se inmuta cuando Critón le informa de que el barco de Delos, tras cuya llegada aquel perecerá, probablemente atraque ese día.

Mendelssohn
El barco que los atenienses acostumbran enviar anualmente a Delos adornado con guirnaldas. El vehículo con el que Teseo una vez llevó intactos a Creta los siete pares de niños. La ciudad hizo la promesa a Apolo de enviarle hermosos obsequios a Delos con este barco cada año si retornaban sin daños. Cuando el barco sagrado va a zarpar el sacerdote de Apolo adorna su parte trasera con coronas de flores e instantáneamente comienza la celebración de la teoría. Este festival dura hasta que el barco llega a Delos y retorna de allí, tiempo durante el cual la ciudad es limpiada y nadie puede ser ejecutado publicamente. Si el barco es retenido con vientos adversos el condenado puede ganar tiempo.
Todo en Euripo se balancea en el remolino del mar. Angosto estrecho del mar Egeo que separa la isla de Eubea de Beocia.

Schiller
La costumbre de los habitantes de Táuride, de sacrificar a Diana la persona extraña a la que la desgracia conducía a su costa.

Condorcet
Los geómetras griegos descubrieron en la escuela de Platón las curvas denominadas secciones cónicas, que un día ayudarían a calcular los movimientos de los astros, hacer conocer su curso y conseguir que la marcha de los navegantes sea más consolidada y menos peligrosa.

De Maistre
Cuando la población de Atenas abandonó esta ciudad bajo Temístocles, ¿abandonaron los atenienses su patria o la llevaron consigo en sus naves? 

Jean Paul
Los teólogos de la Antigüedad aceptan con placer los nuevos mundos que descubren los astrónomos; miran esos mundo como naves mercantes, y en ellos embarcan almas destinadas a abordar otras naves y embarcarse de nuevo para profundizar en la creación.

Byron
El primer corsario de la vieja Grecia, el Argos. Embarcación que utilizó Jasón para ir a la busca del Vellocino de Oro.
La barca de Caronte, lívida y funesta.
Helesponto, el estrecho de los Dardanelos que separa la Península Balcánica del Asia Menor.
Cícladas, grupo de alrededor de doscientas islas griegas del mar Egeo, dispuestas con forma de círculo.
El cabo Matapán, guarida de los mainotes, piratas de las islas griegas.
Caïque, barco de pesca del mar Egeo y del mar Jónico, embarcación ligera con vela y remos.
Grato viaje es navegar con Pirro / Por un mar de especulaciones. Pero ¿y si la vela / Se hunde y hace zozobrar la embarcación? / Vuestros sabios no saben nada de navegar / Y navegar largo y tendido por los abismos intelectuales / Cansa de verdad.
La margosa orilla de Albión: / El orgullo de estar entre aquellos / Tenderos ensoberbecidos que, severos, exportaron / Sus ordenanzas y mercancías hasta el polo / Obteniendo peaje hasta de las olas. Albión, nombre que los griegos dieron a la isla de Gran Bretaña.

Chateaubriand
Salió Teseo del puerto de Phalereo para ir a Creta.
El puerto del Pireo forma un arco cuyas puntas se acercan mucho y solo permiten un paso estrecho; le llaman el puerto del león a causa de un león de mármol que Morosino llevó a Venecia el año 1686. Este puerto se dividía interiormente entre tres conchas llamadas el Cántaro, el Aphrodisio y el Zea. Estrabón garantiza que cabían cuatrocientos bajeles y Plinio hace subir este numero hasta mil.
El año 191 a. n. e. los romanos destruyeron las galeras de Antíoco del puerto de Tschesmé, si el Cyso es el Tchesmé de los modernos.
El ensayo de Leuclavio de la Ley marítima de los griegos y los romanos.

De Maistre
Cuando la población de Atenas abandonó esta ciudad, bajo Temístocles, ¿abandonaron los atenienses su patria o la llevaron consigo en sus naves?

Hugo
Un calafate corintio (oficio de calafatear las embarcaciones, cerrar junturas, embutir con estopa, recubierta luego de brea o masilla, para que el barco quede estanco), nueve años antes de la primera Olimpiada, calculó la fuerza de la palanca, inventando el trirreme y creando un remolcador.
Extremos de su boca, voluptuosamente levantados como en los viejos mascarones de Erígone. Amante de Baco, para atraerla se metamorfoseó en racimo de uvas.
Esquilo, hablando de Júpiter y Europa, emplea la palabra fenicia ilpha, navío y toro.
El mar Jónico llegaba hasta el puerto de Veneto y Tregesto, hoy Trieste.

Balzac
Persona atrevida para quemar sus naves, a la manera de Alejandro.

Hegel
Agamenón, con su poder y renombre, reúne a los príncipes de Grecia. Tucídides atribuye esta autoridad a Agamenón, a su dominio hereditario y poder marítimo.
La agricultura, el tráfico marítimo y la vida de los montañeses constituían lo específico de Atenas. Entre los diacrios y los pedieos estaban los paralios, habitantes de la costa, pacíficos y moderados.
Los espartanos vivían en un perpetuo ataque y defensa, como una nave de esclavos.
Otro momento notable en la legislación de Licurgo es la prohibición de cualquier moneda, que no fuese la de hierro. Esta prohibición implica esencialmente la imposibilidad de todo comercio marítimo, de todo tráfico exterior e interior. La actividad esencial que conduce a la cultura no podía tener lugar entre los espartanos. Carecían también de la potencia marítima, que protege y favorece el comercio. Cuando precisaron barcos, los pidieron a los persas.

Humboldt
La isla montañosa de Stromboli era la sede de Eolo, el mayordomo de los vientos, ya que los marineros predijeron el clima después de la violencia de las erupciones volcánicas de Stromboli.
Los marselleses de Focea llevaron el peltre británico a través de la bahía al Ródano, el ámbar (electrum) de pueblo a pueblo a través del territorio de los celtas de las laderas de los Alpes hasta el Po, a través de Panonia hasta Borístenes. Este comercio terrestre unió las costas del océano norte con el golfo Adriático y el Ponto.
Era el carácter del paisaje griego dado el peculiar encanto de una íntima fusión de lo sólido y lo líquido de manera que la división de la forma de la tierra que establece esta fusión debe haber incitado a los griegos a la navegación, al comercio activo y al contacto con los extranjeros. A la supremacía marítima de cretenses y rodios siguieron las expediciones de los samios, foceos, tafios y tesprotes inicialmente destinadas al secuestro y el saqueo. La aversión de Hesíodo a la vida del mar probablemente solo esté atestiguada con una visión singular o la tímida falta de experiencia de las ciencias náuticas del comienzo del continente de Hellas. Los trenes de Dionisos y Hércules, la migración de Io, de Aristeas muchas ocasiones resucitado, del obrador de milagros Abaris con su flecha como una brújula.
La construcción de un nuevo mapamundi de Hiparco según el de Eratóstenes se apoya con la aplicación de exploraciones astronómicas, eclipses lunares y cálculos de sombras para la longitud y la latitud geográfica. El reloj hidráulico de Ktesibius, una perfección de la clepsidra anterior podría proporcionar cálculos más precisos de tiempo; para las especificaciones del espacio desde el viejo gnomon y el scaphe hasta la invención de los astrolabios, las armillas solsticiales y los regentes de dioptrías los astrónomos alejandrinos fueron presentando gradualmente mejores transportadores.

Whewell
Sexto Empírico. La experimentación de los fenómenos de la navegación.

Pauly-Wissowa
Ablabius. Nacido en Creta de padres de la capa baja emprendió el comercio marítimo. Se convirtió y fue el todopoderoso favorito de Constantino. Su hija Olimpia se casó con Constante. El año 331 recibió el consulado con Annius Bassus. El filósofo pagano Sopatros, el cual estaba a favor de Constantino, fue víctima de su envidia. Después de la agitación del trono que siguió a la muerte del soberano fue relevado de su cargo y retirado a sus propiedades de Bitinia, donde Constante hizo que lo mataran. Su casa de Constantinopla confiscada fue habitada por Placidia, la hija de Teodorico el Grande.
Abydos, ciudad de Misia del Helesponto, la actual Cap Nagara con su excelente puerto. Pertenece al príncipe troyano Asios, luego habitada por los tracios, luego colonizada por los milesios de la época de Giges. Sus monedas comienzan con estateros de electrones el año 600.
En Atenas, donde el comercio con Chipre ha sido muy activo desde Solón, la celebración de Adonis se menciona con motivo de la expedición de la flota a Sicilia.
Agesandridas, hijo de Agesandros, espartano, nació el año 411. Enviado a Eubea con una flota del Peloponeso derrotó a los atenienses al mando de Thymochares en Eretria y llevó Eubea a la apostasía. Más tarde dirigió un departamento naval de la costa tracia.
Los primeros tiempos bajo los príncipes aqueos los habitantes de la isla de Egina se habían dedicado a la navegación; los encontramos como miembros de la anfictionía de los estados marítimos jónico-aquea que tenía su centro en Kalauria. Monedas de plata de Egina marcadas con una tortuga. El desarrollo significativo del comercio y del poder naval fue la razón de que los eginetes rompieran con su dependencia de Epidauro. Estuvieron involucrados con la fundación de la ciudad comercial de Naukratis de Egipto. Enviaron colonias a Kydonia en Creta y a Italia a la tierra de los umbros con el carácter de fábricas comerciales. La guerra dio un giro favorable al poder marítimo de Atenas bajo el cuidado de Temístocles. Los expulsados fueron acogidos por los espartanos y se establecieron en el distrito fronterizo de Argólida y Laconia donde fueron atacados por los atenienses bajo el liderazgo de Nicias (424). Después de la batalla de Agiospotamoi (404) Lisandro devolvió a la isla los restos de la población.
Akáteion istion, la vela de hierba (cuadrada) del trinquete de los buques de guerra griegos.
Akáteios istós (mástil de barco, mástil de yate) era el nombre del trinquete (mástil delantero) de los buques de la época de Demóstenes. 
Akáteios keraía, el Fockraa, el Raa ubicado en el trinquete (mástil delantero).
Akatos. Vehículo de vela pequeño y rápido que llevaba remos y velas fue especialmente utilizado por los piratas. Tenía una quilla particularmente afilada. El barco de Caronte se llama akatos. Como barcos de grano. Tripulación de 50 a 30 hombres.
Akrostólion, un adorno ubicado en la parte delantera del barco con la que terminaba la parte superior del tallo (unión del tallo, stólos). La forma griega antigua del stólos esbelto y elevado suele tener la forma de un cuello de cisne o un gancho abierto al frente.
Después que Alejandro fundó dos ciudades, Nikaia y Bukephala como memoria de la victoria sobre Poros y mandó construir barcos en esta tierra de la India rica de madera para la construcción naval se trasladó al río Akesines.
Alexandros limen es como Nearco nombró el puerto de la desembocadura al norte del Indo próximo de la isla de Crocala en Arbitan Gau Sangada, el puerto de Karachi.
Alkimos. Un pequeño promontorio que estrecha el acceso al gran puerto del Pireo desde el oeste. El Poderoso.
El Alphitopolis, una sala de harina del Pireo construido por Pericles pertenecía a las cinco salas del Emporium actual que rodeaba el interior del puerto. Las provisiones de harina se calcularon con los barcos listos para zarpar.
Ameinocles corintios constructores navales.
El año 78 a. n. e. Asklepiades de Klazomenai, Polystratos de Karystos y Meniskos de Miletus, los cuales habían acudido como ayuda de los romanos con sus barcos al estallar la guerra italiana, fueron designados amicus con una resolución del Senado.
Amnisos, el puerto más primitivo de Knossos utilizado por Minos.
Anfictionía, asociaciones de ciudades helénicas, la primera, Delia, se remonta al siglo V. La etimología denota "residentes". La anfictionía de Argos, de Onchestus, de Kalauria, la regulación del tráfico marítimo de Delos Pileo-Délfica.
El año 424 Amphipolis, ciudad griega de Macedonia, se rindió sin resistencia al líder espartano Brasidas, una pérdida muy grave para los atenienses porque principalmente obtenían de aquí sus menesteres para la construcción naval.
Amphíprymnoi. Buques provistos de mandos a la parte delantera y trasera para poder navegar de popa o de proa sin virar transformando la parte trasera como la parte delantera y viceversa; de aquí que también se llamaron díproroi o amphíproroi. 
Amyntas. Comandante naval rodiano destacado con su gran audacia durante el asedio de Rodas el año 305.
El puerto de Anaphlystos era especialmente para proteger las minas de Laurion.
Anaymachíoy graphé. Una demanda de la negativa a la prestación bélica del mar.
Ancorale, la cuerda del ancla, el cable al que se sujetaba el ancla y con el cual se enrollaba. El trirreme recibió cuatro cables de este tipo de ocho dáctilos de 0,1541 metros de epesor.
Androbios, pintor famoso por su retrato del buzo Skyllis cortando el ancla de la flota persa.
Ankaios muy versado de la navegación, tras la muerte de Tiphys, el timonel de los argonautas, ocupó su lugar.
Los primeros tiempos las piedras pesadas se usaban como ancla. Al comienzo como no se habían forjado con hierro estaba hecha de madera parcialmente ahuecada y rellena de plomo; un eje fuerte con dos palas triangulares al extremo inferior, mientras el superior tenía un anillo para el cable de anclaje. Con la invención del hierro tenía un solo miembro. Se atribuye al rey frigio Midas la perfección del ancla al agregar el segundo miembro. Según Estrabón al escita Anacharsis. Para obligar al ancla a agarrarse al suelo se le debe proporcionar un palo de ancla que sea perpendicular al plano de los dos miembros. Cuando se levanta el cable el palo queda plano en el suelo, mientras que la parte inferior de los miembros consecuentemente verticales se clava al suelo con su extremo de forma de pala bajo el efecto de la fuerza de tracción. Como regla general el ancla se soltaba de la proa donde se colgaba de una de las vigas de la grúa que sobresalen lateralmente para mantenerse libre de la pared del barco.
Agklima. El banco de la cubierta trasera del barco destinado al timonel.
Agkoina, anquina, driza, el bastidor simple doble o cruzado. Para que se deslizara mejor la rejilla se compensó con bolas de madera alineadas (tacos, maleoli).
Antandros, antigua ciudad de Misia a los pies del Ida. El comercio de madera para la construcción naval se concentraba en los bosques del Ida.
Anthedon, ciudad de la costa norte de Beocia frontera con Locria. El puerto protegido con dos fuertes presas de piedra, los habitantes famosos por su codicia vivían de la pesca, la recolección de mejillones purpúreos y esponjas marinas y de la construcción naval. Adoraban al mítico Glaucos como su progenitor y protector de los negocios y mostraban el lugar donde debería haber saltado al mar transformado como un demonio marino.
Anthemokritos atenienses (Achagneús) triégagchos de un documento marítimo del año 323/2.
Aphlaston (aplustre). Un adorno situado en la popa que hecho de tres a cinco tablas tiene forma de abanico o de plumaje o similar de la cola de un pez (con las puntas apuntando adelante) era y formaba la torre de los costados traseros. Las imágenes de los barcos primitivos el aphlaston está sujeto con una vara perforante (stylís) que cumplía como asta de bandera y que aparece adornada con un banderín flotante (tainía).
Aphraktoinees (apertae naves), naves con las que los remeros de la fila superior (thranites) sobresalían de sus asientos con el cuerpo encima del casco, de manera que durante los combates reales estaban expuestos a las heridas del costado. Para remediar este problema los barcos de rangos superiores katáphraktoi (tectae) con un edificio blindado y atrincherado a los muros laterales elevados y un piso superior protegían completamente al marinero.
Apobatéria eran los sacrificios a Zeus al desembarcar tras un exitoso viaje del mar. Protección de la navegación.
Apobatra. Pasarela que se tendía desde la proa del barco hasta la orilla para establecer comunicación con tierra.
Apolodoro, hijo del banquero ateniense Pasion, nace el año 394. El año 370 como consecuencia del derroche la propiedad paterna es compartida con los tutores de Apolodoro y su hermano Pasikles. Al retornar de su trierarquía (oficial que capitaneaba un trirreme) de Sicilia pleitea con su padrastro Formión. El año 362 Apolodoro y Pasikles comparten el banco y la fábrica de escudos que Formión había arrendado. Trierarca de Tracia diecisiete meses, desde septiembre del 362 hasta febrero del 360. Su pleito con Formión fracasó. Pleitos con Polykies, Timomachus, Callipulus de Axione, Menon, Autocles, Timotheus, Stephanos de Acharnai.
Apórreta, materiales cuya exportación estaba prohibida como madera, brea, cordaje, lino, objetos importantes para la construcción y el equipamiento de barcos. Injurias calumniosas castigadas con 500 dracmas.
Los Apostoleis eran diez magistrados seleccionados de todos los atenienses los cuales debían velar el rápido despacho de la flota.
El constructor de barcos Ameinocles de Corinto. Tucídides.
El área de Iolkos, especialmente Pagasai generalmente se señalaba como el lugar donde se construían los barcos, cuyo nombre se derivó del edificio (pégnymi) y donde los altares de Apollon Aktios y Embaios también deberían haber sido construidos por los Argonautas.
Después del feliz retorno a casa la nave Argos fue consagrada a Poseidón en los Istmos. Fedro objeta que el barco de Minos es anterior y otros declaran que el barco de Danao fue el primer vehículo o tal vez el barco de Deucalión. Argós significa rápido, brillante.
Los empleados de los atenienses para cobrar los tributos atrasados de sus aliados se llaman éklogeis. Se les añadieron naves ejecutivas que recibieron el nombre de Argyrológoi. Los estrategas que comandaban estos barcos también son ocasionalmente llamados argyrológoi, pero no hay oficiales especiales que lleven este nombre.
Arístides se había opuesto a los ingeniosos y audaces planes de Temístocles para transformar Atenas como una gran potencia naval y comercial. Tras su retorno del ostracismo de Egina recibió un puesto como comandante de las tropas de ocupación de Salamina.
Ariston, hijo de Pyrrhicus de Corinto, se distingue como un timonel del lado de los siracusanos de las batallas navales de Siracusa.
Arcadia. Las ciudades de Tegea y de Orchomenos aparecen primero, luego Mantinea a la que un catálogo de barcos menciona con Pheneos y Stymphalos, Stratia y Thelphusa.
Los griegos se dirigieron al gran oso, Arktos, la constelación de la Osa Mayor, cuyo primer rastreador fue el mítico navegante Nauplios.
Hípalo fue un navegante y comerciante griego del siglo I a. n. e. al cual se atribuye ser el primer griego que cruza el océano Índico al saber la marcha de los vientos del monzón.
El artémon es el trinquete que está inclinado oblicuamente adelante con la vela cuadrada asociada idéntico según su posición y uso al akáteios istós del periodo demosténico. Era útil a los comerciantes del puerto como un mástil de grúa para descargar mercancías.
Asándion. La popa del barco, la cubierta trasera.
Androstenas e Hierón de Soloi informaron del viaje de Nearchus desde la desembocadura del Indo hasta el Éufrates, descripción la cual Arriano transcribe en su "Indica". Los griegos se aproximaron a la India con las campañas de Seleucus Nicator y los viajes de la embajada de Megastenes. De Onesicrito y Megastenes se recibió la primera vez información precisa de Taprobane. Los escritos de Patrocles, quien navegó el Océno Índico bajo Seleucus Nicator y su hijo Antiochus dieron muchas explicaciones del Mar Caspio. La India comerció directamente con Egipto, ya que Hípalo supo utilizar el monzón para este viaje, aunque Eudoxo de Cícico había navegado de Egipto a la India el siglo anterior.
Askómata. Collares con forma de tubos hechos con piel de animal que se clavaban desde el exterior a los agujeros de la pared del barco para que las correas pasaran a través con el fin de evitar la entrada de agua en alta mar. La abertura con forma de hendidura tenía que ser suficientemente ancha para permitir que saliera el cabestrillo plano y luego cerrarse herméticamente alrededor del eje redondeado.
Asphaleios, epíclesis de Poseidón como el otorgante de un viaje garantizado a lo largo del mar y como garantía de paz después del terremoto.
M. Atilius Regulus desde su presidencia (213) acusó al Senado los fraudes de los armadores que cargaban los barcos con mercadería de bajo valor, a propósito los hacían fallar y luego facturaban grandes cantidades.
Pytheas llamó supra Britanniam el área de acción de la inundación más fuerte; en el interior del canal de Bristol la marea de primavera puede subir realmente 15,9 metros; experimentó el embalse de los ríos con el maremoto del océano, importante para la navegación y trajo a los griegos la primera experiencia de la dependencia de las mareas del curso de la luna.
La península de Peiraieus con sus colinas terciarias de arenisca al noreste de Munichia y al sureste de Aktehöhe, la ultima de las cuales proporcionó un excelente material de construcción para los tres famosos puertos cerrados de Munichia (al oeste), de Zea (al centro y al este) y cerrado con la peníncula de Eetioneia el gran puerto de Peiraieus (también llamado Kantharos).
Una comunidad de ciudadanos libres que no fueron aceptados dentro de las fratrías y de las familias probablemente se formó gradualmente con la inmigración y, por tanto, fueron excluidos de todos los derechos del Ática. Fueron precisamente sus círculos y no los de los granjeros y los terratenientes establecidos donde la industria y el comercio tuvieron que fijarse abriéndose la competencia el siglo VII al tráfico marítimo desarrollado de los países mediterráneos. La riqueza del Ática de la excelente alúmina había creado una floreciente industria de la cerámica (jarrones dipylon). Los comienzos del cultivo generalizado del aceite y la higuera pueden remontarse a esta época. La consecuencia de estas transformaciones económicas fue un empuje adelante de las capas bajas, los pequeños agricultores y jornaleros y los comerciantes para ganar una parte del poder político. El primer éxito fue la llamada constitución naucraria, antes del levantamiento de Cylon (630). Ayudó a organizar las exacciones y garantizar una distribución más justa y equitativa de las cargas. Los naukrares estaban subordinados a los polemarcas. Cada naukraria proporcionó un buque de guerra.
El año 493 comenzó la fortificación del nuevo puerto principal del Ática, el Pireo, pero no se completó hasta el año 478. El año 488 estalló una nueva y prolongada guerra con Aigina en la costa ática que formó el pretexto (483) para la ley de la flota de Temístocles.
Áulide, ciudad de Beocia del Euripos, una zona rocosa que se adentra al mar de Eubea ubicada, por tanto, con el catálogo de barcos llamado petréessa.
Si no obstante los miembros de la primera como de la segunda alianza naval ateniense y los aliados de los lacedemonios recibieron la autonomía, el término se estrecha gradualmente.
Azuges enes. Barcos sin remos o barcos de guerra fuera de flotación y arrastrados a los astilleros cuyos bancos móviles habían sido eliminados.

Bacorus de Rodas mencionado con otros escritores geográficos marítimos por Avieno.
Bakchiadai. Dinastía corintia cuyo jefe ejercía el poder supremo de la ciudad bajo el título de Basileus o Prytanis. Bajo el mando de esta casa el año 704 envió a su constructor de barcos Ameinokles de Samos para construir trirremes para los samianos. La erección de los Diolkos del Istmo con los cuales se transportaban los barcos de un golfo a otro. Corcira fue colonizada por Corinto bajo el liderazgo del Bacchiad Chersicrates el año 734. La fundación de Siracusa ese año se atribuye al corintio Arquías de la familia Bakchiadai. 
Baleares. Baliares. El archipiélago toma su nombre griego de los Gymnetes del continente como los marineros griegos llamaban a los jinetes ibéricos casi desnudos. 
Báptai. Los participantes de las orgías de la diosa tracia Kotys o Kotytto que tenía fama de gran indecencia usaban este nombre. El nombre de los buzos o bautizadores puede explicarse con el hecho de que estos misterios aparentemente estaban referidos a la depuración, un baño para los iniciados. Una comedia de Eupolis llevaba el título de "Báptai". El templo de Dionysos, Melanaigis, convocaba este concurso musical una vez al año y el honor de la natación y de los barcos recordaba la saga de las aventuras de Dioniso con los piratas del Tirreno.
La palabra neós debe tener un significado original como tronco de árbol. Este punto de vista es comprobado con la palabra naos porque un tronco de árbol ahuecado también representaba el barco primitivo.
La construcción de la ciudad portuaria de Atenas iniciada el año 490 se completó con mampostería maciza al tiempo que se abordó una nueva muralla. Siguiendo el modelo de Megara, el Pireo y la ciudad de Atenas estaban unidas con dos muros largos y los propileos ocupaban el lugar de la puerta de la fortaleza. La catástrofe del 404 derribó los largos muros y el puerto, pero el año 395 se erigieron nuevos muros en Eetioneia sobre los cimientos que habían quedado y el nuevo Pireo de Konon, un edificio cónico bajo la dirección de Themistoclea (sacerdotisa de Delfos). Se alista un muro macizo de 8 metros de espesor; las entradas del puerto están bloqueadas excepto con entradas estrechas con poderosos rompeolas que tenían torres; el ancho canal que conduce al puerto de Zea flanqueaba las murallas a los dos lados y terminaba con torres salientes.
Bendideia, la fiesta de Bendis del Pireo. El culto toca el del demonio tracio de la vegetación Kotytto.
Biremis. Un barco con dos filas de remos superpuestas (diéres) que sobresaliendo lateralmente a diferentes alturas tocaban el nivel del agua a diferentes distancias de la pared del barco, presentaban dos filas de palas (díkrotos). Cada correa fue guiada por un marinero. Los lembri birremes de la flota de Felipe V son de referencia aquí a la vista de la importante carga de este tipo de barcos.
Productos del plomo. Las anclas del barco.
Bóreas denota en la rosa de los vientos de cuatro barras el viento puro del norte; en la rosa de los vientos de ocho líneas de Aristóteles el viento del noreste. Luego el almirante Timóstenes hizo una extensión con su compás de doce líneas con el norte, el norte-noreste y el noreste. Más tarde Eratóstenes volvió al patrón de ocho barras que se mantuvo. Está indicado como aquilo en la rosa de Vitruvio de 24 golpes seguido al este con las eaecias. Según la visión romana es igual que el vulturnus. El Bóreas es descrito por Píndaro como el rey de los vientos, tiene un poder terrible y salvaje (Homero). Es el saevus, horrifer, asper de los poetas romanos. Trae oscuridad y nubes negras asociadas con relámpagos y lluvias pero aleja las nubes y hace que el éter sea claro y puro. Es beneficioso para la salud.
Brásidas se distinguió el primer año de la Guerra del Peloponeso (431). Rescató la ciudad costera laconiana de Metone del peligro del ataque de los atenienses. Ocupó el eforato. El año 429 fue asignado al navarca Knemos como consejero, participó en la segunda batalla naval de Rhion y Naupaktos y al final del verano con la pretensión de abrumar El Pireo. Acompañó el año 427 al navarca Alcidas a la expedición de la flota del Peloponeso a Korkyra. El año 425 fue trierarca y se distinguió con el ataque de las fortificaciones atenienses de Pilos; fue herido y perdió su escudo. Ante las súplicas de Pérdicas y los calcideos equipó un tren frente las posesiones tracias de los atenienses. Las tropas que llevó eran ilotas y aliados del Peloponeso. Mientras estaba en Corinto equipando el tren los atenienses atacaron Megara y Nisaia. Brásidas hizo que las tropas del Peloponeso y Beocia llegaran el momento adecuado y Megara fue reservada para los peloponesios. Se enfrentó a Arrabaios de Lincestes. Con arreglos apropiados y prudentes supo contener la embestida impetuosa de los bárbaros ilirios, guerreros temidos; él cerraba la retaguardia con 300 escogidos. Murió en Anfípolis luchando con Cleón.
El siglo V los Brykunti como participantes independientes de la primera alianza naval ática pagaron la pequeña suma de 500 dracmas al tesoro federal. Después del año 408 al igual que las otras ciudades de los Cárpatos se unieron a Rodas.
La madera de haya no se pudre dentro del agua. Los griegos la usaron para las partes del barco que yacían bajo el agua.
Budoris al noroeste de la isla de Salamina frente a Megara donde los atenienses habían construido un castillo para controlar el tráfico marítimo hasta y desde Megara. 
Busiris, uno de los marinos griegos del siglo VII. Una figura mítica creada el siglo III que expresa de manera drástica la naturaleza inhóspita de los egipcios y su hostilidad a todos los extranjeros. Es generalmente el hijo de Poseidón y Libia, hija de Epaphos. 

Camara significa cúpula, un invento babilónico. La cabina de la cubierta de popa del buque de guerra cubierta con una cúpula de cañón hecha de madera y tela. 
Celoces, celetes, un tipo de naves de guerra y piratas pequeñas rápidas utilizadas como avisos de inteligencia con pocos remos (10), invención de los rodios.
Centurio classicus, centurio classiarius con la especificación de la escuadra y la nave a la que pertenecía se denominaba al oficial naval más bajo. El hecho de que la tripulación del buque además del periodo anual de mare clausum muy a menudo desembarcaban para las más diversas tareas justifica plenamente la posición de los centuriones con los trierarcas. Por descendencia los centuriones de la flota eran mayormente peregrinos.
Cercurus, un buque de guerra ligero, un mercante con 79 toneladas de peso muerto. Invención de los chipriotas.
Chabrias, general ateniense del Demos Aixone. Estratega los años 390/89 involucrado con la expedición tracia de Trasíbulo desde Estiria que comenzó después de la llegada de la nauarquía de los lacedemonios con Teleutias el momento que comenzó el equinoccio del otoño del 390. Después del término del contrato con los príncipes tracios Seuthes y Medokos fue llamado de la flota el invierno del 390/89 y se le otorgó el cargo de Ifícrates, el cual había vuelto a Atenas desde el Peloponeso, el cargo supremo de los mercenarios del Peloponeso. Sus victorias de Phlius próxima de Mantinea, sus incursiones en Laconia. Estratega el año 388/7 zarpa después que Antálcides se había apoderado de la nauarquía, con 10 trirremes y 800 soldados ligeramente armados a Chipre como apoyo del rey Euagoras. Antes de eso aterriza en Aigina y derrota a los Aiginetes bajo el mando del lacedemonio Gorgopas, el cual cae en la batalla. El envío de grano mencionado por el rey Rhoikos de Amathus, Chipre, se refiere a la participación de Chabrias con la toma de Amathus. Estratega el año 379/8 bloquea el camino del rey espartano Kleombrotos durante su campaña con Tebas. El verano del 378 Agesilao fue a Beocia. Cuando se aproxima a Tebas, Chabrias manda a sus seguidores que no se muevan de su lugar, sino que apoyen la rodilla con el escudo con la lanza caída y esperen el ataque del enemigo, lo que hizo que Agesilao desistiera de la batalla. Tras la invasión de Sphodrias del Ática la primavera del 378 con Timotheos y Kallistratos es nombrado general; apoya a los tebanos la primavera del 377. Estratega el año 377/6 va a Eubea, arrasa el área de Hestiaia, luego gana Peparethos, Skiathos y otras islas del Mar de las Cícladas de la liga ateniense. Como estratega el año 376/5 derrotó la flota lacedemónica en la gran batalla de Naxos. Retorna al Pireo donde recibe una entusiasta bienvenida. Como recompensa de la victoria de Naxos recibe una corona de oro de honor, una escultura de bronce en el mercado y la exención de impuestos para él y sus descendientes. La primavera del 375 va a Tracia donde libera los asediados abderitas del peligro inminente. Los Abderitas como los Thasiians, los habitantes de Chalkis de Athos, los Aenians, Samotracios, Dicaipolitanos son ganados para la liga ateniense. Después que Timotheos fuera depuesto como estratega a fines del año 374/3 es nombrado general con Ifícrates. Estratega el año 363/2 reprime un levantamiento de la isla de Keios que había pasado a los tebanos. Como general, 359/8, va al Helesponto con un buque de guerra y llega a un pacto con el príncipe tracio Kersobleptes desfavorable para los atenienses. Como trierarca fue a Quíos, 357, con la escuadra de Chares. Cuando estalla una feroz batalla en el puerto el barco de Chabrias sufre una fuga cuando choca con el enemigo; mientras la tripulación escapa nadando él no abandona su puesto hasta que se desploma herido de muerte. El año 354 Demóstenes ataca la ley leptineana a favor de su hijo Ctesipo queriendo privarle de la libertad que heredó de su padre de las cargas publicas.
Chares. General ateniense del Demos Angele. Estratega el año 367/6 trae exitosa ayuda a los Filasios acosados por Argos y Sición. La primavera del 360 se encuentra con los generales atenienses Charidemos y Phokion, los cuales dependen de las contribuciones de Lesbos. Con un ejército mercenario reunido por él sigue como estratega en el Quersoneso cuya cesión obtiene de Kersobleptes. Después de la toma de Anfípolis por Filipo recibió el mandato de hacer campaña frente a este. Unido a los estrategas Ifícrates, Menesteo y Timoteo socorre la sitiada Samos. 356, a pesar de la negativa de los demás generales a entablar batalla comienza a luchar con la flota enemiga en Embata, es derrotado y culpa a sus compañeros. Es el comandante exclusivo y se alía con el sátrapa Artabazos. Envía una cantidad de ganado del botín a Atenas para alimentar a los ciudadanos. Gana Lampsakos y Sigeion; era este ultimo lugar donde solía residir cuando no estaba ocupado con las operaciones bélicas. Tras la toma de Tebas, 335, se le nombra con aquellos cuya extradición exige Alejandro. Se dedicó al lujo y al libertinaje. 
Charidemos, líder mercenario de Oreos, Eubea. Su madre poseía el derecho de ciudadanía, mientras que su padre no era ciudadano. Luchó como mercenario frente Atenas cuando era joven y se involucró con la piratería. Prestación bajo Ifícrates en Tracia desde el año 368/7 hasta el 364. Cuando Iphikrates fue relevado de su mando supremo Charidemos no llevó a Atenas los rehenes anfipolitanos que le había encomendado proteger, sino que los entregó a los anfipolitanos. Inicialmente no acepta ninguna oferta, sino que acude al príncipe tracio Kotys. Poco después, sin embargo, va a Anfípolis a sueldo de los olintios para ayudarlos frente a los atenienses. En el camino cae en manos de los atenienses y accede a ponerse bajo Timoteo. Con su prestación de la Guerra Calcídica los atenienses le otorgan la ciudadanía. Nombrado general, 361, con Phoskion y Cares. La guerra con Artabazos se encuentra en la más difícil situación. Envía una carta al general Kephisodotos, el cual está ocupado armando la flota del invierno del 360/59 volviendo a ofrecer a los atenienses su ayuda. Sin embargo, se alquila de nuevo a Kotys. Cuando Kotys fue muerto sabe garantizar el dominio de Tracia para el joven hijo de Kersobleptes. Terminó con Kephisodotos el otoño de 359 un contrato vergonzoso para los atenienses que relevan a aquel del generalato. Es enviado al Quersoneso como general ateniense, 351, cuando Felipe había penetrado con éxito en Tracia. A fines del 349 es enviado desde el Helesponto sustituyendo a Cares con 18 trirremes, 4 000 hombres de armas ligeras y 150 jinetes para ayudar a Olynthus. Alejandro exige su destierro. Teopompo lo describe como voluptuoso y borracho.
Charicis, un río accesible para vehículos en Colchis, 90 estadios al norte de la desembocadura del Phasis.
Charitimides, ateniense, comandante de las 40 naves áticas que fueron enviadas a Egipto el año 459 para ayudar a Inaros.
Charminos desde Atenas comandó el año 412/411 como estratega un escuadrón frente a Samos y perdió a comienzos del 411 con un destacamento de la flota en Syme ante el espartano Artyochos. Ese año apoyó el fallido establecimiento de una oligarquía por la fuerza en Samos. 
Choma. En el Pireo una parte del borde del puerto situada próxima a la Etionea. Los buques de guerra solían anclar allí antes de partir con lo que el Consejo también celebraba allí sus reuniones durante el periodo de armamento. Tal vez se llaman los dos topos que al sobresalir de los dos lados solo permiten una abertura de no más de 55m.
Chrysor, inventor del procesamiento del mineral, descendiente de Agreus y Halieus, los inventores de la caza y de la pesca. Inventó con su hermano la construcción de paredes de ladrillo, según Philon de Biblos inventor de la elocuencia, de la caña de pescar, el cebo, el hilo de pescar y de la balsa, de la navegación general. Referencia con Hefesto y Zeus. 
Chairedemos, ateniense, según la ley de Periandros perteneciente al año 357 propone que el equipo del barco atrasado sea recogido y retenido por la ciudad.
Chalaion, ciudad de los locrianos occidentales. La guerra del Peloponeso con los espartanos bajo Eurylochus frente Naupaktos (426). El lugar de desembarco de Salona (Amphissa), Scala de Salona, hoy Itea, puerto para los barcos de vapor.
Chalkidem, lacedemonio, fue comisionado tras el accidente de los atenienses en Sicilia en lugar del nauarca con el equipamiento de 5 buques de los puertos laconios y partió después de todo tipo de retrasos la primavera del 412 sobre todo como instigación de Alcibíades con algunas tropas peloponesas para la guerra de Jonia con Quíos. Alcibíades lo acompañó. Con su ayuda logró que Quíos, Eritrea y Clazomene desertaran de Atenas y como estratega ático Strombicides se vio obligado a retirarse a Samos. Se alió con Tisafernes pero cayó en Panomos en batalla con los atenienses que estaban desembarcando.
Contributio significa cualquier tipo de contribución o sacrificio. Llamado compensatio a contributio porque se sacrifican la pretensión principal y la reconvención para la mutua redención. También se denominan las contribuciones de los daños del mar según la lex Rhodia de iactu, las contribuciones de los legatarios para complementar la quarta Falcidia que los herederos reciben de su herencia y que deben permanecer sin disminución y también las tasas e impuestos.
Cumba, la barca del pescador y Caronte.

Gautier
Escudos clásicos suspendidos como filas a lo largo de los trirremes griegos y romanos.

Melville
Se deslizaban los buques al pasar bajo las botas del famoso coloso de Rodas.

Poe
El río Alfeo pasaba por debajo del mar y volvía a salir sin que sus aguas hubieran perdido su pureza.
Las olas en las Hébridas se agitan asiduamente.

Flaubert
Nave de Xisutros.

Baudelaire
En busca de su Icaria, nuestra alma es un navío.

Bachofen
Helénays, destructor de naves.
El barco de Atenea tenía cincuenta remos. Tiene como fondo el numero cinco, de significado matrimonial.

Morgan
El acontecimiento del tiempo de Solón fue la institución de los naucraries, doce en cada tribu y por todos, cuarenta y ocho; cada uno de los cuales era una circunscripción local de dueños de casa, de la que se tomaban las levas para la prestación bélica y naval y de la que se recaudaban los impuestos.
Como cada distrito debía concurrir con cinco trirremes, votaban otros cinco trierarcas para comandarlos. 

Flammarion
En nuestro sistema solar, no hay otro Mundo como el de Saturno, para los partidarios de las causas finales. La condición de sus filósofos ofrecía analogía con la de aquel loco ateniense, que se figuraba que todos los buques que entraban en el Pireo, habían sido construidos para él.

Tylor
La idea de la desligadura sobrenatural es arcaica y semeja atestiguada por el astuto Ulises, en su aventura a bordo del barco de los thesprotianos. 
Tal vez podamos explicar, derivado de una fantasía residual de mito solar, el episodio de la leyenda griega, en la que el navío Argos pasaba entre las Symplegades, enormes rocas que se abrían y volvían a cerrar con rápido y violento choque. El acontecimiento tiene por finalidad determinar el porvenir. Si el navío Argos pasaba entre las rocas, el camino quedaría abierto para siempre. El Argos pasó incólume y las Symplegades ya no pueden cerrarse sobre los barcos que pasan.
Cuando Cleómenes bajó a Thyrea, tras haber sacrificado un toro al mar, embarcó a su ejército en navíos, para el país de Tirinto y Nauplia.
En la fase antropomórfica, aparece esa oscura figura preolímpica de Nereo, el Viejo del Mar, padre de las Nereidas, en sus cuevas oceánicas y el homérico Poseidón, el que sacude la Tierra, el que enjaeza los caballos de áureas crines a su carro y los conduce a través de las rompientes olas, mientras los súbditos animales del mar suben al paso de su patrono, un rey muy poco ligado al elemento sobre el que gobierna, que puede salir del mar, para ir a sentarse entre los dioses en la asamblea del Olimpo e indagar la voluntad de Zeus.

D´Aurevilly
Barca de Cinegiro.
Brick griego forrado de cobre.

Hardy
Los valles y las colinas más alejadas retumbaban cuando los marinos invocaban al perdido Hylas en la costa de Misia.

Lee
Un enorme y pesado buque con ojos pintados a cada lado de la proa, rasgo típico de las embarcaciones griegas.

Wilde
Los mercaderes que vienen de Sidón en sus navíos abigarrados traían esteatita. 
La galera tiria de vela púrpura desplegada.

Gould
Critias representa la historia de un viejo mundo, que su familia heredó de su bisabuelo Dropidas, el cual se lo oyó a Solón, quien lo tomó de los sacerdotes de Sais.
Eliano contiene un extracto de Teofrasto, el cual escribió en tiempos de Alejandro Magno, de la noticia de América. En forma de diálogo, entre Midas de Frigia y Sileno.

Rider Haggard
Navíos de Chipre y Sidonia, los reyes eran aliados de Egipto.

Rousselet
A orillas del Oulas se eleva Gallyan, la capital del Konkain. Puerto comercial, tuvo negociaciones regulares con los griegos.

Joyce
Los mercaderes griegos venían a Irlanda con oro y púrpura de Tiro, para venderlo en Wexford, en la feria de Carmen. Citado por Tácito, Ptolomeo y Giraldus Cambrensis. 
Los hoi polloi de cocheros y estibadores.

Forster
Atravesaron Malea y labraron las aguas del golfo Sarónico.

Faure
La aportación anímica ofrecida a los marineros del Egeo y los pastores de Pindo por los tres misioneros simbólicos que venían de Asia, Fenicia y Egipto, Peleo, Cadmo y Dánao.

Shaw
Galeras rodias.

Yeats
Aunque en las batallas navales hay alguna variación de táctica que elude el combate de barco con barco, táctica que requiere la aptitud marinera de una época más experimentada, la velocidad de la nave sigue siendo idéntica desde los tiempos de Pericles hasta los de Constantino.

Toynbee
El dominio del mar Egeo desde una base en Creta. La Talasocracia de Minos, gobierno del mar.
Una herencia de la Sociedad Siríaca proveniente de la Minoica puede haber sido el gusto por la navegación de grandes distancias.
La incitación a que estuvo expuesta la Civilización Helénica en su génesis -la incitación del mar- fue precisamente la que había encontrado la precedente Civilización Minoica. Esta incitación, sin embargo, era enteramente nueva para los bárbaros continentales, los aqueos y afines, de allende la frontera terrestre europea de la Talasocracia de Minos; y cuando se dirigieron al mar en la völkerwanderung (migración, invasión de pueblos) postminoica, enfrentaron una prueba dura y triunfaron de ella, como la que los pioneers de la Civilización Minoica enfrentaron y vencieron en su día.
Para colocar Atenas su aceite en el mercado escita tuvo que introducirlo en tinajas y embarcarlo a ultramar, actividades que dieron nacimiento a las alfarerías áticas y a la marina mercante ática y también, puesto que el comercio necesita moneda, a las minas de plata áticas.
Creta es con mucho la isla más grande del archipiélago Egeo y se halla en medio de dos importantes rutas marítimas del mundo helénico. Todo barco que saliera del Pireo hacia Sicilia tenía que pasar entre el extremo occidental de Creta y Laconia; todo barco que saliera del Pireo hacia Egipto tenía que pasar entre el extremo oriental de Creta y Rodas. Sin embargo, Creta no produjo nada más respetable que curanderos, mercenarios y piratas.
El estímulo especial de la colonización ultramarina aparece claro en la historia del Mediterráneo durante la primera mitad del ultimo milenio a.n.e., por ejemplo, en la fundación colonial mayor, la Siracusa helénica, la cual venció a su ciudad paterna, Corinto. Las colonias aqueas de la Magna Grecia (Italia meridional y Sicilia) llegaron a ser sedes activas de comercio y centros brillantes de pensamiento, mientras que las comunidades paternas aqueas a lo largo de la costa del norte del Peloponeso permanecieron estancadas.
La idea de la fortuna está expresada en la literatura de los tiempos revueltos helénicos por el símil del barco que ha sido abandonado sin piloto, a merced de los vientos y las olas. Platón: "El Político".
El movimiento desordenado del barco sin timón, que representa a los ojos de Platón el caos de un universo abandonado, puede ser reconocido por un espíritu dotado con el conocimiento necesario de la dinámica y de la física, como un ejemplo perfecto de la conducta ordenada de las olas y las corrientes en los medios del viento y del agua.
Los bárbaros navegantes que merodearon por los bordes de la talasocracia minoica y saquearon Cnosos alrededor de 1400, habían hecho su primer aprendizaje como mercenarios de Minos, antes de que aspiraran a sustituirlo.
El Pireo, el más viejo crisol de pammixia social en el mundo helénico.
El cruce del Helesponto, que llevó a cabo Alejandro en 334.
Sueños ambiciosos de los aventureros helénicos del siglo VI, que se habían hecho a la vela hacia Tartessos o que habían sido mercenarios en Egipto o Babilonia.
El origen del término Europa podría ser un disfraz griego de la voz fenicia ereb (que corresponde a la árabe gharb), que significa la región oscura en que el sol se pone en Occidente; o si no era un término técnico tomado de los marinos fenicios, sino una palabra griega, podría significar la terra firma <<de ancha faz>>, a diferencia de las islas; o podría ser el nombre de una divinidad de ancha faz porque era bovina.

Jaeger
Ya una vez había advertido Epaminondas, que el Propileo de la Acrópolis ateniense debía ser trasladado a la Cadmea de Tebas. Y su primer paso había sido reunir una gran flota e iniciar negociaciones con Quíos, Rodas y Bizancio, aliados de Atenas.
Durante el influjo de Tebas, el centro de gravedad político se había trasladado desde el mar Egeo y el Peloponeso, los dos campos de fuerzas habituales, hacia el norte, no preparado políticamente.
Demóstenes disponía que las simmorías -asociaciones de contribuyentes, cada una de las cuales tenía a su cargo el apresto de una nave- fueran redistribuidas de manera que el numero total de ciudadanos se elevara a cada grupo de mil doscientos a dos mil. Rebaja de la cuota de contribución, política fiscal.

345. La partida para Creta de Faleco, el capitán mercenario focense.

Febvre
Los griegos fueron los primeros exploradores. El nacimiento y el progreso de una geografía viva es mérito suyo. Curiosos e impávidos, hicieron retroceder los monstruos poderosos, que generaban el espanto más allá del Helesponto, del estrecho guardado por Escila y Caribdis, y de las columnas de Hércules. Sembraron el litoral mediterráneo de ciudades nuevas, hijas de sus ciudades marinas. Los griegos no podían extraer una noción de Europa de la experiencia directa. Los ribereños del mar luminoso no estaban en condiciones de adquirir una noción científica de Europa.
Mar permeable, Pontos.

Wolfe
Los remos tronchados, la enorme acumulación de naves en Salamina.

Farrington
Tales fue un mercader e instruyó a los griegos en un método, procedente de los fenicios, para orientarse en el mar.
Tales inventó un método para calcular la distancia de los barcos a la costa.
Hipodamo de Mileto hizo unos planos del Pireo, Rodas y Turios. Las ciudades de Alejandría y Priene reflejarían la persistencia de su influjo.
En 850, colonos de Focea ocuparon el territorio italiano de Cumea, cercano a Nápoles, y a fines del siglo VII existían poblados focenses en Mainake, Málaga, y Marsella. Desde Mersella, emprendió el capitán focense Piteas, hacia 300, un gran viaje. Sorteando la vigilancia de los cartagineses, su propósito eran las minas de estaño de Cornualles, que visitó y describió.
Arquímedes, nacido en Siracusa, botó una gran galera para el rey Hierón con un sistema de poleas compuestas y defendió Siracusa contra el ataque de los romanos, mediante máquinas.

Pessoa
Fórmula aventurera de los argonautas. Navegar es menester, vivir no.

Remarque
El mar de los griegos, de color violeta y del color del vino.

Fischer
El mercader marítimo era un hombre habituado a jugarse la vida, sin vinculación alguna con la tierra y con su inalterable ritmo de siembra y cosecha, sino vinculado a un mar inconstante, caprichoso, en perpetuo movimiento, que podía hundirle o elevarle en la cresta de sus olas. Todo dependía de sus aptitudes, de su determinación, de su movilidad, de su inteligencia y de su suerte. En la historia del mundo antiguo -que consideraba la incursión del dinero en la economía natural como algo perverso y reprobable- el valor de cambio nunca había triunfado sobre el valor de uso. Las cualidades concretas del objeto intercambiado -metal, lienzo o especias- llegaron a ser secundarios para el mercader; su cualidad abstracta -el valor- y la forma más abstracta de propiedad -el dinero-, se convirtieron en lo esencial. En las ciudades costeras del mundo antiguo dedicadas al comercio siempre encontramos el gran príncipe-mercader, enfrentado con las familias aristocráticas, y proclamando sus derechos con una personalidad fuerte, eficiente y triunfadora.
El mundo griego era un mundo de mercaderes marítimos.

Savinio
Los navegantes del Egeo alzaban ilusionados la vista a la escultura de Palas Atenea que brillaba sobre la peña de la Acrópolis ateniense.

Braudel
El auge del segundo milenio de los veleros de las Cícladas, provistos de velas, remos, espolón y quilla.
Proverbio griego. <<El que pasa el cabo de Maleas abandona su patria>>. Sur del Peloponeso.
Los cretenses fueron los primeros que osaron ganar por alta mar el sur del delta del Nilo. Ulises llega a Ítaca y se hace pasar por mercader cretense.
Durante la época helenística los navíos van durante cuatro días de Rodas a Alejandría.
Ya Hesíodo aconsejaba a su hermano Perseo, <<Cuando llegue el invierno no dirigir ya el barco por la mar vinosa, sino cultivar la tierra>>.
Los navíos de guerra con remos, largos y estrechos, como los trirremes atenienses, que dieron cuenta de la flota persa en Salamina el año 480, trirremes o quinquerremes con tres o cinco filas superpuestas de remeros, semejan las galeras de los siglos XV y XVI.

Desde comienzos del segundo milenio ha aparecido el barco egeo. Navíos ligeros, va a vela y a remo, provistos de carena y quilla. Se implanta una experiencia cosmopolita. Las magníficas cerámicas cretenses invaden el Levante; las lozas azules de Egipto copiadas de Ugarit acompañan a los muertos de las tumbas micénicas; en los muros de las tumbas de Tebas la fantasía de la pintura cretense choca con la austera egipcia, mientras las flores de loto y los pájaros acuáticos del lejano Nilo inspiran a los ceramistas cretenses o micénicos
Tres rutas marinas atraviesan el Mediterráneo. La primera pegada a los litorales del norte, a Grecia, llega hasta Corciro (Corfú); el canal de Otranto, el estrecho de Mesina, el mar tirreno, el litoral siciliano; ruta de las navegaciones griegas recorrida desde la época micénica. La ruta meridional bordea la costa de África y Egipto; el término es el estrecho de Gibraltar. La tercera ruta corre por el centro del mar apoyada por una cadena de islas, Chipre, Creta, Malta, Sicilia, Cerdeña y Baleares.
Playa de Salambo. Dos puertos, Cnido y Delos.

W. Golding
Barco griego mitológico. Una vez hubo un barco, que floreció en demasía, que las hojas casi no le permitían ver. Había una parra, que le salió en el mástil y con la que se emborrachaban todos.

Lampedusa
Fenicios, dorios y jonios desembarcaron en Sicilia. Arquidamo y Filóstrato.

White
Viento meltemi.
Ruidos marinos del Ática.

Papp
Arquímedes de Siracusa. Su "Tratado sobre los cuerpos flotantes", muestra que cada líquido en reposo debe tener una superficie esférica cuyo centro coincide con el centro de la Tierra. Enunciado del ensayo que exige la igualdad de la pérdida de peso con el peso del líquido desalojado. Resuelve la cuestión de hasta qué nivel un barco se sumerge en el agua. Ley hidromecánica.

Calvino
Atracaderos en la desembocadura del Escamandro, donde las naves aqueas esperaron durante diez años el reembarque de los sitiadores, hasta que el caballo claveteado por Ulises fuera arrastrado a fuerza de cabrestantes por las Puertas Esceas.
(Las ciudades invisibles)

Wilson
Entre 1540-1100, se habían producido importantes migraciones de pueblos en el Mediterráneo oriental. En primer plano aparecían nuevos pueblos, de los que más tarde surgirían los moderadores de los destinos de Europa; griegos y romanos. Los nuevos pueblos indoeuropeos procedían de países situados en el noreste de Europa, extendiéndose en las regiones costeras del Mediterráneo oriental. Los pueblos del Mar. En la búsqueda de una nueva patria, destruyeron el equilibrio del viejo Oriente. En los mitos griegos se reflejan las incesantes migraciones de este periodo. Jasón y los Argonautas, Teseo y el Minotauro, el sitio de Troya.

Copleston
Las invasiones dorias del siglo XI hundieron la vieja experiencia humana egea. Jonia mantuvo el ánimo de la experiencia anterior, dio a Grecia las monedas acuñadas, las letras y los marinos.
Tales. Elaboración de un almanaque e importación de la práctica fenicia de orientarse con la Osa Mayor para la navegación.
Anaximandro. Construcción de un mapa para uso de los milesios que navegaban por el mar Negro.

Graves
Palamedes había inventado los faros, las balanzas, los pesos y los cálculos, el alfabeto, el lanzamiento del disco y el arte de apostar centinelas.
Una pica de siete metros de largo, que esgrimen en los combates navales y manejan cinco marineros.
Anakim, colonos griegos de Micenas, pertenecientes a la confederación de los pueblos del mar, que muchas dificultades causó a Egipto en el siglo XIV.

Cipolla
A partir del año 490, las ciudades griegas se vieron sometidas a la amenaza mortal de las sucesivas y poderosas expediciones bélicas de los persas por tierra y por mar. Los persas fueron derrotados en Maratón (490), Salamina (480) y Platea (497). Al haber sido Atenas la abanderada de la resistencia se unieron a través de la Liga de Delos (478) las ciudades griegas y se sometieron voluntariamente al pago de una contribución destinada a constituir un tesoro de guerra. Atenas administró ese tesoro y señaló el montante de la contribución. Algunas ciudades tenían que pagar con moneda; otras se comprometieron a proporcionar un numero de naves y hombres armados. Los aliados se transformaron como ciudades controladas por Atenas. Las ciudades que se habían comprometido a contribuir con naves y hombres armados fueron obligadas a efectuar los pagos con dinero contante. Las ciudades que mostraron deseos de separarse de la liga fueron obligadas por la fuerza a seguir formando parte. El año 454 la sede del tesoro fue instalada y trasladada a Atenas y los atenienses bajo la guía y la incitación de Pericles entraron a saco para financiar construcciones publicas destinadas a embellecer la ciudad.

Abbagnano
Meliso, el general que destruyó la flota ateniense los años 441-440.
A Filipo de Opuncia se atribuye el diálogo pseudoplatónico "Epinomis". La finalidad es decidir qué estudios conducen a la sabiduría. Excluidas las artes y las ciencias que solo contribuyen al bienestar material y a la diversión (el arte de la guerra, la medicina, la navegación, la música), queda la ciencia del numero que lleva consigo todos los haberes (la moral, la razón y la organización). Pero la organización rigurosa son los cuerpos celestes.

Wiener
La voz griega kubernetes o timonel, la raíz de la cual los pueblos de Occidente han formado poder político y sus derivados.

Yevtushenko
El mar Negro balanceó las trirremes de los argonautas a la busca del bellocino de oro bajo las nubes del amanecer de la humanidad preñada de aspiración.

White
Ruidos marinos del Ática.

W. Golding
Barco griego mitológico. Una vez hubo un barco, que floreció exageradamente y las hojas casi no lo permitían ver. Había una parra, que le salió en el mástil y con la que se emborrachaban todos.

Bengtson
Pséphisma (decreto) de Megara. Pericles cerró a los megarenses, aliados de Corinto, los puertos en el ámbito de la Liga Marítima.
La Segunda liga Marítima Ática, 386-382. Calístrato.

Foucault
Filodemo considera la parresía una cualidad, una virtud, una actitud personal y una techné comparable al arte de la medicina y al arte de pilotar una nave.
La navegación y la medicina están unidas con la política, pues en política es crucial la ocasión, el mejor momento; y se espera de alguien, que sea más competente que los otros y que deben obedecer.
Speculator. Examinador o inspector, alguien que inspecciona la carga de un barco, o la actividad que llevan a cabo los que construyen una casa.
Mal de mar que produce estar a bordo de una embarcación que no avanza, sino que gira y cabecea en el mar.
Los griegos nunca dejaron de comparar al buen jefe con un timonel, que mantiene su nave lejos de las rocas. 

Capelle
Mileto, patria de la filosofía, en el siglo VI era una metrópoli del comercio y la navegación.
Sosiego (esokía). Galene, reposo del mar.

Kirk-Raven
Tales delimitó la Osa Mayor y atrajo la atención de los marineros milesios hacia su utilidad para la navegación.
Razonamiento de los triángulos semejantes, para calcular la distancia de los barcos en el mar. Bastaba con que se conociera la altura del investigador sobre el nivel del mar, para que, con la ayuda de un teodolito primitivo, dos varas (una en calidad de punto de mira y la otra de línea de nivel aproximada), pivotadas sobre un clavo, se pudiera hacer el cálculo.
Las cartas jonias (mapas) semejaban la de Anaximandro, perfeccionadas por su conciudadano Hecateo. Anaximandro dibujó un diseño circular, en el que las regiones conocidas del mundo formaban segmentos iguales. Su saber empírico de la geografía se fundaba en las noticias de navegantes, que en Mileto, centro comercial y fundador de colonias, serían abundantes y variadas. El filósofo fue al frente de una expedición colonizadora a Apolonia, en el Egeo.
Anaxímenes. El mar refulge cuando es escindido por los remos.
Meliso de Samos. Comandante al frente de la armada de Samos, venció a los atenienses de Pericles, 441/440.

Gigon
Eutimeno de Massalia, una generación después de Tales, recorrió una parte del océano Atlántico, hasta la costa de África occidental tropical y describió su viaje en un libro desaparecido. Probablemente ha llegado hasta la desembocadura de uno de los grandes ríos africanos occidentales y creído que allí se separaba el río del Océano, fluyendo luego en dirección Oeste-Este hacia Egipto a través de África.
Caso de deducción. La época clásica conoció un poema arcaico con el título de nautiké astrología, "Astrología para marineros", en el que de los astros se deducían reglas meteorológicas y modos de orientación y otras cosas útiles para la gente de mar. Su autor es Focos de Samos. El poema fue atribuido a Tales. Se proponían reglas para calcular la distancia entre barcos, métodos simples y prácticos como los que se utilizan en cualquier profesión. Pero el discípulo de Aristóteles, Eudemo de Rodas, habló de él, al redactar su "Historia de la geometría", y afirmó que Tales no hubiera podido establecer estas reglas, de no haber sabido el teorema sobre la identidad de dos triángulos.
Ya en Hesíodo, las Pléyades juegan un papel para el labrador y el marinero.
Aceptar el notable kubernan, por el que la acción de lo ilimitado es comparado con el gobierno de una nave.
Era corriente en tiempo de Anaximandro la comparación de la organización política con una nave precisada de timonel (Alceo, Teognis).
Anaximandro no abandona la terminología mitológica (habla de lo ilimitado como del timonel de la realidad), pero en primer término encontramos categorías imparciales.
Para explicar el relámpago, que surge al romperse del aire luminoso a través de la envoltura de nubes oscuras, ofrece Anaxímenes la comparación de cuando brilla el mar oscuro al ser abierto por el golpe del remo. Este símil aparece en Cleidemo, autor de un libro sobre ciencias de la naturaleza, del siglo V.
En los "Academici", de Cicerón, objeta a los dogmáticos que el mar nos semeja de un azul oscuro, pero cuando el remo hiende las ondas, refulge purpúreo.
En referencia con la cosmología, Jenófanes ha visitado las islas de Paros, en el Egeo (o Pharos, en la costa de Dalmacia), Malta y Líparis, y llegado hasta Palermo.
Para la física, es interesante que Jenófanes presente en dos casos la incandescencia de los meteoros, producida por el movimiento rápido. Uno es el relámpago y otro el fuego de San Telmo, que aparece sobre los mástiles de los barcos en alta mar, y que para los griegos equivalía a la presencia salvadora de los Dióscuros, Cástor y Pólux. Hallamos en Jenófanes la primera explicación de Iris y los Dióscuros. Se trata de fenómenos descritos por la poesía y Jenófanes quiere explicar pasajes poéticos.

Yourcenar
Marinero de Egina.

Daniel
Christopher Hawkes. Inglaterra fue visitada por el famoso explorador mediterráneo Piteas, el griego de Marsella, cuyo viaje se efectuó probablemente entre los años 325 y 320. Su descripción parcial casi nos adentra en la historia. Sin embargo, los caminos que conducen a las Islas, el del Mediterráneo a través del mar occidental, como el de Europa central a través del mar del Norte, habían sido ya recorridos mucho antes de la época de Piteas.
Evans. Las investigaciones del profesor Petrie en Egipto han mostrado que, en el comienzo del segundo milenio, jarrones egeos importados se abrían camino hasta el valle del Nilo. Ya en los grandes días de la dinastía XVIII, en el siglo XVI y siguientes, esta transferencia era de tal magnitud, que el arte micénico, entonces en pleno apogeo, estaba retornando ante el de los faraones contemporáneos e importando un elemento europeo vivo, en el estilo arcaico y convencional de la tierra de las pirámides.

Beals
Los griegos importaban por mar el hierro puro; sus especialistas sólo sabían las artes de la fundición y la forja.

Aymard
Emplazamientos explorados por los marinos aqueos. Caribdis y Escila, la caverna del Cíclope, la gruta de Circe.

Coarelli
Las primeras colonias griegas de Occidente. Ischia (780-770) y Cumas (750).

Chevalier
Thule. Isla de posición indeterminada, para los clásicos el extremo límite septentrional del mundo, epíteto de <<ultima>>. Explorada por el massaliota Piteas, en la región de Islandia o las islas Shetland, su simbolismo se allega al de los países hiperbóreos, evocados por los griegos en la poesía y la leyenda; comarca fabulosa, con días sin fin en el solsticio de verano y noches sin fin en el solsticio de invierno.

Dieren
Las tierras boscosas de Grecia, de Italia y de la España medieval ya no existen por la tala de árboles para construir templos, barcos y casas.

Renault
El principal don de los Misterios de Samotracia era la protección de los naufragios.
Para hacer señales a larga distancia el mundo clásico utilizaba el heliógrafo y el faro (este anuncia la caída de Troya, "Agamenón"). Exigían una cadena previamente pactada de señalizadores, no existían códigos y dichas señales sólo podían confirmar un hecho esperado.
Los barcos de guerra no tenían la aptitud para trasladar víveres suficientes. Importancia de contar con tropas terrestres de apoyo.
Los cantantes de salomas organizaron a los remeros.

Roberts
Para acarrear grandes cantidades de productos, el transporte marítimo y fluvial era más barato y sencillo que el terrestre, lo que sería una constante en la vida económica. Antes de que las caravanas empezaran a llevar hasta Mesopotamia y Egipto las gomas y resinas de las costas árabes de sur, las transportaban los barcos por el mar Rojo y las mercancías iban y venían en navíos mercantes por el mar Egeo.
Los hablantes del griego jónico, los jonios, procedentes del Ática (donde Atenas había sobrevivido o asimilado a los invasores que siguieron a los micénicos), arraigaron en las islas Cícladas y en Jonia donde, como inmigrantes y piratas, capturaron o fundaron ciudades en la costa. 

McCullough
Massilia, el gran puerto fundado por los griegos, ciudad elegante y griega, blanca y luminosa.
Emporium tiene dos significados. Podía denotar un puerto cuya vida comercial dependía del comercio marítimo (la isla de Delos era un emporio), o se refería a un gran edificio en el muelle del puerto, que albergaba las dependencias para la exportación y la importación.
Esmirna fue una de las grandes ciudades portuarias del mar Egeo, en Asia Menor. Estaba próxima a la desembocadura del río Hermus. Fue en origen una colonia jónica y sufrió una extinción de tres siglos, entre el VI y el III. Al reconstruirla Alejandro Magno, no volvió a recuperarse. Su actividad era monetaria, pero fue también un centro intelectual.
Mar Euxino, el actual mar Negro. Los griegos lo exploraron y colonizaron ampliamente durante los siglos VII y VI. Contaba con numerosas rutas de comercio celosamente protegidas. Quien controlase el Bósforo tracio, el Propontis y el Helesponto podía reclamar el peaje entre el Euxino y el Egeo. Por los tiempos de Cayo Mario el control lo tenía el rey de Bitinia.

La verdadera ciudad que existía entre Roma y las Hispanias era Masilia, situada sobre un soberbio estuario a setenta kilómetros al este del delta del Ródano y sus marismas.
Los griegos había explorado Provenza, pero habían permanecido hacia el interior alrededor de Masilia y habían preferido ser indiferentes a los bárbaros. Llevaron la vid y el olivo al sur. 
Situada a trece kilómetros al este de Tesalónica por la via Egnacia donde el ensanchado río Estrimón salía del lago Cercinitis con su breve recorrido hasta el mar, Anfípolis era una ciudad maderera con buenos astilleros.
Fue con aquel ambiente mezcla de pánico y adulación donde Pompeyo puso los pies cuando desembarcó con los dos Léntulos al puerto de Mitilene de la gran isla de Lesbos.
Los griegos nunca han guerreado con bárbaros, han preferido encerrarse dentro de ciudades costeras y evitar la tierra del interior habitada por los bárbaros, con sus colonias del mar Euxino y el Mare Nostrum.
La próspera ciudad portuaria de Dyrrachium.

Rutherfurd
Barco mercante del Mediterráneo, con armazón y cuadernas de madera y las tablas perfectamente ensambladas y pegadas con brea. En el centro se alzaba un grueso mástil y una gran vela cuadrada de cuero enrollada en una verga; en la popa había instalado un gran timón, para gobernar el barco y estabilizarlo. Transportaban un cargamento de grandes barricas de vino, rollos de lienzo incrustado con cuentas y piedras preciosas; ámbar, que los isleños sabían elaborar, perlas de gran tamaño y joyas magníficas. Buscaban pieles y perros de caza (mastines).
A lo largo de los siglos se habían escrito relatos sobre la isla, escritos de mercaderes griegos. El viejo Tiberio había encargado al gran geógrafo Estrabón, que preparara un tratado sobre el comercio de Gran Bretaña.

King
Dibujado un barroco pez, criaturas semimitológicas de ancha cola, que se pintaban sobre las olas, en las cartas de navegación muy arcaicas, horripilante, monstruoso, con ojos azules a lo Betty Boop, agallas rojas y aleta dorsal amarilla, simpático y exuberante.

Authier
En el transcurso del siglo VIII, colonos dóricos de Corinto llegaron a instalarse en la costa jónica de Sicilia, en la isla de Ortigia, antiguo nombre de Delos, colocándola bajo la protección de Apolo y Artemisa. Incorporada a Sicilia, la riqueza le vino de sus llanuras fértiles y del comercio. Desde el siglo V, bajo los tiranos Hierón I y Ferón, la ciudad contaba con varios cientos de miles de habitantes. Etruscos, medos, fenicios, cartagineses, atenienses, lacedemonios, macedonios, romanos, estuvieron aliados o combatieron a Siracusa. Allí se refugiaron los pitagóricos, los cuales huían del sur de la Península Itálica. Platón vino para desesperar de sus sueños de republica.
Siracusa tiene las fortalezas y las máquinas de guerra, exportadas desde el siglo IV a Cartago, Roma, Atenas y Rodas.
Trirremes y penteros. Navíos de guerra de tres y cinco filas superpuestas de remos.

Stamer
En Grecia se creía que la Tierra estaba rodeada por varios mares concéntricos, de los que el más exterior no era navegable; equivalía a una muerte garantizada. Sin embargo, el agua ha sido estimada donante de vida y las fuentes adoradas como lugares de cultos sagrados, morada de esencias femeninas y diosas del agua, aunque también puerto de acceso al Averno, al infierno.

Hamburger
En Atenas, el brillante logro financiero de algunos especuladores de tierras, concesionarios de minas o extranjeros de paso, no hacía más que acentuar, por oposición, la indigencia del pueblo. El ejército macedonio se mostraba amenazador y, durante el verano del año 322, la flota ateniense era casi totalmente destruida frente a Amorgos.

Guhl-Koner
Muelle de piedra construido  para la protección del puerto de Pilos, en Mesenia, al estilo pelasgo. Puerto de Metone o Metona. Puerto corintio de Cencrae y el Pireo, provistos de arsenales, faros, templos y arte.
Los cerameicos, la zona de ceramistas de Atenas, adoraban a Ceremos, hijo de Dionisos y Ariadna. El nombre de la zona se derivaba de este <<epónimo heros>>. Próximo a Corinto y Atenas (que más tarde llegó a ser famosa por sus utensilios de barro, debido a la excelente arcilla del promontorio de Kolias). Egina, Lacedemonia, Aulis, Tenedos, Samos y Cnido fueron famosas por su alfarería. Concentrada la producción de alfarería pintada, se exportaba a los puertos del Mediterráneo y el mar Negro. 
En Ática estaba la fabricación que cubría las enormes demandas de las colonias y los países bárbaros. En el estilo de sus pinturas, los hombres de negocios sagaces de Ática pretendían estimular el gusto de sus clientes bárbaros. Comercio monopolizado por Grecia.
La forma del píleo era cónica, hecho de fieltro. Marineros, mercaderes, dioses y semidioses se reconocían por él. Carón, Ulises, Hefestos el artífice, Cadmo, los Dioscuros (en las monedas espartanas), las amazonas, Tideo.
Vela, istión, istía mégala.
Durante las guerras persa y peloponesa, las flotas constaban de triéreis. Las embarcaciones con más de tres filas de remeros las añadió Dionisio I, tirano de Siracusa, tras un modelo cartaginés.
Vela cuadrada. Dolon.
Velas triangulares. Suppara.
Tiras de lona alquitranada. Hipóblema.
Variedades de ancla en las monedas de las ciudades de Tuder, Luceria, Cesarea Germanicia y Paestum.
En los barcos griegos, a diferencia de las galeras medievales, había un solo remero, para cada remo.
El puerto estratégico de Atenas estaba separado del comercial Pireo y dividido en tres dársenas; Munychia, Zea y Cantaros.
La batalla de Accio había sido ganada frente la flota griego-egipcia de Antonio, construida según las reglas griegas de barcos de los piratas tiburnos, que tenían dos hileras de remos y un aparejo muy ligero.

Vos
Gran Verde, el mar Mediterráneo.
Puerto de Amnisos.
Shardanes, pueblo de mar, piratas del Mediterráneo.
Puerto de Dikta (Kato Zakros), en Creta.

Norfolk
Euripos, estrecho canal que separa la isla de Eubea de la costa de Beocia; las idas y venidas de sus corrientes eran muy irregulares e inexplicables.
Personaje griego que olvidó arriar las velas negras de su nave. El error de un hijo, que indujo al padre, Egeo, a correr al encuentro de la muerte, arrojándose por un acantilado.
Las aguas que se agolpan en las costas alrededor de Trieste, Venecia y Fiume han empleado cuatro décadas en llegar hasta allí y pasarán otras cuatro más antes de que vuelvan a ver el estrecho de Gibraltar.

Vanoyeke
Desazón que sentían los helenos frente a la tiranía de Antígono el macedonio. Había apostado guarniciones sobre Corinto, el Pireo y Calcis.
Antígono tenía la pretensión de emplazar una escuadra ante Atenas si no admitía la hegemonía macedonia.
Desde que Mileto había sido incendiada y destruida por los persas, Éfeso había consolidado su posición. Cuando Alejandro hubo partido de la ciudad, su lugarteniente Lisímaco hizo dragar el puerto, casi inutilizable a causa de los bajíos.

Estolarca, jefe de la flota.
El mercado del ágora comercial, una amplia calle del puerto que llevaba de los baños a la plaza publica, las galerías y las tiendas se alineaban a los dos lados de la calle adornada con columnas y arcos de triunfo. El Artemision velaba con su majestuosa grandiosidad sobre las aguas de Éfeso.

Haefs
Los productos áticos de herrería, el aceite del Ática harían escala en la isla de Melos antes de fondear en Creta; harían el trueque por recipientes sacrificiales encargados a los alfareros de la isla; ánforas, jarrones, cráteras con inscripciones pirografiadas. Los helenos asentados de Egipto pagaban mucho por esas ofrendas.
Aquiles, Áyax y Fenice fueron nombrados patronos de los barcos, mientras Palamedes debía mandar el ejército con ayuda de Diomedes y Ulises. La primavera del quinto año, el ejército se reunió en Áulide. Se habían construidos mil doscientos veintidós barcos; venían de los países y ciudades de Acaya y las islas de Rodas, Cos, Creta.
Agis, soberano de Esparta, estaba preparando el levantamiento de la Hélade meridional frente a Macedonia. Su ejército se había duplicado. Su flota de doscientos navíos obstaculizaba el paso a Tenaro. Atenas había aumentado su flota a cuatrocientos navíos. Esparta, Atenas, Beocia y Tesalia, viejo aliado de Macedonia, sólo esperaban la señal.
Menelao, rey de Esparta, arrastrado por la tempestad, quedó embarrancado dentro del estuario occidental del Yotru con cinco barcos. A cuatro los mandó a casa. Murió su piloto, Canopo, mordido por una serpiente. Menelao lo enterró y llamó Canopo  al pequeño lugar que antes no tenía nombre.
Edificio de la Unión de Comerciantes Rodios del Pireo.
El negocio se pagaba con moneda helena, las transacciones se realizaban con el marco del comercio marítimo con la Hélade y ultimamente las monedas acuñadas por el faraón Neketar-Kabuf contenían aleaciones que las hacían menos valiosas.

McGrath
El bárbaro Egeo.

Neville
Los fenicios colonizaron Córcega en 1600. Pueblo del mar, los griegos los llamaron phoinikes, que significa rojo como la sangre, tal vez a causa de los tintes purpúreos, que obtenían de las conchas o por el legendario pájaro de fuego o la palmera, los dos llamados phoinix, rojo como el fuego. Los llamaron de tal manera por el color de los cabellos. Y las tribus que se formaron a partir de los fenicios, como los venecianos, fueron conocidos por esta señal. Se autodenominaban Pueblo de Khna o Knossos, y más tarde, cananitas. Fundaron Córcega, Cerdeña, Marsella, Venecia, Sicilia, lugares donde la traición es un modo para llegar a un fin, donde el desquite significa justicia.

Manfredi
Onesícrito, almirante de Alejandro, piloto de la nave real, que regresó de la India.

Mee-Spawforth
Oeniade. Astilleros primitivos.
Kenchreai, muelle de Corinto. Lechaion, puerto artificial que unía Corinto con occidente. Diolkos, importancia estratégica del istmo.
Gythion, puerto de Esparta.

Townson
En el siglo IV a. n. e., el científico griego Piteas viajó desde Marsella hasta Cornualles, dando una vuelta a la isla, para experimentar el mercado inglés del latón.








Tucídides
Mesena, actual Mesina, fue fundada primero por piratas llegados de Cumas, la ciudad calcídica en el país de los oscos, fundada en 750, la colonia griega más antigua de Italia.

La batalla de Accio había sido ganada contra la flota greco-fenicia de Antonio, construida según las reglas griegas de los barcos de los piratas tiburnios, que tenían dos hileras de remos y un aparejo muy ligero. La flota romana se organizó según el mismo principio (navis Liburna). Además, se necesitaron embarcaciones de carga más grandes, Naves onerariae.

Cicerón
El piloto en la navegación, no realiza lo que los jóvenes, pero realiza una labor mayor y mejor. Las cosas de envergadura, que exigen un sentido de responsabilidad, se realizan con reflexión, autoridad y juicio.
Como una nave, un edificio tiene más facilidad en deshacerlo el que lo construyó.
Los clásicos comparaban el ruido que causa el mar en los escollos de Escila y Caribdis, a los ladridos de una cuadrilla de podencos.
La administración que escoge al azar sus guías es como el barco duyo timón se entrega a aquel de los pasajeros que designa la suerte, cuya pérdida no se hace esperar.
La costumbre hace durar de 640 a 616 el reinado de Anco Marcio, fundador de la colonia del puerto de Ostia, en la desembocadura del Tíber.
Entendió admirablemente aquel excelso varón, Rómulo, que los puntos cercanos a las costas no son indicados para fundar ciudades, porque están expuestas a frecuentes peligros y a desdichas y sucesos imprevistos. Por mar, puede desembarcar una escuadra antes que se advierta su proximidad. Es frecuente en las ciudades marítimas el cambio y la corrupción de las costumbres, pues los idiomas y los comercios extraños no importan unicamente mercancías y palabras, sino también costumbres, que quitan estabilidad a las instituciones de estas ciudades.
Rómulo construyó su ciudad en las riberas de un río, buscando comunicación para procurar el nuevo pueblo cuanto precisaba, y llevar lejos lo que le sobrara. Ruta natural para sacar del océano los objetos precisos o agradables a la vista y hacerles llegar a las regiones apartadas.
Después de Anco Marcio, fue cuando se vio por primera vez en Roma la influencia de una civilización extraña. No era un arroyuelo quien trajo las artes de Grecia, sino un río soberbio, que envió en sus ondas sus ciencias y letras. Demarato, el primer ciudadano de Corinto por la consideración y las riquezas, no pudiendo soportar el yugo del tirano Cipselo, huyó con sus tesoros a Tarquinia, ciudad floreciente de los etruscos. Uno de sus hijos se hizo confidente del rey Anco.
El piloto se ocupa de la astronomía, sin separarse del verdadero camino que ha emprendido.

La utilidad radica en elementos materiales o elementos externos. Interés de cosas materiales a propósito del territorio, puertos, dinero, armada y aliados.

Bosque de Sila. Bosque del Brucio, donde se practicaba la extracción de la pez, elemento utilizado para las construcciones navales, artesanales y con fines terapéuticos.
Lucio Cornelio Sisena, pretor el año 78, uno de los defensores de Verres y legado de Pompeyo en la guerra con los piratas.
Gneo Pompeyo Magno (106-48), el año 70, a los dos meses terminó con los piratas. El año 66 venció definitivamente a Mitrídates y redujo el territorio del Ponto a provincia romana.
Quinto Cecilio Metelo Nepos participó el año 67 con la guerra con los piratas.

Lucrecio
Engendradora del romano pueblo, placer de hombres y dioses, alma Venus. Bajo la bóveda del cielo por do giran los astros resbalando haces poblado el mar que lleva naves y las tierras fructíferas fecundas. De ti diosa los vientos huyen; cuando tu llegas los nublados, las llanuras del mar contigo ríen.
El viento sutil y muy delgado es poderoso para hacer que anden las disformes naves por las ondas. Por rápida que sea su derrota una mano solo las dirige y vira doquier un timón solo. 
El ser humano ya vivía dentro de fuertes torres y la tierra se había repartido y estaba floreciente su experiencia. Florecía la mar con hondas suaves y a través de pactos y alianzas se unían los países cuando con sus canciones los poetas a transmitir hazañas empezaron a la posteridad. No mucho antes se inventó la escritura. Por tanto, de estos pasados siglos no logramos más vestigios que aquellos que entrevemos por la razón guiados solamente. Y la navegación, la agricultura, la arquitectura, la jurisprudencia, el arte de hacer armas y caminos, de preparar las telas y las otras invenciones semejantes se inventaron a fuerza de experiencias por el menester y la industria.

Salustio
Después que Cneo Pompeyo fue enviado a la guerra con los piratas y luego con Mitrídates decayó el poder de la plebe y aumentó el de algunos particulares.

Se llaman los bajíos sirtes porque atraen.
Mario, viendo que la plebe estaba dispuesta y animosa, embarca sin perder tiempo el bastimento, la paga, las armas y lo demás que cree conveniente y hace partir a Aulo Manlio, su legado.

Virgilio
Después que plugo a los dioses derruir el poderío de Asia nos decidimos con los agüeros de los dioses a buscar diversos destierros y regiones desiertas a cuyo fin construimos una armada en el pueblo de Artandro, al pie de los montes del frigio Ida. Reúno pues mi gente. Y como mi padre Anquises disponía que diésemos la vela a la aventura abandoné llorando las costas y puertos de la patria. Hay distante una vasta región favorecida de Marte poblada de los tracios sobre la cual reinó otro tiempo el cruel Licurgo y que los días de prosperidad para nosotros fue nuestra aliada y amiga. Enderezo el rumbo y asiento la primera cerca de una ciudad a cuyos pobladores doy el nombre de Eneadas tomado del mío. Allí hice un sacrificio a mi madre Dione.
Luego que estuvimos en alta mar una horrible tormenta; el propio Palinuro ni recuerda el derrotero rodeado de las olas. Tras custodiar las playas de las Strofadas me reciben libertado del mar.
Los remos han de doblegarse a las olas trinacrias, han de surcar las naves las saladas olas del mar Ausonio, los lagos infernales y la isla de Circe, hija de Eea. Cuando los vientos te impelan a las playas sicilianas y se ensanchen las angostas bocas de Peloro dirígete a tu izquierda. Se señorea del diestro lado Scila y del izquierdo la implacable Caribdis; esta sorbe triplemente las vastas olas precipitadas a su profundo báratro y las vuelve a arrojar a lo alto batiendo el firmamento, mientras Scila encerrada dentro de las negras cavidades de una caverna saca la cabeza y arrastra las naves hasta sus peñascos. Tiene la primera  rostro de ser humano y hasta la mitad del cuerpo figura de hermosa virgen, el resto de enorme pez uniendo una doble cola de delfín a un vientre como el de los lobos. Más te valdrá aunque sea más lento enderezar el rumbo al promontorio siciliano de Paquino.
He aquí que comienza a soplar el Bóreas a través del angosto promontorio de Peloro y nos impele más allá de las bocas del río Pantago formadas de peñas vivas del golfo de Megara y de la baja isla de Tapso. En el golfo de Sicilia frente del undoso Plemirio se extiende la isla de Ortigia; es fama que el río Alfeo de la Élide abriéndose hasta allí secretas vías debajo del mar confunde hoy con tus aguas, oh Aretusa, sus olas sicilianas. Seguidamente avanzo a las tierras que el Heloro fertiliza con sus aguas estancadas. Seguimos costeando los altos arrecifes y peñascos de Paquino. A lo lejos aparece Camarina a la que los hados no permiten que mude nunca de asiento, los campos gelenses y la gran ciudad de Gela llamada del nombre de su río. Impelidos con los vientos me alejo, oh Selinos rica de palmas y paso los vados Lilibeos de peligrosos escollos ocultos. Luego me reciben el puerto de Drepano donde trabajado de muchas tempestades perdí a mi padre Anquises. 
Habiendo meditado llama a Mnesteo, Sergesto y al fuerte Seresto y les manda con sigilo que aparejen la escuadra.
Las naves barren los cerúleos llanos.
Los caballos de Faetonte traían la serena luz de de la novena aurora y atraídos con la fama del ilustre Acestes acudían los pueblos comarcanos ansiosos unos de ver a los troyanos y otros dispuestos a tomar parte de las luchas. Avisa la trompeta que van a comenzar los juegos. Rompen la lucha con sus pesados remos cuatro naos. Impele la veloz Priste con la fuerza de briosos remeros Mnesteo, que pronto serán ítalos y de quien toma su nombre el linaje de Memmio; Gias rige la colosal Quimera semejante con su grandeza a una ciudad la cual impele con triple empuje la juventud troyana dispuesta con tres filas de remeros; Sergesto, de quien toma nombre la familia Sergia, monta el enorme Centauro y la verdinegra Scila Cloanto de quien desciende tu linaje, oh romano Cluento. Mnesteo excita a sus remeros. Es ocasión de hacer fuerza de remos, compañeros de Héctor, desplegad el brío que demostrasteis con las sirtes gétulas, el mar Jónico y las rápidas olas de Malea. Menetes arrojado al mar, Sergesto encalla. Cloanto prorrumpe con plegarias y todo el coro de las Nereidas y de Forco y la virgen Panopea escucharon sus preces; el propio padre Portuno con su potente nave impelió la nave. El hijo de Anquises declara vencedor a Cloanto. 
Renovar los bancos de las naves.
Se habían empleado nueve días con festines y los Troyanos se dan de nuevo a la vela. Luego unció Neptuno, hijo de Saturno, con arreos de oro sus fogosos caballos y vuela ligero a lo largo de la superficie del piélago, acuden a rodearle los varios monstruos que forman su comitiva, las inmensas ballenas, el primitivo coro de Glauco, Palemon, hijo de Inoo, los rápidos tritones y todo el ejército de Forco; a su izquierda van Tetis y Melite y la virgen Panopea, Nesee, Spio, Talia y Cimodoce. Halagüeñas ideas penetran entonces la indecisa mente del jefe Eneas quien manda levantar mástiles y desplegar velas. Palinuro dirige la compacta acumulación cuando el leve Sueño bajo la figura de Forbas toma asiento a su lado para reemplazarle. Rehusando, la divinidad le sacude sobre las sienes un ramo empapado con las aguas de Letea al que había infundido la laguna Estigia un invencible sopor; solo un inesperado letargo, le precipitó bajo las líquidas olas arrastrando con su caída parte de la popa y el timón mientras la armada sigue su rumbo. Ya habían llegado a los escollos de las Sirenas blanqueados con los huesos de muchos naufragios cuando percibió Eneas que su nave iba errante. Rigiéndola personalmente exclamó, Por tu demasiada confianza de la serenidad del cielo y del mar vas a yacer insepulto bajo ignorada arena. Se desliza la escuadra arriba al fin a las eubeas playas de Cumas y un fogoso tropel de mancebos salta a la ribera hesperia.
Se dirige costeando la playa al puerto de Cayeta; allí echan anclas y atracan a la orilla. Tu también, oh Cayeta, nodriza de Eneas, diste con tu muerte eterna fama a nuestras playas y tu nombre declara en qué lugar de la grande Hesperia descansan tus huesos. Celebradas las exequias según al rito y erigido un túmulo de tierra el piadoso Eneas dio la vela y abandonó el puerto. 
Pasan las naves rozando la orilla del país Circeo donde la opulenta hija del Sol hace resonar sus repuestos bosques con perpetuo canto, desde sus soberbios palacios quema oloroso cedro a la luz de la luna mientras teje con sutil lanzadera delicadas telas. Se oye el rugido de leones, jabalíes, osos, aullidos de lobos a quienes la cruel Circe a favor de poderosas hierbas trocó la figura humana como semblante y cuerpo de fieras. Para que impelidos al puerto no experimentasen semejantes transformaciones los piadosos Troyanos, Neptuno hinchó sus velas con favorables vientos. 
Hasta la pobre capital del rey Evandro enderezan las proas. Estaba el soberano árcade ofreciendo en un bosque sacrificios al gran hijo de Anfitrión, con él su hijo Palante, los mancebos principales del país y el reducido Senado. Vieron las altas naves y el valeroso Palante grita a los forasteros indagando sus causas. Eneas replica que busca a Evandro para pedirle una alianza.
Divididos con varias opiniones se agitaban todos los dioses formando un murmullo semejante al que hacen con las hojas los primeros soplos del viento cuando vagan rumores que prometen a los marineros futuras borrascas.
Monta Eneas la primera escuadra cuya proa decoran los leones frigios sobre los cuales se alza el Ida, imagen deleitosa para los prófugos Teucros. Allí va sentado el grande Eneas, a su izquierda Palante departiendo con él. 
Abridme oh Musas el Helicón e inspirad mis cantos, decidme qué gentes acompañaron a Eneas desde las orillas toscanas y armaron naves como auxilio y con él surcaron el Piélago. Masico el primero corta la mar con su ferrada Tigre llevando bajo su mando mil mancebos que vienen de las murallas de Clusio y de la ciudad de Cosa. Con esta línea va el fiero Abante; su nave resplandecía con un Apolo dorado, Populonia su patria le había dado seiscientos mancebos aguerridos y trescientos la isla de Ilva, suelo pródigo de sus inagotables hierros. Iba el tercero Asilo, intérprete de hombres y de dioses, lleva una hueste de mil guerreros armados de agudas lanzas; Piza los ha puesto bajo su mando. Les sigue el hermosísimo Astur, el cual se aplica con sus caballos y sus armas de varios colores, trescientos van con él todos animados de igual ardor, como los de la ciudad de Cere, los de los campos que riega el Minión, los de la primitiva Pirgo y la insalubre Gravisca. No te pasaré por alto, oh Cinira, fortísimo jefe de los Ligures, ni a ti de pocos acompañado, Cupavo, de cuyo penacho se alzan plumas de cisne, señal de que el amor es el crimen de tu linaje y el recuerdo de la metamorfosis de tu padre; acompañado de numerosa hueste organizada impele a fuerza de remos la inmensa nave El Centauro, que representado con la actitud de arrojar a las olas un enorme peñón semeja que las amenaza desde la alta proa mientras con su larga quilla va surcando el profundo piélago. Trae también una hueste de las playas de su patria aquel Ocno hijo de la adivina Manto y del toscano río que te dio murallas, oh Mantua, y el nombre de madre. Mantua es rica de viejos progenitores, mas no todos vienen de un origen; tres linajes divididos cada cual como cuatro ramas la tienen como cabeza, mas la sangre toscana constituye su mayor fuerza. De allí proceden también quinientos guerreros a quienes el odio de Mecencio ha puesto las armas a la mano y a quienes el Mincio velado de verde espadaña por su padre Benaco conducía sobre las olas con terrible nave. Tales eran los escogidos próceres que con treinta bajeles acudían al auxilio de la nueva Troya surcando con sus ferradas proas la salada llanura.
Se hallaba por dicha amarrada al pie de de un alto risco echando las escalas y aparejado el puente la nao que había traído el rey Osinio de las playas de Clusio. A lo más hondo de la nao se arrojó despavorida la imagen del fugitivo Eneas, mientras Turno atropella con todo y salta los altos puentes, pero no hubo puesto el pie en la proa cuando la hija de Saturno corta las amarras e impele al revuelto mar la nave arrancada de la playa. 
Había por dicha en el sitio de Laurento un acebuche de amargas hojas consagrado a Fauno, árbol venerado otro tiempo de los mareantes que rescatados de las olas acostumbran clavar en él sus ofrendas a aquella divinidad de Laurento; pero ignorantes los Teucros habían derribado el sagrado árbol con los demás con objeto de despejar el campo de batalla. 
Huecas naves.
Cortad el cable que os amarra a la costa.
La borrasca y el lluvioso Orión revuelven los mares y están rotas sus naves y les es opuesto el cielo.
El copioso y manso Tíber amarillo.

Horacio
Irás con bajeles liburnos entre los elevados baluartes de las naves, amigo, dispuesto a afrontar con tu propio riesgo, oh Mecenas, todos los peligros de César. Llamaban bajeles liburnos los navíos ligeros por su semejanza con los que usaban los piratas de Liburnia, región de Iliria. Mecenas, a quien va dedicado el libro, se disponía a partir con Augusto a la campaña con Marco Antonio y Cleopatra.
El caudillo hijo de Neptuno hostigado por el mar después de haber quemado sus naves, él que amenazaba la urbe con sus cadenas que amistoso había quitado a esclavos traidores. Sexto Pompeyo había sufrido el año 36 la derrota de Naucolo.
Las Sirtes batidas por el Noto. Bajíos de arena situados frente a la costa de Libia, batidos por los vientos del Sur, peligrosos y temidos por los enemigos.
La nave desanclada bajo funesto auspicio parte llevando al maloliente Mevio. Poetastro al que también se refiere peyorativamente Virgilio, "Bucólicas".
No aparezca constelación propicia durante la negra noche donde declina el funesto Orión. Cuando declina la constelación de Orión la primera quincena de Noviembre se levantan del mar funestas tempestades.
Ir adonde nos lleven los pies y adonde a través de las olas nos llame el Noto o el Ábrego impetuoso. Viento del Suroeste.
¿Por qué siendo halagüeños los auspicios esperamos para embarcar?
Abandone afligirnos girar las velas rumbo a la patria cuando el Po haya bañado las cumbres del Matino. Monte de Apulia situado al lado de la costa.

El quebrado oleaje del ronco Adriático.
La perversa Inquietud embarca con las naves guarnecidas de bronce. 
Capricornio tirano de las olas de Hesperia. Con su aparición el mes de Diciembre coincidían las tempestades.
El capitán de una nave hispana, comprador adinerado.

Después de un naufragio es costumbre ofrecer un relicario como ex voto.
Sea que Neptuno acogido a la tierra proteja de los Aquilones las flotas, tarea regia, o que un pantano estéril..., los hechos de los mortales perecerán. Con mayor motivo permanecerán la vigencia y la gracia vivaz de las palabras. Renacer y caer, el uso regla del idioma.

Ovidio
Se cortó la madera, fue la armada al astillero puesta y sin marcador fue sobre el inmenso mar depositada.
Percibe cómo el mar levanta el euro bravo, rápido, violento no queriendo sufrir injuria exagerada.

Tito Livio
El vano honor de una victoria naval.
Con las guerras navales sondar los vientos y escoger las estaciones.
Los piratas liparotas. Era costumbre de la ciudad de Lípari repartir entre todos las presas como si el bandolerismo constituyese una ganancia publica.
Las grandes ventajas del Tíber, por el que bajan las cosechas del continente y por el que llegan los abastecimientos del mar; ese mar bastante cercano para los menesteres del comercio y bastante lejano para no exponer a los insultos de las tropas extranjeras.
Se llevó a Roma una parte de las naves de Anzio y se quemaron las demás; con sus espolones se adornó la tribuna de las arengas, levantada en el Foro, llevando desde entonces este templo el nombre de Rostros.
La flota romana, dirigida por P. Cornelio, a quien el Senado había encargado el mando de la costa marítima, arribó a Pompeya e hizo un desembarco en Campania. Desde allí, queriendo las tripulaciones de la flota devastar el territorio de Luceria, se entregaron primero al pillaje, desde donde podían ganar sus naves. Pero arrastrados por el cebo del botín, avanzaron demasiado y dieron la alarma al enemigo.

Veleyo Paterculo
Sila encontró suplicante y dispuesto a aceptar sus condiciones a Mitrídates. La guerra terminó con el pacto de Dardano (85). Mitrídates fue obligado a entregar ochenta naves, a pagar dos mil talentos, devolver los cautivos y retirarse a Paflagonia.
Sertorio, derrotado por los ejércitos de Sila en África, se alió con Mitrídates y los piratas del Mediterráneo.
El tribuno Aulo Gabinio -enero del año 67- propuso una ley con motivo de que los piratas atemorizaban al mundo por disponer de escuadras. Se encomendaba a Gneo Pompeyo una misión de castigo, con la condición de tener una autoridad semejante a los procónsules en las provincias, hasta cincuenta millas desde la costa tierra adentro -75 kilómetros-, incluía Roma. El partido aristocrático mostraba su desacuerdo, pero sus razones fueron doblegadas por el entusiasmo general. Los representantes del senado Quinto Catulo y Hortensio se opusieron a la Lex Gabinia.
Ptolomeo, hermano de Ptolomeo XIII Auletés, se suicidó cuando le comunicaron el desembarco de Catón, año 57.
Pompeyo acampó en Dirraquio. César situó su campamento al lado y lo rodeó con los materiales de asedio.
Arruncio dirigió el ala izquierda de la flota de Octavio en la batalla de Accio.
Reinando los hermanos Lido y Tirreno en Lidia, forzados por la escasez de las cosechas, echaron a suertes cuál abandonaría la patria con una parte de la población. La suerte correspondió a Tirreno. Emigrado a Italia, dio nombre ilustre y perdurable al lugar, a sus habitantes y al mar. Los etruscos procedían de Asia Menor.
La flota de Tiro, gran dominadora del mar, fundó Gades, en la parte más lejana de Hispania, y Útica, en África, a fines del siglo XII.
Gneo Pompeyo liberó al orbe de la tierra, venció y puso en fuga a los piratas en las proximidades de Cilicia y, para terminar más pronto con una guerra que se había extendido, reunió a los que quedaban en unas ciudades y en una zona alejada del mar y les asignó un territorio determinado. Al serles concedida la posibilidad de vivir sin necesidad de robar, se les apartó de la piratería.
Batalla de Accio, 2 de septiembre del 31 a.n.e. César Octavio y Antonio combatieron con las escuadras frente a frente. El flanco derecho de la armada juliana estaba confiado a Marco Lurio, el izquierdo a Arruncio. La táctica de la batalla naval correspondía a Agripa. La escuadra de Antonio estaba gobernada por Publícola y Gayo Sosio, el cual estableció a Herodes en el trono de Jerusalén. Cuando comenzó la contienda, en un bando hubo jefes, remeros y soldados. En el otro, nada más que soldados.

Petronio
Los tipos de los ases eran inalterables. En los reversos, la proa de una nave llamada ratis, de donde monedas ratites, y en los anversos la cabeza de Jano con dos caras en los ases, Júpiter en los semis, Roma en los triens, Hércules en los quadrans, Mercurio en los sextans y la diosa Roma en las uncias.
Súplica a los astros. Marinos y pasajeros invocaban a Cástor y Pólux, Venus y Neptuno.
El cónsul Pompeyo, el terror del Ponto, explorador victorioso del feroz Hidaspe, escollo formidable ante el cual se habían deshecho los piratas, el que había presenciado a Júpiter estremecido recibir la triple ovación, el que, sometiendo las aguas del Bósforo había triunfado de las furiosas hondas del Euxino, abandonando hasta la responsabilidad del poder había huido.
El aquilón se impone tiránico en las costas de Italia.
Pérfido elemento, el mar.

Josefo
Bayas, ciudad en la bahía de Nápoles, originariamente puerto de Cumas. Manantiales de aguas sulfúricas, casas de campo de Julio César, Calígula, Nerón.

Suetonio
Durante la travesía que Cayo Julio César hizo en invierno, le hicieron prisionero unos piratas, cerca de la isla Farmacusa. Permaneció en poder de ellos cuarenta días, sin otra compañía que su médico y dos cubicularios. Se concertó el rescate en ciento cincuenta talentos y persiguió a los piratas, sometiéndolos a suplicio.
Cayo Calígula hizo construir naves liburnesas de diez filas de remos, con velas de diferentes colores y con la popa guarnecida con piedras preciosas. Encerraban estas naves baños, galerías y comedores, gran variedad de vides y árboles frutales. Costeaba la Campania, muellemente acostado en pleno día, con danzas y música.
Tiberio Caludio Druso, durante su cuestura y su pretura, tuvo un mando en la guerra de Recia y en la de Germania, siendo el primer general romano que navegó por el océano septentrional. Hizo abrir al otro lado del Rin, canales de nueva forma y gran extensión, que aun hoy se llaman Drusinas. 
Por lo que toca a las construcciones del lago Fucino, vio provecho y gloria en emprenderlos, porque muchos particulares habían propuesto encargarse de los gastos, a condición de que se les cediese el terreno que quedase en seco.
Construyó el puerto de Ostia, rodeándole de dos brazos a derecha y a izquierda, y elevando un dique a la entrada, sobre suelo ya levantado. A fin de consolidar mejor este dique, empezaron por sumergir la nave con la que habían traído de Egipto el gran obelisco. Sobre fuertes pilares construyeron después, hasta una prodigiosa altura, una torre parecida al faro de Alejandría, para alumbrar por la noche la marcha de los buques.

Lucano
Pompeyo había logrado abatir a los piratas y transformarlos en agricultores, mediante asignaciones de tierras, según se hacía habitualmente con los veteranos de las guerras.
Puerto de Mónaco, consagrado a la advocación de Hércules.
Gayo Antonio, hermano de Marco, el célebre triunviro, se halla acosado al frente de tropas adictas a César, por la flota pompeyana al mando de Libón y de Octavio. Reunido con el también cesariano Dolabela, llegó a pretor y murió el año 43, ejecutado por mandato de Bruto. Marco Octavio era, con Libón, almirante de la flota libúrnica y aquea de Pompeyo.
Rendición de las tropas cesarianas al mando de G. Antonio y Dolabela, en la isla adriática de Curicta, hoy Veglia, a manos de los pompeyanos Octavio y Libón.
El Euro, dueño del mar, más moderado. El Euro, o viento del sudeste, tenía fama de lluvioso.
El sobrenombre de Pompeyo había pasado como cognombre hereditario a sus descendientes. Gneo Pompeyo Magno, su hijo mayor, aparte la comisión que le encargara su padre, estuvo durante el año 48 al mando de la escuadra alejandrina, que operó en Orico y Corfú. Hallarlo al lado de Catón permite suponer que Lucano seguía una versión, según la cual las naves bajo su mandato eran de las <<mil>>, con las que aquel había transportado las tropas recogidas de la desbandada, después de Farsalia.


Dionisio de Halicarnaso
Una expedición griega desembarcó en la región etrusca de Italia (1243). Emigraron de Palancio, una ciudad de Arcadia. Dirigía la colonia Evandro, hijo de Hermes y de una ninfa local de Arcadia, a la que los griegos llaman Temis y que estaba inspirada por la divinidad. Pero los escritores de la historia antigua de Roma le dan según el idioma idioma nativo el nombre de Carmenta. En griego, el nombre de la ninfa sería Thespiodós, Cantora profética. Los romanos llaman carmina a los cantos. Entonces había heredado el trono de los aborígenes Fauno, descendiente de Marte, un varón inteligente y activo a quien los romanos veneran con cantos y sacrificios. Este ser humano acogió con gran amistad a los arcadios. Y los arcadios, según les aconsejó Temis a través de su inspiración, escogieron una colina poco distante del Tíber en el centro de la ciudad de Roma y edificaron una pequeña aldea que bastaba para la tripulación de los dos barcos con los que emigraron de Grecia. A esta ciudad le pusieron el nombre de Palanteo, Pallanteum, por su metrópoli de Arcadia, Pallántion; pero los romanos la llaman Palacio, Palatium. 
Los troyanos que habían huido de Troya con Eneas después de la toma de la ciudad arribaron a Laurento, situada en la costa de los aborígenes del mar Tirreno no lejos de la desembocadura del Tíber. Después de recibir de los aborígenes un territorio para su residencia fundaron una ciudad sobre una colina no lejos del mar y le dieron el nombre de Lavinio. Poco tiempo después fueron llamados latinos y abandonando Lavinio construyeron una ciudad mayor amurallada a la que llamaron Alba, Alba Longa, cerca de Castel Gandolfo. Enviaron una colonia a Palanteo y Saturnia. Se instalaron en estos lugares rodeando Palanteo con una muralla, de manera que por primera vez recibió la forma de ciudad. A esta fundación le dieron el nombre de Roma por Rómulo, el primero que condujo la colonia y era el décimo séptimo descendiente de Eneas. 
Los que establecieron las constituciones bárbaras y griegas semejan haber visto correctamente el origen común de que la ciudad compuesta de muchas familias navega rectamente cuando las vidas de los particulares están equilibradas y que atraviesa una gran tempestad cuando a cada uno le van mal los asuntos privados. Tema de la nave del poder político. 

El río Tíber como es navegable hasta sus fuentes con barcos fluviales de gran tamaño y hasta Roma incluso con grandes embarcaciones de transporte marítimo, el rey Anco Marcio, el año 638, decidió construir un fondeadero sobre su desembocadura. Y de esta manera las naves remeras que sean suficientemente grandes y las de mercancías de hasta tres mil ánforas entran por la boca del río y son llevadas hasta Roma arrastradas con remos y remolques. Sobre el recodo del río y el mar el rey construyó una ciudad que llamó Ostia por su situación, como nosotros la llamaríamos puerta, y consiguió que Roma fuese una ciudad continental y también marítima y que disfrutase de los materiales de ultramar.
Orígenes de Lucio Tarquinio. Un corintio de nombre Demarato, de la familia de los Baquíadas, familia gobernante de Corinto los tiempos primitivos, tras decidir dedicarse al comercio zarpó a Italia con su propio barco mercante y su carga. Vendió sus mercancías a las ciudades tirrenas, que entonces eran las más prósperas de Italia y como obtuvo grandes beneficios ya no quiso marchar de allí a otros puertos, sino que navegó el mismo mar trayendo cargamento griego a los tirrenos y llevando mercancía tirrena a Grecia y llegó a ser dueño de mucha riqueza. Pero cuando una sedición se apoderó de Corinto y la tiranía de Cipselo se sublevó frente los Baquíadas como le pareció que no era garantizado vivir  una tiranía poseyendo muchos materiales y perteneciendo por otro lado a una familia oligárquica reunió la hacienda que pudo y marchó navegando de Corinto. Como tenía muchos y buenos amigos tirrenos por sus frecuentes referencias, sobre todo de la ciudad etrusca de Tarquinios, que entonces era grande y próspera, construyó allí una casa y se casó con una mujer de ilustre linaje.
Los brutios sometidos voluntariamente a los romanos les entregaron la mitad de su región montañosa -llamada Sila- llena de madera útil para la construcción de buques; pues crecían allí muchos abetos, álamos negros, pinos marítimos resineros, hayas, pinos piñoneros, corpulentos robles y fresnos. De esta madera la que crece más cerca del mar y de los ríos es cortada de una sola pieza desde la raíz y transportada a los puertos próximos siendo suficiente para la construcción de naves y de casas de Italia. Y la que crece en el interior lejos del mar y de los ríos, cortada a trozos proporciona remos, varas, armas y utensilios domésticos y es transportada por hombres rápidamente. Pero la mayor parte y más resinosa es para hacer pez y produce la más aromática y dulce de las que sabemos, llamada pez brutia, de cuyo arriendo el pueblo de Roma recibe anualmente grandes ingresos.
Anco Marcio construyó la ciudad y el puerto de Ostia.
El año 450 fueron designados como embajadores para traer las leyes de los griegos, Espurio Postumio, Servio Sulpicio y Aulo Manlio; y se les prepararon trirremes con el erario publico y el restante ornato suficiente para demostrar su soberanía.
Cuando Publio Valerio Publicola y Cayo Claudio Sabino recibieron el poder consular, un peligro cayó sobre Roma procedente de una guerra de un pueblo extranjero, los sabinos. Un ser humano del pueblo de los sabinos poderoso por su riqueza, Apio Herdonio, ansiaba derrocar la soberanía de los romanos. Embarcó a cuatro mil clientes con barcos fluviales y atracó en el Capitolio. Y a través de la puerta que estaba abierta (pues hay una puerta sagrada del Capitolio llamada Carmental que permanece abierta según la prescripción de algún oráculo), hizo subir a sus tropas y tomó la fortaleza y la ciudadela. Sin embargo, ni los esclavos pasaron a su bando ni los exiliados regresaron ni los proscritos y encadenados buscaban su ganancia particular con el material común y después de tres o cuatro días el asunto había llegado a su fin tras después causar a los romanos un gran temor y confusión. El cónsul Valerio perdió la vida cuando los romanos tomaron la fortaleza.
Fueron desgignados como embajadores para traer las leyes de los griegos Espurio Postumio, Servio Sulpicio y Aulio Manlio y se les prepararon trirremes a cargo del erario publico y el restante ornato suficiente para demostrar su soberanía.
Cuando tras hacer la tercera salida a la zona costera de Italia atracó en Ostia, el puerto de Roma, trayendo barcos mercantes de trigo desde Cumas y los puertos que rodean Miseno e inundó la ciudad de alimentos, el pueblo estaba dispuesto a recompensar a Espurio Melio, de sobrenombre Félix. 

Columela
Otros fabrican navíos con actividad y después de hechos no tienen prisa para equiparlos y marinarlos.

Arriano
Método de establecer un puente, según el sistema romano. Se emplean cuantas naves sea precisas.

Amiano Marcelino
Como las dos provincias de Oriente, Isauria y Cilicia, se mezclaron en el pasado con grupos maleantes durante las guerras de los piratas, fueron subyugadas por el procónsul Servilio, después de lo cual se sometieron a pagar impuestos. P. Servilio, procónsul de esta zona, del 78 al 75 y cuyos éxitos en las campañas con los piratas le otorgaron el sobrenombre de Isáurico. 
Publio Cornelio Escipión, padre de Africano el Viejo, acudió en auxilio de los saguntinos, dignos de recuerdo por sus miserias y lealtad, pues se veían asediados por los africanos-cartagineses, llevó a Hispania una flota repleta de fuertes soldados.
La Ciudad Eterna tenía las dificultades del periodo de escasez de grano. Por eso, el pretor Tertulo se veía injuriado con violencia por la plebe, porque temía el hambre. Esta persecución era irracional, ya que por la fuerza de los vientos, los barcos sentían pánico de entrar en el puerto de Augusto. Especie de puerto artificial construido en Ostia.
Y por esa voluntad divina, que ha favorecido a Roma desde su fundación y que le prometió una duración eterna, Tertulo realizaba un sacrificio en Ostia, en el templo de Cástor y Pólux y se calmó el mar, de manera que las naves llegaron al puerto e hicieron rebosar de trigo los graneros.
Duilio consiguió la primera victoria naval para los romanos al derrotar a los cartagineses el siglo III.
Con el desarrollo de Roma, durante la época que los cónsules mantenían su poder, Marco Didio, con gran decisión sometió a los odrises nunca antes dominados, que vivían errantes sin experiencia ni leyes. Los demás pueblos bárbaros sucumbieron en una dura lucha con el procónsul Apio Claudio, permitiendo que las naves romanas ocuparan las ciudades situadas en el Bósforo y la Propóntide.
Valentiniano con útiles planes mentales fortificaba con grandes construcciones el Rin desde el inicio de Recia hasta el estrecho del Océano. El Canal de Bélgica, parte del Mar del Norte.
Siendo Claudio gobernador de la Ciudad Eterna (374), para evitar que muchas personas fallecieran de hambre, ya que la altura de las aguas del Tíber hacía imposible moverse por la ciudad, se transportaba una gran cantidad de alimentos en barcas y escofas.

Herodiano
Pertinax decretó la abolición de todos los tributos, que durante la tiranía habían sido proyectados, con vistas a acrecentar los recursos, sobre el tráfico en los ríos y puertos de las ciudades y por vías y caminos. Con esta abolición, restauró la libertad de tasas.
Tropas de Iliria, trirremes de las ciudades de Italia.
Septimio Severo decretó la expedición de Bretaña, 208. Durante la mayor parte de la marcha lo llevaron en una litera. Él y sus hijos terminaron la marcha, anticipándose a cualquier previsión o noticia y se presentaron en Bretaña después de cruzar el océano.
Alejandro Severo ponteó el Rin con barcos encadenados a modo de puente, con la idea de permitir el paso a los soldados.
Resistencia de Aquileya. Familias Barbii y Statii. Puerto comercial, donde concurren todos los pueblos ilirios. Comercio marítimo.

Historia Augusta
Construcciones publicas realizadas bajo la iniciativa de Antonino Pío. Faro, puerto de Cayeta, reforma del puerto de Terracina.
Trebeliano, hecho príncipe en Isauria, Asia Menor, jefe de piratas, Archipirata.

Geoffrey de Monmouth
Después de la guerra de Troya, Eneas, huyendo de la destrucción de la ciudad, llegó por mar a Italia en compañía de su hijo Ascanio. Allí fue recibido con todos los honores por el rey Latino, lo que hizo que Turno, rey de los Rútulos, lo mirase con malos ojos y le declarara la guerra. Eneas obtuvo el reino de Italia y a Lavinia, la hija de Latino.
Gayo Julio César dispone su escuadra y sólo aguarda vientos favorables para llevar a efecto lo que anunciara en su mensaje a Casibelauno, rey de los Britanos. En cuanto sopla el viento propicio, iza velas y desembarca con su ejército en las bocas del río Támesis.
Los Britanos obtuvieron el triunfo. César se retiró a su campamento y a las naves con su maltrecho ejército y, al abrigo de la noche, una vez reunidos los supervivientes, embarcó en sus navíos, muy alegre de tener a Neptuno por campamento.
Cuando Julio volvió la espalda al enemigo y desembarcó en las costas de Galia, los Galos resolvieron rebelarse contra él, deseosos de sacudir su dominio. No corría sino un rumor, y era que todo el mar hervía bajo las naves de Casibelauno, que había salido en persecución de los fugitivos.
Dos años después, Julio César está dispuesto a cruzar de nuevo el océano y vengarse. Advertido Casibelauno, fortifica sus ciudades. Clava, además, en el fondo del río Támesis, por donde César ha de navegar para llegar a Trinovanto (Londres), estacas de hierro y de plomo del grosor del muslo de un hombre, a fin de destrozar las naves. 
Julio César, después de preparar la expedición, se hizo a la mar con incontable numero de soldados. Mientras navegaba por el Támesis, sus naves se encontraron con las estacas  clavadas en el lecho del río, y sobrevino la catástrofe: los soldados se ahogaron por millares al invadir el agua los agujereados navíos. Cuando César se apercibió de lo que estaba sucediendo, recogió velas lo más rápidamente que pudo y se apresuró a tocar tierra. En cuanto se vio vencido, huyó con los escasos hombres que le quedaban a las naves y se acogió al abrigo del mar sin que nadie se lo impidiese. Como soplaban vientos propicios, izó velas y puso proa al litoral de los Morianos (Flandes). Buscó cobijo en una torre que había hecho construir en un lugar llamado Odnea (Tour d´Ordre, cerca de Boulogne), antes de esta ultima expedición a Britania.
Cuando Casibelauno saqueó las tierras de Androgeo, duque de Trinovanto, desesperado de encontrar otra solución, decidió pedir ayuda a César y envió al punto a su hijo Sceva, con treinta jóvenes allegados a su familia. Se tranquilizó César al recibir los rehenes y, reuniendo a sus ejércitos, navegó con viento en popa hasta Britania y desembarcó en Richborough.

Salisbury
A Julio César ningún augurio ni superstición pudo apartarle de ninguna empresa. Sucedió que, navegando a África, al desembarcar cayó y, habiendo derivado el mal augurio como bueno, <<Te tengo ya, oh África>>, dijo, y llegó a invadirla.
El historiador de la Guerra Púnica, Tito Livio, expone cómo se rindió Aníbal y como un lauro en la popa de su nave capitana manifestaba su decisiva victoria. Ab Urbe Condita.

Chaucer
César se elevó desde su humilde condición a la de rey apoderándose del Occidente por tierra y por mar, por la diplomacia o por las armas, haciéndolo tributario de Roma.

Rabelais
Porcio Catón decía que se arrepentía de haber ido por mar a un sitio al que pudo haber ido por tierra.
Todos eran carpinteros y artesanos del arsenal de Venecia.
Pompeyo con la significación de un nombre se desesperó. Vencido por César tras la batalla de Farsalia no tenía para ayudarse otro recurso que el de huir. Al huir a lo largo del mar llegó a la isla de Chipre. Al pasar cerca de Paphos vio sobre la ribera un palacio muy bello y suntuoso. Preguntó al piloto cómo se llamaba y le dijo que Cacobasilea, que quiere decir mal rey. Este nombre le causó tal espanto y abominación que se desesperó como persuadido de no poder evitar la muerte, de manera que los marineros y los pasajeros oyeron sus gritos, sus gemidos y sus sollozos. Efectivamente poco tiempo después un tal Achillas, aldeano desconocido, le cortó la cabeza.
Huyamos con los pies y las manos como decía Bruto durante la batalla de Farsalia.
Naufragios y pérdidas de vidas y de materiales a orillas de las Syrtes, Caribdis, Sirenas, Scilas, Strofades y golfos del mar.

Holinshed
El cuidado de los romanos del mantenimiento de la navegación una gran parte de la carga de sus cónsules era ver y percibir las colinas donde crecían grandes bosques para evitar sus faltas innecesarias para la satisfacción del propietario privado y su ánimo codicioso podría perjudicar la riqueza comun al impedirles conseguir material suficiente para los muebles de su navegación. En Venecia se siguen certificados similares.
Los francos eran un país de Alemania muy famosos con su poder marítimo de manera que no había barcos piratas comparables.
Asclepiodoto era el jefe de un numero de barcos dirigidos por Maximiano designado para pasar de las costas de Flandes a Britania frente a Alectus.

Shakespeare
Indomables poderosas olas del Adriático desencadenadas. Horacio, "Odas".

Una especie de conquista hizo aquí César, pero no hizo aquí su jactancia de <<Llegué, vi y vencí>>. Con vergüenza (la primera que jamás sufrió) fue arrebatado de nuestra costa, en dos ocasiones derrotado y sus embarcaciones, pobres juguetes ignorantes, se agitaron en nuestros terribles mares como cáscaras de huevo, con igual simplicidad cascados frente nuestras rocas. Victoria de Cassibulano.
Cinturón de agua salada.
(Cimbelino)

Burton
Aureliano hizo navegable el Tíber a Roma para transportar el grano de Egipto a la ciudad.

Butler
Velis et remis, omnibus nervis. Los clásicos hacían uso de galeras con velas y remos. Lucano. Tales son las galeras hoy manejadas con esclavos en Leghorn (Livorno, una raza de gallinas) en aguas tranquilas cuando sus velas son de poca ayuda. Lo hicieron con la totalidad de sus fuerzas.

Kant
Canalicola. Tropel de haraganes, que en la Roma clásica iban y venían al lado del canal y que se burlaban de las gentes atareadas.

Lord Byron
El bosque de Rávena inmemorial,
Enraigado donde un día inundó la ola adriática,
El sitio que sustentó del César la postrera fortaleza.

Accio, ciudad y promontorio de Grecia, célebre por el combate naval en el que Agripa venció a Marco Antonio y Cleopatra, el 31 a.n.e.

Diderot
Los Rostros eran, en el Foro romano, la tribuna de arengas, así llamada por estar adornada con espolones de naves tomadas al enemigo.

Malte-Brun
Los habitantes del país de Tigré de Abisinia por mucho tiempo tuvieron por capital Axum (la primitiva Anxume). El primero que la nombra es Arrio, autor de un periplo del mar Eritreo. Durante su época, el siglo II, era el foco del comercio del marfil. Atestiguan su condición floreciente durante los siglos IV, V y VI las descripciones de Procopio, Esteban de Bizancio, Cosmas y Nonnosus.

Raspe
La isla de Thanet, separada de la costa durante la época romana por un canal navegable, con la ciudad balnearia de Margate, inventó las máquinas o casetas de baño. A 30 kilómetros de Dover, puerto romano.

Hegel
No había nacido la marina de los menesteres del comercio, sino que se había creado para los fines de la guerra.
A la confusión de la época de Sila se agregó la piratería general, que Pompeyo hubo de abatir por una dura represión.

Chateaubriand
Pompeyo, traidora y cobardemente muerto en el golfo de Pelusa (Damiata) por mandato de Ptolomeo.

Hugo
Ateneo, gramático náutico.

Pauly-Wissowa
Los acceptores (aceptadores) están atestiguados con las inscripciones como corpus de Ostia cuya tarea era recibir el grano que había llegado al puerto y almacenarlo dentro de almacenes. Este Collegium se dividió como las tres decuriae de acceptores, adintores y nauticarii.
El rey Hierón II de Siracusa compró el cáñamo para las cuerdas de su magnífico barco del río Ródano.
Durante la expedición de César a Gran Bretaña los actuarie son vehículos bajos de poca profundidad para el transporte de tropas, caballos y equipo bélico, pero se construyen como marineras de alta velocidad. No pertenecen a los buques de carga (oneariae). Sin ser barcos de combate reales correspondían a los eikosors, triakontors y pentekontors de las armadas griegas.
Cuando se establecieron las legiones los años 68 y 70 recibieron el sobrenombre de Adintrix, no estaban formadas de ciudadanos romanos como las otras legiones, sino de tripulaciones navales peregrinas.
Aedificatio. La construcción de una casa o de un barco.
L. Aimilius Paullus, hijo del cónsul, el año 168 embarcó y dirigió el ejército romano que acampó en Heraclion frente al ejército macedonio. Obligó a los macedonios a retirarse a Pydna. Allí el ejército macedonio fue aniquilado durante una batalla corta pero encarnizada. Perseo huyó a Samotracia donde se entregó a los romanos con sus hijos y tesoros.
L. Aemilius Regillius, pretor el año 190, recibió la provincia navalis, dirigió la flota romana durante la guerra con Antíoco y obtuvo una victoria decisiva sobre sus barcos en Myonesos con lo que se le concedió un triumphus navalis (189).
Agea, el corredor o ruta a lo largo del cual el hortator, el oficial del barco dirigía el mando regular del remo y era responsable de la alimentación de la tripulación.
Los barcos de los romanos con el trinquete llamado dolon y artemon estaba inclinado adelante como un bauprés.
El adorno ubicado en la parte delantera del barco con el que terminaba la parte superior del tallo, la forma predominante de los romanos se enrolla atrás como un caracol. Buques mercantes.
Altani, brisas suaves, viento del sur-suroeste.
Los barcos de los romanos con el trinquete llamado dolon y artemon estaba inclinado adelante como un bauprés.
Amphíprymnoi. Buques provistos de mandos a la parte delantera y trasera para poder navegar de proa a popa y viceversa. De esta manera se estableció el Tac (contando con la estrechez de los ríos). Vehículos construidos por Tiberio para la guerra con los pueblos germánicos y utilizados por los propios germanos.
Los venecianos hicieron uso de las cadenas de ancla de hierro. Una cuerda con la cual se ancla la boya de corcho que flotando sobre la superficie marcaba el lugar de anclaje.
El personal de la aunona de los puertos de Ostia, Portus y Puteoli. Incluso durante la época republicana estaba en Ostia el cuestor Ostiensis. En Ostia había una sucursal del fiscus frumentarius.
Numerosos colegios fueron empleados para la aunona de Roma, Ostia y las provincias, todos subordinados al praefectus aunonae. Estos colegios son el corpus naviculariorum, el caudicarii, el mensoris frumentarii, saccarii.
La diosa Annonas es una personificación del rendimiento anual. Las representaciones más antiguas aparece como una enviada de Ceres, tiene el cuerno de la abundancia y al fondo la parte delantera de un barco es visible como una indicación del suministro de ultramar. Desde Adriano se pueden distinguir dos representaciones de monedas; una de un modius y la proa de un barco, una mano con mazorcas y la otra con una cornucopia. La otra ilustración la representa con el timón o el ancla.
Annona civica, aquella parte de las entregas naturales de Egipto y de África que estaba destinada al abastecimiento de la ciudad de Roma y más tarde a la ciudad de Constantinopla; luego con un sentido más estricto describe la distribución gratuita de alimentos a los pobres de las dos capitales.
Antarii funes. Los cordones que estirados lateralmente desde la punta del bastidor de un cabrestante hasta el suelo impiden que se balancee a un lado, mientras que la retinacula reduce la inclinación precisa del bastidor. Se llaman en Italia hoy antariae o prontoni.
Antena, una madera redonda de abeto utilizada para aguantar la vela que se afilaba con más fuerza al centro y a los extremos (levas).
El año 49 C. Antonius fue legado de César y comisionado en comunidad con Dolabella padre quien comandó una pequeña flota para defender Illyricum de los pompeyanos. Los líderes de la flota pompeyana M. Octavius y L. Scribonius Libo derrotaron y destruyeron la flota de Dolabella y encerraron a Antonius en Curicta. Salustio y Basilio se apresuraron a salir de Italia, Hortensio vino del mar Tirreno para aterrorizarlo, pero fueron derrotados por Octavio y Libo. El hambre obligó a Antonius a someterse; parte de su tripulación escapó al continente en balsas; el resto, quince cohortes, fueron conducidos por Libo al ejército principal de Pompeyo y se incorporaron a él.
M. Antonius Creticus tenía la tarea de librar los mares de los piratas y apoyar las operaciones romanas frente a Mitrídates con quien la guerra había estallado nuevamente el año 74. No estuvo a la altura de su tarea emprendida en la costa gala y con los cretenses aliados de los piratas. Había llevado más cadenas que armas para los futuros prisioneros de sus barcos. Los cretenses hundieron la mayoría de los barcos romanos y ataron a los prisioneros. Incompetencia, codicia.
A sugerencia de Hierón II, Arquímedes demostró que incluso las cargas más pesadas se pueden mover con un barco completamente cargado y tripulado que se encuentra fuera del agua usando cabrestantes y poleas.
Las máquinas con las que los romanos se vieron obligados a abstenerse de asaltar la ciudad de Siracusa fueron balancines que bajaron repentinamente a los barcos que se aproximaban a la muralla y que dispararon piedras o masas de plomo y vigas con forma de palancas con mangos de hierba a un extremo. Estos agarres levantaron la nave enemiga y luego la soltaron repentinamente causando que volcara. Investos posteriores sacaron las tripulaciones de los barcos con ganchos de hierro y barcos enteros fueron incendiados con espejos cóncavos.
A la división de la arquitectura de Vitruvio (aedificatio, gnomonice y machinatio) hay que añadir la construcción naval. 
El concepto de opportunitas resume las numerosas y variadas instalaciones destinadas al uso publico y común de la vida cotidiana; pertenecen los puertos con astilleros para las fuerzas mercantes y navales, los mercados con las tiendas y basílicas, las oficinas de las salas del consejo y las prisiones, los almacenes de grano, las máquinas de guerra, teatros, anfiteatros, odeones, estadios, hipódromos y los paseos asociados, los gimnasios y palacios, las villas privadas, los jardines artísticos, los baños y los pozos publicos, cisternas y acueductos.
Los elementos para equipar un barco, las vergas y las velas con el aparejo asociado; armamentis sublatis con las velas desplegadas; demere, enrollar (bajar) las velas y bajar el mástil para preparar el barco para la batalla.
Q. Atrius, comandante de la flota de la expedición británica de César, año 54.
Un medicus ocularis (oftalmólogo) para la flota romana.
Avernus, divinidad local del Avernus lacus de Campania mencionada con motivo de un prodigio. Cuando Agripa unió el lago del Averno con el lago Lucrino con un canal, la imagen de la divinidad sudó. Agripa estableció una conexión más corta con la ciudad portuaria de Cumas.

Bacchios, jefe de la construcción de canales y puertos de la ciudad de Cyzicus bajo el protectorado de Antonia Trifena la época de Calígula. Pertenecía más a los epistratos que a los arquitectos.
Unidos los Batavi pacíficamente a Roma, Druso pudo cruzar el Rin desde su isla y construir el canal del Rin y el Zuyderzee, la fosa Drusiana. Los batavi fueron usados como marineros.
Biremis. Una embarcación equipada con dos remos propulsada con dos centuriones.
De las tabellae como cartas para fines oficiales se tomaron el tabellarius y las naves tabellariae, naves correo. 
Buca, ciudad portuaria de los Frentans de Samnio.
Bucilianus participó con la conspiración a César y le infligió una herida en la Curia (con lo que fue senador). El mes de julio del 44 preparó con la compañía de Bruto, Casio, Sesto y otros la luculenta navigia para huir.

Cecilio Metelo. Comandante supremo de la isla de Sicilia. Durante el incendio del templo de Vesta (241) rescató el paladio de las llamas perdiendo la vista. Recibió el extraordinario derecho de honor de poder entrar en el senado en su carro.
Calpurnius Bibulus. Su carrera política transcurrió al lado de C. Iulius Caesar viéndose relegado a un segundo plano. Cuando estuvo próxima la ruptura de César y Pompeyo se inclinó a este ultimo. El año 51 fue a Siria como gobernador. Cicerón como procónsul de Cilicia era su vecino. El mes de marzo del 49 Bíbulo volvió a Italia, fue a Pompeyo y se le dio el mando supremo de la flota; como sede seleccionó Corcira. Como consecuencia de su descuido César logró cruzar a Epiro pero compensó este gran error quemando treinta barcos que querían traer refuerzos de Italia y aislar completamente al enemigo de su hogar con la distribución adecuada de su flota y una tensa vigilancia de la guardia. Como consecuencia de las grandes penurias enfermó y murió antes de la lucha en Dyrrhachion. 
Hierón II de Siracusa refirió las cuerdas de su magnífico barco que significa Spartum con el Campus spartarius de la Nueva Cartago española. 
Se comenzó a equipar las flotas bajo Apio Claudio (311).
Capreolus, griego prótonos, un tirante (cuerda) con el que se unía el mástil del barco a la parte delantera.
Ennius usa carbasus como vela de barco.
Caudicariae naves, barcazas del Tíber debajo de Roma que traían las mercancías desde los barcos anclados frente al estuario. Sus dueños formaron el corpus splendedissimum codicariorum.
Classis en la guerra terrestre y marítima designa la línea opuesta de las tropas o de los barcos que toman parte en la batalla fuera de turno. Solo cuando se eliminó el carácter bélico y se utilizó con fines políticos la palabra classis reservado su significado bélico para la guerra naval adquirió un significado relativo a las votaciones de las masas, la asamblea.
Aunque Classis perdió tempranamente el significado de embarque del ejército de tierra, ya que los romanos hacían guerras navales incluso sin la adición navalis generalmente se refería al contingente de barcos de la flota. Pero los barcos de guerra romanos no existieron hasta el siglo V. Las fechas de los primeros días de la flota romana son notables. 426 primera batalla naval; 394 delegación de un buque de guerra romano a Delfos; 338 victoria naval sobre los Antiates cuyos barcos fueron llevados a los muelles romanos o quemados; 331 institución del Duovirii navales classis o mandae et reficiendae; 319 expedición de la flota a Campania; 267 designación de cuatro cuestores de la flota. Los romanos compensaron su falta de maniobra inventando el Corvus que les permitió utilizar sus excelentes tropas terrestres a bordo para el combate cuerpo a cuerpo. Las grandes batallas navales bajo C. Duilius, C. Atilius Regulus, L. Manlius Vulso, Fulvius Faetinus Nobilios y Aemilius Paulus, Lutatius Catulo y Q. Valerius Falto. Solo la generosidad de los ciudadanos romanos hizo posible construir una excelente flota de 200 penteres el año 241 y la guerra terminó de golpe. Octavio había establecido grandes construcciones navales en Roma y Rávena pero más de la mitad de sus barcos se perdieron en las batallas de Cumae y Ahegium y en una tormenta en el mar. Sin desanimarse Octavio se preparó de nuevo especialmente en Portus Iulius recién creado al conectar los lagos Lucrine y Arverner con el mar, construyó barcos bajo la dirección de Agrippa. 300 barcos de Octavio lucharon con igual numero con Pompeyo el cual fue derrotado decisivamente primero por Mylae y luego por Naulochus. Aquí termina la historia de la flota republicana.
Año 41. La escasez de cereales no se resolvió y Claudio decidió regular este menester constante de Roma con una gran construcción. Para permitir el suministro de grano incluso el invierno decidió construir un puerto a la desembocadura del Tíber próximo a Ostia y sin inmutarse con la magnitud de los gastos comenzó a trabajar ese año. Otra construcción no menos poderosa fue la derivación del lago Fucin que abordaba ese momento.
Codicarii navicularii son los nombres de los barqueros del Tíber. Los codicarii navicularii infra pontem sublicium o infernates son de mayor importancia porque trafican con la capital desde el mar. Toman la carga de los barcos que desembarcan a la desembocadura del Tíber en sus barcazas y las tiran con bueyes a lo largo del río. Tienen su cuartel permanente en Ostia. Su ocupación principal es el comercio de cereales, por tanto su superior es el Praefectus Annonae a cuya jurisdicción están sujetos. Forman un corpus, una cooperativa que ocupa el primer lugar de los quinque corpora lenunculariorum Ostiensium. La asociación tiene su patrono además de varios honorati, uno o más curadores tienen derecho a dirigirlo quienes son reemplazados los periodos quinquenales. 
El gran numero de gremios de barqueros y sus variantes ponen de relieve la gran importancia de las vías navegables y la navegación interior romana (los transbordadores del Tíber) y el importante tráfico del sur de la Galia, el Ródano, el Saona y el Durance. Tal tráfico presupone una serie de armadores y grandes comerciantes para la importación y la exportación a gran escala. Los collegia nautarum son las asociaciones de grandes armadores (navicularii).
Corbitae, mercantes grandes y pesados llamados porque de lo alto del mástil colgaban canastos como señal; tal vez tal canasta ayudó como mirador, pero difícilmente para nombrar el tipo de barco.
Cn. Cornelius Dolabella estuvo del lado de Sila, le aconsejó cuando la toma de Roma el año 82 y dirigió su flota un tiempo. Como recompensa recibió el Consulado el 81.
Corvus. Esta máquina de guerra destinada al abordaje fue utilizada por Duilius el año 260 en Mylae. Era una viga redonda de 24 pies de alto y 3/4 de ancho clavada a la parte delantera de la nave, la mitad inferior de la cual era una escalera inclinada tapiada de 36 pies de largo y 4 pies de ancho con clavos de hierro a los extremos con vertederos frontales y protectores de los lados encerrados con una incisión alargada. Cuando se aproximaba un barco enemigo se bajaba adelante o a un lado con una cuerda atada a la escalera que pasaba por una polea situada al final de la viga haciendo un puente con los dos barcos.

Gautier
Escudos suspendidos con filas a lo largo de los trirremes griegos y romanos.

La hilera de los escudos de la borda de una trirreme.

Burckhardt
Mientras Maximiano sometía las Galias, se produjo la separación de Britania, que constituye el preludio de la pérdida definitiva, que ocurrirá 140 años más tarde. Desde los tiempos de Probo, la isla estaba infestada de piratas, designados francos, salios, sajones. Hubo menester de equipar una flota en Boulogne (Gessoriacum); su mando lo encomendó Maximiano al gran Carausio, perito en cosas de mar y probado en la guerra de los bagaudas; era un menapsio (del Brabante). Se apoderó del botín y pudo proclamarse soberano de las Galias (286). Marchó con su flota a Britania, donde las tropas romanas se pasaron a él, mientras Maximiano carecía de los materiales para su persecución. Durante siete años, dominó en la isla, defendiendo la frontera del norte ante los viejos enemigos caledonios y preservó Boulogne y Calais. Fue muerto por Allecto, compañero del usurpador.
Asclepiodoto, almirante romano.
Al desembarcar Constantino en Kent, encontró todo el país sometido. Mudó de residencia entre Tréveris y York, donde falleció (306). De esta manera se resguardó la costumbre romana, que ya entonces hacía una diferencia muy grande entre Inglaterra y Escocia, situada más allá del valle de Adriano, e Irlanda.
Rica dinastía de bandidos en la ribera genovesa, en Albenga.
A comienzos del año 306, aparece en el drama Constantino. Abandona la corte de Nicomedia y aparece al lado de su padre, Constancio Cloro, cuando se disponía a marchar para Britania desde el puerto de Gessoriacum. Llegado Constantino donde su padre, le acompañó en su victoriosa campaña de Escocia con los pictos. Los soldados de su padre le proclamaron Augusto.

Collins
Rávena fue en un tiempo la más populosa de las ciudades fortificadas de Roma; en una época permanecían ancladas y seguras las flotas del Imperio, y los mercaderes romanos desembarcaban sus preciosos cargamentos a las puertas de los almacenes.
A medida que menguaba el poderío de Roma, el Adriático, por una extraña fatalidad, comenzó a retirarse de la ciudad fortificada, cuya defensa había garantizado hasta entonces. Hasta que, a inicios del siglo VI, ya se alzaba un pinar donde estuviera antes el puerto de Augusto.
El joven senador Vetranio ofreció un agasajo en su villa de Sicilia. Dispuso uno de sus barcos según la descripción de la galera de Cleopatra e hizo que sus esclavos nadaran detrás como si fueran tritones.

Mistral
Etimología de Marsella (Massalia). Suele derivarse de Mas Salyum, habitación de los salios.

Tylor
Cicerón hace que cotta señale a Balbus, que "nuestros generales, al embarcar por mar, tienen la costumbre de inmolar una víctima a las olas", y pasa a argüir, que si la Tierra es una diosa, Tellus, "también el Mar, del que tu dijiste que era Neptuno".

Wilde
Coronado con flores de loto, en la proa de la falúa de Adriano, mirando hacia la otra orilla, sobre las verdes aguas turbias del Nilo.

Joyce
La lana irlandesa se vendía a Roma por los tiempos de Juvenal.

Slocum
Piratas del Tirreno transformados como delfines.

Shaw
Cantar una barcarola a compás de los golpes de los remos.
La galera de Julio César era incapaz para una travesía rápida del Atlántico.

Gorki
Antonio perdió el combate de Accio con el soberano Octavio porque corrió con su buque tras Cleopatra cuando esta salió huyendo de la batalla llena de miedo.

Moravia
Cuando sopla la bora, viento fuerte del Adriático, el azul se hace verde.

Ludwig
Galeras de tres puentes.
César ha llegado a Alejandría con una pequeña flota de 32 navíos. No puede haber traído, por tanto, más que unos 4.000 hombres.
Había quemado Casio treinta barcos de la flota cesariana en Messina bajo las enseñas de Pompeyo. 
Décimo Bruto, uno de los grandes favoritos de César, a quien pese a su relativa juventud ha nombrado almirante, porque se portó maravillosamente en el mar durante el viaje a Bretaña y, más tarde, contra los Vénetos.
César proyectó traer el Arno y el Tíber hasta las puertas de la ciudad para luego conducir sus aguas al mar en Terracina. Los ingenieros empezarán a construir un nuevo puerto en Ostia, con diques, después de limpiar y aplanar los peligrosos fondos.
El mar engulle los barcos como el destino devora los corazones.
En Brindisi, un nuevo tratado precisó el reparto de la herencia de César mejor que tres años antes. Lépido quedaba en el África romana. Antonio recibió el Oriente hasta la frontera albanesa, y cedía del todo Italia a Octavio, el oeste del Imperio.
Mientras se hacía el tratado, fue fácil hacer firmar a Sexto Pompeyo, cediéndole Sicilia y Cerdeña. Por lo demás, Sexto estaba poco dispuesto a cumplir el tratado como los otros triunviros. Durante el festín que, para celebrar el suceso ofreció Sexto a sus nuevos amigos, en la bahía de Nápoles, a bordo de uno de sus navíos, Menas, el pirata, se acercó para preguntarle: <<¿Quieres que hagamos prisioneros a los otros triunviros y a sus gentes? ¿Quieres convertirte tú en el jefe del Imperio Romano? ¡No tengo más que levar anclas y cortar las pasaderas!>> Silencio. Pompeyo reflexiona. <<Menas -dice al fin-. ¿Por qué no lo has hecho sin decirme nada? Ahora es demasiado tarde. He empeñado mi palabra.>>
Sexto Pompeyo, humillado al ver que Octavio había repudiado a su sobrina, y siempre dispuesto a combatir a los herederos de César, rompió su palabra y venció a Octavio en una batalla naval en Messina. El joven heredero de César, perdiendo completamente la cabeza, abandonó el mando de sus galeras en pleno combate y ganó la costa para pedir socorro a Antonio.
En Tarento se renovó el triunvirato por cinco años. Antonio dejó a su cuñado ciento treinta barcos para que combatiera a Pompeyo, recibiendo en cambio dos legiones que estaban destinadas a la guerra de Persia.
El mar no se podía atravesar en invierno con tropas.
Las noticias en verano pasaban rápidamente el mar.
Éfeso era el gran puerto de guerra. El conquistador que fuera dueño del este y conseguía fortificarse allí podría obligar a su enemigo a salir de sus bases occidentales. Antonio, que había reunido allí el grueso de su ejército, era el verdadero dueño de Oriente. Jefe de cien mil legionarios de infantería y de mil jinetes, con una flota de quinientos navíos, entre los cuales había numerosas galeras de ocho y diez bancos de remeros, disponía de un ejército superior a los que tuvieron Alejandro y César. Empujado por las noticias de Roma, había vuelto a aquel puerto para organizar una nueva expedición contra Armenia. Y allí esperaba a Cleopatra, que debía venir con el oro y los abastecimientos.
Cleopatra llevaba con ella una flota de doscientas naves cargadas de trigo, de metales, víveres y material de guerra y un tesoro de 20.000 talentos de oro, además de la mitad de su séquito ordinario: eunucos, esclavos, etc. En fin, todo el lujo de su época.
La flota de Antonio tenía que contornear el sudoeste del Peloponeso, para poner luego proa hacia el norte, hacia las islas, que unen los mares de Grecia y de Italia.
Octavio, que por mar tenía menos camino que recorrer, dio vista a la flota enemiga cerca de la isla de Leucada, ligeramente al sur de Corfú.
En aquella costa extraordinariamente abrupta que es hoy el norte de Grecia, la violencia del mar ha abierto en un punto, en los contrafuertes de la montaña, un espacio de veinte kilómetros de anchura por unos cincuenta de profundidad, cuya entrada tiene apenas un kilómetro. Este golfo de Ambracia (su nombre moderno es Arta) tiene un valor inapreciable como refugio contra los vientos o las tempestades, pero en tiempo de guerra resulta peligroso para una flota perseguida, ya que es más fácil de aislar que los Dardanelos, cuyo acceso es diez veces más ancho.
Es en Accio, exactamente en la mitad del Imperio, donde van a encontrarse los dos ejércitos enemigos, para librar una decisiva histórica batalla.
Octavio ocupa con sus legiones las colinas del norte del golfo. En la bahía se encuentran reunidas las fuerzas navales de Antonio, combinadas con su ejército. El estrecho pasaje del golfo está guardado cuidadosamente por una flota de innumerables galeras, inatacables, pero reducidas a un papel puramente defensivo.
Al subir a bordo del barco que llevaba su pabellón personal, Antonio vio que era seguido por ese pez que los antiguos llamaban <<el retardador de los navíos>>; obedeciendo a una vieja superstición marinera, decidió cambiar de embarcación.
Agripa, que era en realidad el que dirigía a Octavio y la futura batalla, había hecho avanzar sus tres escuadras hasta situarlas a 1.500 metros de la marina del otro triunviro. Todos esperaban que soplara el viento, porque los grandes navíos de Antonio, repartidos también en tres grupos, permanecían inmóviles a la entrada del golfo. Las sesenta galeras egipcias permanecían bajo el mando de Cleopatra, que había asumido el papel de almirante de la propia flota.
Los soldados de Antonio constituían diez legiones, habían embarcado sobre 150 galeras -a mil quinientos hombres por nave, lo que suponía una excesiva carga- y habían tenido que subir, además, las pesadas velas.
Antonio decidió la fuga en el barco de Cleopatra. La flota estaba destruida; pero el ejército de tierra parecía sólido.
Los espolones de las naves de Antonio fueron clavados en los muros del templo de César.
Un collar de zafiros valía lo que un barco.

Waugh
El comercio de mármol y otras piedras raras, trazando la ruta por las ciudades mediterráneas de los galeotes de pórfido desde las canteras más calurosas del mundo, las de la costa del Mar Rojo. 

Morante
Los marineros, ante las columnas de Hércules, se sentían de pronto sumergir en una turbia corriente, que los arrastraba lejos de sus paisajes queridos, para hundirlos en un abismo tenebroso.
El estrecho de Gibraltar, en los tiempos pasados, estaba a una distancia fantástica, porque entonces se navegaba con barcas de remo medianas. Y el paso del estrecho tenía las dos orillas emparedadas por dos rocas macizas, que semejaban dos gigantescas pilastras indicadoras de una frontera. Todos los navíos que habían traspuesto ese límite se habían perdido con su tripulación, sin que hubiese regresado un solo hombre, sin tener nunca noticias. Y contaban que, en cuanto se llegaba al otro lado del estrecho, a lo ancho del mar, un rayo que caía de una nube fulminaba el navío. También decían que las naves se precipitaban en un remolino tempestuoso. Allí terminaba el mundo terrestre y comenzaba un misterio eterno.

Toynbee
El caso más sorprendente es el de los etruscos. Los etruscos que se dirigieron al O., no se contentaron con quedar a la vista del mar. Se introdujeron hasta el pie de los Alpes. Los relatos egipcios indican que los etruscos originarios tomaron parte con los aqueos en la migración posminoica y tuvieron su base de operaciones en algún lugar de la costa asiática del Levante.
Estas migraciones ultramarinas tienen en común un hecho: en la migración transmarina el aparato social de los emigrantes ha de cargarse a bordo del barco antes que este pueda dejar las costas del antiguo país, y después descargarse al término del viaje. Todo género de bienes -personas y cosas, técnicas, instituciones, ideas- están sometidas a esta ley.
Possunt quia posse videntur (pueden porque creen que pueden), era el secreto del éxito de la tripulación definitivamente victoriosa en la regata virgiliana.

Jaeger
Piratas etruscos.

Febvre
Para Roma el Mediterráneo no era un marco, era un centro, una mesa común, el elemento de unión por excelencia. Roma como organismo político, como experiencia particular y cerrada mediterránea sin aportaciones nórdicas tenía que disgregarse y derrumbarse para que pudieran empezar a darse las condiciones indispensables para la lenta, difícil y azarosa elaboración de Europa.


Braudel
El mar Adriático es un canal angosto, sólo tiene 72 kilómetros de largo. Con viento favorable ya durante el siglo III a. n. e. las lemboi, con todo el velamen inflado, lo recorrían en una jornada de navegación.

Como son superficies, el Mediterráneo de Augusto y Antonio tiene cien cantidades las dimensiones que manifiestan nuestros ojos.
Restos de barcos naufragados grecorromanos. Anticytheros, de Grecia, transportaba un cargamento de esculturas de mármol (primera mitad del primer siglo a.n.e.), museo de Atenas. Restos de Marzamenni, Sicilia. Restos romanos de Planier, Marsella, un navío comercial romano de 20 a 30 metros de largo, de 5 a 7 de ancho, con uno, dos o tres mástiles y la aptitud de transportar de 150 a 200 toneladas, cargamentos de 3.000 a 10.000 ánforas de vino o aceite.
El timón o gobernalle del barco romano. Sigue haciéndose de dos remos laterales situados a una y otra parte de la popa. La iconografía informa respecto de las velas, las vergas y las maniobras. Sólo la vela cangreja se emplea durante la época remota. El aparejo del barco con la vela triangular llamada latina. Organización sucesiva de la construcción. Se distinguen tres operaciones. La quilla, las cuadernas y las planchas de la tablazón. La cuaderna es las costillas del esqueleto cuya piel constituye la tablazón. Durante los tiempos de Roma se montaba primero la tablazón y luego se insertaban las cuadernas en su interior. De esta manera son los barcos mercantes de griegos y romanos, los que frecuentaban el puerto hexagonal de Ostia.

La gran batalla de Accio (2 de septiembre del año 31 a.n.e.), de inmensas consecuencias, sella el destino del otro Mediterráneo. Ve la huida de los navíos de Cleopatra, la derrota de Antonio y de Egipto y el triunfo de Octavio. Realmente entonces comienza el poder romano.

Wren
Capataces que azotaban a los moribundos galeotes de las trirremes romanas, diferentes de los centuriones romanos.

Graves
Tirás, hijo de Jafet, representa un pueblo que aparece mencionado por un documento egipcio del siglo XIII,como Tursha, miembros de una confederación marítima, tal vez los piratas tirsenos, algunos de los cuales se mantienen por las islas griegas de Lemnos e Imbros el siglo VI, mientras otros emigraron a Italia y se transformaron como los etruscos.

Yourcenar
Antinoe, enriquecida con el comercio de la India, transportes fluviales, sapientes gracias de una metrópolis griega.
Puerto de Noviomago, en la desembocadura del Rin.
La Sexta Legión Victoriosa fue transferida a territorio británico. Reemplazaba a la Novena Legión, deshecha por los caledonios.

Warner
El pueblo podía recordar cómo una vez durante la breve y brillante campaña con los piratas, Pompeyo había creado la prosperidad y librado todo el Mediterráneo del temor. Según la noción de Cicerón se le concedió el abastecimiento de Roma durante un periodo de cinco años y se le concedieron poderes para regir todo el transporte y las zonas donde se producía trigo. Pompeyo contento de verse otra vez lejos de Roma y de las complicadas políticas para las que estaba mal dotado viajó por África, Sicilia y Cerdeña mientras comunicaba a sus subordinados su entusiasmo y no toleraba el menor obstáculo o deficiencia por parte de los productores y mercaderes.

Coarelli
Situación geográfica de Roma. El Tíber constituye la principal vía de penetración natural de Italia central. Transporte de productos agrícolas y minerales y madera. Foro Boarium, el puerto fluvial más primitivo. El Puente Sublicius fue el primer puente de madera, se atribuye al ultimo soberano latino de Roma, Anco Marcio.
640-616. Fundación del puerto de Ostia.

Goudot-Perrot
En la antigua Grecia, los kubernetès, los pilotos, tenían la misión de gobernar las embarcaciones teniendo, por consiguiente, una gran responsabilidad, especialmente en las guerras. De su pericia en el arte de navegar por las aguas de Grecia dependía la victoria.
El piloto que llevaba el control del barco debía de estar informado de la condición de la mar y de la dirección de los vientos, además del itinerario previsto. El piloto era el cerebro que recibía estas informaciones en las que debía apoyar sus decisiones.


Chevalier
La Fortuna, divinidad del destino, símbolo del capricho y la arbitrariedad, que gobiernan la existencia; implacable por una especie de indiferencia por las consecuencias de su capricho o del azar, es representada con un gobernalle; es el piloto de la vida, como diosa ciega. 
Jano influye al comienzo de cada empresa; las vestales presiden su término. Algunas monedas llevan su efigie y en el reverso un barco.
En Egipto y en Roma, se celebraba una fiesta de la nave de Isis. Tenía lugar en marzo. Un navío nuevo, cubierto de inscripciones sagradas, purificado por el fuego de una antorcha, con las velas blancas desplegadas, lleno de perfumes y de cestos, era lanzado al mar y abandonado a los vientos. Debía asegurar una navegación favorable el resto del año.
Thule simboliza el límite provisional del mundo. Pero Séneca prevé ya que nuevas tierras serán exploradas por los navegantes.

Monteilhet
Los efebos tienen una prueba de regatas en las Panateneas
Bora. Viento impetuoso del nordeste, en el Adriático.
El trigo de Egipto, que garantizaba un tercio del consumo romano, sufría retrasos, que generaban temibles revueltas. Y durante la mala estación, los marinos de comercio se negaban a salir a alta mar.

Roberts
Los romanos llamaron con razón al Mediterráneo Mare Magnum, el Gran Mar. Su superficie era una gran fuerza unificadora para quienes sabían cómo emplearla y, en el 500 a.n.e., la tecnología marítima estaba bastante avanzada para permitir la navegación, salvo en invierno. Los vientos y corrientes dominantes determinaron las rutas exactas de unos barcos cuya fuerza era la que proporcionaban las velas o los remos, pero el Mediterráneo era accesible.

McCullough
Piratas saquean Ostia y capturan la flota de grano.
Lex Gabinia de piratis persequendis.
Pompeyo. Poderío maius en el mar.
63 a.n.e. Grave depresión económica. Los problemas económicos de Roma emanaban del Este (problema del rey Mitrídates, piratería). Estas cosas habían logrado concentrar el capital y las inversiones dentro de Roma y de Italia durante veinte años.
Atico, banquero, magnate de una flota de barcos de transporte, príncipe mercante, era el que publicaba los libros de Cicerón. La casa que puso en el Argileto como negocio rival del de los Sosios prosperó.
El mar Medio se ha dado en llamar el Mare Nostrum.
Los espesos bosques de las montañas que circundaban Arpinum seguían proveyendo de excelente madera para naves y casas.
Los muelles del puerto de Roma, bajo el Puente de Madera.
En Puteoli vivía la familia de los Granio, el clan de mercaderes marítimos más acaudalado, procedente en sus orígenes de cerca de Arpinum.
El estaño procedía de Hispania, aunque no fuese el país de origen, se extraía en las fabulosas y remotas islas Casitérides, o del estaño, en los confines del mundo civilizado, llegando a Hispania a través de los pequeños puertos del Cantábrico, desde donde seguía por las rutas comerciales de la península hasta las costas mediterráneas.
Al cabo de tres guerras, que se prolongaron a lo largo de cien años, Cartago sucumbía y Roma obtenía sus primeras posesiones de ultramar, incluidas las minas de Hispania.
En la gran galería cubierta del Porticus Margaritaria, construida en torno a un cuadrángulo central, estaban las mejores joyerías de Roma. Debía su nombre a los vendedores de perlas, que se habían establecido en la época en que se habían derogado las severas leyes prohibiendo la ostentación. El primer Marco Fabricio había sido también el primer comerciante de perlas, cuando las perlas que se vendían procedían de los moluscos de agua dulce, de las ostras de roca y de arena y del cultivo marítimo, y eran pequeñas y oscuras. Pero Marco Fabricio era un gran especialista y seguía olfateando cualquier leyenda, viajando de Egipto a Arabia nabatea en busca de perlas oceánicas. Habían sido decepcionantes por su escaso tamaño y forma irregular, aunque poseían el auténtico color blanco y crema y procedían del Sinus Arabicus, en los confines de Etiopía. Luego, conforme fue aumentando su fama, descubrió mercados en los mares de India y en la isla en forma de pera de Taprobana, al sur de India. Por entonces se dio el nombre de Margarita y fundó el monopolio del comercio de perlas oceánicas.
Inversiones, acciones e intereses en barcos mercantes.
Un tambor batido por el hortator para estimular la velocidad de los remeros.
Puerto de Hadrumentum, a unas cien millas al sur de Utica.
En cuanto hubo disponible una pequeña flota de naves mercantes capaces de una travesía tranquila, Mario embarcó al rey Yugurta y a sus hijos en una de ellas y le envió a Roma cautivo. Con ellos zarpó Quinto Sertorio, dispuesto a combatir contra los germanos en la Galia Transalpina, después de solicitar licencia a su primo Mario.
Sólido barco de Granius.
Marco Aurelio Cota cruzó el Sinus Gallicus desde Massilia a Ostia con vientos que oscilaron entre ideales y nulos; los vientos siempre soplaban en sentido adverso en el Sinus Gallicus. Cuando caía el viento, los remeros profesionales se sentaban a los portarremos, el hortator comenzaba a marcar el ritmo con el tambor y treinta musculosas espaldas se aplicaban a la faena con tesón. Era un barco pequeño, construido para la navegación rápida más que para la mercante, y a Cota se le antojaba sospechosamente una nave de guerra massiliota, aunque no estaban permitidas sin previo consentimiento de Roma. Sus dos bancos de remos, quince por caba borda, estaban acoplados a los portarremos protegidos por unas cubiertas a las que se habría podido adaptar una fila de fuertes escudos, para convertirlas en plataformas de combate.
Una grúa aparejada en la cubierta de popa, de una extraña construcción, podía tener alojada una fuerte catapulta. La piratería era una provechosa industria que abundaba de un extremo a otro del Mediterráneo.
El Septentrio y el Corus, o viento noroeste, entorpecen la travesía.
El cabo Misenum constituía el impresionante saliente de tierra al norte de la bahía de Crater, un enorme y resguardado fondeadero dotado de buenos puertos como Puteoli, Neapolis, Herculanum, Stabiae y Surrentum. La bahía había sido un volcán gigantesco, que había explotado dejando entrar al mar. En la parte externa del cabo Misenum estaba Cumas y en el lado de la bahía, Baiae.
El convoy de pertrechos.
En Liguria, en los puntos en que Mario veía barcos y pueblecitos en una rada y consideraba que los barcos eran más de piratería que de pesca, quemaba barcos y casas, dejaba a las mujeres, a los viejos y a los niños y llevaba a los hombres a trabajar para mejorar la carretera. 
Quinto Sertorio había conducido un par de centurias a limpiar un nido de piratas en una ensenada.
Populonia y Pisae, los dos puertos adonde llegaban los lingotes de hierro dulce de la isla de Ilva.
Un trabajador del puerto de Roma bajo de cuna.
La cantidad de trigo asiático que llega a Roma es la mitad, aproximadamente. La costa de Panfilia y Cilicia está infestada de guaridas de piratas. Se dedican al comercio de esclavos, pero si no tienen grano para alimentarlos, se dedican a robarlo y hacen grandes ganancias. Luego, el trigo que les sobra lo venden a los romanos al doble del precio con la garantía de que llegue sin que vuelvan a piratearlo.
La exorbitante suma que los de Massilia habían cobrado a Marco Aurelio Cota por el flete del barco, para llevar a Roma las noticias del desastre de Arausio.
Marco Antonio Orator había logrado grandes éxitos en su campaña de tres años contra los piratas de Cilicia y Panfilia, terminándola con buen estilo desde su cuartel general en la cosmopolita y culta ciudad de Atenas. El tráfico en el Mediterráneo era  más libre y previsible que cincuenta años antes.
Amphora. Vasija de cerámica de forma alargada con cuello estrecho, dos asas y terminada en punta, lo que impedía que quedase en el suelo en posición vertical. Se utilizaba para el transporte marítimo de vino o de trigo; gracias a la punta, se estiraba cómodamente en el serrín que llenaba la bodega de la nave, y hacía el viaje en posición vertical, amortiguada, y se la podía arrastrar durante las operaciones de carga y descarga. La capacidad de un ánfora era de unos veinticinco litros.
Los puertos de Campania, de Puteoli, Neapolis, Herculaneum, Surrentum y Stabiae eran los mejores de la costa occidental italiana.
Caribdis. Remolino mitológico, que se suponía situado en el estrecho entre Italia y Sicilia. Caribdis iba asociado a Escila, un monstruo de siete cabezas aullantes, que moraba cerca de Caribdis; ningún marinero podía escapar de uno sin caer en las garras del otro. Dicho de la antigüedad: <<entre Escila y Caribdis>>. Un terrible dilema.
Respecto a los reinos extranjeros o clientes, que tenían a Roma como patrón, existía la obligación legal de pagar rescate por los ciudadanos romanos secuestrados, un hecho del que se valían los piratas como adicional fuente de ingresos.
Corona navalis, corona de oro adornada con grabados de espolones de nave, concedida por el valor demostrado durante un combate naval.
La estopa es una serie de fibras mezcladas burdamente, que en la antigüedad se confeccionaban con plantas lanosas, arce, o las fibras más toscas del lino. Se usaba para calafatear, pero su principal empleo era confeccionar mechas para lámparas.
Los Lares permarini protegían los viajes por mar.
Ostia era el puerto más próximo a Roma, situado en la desembocadura del Tíber y que en los primeros tiempos de Roma era donde estaban las marismas salinas de Italia. Era una ciudad fortificada en tiempos de la republica y fue la base naval romana durante las guerras púnicas. Obstaculizado por la sedimentación de bancos de arena, el de Ostia nunca fue un buen puerto pero, pese a todo, siempre fue muy activo. El curso rápido y arenoso del Tíber impedía la navegación de barcos mercantes hasta Roma, por lo que los cargamentos de naves grandes se transportaban desde Ostia a Roma en gabarras o barcas ligeras. En Ostia había silos y el puerto contaba con su propio cuestor, responsable de la vigilancia del grano que se descargaba y se expedía y del cobro de impuestos sobre comercio exterior e interior.
Patrae, la actual Patrás, en el Peloponeso, estaba en la extremidad sur del golfo de Corinto y era el destino natural (en conexión con los vientos y corrientes) de los viajeros,que desde Tarento o Sicilia se dirigían a Grecia.
El Porticus Aemilia, enfrente de los muelles de Roma, era un auténtico emporium y en él se hallaban las oficinas de los que se dedicaban a la exportación e importación.
El puerto de Roma los romanos le llamaban simplemente Portus. Se encontraba aguas abajo del puente de Madera, en la orilla del Tíber en que estaba la ciudad; allí construyeron muelles y almacenes para atender al tráfico de gabarras, barcas y pequeñas embarcaciones mercantes que llegaban de Ostia. Lo que se descargaba de los barcos en Ostia, aquí se descargaba finalmente con destino a Roma. El puerto de Roma estaba fuera de las murallas servianas y era una estrecha franja de terreno equidistante de la orilla bajo los acantilados del Aventino, en donde estaban situados los silos.
En tiempos de Cayo Mario, Puteoli, la actual Pozzuoli, era el puerto más importante y activo de Italia y constituía un emporio superior al de Delos. Era una ciudad organizada y, pese a su categoría portuaria, seguía siendo un sitio en el que pasaban las vacaciones muchos romanos pudientes. La familia más importante de la localidad eran los Granios, los cuales tenían vínculos con Cayo Mario y la ciudad latina de Arpinum.
El rostrum era el espolón de bronce que reforzaba la proa de las naves de guerra y que, a modo de ariete, embestía a las naves enemigas por debajo de la línea de flotación para hundirlas. Cuando el cónsul Cayo Menio, en el 388, se enfrentó a la flota de los volscos en el puerto de Antium, obtuvo tal brillante victoria, que quebró definitivamente el poder de ese pueblo, y en conmemoración del triunfo mandó arrancar los espolones de las naves capturadas y ponerlos en el muro que había en la tribuna de oradores que había en el Foro, en la zona de comicios y asambleas. Desde entonces, la tribuna fue conocida por el nombre de rostra.
Tarento, colonia griega fundada por los espartanos hacia 700, término primitivo de la Via Apia, fue el puerto idóneo para los que embarcaban con destino a Patrás y el sur de Grecia.
El Tíber era navegable hasta Narmia, pero de hecho, su rápido caudal dificultaba la navegación contra corriente. Se desbordaba con frecuencia, con desastrosas consecuencias.
Vienne, puerto de comercio en el río Ródano.

Útil para las comunicaciones romanas, la pinaza, que se movía a remo, iba y venía entre el puerto Icio y Britania. Los remeros de la pinaza, ocho a cada lado, remaban en perfecta sincronía, a pesar de que ningún hortator les marcaba el ritmo. Cada hora descansaban y bebían un trago de agua. El capitán iba sentado en la popa; llevaba el remo del timón y un cubo para achicar el agua.
Comenzó la evacuación de los setecientos barcos, en dos partes. La mitad de la flota se halla en buenas condiciones, mandaría la caballería, los animales de carga, excepto las mulas de las centurias, y dos de las legiones, al puerto de Icio; luego, esos barcos pueden regresar vacíos y recoger a César y a las tres ultimas legiones. Mantuvo a su lado a Trebonio y a Atrio; los demás legados, Hircio y Quinto Cicerón, recibieron las órdenes de partir con la primera flota. Aquellas eran las naves que César había hecho construir especialmente en el río Loira y que habían enviado al océano abierto, para combatir con los doscientos veinte barcos de vela de sólido roble de los vénetos, los cuales consideraban ridículos los barcos romanos con aquellos remos y débiles cascos de pino, proas y popas muy bajas. Las velas de cuero de los bajeles vénetos eran pesadas y robustas, los obenques principales eran cadenas en vez de cuerdas. Sabiendo eso, Décimo Bruto y sus ingenieros habían equipado sus trecientos barcos con un largo mástil, al cual se habían sujetado un gancho con púa y un juego de garfios.
La carga habitual para un barco era una pieza de artillería o el invento de algún ingeniero, cuatro mulas, un carro, cuarenta soldados y veinte remeros. Pero con ochocientos soldados y no combatientes, las cargas tuvieron que ser más pesadas. El barco de César zarpó, los demás se colocaban en forma de lágrima detrás de él. La travesía duró seis horas.
Los jefes de tribu que capturó fueron embarcados con destino a Roma, para que esperasen al desfile triunfal de César, con comodidades y honor. Cuando llegase el día del desfile triunfal, les romperían el cuello en el Iullianum.
En enero del 49, con los dos enviados del Senado como testigos, César aceptó la rendición del gran puerto de mar de Ancona.
Nórica quedaba al norte de Iliria y no era una provincia romana, aunque sus tribus, romanizadas, trabajaban conjuntamente con la Galia Cisalpina. Producía la mejor mena de hierro para la fabricación de acero y la exportaba transportándola por los cauces de los ríos que desembocaban en el Adriático, procedentes de la Galia Cisalpina.
A Dolabela le dio el mar Adriático. Reunirá una flota y lo defenderá frente cualquier ejército naval, que Pompeyo pueda tener. A Quinto Hortensio le dio el mar Toscano.
Lucio Domicio Enobarbo llegó con una flota y dos legiones de voluntarios etrurios. En el momento que se puso al pairo al lado del puerto, los masilienses se apresuraron a quitar la gran cadena que cerraba el paso y le permitieron la entrada con sus barcos. César se resignó a sitiar Masilia.
Narbona ha desarrollado una excelente industria de astilleros y quiere vender sólidos trirremes con cubierta. Experto en batallas navales, Décimo Bruto irá y se enterará de qué tienen disponible.
El bloqueo del puerto de Masilia, que impuso Décimo Bruto, perjudicó a la ciudad gravemente; Enobarbo tuvo que sacar la flota masiliense a alta mar, para entablar combate. Como resultado, Enobarbo fue vencido.
Cayo, el hermano mediano de Marco Antonio, se había establecido con cinco cohortes de soldados en la isla de Curicta, al norte del Adriático, y fue sorprendido por Marco Octavio y Lucio Libon, los almirantes de Pompeyo, los cuales le atacaron. Cayo Antonio pidió ayuda a Dolabela, el almirante de César en el Adriático. Al mando de cuarenta barcos lentos y poco armados, Dolabela respondió con prontitud. Se desarrolló una batalla naval y Dolabela se vio obligado a salir de aquellas aguas; su flota estaba perdida y también Cayo Antonio, el cual fue capturado con sus tropas.
César se había aficionado a un barco, durante sus expediciones a Britania; la pinaza.
La ciudad de Ataleya, en Panfilia, informó a Pompeyuo de que su lealtad era imperecedera y le proporcionó doce trirremes, muy pulcros con tripulación.

Rutherfurd
Las cuatro legiones romanas desembarcaron en Kent, en el verano del 43, acaudilladas por Aulus Plautius. Después de avanzar rápidamente a través del sureste, derrotaron al hermano de Caractacus, el insolente cabecilla, y al cabo de unos días aniquilaron al pequeño ejército del propio Caractacus. En cuanto Claudio averiguó que todo estaba tranquilo, se presentó con sus elefantes y asistió a la sumisión del enérgico Catuvellanni, unos kilómetros al norte del Támesis. Otras dieciséis tribus de la isla, inclusive al muy debilitada de los Atrebates, enviaron recado de su rendición. Claudio había obtenido un triunfo y sólo permaneció en la isla dieciséis días.  Nombró a Aulus Plautius primer gobernador de la nueva provincia insular de Britania
Porteus atraviesa el estrecho con la XIV Legión y parte de la XX.
El barco mercante del Mediterráneo tenía armazón y cuadernas de madera y las tablas perfectamente ensambladas y pegadas con brea; en el centro se alzaba el grueso mástil y una gran vela cuadrada de cuero enrollada en una verga; en la popa se hallaba instalado un gran timón para gobernar el barco y estabilizarlo. Cargamento que transportaba: grandes barricas de vino, rollos de lienzo incrustado con cuentas y piedras preciosas, ámbar, que los isleños sabían trabajar, perlas de gran tamaño y joyas magníficas. Buscaban pieles y perros de caza (mastines).

Davis
Estuario del Sabrina. Barquillas de cuero.
Dejar Britania debió ser la razón por la que el viejo Bóreas sopló hacia el sur, hasta destrozarse las mejillas.
Miembro de la flota del Canal de la Mancha.
Mercaderes transportaban cereales britanos a los cuarteles del Rin.
Puerto de Gesoriaco. Señales al puerto de Dubris.
Londinio. Muelle de Rutupie.
Rutupie mostraba huellas de un puerto romano.
Puente impresionante, embarcaderos bien hechos, almacenes y talleres, tabernas y baños. Palacio del gobernador.
Autoridades aduaneras de Ostia, se ocupaban de cobrar el impuesto al lujo y poseían un gusto artístico exquisito.
(la plata de Britania)

Unidad de la legión, fue formó Nerón con los hombres sacados de la flota de Miseno. La Primera y la Segunda Adiutrix fueron reunidas, empleando infantes de marina.
Inútiles administradores de muelle y marineros holgazanes.
Los soldados del ejército siempre han conceptuado a los de marina unos patos aprovechados.
Habilidades náuticas de los bátavos en el pilotaje, el remo y la natación.
Civilis colaboró en alianza con una tribu llamada de los canenefatos. Realizaron un ataque conjunto a la tropa del Rin, en el que capturaron las armas y las naves y cortaron las vías de suministro romanas.
Cuando Civilis capturó la barca insignia de Petilio Cerealis, la gabarra del jefe de escuadra, la envió como trofeo a Veleda.
Barcazas de fondo plano cargadas con productos, bajaban por el río o remontaban la corriente, a fuerza de remos y arrastradas con cuerdas. Confluencia del Rin con el Mosela, en Castro ad Confluentes.
El viejo canal de Druso era una maravilla.
Las liburnas son embarcaciones de guerra ligeras, con dos hileras de remos, copiadas de las que empleaban los piratas mediterráneos y muy utilizadas por la flota romana.
Un bote cantina.
La liburna estaba diseñada para llevar su doble banco de remeros al completo, sus marineros de cubierta, un contramaestre y su ayudante y una dotación de infantes de marina y el general, el cual había ocupado su turno a los remos en un rincón estrecho.
(La mano de hierro de Marte)

Miller
Tras el primer choque naval con los cartagineses, los romanos habían construido un centenar de quinquerremes y hallado un sistema para tomar los barcos enemigos al abordaje. Instalaron un mástil provisto de poleas para bajar un puente levadizo. Cargaron las naves de soldados.

Swift
Los romanos emplearon el Ouse para construir su gran canal de riego, el canal de Car, que iba desde el Cam hasta el Witham, de Cambridge a Lincoln.

Norfolk
Las aguas que se agolpan en las costas, alrededor de Trieste, Venecia y Fiume, han empleado cuatro décadas en llegar hasta allí y pasarán otras cuatro más, antes de que vuelvan a ver el estrecho de Gibraltar.

Guhl-Koner
La batalla de Accio. La flota romana se reorganizó según las reglas griegas de los barcos de piratas liburnos (navis Liburna). Además, se precisaron embarcaciones de carga más grandes, naves onerariae.

Haefs
Los productos áticos de herrería, el aceite del Ática, harían escala en la isla de Melos, antes de fondear en Creta; harían el trueque por recipientes sacrificiales encargados a los alfareros de la isla; ánforas, jarrones, cráteras con inscripciones pirografiadas. Los helenos asentados en Egipto pagaban mucho por esas ofrendas.
Aquiles, Áyax y Fenice fueron nombrados patronos de los barcos, mientras Palamedes debía mandar el ejército con ayuda de Diomedes y Ulises. En la primavera del quinto año, el ejército se reunió en Áulide. Se habían construidos mil doscientos veintidós barcos; venían de los países y ciudades de Acaya y las islas de Rodas, Cos, Creta.

Benevolo
Después de la división de Roma en dos partes, a la muerte de Teodorico, la capital de Occidente es trasladada a Ravena, que está protegida por los pantanos, pero que comunica por mar, a través del puerto de la época de Augusto, construido en la zona de Classe.


Franceschini
Bajel, obra capital de un ingeniero naval de Miseno. Iba equipado con un novedoso conjunto de aparejo, que le imprimía un impulso al menor soplo de viento.
Carpinteros navales.
Sobre la mesa de Cicerón, gruesos fajos aguardaban su firma. Nombramientos de gobernadores, legados de legiones y prefectos de flotas o de tropas auxiliares, peticiones de clemencia para condenados a muerte, solicitudes formuladas desde provincias y ciudades. 

Wren
Capataces que azotaban a los moribundos galeotes de las trirremes romanas, diferentes de los centuriones romanos.

Townson
Los romanos planearon y llevaron a cabo el drenaje de las tierras pantanosas de East Anglia, construyendo canales que unían el río Cam, que fluye cerca de Cambridge, con Lincoln, punto que conestaba con los ríos Trent, Humber y Ouse. 
César invade Inglaterra por primera vez el 55 a. n. e. y vuelve a hacerlo el año 54, reflexionando que una victoria aumentaría su prestigio y evitaría que los britones ayudaran a sus enemigos a la hora de invadir la Galia. La primera invasión de César no duró mucho. Los romanos abandonaron la isla poco después de desembarcar en el Deal, ante la fuerte resistencia que encontraron. El año siguiente, César regresó con un gran ejército de cinco legiones (27.000 hombres). La resistencia la dirigía Caswellawn (latín Cassivellaunus), rey de la tribu de los casivelannos, el cual aparece singularizado con la "Guerra de las Galias". Caswellawn, uno de los primeros dirigentes que acuñaron monedas de oro, tenía su asiento al norte del estuario del Támesis. Aunque sus conductores de carruajes hicieron estragos entre los legionarios de César cuando cruzaron el río, no pudieron hacer frente a las fuertes armaduras romanas durante el combate cuerpo a cuerpo. Caswellawn se rindió, dio a César los rehenes y accedió a pagar el tributo anual exigido por Roma. 
El año 43 desembarcaron cuatro legiones (el 15 por cien de las fuerzas romanas) y un numero similar de tropas auxiliares. Un total de 40.000 hombres. A diferencia de los romanos los ingleses no llevaban armadura y depositaban su valor sobre la eficacia de sus largas y afiladas espadas. Alcanzados por las jabalinas romanas con la lucha cuerpo a cuerpo esas espadas largas derivaban menos eficaces que los puñales del enemigo. Hubo tribus inglesas, como los icenos de East Anglia, que se unieron a los romanos. No consiguieron impedir que Claudio hiciera su entrada triunfal a la capital inglesa de Camilodonum, acompañado de elefantes.

Manfredi
Galieno y Silva pertrecharon tres cohortes de la II Augusta en Edesa y volvieron a Antioquía. Embarcaron para dirigirse a Ravena y luego a Milán, donde Galieno estableció su residencia.



Tipos de aparejo de los comerciantes del Mediterráneo. Faluchos, tartanas, jabeques, pingues, polacras, velacheros, heurs y barcaslongas.

Escalmo, horquilla a la que se sujeta el remo de las naves. 




Ana Kontroversy






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